Вы находитесь на странице: 1из 1

Miel de luna Un cielo azul adornaba el paisaje, nubes blancas como algdon, brisa marina sabor a sal y roca,

espuma gomosa. Un horizonte tan amplio como el cielo, un atardecer hermoso como la vida misma, un recuerdo digno de una fotografia, que deberia guardarse en la memoria. La persona que esta a mi lado, es el hombre que amo, con el que compartir mi vida a paritr de hoy; con l y con mis hijos. Mi vestido blanco, el velo de gasa, fotos, risas, felicitaciones por la unin, el beso, los votos, los anillos, las miradas; nuestras miradas, nuestro beso, nuestro compromiso. Ahora, al mirarlo a la cara, me acuerdo del chico herido que acudi a la enfermeria por un terrible golpe, en donde yo estaba de turno en el instituto. Yo habia curado sus heridas hasta estabilizarlo, habia observado mientras lo curaban, y me mantuve a su lado hasta que despertara; desde que lo conoc senti una conexin. Cunto tiempo transcurri, cuanta agua pas por debajo del puente; es irnico que despes de ese incidente ocasional, nuestras vidas se tornaran a un cambio radical, placentero, dudoso, misterioso, irritante, brusco pero, radical. Esposo, querido, marido son palabras que empezarn a introducirse en mi vocabulario, compartiremos la misma cama, casa y vida. Su mirada penetraba la mia, senta el peso de la misma sobre mi, haciendome sentir comda, acogedora; sensaciones increibles. Unos brazos familiares rodearon mi cintura, acoplandome a su estructura, haciendome sentir su calor y perfume, juntos miramos ocultarse el atardecer tras el horizonte ahora, baado de estrellas mas visibles.

Вам также может понравиться