Bienaventuranzas de un hombre al que se le puede llamar...

Dichoso el hombre que puede mostrar sus emociones con sus seres queridos. Dichoso el hombre que se deja educar por la niez re-aprendiendo lo que de adultos olvidamos. Dichoso el hombre que puede compartir una bebida con las amistades sin embriagarse. Dichoso el hombre que presta atencin a la niez y escucha atento, dejndose maravillar por el mundo que da a da pasa por alto. Dichoso el hombre que cocina con el nimo y empeo de agradar a quienes ama. Dichoso el hombre que tiene la fuerza suficiente para darle cumplimiento a su palabra. Dichoso el hombre con el valor de enfrentarse a muchos cuando se trata de defender sus creencias, as sean estos amigos. Dichoso el hombre que sabe reconocer sus limitaciones con honestidad para consigo mismo. Dichoso el hombre que puede disculparse an con las personas ms pequeas del hogar sin miedo a perder autoridad. Dichoso el hombre que no utiliza el miedo y la represin para ensear. Dichoso el hombre que se deja ayudar de buen nimo y se siente mal por ello. Dichoso el hombre que asume las tareas del hogar con la conviccin y claridad que le corresponde por derecho. Dichoso el hombre fiel y leal con quienes ama y consigo mismo. Dichoso el hombre que valora la niez y la pureza en ella protegindola a toda costa. Dichoso el hombre que asume sus compromisos y responsabilidades con agrado. Dichoso el hombre que se permite jugar, inventar y soar... Si conoces un hombre as de dichoso, conoces a un verdadero padre Alguien que tiene los das del ao para ser feliz, dichoso y que tiene toda una vida de alegra al lado de sus seres queridos un hombre que vivir para siempre en los corazones de las personas que am cuando todos los das eran de l. Gustavo Enrique Tovar Ramos1

Lo poco aprendido y escrito gracias la formacin recibida de parte de Gabriela del Carmen Tovar Chacn