Concilio de Cartago

Can.1: La muerte corporal de Adn fue consecuencia de su pecado y no una necesidad natural. Can.2: Ensea que el bautismo borra en los nios el pecado original en sentido propio. El pecado Original es contrado por generacin.

Concilio de Cartago
El concilio de Cartago fue aprobado en la carta tractora del Papa Zsimo. En uno de sus fragmentos menciona lo siguiente:

todos y cada uno de los hombres, antes de ser liberados por el bautismo, estn sujetos al pecado (D 231)

Indiculus
Canon1.- Por la prevaricacin de Adn todos los hombres han perdido su Natural Posibilidad e inocencia, y nadie podido por medio de su libre albedro levantarse del abismo de aquella ruina, si la gracia de Dios misericordioso no lo hubiera levantado.

Indiculus
El Papa Inocencio declara (Vctima un da de su libre albedrio, al usar inconsideradamente de sus propios bienes, el hombre cay en las profundidades de su prevaricacin y no encontr medio alguno para salir de all. () si no lo hubiera levantado por su gracia la venida de Cristo, quien mediante la purificacin de un nuevo nacimiento, lav con el bao del bautismo todo delito pasado.

El Concilio de Orange Fue un concilio provincial. Bonifacio II..

Se reuni para terminar con las controversias pelagianas.
El tema principal era el de la gracia se abordo el tema del pecado original y sus consecuencias en el hombre.

El Concilio de Orange Can.1. Si alguien dice que por el pecado de Adn no se

ha cambiado en peor el hombre total, es decir, en cuanto al cuerpo y alma, y estima que solo el cuerpo est sujeto a la corrupcin, al paso que la libertad del alma permanece ilesa, ese tal, engaado por el error de Pelagio, contradice la escritura que dice: El alma que peque perecer (Ez 18,20); y no sabis que, si os ofrecis a la obediencia de uno como esclavo, sois esclavo de aquel a quien obedecis? (Rm. 6,16); y queda hecho esclavo de aquel por quien ha sido vencido (2 P 2, 19) (D371).

El Concilio de Orange Can.2. Si alguien afirma que el pecado de Adn le da a l

solo y no a su descendencia; o declara que por un solo hombre pas a todos el gnero humano la muerte corporal, que es pena del pecado; pero no el pecado mismo, que es la muerte del alma, atribuyen una injusticia a Dios, puesto que contradice al Apstol que afirma: por un solo hombre entr el pecado en el mundo y a travs del pecado, la muerte; y as, la muerte pas a todos los hombres, pues en l todos pecaron (Rm 5,12) (D 372)