SERES VIVOS AMENAZADOS EN LA COMUNIDAD

AUTÓNOMA DE CANTABRIA

Cuando un tipo de ser vivo es tan escaso que corre el riesgo de desaparecer,
se declara “especie protegida”.
En Cantabria existen varias especies en peligro de extinción, como el
escarabajo Rosalía alpina, el urogallo, el oso pardo, el sapillo pintojo, la
lamprea marina, la lagartija serrana o el helecho macho. Si no se ponen en
práctica medidas protectoras, su desaparición puede ser inminente.

El UROGALLO
El urogallo es una especie de ave galliforme. Se distribuye por buena parte
de la Europa boreal y en pequeños enclaves de montaña de zonas templadas
como la cornisa cantábrica y los Pirineos.

Se le considera una reliquia de la era glaciar, pues tras este periodo, la

población se fue aislando en Europa a las regiones de alta montaña y/o más
frías.

Vive en zonas montañosas con

bosques claros y abiertos donde
hay bastante vegetación herbácea,
agua y bayas.

En verano se alimenta de hierba,

crisálidas de hormiga, bellotas,
lagartijas e incluso serpientes. En
invierno, de diferentes especies de
brotes de haya y hojas de acebo.

Según un dirigente conservacionista, es posible la recuperación del urogallo

en la Cordillera Cantábrica, si se implementan las medidas de protección.
"En caso contrario, al urogallo cantábrico no le quedarían más de diez años
de vida".
 SAPILLO PINTOJO
Se distribuye por la mitad occidental de la Península Ibérica. Está presente
en Portugal, Galicia, Asturias, la cornisa cantábrica y parte de las dos
Castillas, Es más abundante en altitudes bajas (hasta 1000 metros), aunque
excepcionalmente puede alcanzar cotas cercanas a los 2000 metros.

Es una especie que está amenazada en España. Para las poblaciones de las
Islas Atlánticas gallegas, se ha propuesto asignar las categorías de "En
Peligro Crítico de Extinción" para las poblaciones de Cíes; "En Peligro de
Extinción " para las de Ons, y "Vulnerable" para la de Sálvora.

Sapillo de aspecto similar a

una rana y de pequeño a
mediano tamaño.

La coloración es muy variable,

pero generalmente
predominan tonos pardos más
o menos oscuros, amarillentos
o verdosos. Su piel es lisa y
brillante con algunas verrugas
en el dorso.

Vive en pequeñas charcas o en las orillas de los ríos. Sale al exterior de

noche y en días húmedos y poco calurosos.

Se alimenta de mosquitos, lombrices, babosas, caracoles y arañas.

 ESCARABAJO ROSALÍA ALPINA

Los invertebrados son mucho menos conocidos, por lo que no es fácil

reconocer las especies que están en peligro. Pero sí conocemos algunos que
en la península Ibérica son cada vez más escasos. Uno de ellos es el
escarabajo rosalía.

Es un escarabajo que se caracteriza por su coraza como de terciopelo

azul celeste con manchas negras.

Son poco conocidos. En la Península Ibérica son cada vez más escasos.

Viven en hayedos y bosques de montaña.

Conservación: Uno de los principales factores de amenaza es la limpieza

del bosque de los troncos caídos y hojas secas para evitar incendios,
porque las larvas de este escarabajo se desarrollan en la madera del
haya en descomposición. Por eso la mejor medida de protección es cuidar
y preservar los hayedos húmedos en los que vive.
 OSO PARDO
A lo largo de los últimos siglos, el oso pardo ha sufrido en Europa una
notable reducción en su número de ejemplares.

Vive en zonas de montaña. En España habitan en las montañas cantábricas y

en los Pirineos. Pero, con el paso de los años van quedando menos. Ello se
debe, entre otras cosas, a la acción del hombre como la caza furtiva, la
colocación de cepos en los parajes por los que transita y la utilización de
venenos que afectan al oso pardo. En la actualidad, se estima que sólo hay en
torno a 130 ejemplares.

El Oso Pardo cantábrico, al igual que los de otras poblaciones, es un animal

omnívoro aunque, principalmente vegetariano. Los alimentos básicos son,
fundamentalmente, las herbáceas en primavera, los frutos carnosos en
verano, y los frutos secos en otoño e invierno.

Viven de 20 a 25 años en libertad y hasta 40 años en cautividad.

Llegan a pesar hasta 200 e incluso 300 Kg. Los oseznos, al nacer, pesan unos
400 gr.
 LAGARTIGA SERRANA

En España es una especie amenazada, por lo que requiere protección

estricta. Existen amenazas derivadas de la destrucción de sus hábitats en
alta montaña así como determinadas acciones humanas como la construcción
de instalaciones de esquí, turismo excesivo y plantaciones forestales.

Vive en altas montañas, desplazándose fácilmente por las rocas. Evita

algunos matorrales y los pastizales. En la Cordillera Cantábrica ocupa
también rocas dentro de brezales y bosques caducifolios. En Galicia hay
poblaciones a nivel del mar.

Se alimenta fundamentalmente de insectos que caza al acecho.

Es depredado por algunas serpientes y, ocasionalmente, por mamíferos y
aves.
 LAMPREA MARINA

Se trata de un pez, que vive en el mar, pero sube a los ríos y

arroyos para poner sus huevos. Luego, las crías vuelven al mar.
Permanece en el océano durante no más de tres años, y retorna al
río a reproducirse por una sola vez. Sufre una metamorfosis que se
inicia en torno al mes de julio y dura tres o cuatro meses,
iniciándose entonces el regreso al mar.

La lamprea marina es escasa debido a la contaminación, la pesca y la

construcción de presas.

La sobrepesca en Galicia, la construcción de embalses que impiden el

remonte a los lugares de freza y la contaminación de los estuarios, hacen
que sea una especie prácticamente extinguida en la mayor parte de los ríos.
Está catalogada como “en peligro de extinción” en la mayor parte de las
Comunidades Autónomas.

ALUMNOS YALUMNAS DE 3º