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  • Imbernon (1987) La Investigacion en La Formacion Inicial

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    Define el concepto de investigación e investigación educativa. Propone una metodología para la formación inicial del profesorado.

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    Imbernon (1987) La Investigacion en La Formacion Inicial

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    Investigacinen la Escuela n° 1, 1987 th La formacién inicial del profesorado en la investigac 16n Francisco Imbernon Escuela Universitaria de Formacién del Profesorado de E.G.B. de la Universidad de Barcelona El coneepto de Investigacién La coneepeién de que la eseuela bésiea debe convertirse en un centro de investigacién y el ‘maestro en un investigador en su labor docen- teenel aula se introduce de una forma restrin- gida en algunas Escuelas Universitarias de Formacién del Profesorado de EGB aproxim: damente a partir de Ia segunda mitad de la ‘déeada de los setenta, sobre todo a ratz de la difusién de algunos textos que sobre este tema se habfan editado, y se extiende répidamente entre los enseflantes en ¢jercicio (1). Esta introduceién se materializa no s6lo en el eam- po de la Didéetica, siné también en el de la Paicologia y en la Teoria de Ia Edueacién, y suele ser, en sus incios, una reftexién sobre un nuevo eoncepto de escuela y de maestro. Esta reflexién era a todas luees insuficiente ya que si los futuros maestros podian adguirir un nuevo coneepto de eseuela que investiga, no recibian sin embargo los procedimientos para llevar a cabo una transformacién metodolégi- ca, y su formacién en metodologfa de la inve tigacion era parcial. Por otra parte, este colectivo atin minorita- rio de profesores de las Escuelas Normales describfa experiencias muy espeeificas en Sis- temas Educatives diferentes al nuestro; tam- poco estos profesores encontraban material ‘complementario que les orientase sobre e6mo lievar a cabo una metodologia de la investiga- cién en el aula, ‘A esta preocupaeiGn de algunos profesores de as Escuelas Normales por formar un maes- Invetgacn eta Escuela tro que investigue conjuntamente con los ni- fos, que introdujeron, sobre todo, autores ita- lianos, se le unir4’ posteriormente la del ‘maestro como investigador en ol aula como consecuencia de las nuevas tendencias educa- tivas y que le convierte no nicamente en adecuador sino también en modificador del ‘curriculum. Bste dimo concepto se introduei- réen las Escuelas Normales, sobre todo desde el campo de la Didéetiea, mediante artieulos cen revistas especializadas y, posteriormente, a partir de 1980, con la publicacién de diversos libros (2). Todo ello conlleva que sea usual hablar de investigaeién en la Formacién Iniial del Pro- fesorado y que surjan algunas polémicas sobre el concepto, el uso, mal uso 0 desuso de la Investigacién Educativa. Y as{ encontramos algunos profesores de Escuelas Normales que rechazan la afirmacién de que el maestro debe convertirse en un investigador, argumentando que ésta no es su funcién especifica, sino que es lade educar bien a los nifos; ser un ebuen» ‘maestro 5 la eategorizacién profesional del docente de primaria, Esta argumentacién sue- Je ir acompafiada de la concepeién de que el maestro debe recibir una. s6lida formacién uuniversitaria que le capacite en los conoci- mientos y que, posteriormente, ha de conocer ¥ aplicar las ‘éenieas pedagégicas, sin que tenga que investigar. Segtin este criterio, el ‘més téenieamente posible -estableciendo, por supuesto, todas las estrategias profesionales- el curriculum oficial. En conseeuencia, la fun- n Francisco Imbernon cifn docente se sitta en un prisma eststico y profesionalista, Baséndonos en la actualidad de eiertos pa- radigmas en el campo de le formacién del profesorado hoy por hoy muy analizados (8), los profesores que defienden que la funci6n del ‘maestro no es investigar sino ensefiar cbien» exclusivamente rechazan la Investigacién y priorizan la adquisicién, a veces ineonsciente, de modelos donde prima ls eficiencia docente yeel andlisis de las situaciones de aprendizaje ‘desde el punto de vista de la competencia do- cente. La incoherencia se estableve cuando los que argumentan su oposiein a un maestro inves- tigador defienden, sin embargo, en otras si- ‘uaciones educativas una determinada forma de conceptuar la escuela, normalmente desde modelos més eontextaales y adecuados a las corrientes psicopedagégicas actuales, que se contradice con aquellos arguments. Esta negativa a que los nifios investiguen y a que el maestro sea un investigador enel aula se basa también en la eircunstancia de que la palabra «investigaciéne sobresalta a algunos profesores de Escuelas Normales, que reser- vvan tanto la palabra eomo el concepto para la investigacién académica, sistemética, experi- mental, cuantitativa, cientifiea u otros cali cativos usuales de lo que se ha dado en llamar la investigacion en sentido tradicional (4). Li- ritan el concepto de investigar, en una acep- cin restringida, a la adquisicién de conoci- mientos y a la generalizacién de éstos, y no tienen en cuenta una acepeién més abierta como es la deseripeién, andlisis y descubri- miento de situaciones para preparar actuacio- nes posteriores. En un sentido amplio la Inves- tigacion implica una actividad cognoscitiva -dando respuesta a problemas de naturaleza cognostitiva- de andlisis y reflexién, que se desarrolla en la préctica mediante téenicas que introducen interrogantes en la indage- cin, que se realiza sobre un problema préctico ryreal, y que precede a una determinada inter- ‘vencién en la realidad (6). En un eoncepto restringido, la Investiga- cidn no es competencia docente ya que aquél -la mera transmisiOn educative y la adquisi- cidn de eonocimientos deseubiertos- no aporta nada nuevo a la ciencia, sin embargo en el concepto mas amplio investigar sera recoger, ordenar y relacionar elementos y analizarlos, en la escuela. Bste debate sobre la Investiga- n cidn en latarea docente ha impedido, adem, la introdueeién de la Investigacion en el curr ceulum docente en algunas Escuelas Universi- tarias de Formacién del Profescrado. iPedagogia experimental o investigacién educativa? La adecuacion que permitié la O.ML del 18 de junio de 1977 (BOE 28/6/1977) sobre las adireetrices para la elaboracién de los planes de estudio de las Escuelas Universitarias de Formacién del Profesorado de EGB» origin6 la posibilidad de que las Escuelas Normales mo- dificaran su curriculum vigente -el del Plan Experimental de 1971- y, aunque la modifica- cidn no podia se exhaustiva, algunas Escuelas Normales introdujeron en el curriculum do- cente una nueva materia: la epedagogfa Expe- imental, a imagen y semejanza de la ya existente en las Secciones de Pedagogia de las, Pacultades de Filosofia y Ciencias e la Educa- cién, Los profesores que asumfan esta asignata- ra, que habia pasado de ser estudiada en algunos temas de la Didéctiea General a ser ‘una materia auténoma, habfan sido formados en las Secciones de Pedagogia, con lo eual se impartfa esta nueva materia eon una mentali- ad universtaria tradicional, intentando que fen un curso académico los alumnos aprendie- ran a einvestigars, Por supuesto que los mode- los transmitidos eran cuantitativos y que la ‘mayor parte del curso los alumnos se aburrian con un bombardeo de concepts estadfsticos apenas itil -tal y eomo se daba- en su futura. profesién dovente. 'Y aunque algunos profesores siguen repro- ‘dueiendo la téniea antes citada, le mayoria de ellos 8 ha ido replanteando el curriculum dela Investigacion Edueativa en las Escuelas Nor- males, diferenciindolo de las Secciones de Pedagogia tras analizar el fracaso de los alumnos-futuros maestros como generadores de investigaciones tradicionales, cuyas causas fundamentales eran la falta de interés por el ‘tema, el poco tiempo disponible para profundi- zar y comprender lo transmitido, y el earéctor de no aplicacién préctiea en su tarea docente, Y, como consecuencia, el aburrimiento que Wegaba a la queja y al hastio respecto a la materia y a todo lo que podia suponer la rvetgacn en a Escuela La formacisn inicial del profesorado en la investigacign Investigacién edueativa y, por otra parte, la impotencia del profesorado para realizar una correcta Pedagogfa Experimental. ‘Actuaimente, el conocimiento de los andlisis de los Paradigmas de Investigacion Educati- va, el de la Tnvestigacién cualitativa y, sobre todo, de la Investigacién-Aecién por parte de algunos profesores de las Bseuelas Normales, hha propiciado que ya se empiece a hablar més, en la Formacién del Profesorado, de elnvesti- gacién Educativas y «Modelos de Investiga- cidno que de Pedagogia Experimental, asi co- ‘mo que en las Escuelas del Profesorado se dliluya el eardeter predominante tnieo estadis- tico y cuantificador. Pasemos ahora a ver e6mo la Investigacién Edueativa, en todas sus facetas, podria intro- ducirse en las Escuelas de Formacién del Pro- fesorado. Para ello, analizaremos este fen6- meno desde el punto de vista dol earécter metodol6gico y del cardcter estructural en los nuevos curricula de formacién de maestros. Metodologia de la investigacién en la formacion del profesorado Podriamos establecer tres niveles de intro- duecién de la Investigacion en el eurrfeuium docente de las Escuelas Universitarias de For macién de! Profesorado: el actitudinal, el di- etieo y el investigador. El futuro docente debe desarrollar una actitud investigadora Blo implica que los componentes del curt= crulum docente deben superar el planteamien- toestrictamente profesionalizador oculturista vigente en la mayorfa de Eseuclas Normales ‘para que mediante las materias y préctieas los ‘alamnos reciban diversos recursos de aprend- ® que les orienten no tanto en el saber cnciclopédico y novionista como en Tos plan- (camientos y estructuras epistemolégieos in- {ormos de las materia, ce sus métodos y tée ‘eas de investigacién, de su adecuacion a la GH y de sus cliversos paradigmas. Ello impli- que en las diversas diseiplinas -hoy por hoy cexcesivas en nimero y parcas en caliad de tien asumit el prop6sito de cambio metodol6g eo haciéndolas mas participativas, que el cea fa Fle alumno-futuro maestro se torne, cada vez mis, en autor de su formacién y que la trans- mmisiOn curricular realizada por los profesores permita desarrollar un espiritu cientifico que conllevard una actitud investigadora y un hé- bito demoerdtico en el alumno, que los tiene que asumir més que por transmision por 6s- ‘mosis, al realizarse en la Escuela Normal (6). El desarrollo de esta actitud y este habito serd fundamental para que el posterior ense- fiante, en su Formacién Permanente, esté ca- pavitado para renovar e introducir novedades ccurticulares pueda continuar su constante formacién ya que, parafraseando a MeLuhan, los métodos educativos de hoy dentro de unos veinte afios seguramente serén un recuerdo para los ensefiantes, El futuro docente debe aprender a investigar con los nifios Si consideramos la Investigacién en su acepcién més amplia, podrfamos afirmar que como método didéctico es un método natural de conocimiento. Si investigar es establecer relaciones y no s6lo aportar conoeimientos nuevos -ya que difieiimente en la escuela los nitfos aportardin nada nuevo a la ciencia-. po- ddrfamos afirmar asimismo que en las aulas los niflos pueden investigar con el maestro. Para ello serd impreseindible que los alumnos futu- ‘os maestros aprendan a desarrollar metodo- logias didéetieas de investigacién con objeto de que sean eapaces, conjuntamente con la actitud y el habito investigador, mediante la préctica y la experiencia, de onganizar un ambiente que posibilite la investigacién. Si el aprendizaje es la bisqueda de soluciones a un problema dado, ls funcién del maestro debe set la de estimalar y onganizar ta interroga- cidn de los problemas y faciltar las herra- tmientas para que los alumnos vayan deseu- briendo esas posibles soluciones, EI] alumno, en la Escuela Normal, tendré que recibir en las areas psicopedagégicas los elementos adecuados para establecer esta me- todologia didactica, ya sea a través del conoci- miento de los procesos coggitivos de los nifios, ya sea mediante la Didéctica General y las Didacticas Especiales. Tendra que experimen- tarcom las téenicas instrumentales que poste riormente él introduciré en su aula y, por ssupuesto, adquiri este conoeimiento median- te la experiencia personal durante et proceso de aprendizaje de su curriculum docente. Francisco Imbernon El futuro docente debe conocer la Investigacién Educativa En el curriculum de Ia carrera docente de- biera ineluirse una materia sobre Investiga- cién Educativa, euyos objetivos fundamenta- les serian a) Informacién sobre la. Investigacion Educativa en general, tanto educativa como de otras ciencias relacionadas con la EGB. Conoeimiento de los diversos paradigmas de Investigacin Educativa. ) Conoeimiento sobre Investigacion Edueativa para que el alumno sea eapaz de realizar posteriormente lecturas de investiga ign que puedan ayudarle a mejorar su labor docente, ©) Aprender a ser unt eolaborador en las Investigaciones edueativas llevadas por espe- cialistas en el eampo de las Ciencias dela Edu- cacién, 4) Conocer téenicas de investigacion que le posiiliten un mejoramiento del eurrieulum espeeifico y su autoperfeccionamiento. Cono- jento de téenicas de Investigacién-aceién para eapacitario posteriormente para introdu- cir reformas en el curriculum de la EGB y realizar téenicas de Investigacion en grupo que predisponga al alumno a participar, més tarde, en una Formacién Permanente con el coleetivo de profesores que trabajen conjunta- mente en la escuela, Organizacién de la investigacién en las escuelas del profesorado Los distintos niveles de aprendizaje de la Investigacion en las Escuelas del Profesorado antes mencionados no se pueden introducir -y, por otra parte, serfa totalmente inadecuado- a lo largo de un curso eseolar, sino que todos ellos deben estar integrados en la estructura interna del curriculum de formacién de los futuros maestros. Para ello vemos imprescindible establecer tres niveles de distribueién: el de las propias materias del curriculum, el de las préctieas docentes en las eseuelas de Edueacién General Basica y ol de los talleres de Investigacién. Materias Por supuesto que el nivel actitudinal que u“ antes mencionébamos debe estar integrado en todas las materias del curriculum, sobre todo cen las ineorreetamente denominadas «de con- tenido», en las que el futuro maestro aprende Jos conceptos cientifios que posteriormente le servirdn para transmitirlas a sus alumnos, adecuadas al nivel eognoseitivo de los mis” mos, Ei nivel metodoldgieo donde el futuro maes- tro debe aprender la metodologia didéctica de Ja investigacién deberé desarrollarse, sobre todo, en las Didécticas especiales y en la Di- detiea General. Para ello los profesores debe- rén plantearse las Didécticas como eminente- mente participativas, experimentales y de trabajo en grupo, para no introducir grandes distorsiones en la metodologia. Por lo que respecta a la materia de Investi- sgacidn Edueativa que se introduce en el curri- ceulum docente, el alumno tendré que, legar con una previa ¥ larga preparacion ~

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