Hay que ordenar la cabeza, el cerebro. Creo que ese es el primer paso para empezar.

Para
empezar a estar mejor. Mejor de lo que estamos ahora.
Levanten la mano quienes alguna vez no sufrieron depresiones, trastornos mentales, dudas
existenciales, y todas esas palabras que les encanta a los terapeutas. Muchas manos en alto. Bien
arriba esas manos! Es una sensacin que te estalla en el alma, que se mete en los huesos as como
as. Que hiela, que duele. Lastima. Confunde. Hay algunos que dicen que si no se soluciona de
alguna forma a tiempo, o no se le da un coto al problema, podemos terminar en la muerte. Y no
me extraa: le algunas veces de personas que se han muerto de tristeza, de dolor en el alma, de
angustia, de soledad, y qu se yo que cuntas cosas. Gustavo Adolfo Becker, por nombrar alguno.
Mi pregunta a todo esto es: llegar yo a ese punto? Como se revierte? Como se sale? Y luego
reformulo: se puede ser feliz? Existe la felicidad? Puedo YO ser feliz?
La respuesta ms simplista seria que si. Quiz si hacemos algo hacia ese fin, dicen. Pero cmo se
empieza? Que pregunta!
Todos tienen la mano levantada, as que todos son conscientes de lo que escribo. Y hoy ms que
nunca, hablando de m. Busco la felicidad, o la estabilidad, aunque sea, como buscando un pez
extrao en el agua, con las esperanzas ntidas de encontrarlo alguna vez, a veces convencindome
de que lo voy a encontrar, pero siempre con las manos vacas.
Hay frmulas mgicas? Creo que no. Y ojala que si. Ojala la respuesta estuviese resumida en un
poema de Alfonsina Storni, en un libro de Isabel Allende, o en la prosa tan maravillosa de Borges. Y
finalmente encuentro un rato de felicidad cuando estoy con Allende, Borges, y Storni. Volando con
ellos, y ellos conmigo, sin poder aterrizar. Es ah cuando recuerdo que algunos locos dicen que la
felicidad esta en momentos, en situaciones. Que no es una constante, ni responde a una frmula
matemtica perfecta. Que no es palpable, sino sensorial. Se da en miradas, sonrisas, con amigos,
abuelos, mamas, papas, hijos, nietos, juegos.
Sumemos momentos de felicidad.