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4 CAPITULO BELYE EXPOSICION MUBTORIOA ACERGA DE LA CONDIGIOR DELOS BXTRANTEROS i 1a condicaim de los oxtr Jos themy diferencia @ tre la 001 8 eros on IPOs a= 7 on loo nodernos 3 Bigern ds le lngulactn roca rpycte Ics eros —Q Semperament oaadeptadoe pobre 8 del ee) Otptins ddneeeirnrs area fa i pibunsgl, sae Regitenain fren sean Bi jes aad Rah 2 aa Be de los eee a= Gaeens age ibs extrude it bn ~ 8 nies son wauetggotoninn iscursdsten que los pue- ghtie a porla ‘civihzacion y el comercio, pie inlterés imamo de los Wstvdos aconseja que-no Pextiufya'a low extranjeros, apenas‘ s podemos explicar- 10s qué antiguamente fuesen murados con fecelo, tolerén- lolos apenas, rechazemdolos con trecuencia, recargando os de mpueéstos y considefandolos como si estuviesen uera, del derecho comin ‘Cuando Alejandro Magno ‘preclamé, en un edicto céle- ore, mre que earn los hombres hom ados, cualquiera que fue- roa pease Staal ts al teas a fr eae See ne ecerearges nore ‘as nee oe Speen eres dinia Sage ena Hage tome oo duameents, Bia Amsca cada anode lee Bepoe, do lp Urpin [are Tee asin y Catelpiianepign mee. ‘a au ne omen apllounsn en nee meres —(W de Ta fail) iE, a se su procedcncit y o1gen, debian sey muados como manos, y quc $dlo los crimmales e1an cxtianjelos, Inct en tn gloiioso an1ci onismo, pues Grecia estubo muy de weptai en su legislacion ese noble principio Dos atemenses, que se honr vbw con tener el temp laPiedad pais iecibn alos ertranjeros, fyaban para s sidencia un butio especiaien el que estvban como en celvdos, obhgandolesa pagu el turbuto anual de 12 d mas, y vendiendo, cual sl fuesen esclwos, a los que 8 gabw a prgatios [1] EnEsparta se prohibia + los ext Jeros que entiasen enla ciudad poi temo: de que con plesen sus sevelas Costumbres (2) 8 La misma Roms, que, en cuanto 4 la gobernacio Jos pueblos, se elevo al mas alto giado de crvihzacién gi undeza, no tueenmaner valguns benevola con losext yeros El Dev echo crvtl habia formado en Roma un cit estrecho, en el cual no podian entrar aquellos El dere quuitario, las sabias formulas de las acciones de la le pleno poder stribmdo a 1 mancepacidn, cuyas forma< Camentales no podian suplirse sino por la usucapron solemmdades de los testamentos y el conjunto del proc muento, revelan las mstituciones de un pueblo poco puesto a compartn sus piivilegios con los demas Solan te pua. los cmdadanos de Roma aparece el pretoi urt en su silla curul, pu ellgs solamente escribe todo: aiios en el] album su edicto, y 4 ellos estan reservados privilegios de que goza en cualquie: punto en que se cuentic el cudadano de Roma La inferioridad delos ext: anjez0s no se mamfestaba solo en los hono1es como por ejemplo, en la prohbr de vestu la toga, de usar un prenomen y otras distm nes semejantes, Iv legislaczén -romana, negando a los tranjeros ol pus gueatteum y el derecho de crudad, los ) Bhquet Drovt P andar ie eap TIT pum 2 8 Bait mis atplonacates ‘pease it Bstudvoe soc. ta heaton de monuiad t Tp yor (MN aelatad, ~15— pojabs, no solo de derecho del censo y de sufragio en los comics popul wes, io mismo que de los honores y de los derechos politicos, sino tambien del derecho de connubium y de patria potestad, del derecho de ser patzono, la pro p-edad qu mtusa, 13 wetcapron y 10 testamentifaccion ac tiva y prsiva te ~~ En las leyesde las Doce Tablas se designa varias veces a los ext wmjetos con el nombre de enemigos, lo cual qust hieaba, hasta @erto punto, el gran cudado con que los v1 gulaba el Gobierno y la facultad que se tqnaba de expul sarlos de la ciudad cuantas veceslo wonsejaban la 14z00, de Estado 4 la carestia, como sucedio a piopuesta de Ju mo Penno, de Papio, Celso y de otros El o1adoi 1omano vituperaba esta costumbre declarandol inhumana «Pio hubrr la residencia en la crudad a los e\tranjeros es ciet tamente humano (1)> Para obtener Justicia. no e1.2 permitido 1 los extranjeos presentarse ante ef magistiado que ly vdmmistraba a los crdadanos romanos Los que gozaban del jus connubts \ del jus comme: cs eran juzgados segun lis leyes romanas, os demas, 81 perteneciana una de las naciones Con quienes Roma, tenla tratados, podian obtener justicia de un magis jrado llamado y» efor per egi tnus, porque casi Slempre ven. tlaba las desavenencias de los extranjeros Estos eran juz gados segun el Dei echo de gentes, y como estaba admitido que cada pueblo podia api opiarse las personas y las cosas del enemigo que caia ensus manos, consider andose como enemigos todos aquellos con quienes no habia tratado, pac to 6 ahanza, del mismo modo se admitia tambien un dere cho de posthmimum en tempo de pz “In pace quoque postamuum datum est, nam st cum gente aliqua neque am? , citiam, neque hgsparum, neque faedus amecite causa factum habemus he hostes quidem non sunt, quod autem ea nosh oad eos per vend illo um fit ex liber homo noster ab ets cuptus ser G) Qreeron de Ofte Ub TT erp x1 DUS fit OF coum Idemque est sb ad tits ad nos altgurd fo ventat Hoc quoque agttur case portiimrnium datum eat (1) 9 Por mas que aprezcvdelo que Lovamos dicho oud giande fué Io severidad de lalegisivcionroman t respect a los extianjeros, por mas que en ls leyes de 11s Doc Tablas se hayaesciito “Adversus hostuem ceterna auctor tas esto,” pmcipio tan rigm osamentc mte:pi etado cn ot1¢ tempos y cuya verdadea sgnificacion es hoy conocid debemos obsei var, sm embaigo, que poco 1 poco fue ten plandose el i2gg9r de la ley por la generosidad del puebl y por la interpretacion dela musmaley Ast es que log 67 tranjeros no teman en Roma la testamentificacion activ m prsiva “Dedsttiorwm numero hares snstitur non potes quia peregrinus est, cum quo testament facto non est (2), mas poi la insiitucion de los fideicomisos se logio adm tios 1 ly sucesion contia lo dispuesto por la ley Obse: vamos también, segun lo que 1efie1e Ciceion, que los ev tranjelos podian aproxumarse mucho a ly condicion de Ic ciud&danos, poméndose bajo el pats onato y la chentelid un 1omano “Mostwa peregimo, bona aut tamquam vacay fa im fiscum cogebatur , aut m wate adqurerebantur sb per egr nus adaliquem veluts pah onum adpliuursset exque oltentolas dedisset, tunc entm, Ulo mortuo, pah onus jure adplioation um qstius peregrina bona suceedebat [3)' En apoyo de lo quedecimos, podemos citai las leyes st mamente ht sobre Jos nautiagios, hechas para re pumur la, codicia de los habitantes delas costas, y la mec deracion digna de elogio del fisco «St quando naufrags names enpulsa Fuerst ad ltus, vel ss guando aliquam terran attiger t, aid dominos perteneat Fiscus meus seae non inter Donat Quod envm zus habet fisvus im alend calamitate ut a 1€ tam luctuoed compendrum secteturt [4] > ~—— QD Dig De captiois ete 1.V 42 @) Uipwno Fragm XX 42 ®) Giocron Deorat hb 1 (9) Oods1 1 Denaufrugess Posterioimenie, cuindo Roma sintio 1a necesidad de atzaerse + los pueblos vencidos, les concedio igunos ae Jos piivalegios 1ese1¥ ados a los c1udadanos 1omanos, y la severidad contia los extranjelos fué migada segun las condiciones de las naciones sometidis v es mpoitante observa: aqui de que modo los diferentes deicchos, que ean al pimcipio piivilegio eaclusivo del ciudadano deRo ma, fuelon, con una giaduacion metodica y uns habileco nomfa, distiibuidos entre los dife1entes pueblos A los unos se les concedio el jus connudrt, creose pua ottos el jus talicum, ) pura los demas el derecho del Lacio, dividien do los ext injezos en «taleanos, pi ovenciales y latinos Dife rente era el modo, segun el cual se ypheaba el derechoa Jos pueblos de Itaha, del Lacio o de las provineias, y dt verso fambien el derecho de los mismos pueblos, ja lati nos, Italanos o plovinciales, segun su condicion de mun: crpios, de colon 6 de prefectuias La piimitiva .udeza fué dismmuyendo gradualmente, hasta el punto de que el derecho de ciudad fue concedido a algunos sin restnic con, y se llego ala Consttucion de Caracalla, que confirié el derecho de ciudadanos a todos los habitantes del impe mo «In orbe romano, gus sunt coves sunt Romans » (1) Verdad es que cuando se considera la causa que deter muino la, Constitucion de Cal acalla, la admiracién que pue de causu a plimera vista, por una disposicion tan liberal, dismimuye mucho Segun Dion Casio, Caracalla promulgé esta disposicion solemne para aumentar el producto del mmpuesto sobie las her encias, y por esto debe considerar se como una medida verdade:amente fiscal Desde que tue promulgada, esta Constitucién, sobie cuyo valor se ha discutido tanto, se vieron desapatecer los Latinos colonos y los peregiimos que se hallaban en situacién de ser c1u- dadanos 1omanos en la época de la susodicha promulga- cién, pero aun hubo Latsnos yuntanos, y se siguio conside- [1] Dig De stats honnemwse 1 17 ‘Towo 1-2 rando como peregrinos 4 10 que puluial und cupues we nutto, asi como a los que, a causa de la conqusta, fue) agregados al impeiio Esto prueba que Caracalla se ¢ dé del presente, no del porvenn, y que no determino condicion de los habitantes de las nuevas provincias « se agregaian despues 11 Imper10 Quwen suprumio to Jas distinciones fue Justumano, que declaro ciydadanc todos los habitantes bres delimperio, y despues de e cxudad no volvio a ser un elemento del status (1) 10 Resulta de todo lo dicho que, s1 bien fue muy 1 rosa la legislacion romana tespecto de los extranjeros fue dulcificando hacia los siglos IV y V de nuestra e1 en los primeios tiempos de la formacion de los Esta modernos, la distincion entre ciudadano y extianjero ma tan poca importancia en compaiacion de la que he tenido bajo la legislacion :omana, que no puede soster se de ningun modo que los derechos exorbitantes tueron estableciéndose contia los extranjeros en ter de 11 mvasion de los baibaros, hayan temo su onger el derecho romano Enla Edad Media, epoca de ruda barbane y deinju: violencias, la condicion de los ext anjeros fue sumam¢ tnste En algunos puntos, venian a ser esclavos del ¢ fio de la terra en que habian ido a establecerse, en oi se habia concedido el deiecho de vida y muerte sc los eatranjeros, y generalmente no se les permitia la trada en el termtorio sino con onerosaa condiciones, + les obligaba a pagar gravosos umpuestos que haciar ficil su permanencia (2) No nos detend:emos a enum todos los excesos cometidos en perjwicio de los extra 108, pero vamos a fijar nuestra atencion en uno de € en paiticulal, porque revel toda la barbanie de la Je (1) Demangert Droits oman p 165 (2) Demangert Condsciin de tos ectrangeroe exp 1 num 6—F y autiea t Demgrant 63 —18— rando como peregrinos a Jos que sufian una, capiies dima nutto, as1 como @ los que, 7 causa de la conquista, fueron. agregados al imperio Esto prueba que Caracalla se cu dé del presente, no del porvenir, y,ane no determmo la condicion de los habitantes de las nuevas pirovincias que se agregalin despues al Imperio Quien supmmid todas las distmciones fue Justimano, que declato ciudadanos a todos los habitantes hbres del umperio, y despues de el la ceudad no volvio a ser un elemento del status (1) 10 Resulta de todo lo dicho que, 1 bien fue muy 1gu rosa la legislacion romana 1especto de los extranjeros, se fué dulcificando hacia los siglos IV y V de nuestra ea, v en los primeios tiempos de la formacion de los Estados modernos, la distincion entre ciudadano y extranjero te ma, tan poca importancia, en compaiacion de la que habia temdo bajo la legislacion 1omana, que no puede sostener se de nmgun modo que los derechos exoubitantes que fueron estableciéndose contia los extranjeros en tiempo de 14 invasion de los bai baros, hayan tendo su o1gen en el derecho romano Enla Edad Media, época de ruda barbarie y de myustas violencias, la condicion de los exti anjeros fue sumamente tmste En algunos puntos, venan 1 ser esclavos del due fio de la tierra en que habian 1do a establecerse, en otros se habia concedido el deiecho de vida y muerte sobre los extranjeros, y generalmente no se les permitia la en trada en el territorio sino con onerosas condiciones, y se les obhgaba a pagar gravosos impuestos que hacian di ficil su permanence (2) No nos detendiemos + enumetat todos los eacesos cometidos en pezyuicio de los extranje 108, pero vamos a fijar nuestra atencion en uno de ellos en paiticulai, poique revela toda la barbarie de 19 legis (1) Demrageat Dr out somain p 105 @) Demungert Condiciin de los extanyeros cup 1 num 6—Fey suliea tit 48 De mugrantibus $1 easy a Jacién de los tempos en la Edad Media contra los hom- bres venidos de fuera, es deen, sobre el derecho de au bana 0 albanagio (a) Estando considerados los exti anjetos tuera del derecho comun, se les habia quitado la facultad de hacer testa mento, poi lo cual los bienes pertenecientes 1 un indivi duo fallecido en un teiritorio que no eta el de su pais, eran declarados hbies y se devolvian, ya al sefion de la tierra, ya al fisco, aun con exclusion de los heredeos le gitmos Hubo paises en que prevalecio la mhospitalatia costumbie, en vutud de la cual sus habitantes se atribu veron ju ¢ hospitu, los bienes de los extranjeros fallecidos en su terzito1i0 Esta monstt uosa costumbre de considerar alos extianjelos incapacitados de heiedai, la hallamos consignada en las leyes y en las capitulaciones de los Barbaros, y consideramos como mas probable 1a opmon’ de los que pretenden que estos ultmos la introdujeron, cuando fueron a estableceise en los terlitorios conquista dos desde Ia caida del imperio (1) Segun sus leyes, sola mente los que tenian derecho a llevar las armas, podian ser propietarios 11 Desde el siglo IX, hallamos designado bajo ek nom bre de aubana el derecho de apropiaise los bienes de los extranjeros, derecho que, en los tempos del feudalismo, fué eyercido por los sefiores feudales, quienes se apropia ban los bienes de los extranjeios fallecidos en sus dominios Cuando mas adelante la monarquit hubo sometido a los (a) Aubana Empleamos esta pulrbia eatiafia poique #1 bien no ha dgmndo carta de nvim aleza entre nosotios ~igunos de nuestios toes leusyn La Enc: clopedsa de derecho y admunetracion [tomo V péginr $46}1a scepty Bseriche on a Dicctonario de legsslacién 1a emplea & Iv vez que Ins de albana y uibanagio Bello Prencipros de derecho de gentes Intirduce por atbanogio Riquelme Dlemen toe de de echo pudlico usa de la frase advema e181 Ascmte en si Prog ama dé Tegualacion comparada pag 1% empler tambien 14 prvbir albinago Dndoso el ‘onigen etimologreo de Ix pulabi firmness aubaine pero adouhds yx en geneal por los tratadistas considetmos prefer ible It equivaienci erstellen que mis $6 apromma +l orig de que piocede por cate motrvo w ‘uenos mdistintmente audana 6 albinago —[Nota deta tyad ] ) Leyes de los anglos tit 6 40 Leyea de tes Lambar dor hb WY it 4 —~20— sefiores y apiopiadose sus derecnos, el de albenagio fud constderado como una prelogativa de la corona y ejerct do como un verdadero derecho de regaha hasta la époce de la revolucion francesa y de sus nuevos Codigos No estan acordes los wto1es aceica de la etzmologia de Ia palabi1 aubamm, que sei via para designat alos extran yeios Sapey dice que este vocwblo provenia de que los extranyeios estaban empidionados en un album (1), sosie nen of108 que el nombie de aubairs, que es pecuhar de los escoceses, se ge 1e1 thze pata designar a todos losex tianjeros (2), otros consideian esta palabia como deriva tiva de alts nats (3), d undola ottos distantas intel pretacio nes Lo que hay de cierto esque, bajo la formula de Ds ot de aubains, Det echo de aubaaa, se han designado todos los derechos tigutosos que pesaban sobre los extianjeros, considerandolos como derechos de regia en la mayor paite de las naciones de Europa (a) Debemos obser vai también que algunos autores nan su puesto erioneamente que este derecho emanaba de los gnegos y de los 1ominos, como sostiene Bodin ensu Tha tado dela sepublica Se halla combatida esta opmion por (WD) Los ects anyeros on Trancia prs 88 OE (8) Dixgoumis Dela condicadn det eatiangero p 6 (@ Demangeat ib at pig oy ng (@) Pocos 6 nmgun dato preciso haliamos en 103 plume xs compuiaciones de Es afin relatrvamente al derecho do aubuna La opmién de Réerehe es muy termi nante En Espns m so ha unpedido m se smpide é los extranjsos natmalizsdos 6 no natualizados disponet Izicemente de sus bienes por contrato entre vivos 6 ot ultima volanted mi tampoco se hn contiseadd mi ge confiscan los bienes de Jos mtastados No paiece muy conforme con esta opinidnla de los eseritores dala, Enciclopedia espanola de det echo y admamet acrén que selimitan & ndicar que Rs and m fné Ie més extremada en este punto mi la ultima de las naciones que pro ‘curé aligeiat estos oneiosisumos derechos y ain sbolulos En cusnto al derecho dotestar ya on el mglo XIII nuestias leyes del Fucro Realestablecen preceptoy gastos que gua: dan conformidad con los generalizados después en Europe & 1m ‘paleos del piogieso y Is civilwacién La ley 3* tit 24 Lb ZV dedicho Cédgo pre ‘iene qus 108 tomer os quion quer que sean y donde quiera que vengan puedan tambon en santdad como en enfermedad focer manda de wus cosas regun 1% volun, tad 6 monguno no sea osado de embar azarle poco m mucho y Ia ley 6* sigmente dice Si tomer oe mut ween xn manda toe alealdes de ta villa do murseren rectban ‘sus duenes 4 euraplan de elton to que fuera menester @ 24 rnterramiento ¢ lo demos quandento £ faqanto ander al rey —[Noto de to trad] —21— el testimomo de Ulprano que dice que, en ciertos casos, se permitia testar 2 los extranjeros segun las leyes desu patria, por el de Teofilo, que consideia, como una de las razones por las cuales debia admutise el fidercomiso, la necesidad de templan el igor de las leyes relativamente a los extranjeros, y por decreto de Adnano, que conside- ra como tramca la costumbre de su predecesoi, de con fiscar los muebles y demas efectos de los mercaderes ex tranjeros Estos testimonios son suficientes para probar que no debe atribunse al derecho romano el ongen del derecho de aliznagso Los que deseen profundizar la ma teria, deberan lee: las obras de Bacquet, Denwart, Gaschon y Demangert (1) 12 Una de las naciones en que el derecho de avbanase aplicé en todo su ngor fue Francia, en donde los extran jeros estaban obligidos a pagar cara 11 facultad queseles concedia de permanecet en el pais Inventaronse diversas formas de mmpuestos, que fueron 1igurosamente aplicados alos eatanjeros No nos detendiemos 1 examunarlas, pe To hatemos nota que estos no podian obtener yjushicia 32 no prometiendo pagar los gastos de ls sentencia, que no podian contrae: matrimonio sm pagal unimpuesto desig (1] Deben leesse on lo referents 4 la legislaciin competencia y derecho de los extranjeros las sgmentes obias Bonhil Dela competencia dé los ti bunales france sea reapecto a loe extranyeroe en rants va creil mer cantsl y ¢1 Diagoumss Ds Ya condicion civil del extr anger o en Francia Guillet (Aug ] Dela condscrdn civit de los extranyeros en Roma y en Francia Ivy [1 ] Dela posceson de Loe derechos cxvs Tea on deneftero do los extranyer os Legat Oédigo de tor extranyer os Lebtion EX C6 igo de Los oct anyer og 6 Recoptlacion de las eyes de lo sunrapi udencia snglesae concer mente d los eats anyon o8 en et Resno Unido de la Gran Bietafia Lobe Gua de Joa derechos ewiles y comerciales dolor 6vti anye of én Eepatta Okey Derechos pri walemros y obliquciones de los ects anyer on en ta, Gr ax Bi rtana Westoby Resumen de Tddlegustacién ingleea on materia creil yeomercial para el uso datos bats amyer os Sa Yanas Manual de Loe derechos croites y come cuales de los f anceses en Dspanay de os extrangeros on yenorat Sapey Loe evtranyeros en Francia bayo el antigua y st nuevo derecho Schutebombaiger Cond:cion croit deloe eLtranyer os en Ti ancia So Toman Ensayo jw 1d:c0 acer ca de ta condicion de tos extr anyes os La segunds parte dela excelente obta de Mr Wilham Beach-Lawtence sobre Wheaton comienza, ‘eon un pofando estudio aceca de los derechos mternieonues de 11 leguslacién eral y crummal 5 del confieto de las leyes Bs lo ultimo que se ha pubhiendo 80 tne el Dererho internacional pinade—[N P FP] —22— nado con el nombie de Lio de formaitage Todos los je tes de familit, casrdos 0 wudos, estaban ademas oblgado« & pigai uD IMpuesto Anual, el D, owt de chevage, y cuandc Jo 1eclamaban las necesidades del Estado, estaban some tados los ett injeos vmpuestos ext vordinaiios } suma, mente oneiosos Asi fue que, pot edicto del mes de Sep fiembie de 1587, mando Emiuque II que todoslos merca, deres extzanjeros, sin exclun a los que estiban natural. ~ gados, sacasen una ceduly par? lesidu en el 1emo pagan do un impuesto especil Por una declaracion de 29 de Enero de 1693, sometio Luis XII +los ext: anjeros quere sidian y poseian bienes en el remo a un nuevo umpuesto v Lus XIV, por edictos sucesivos, zmpuso a losextran jelos naturalizados la oblgacion de hacer confumar sv carta de natutalz«cion, pagando ota Estas medidas1igut osas tueron a veces duleificvdas, pe 10 solamente en favoi de los metcaderes Vemos, en efec to, que pala ammw a lositahanos que comerciaban en los objetos de lujo y de aite, Felipe V, en 1349, dispuso que «Todas las compatiias de mei cadetes, y especiaimentelos florentinos, los milaneses, los habitantes de Luca, los ge noveses, los venecianos y los tudescos, si quieren comer ciar y gozar de los privilegios del mercado, tendranpata s1 y sus dependientes la facultadde1esidir en dichos mer cados, sin tener por eso una, estacion hyja en ningun punto de nuestro remo, a donde podran vemr hbremente, per maneciendo en el y volviendo a mar char con sus melcan cias y sus conductores sm set detenidos po? nuesti os guar dias » Algun tiempo después Cazlos VII concedio ala cu dad de Lyon ties ferzas abien tas, y en el edicto de conce sion declare que todos los mercadeies que fiecuentasen esas fe1ias, estaiian exentos, durante su viaje, su perma nencia y su 1egieso, del derecho de aubana Luis XI, por caitas patentes defmes de Maizo de 1462, concedio_una cuarta feria, declarando en el ut 9° que se Concedeia a —23— Jos extranjeros el podei testar y dispone: de sus bienes conforme a sus deseos, que el testamento hecho dur ante la fe1ia, o Inmediatamente antes o despues, Selia-vahdo y ten duia efecto como en Ia pattia del testadon, que st Jos for teros fallecian duiante 1+ feta sm testamento, sus verda deros herederos poduian sucederles segun Jos usos, cos tumbies y estatutos de su patria, como si la heiencia hu piese tendo lugat en su pus Estas disposiciones fueron confurmadas luego poi Carlos IX en sus caitas patentes de 7 de Agosto de 1579 (1) 13 Las mismas medidas de 11g0) en peljuicio delos ev. tranjeros hallamosadoptadas en Inglatert a, templadas tam bien mas adelante en favoi de los mercadees y eninteres del comercio Ningun ext:«njeio podia efectrvamente Ne gal 2 sel propietario de tetas, y si las adquitia en elrer no, eran restitudas al rey a titulo de derecho de albunagio El prime: acuerdo del Pailamento en este sentido se tomo en el 1einado de Eduardo II, sometiendo todas las tierras de los Noimandos al derecho de aubanay declarando ex tranjero a todo mdividuo nacido bajo una soberania extran, jera El estatuto 2° del decrmoseptmo afio del reinado de este monarca, capitulo 12, se expresadeestemodo “Eliey toma: a titulo de derecho de albsnagio las tierras de los normandos, cualquiera que sea el feudo a que peitenezcan, salvo, sm embargo, los derechos conespondientes & los sefiores que tienen domumo sobre dichos feudos“ Halla mos tambien en Inglatet: a numer osasrestricciones impues tas a los extranjeros Por el estatuto 9° del primer afiodel yemado de Ricardo III se establecio quelos comerciantes ex\tranjeros deberian vender sus mercancias al por mayor y solamente en los primeros ocho meses, desde su introduc «aon en el reino, empleando su importe en adquisiciones de productos ingleses, que nmgun extranyelo pudiese ven fi] Bacquet Der echo de athenaqo eap \LV~Boeimus Decis 18—Demangeat De 2a condicion de tos ert anger os en Franca num 44 —24— dei m1 comp i lenven el remo m fabric w telas del mismo. género, que twmpoco podria tener oficio alguno n)ser sir- viente Los que quebrantaban seme;"ntes disposiciones, eran castigados con penis ngmosas Elestatuto 13° del vigésime segundo afio del 1emado de Emique VIII mmpe- dia a los ext anjeios ejeicei oficio alguno 6 profesion, y Carlos II prohibro que se les emplease como agentes en las islas y colomas sometidas aS M No obstante, como el comercio 3 el mteres mercantl han sido siempre 14 prmeipal mn de 4 nacion mglesa, en su politica, en sus instituciones y en sus relxciones in ternacionales, se hizo necesano que su legislacion 1espon- dhese 1 las tendencias del pueblo ingles, y pa fomentar el interés comercial y las transacciones, concediesonse, segun las necesidades, algunas ventajas a los mercaderes extranjelos Asi es que hallamos, haci. los tiempos de Juan sim Tierra (1215), algunas disposiciones en favor de Jos mezcaderes [articulo 50], y las encontramos aun mas numeros4s en epocas posteiiores, segun 11s necesidades del comeraio §in quelas enumeremos todas, notai emossolamente que, en tiempo de Jorge I, en el vigésimo segundo fio de su remado, para, fomentar la pesca de 12 ballena, se promul- go un estatuto, por el cual se concedia la cradadama m gles a todo extranyero que hubiese ser vido dun inte tres afios en un buque inglés consagiado 4 esta pesca Ant guamente la cudadama inglesa se conferia por interés po- Intico Asi es que bajo el msmo Jorge II,en el décimoter 10 afio de suremado, para favorece: la emigiaciondelos protestantes, que por ser objeto de vejaciones en Europa se refugiaban enlas Colonias inglesas, se publicé unesta tuto por el que se conforma la c1udadania mglesa a todo ex- tranjero que hubiese habitado en las colomas durante siete atios Bajo Jorge Il, pata favorecer la Sociedad de las In- dias, que tenia necesidad de unempréstito, se concedié 7 —25— Jos extranjeros el derecho de disfrutar de Ja hipoteca so bre los fundos hbres 6 entitéuticos exustentes en Ias Indias Todo esto revela el esparitu de la legislacion inglesa y demuestra hasta la evidencia que en Inglaterra ha surgi do el comercio con las mismas istituciones del pais Asi es que, ademas de las disposiciones 11gu108as 1 elativas a Jos eatranjeros dictadas poi el interés comercial, hallamos en el quinto afio del remado de Jorgel, elestatuto 27, por el cual se prohibe a los ingleses trasladar su industria y sus fabricas a pais extranjero, bajo pena de perder su na cionaldad y de verse mcapacitados de heredai y de reci bir mngun legado en Inglateria, si no regresaban a los seis meses contados desde el dia en que recibnetan aviso del consul 6 del ministio inglés 14 Las pumeras tentativas para templar lis disposicio nes rigurosas contra los e\tianjeros, fueron hechas porla Iglesia, la cual no podia conciliar los derechos mhumanos de aubana y denaufragio con los preceptos de una rebgion enemiga de toda, desigualdad entie los hombies, asi fue que, en los lugares en que el der echo candnico tema algu na autonidad, se templazon bastante los mgores contra los extranjeros Otros paliativos vimeron a introducn la crvi hzacién, el progreso yla necesidad de ensanchai las 1ela ciones con los de otranacion Asi fue como se hicieron los convenios diplomaticos, basados en el sistema de recipro eidad, por los cuales se hatratado de asegural a sus pro pros subditos, residentes en pais extranjeio, algunas ven tajas, concediendolas semejantes a los subditos extranje ros que residen en el territorio del Estado Varios tratados se han celebrado para la abohcion del derecho de alb:nagto con clausula de reciprocidad, pero por este procedimiento, se hubiera llegado muy tarde auna reforma, radical dela legislacion mterior de los nuevos Es tados, s1 14 revolucion de 1789 no hubiera vendo a modi fear completamente las bases de todas las cuestiones so qiales y pobticas —26— La revolucion francesa, que tuvo por objeto remvimdi car los de1echos del hombre, por las retormas 1adicales que int1odujo en todas las institucionessociales y por la3 ideas filantopicas con Jas cuales trasformo el pasado, no podia, consetvat las barreras que temap divididos a los pueblos La Asamblea Constituyente prociamo, en efecto, que el derecho de albiagzo era contreno a los piincipi0s de fratermdad que debian umr a todos los hombres, cus lesquiera que fuesen su pais y su Gobierno, que este dere cho, adoptado en los tiempos barbaros, debia ser proscrito por un pueblo que habia fundadosu Constitucion en elres peto de losderechosdelhombre y del cmdadano, y quela Francia libre debia abiu sus puertas 1 todoslos pueblos mvitandoles a venn 1 disfiutar, bajo un Gobierno libre, de Jos derechos sagiados e inviolables de la humamdad (1) El 6 de Agosto de 1790, formulando 11 Asamblea Constitu yente estos principios en disposiciones legislativas, decre to la abolicion del de:echo de aubana sin reciprocidad, y por un deci eto subsigmente del 8 de Abiil de 1791, losex tranjeros, aunqne no lesidiesen en Francia, fueron adm. tidos a recogei la herencia de un frances Enconttamos ademas, otras disposiciones generosasen favor de los ex tranyjeros, en la ley de 9 de Mazo de 1793 15 Cuando al sistem. republicano siguio un 2égimen monarquico con el nombre de Consulado, no pudieron trunfar lasideas cue1 damente hberales dela Constituyen. te, respecto a los extranjeros ‘Dos sistemas podian seguir se en la redaccion del Codigo civil oadmin a los extran Jeros al goce completo delosdeiechos civiles sin 1ecipro eidad, lo cual hubie1a estado conforme con los principios de la equidad natural, o consagrat el sistema de la21ecipto eidad, por el que se hvbiian concedido a los extranjero, algunas ventajas sobre 11s bases delas1elaciones diploma fl] Masse Dioit comm serat ib IT tit 8 oap 1 gee 181 27 ticas existentes con la nacionaque pertenccieran Picva lecio este ultimo sistema, velart 11del Codigo civil esta blece que los extranjetos gozaran en Francii los msmos derechos crviles que los concedidos 1 los tlanceses, por Jos tiatados con ln nacion 4 que aquellos pertenecen Dicho aiticulo, por la forma indetermmada en que se halla redactado, abe ancho campo a lo aibitiatio Tal vez se adopto esta formula, pais dai al Piumer Consul mayor fueiza ante las potencias extranjelas, pero no puede con cilazse con los progresos de la legisiacion de los tiempos: modernos Querei quedependa de los tatados el ejercicio de los derechos civiles delos extianjetos, es un piincipio de otros tiempos que hace incierto todo derecho de cual quzer genero que sea Este piincipio subordina a conside raciones pohticas exteriores, a las alanzas y amustadesde Jos soberanos, la condicion civil de un clase numeiosa de individuos que podiian veise ptivadosde sus derechos, si una circunstancia cualquiera veniy a destrun la aimomy entire los soberanos Nos complacemos en creel quo no es este el espnitu delaley, y que ellegislado: frances no po dria aphear el art 11, que se halla en contradiccion con los principios dela civihzacion moderna, pero no cabedu da en que la 1edaccion del articulo es anti liberal, sobre todo, temendo encuentael valor significativo de las pala bras por los tiatados, y el sentido indeterminado de las otras palabras derechos ctvales, poi las cuales pueden en tenderse todas las facultades 1econocidas y sancionadas por la ley civil No queremos detenernos acomentat el ait 11, notare mos tan sdélo que la mtet pretacion que le han dado los ju risconsultos y la maneia con que se ha aplicado, han he cho desapat ecer los inconvemientes que envolvia su redac cion En efecto,interp: etando bemgnamente las palabras, se ha vendo a demostiar queel dei1echo de propiedad in mobiliatia y los derechos secundaiios, que son su conse —28— cuenc.e, el derecho de comparecer personalmente en jui- cio, €1 de. echo de contraer matrumonio, wnque sea conuna frances 1, y los demasderechos crviles pertenecen a los ex tranyeios, mdependientemente de todo tatado, de suerte que le disposicion delait 11, que se11. indeterminada, no, ateniendose mas que a 11 letia, ha sidosolamente aphea da, por 11 manera con que se ha apiecivdo el espintu de la legislacion, a cicitos derechos e\presamente negados por la ley trances+ alos ext anje10s por1azén de 1 ecipi0- eidad, como po? ejemplo el derecho de presentarse en ym cio, como demand intesin prestar suhanza, gudicatuy sol et, el derecho de heredar ab intestato y de recitir por do nacion 0 por testumento con exclusion del beneficio de la cesién judicial (1), 12 summsion de pleno derecho a la ptr sion por deud1s, y qued®, poi consiguiente, establecido, que el extranjero goza en Frencia de todos los derechos eiviles concedidos + los mismos, exceptuando sdlo aque los que les estan eapiesamente negados por disposiciones especiales de las leyes Obse1 vemos, finalmente, quel ws disposiciones relativas a todos los derechos de herencia, disposiciones consigna das por los atts 726 y 912 del Codigo de Napoleon, han s1- ft] Bdericevere pe donatone 0 per testamento ad esclusions det beneficro della cenone giudecraria ‘Tal es ol toxto cuyo sentido nos vemos joasados & confetar que no nos parece suficientemente claro 2Ha quenido deen el Sr Fiore que los extrameros no estin admitidos po. ia ley civil al benefcio de la cemén de los brenes? [2] ines aigaea] [a] Las frases de Fiore ¢ da recrver o per donasione o per testamento ad exelueio ne del beneficro della cestone gidu-rarta no parecen suficientemente claras @ M P Fodere que de um modo dubitatzvo Ina aphiee al beneficia de te comén de bie nes A nuestro juicio el sentido de las pahbias de Fiore se aplice en efecto a ln cemién judicial de bienes admitids por los arts 1260 1288 del Obdigo civil fran cos & la cual se refiere el art 898 del Cédhgo de Procedumentos civiles articn Jo 898 Hamdndola sumplemente cenou sudtclat frase que vcato sirvié 4 Fiore pa raexpresal el coneepto 1eazo1mpropio per en xeahidad tomada de la mame, ley Mas esta exclusién de los extaangeios del beneheto de Ia cesién de bienes 6b ‘sién yudzex) parece que no tiene lugar cuando el extramero obtuvoautorizacién, para fiyur su domenho en Frarcnn Véanse Toullier Pardessus Pigean Duranton yPrvard—[h deta trad espan} —~29— do modificadis por Ja ley de 14 de Juho de 1819 Liat 7126 aplica textualmente laimcapacidad general del art 11 al derecho de recoge: unv herencia en Francia, y el art 912 establece que no se puede de ninguna manera dispo ner en favor de un ext anjeio; sino en el caso en que este podiia dispone: en favor de un francés Estos dos articu los 1ep1oducen bajo otra forma el derecho de aubana que se hvbiv querido proseribu [1], y como observa Zacharias, po muy gi inde que se% la diferencia entre este derecho y el dete1mmado po los susodichos ticulos, no cabedu c1, sin embargo, que han sido 1a consecuencia de la doc tima de la Edad Media La ley de 1819 co11igio esta ano- mali, declaiando que los evtianjel os pueden heredar, re cibu y dispone: en toda Fiancia como los fianceses, aun sw reciprocidad, excepto en el caso en que haya que com put una misma herencia entie coherederos fianceses y eatr anjeros, pues entonces los cohetedetos f1 wnceses pue den apaitai de los bienes existentes en Fianci, una por cion igual al valon de los que esten en pais extanyero, de los cuales sean excluidos bvjo cualquier titulo, en vir tud de las leyes o de las costumbies locales (2) 16 Por Jo que se 1eficre a la condicion de los extianje ros en Inglaterta en los tiempos modei nos, observal emos que esta parte de la legislacion no ha sido metodizada m regularizada hasta el 1emado de ly rema Victoua Se hr cieon algunos ensayos en tiempo de Joige TI, pero fueron infiuctuosos Poi vez piimera en 1843 piesenté Mi Hutt a la Camaia de los Comunes un bill pata modificat 1a con. dicién de los eatianje1os y 1eformat 11 legislacion en este i) Rachanas Devecho oe frances ¢ 14, ‘Vérso 1a exposieién de los motives de eata ley pox D Hay quo advent que esta 1e) de 4 de Seitede dale cue he permtido & los er yer Ia guganion 700th jonnexc ede I muse mae en Frahena Htbremente sus parientes 6 amigos aun exndo fuesen —380— punto La Camaia de los Comunes juzgo esta proposicién como demasiido hberal, y el bill fue desechado, mamfes tando, sin embargo, el deseo de revisar esta parte de la Jegislacion y de dismmuiai los obstaculos para la natural zacion, & cuyo fm y a propuesta del mismo Mr Hutt, se nombro una comsion para estudiar Ia parte de Ja legisla- cion relativa 1 los extranjelos y para proponer las modi fieaciones opoitunas La comision presento su dictamen y sus proposiciones el 2 de Jumo de 1843, y después de un largo debite, la condicion de los extranjerosfue determ nada por el estatuto 7 y 8 de Victoria, promulgado el 6 de Agosto de 1844, arts Ty 8 Este estatuto modifico varias disposiciones y suprimio algunas, determuno Jas condiciones para obtener la natu ralizacion y acepto muchas de las proposiciones del com:- te, pero desecho Ja relativa a que los extranjeros pudiesen poseer bienes inmuebles en Inglaterra, capacidad que la politica recelosa y poco motivada del Parlamento no qui so conceder No nos detend:emos en exponer todos los derechos po- sitivos concedidos a los extranjeros por la moderna le gislacion mglesa, basta con haber consignado que la con- dicion de los extianjeros ha sido legalmente establecida en 1844 durante el 1einado de la rema Victoria, y modifi- cada posteriormente por un estatuto promulgado en elon ceno afio de dicho reinado, cap 20 Paralospormenores, puede leerse la obra de Le Baron, en que se encuentra un exposicion exacta de Ja legislacién inglesa (1) 3] Le Budn Bt Codigo de os ext anyeroe 6 Compitacidn de tas Leyes y de i su rieprudencia inglesa concer mente @ los evtr anger os —Westoby Resumen de jale guslacién inglesa—(Frore ) ‘Los extarmetos no podian efectiyamente posee: en Inglaterra mas que bienes mobiliuios En curnto 410s biencs mmuebles antes del acta de 187 no podian ‘#€1 Propretai 06 de e108 por curnto Is Coron tent él derecho dereclamar todos: Jos que rdquniesen tampoco podiin antigu«mente tomar esos bones por un con tusto que durase mas de #i «nds La facultad de tomai en virtud de contato bienes snmobiburos no ha sido concedid's alos extianjenos hrste 184 Por lo de- 17 Por lo que concierne a 14 condicion. actual de los ex tranjeros +nte nuestla legislacion, debemos hace) obser var que el Codigo civil italiano, promulgado despues dela Constitucion del remo de Itaha, ha fhyado defimt:vamente Jacondicion de los extranjeros, admitiendo, con respecto a ellos, los principios huberales, que son el completo de nuestras tfadiciones Nuestio Cédigo no sélo ha igualado la condicién det extranjero a la del: nacional en todo lo que se refie1e al go ce de los derechos crviles(art 3), smo que ademas, imitan do en esto la laudable mciativa de Bélgica, ha querido codificar los principios, segun los cuales deben aphcaise Jas leyes extranjeras y establecer algunas bases para 1¢ solver los conflictos de las legislaciones, bases y princi pios cuya sabiduria apreciaremos mejor en Jos capitulos sucesvos En verdad, nunca han sido adoptad 1s entrenosotroslas enormidades que formaban la razon comun de los demas Estados de Europa, y prmncipalmente los derechos de aw bana y naufiagto En el antiguo remo de las Dos Sicilias, encontramos, desde los tempos de Federico de Suabia, dos Constituciones de donde tomaron origen las autént: cas Omnes peregi int y Naviglea, una con el titulo de Codi go Communta de successtonibus, y la ot12 bajo eli tulo De fuatis et servo corrupto (1) Por la primeia, mientras este emperador daba a los extranjeros plena facultad pala testar, les prrvaba de sus bienes, confiando a los obispos locales la obhgacion de consignarlos a sus herederos Por Ja segunda, derogaba la costumbre univers de api opiat se las cosas que no tenfan duefio También hallamos bajo Carlos V (2) disposiciones generosas en favo1 de los nau mis gozan estos de todos los otros decebos civiles pudiendo cya.cer cualgmer comercio 6industria Gozan igualmente de los dei cehos comuntles contu1bu3 en do ‘sus umpuestos [J Cod hb IV tut 69 tt 2 [2] Roceo Ditto ervile mternastonale parte1# cap IV [PF] —32— fragos Mientras que en la mayor parte de los paises de Europa el derecho de apiopiarse los bienes de los extran Jeros, e1% conside1 ido como un verdadero derecho deze galia, entre nosotros el derecho de at bana se aplicaba so lamente a los c1udadanos de los Estados quo lo practica ban en detrimento de nuestros nrcioastes Esto sucedia en el remo de las Dos Sicihas, en donde, antes de la pro mulgacion del Codigo que establecio como 1egla 1a rect procidad (a1t 9°), el derecho de aubana estaba pioscrito pol los tratados eaistentes con dive1sos Estados En la co leccién de pragmaticas, bajo el titulo de federa, se en cuentran varios tratados estipulados en vista de la capa cidad mutua de heredar entre los nacionales 1espectivos,- en los tiatados, por ejemplo, con Suecn, Holanda, Dina, marca, la Puerta Otomana, Rusia, y en el vertficado entre Lws XV y Carlos III de Espaiia en 1762 No neguemos que los extranjet os, 2un aquellos a quienes se concedia el derecho de heredar y poseer bienes, estuviesen sometidos a ciertas disposiciones one osas, como po. ejemplo, la ga bella her editar ca, que consistia en un derecho dedet accion, al cual estaban sometidos los extr anjeios aquienes se per mitia heredar en el1emo de las Dos Sicthas, 0 que, por cualquier titulo, adqunian bienes Este derecho fue abohdo por razon de 1ecrprocidad para los subditos: austracos, por un convenio celebrado en Viena el 19 de Abril de 1844, y para los subditos de ot1o8 varios Estados po: tratvdos pos tetores Los extranjetos que poseian bienes 1 uces y que estiban domiciliados fuera del pais, se hallaban suyetos a una Contribucion fiscal extraoidinaiis, Hamada derecho de valemento, y por temor de que defraudasen al fisco con ventas simuledas de sus propiedades a los natwales, nose Jes permitia trasmutn sus bienes por enajenacidn a los cru dadanos que residian en el remo, sin haber obtenido antes Ja autouzacion real Esta: medida, tomada por Victor: Ama deo en 1714 para la Sictha, se extendié también a Napo y eat gait Jes, mas aun, en 1745 se establecio que la efectiva y real enajenacion en favor de los naturales del pus, no podia suprimur Jas cargas a que se hallaban afect is las propie dades de los extianjeros, a menos de que fuese por gracia soberana 0 po tiansaccion con el fisco Cuando en el antiguo 1emo de las Dos Sierls se susti- tuyeron con el Codigo (26 de Marzo de 1819) las Const tuciones, las Segun estos articulos puede suponerse que los extran yeros a quienes se permntia fyjar su domiciho en el remo de Napoles, eran conside1ados juridicamente como capa ces de goza de todos los derechos civiles, y por consi gwente del de testar y del de heredar, de comparecer en yuicio, de enajenai, etc , cuya facultad se concedia tam bién a los extranjeros que no estaban domicihados en el remo, pero a cambio de reciprocidad En las legislaciones vigentes en los demas Lstados en que se dividia Italia, en cuanto al goce de los derechosa viles concedidos a los extranjeros, lo que predomm 1b e1a, Tomo 1-8 —34— el aistema de 1g 1cciprocidad, segun el cual estaban tam bién getermmadgs las reglas para las herencias Vamos q teproqucir aqui algunas de las disposiciones par ticulay es que no se hallan en el Codigo delas Dos Siciias Los arts 26 y 27 del Codigo de Cailos Albeito pua los Estados de Cerdefia estan confo1mes con el espuitu de los uts 9° y 647 del Codigo de las Dos Sicitas El ut 28 contiene una disposicién enteramagte especial «LoS ext anjeros na podian adquuu ni tomar en prenda, pi alquilei, a1 arren dai bienes 11¢es en el teiz1to110 del Estado, situados 4 mepol distancia de cinco kilometios de la frontera, bajo pena de nuhdad del contato Las piopiedades que se en cuentien en estas condiciones no podian tampoco set ad Judicadas a ningun extianje1o en prigo de lo que sea de hido, pero deberan sacaise siempie a publica subasta y se 1emtegiara a aquel con el producto de la ent. Todo esto sm peryuicio de otras piohibiciones mryotes pira al gunos de los Estvdos exti anjeos, establecid 1s por los tra tados El art 702 del mismo Codigo, dice tambien «El eatran ye10 que posea bienes en el Estado, puede disponer de ellos por testamento, unque sea en favo1 de otro evtran. jero, segun el ait 26 (el cual sanciona el sistema de rect procdad) En el crso en que no pudiesc dispone: segua este articulo, podia, no obstante, hacerlo en tiwo1 de un subdito sardo » En el Codigo pwa los Estidos de Parma y Plasencia se Jee en el art 1,402 «Bajo pens de nuhdad de conta ato, los extranjeros no pueden adquirn, m aun en publica subas ta, ni directamente, m por intermediazios, cuando se tata, de bienes raices siempre que esta facultad no les haya sido garantizada por medio de tratados c por declaacio es, 0 Si no obtuvieron wter1ormente la wto1zacion,» y el at 619, pariafo 5, dispone que «El e\tanjero que ha ya adqunido propiedades teriitonales en estos ducados, —35— cuando no pueda disfruta: de las disposiciones del ait 32 (que sanciona el principio de la recip: ocdad), podra, dispo nel aun poi testamento, con tal que sca en favor de un crudadano de estos Estados » En Ja legislacion toscana vemos 1) condicion de los ex tranjeros especialmente favoiecida para atiaetlos hacia determmados centios de come:cio Son notables desde es te punto de vista las leyes de Feinando I para vtraer a los eatranjeros al puerto de utoina (Ley de 10 de Jumo de 1593) En cuanto a la capacidad de los ext: anjeros pa ra adquun bienes 1uces 0 para 1ecibi los por hberalidad. testamentaiia, o po: heienciy Jegitima de Jos naturales del pais, prevalecio el sigtema de 1ecipiocidad, sanciony do por el motu propto de 17844 poi 1, lev de 18 de Agos to de 1814 El art 30 de estaley dice «Todos los extr ur jeros peitenecientes a un pus en el cual los subditos tos canos excluidos de las sucesiones, son aptos pia heredar en los Estados toscanos del mismo modo que sus piopios subditos# pero mas adelante ly capacidid de los extran Jeros de heredar y de adquuir en Toscana fue notable mente modificada poi el motu propio sobeiwmo de 11 de Noviembre de 1835, que abolio casi completamente el sis tema, de Ja reciprocidad, 1econociendo que el hecho de eaclun alos extranjeros de las sucesiones por derecho de reciprecidad, era conti 2110 a los verdaderos intereses del Estado El ait 1° del motu pi opio que acabamos de mencionai, dice «Los extianjeros, cualquiera que sea su nacional dad, seran admutidos en lo sucesivo a heredar en toda la extensién del terntorio de nuestros Estados, por testamen to 6 ab entestato, a adquirir a cualquier titulo, aun a titulo luciatrvo, del mismo modo que nuestios subditos, de la misma manera, con los mismos efectos, ssn que se pueda oponen a ninguno de ellos le extstencia de leyes que pi ohs —36— ban a los toscanos heredar 6 adguirn en los Estados a que pertenecen esos extranjer os » El prmeipio hberal sancionado en el at 1° quedo lue go mod:ficado en el unico caso de competencia entre co herederos toscanos y extranjeros por el ait 2° «En el caso de particion de una herencia conferida, por acto de postrimera voluntad o por disposicién de la ley, a here- deros toscanos y extanjeos y compuesta de bienes si tuados paite en Toscana y parte en pais extrafio, los he rederos toscanos podi in apartar de los bienes situidos en el Gran Ducado una parte igual en valor a los bienes sifuados en el extianjero, de cuyos bienes estuviesen ex cluidos por Jas leyes y estatutos de ese pais, disposicion que se aphcara tambien alos herederos a titulo particu lar y a los legatarios » En el ducado de Luca, el art 5% del decreto relativo a las herenciis, de 22 de Noviembe de 1818, establecio que «Los extranjeros pertenecientes a un Estado, en el cual los subditos lucanos no @stan excluidos de las heren cias, son admitidos a. suceder, del mismo modo que here dan sus propios subditos » Observemos también que, segun el 1eglamento legisla trvo sancionado poi Gregorio XVI, que ha estado en vi gor en los Estados pontaficios desde 1 °de Enero de 1885 (1), se halla establecido, tit IL, art 8, que «Los eatranjeros pueden heredar por voluntad testamentaiia 0 ab tntestato, y adquinr en los Estados pontificios, siempre que pot las Jeyes en vigor en los prises extranjeros, los subditos de dichos Estados sean aptos paia heredw o adqunn, salvo lo que dispongan las convenciones pohticas y los tra tados > Por ultimo, el art 9° del titulo prelmmaa gel Codigo [t) Lo que dice agm el Sr Fiore ha eadueado por los ~contecumientos de los ‘ihmos noe pues ya no hay Estados Pontstieios sino remo de Ttaba—[Wote de ye trad} —31— Civil del cantén del Tessino, dice lo sigmente «Las leyes favorecen y obligan igualmente al extranjero en cuanto hahite, contiate, posea o pueda adqur en el canton No obstante, par disfiutai de los beneficios de 19 ley, el ex tranje1o debers proba: que los tessinensesson 1dmitidos con iguales derechos en el Estado a que el peitenece El extranjero es excluido siempre de los derechos cuyo eer eicio exuge esencialmente 11 cuahdad de crudadano tessi nense » Cualesqueia que hry an sido entre nosotros 11s 1estiie caones relativas al derecho de enajenar y lis caigas im puestas a los extranjenos, es indudable, sin embargo, que en los tiempos mode:nos,—podemos decu lo con satisfac cion—el Cédigo Civil itahano ha marcado un verdadero progreso, pues ha queiido poner en armonia Jos derechos de los extianjeros con el pimeipio de nacionahdad, que es la base de nuestio devecho publico 18 Pou lo que concieine a la condicion de los extian yeros en algunas ot14s legisliciones, observatemios que en Holanda, segun elart 9° de la ley de 15 de Mayo de 1829, el derecho civil del 2eino es el mismo pata los extanjeros que para los holandeses, a menos de que la ley haya de clarado expresamente lo contrario El at 33 del Codigo austzaco establece que los extranjeros gocen de los mis mos derechos que los indigenas cuando no es exgida la ‘condicion de ciudadania, pero en los casos dudosos, el de recho de aubana permanece en vigot En Espafia, segun el art, 18 del Codigo de Comercio, los extranjeros que hy yan obtemdo naturalizacién o vecindad por los medios que estan prescritos en el derecho, podran eyercer hbren - te el comercio con los mismos derechos y obhgaciones que los naturales del 1emo Los

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