Labores y cuentos para niftos de 3 a 12 aos Casio: TODOS LOS CUENTOS DE LOS HERMANOS GRIMM, Ecorial Antropossfica. Pincuras originales del cuento: Sofia Pascherta ls: Mariana Berdifas Mustraciones de las act INNATA Pat tSNatCAPERUGITA ROSA ESR TCS RS eS a rondo tina Martinez explica el cuento en la pagina 44 de Innata 2. 2Brase una vez una nifa tan dulce carifiosa, que robaba los corazones de cuantos la veian: pero quien mas la queria era su abuelita, a la que todo le parecia poco cuando se trataba de obsequiarla, Un dia le regalé una caperucica de terciopelo colorado, y como le sentaba tan bien y la pequefta no queria llevar otra cosa, todo el mundo dio en Ilamarla "Caperucita Roja”. Dijole un dfa su madre: — Mira, Caperucita: ahi tienes un pedazo de pastel yuna botella de vino; los Hevards a la abuelita, que est enferma y delicada: le sentardn bien. Ponte en camino antes de que apriete el calor, y ve muy formalita, sin aparcarte del sendero, no fueras a caerte y romper la botella; entonces la abuelita se quedaria sin nada. Y cuando entres en su cuarto no te olvides de decir "Buenos dias”, Yy no te entretengas en curiosear por los rincones. — Lo haré todo como dices —contesté Caperucita, dando la mano a su madre. Pero es el caso que la abuelita vivia lejos, a media hora del pueblo, en medio del bosque, y cuando la nifia entré en él encontrése con el lobo. Caperucita no se asusté al verlo, pues no sabia lo malo que era aquel animal. — Buenos dias, Caperucita Rojal — ;Buenos dias, lobo! — ;Adénde vas tan temprano Caperucita? —A casa de mi abuelica. —Y qué llevas en el delantal? — Pastel y vino. Ayer amasamos, y le llevo a mi abuelita algo para que se reponga, pues esté enferma y delicada. — ;Dénde vive tu abuelita? — Bosque adentro, a un buen cuarto de hora todavia; st casa esté junto a tres grandes robles, més arriba del seto de avellanos; de seguro que la conoces — explicdle Caperucita. Pensé el lobo: "Esta rapazuela est gordita, es tierna y delicada y seré un bocado sabroso, mejor que la vieja. Tendré que ingenidrmelas para pescarlas a las dos”. Y, @_ventos para nivos después de continuar un rato al lado de la nif, le dijo: — Caperucita, fijate en las lindas flores que hay por aqui. zNo te paras a mirarlas? ;Y tampoco oyes como cantan los pajatillos? Andas distraida, como si fueses a la escuela, cuando es tan divertido pasearse por el bosque. Levant6 Caperucita Roja los ojos, y al ver bailotear los rayos del sol entre los rboles y todo el suelo cubierto de bellisimas Hores, pensé: "Si le llevo a la abuelita tun buen ramillere le daré tuna alegria; es muy temprano atin, y tendré tiempo de llegar a la hora", Se aparté del camino para adentrarse en el bosque y se puso a coger flores. Y en cuanto cortaba una, ya Ie parecia que un poco més lejos asomaba otra mas bonita atin, y de esta manera penetraba cada vez mas en la espesura, corriendo de un lado a otro. Mientras tanto, el lobo se encamind directamente a casa de la abuelita, y al Hlegar llamé a la puerta. — ;Quién es? — Soy Caperucita Roja, que te trae pastel y vino. — jAbre! ;Descorre el cerrojo! —Grité la abuelita—j estoy muy débil y no puedo levantarme. Descortid el lobo el cerrojo, abri puerta, y la fiera, sin pronunci palabra, encaminése al lecho de la abuela y la devoré de un bocado. Ptisose luego sus vestidos, se tocd con su cofia, se metié en la cama y corrié las cortinas. Miencras tanto, Caperucita habia estado juntando flotes, y cuando tuvo un ramillere tan grande que ya no podia afiadirle una flor mas, acorddse de su abuelita y reemprendio presurosa el camino de su casa, Extraiole ver la puerta abiertas cuando entré en la habicacién experimenté una sensacién rara, y pensé: ";Dios mio, qué angustia siento! Y con lo bien que me encuentro siempre en casa de mi abuelita”. Grité: se La una 3— ;Buenos dias! —pero no obtuvo respuesta, Se acercé a la cama, descorrié las cortinas y vio a la abuela, hundida la cofia de modo que le tapaba casi toda la cara y con un aspecto muy extrafo. — jAy, abuelita! ;Qué orejas més grandes tienes! — Asi te oigo mejor. — Ay, abuelita, vaya manos tan grandes que tienes! — Asi puedo cogerte mejor. — Pero, abuelital (Qué boca mas terriblemente grande! — jEs para tragarte mejor! Y diciendo esto, el lobo salté de la cama y se tragé a la pobre Caperucita Roja. Cuando el mal bicho estuvo harto, se metié nuevamente en la cama y se quedé dormido, roncando ruidosamente. He aqui que acerté a pasar por allf el cazador, el cual pens6. ";Caramba, cémo ronca Ia anciana! ;Voy a entrar, no fuera que le ocurriese algo!" Entré en el cuarto y, al acercarse ala cama, vio al lobo que dormia en ella. — jAjd! Por fin te encuentro, viejo bribén! —exclamé—. jNo llevo poco tiempo buscandote! Y se disponfa yaa dispararle un tiro, cuando se le ocurrié que tal vez la fiera habria devorado a la abuelira y que quizas estuviese atin a tiempo de salvarla, Dejé, pues, la escopeta, y con unas tijeras se puso a abrir la barriga de la fiera dormida. A los primeros tijerazos, vio brillar la caperucita roja, y poco después salté fuera la nifia, exclamando: — jAy, qué susto he pasado! jY qué oscuridad en el vientre del lobo! A ccontinuacién salié también la abuelica, viva atin, aunque casi ahogada. Caperucita Roja corrié a buscar gruesas piedras, y con ellas Ilenaron la bartiga del lobo. Este, al despertarse, traté de escapar, pero las piedras pesaban tanto que cayé al suelo muerto. Los tres estaban la mar de contentos. El cazador despellejé al lobo y se marché con la piel; la abuelita se comis el pastel, se bebié el vino que Caperucita le habia traido y se sintid muy restablecida. Y, entreranto, la nifia pensaba: "Nunca mis, cuando vaya sola, me apartaré del camino desobedeciendo ami madre” Y cuentan también que otro dia que Caperucita llevé tn asado a st anciana abuelita, un lobo intenté de nuevo desviarla de su camino. Mas la nifia se guardé muy bien de hacerlo y siguié derechita, y luego conté a la abuela que se habia encontrado con el lobo, el cual le habia dado los buenos dias, pero mirandola con unos ojos muy aviesos. — A buen seguro que si no llegamos a estar en pleno camino, me devora. —Ven —dijo la abuelita—, cerraremos la puerta bien, para que no pueda entrar. No tardé mucho tiempo en presentarse el muy bribonazo, gritando: MAbreme, abuelta soy Caperucita Roja que te traigo asado. Pero las dos se estuvieron calladas, sin abrir. El lobo dio varias vueltas a la casa, yal fin se subié de un brinco al tejado, dispuesto a aguardar a que la nifia saliese al anochecer para volver a casas entonces Ia seguiria disimuladamente y la devoraria en la oscuridad. Pero la abuelita le adivind las intenciones. He aqui que delante de la casa habfa una gran artesa de piedra, y la anciana dijo a la pequefa: — Agarra el cubo, Caperucita; ayer coci salchichas; ve a verter el agua en que las coci. Hizolo asi Caperucita, y repitid el viaje hasta que la artesa estuvo llena. El olor de las salchichas subié hasta el olfato del lobo, que se puso a husmear y a mirar abajo; al fin, alargé tanto el cuello que perdid el equilibrio, resbalé del tejado, cayé de lleno en la gran artesa, y se ahogé. Caperucita se volvid tranquilamente a casita sin que nadie le tocase ni un pelo. ©MATERIALES Cartén blando preferentemente marrén 0 crema, dos carvulinas blancas y/o tela blanca grande, iA velador o linterna potence (opcional) s relas pequefias de color rojo, verde, marrén, celeste, Aloreada, alguna peludita marrén oscura para el lobo, y cartulina negra. vellén color blanco y marrén oscuro y/o claro, cinco palitos de arbol de 20 cm de largo, cijeras, cinta adhesiva y cola vinilica, lapiz negro, Para nifios de 3 a 12 papel tisu blanco. aiios y sus padres. La idea de este trabajo es que lo realicen los padres con los nifios més grandes, para sorpresa de los pequefios, 0 los padres con los pequefos directamente. Vamos a armar por un lado los cinco titeres que necesitamos en el cuento: la madre, la nifia, la abucla, el lobo y el cazador, y, por otro lado, el escenario donde va a transcurrir el cuento. Para el escenario damos dos opciones. Una, es una cartulina dibujada con el recorrido desde la casa de caperucita hasta la casa de la abuela, con el bosque en medio. En este escenario los titeres se ven de frente con su ropa y detalles. La segunda opcién es colgar ung tela Blatica y; con un veflector 6 intern, pacer ult teanre desombeas, En esta opcién se ven solamente las sombras de los personajes sobre la tela blanca. SCAPERUCITA PROCEDIMIENTO PARA LOS PERSONAJES 4 2 2 4 S & Dibujar en el cartén la silueta de cada personaje de mas © menos 10 cm de alto (cada uno proporcional a los otros: Caperucita serd la mitad de pequefia que la mamé, mientras que la abuela sera de un tamafo intermedio entre ambas; el cazador y el lobo deben ser del mismo tamafio de Ja mam4). Es importante que Caperucita y cl lobo miren hacia la izquicrda como muestra el dibujo, mientras que la mama y la abucla miren a la derecha. El cazador debe estar de frente, Recortar y reservar a cada uno. En la tela roja, dibujar con lipiz la caperuza, proporcional al tamaio de la nifia, recortarla y pegarla con a cola vinilica a a silueta de la nifia. Al lobo, si conseguimos una tela o paito peludito marron oscuro, le cubrimos toda la silueta Al vestido de la madre, dibujarlo en alguna tela floreada o celeste, En otra tela hacer un pafiuelo para la cabeza. Recortar y pegar con la cola vinilica ala silueta de la madre. ‘Alla abucla le haremos un vestido con el tisue blanco y le pondremos vellén blanco como pelo, Recortar y pegar con la cola vinilicaa la silueta de la abucla, Al cazador le haremos el pelo y su bigote con vellén marrén, La eamisa y los pantalones con telas de distintos colores. El sombrero, las botas y la escopeta en cartulina negra. ‘Tomar uno de los palitos de drbol y pegarlo con cinta adhesiva al dorso de cada personajc.S Et t080ESCEPARO DEL CUEPTO PROCEDIMIENTO ESCENARIO 1 ‘Tomar una de las cartulinas y dibuyj del lado izquierdo la casa de Caperucita y su mami en el lado derecho, la casa de la abuela; y dibujar en medio cl bosque con drboles. Tomar la segunda carculina y recortar Ja forma como mucstea Ia ilustra alli dibujar las orecitas y piedras que ‘ay marcan el camino de una casa a la otra. Pegar esta segunda cartulina en la parte de abajo de la primera con la cola 7 BLE y 09° Seay oo of td z 4| ving loon los extremos derecho ¢ ic 020.0 © hie] inauiendo BY 9GOI COO S%S BOA] os ctisiteros deben pasar los personajes por el espacio que queda entre una cartulina y otra desde abajo. 1 CARTULINA, PROCEDIMIENTO ESCENARIO 2 — Colgar la tela lo mais tensa posible, de manera que quede a 20 cm del suelo, Poner detras, a dos metros, el velador o linterna. Aqui los titiriteros deben colocarse entre la luz del velador y la tela. Las sombras de los titeres se proyectaran en la tela. La habitacién donde se lleve a cabo debe estar oscura, Experamos que disfruten mucho esta actividad y si quieren mandarnos alguna foto de como les quedo haganlo a publicidadrevistainnata@gmail.com 0 a nuestro facebook: INNATA. iiMuchas gracias por leernos!!