HUESOS DE LA CABEZA o1 Resistencia del créneo. Papel de las suturas y de los orificios. Las suturas de la bé- veda eraneal, frontoparietal, biparietal y occipital son dentadas y estén de tal manera constituidas por inerustamiento reefproco de sus dentellones, que le da tan gran resis- tencia que una’ presién sobre la béveda eraneal de un adulto produce hundimiento 0 frac- tura, pero jamés la desunién de sus articulaciones. A los lados del eréneo las sutaras bi- seladas temporoparietal y esfenoparietal dispuestas por biseles alternos con direecién obli- eua de arriba abajo y de fucra a dentro le da tal resistencia, que a pesar de lo fragil de la escama temporal, ésta encuentra apoyo considerable en el arco cigomético, puente de resistencia con puntos de apoyo sobre el malar y el temporal. Con esta disposicién se admite que las suturas dentadas de la boveda se oponen a la separacién de los huesos del erdneo y que. las suturas con hisel alterno en las partes laterales del eréneo.se oponen al hundimiento de sus huesos. ¥ estén dispuestos. de tal manera que presentan zonas de resistencia mayor que alternan con zonas de menor resis- teneia, hecho anatémico que explica el porqué del sitio de algunas fraeturas de estos huesos. Las zonas de mayor resistencia son seis y constituyen los Mamados pilares del eré- neo, y son: 1* Anterior o frontal formada por Jos arcos superficiales y las gibas frontales. 2+ Posterior u occipital formada por las protuberancias occipitales, las erestas occipitales internas y externas y los rebordes del agujero occipital. 3° Anteroezterna u orbitoesfénoi- dal, también Hamada pilar o contrafuerte oblieuo anterior, formada por las alas mayores del esfenoides. 4° Posteroexternas 0 petromastoideas, también lamadas pilares 0 eontra- fuertes oblicuos posteriores. Estos pilares prolongados por la base del eréneo se eruzan obli« ‘cuamente de tal manera, que el arco petromastoideo de un lado se eontintia con el ares orbitoesfenoidal del Indo opuesto, y el luger de cruzamiento eorresponde al apétisis basi- lar que viene a ser el punto de apoyo o clave de la base del créneo, punto donde no se presentan fractures y a éste so le ha dado cl nombre de centro de resistencia de Félizet. Las zonas de menor resistencia estin comprendidas entre los arcos de resistencia y corresponden para la zona anterior a la béveda de la érbita y a la lamina cribada del et- moides; para la parte media a la fosa esfenotemporal, y para la etapa posterior a las fosas eerebelosas, correspondiendo estas zonas a los limites de los areos de resistencia, siendo en rigor las zonas fragiles 0 débiles Is fosas cercbrales y las fosas cerebelosas. Para explicar con ms claridad las porciones débiles de la base del erdneo, debe te- nerse presente la situacién de los orifivios de ésta, pues a los lados de la linea media se observan en la parte media y en la posterior: la hendidura esfenoidal, el agujero redondo mayor, el agujero oval, el agujero rasgado anterior, el agujero carotideo y el ugujero ras- gado posterior que constituyen lugares de menor resistencia y situacién frecuente de la Tinea de fractura de las denominadas fracturas paramedias; y si se tiene en cuenta los nervios que pasan por estes orificios se estimard la importancia clfniea que tiene la sin. tomatologia de estas fracturas. Peso y capacidad del craneo. Son variables segin las razas, los individuos y el sexo. Se calcula como peso promedio en la raza blanca 650 gramos en el hombre y 550 en la mujer, sin ineluir en dichas cifras el maxilar inferior, que pesa aproximadamente en- tre 85 y 100 gramos. La eapacidad del erdneo es en el recién nacido de 350 a 375 centimetros eibicos; di- cha capacidad se duplica y triplica a los 6 y 12 afios respectivamente, El promedio en el adulto es de 1 500c.c, en el hombre y de 1 350 en la mujer. En términos generales la eapaeidad craneal es mayor en los braquicéfalos que en los dolicocéfalos. La antropologia y la medicina legal aprovechan los datos de peso y eapacidad para identifiear el sexo a que corresponde un eraneo. Es de notar también, cuando se toma en ‘cuenta que Ia béveda eraneal esté constituida por el frontal, los parietales y el oceipital, se aprecia que la poreién frontal est4 més desarrollada en la mujer (erdneo de tipo fron- tal) que en el hombre, el cual presenta mayor desarrollo de la poreidn parietal. La curvatura frontal en la mujer es de radio menor que en el hombre por lo que la frente parece més saliente y prominente hacia delante; la glabela parece desaparceer,