Soy Norma Plaza de García, ecuatoriana. Ocupo el cargo de
Registradora Mercantil de Guayaquil, ganado por concurso, uno de los puestos mejor
A MENOS QUE HAYA
remunerados de la Función Judicial y quizás de la República.
OPOSICIÓN EL DOS DE DICIEMBRE SERÁ APROBADA LA
LEY DEL SISTEMA DE REGISTRO DE DATOS EN TÉRMINOS QUE AFECTARÁN NEGATIVAMENTE A LA CIUDADANÍA No estoy defendiendo mi puesto. Lo defendería al quedarme callada, y así permanecer en el cargo. Aún más, estoy convencida que tan pronto entre en vigencia esta Ley seré la primera que cancelarán por la oposición que he hecho a la Ley del Sistema de Registro de Datos. Soy la hija mayor del Dr. Carlos Luis Plaza Dañín, un ecuatoriano que amó a su Patria, y predicó con el ejemplo. Toda mi vida he querido seguir su senda. Tengo 67 años y no tengo ninguna ambición política. Me opongo a la Ley, no en su totalidad, porque tiene derecho el Estado de tener acceso a la información pública inmediatamente; lo que no puede, es poner al ciudadano desnudo ante los demás, mezclando información de distinta naturaleza, porque se lo prohíbe a los legisladores el Art. 136 de la Constitución. Tampoco puede poner en riesgo, ante la ola delincuencial que vive el país, el derecho a la vida, que estará en peligro una vez que se publique información confidencial como las declaraciones patrimoniales, que en otros países, como en España, se han eliminado, y estarían quienes declaren, sujetos a chantajes y extorsiones. Me opongo a que se vulneren los derechos de libertad de pensamiento y expresión (además del de prensa que es su consecuencia), que son propios del fuero íntimo de las personas, al clasificarnos según nuestra “etnia, estado de salud, orientación sexual, religión, creencias e ideología”, lo que también daría lugar a extorsiones y discriminaciones, violando el art. 11 de la Constitución. Lo que está resaltado debe ser eliminado. La novedad es que han añadido que son confidenciales esos datos privados que no tienen porqué tenerlos en un archivo público y cuyo “acceso sólo será posible con autorización expresa del titular de la información, por mandato de la Ley o por orden judicial”. “Por mandato de la Ley” se puede violar la Constitución, debido a la corrupción de algunos funcionarios públicos y a la concentración del poder. Uno de mis colegas registradores aconsejó que no había que resentir a los legisladores, oponiéndonos a esta Ley. Los legisladores no están para no ser resentidos, sino para servir al país. Todos deben tener conciencia que lo que ellos resuelvan afectará a todos sus conciudadanos sin excepción. Del artículo 14 que enumera los registros que constarán en la base de datos de la entidad que dependerá del Ministerio de Telecomunicaciones habría que eliminar la palabra “societario”, porque la información societaria está en los registros mercantiles, y lo que es privativo de las Intendencias de Compañías es la titularidad de las acciones de las compañías anónimas. Si no lo hacen, terminará la existencia de las compañías anónimas, lo que afectará a las inversiones e incidirá en la huida de capitales y falta de trabajo para los que vivimos en el país, y no tenemos intención de abandonarlo. Se legislará mediante reglamentos, según se infiere de la Ley, así que no sabemos totalmente el alcance de la reforma que se pretende y nos preocupa que pueda ponerse en peligro derechos humanos como la seguridad personal y a la intimidad. Por último, no es aceptable que la información sea emitida únicamente por la Dirección de Registros en Quito, sino debe poderse acceder a ella en cualquier lugar de la república donde haya la información relativa a ese cantón, y subsidiariamente en la entidad centralizada. LO ANTERIOR ES, PARA QUIENES HEMOS ESTUDIADO CON RESPONSABILIDAD SOCIAL ESTA LEY, ES LO ESENCIALMENTE GRAVE . Lo que sigue afecta a los registradores, por lo cual tiene menos importancia: “Los Registros (no determina cuáles) son dependencias públicas desconcentradas (en negrita el original), con autonomía registral y administrativa en los términos de la presente Ley y sujetos al control, auditoría y vigilancia (lo que significa que no tienen autonomía real, a menos que haya una razón que justifique la inspección) de la Dirección Nacional de Registro de Datos Públicos conforme se determine en el Respectivo Reglamento de la Ley”. La Constitución no manda una administración desconcentrada, sino descentralizada. El organismo dependiente del Ministerio de Telecomunicaciones que se pretende crear se denominará Dirección Nacional de Registro de Datos Públicos, tendrá facultad para crear registros, y se da a los alcaldes la misma facultad. Es decir se pretende una atomización ellos que podría derivar en un caos registral. Todavía podría la Comisión de de Régimen Económico y Tributario, que está conformada por: Lcdo. Francisco Velasco Andrade Presidente; Dr. Juan Carlos Cassinelli, Vicepresidente; Ab. Viviana Bonilla, Dra. Betty Amores, Lcda. Irina Cabezas, Srta. Vanessa Fajardo, Ing. Silvia Ron, Sr. Patricio Quevedo, Sr. Luis Noboa, Ing. Vicente Cedeño y Ec. Nicolás Lapentti volver a estudiar el texto, eliminar lo perjudicial al pueblo y volver enviar el proyecto al pleno. Ellos podrían hacer que el pueblo les agradezca por su trabajo, y no que los demande. Muy sinceramente, y sin dobleces, Norma Plaza Aray de García Riera CI 0900466806 Reenvíelo a sus contactos para que estén informados Cualquier comentario favor enviar a master@registromercantilguayaquil.com