SEXOLOGÍA JUEGOS ERÓTICOS

Juegos de rol
En medio del trabajo, la familia o estudios, los
adultos tienden a perder las ganas de jugar o
la imaginación para divertirse. La rutina es un
parásito que se impregna hasta en las actividades
más divertidas. Cuando salís a bailar con tu
pareja, suelen ir al mismo lugar, frecuentar
los mismos amigos, y siempre son ustedes
mismos. ¡Lo peor es que eso pase hasta en la
intimidad! Una buena forma de darle vida a los
momentos íntimos con tu pareja es asumiendo
roles, y acá te damos cuatro, para avivar tu
vida sexual y aplastar a la tan molesta rutina.

Cuando uno ya pasa mucho tiempo con alguien, las citas

El cuerpo humano es una obra de arte, y… ¿quién dice que
no se puede hacer arte sobre el arte? Comprale a tu pareja
pintura para dedos y conviértanse en pintor y modelo. En este
caso, el lienzo será tu cuerpo, y para pintar, solamente están
permitidos los dedos. Elijan poses y escenarios diferentes, pero
ya que la relación es estrictamente artística, sólo está admitida
la pintura. Cuando él termine su creación, es su deber limpiar el
“lienzo”. Ya verás que lo más probable es que no pueda esperar
a compartir contigo la ducha para sacarte toda la pintura.
suelen ser cosa del pasado. Mandale un mensaje de
texto a tu pareja (siempre decile que sos vos) e invitale a
cenar y a bailar. Contale qué ropa estás usando y qué te
vas a poner para la cita, y preguntale qué te quiere hacer
cuando te vea. Que el encuentro sea en un lugar diferente
al que suelen ir (si es que salen) o directamente sean más
creativos. Usen un tema, como los 60, los años 20, Hawái,
etc., y elijan un lugar donde pretendan que transcurre
esa época. Así los dos se divierten y se redescubren, y
cuánto más esperen para el sexo, más se desearán.

Estar con un extranjero o con alguien en el extranjero siempre
es emocionante. En este caso, convertite en la extranjera
en tu propio país por todo un fin de semana. Primero hay
que idearse un personaje, dándole nombre, profesión,
procedencia, etc. Mandale un email a tu pareja, avisándole
que estás por acá solo durante el fin de semana y alguien
te recomendó a él para que se encargue de enseñarte la
ciudad. En el transcurso de la semana, sigan mandándose
emails seductores, así cuando por fin se encuentren, no
aguanten más. Así a la hora y día indicados, debés asistir
impecablemente vestida o de acuerdo al personaje elegido. Si
vivís con él, no salgan juntos, pónganse un punto de encuentro.
Después pueden mezclar culturas al volver a la casa.
A veces, el sexo tiene que ser solo sexo para que se disfrute,
sin amor ni sentimientos de por medio. Jugá a ser una “dama
de compañía” y ofrecele a él tus servicios. Así podés explorar
cosas nuevas y desinhibirte completamente, porque es un
personaje que se presta para esas cosas. Imprimí una esquela
y dejale en el escritorio o en la heladera (obviamente, dónde
solo él la vea), describiéndote, algo muy estereotípico como:
“María, trigueña de ojos verdes. Servicio de acompañantes,
full service, lista para cumplir todas tus fantasías”. Cuando
por fin te llame para adquirir tus “servicios”, usá palabras
adecuadas, como “servicio completo” o “convencional” o un
“rapidito”. En todo lo que hagan, siempre exagerá lo que sentís.

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