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422. TEORIA SOCIOLOGICA CONTEMPORANEA constituye una forma de discurso que produce textos. En segundo lugar, la reas lidad empirica que analiza la teoria son los otros textos (entrevistas, datos cen- sales, cintas de video). En tercer lugar, el significado de los textos empiricos depende de su interpretacién desde cl punto de vista de los textos teéricos. Y finalmente, el estudio de los textos emp’ sién de otros tipos de analisis empiticos. Estas cuestiones nos llevan a otro aspecto central del posestructuralismo (y de! posmodernismo): su idea de la totalidad social. Mientras los posit: tas identifican un principio organizador supremo que unifica ¢l mundo, los poses- tructuralistas afirman que’ lo que caracteriza al mundo no es la unidad, sino la diferencia subyacente. La meta es, pues, el estudio de las diferencias mas que Ia busqueda de la unidad. Politicamente, esto Heva a los posestructuralistas a si- tuarse del lado de los grupos minoritarios (por ejemplo, los negros y las muje~ res) diferentes de los grupos mayorita ios. icos conduce a una mayor compren- Otra preocupacién del posestructuralismo (compartida por'el estructuralis- mo) es el descentramiento de! sujeto. Esto implica un rechazo del interés por el actor, por la conciencia del actor, por la subjetividad o, en términos mas gene- rales, por el humanismo (que constituyen las preocupaciones basicas de la so- ciologia existencial; véase mAs abajo). Dado el interés. por los textos, esto significa que el posestructuralista se concentra en Ia estructura interna del texto, Se considera que el autor del texto es mas © menos irrelevante. No son sus intenciones lo que cuenta, sino mas bien «el juego interno de los significantes» (Giddens, 1987: 207). En términos generales, esto supone que debemos centrar- nos en la estructura de la sociedad y no en el papel que desempefian los actores en la construccién de esa sociedad. ‘Analizaremos mas extensamente estas cuestiones en el Capitulo 13, donde estudiaremos con mas profundidad el posmodernismo, El resto de este apartado Jo dedicamos al analisis de 1a obra del principal pensador relacionado con el posestructuralismo, Michel Foucault (1926-1984). Las ideas de Michel Foucault ‘Aunque la influencia de la obra de Michel Foucault se extiende mas alla de los confines de la sociolog{a, es claro que hay sociologia (0 sociologias) en ella (Smart, 1985). Se trata de un cuerpo diverso de trabajo que incluye preocupa- Ciones metodolégicas (Foucault, 1966, 1969), estudios empiricos especificos sobre la locura y los hospitales (Foucault, 1965), la medicina y el nacimiento de a clinica (Foucault, 1975), el crimen y el sistema carcelario (Foucault, 1979) y el sexo y el control social de la sexualidad (Foucault, 1980, 1985). Es un cuerpo de trabajo relevante no s6lo para la teoria sociolégica, sino también para una variedad de subcampos dentro de la sociologia. Ademéas de ser'muy diversa, ‘obra de Foucault es también densa'y se presta a multiples interpretacion complejidad aumenta debido a Ia actitud deliberadamente clusiva del mismo Foucault: «No me preguntéis quién soy ni me pidais que sea siempre el mismo» la TEORIAS SOGIOLOGICAS ESTRUCTURALES | 423. (1969: 17), De hecho, Foucault no fue siempre el mism cambios que se produjeron en la trayectoria de su carrera. La obra de Foucault muestra diversas influencias tedricas (Smart, 1985). Esta variedad confiere atractivo a su obra y la hace dificil de analizar. Ademas, Foucault no adopta simplemente las ideas de otros, sino que las transforma a medida que las integra en su o1 ntacién tedrica inhabitual. Asi, la teoria de Weber de la racionalizacién constituye una influencia, pero para Foucault se encuentra s6lo en ciertos «lugares clave» y no constituye una «aula de hierro», pues siempre hay resistencia. Pueden identificarse ideas marxistas (Sman, 1983) en su obra, pero nuestro autor no s¢ limita a la economia, sino que se centra en varias instituciones. Le preocupa mas la «micropolitica del poder» que el tradi- cional interés marxista por el poder en el nivel societal. Practica la hermenéuti- caa fin de comprender mejor los fendmenos sociales de que se ocupa. Ademas, Foucault no cree en la verdad profunda y altima; hay siempre mas capas que retirar. Se percibe en su obra también tina influencia fenomenolégica, pero Foucault recha% la idea de un sujeto auténomo y dador de significado. Hay también un fuerte elemento de estructuralismo, pero no encontramos en su obra ningtin modelo normative formal que gobierne la conducta. Finalmente, y quizis lo mis importante, uit ado ‘poder y clconosimicala, pero analiza ese vinculo desde una perspectiva mas socioldgica que Nietzsche. Esta multitud de influencias teéricas constituye una de las razones por la que se considera a Foucault un posestructuralista. Como podremos apreciar en seguida, el estructuralismo influy profundamente en el obra temprana de Foucault, pero esa influencia tiende a disminuir en su obra madura, mds posestructuralista, Foucault es un tedrico que merece reconocimiento, y su obra seguir des- pertando en el futuro interés y atencién. En este apartado relativamente corto 8610 podemos proporcionar al lector un anélisis general de sus ideas, en el que estudiaremos en primer lugar su obra conceptual para luego examinar algunos de sus estudios especificos. En su obra temprana sobre metodologia, Foucault (1966) realiza una «ar- qucologia del saber. Su objeto de estudio son los cuerpos de conocimiento. fdeas y modos de discurso. Compara su atqueologia del saber con la historia y la historia de las ideas, a las que considera demasiado racionales y cree que con- fieren excesiya continuidad a la historia del conocimiento. Alan Sheridan man- tiene que la arqueologia del saber de Foucault implica la biisqueda de wun con junto de reglas de formacién que determina las condiciones de posibilidad de todo lo que se dice dentro de un discurso particular y en-cuaiquier momento dado» (1980: 48). Apreciamos aqui claramente la influencia del estructuralis- mo. Esta influencia se hace manifiesta también en el deseo de Foucault de estu- diar los eventos del discurso, las expresiones habladas y escritas. Se muestra patticularmente interesado por las primeras expresiones que se produren en I historia de un campo o disciplina. Su deseo es descubrir las condiciones basicas que-hacen posible el discurso. La unidad de estas expresiones, e! modo en que su obra refleja los ‘he 424 TEORIA SOCIOLOGICA CONTEMPORANEA Megan a formar una ciencia o una disciplina, no procede del sujeto, sino de ciertas reglas y practicas basicas del discurso, Concretamente, a Foucault le interesaban las précticas discursivas fundamentales que formaban la base del discurso cientifico, en particular en las ciencias humanas. Foucault abandonaria mas tarde este enfoque altamente estructural caracteristico de su obra temprana en favor de una orientacién posestructuralista, debido a que aquél no decia nada sobre la cuestién del poder y del vinculo entre saber y poder. Podemos captar perfectamente la orientacién posterior de Foucault (1969) cn la expresidn agenealogia del poder». Nuestro autor adopta claramente ideas, de Nietzsche, 2 quien se stele considerar un filésofo del poder. & Foucault le weocupa cl modo en que. isn tras my i a jo, Entre otras cosas, re~quael ima | convertir a las en sujeto: ~)2 ios mediante cl uso ocims THiica |a jerarquizacion del conocimien- to. Como Tas Tormas supremas de oceans (las ciencias) son las mas pode- rosas, son las mas susceptibles de critica, Foucault se interesa por las técnicas, las teenologias que se derivan del conocimiento (en especial del cientifico) y por el modo en que las utilizan diversas instituciones a fin de ejercer poder sobre las personas. Si bien cree que existen vinculos entre conocimiento y po- der, Foucault no identifica una conspiracién entre los miembros de la élite dela sociedad. Esta conspiracién implicaria actores conscientes, y Foucault suele centrarse en las relaciones estructurales, especialmente entre el conocimiento y el poder. En su analisis del desarrollo de la historia Foucault no concibe un progreso desde el salvajismo primitivo hasta una humanidad moderna basada en sistemas de conocimiento mas sofisticados. Foucault ve que en el transcurso d de la historia se abandona un sistema de dominacién (basado en el conocimien- to) por otro, y asi sucesivamente. Si bien esta es una perspectiva sombria, Foucault : ; Bee sas Jencia-contta.g). Foucault analiza ejemplos histdricos, pero Io que le interesa fundamentalmente es el mundo moderno. Como sefialé, «escribo la historia del presente» (Foucault, 1979: 31). Con estas ideas generales analicemos ahora algunas obras concretas de Foucault, En Historia de la locura en la época clasica (1965), Foucault practica una arqueologia del saber, en particular de la psiquiatria. La obra comienza con * el Renacimiento, cuando la locura y la raz6n no estaban separadas. Pero entre 1650 y 1800 (la época clisica) se establecié una distancia entre ellas y, en ltima instancia, la razén Hegé a vencer a la locura. En otras palabras, Foucault describe «la ruptura del didlogo» entre la razén y la locura (Foucault, 1965: x). Y describe ast el resultado: Aqui la razén reina en estado puro, triunfente por haber salido victoriosa frente a una enloquecida sinrazén. La locura fue asi arrancada de esa libertad imaginaria que atin le permitia florecer en cl horizonte del Renacimiento. No hacia mucho tiempo, se habia debatido sobre ella a plena luz del dia: en el Rey Lear y en Don TEORIAS SOCIOLOGICAS ESTRUCTURALES = 425 Quijote. Pero en menos de medio siglo fue secuestrada y, en la fortaleza de su confinamiento, ligada a Ia Razén, a las regias de la moralidad y a sus noches mo- nétonas. (Foucault, 1965: 64) He aqui una clara imagen weberiana de la jaula de hierro, las «noches mo- ndtonas» que pasa el «demente» (el irracional) en una jaula de hierro construi por los que tienen raz6n (racionalidad). La psicologia cientifica del siglo xix surgié finalmente de la separacién en- {re el demente y el sano que se produjo en el siglo xvii (la psiquiatria recibe la denominacién de «mondlogo de Ia razén sobre la locuran [Foucault 1965: xi]). Al principio era Ia medicina [a que se encargaba del tratamiento fisico y del demente, pero, mas tarde, la medicina psicolégica cientifica asum tarea. «Una medicina puramente psicolégica se hizo posible sélo cuando se juzgo culpable a la locuray (Foucault: 182-183). Mas tarde, sefiala Foucault, ‘alo qug denominamos practica psiquidtrica es cierta tactica moral que data de finales del siglo xvi, preservada por la vida del hospital y recubierta de los mitos del positivismo» (1965: 276), En consecuencia, para Foucault, la psicolo- gia (y la psiquiatria) constituyen una empresa moral, no un esfuerzo cientifico, que va contra los dementes, que san cada vez menos capaces de protegerse de esa «ayuda»: los dementes estin condenados por el llamado avance cientifico’a un «gigantesco encarcelamiento moral». . Es innecesario sefialar que Foucault rechaza aqui la idea de que en el trans- curso del tiempo hemos realizado avances cigntificos, médicos y humanitarios encl tratamiento de la locura. Lo que percibia, en cambio, era un incremento en la capacidad del sano y de sus agentes (médicos, psiedlogos y psiquiatras) para oprimir y reprimir a los locos, a quienes, no debemos olvidar, se les trataba igual que a los sanos en el siglo xvii. El desarrollo mas reciente consiste en que ahora estos agentes externos juzgan menos a los locos, «la locura es incesante- mente llamada a juzgarse a si misma» (Foucault, 1965: 265). En muchos senti- S Taro ‘que la arqueologia del saber de Foucault le conduce a conclusiones harto dife- rentes de las de los historiadores tradicionales sobre la historia y el estatus del demente y su relacién con el sano (y sus agentes). Adems, Foucault estudia las raices de las ciencias humanas (especialmente de la psicologia y la psiquiatria) en la distincién entre el demente y el sano y en el ejercicio del control moral sobre el demente. Esta idea fornia parte de su tesis mas general sobre el papel de las ciencias humanas en el control moral de las personas. Por lo que respecta al estructuralismo de Foucault cn su obra temprana. nuestro pensador sefiala que la jgcura ocurre en dos «niveles». en «glnivelanis rofundo, la locura constituye una forma de : 96). Exf concreto. Tocura, al menos en la época clasica, no implica cambios fisicos o mentale: antes bien, «el lenguaje del delirio es a verdad ultima de la locuran (Fouéaulk. 1965: 97). Pero en esta obra hay un estructuralismo atin mAs profundo: «Deje~ 426 — TEORIA SOCIOLOGICA CONTEMPORANEA mos que la cultura clasica formule, en su estructura general, la experiencia que tuvo de la locura, una experiencia que aflora con los mismos significados y en idéntico orden a su légica interna, tanto en el orden de la especulacién como en el de las instituciones, fantd’en el discurso como en el decreto, en el mundo y en el lema y, de hecho, alli donde un elemento significative puede suponer para nosotros el valor de un lenguajen (Foucault, 1965: 116; cursivas afiadidas). Foucault sigue utilizando un método estructuralista en El nacimiento de la clinica, donde se centra en el discurso médico y su estructura fundamental: «Lo quie cuenta en los pensamientos de los hombres no es tanto lo que han pensado, sino lo no pensado, que desde el comienzo del juego los sistematiza, haciéndo- los para el resto del tiempo indefinidamente accesibles al lenguaje y abiertos a la tarea de transformarlos» (1975: xiv;’cursivas afiadidas). En la Historia de la locura en la época eldsica, la medicina es una impor- {ante precursora de las ciencias humanas, y en El nacimiento de la clinica esta cuestién adquiere atin mas inyportancia. (Como Foucault sefialé, «La ciencia del hombre... esta médicamente... fundamentada» [1975: 36].) Antes del glo xix la medicina es none ciencia clasificatoria centrada cn un sistema claramente ordenado de enfert edades, Pero en el siglo xix la medicina comen- 26 a ocuparse de las enfermedades de los individuos, asi como del conjunto de la sociedad (epidemias), La medicina se extendié a las personas sanas (medic! na preventiva) y adopté una postura normativa al distinguir entre el sano y el enfermo y, mas tarde, entre estados normales y estados patolégicos. Lamedici-. sc convirtié asi_en precursora de las ciencias humanas que Hegarian a ado, sOnas, Pero hasta entonces no exisiia una estructura clinica en la medicina. La clave es el desarrollo de Ia clinica, donde los pacientes podian ser observados en camas. Aqui Foucault utiliza un término clave, la mirada, en este caso una sgnirada que repre: iento» (1975: 81). En otras palabras, gloom ocim ‘i fan, sno-deloqueleian.éntas Tibros. Como estructuralista, Foucault creia que la mirada era un tipo de lengua- Jer can lenguaje sin palabras» (1975: 68), y lo que le interesaba era la estructura profunda de ese «lenguaje». La eapacidad de ver y tocar (especialmente eri las autopsias) a personas enfermas (o muertas) supuso un cambio erucial y una fuente importante de “conocimiento. Foucault comenta sobre la autopsia, «la noche viviente se disipa en el esplendor de la muerte» (1975: 146). Foucault cree que la mirada anatémico-clinica supuso un «enorme cambio» en la medici. na occidental. De este modo no se produjo tanto una evolucién del conocimien- to como un cambio epistémico. Los doctores ya no jugaban a lo mismo; se trataba de un juego diferente con regias diferentes. El juego consistia en que Jas, personas (los pacientes).se_hab{an convertido en objeto de.conacimiento y de la racticn cientifica (en lugar, de la enfermedad como entidad), En los términos ee) orfentacién estructuralista, To que cambi6 fue la naturaleza del discurso, los nombres de las enfermedades, las clasificaciones, el campo de los objetos, etcétera (Foucault, 1975: 54). TEORIAS SOGIOLOGIGAS ESTRUCGTURALES — 427 Una vez mis la medicina adopta a los ojos de Foucault el papel de precurso- ta de las ciencias humanas, «Es comprensible, pues, que la medicina haya teni- do tanta importancia en la constitucién de las ciencias del hombre, una impor- tancia que no sélo es metodoldgica, sino ontolégica en el sentido de que concieme ala transformacién del hombre como objeto de conocimiento positive» (Foucault, 1975: 197). En concteto, Foucault sefiala acerca de la autopsia médica que «la muerte abandona su viejo paraiso tragico y se convierte en el niicleo lirico del hombre: su verdad invisible,’su secreto visible» (1975: 172). De hecho, para Foucault el cambioclave consiste en que el individuo se convierle ensuict toy. objeto de su propio conocimiento.y el cambio en la medicina no es otro que uno | ade Tos Tesfinionios mas v ibles de estos cambios en las estructuras fundamen= tales de la experiencia» (1975: 199). - En Vigilar y castigar (Foucault, 1979) yuelven a aparecer muchos de estos temas, pero esta obra se ocupa mas de la genealogia dél poder que del estructu- ralismo, del discurso, etcétera. Aqui «el poder y el conocimiento estan directa~ mente tmplicados uno en el otro» (Foucault, 1979: 27). Foucault analiza en ese <.- trabajo el periodo que media entre 1757 y la década de 1830, durante el cual se ituyd la tortura de los prisioneros por el control mediante normas carcela-_ a un desarrollo irregular, no de una evolucién racional.) Su idea general es que esta sustitucion representé una humanizacién del trato que recibian los crimina- les; este trato se hizo menos desagradable, doloroso y cruel. Desde el punto de vista de Foucault, la realidad fue que clcastimese racionaliza («el verdugo [en la guillotina] debia ser simplemente un vigilante meticuloso» [1979: 13]). y Hegé a ser mas eficaz con los prisioneros. La antigua tortura de los prisioneros solia.demostrarse piiblicamente, pero constituia una «mala economia del po- der» porque tendia a suscitar desasosiego entre los espectadores (Foucault. 1979: 79). El vinculo entre el conocimiento y el poder se manifestaba claramente en la tortura y, con el desarrollo de normas, ese vinculo se oscurecid. El nuevo siste- ma de reglas era «mas regular, mds eficaz, mas constante, y sus efectos eran mas concretos; en suma, ese cambio aumento los efectos del castigo y disminu- y6 sus costes econémicos» (Foucault, 1979: 80-81). El nuevo sistema no pré=—— tendia ser mas humano, sino «castigar mejor... insertar mas profundamente en el cuerpo social el poder de castigar» (Foucault, 1979: 82). A diferencia dela tortura, estan: eva tecnologia del podersie-castizar se produciaaLcomienza de} fos ctimin: jo.tambien-defoda la sociedad. : asta nueva tecnologia, una tecnologia del. poder disciplinario, estaba basa- da en el modelo militar. No implicaba un sistema de poder anico y omnicom- Prensivo, sino un sistema de micropoderes. Foucault describe una «microfisica del poder» con «innumerables puntos de enfrentamiento» (1979: 26-27). Iden- lificagtres ins i ia} El primero es la yigilancia je- Hitguica, 0 la capacidad de los funcionarios de vigilar todo lo que esta bajo su [formatidad y Ta moralidadet prisionero. Finalmente, esta capa 428 — TEORIA SOCIOLOGICA CONTEMPORANEA controLcon una simple mirada. El segundo es la capacidad de imponer gaucio- gesodrinalataaloeecy GanaE: 0 los que violai las normas, De tate tnado, el. guien podria ser juzgado negativamente y castigado pér cuestiones relativas al tiompo (por llegar tarde), relativas a la actividad (no prestar atencién) y a la conducta (ser maleducado). El tercero es el sa del exazten para observar a los sujetos e imponer sanciones normalizadoras sobre las personas. El tercer instru- mento del poder disciplinario implica los otros dos. Foucault no adopta una postiira negativa por lo que réspecta al crecimiento de la sociedad disciplinaria; también Je atribuye consectiencias positivas. Por ejemplo, cree que la disciplina funciona bien dentro de las fabricas industriales y del ejército. No obstante, Foucault nos trasmite su temor a la extensi6n de esa disciplina, especialmente dentro de Ja red policial estatal para la que toda la ci i rcepcidn. i Foucault no piensa que la disciplina esté extendida uniformemente por toda la sociedad, Antes bien, cree que «hormiguea» e influye en pequefias partes de Ja sociedad. Pero finalmente, las principales instituciones caen bajo su influen- cia. Foucault se pregunta retéricamente: ges sorprendente que las prisiones se asemejen a las fabricas, las escuelas, los cuarteles, los hospitales, y que todas estas instituciones se parezcan a las prisiones? (1979: 228). Al final, Foucault ve el desarrollo de un sistema carcelario en el que ‘a discipline seuasladacless unto del c 979: 298). Si bien entre- vemos aqui una imagen de la jaula de hierro Srenediats Foucault cree, como siempre, en la existencia de fuerzas que se oponen al sistema carcelario; existe una dialéctica estructural constante en la obra de Foucault. Aunque en Vigilar y castigar Foucault se ocupa de la cuestién de! poder, en este trabajo encontramos también el tema recurrente en su obra de la emergen- Gia de las ciencias humanas. La transicién de la tortura a las normas carcelarias constituye un cambio del castigo corporal al castigo del alma o la voluntad. Este cambio, a su vez, entrafia consideraciones sobre la moralidad y la normalidad. iad para juz- gar Se extiende a otros «jueces de orden menor» tales como psiquiatras y educa- dores. De aqui surgen los nuevos cuerpos de conocimiento cientifico penal, y estos constituyen la base de! «complejo cientifico-legaly moderno, En el nuevo modo de subordinacién las personas se definen como el objeto del conocimien- to, del discurso cidhtifico. La cuestién clave es que las ciencias humanas mo- demas encuentran sus raices aqui. He aqui la amarga descripcién de Foucault de las raices disciplinares de las ciencias humanas: eeaseieae paladeado tanto nuestra “humanidad” durante casi ui Siglo, tiensy su inateiz” isciplinas y sus invest aciones» (1979: je las cuestiones analizada en Vigilary castigar merece ser menciona- da aqui teresa por el mod logins quecjercenelpadertn este contexto analiza el Pandptico. ElZandatico TEORIAS SOCIOLOGICAS ESTRUCTURALES - 429 ongtiluye una estructura que permite a los funcionarios una observacién co de-Tos-cciminales. De hecho, los funcionarios no necesitan estar siempre presentes; la simple existéncia de la estructura (y la posibilidad de que los fun- cionarios estén en ella) constrifie a los criminales. El Panéptico tiene una torre en el centro de una prisién circular desde 1a que los guardias pueden observar el * interior de todas las celdas. El Pandptico constituye una enorme fuente de poder para los funcionarios de prisiones, ya que les da la posibilidad de una vigilancia completa. Y lo que’es mas importante, su poder es enorme porque los prisione- ros llegan a’controlarse a si mismos; dejan de hacer varias cosas por temor a ser vistos por los guardias. Aqui podemos apreciar un claro vinculo entre el cono: miento, la tecnologia y el poder. Ademas, Foucault vuelve a su preocupacién por las ciencias humanas, ya que sefiala que el Pandptico es un tipo de laborato- rio que facilita la recogida de informacién sobre las personas. Representa el precursor del, laboratorio socio-cientifico y de otras técnicas de las ciencias sociales para reunir informacién sobre las personas. Y en otro sentido, Foucault pti cde « iedady (1979: 216), dea ssocicdad disciplinaria ’. Ocupémonos finalmente del primer volumen de la Historia de la sexualidad Foucault, 1980). En él Foucault vuelve a centrarse en la genealogia del poder. Para Foucault la scxualidad es un «punto de transferencia especialmente denso para las relaciones de poder» (1980: 103). Se traza la meta de «definir el régi- men de poder-conocimiento-placer que mantiene el discurso de la sexualidad humana en nuestra parte del mundo» (Foucault, 1980: 11), Examina el modo en que el sexo se introduce en el discurso y el modo en que el poder impregna discurso, -Foucault disiente de la idea convencional de que el victorianismo condujo a la represion de la sexualidad en general y del discurso sexual, en particular. De . hecho eree exactamente lo contraria: que la época victoriana condujo a una explosién de los discursos de la sexualidad. Una de las consecuencias del vicio- tianismo fue que se produjeron mas andlisis, evaluaciones, clasificaciones, des- cripciones y estudios cuantitative-causales de la sexualidad. Foucault sefal «Las personas se preguntaran a si mismas por qué ibamos a estar tan dispuestos a acabar con la regla del silencio en lo que concierne a la mas ruidosa de nues- tras preocupaciones» (1980: 158). Esto sucede especialmente en las escuelas. donde en lugar de la represién de la sexualidad «la cuestién del sexo era una preocupacién constante» (1980; 27). He aqui el resumen que hace Foucault de la hipétesis victoriana y su opinié Por tanto, debemos abandonar la hipétesis de que fas sociedades industriales mo- dernas entraron en una época de creciente represién sexual. No slo hemos presen- ciado una explosién visible de las sexualidades no ortodoxas... sino que nunca han ' Si se desea estudiar un uso interesante de esta idea véase ZubofT (1988), quien cree la computadora es un Pandptico moderno que ofrece a los superiores una vigilancia ili sobre los subordinados. 430 TEORIA SOCIOLOGICA CONTEMPORANEA existido tantos centros de poder; nunca se le ha dedicado mas atencién y se le ha verbalizado més... nunea ha habido mas silios donde poder asirse a ia intensidad de los placeres y a ka persistencia del poder, para luego difundirse por todas partes. ult, 1980: 49) (Fouca De nuevo Foucault asigna un lugar especial a a medicina y a sus discursos sobre la sexuatidad, Micntras que en opinion de muchos pensadores la medicina orientada hacia cl andlisis cientifico de la sexwalidad, Foucault identifica Jas preocupaciones de In medicina mas moralidad que ciencia. (De hecho, Foucault critica con dureza la medicina, ya que erce que el objeto de su discurso «no es establecer In verdad, sino evitar su cmerzencia» [(1980: $5].) En la mo- ralidad de Ia sexualidad se encuentra implicada también Ia religidn, especial- mente cl cristianismo occidental, la confesién y su necesidad de que el sujcto diga la verdad sobre Ia sexualidad. Todo esto guarda relacion con las ciencias humanas y su interés por obtener conocimiento acerca del sujcto. Del mismo modo que las personas se confiesan con sus sacerdotes, también se confiesan con sus doctores, sus psiquiatras y sus socidlogos. La conti la confesidn sexual, se cubre de términos cientificos En occidente, «el proyecto de la ciencia del s idn, especialmente jjeto ha gravitado. en circulos cada vez mas pequenos, alrededor de la cuestion del sexo» (Foucault, 1980: 70). Las preguntas formuladas acerca de quiénes somos han contenido cada vez més la cuestién del sexo. Foucault lo resume asi: «El sexo lo explica todo» (1980: 78). En lugar de ocuparse de la represion de la sexwatidad, Foucault afirma que cl estudio cientifico del sexo debe centrarse en la relacién entre el sexo y el poder. De nuevo, esc poder no reside en una iinica fuente central; reside en una varicdad de microlugares, Ademas, como siempre, Foucault afirma que existe la resistencia a la imposicién del poder sobre el sexo. El poder y la resistencia al poder estan en todas partes Antes del siglo xvi Ia sociedad se esforzaba por ejercer control sobre la muerte, pero a principios de ese siglo se comenzé a controlar la vida, especial- mente él sexo, El poder sobre la vida (y el sexo) adopté dos formas. Primera, se encarné cn la eanatomia politica del cuerpo humano», cuya meta era disciplinar cl cuerpo humano (y sui sexvalidad). Y segunda, en la «biopolitica de la pobla- cién» cuyo objetivo era controlar y regular el crecimiento, la salud, la esperanza de vida eteétera de la poblacién, En ambos casos, la sociedad legé a percibir la «vida como un objeto politico» (Foucault, 1980: 145). El sexo era central en ambos casos: «El sexo era un medio de acceso tanto a la vida del cuerpo como ala vida de la especien (Foucault, 1980: 146). En el occidente moderno, el sexo ha adquirido mayor importancia que el alma (y ya sabemos la importancia que tiene en la obra de Foucault) y es casi tan importante como la vida. A través del conocimiento de la sexualidad, la sociedad ejerce més poder sobre la vida. Peto a pesar de este aumento de control, Foucault no pierde la esperanza de 1a eman- cipacion: TEORIAS SOGIOLOGICAS ESTRUCTURALES © 431 Debemos romper con la accién del sexo si queremos enfrentarnos —mediante la inversidn tictica de los diversos mecanismos de la sexualidad— a las garras del poder con sus demandas de cuerpos, placeres y conacimientos, en su multiplicicdad y su posibilidad de resistencia, El blanco de Ataque contra cl desarrollo de la sexu lidad no debe ser el deseo sexual, sino los cuerpos y los placeres. (Foucault, 1980; 157) La obra de Foucault, asi camo cl trabajo posestructur realizando en la actualidad, ofrece un cortiente principal de la tea: lista que se viene uevo e interesante conjunto de ideas a la sociologica ANTIESTRUCTURALISMO Una vez analizados el estructuralismo y cl posestructuralismo, nos sera de gran utilidad-examinar dos perspectivas tedricas —Ia saciologia existencial y la teo- tia de sistemas— que, en muchos sentidos, pueden describirse como antiestruc, turalistas. El cardcter basico de estas teorias antiestructuralistas nos proporcio- nara una idea de la debilidad del estruciuralismo. La sociologia existencial representa el tipo caracteristico de perspectiva humanista y subjetivista recha- zada por ¢l estructuralismo y el posestructuralismo. La teoria de sistemas ofre- ce una visién mas procesual que estructural del mundo social, Sociologia existencial La sociologia existencial es «el estudio de la experiencia humana en el mundo. en todas sus formas» (Douglas y Johnson, | 977: vii; para una definicion similar. véase Fontana, 1984). Se orienta hacia el estudio del modo en que vive. sicnte piensa y acttia la gente. Asigna especial importancia a los sentimientos y las embciones, asi como a la «naturaleza problematica y localizada de la experien- cia significativa» (Douglas y Johnson, 1977: xiii). La aceptacién de esta idea implica el rechazo de cualquier visién monocausal (por ejemplo. estructural) de la vida humana, Para la sociologia existencial. «el hombre es variable. altera- ble, inseguro, conflictivo y parcialmente libre de clegir lo que hard v sera. © debe ser asi para existir en un mundo variable, alterable, inseguro y conMictivo: (Douglas, 1977: 14). Esta frase nos sugiere uno de los temas dominantes de 12 sociologia existencial: las personas son libres v, al tiempo. estan constrenidas ta idea, asi como otros muchos aspectos de la sociologia existencial. s2 deriva de la obra de Jean-Paul Sartre, fildsofo y novelista francés. Los socidle- gos consideran particularmente importante el esfuerzo de Sartre por relacionar la libertad individual y las constricciones societales. Sartre intenté flsionar en un todo dialéctico sus tempranos intereses fenomenoldgicos con sus posteriores Preocupaciones marxistas. En opinién de lan Craib (1976), el pensamiento é: Sartre evolucioné, En su obra temprana Sartre se centré en el nivel individua

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