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MANDUJANO SALVADOR y GALLINA SONIA.

DINÁMICA POBLA-
CIONAL DEL VENADO COLA BLANCA (ODOCOILEUS VIRGINIANUS)
EN UN BOSQUE TROPICAL SECO, CAP. 29: 317-330. En: SÁNCHEZ-
CORDERO V. y MEDELLÍN R.A. (Eds.) CONTRIBUCIONES MASTO-
ZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VILLA, 500 p. Instituto
de Biología e Instituto de Ecología, UNAM, México, 2004. ISBN
967-3422-44-9.

29. DINÁMICA POBLACIONAL DEL VENADO COLA BLANCA


(ODOCOILEUS VIRGINIANUS) EN UN BOSQUE TROPICAL SECO

SALVADOR MANDUJANO Y SONIA GALLINA

Departamento de Ecología y Comportamiento Animal, Instituto de Ecología A. C.

Resumen Abstract

Se analiza la dinámica poblacional del venado cola blanca We analyzed the population dynamics of the white-tailed
(Odocoileus virginianus) en el bosque tropical seco de deer (Odocoileus virginianus) in the tropical dry forest at
“Chamela” en Jalisco, México, de 1989 a 1993. Los datos “Chamela” in Jalisco, México, from 1989 to 1993. Popu-
poblacionales se obtuvieron con el método de conteo diur- lation data were obtained from direct diurnal counting
no de venados en transectos. Se contaron un total de 363 along transects. We counted a total of 363 individuals in
venados en 813 km. La densidad varió de 11 a 14 vena- 813 km. Population density fluctuated from 11 to 14 in-
dos/km². La tasa finita de crecimiento poblacional fue 0.99 dividuals/km². The finite rate of population increase was
y estuvo inversamente relacionada con la densidad. Las 0.99 and it was inversely related with population density.
tasas de fecundidad fueron de 0.45 crías por individuo en Fecundity rates were 0.45 foe per individual in the popu-
la población y de 1.0 crías por hembra adulta. Del total de lation, and 1.0 foe per adult female. Of the total number
hembras, el 35% fueron hembras jóvenes y no se obser- of females, 35% were young females, and they were not
vó a ninguna acompañada de crías. Del total de hembras observed with foes. Of the total number of adult fema-
adultas, el 35% se observaron sin crías. Las tasas de les, 35% were not observed with foes. Survival rates were
sobrevivencia fueron de 54% para todos los individuos 54% for all individuals in the population, 79% from foes
en la población, del 79% de crías a juveniles y del 63% de to juveniles, and 63% from juveniles to adults. Mortality
juveniles a adultos. La tasa de mortalidad dependió posi- rates were positively related to population density, while
tivamente de la densidad, mientras que hubo tendencia fecundity rate was inversely related to population densi-
negativa entre la tasa de fecundidad y la densidad. El punto ty. The sustainable capacity- the equilibrium between fe-
de equilibrio entre las tasas de fecundidad y mortalidad, cundity and mortality rates- was estimated at 12
la capacidad de sustento, se estimó en 12 venados/km². individuals/km². We propose that a succession of conse-
Se propone que una sucesión de años muy secos aunado cutive dry years along with hunting of adults females can
a cacería de hembras adultas, deberán tener como conse- lead to a rapid decrease in population size; thus, a careful
cuencia una rápida disminución en el tamaño de la pobla- protection of this tropical dry forest reserve is much re-
ción por lo que habrá que incrementar la vigilancia en esta quired.
área de reserva de bosque tropical seco.
Key words: White-tailed deer, density, increase, fecun-
Palabras Clave: Venado cola blanca, densidad, crecimien- dity, ssurvival, tropical dry forest, Chamela, Jalisco,
to, fecundidad, sobrevivencia, bosque tropical seco, México.
Chamela, Jalisco, México.
318 CONTRIBUCIONES MASTOZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VIELA

Introducción Debido a su amplia distribución geográfica, des-


de el sur de Canadá hasta el norte de Brasil y centro
La dinámica poblacional de ungulados es afectada de Perú, el venado cola blanca (Odocoileus
por una combinación de factores ambientales y den- virginianus) habita diferentes tipos de comunida-
so-dependientes (Sæther 1997; Bonsall et al. 1998). des vegetales que se caracterizan por su marcada
Entre los ambientales está el clima (Picton 1984; estacionalidad en la disponibilidad de recursos. La
Langvatn et al. 1996; Post y Stenseth 1998 ), la dis- mayoría de los estudios sobre dinámica poblacional
ponibilidad de alimento (Sinclair et al. 1985; de esta especie se han realizado en hábitats templa-
Choquenot 1991, Sæther et al. 1996), la depreda- dos y semiáridos (por ejemplo, McCullough 1979;
ción (Skogland 1991) y la cacería (Dusek et al. 1992). Gavin et al. 1984; Nelson y Mech 1986; Dusek et al.
Estos factores determinan aspectos como las con- 1989; Fuller 1990; Nixon et al. 1991; Van Deelen et
diciones físicas de las hembras previo al apareamien- al. 1997). En contraste, prácticamente no hay nin-
to y durante la gestación (Sams et al. 1996), la fecha gún estudio sobre la dinámica poblacional de esta
de nacimiento de las crías (Carrol y Brown 1977; especie en hábitats tropicales. En particular, el ve-
McGinnes y Downing 1977), el peso de los cervati- nado cola blanca subespecie O. v. sinaloae es resi-
llos y su vulnerabilidad a enfermedades y a la depre- dente del bosque tropical seco en la costa del Estado
dación (Cook et al. 1971; Guinness et al. 1978; de Jalisco. Esta vegetación se caracteriza por un
Fairbanks 1993), las necesidades nutricionales para notable contraste en la fenología de las plantas a lo
el crecimiento y acumulación de grasas de los ani- largo del año causado principalmente por la marca-
males jóvenes (Robbins y Moen 1975, Verme y da estacionalidad en el régimen de lluvias, lo cual
Ozoga 1980). Además influyen en la vulnerabilidad origina una época húmeda y una seca de seis a siete
a la depredación de los machos jóvenes en proceso meses de duración (Bullock 1986). Esto influye so-
de dispersión (Holzenbein y Marchinton 1992 ), la bre la composición florística, fenología y biomasa
edad a la que alcanzan la madurez sexual los anima- arbórea (Lott et al. 1987; Bullock y Solís-Magallanes
les (Sæther y Heim 1993; Festa-Bianchet et al. 1995), 1990). Por lo tanto, este tipo de hábitat para el ve-
el peso corporal y el crecimiento de las astas en los nado se caracteriza por una marcada variación espa-
machos (Solberg y Sæther 1994; Smith 1998) y las cial y temporal en la biomasa foliar disponible, el
condiciones generales de los individuos y la pobla- valor nutritivo de las plantas y la disponibilidad de
ción (Kaji et al. 1988). A su vez, estos factores pue- fuentes de agua (Mandujano y Gallina 1995a;
den estar influenciados por mecanismos que Mandujano 1999; Silva-Villalobos et al. 1999). Los
dependen de la densidad los cuales operan cuando cambios en la vegetación además determinan la co-
la población alcanza la capacidad de carga (Sams et bertura de protección contra las temperaturas ex-
al. 1996) y por el comportamiento social de los in- tremas y de protección contra depredadores como
dividuos (Clutton-Brock et al. 1982; Ozoga et al. el puma (Puma concolor) y el jaguar (Panthera onca)
1982). En particular, en ambientes estacionales la (Núñez et al. 2000).
dinámica poblacional está influenciada por factores A partir de 1989 iniciamos un estudio sobre el
denso-independientes determinados por las condi- venado cola blanca en la Estación de Biología
ciones climáticas lo cual influye en el alimento “Chamela” en Jalisco. El objetivo principal del es-
(Sæther 1997). En hábitats templados la época crí- tudio fue conocer las estrategias a nivel individual y
tica sucede durante el invierno lo cual determina demográfico que el venado tiene para enfrentar la
temperaturas ambientales muy frías y baja accesibi- variación estacional y espacial del bosque tropical
lidad al poco alimento debido a la acumulación de seco. Son cinco los aspectos que guiaron esta inves-
nieve (Picton 1984; Mech et al. 1987; Langvatn et tigación. El primero fue el referente a la variación
al. 1996; Post y Stenseth 1998); mientras que en estacional de los recursos vegetales, el valor nutriti-
semiáridos y algunos tipos de hábitats tropicales, el vo de las plantas (Silva-Villalobos et al. 1999) y la
periodo crítico sucede durante la época seca cuan- disponibilidad de agua en el hábitat (Mandujano y
do hay escasez de agua y las plantas tienen baja cali- Gallina 1995a). El segundo fue sobre el uso del
dad nutricional y baja biomasa en pie (Coe et al. hábitat (Mandujano et al. 1997), el área de actividad
1976; Smith y Lecont 1979; Sinclair et al. 1985; (Sánchez-Rojas et al. 1997), el tamaño y composi-
Owen-Smith 1990; Freeland y Choquenot 1990). ción de los grupos (Mandujano y Gallina 1996) y
DINÁMICA POBLACIONAL DEL VENADO COLA BLANCA (ODOCOILEUS VIRGINIANUS) EN UN BOSQUE TROPICAL SECO 319

las estrategias de forrajeo (Arceo, en preparación). El intervalo altitudinal es de 30 a 580 m. La tempe-


El tercero fue referente a los métodos para estimar ratura media anual es 25 °C, con los meses más ca-
la densidad poblacional (Mandujano y Gallina 1993, lientes entre mayo y septiembre (Bullock 1986). La
1995b). El cuarto, fue sobre las interacciones precipitación promedio anual de 1977-1997 fue de
ecológicas del venado con el árbol Spondias purpurea 748 mm (SD = 119 mm). La temporada de lluvias
(Mandujano et al. 1994; Mandujano y Martínez- inicia la última semana de junio, y de julio a octubre
Romero 1997; Barranco 2000). Mientras que el quin- cae el 80% de la lluvia anual y tiene una duración
to fue sobre el análisis de la variación temporal de la media de 126 días (Fig. 1). Durante la época seca
densidad poblacional (Mandujano 1999). Particu- cae el 20% de la lluvia anual y tiene una duración
larmente, Mandujano et al. (2002) hacen una sínte- media de 158 días (Bullock 1986). La variación anual
sis de la mayoría de estos estudios. Con estas en el patrón de precipitación está influenciada por
investigaciones se pretende conocer cuál es el po- los vientos alisios y los ciclones del Pacífico (García-
tencial y los factores que limitan del crecimiento Oliva et al. 1991). Los primeros explican parte de la
poblacional de este herbívoro en el bosque tropical variabilidad anual de la lluvia que cae en junio y ju-
seco. En el presente capítulo se presenta de manera lio; mientras que los ciclones explican la variación
detalla los resultados no publicados acerca de la di- de la lluvia entre agosto y octubre, además de tener
námica de la población del venado durante el perio- gran influencia en la probabilidad de precipitación
do 1989-1993, a partir del análisis de los cambios en de diciembre a marzo. El año puede ser definido más
algunos parámetros demográficos. adecuadamente desde una perspectiva del venado
considerando el mes cuando habitualmente cae la
Área de estudio primera lluvia importante como el inicio del año.
Por lo tanto, en el presente estudio se consideró el
El trabajo se realizó en la Estación de Biología inicio del “año biológico” a partir de julio y el final
«Chamela» de la UNAM, situada en la costa de Jalis- en junio del año siguiente.
co, México (19°30’ N y 105°00’ W). La Estación tie- La vegetación dominante es el bosque tropical
ne una extensión de 3600 ha y se caracteriza por seco el cual se localiza en lomeríos con suelos so-
una topografía irregular, con pendientes de 21 a 34. meros. El estrato arbóreo varía entre 4 y 15 m de

Fig. 1. Patrón de precipitación mensual del periodo 1977-1997 en la Estación de Biología “Chamela”, Jalisco, México.
320 CONTRIBUCIONES MASTOZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VIELA

altura, y presenta un sotobosque bien desarrollado. donde Di es la densidad mensual, Li es el largo total
Numerosas especies arbóreas y arbustivas pierden de los transectos en cada mes y R es el número de
sus hojas durante la época seca (Lott et al. 1987). meses muestreados durante cada año. La varianza
Algunas de las especies más comunes son Cordia de la estimación de la densidad anual se calculó
alliodora, Croton pseudoniveus, Lonchocarpus lan- como:
ceolatus y Caesalpinia eriostachys. También se en-
cuentra el bosque tropical subcaducifolio el cual se R
desarrolla a lo largo de los arroyos principales, en ∑ L (D − D)
i i
2

los lugares protegidos sobre suelos profundos, y el Var( D) = i =1

estrato arbóreo tiene una altura de 10 a 25 m. Las L( R − 1)


especies más comunes son: Thouinidium decan-
drum, Astronium graveolens, Brosimum alicastrum 2. Detección de cambios y tendencia en la abun-
y Sideroxylon capiri (Lott et al. 1987). dancia. La abundancia poblacional anual (N) se es-
timó como el producto de la densidad de venados
Métodos de cada año multiplicado por las 500 ha donde se
realizaron los muestreos. La estimación de la
1. Estimación de la densidad. El estudio se realizó varianza total (Vartotal) de la abundancia incluye la
en aproximadamente 500 ha dentro de la Estación variación temporal (Vartemporal) y la variación asocia-
de Biología que corresponde al área reservada para da al muestreo (Varmuestreo) (Link y Nichols 1994).
trabajos de investigación. Para estimar la densidad Por lo tanto, es muy probable que los límites de
poblacional se empleó el método de conteo directo confiabilidad para la estimación anual de la abun-
de venados en transectos. Se establecieron de 5 a 8 dancia puedan ser altos y por consiguiente, no se
transectos en los caminos. El largo total de los puedan detectar cambios de un año a otro debido a
transectos varió entre 6 y 11 km cada mes. Los una variación temporal real en el tamaño de la po-
transectos fueron caminados por una persona entre blación. Entonces, para eliminar ese posible efecto
las 07:00-12:00 h y 16:00-19:00 h, dos o tres veces se prosiguió a remover el efecto de la variación aso-
cada mes. Todas las observaciones fueron agrupa- ciada al muestreo mediante las fórmulas propuestas
das en cuatro clases de distancias perpendiculares: por Thompson et al. (1998), como:
0-10 m, 11-20 m, 21-30 m, y 31-40 m. Los datos
fueron colectados durante las épocas húmeda y seca R
de 1989 a 1994.
La densidad (D, venados/km²) se calculó como:
∑( N i − N )2
Vartotal = i =1
( R − 1)
nf (0)
D=
2L donde N es la abundancia anual, Ni es la estimación
de la abundancia mensual, y R el número de meses
donde n es el número de venados, f (0) es la función muestreados. Para remover el efecto de muestreo se
probabilística de densidad a 0 m de distancia per- prosiguió como:
pendicular y L es el largo total (km) del transecto.
Para estimar f (0) y el error estándar, se usó el mo- R
delo basado en la serie de Fourier con el programa
TRANSECT (Burnham et al. 1980).
∑ Var i
Vartemporal = Vartotal − i =1

La densidad anual se estimó como: R

R
donde Vari es la varianza de muestreo mensual.
∑L D i i
Para estimar diferencias en la abundancia de la
D= i =1
R población entre años sucesivos, se empleó la prueba
∑L
i =1
i de Z con transformación logarítmica (Thompson et
al. 1998), como:
DINÁMICA POBLACIONAL DEL VENADO COLA BLANCA (ODOCOILEUS VIRGINIANUS) EN UN BOSQUE TROPICAL SECO 321

vo implica que la estructura de edades se mantuvo


ln( Nt ) − ln( Nt +1 )
Z= relativamente estable. Por otro lado, para estimar
Var[ln( Nt )] + Var[ln( Nt +1 )] diferencias en la proporción de hembras y machos
entre años consecutivos, se empleó la prueba de Z
donde Nt+1 es la abundancia del siguiente año, Nt es (Zar 1984) como:
la abundancia del año anterior y Var[ln(N)] =
Var(N)/N². Para conocer la tendencia en la densi- Pt − Pt +1
Z=
dad poblacional de 1989 a 1993, es decir si hubo un pq pq
+
patrón de crecimiento continuo, se empleó una re- nt nt +1
gresión lineal simple entre la densidad y el tiempo
(Thompson et al. 1998). donde Pt es la proporción de hembras en el año t,
3. Estimación de la tasa de crecimiento poblacional. Pt+1 es la proporción de hembras en el año t + 1, p
Debido a que el crecimiento de la población de ve- es la proporción de hembras de los años t y t+1, q es
nados no es continuo a través del año sino discreto, la proporción de machos de los años t y t + 1, nt
se calculó la tasa finita de crecimiento (8, lambda) es número total de hembras y machos en el año t, y
como: nt+1 es número total de hembras y machos en el año
t + 1.
Nt +1 5. Estimación de las tasas de fecundidad y
λ=
Nt sobrevivencia. Se estimaron tres tasas de fecundidad:
fecundidad total (FTOT), fecundidad de hembras
donde Nt+1 es la densidad de venados en el año t + 1
adultas y juveniles (FHaj) y fecundidad de hembras
y Nt es la densidad del año anterior. En el presente
adultas (FHa). Para el primer caso, la tasa de fecun-
estudio se hicieron cuatro estimaciones de lambda.
didad del año t se calculó como:
Debido a que este crecimiento es un proceso
multiplicativo la manera apropiada de calcular la tasa
promedio de crecimiento de población es emplean- Nc ( t + 1)
FTOT (t ) =
do la media armónica. Para analizar la posibilidad Naj (t )
de que la tasa finita de crecimiento poblacional de-
pende de la densidad, se realizó un análisis de regre- donde Nc es el número de crías vivas del año t + 1,
sión lineal simple. Si el resultado de esta prueba es y Naj es el número de venados adultos y juveniles de
una pendiente negativa y significativa se puede su- ambos sexos del año t. Para estimar las otras dos
gerir un efecto denso-dependiente en el crecimien- tasas de fecundidad primero se cuantificó la propor-
to de esta población. ción de hembras juveniles y adultas que se observa-
4. Estimación de la estructura de edades y propor- ron con y sin crías. Se estimó la tasa de fecundidad
ción de sexos. La estimación de la proporción de sexos como:
y la estructura de edades se basó en las observacio-
nes de junio a diciembre cuando es más fácil identi- Nc (t + 1)
FHaj ( t) =
ficar a los individuos. En el área de estudio, los NHaj (t )
nacimientos ocurren entre junio y agosto, y los
apareamientos entre noviembre y enero (Mandujano donde NHaj es el número total de hembras (adultas
y Gallina 1996). Cada venado fue clasificado en al- y juveniles); mientras que la tasa de fecundidad de
guna de las siguiente categoría: adulto (> 18 meses las hembras adultas como:
de edad), juvenil (6 a 18 meses), y cría (< 6 meses),
y por sexo. Para algunos individuos no fue posible Nc (t + 1)
FHa(t ) =
clasificarlos en alguna de estas categorías, por lo que NHa(t )
estas observaciones no fueron utilizadas para algu-
nos de los análisis. Por cuestiones logísticas no se donde NHa se refiere únicamente al número de hem-
capturaron y marcaron invidualmente a los venados. bras adultas. Debido a que la mortalidad de cervati-
Se empleó la prueba de X² para probar variaciones llos es muy elevada durante los primeros 30 días de
en el número de animales en cada categoría de cla- vida (Cook et al. 1971; Carrol y Brown 1977), es
ses de edad entre años. Un resultado no significati- muy probable que las tasas aquí reportadas estén
322 CONTRIBUCIONES MASTOZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VIELA

subestimadas debido a que los cálculos se basan en mero de venados detectados con el número de kiló-
el número de cervatillos observados con cada hem- metros recorridos cada año (r = 0.97, F = 40.6, gl
bra entre junio y diciembre. = 1 y 4, P = 0.008), esto no afectó las estimaciones
Se estimaron tres tasas de sobrevivencia: sobre- de la densidad ya que ésta no se correlacionó
vivencia total (STOT), sobrevivencia de la clase de significativamente con los kilómetros recorridos (r
crías a juveniles (Scj) y sobrevivencia de la clase de = 0.30, F = 0.31, gl = 1 y 4, P = 0.62), ni con el
juveniles a adultos (Sja). Como no se pudo clasificar número de venados detectados (r = 0.34, F = 0.39,
a los venados adultos dependiendo de su edad, no gl = 1 y 4, P = 0.58). Es decir, la estimación de la
se calculó la tasa de sobrevivencia de un año a otro densidad fue independiente del número de kilóme-
en esta categoría. tros recorridos y el número de venados contados
Para el primer caso la tasa de sobrevivencia se durante cada año de muestreo.
estimó como: La densidad poblacional varió entre 11 y 14 ve-
nados/km² (Fig. 2). En particular, en 1991 se obser-
STOT(t) = λ – FTOT(t) vó la densidad más alta. No se encontró diferencias
significativas entre las estimaciones de 1989 a 1990
donde λ es la tasa finita de crecimiento de la pobla- (Z = 0.27, P = 0.79) y de 1992 a 1993 (Z = 0.15, P
ción del año t al t + 1 y FTOT es la tasa de fecundidad = 0.88); mientras que sí hubo un incremento signi-
total de la población del año t. La tasa de ficativo de 1990 a 1991 (Z = 3.93, P = 0.01) y luego
sobrevivencia de la clase de edad de cervatillos a la una decremento significativo de 1991 a 1992 (Z =
de juveniles se calculó como: 3.51, P = 0.01). La abundancia de la población en
las 500 ha de área de influencia del muestreo, se es-
N j (t + 1) timó entre 55 y 68 individuos.
Scj (t ) = La tasa finita de crecimiento poblacional prome-
Nc (t ) dio fue 0.987, variando entre años (Tabla 1). Es de-
cir, hubo un ligero decremento de la población del
donde Nj es el número de venados juveniles del año 1.5% durante el estudio. Aunque no fue
t + 1 y Nc el número de cervatillos del año t. Mien- estadísticamente significativa, la tasa finita de creci-
tras que la tasa de sobrevivencia de las clase de juve- miento estuvo inversamente relacionada con la den-
niles a adultos, se estimó como: sidad poblacional (r = –0.83, F = 4.43, gl = 1 y 3, P
= 0.17). Por otro lado, no se detectó una tendencia
a corto plazo en la densidad poblacional (r² = 0.075,
Na (t + 1)
Sja (t ) = F = 0.244, gl = 1, 4, P = 0.66).
Na ( t ) + N j ( t ) En promedio, anualmente hubo 44% de indivi-
duos adultos, 25% de juveniles y 31% de cervati-
donde Na es el número de venados adultos de am- llos. Estas proporciones se mantuvieron constantes
bos sexos. durante todo el estudio, por lo que no se detectó
Se realizaron pruebas de correlación lineal sim- diferencia significativa entre las clases de edad (Ta-
ple entre los parámetros con la finalidad de conocer bla 1, X² = 6.2, gl = 8, P = 0.63).
cómo se relacionan estas variables. Además, se rea- Durante los primeros tres años del estudio la
lizaron análisis de regresión lineal entre la densidad proporción de sexos aproximadamente fue de un
poblacional con estos parámetros con la finalidad macho por cada dos hembras y no fueron significa-
de conocer posibles efectos denso-dependientes. tivas las diferencias (de 1989 a 1990, Z = 0.99, P >
Todos los datos de porcentajes fueron transforma- 0.05; y de 1990 a 1991, Z = –1.93, P > 0.05); mien-
dos con la función arcoseno. tras que esta proporción se incrementó
significativamente de un macho por cada cinco hem-
bras durante los dos últimos años (de 1991 a 1992,
Resultados Z = 0.19, P = 0.02).
Se contaron 363 venados en 813 km recorridos du- La tasa de fecundidad promedio durante el estu-
rante los cinco años del estudio (Tabla 1). Si bien dio fue de 0.45 crías por individuo en la población
hubo dependencia positiva significativa entre el nú- (Tabla 1). Del total de hembras, en promedio el 35%
DINÁMICA POBLACIONAL DEL VENADO COLA BLANCA (ODOCOILEUS VIRGINIANUS) EN UN BOSQUE TROPICAL SECO 323

Tabla 1. Valores de los parámetros poblacionales del venado cola blanca del periodo 1989-1993 en el bosque tropical
caducifolio de “Chamela”, Jalisco, México.

año

parámetros 1989 1990 1991 1992 1993

datos muestreo
número de venados (n) 109 68 46 102 38
kilómetros recorridos (L) 234 183 108 231 61
número de meses (R) 8 5 4 7 4

tasa finita de crecimiento (8) 0.950 1.193 0.809 1.036 -

estructura de edad
% adultos 52 42 45 41 40
% jóvenes 19 21 27 28 30
% crías 29 36 28 31 30

proporción sexos
(macho : hembra) 1:2 1:2 1:3 1:6 1:5

hembras
% jóvenes 32 23 33 48 40
% adultas solitarias 18 18 43 17 20
% adultas con crías 50 59 24 35 40

tasa de fecundidad
crías /total de individuos 0.49 0.53 0.35 0.45 -
crías /total de hembras 0.75 1.00 0.49 0.52 -
crías /hembras adultas 1.11 1.31 0.72 1.00 -

tasa de sobrevivencia
total de individuos 0.56 0.61 0.42 0.59 -
crías-jóvenes 0.71 0.86 0.79 1.00 -
óvenes-adultos 0.56 0.86 0.47 0.61 -

Fig. 2. Estimaciones de la densidad poblacional anual del venado cola blanca. Las barras verticales indican una
desviación estándar sobre la media.
324 CONTRIBUCIONES MASTOZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VIELA

fueron hembras jóvenes y el resto hembras adultas. 0.04); mientras que, aunque no significativa, se ob-
Durante el estudio no se observó a ninguna hembra servó una tendencia negativa evidente entre la tasa
joven acompañada de crías. De las hembras adultas, de fecundidad y la densidad poblacional (r = -0.78,
en promedio el 35% se observaron sin crías (Tabla F = 3.2, gl = 1 y 3, P = 0.22). A partir del punto
1). Hubo diferencias significativas en el número de donde se interceptan las dos rectas de regresión, se
hembras de cada una de las tres categorías (jóvenes, estimó la capacidad de sustento de la población en
adultas sin crías y adultas con crías) durante los cin- 12 venados/km² (Fig. 3).
co años del estudio (X² = 48.8, gl = 8, P = 0.001). En la Tabla 2 se presentan los resultados de los
Particularmente, los años que difieren son 1992 análisis de correlación entre las variables demográ-
cuando se observó el mayor número de hembras ficas. La densidad estuvo correlacionada negativa-
juveniles, y 1991 cuando fue alto el número de hem- mente con la tasa de sobrevivencia de la población y
bras adultas sin crías. Considerando el total de hem- positivamente con el número de hembras adultas
bras adultas y juveniles, la tasa de fecundidad observadas sin crías. Por otro lado, la tasa finita de
promedio fue de 0.7 crías/hembra; mientras que con- crecimiento se correlacionó positivamente con la
siderando únicamente hembras adultas la tasa de fe- tasas de sobrevivencia y fecundidad, con el número
cundidad fue de 1.0 crías/hembra. de hembras adultas con crías, y con el porcentaje de
La tasa de sobrevivencia del total de la población crías en la población. La fecundidad de la población
fue en promedio del 54% durante el estudio (Tabla se relacionó con el número de hembras adultas con
1). En particular, la tasa de sobrevivencia promedio crías las cuales únicamente representan el 43% del
de la categoría de venados crías a la categoría de ju- total de hembras en la población; asimismo, la fe-
veniles fue de 79% y se mantuvo relativamente cons- cundidad está inversamente correlacionada con el
tante durante el estudio. Por otro lado, la número de hembras adultas sin crías las cuales re-
sobrevivencia promedio de juveniles a adultos fue presentan el 23% del total de hembras. La otra co-
de 63%. Esta última tasa varió más entre años. rrelación interesante es que la sobrevivencia se
La tasa de mortalidad depende significativamente relacionó positivamente con la fecundidad total de
de la densidad (r = 0.97, F = 27.0, gl = 1 y 3, P = la población.

Fig. 3. Estimación de la capacidad de sustento (K, venados/km²) a partir del punto donde se interceptan las rectas de
regresión entre la densidad poblacional con las tasas de fecundidad y mortalidad. Las ecuaciones de regresión son:
mortalidad = -0.414 + (0.0724 densidad), y fecundidad = 1.091 – (0.0532 densidad).
DINÁMICA

Tabla 2. Coeficientes de correlación lineal (r) significativos (P < 0.05) entre los parámetros poblacionales del venado cola blanca en el bosque tropical caducifolio
de “Chamela”, Jalisco. Abreviaciones: (D) densidad, (λ) tasa finita de crecimiento, (Stot) sobrevivencia total, (Scj) sobrevivencia de la clase de crías a juveniles,
(Sja) sobrevivencia de la clase de juveniles a adultos, (Ftot) fecundidad total, (Fha) fecundidad de hembras adultas, (Fhaj) fecundidad de hembras adultas y
juveniles, (Hjov) hembras juveniles, (Hs/c) hembras adultas sin crías, (Hc/c) hembras adultas con crías, (adu) venados adultos, (juv) juveniles, (cría) crías, y
estadísticamente no significativo (ns).

Stot Scj Sja Ftot Fha Fhaj Hjov Hs/c Hc/c adu jov cría

D -0.83 -0.97 ns ns ns ns ns ns 0.94 ns ns ns ns

0.91 ns 0.96 0.87 0.91 ns ns ns 0.80 ns ns 0.96

Stot ns ns 0.91 0.90 ns ns -0.96 ns ns ns ns

Scj ns ns Ns ns ns ns ns -0.88 ns ns
POBLACIONAL DEL VENADO COLA BLANCA

Sja 0.82 0.89 0.86 ns ns 0.81 ns ns 0.99

Ftot 0.99 0.86 ns -0.89 0.96 ns ns ns


(ODOCOILEUS

Fha 0.91 ns -0.84 0.97 ns ns 0.83

Fhaj ns ns 0.94 ns ns 0.81

Hjov ns ns ns ns ns

Hs/c ns ns ns ns

Hc/c ns ns ns

adu ns ns

jov ns
VIRGINIANUS) EN UN BOSQUE TROPICAL SECO
325
326 CONTRIBUCIONES MASTOZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VIELA

Discusión boles y arbustos mantengan por más tiempo sus


hojas, por lo que hay mayor cantidad de alimento
1. Crecimiento de la población. La población del ve- en el periodo crítico (Owen-Smith 1990). Esto es
nado cola blanca en el bosque tropical seco de importante ya que la disminución de los recursos
Chamela se mantuvo relativamente estable tendien- alimenticios per capita incrementa la competencia
do a una tasa de crecimiento casi igual a cero duran- intraespecífica debido a que la capacidad de susten-
te el periodo del trabajo. Estudios con este ungulado to disminuye en la época crítica (Choquenot 1991).
muestran que es común que las poblaciones tien- A su vez, esto influye sobre las condiciones físicas
dan a tener tasas de crecimiento casi igual a cero de los animales, principalmente crías y juveniles, lo
(McCullough 1979). Hay evidencias en este sitio cual disminuye sus posibilidades de sobrevivencia.
de que la capacidad de sustento del hábitat, medida Esto sugiere que la variación en la disponibilidad de
como la biomasa vegetal en pie potencialmente alimento, la cual está determinada por la cantidad
consumible por este herbívoro, es de 3 y 18 vena- de lluvia estacional, podría funcionar como un fac-
dos/km² durante las épocas de secas y de lluvias, tor que actúe disminuyendo la fecundidad (en la
respectivamente (Mandujano 1999). Los resultados época húmeda) e incremente la mortalidad (en la
sugieren que existe un efecto denso-dependiente época seca). Esto regularía el crecimiento de la po-
entre el tamaño poblacional y la tasa finita de creci- blación en el bosque tropical seco de Chamela como
miento. Es decir, cuando se incrementa la densidad, ha sido propuesto en otros estudios (Sinclair et al.
la tasa de fecundidad disminuye y la tasa de mortali- 1985, Sæther et al. 1996). Por lo tanto, durante años
dad aumenta. El punto de estabilización de ambas muy húmedos las hembras tienen mayor disponibi-
tasas se estimó en 12 venados/km², lo cual puede lidad de alimento lo que se puede reflejar en un au-
considerarse la capacidad de sustento desde el pun- mento en la tasa de nacimientos un año después y
to de vista demográfico. Por lo tanto, durante los un incremento del tamaño de la población dos años
cinco años del estudio la población fluctuó ligera- después. Esto ha sido observado por Post y Stenseth
mente alrededor de este valor. Si la población cre- (1998) y mencionan que la tasa de crecimiento de
ciera hasta alcanzar el límite máximo que le permite una población de venado cola blanca está
el hábitat durante la época de lluvias, podría tener influenciada por las fluctuaciones en el clima dos o
como consecuencia que durante la época seca hu- tres años antes.
biera una mayor competencia entre individuos de- 2. Fecundidad, sobrevivencia y posibles factores de
bido a la baja disponibilidad de alimento. Esto mortalidad. La tasa de fecundidad de las hembras
incrementaría una mortalidad debido a un efecto adultas en la población del venado cola blanca en
denso-dependiente (Fowler 1981) por lo que habría Chamela es similar o menor a lo reportado en otros
una baja tasa de nacimientos para el siguiente año. estudios. Por ejemplo, Gallina (1994) reporta tasas
Esto podría llevar a un crecimiento inestable o caó- que varían de 1.0 a 1.8 dependiendo de las condicio-
tico de la población (Bonsall et al. 1998). Por el con- nes del hábitat. El 23% de las hembras adultas no
trario, debido a la baja capacidad de sustento durante tuvieron crías en el área de estudio. El número de
la época seca estimada a partir sólo de la biomasa crías por hembra está determinado por la disponi-
vegetativa (hojas, tallos y ramas), los individuos bilidad y calidad del forraje (Smith y Lecount 1979).
deben estar usando otras fuentes de alimento para Esto se debe a que a menor producción de forraje
mantenerse ya que esta no es suficiente para mante- tanto las hembras adultas como las jóvenes ganan
ner a la población. En este sentido, se ha encontra- menos peso lo cual afecta el estro y disminuye su
do que en este sitio los venados incrementan el fertilidad (Kaji et al. 1988). En el presente estudio
consumo de flores y frutos durante esta época hubo correlación positiva entre la densidad
(Arceo, en preparación). poblacional y el número de hembras adultas sin crías,
En el año biológico de 1991-92 hubo un incre- lo cual sugiere una posible relación denso-depen-
mento significativo en el tamaño de la población. diente entre estas variables como ha sido reportado
En ese año se presentó una alta precipitación du- en otros estudios (McCullough 1979; Kaji et al.
rante la época seca debido al efecto meteorológico 1988; Festa-Bianchet et al. 1995, Sæther et al. 1996).
del “Niño”. Una cantidad alta de lluvia invernal en Por el contrario, a diferencia de otros estudios don-
hábitats secos tiene como consecuencia que los ár- de se ha reportado tasas de 0.5 a 1.0 crías en hem-
DINÁMICA POBLACIONAL DEL VENADO COLA BLANCA (ODOCOILEUS VIRGINIANUS) EN UN BOSQUE TROPICAL SECO 327

bras jóvenes (1 a 2 años), las observaciones en 1980). Particularmente, se considera que la mortali-
Chamela sugieren que las hembras jóvenes no se dad de las crías es uno de los principales mecanis-
reproducen sino hasta el segundo año de vida. Esto mos denso-dependientes que regulan el crecimiento
determina el número total de crías en la población de la población en ungulados (Cook et al. 1971;
ya que estas hembras constituyen en promedio el Carroll y Brown 1977; Freeland y Choquenot 1990;
35% del total de hembras en la población. Este atra- Owen-Smith 1990; Sams et al. 1996).
so de las hembras jóvenes en alcanzar su madurez La sobrevivencia de la categoría de venados ju-
sexual ha sido reportado en otros estudios y se aso- veniles a adultos fue del 63% y es muy probable que
cia a la severidad de la época crítica del año (Kaji et los machos tengan menor probabilidad de
al. 1988; Owen-Smith 1990; Festa-Bianchet et al. sobrevivencia en comparación a las hembras debido
1995; Sæther et al. 1996). En el área de estudio, la a la mayor proporción de hembras en la categoría
baja disponibilidad y calidad de la biomasa vegetal de adultos. En otros estudios se han reportado tasas
durante la época seca podría ser el factor que deter- de sobrevivencia de animales jóvenes que van de 50%
mine este atraso en el estro. Este aspecto requiere a 80% para hembras, y de 30% a 41% para machos;
de investigaciones en el futuro. mientras que para animales adultos han sido de 79%
La tasa de sobrevivencia de la categoría de crías a para hembras y 47% para machos (Nelson y Mech
juveniles fue relativamente alta y similar a la repor- 1986, Gallina 1994). La diferencia entre sexos se
tada por Gallina (1994). La baja disponibilidad y debe a que los machos son más vulnerables a la de-
calidad del alimento influyen sobre la tasa de predación debido al dimorfismo sexual, se debilitan
sobrevivencia de las crías (Choquenot 1990; Owen- más después de las competencias por aparearse, se
Smith 1990). Esto se debe a que durante la época de desplazan más que las hembras, y los machos jóve-
gestación, que en el área de estudio ocurre durante nes presentan mayores movimientos de dispersión
los meses más críticos del año (Mandujano 1999), (Nelson y Mech 1986; Holzenbein y Marchinton
baja la vitalidad del feto y se incrementan las posibi- 1992). Por el contrario, las hembras jóvenes tienen
lidades de abortos y/o muerte prematura debido al un comportamiento distinto ya que normalmente
debilitamiento (Smith y Lecount 1979; Sams et al. permanecen con su madre hasta por más de un año;
1996). Lo anterior se acentúa en el caso de las hem- además, tienen mayor filopatría lo cual incrementa
bras jóvenes ya que las crías de éstas tienen menos su conocimiento sobre los recursos dentro de su
peso (Festa-Bianchet et al. 1995). Esto podría ex- ámbito hogareño y rutas de escape contra
plicar que las hembras jóvenes no tienen crías sino depredadores (Ozoga et al. 1982). Por lo tanto, en
hasta el segundo año de vida en Chamela. Por otro el bosque tropical seco de Chamela la primera épo-
lado, la probabilidad de sobrevivencia de los cerva- ca seca a la que se enfrentan los machos jóvenes
tillos podría disminuir considerablemente en aque- podría ser determinante para su sobrevivencia. Por
llos años en los que la lluvia fuera menor al promedio el contrario, debido a que las crías hembras perma-
tanto en la época húmeda como en la época seca. necen por más de un año con sus madres
Esto es posible ya que los factores que afectan la (Mandujano y Gallina 1996), sus posibilidades de
mortalidad de las crías es distinto entre el verano y sobrevivencia son mayores.
el invierno (o época seca dependiendo el tipo de Respecto a los probables factores de mortalidad,
hábitat) (McGinnes y Downing 1977; Guinness et la depredación por jaguar y puma podrían estar re-
al. 1978; Sæther y Hein 1993). La mortalidad du- moviendo entre 23% y 29% de la población de ve-
rante el verano se relaciona con el peso al nacer, la nado en el sitio de estudio (Núñez et al. 2000). En
edad de la hembra y la experiencia de la misma; mien- otros sitios se ha encontrado que la depredación por
tras que la mortalidad durante el invierno se rela- cánidos como el lobo (Canis lupus) y el coyote (C.
ciona con el día del nacimiento (entre más tarde latrans) es uno de los principales factores de morta-
nazca el cervatillo menor probabilidad de lidad en venados, principalmente en crías donde
sobrevivencia), el ámbito hogareño de la hembra y pueden contribuir con el 50% de los fallecimientos
la densidad poblacional. En particular, se ha encon- (Cook et al. 1971; Carroll y Brown 1977; Nelson y
trado que las crías deben crecer rápido y almacenar Mech 1986; Holzenbein y Marchinton 1992; Post y
grasas antes de la época crítica pues esto incrementa Stenseth 1998). Particularmente, se ha propuesto
sus probabilidades de sobrevivencia (Verme y Ozoga que en hábitats tropicales la depredación de vena-
328 CONTRIBUCIONES MASTOZOOLÓGICAS EN HOMENAJE A BERNARDO VIELA

dos por felinos mantiene a los primeros por debajo Literatura citada
de la capacidad de carga (Terborgh 1990). En au-
BONSALL, M.B., T.H. JONES Y J.N. PERRY. 1998. Determinants
sencia de depredadores habría grandes fluctuacio-
of dynamics: population size, stability and persistence.
nes en el tamaño de la población lo cual podría llevar Trends Ecol. Evol. 13:174-176.
a sobrepasar la capacidad de carga del hábitat (Sæther BULLOCK, S.H. 1986. Climate of Chamela, Jalisco, and trends
et al. 1996; Sæther 1997). Esto se debe a que en au- in south coastal region of Mexico. Arch. Metereo. Geoph.
sencia de depredadores los mecanismos de regula- and Bioclim. 36:297-316.
ción de la dinámica de la población operan muy BULLOCK, S.H. Y J.A. SOLÍS-MAGALLANES. 1990. Phenology of
lentamente, resultando en un mayor tiempo de re- canopy trees of a tropical deciduous forest in Mexico.
Biotropica 22:22-35.
torno al estado de equilibrio entre la densidad y los
B URNHAM , K.P., D.R. A NDERS ON Y J.L. L AAKE . 1980.
recursos. Por otro lado, en Chamela parásitos como Estimation of density from line transect sampling of
las garrapatas y enfermedades, podrían ser otro fac- biological populations. Wildl. Monogr. 72:1-202.
tor de mortalidad el cual debe evaluarse en trabajos CARROLL, B.K. Y D.L. BROWN. 1977. Factors affecting neonatal
posteriores. Esto se debe a que en otros estudios se fawn survival in southern-central Texas. J. Wildl. Manage.
ha determinado que estos agentes causan entre el 41:63-69.
CAUGHLEY, G. 1977. Analysis of vertebrate populations. John
16% y 34% de la mortalidad (Cook et al. 1971,
Wiley & Sons, New York, NY.
Carroll y Brown 1977). Además, un aspecto impor- CHOQUENOT. D. 1991. Density-dependent growth, body
tante es que los parásitos y enfermedades van debi- condition, and demography in feral donkeys: testing the
litando al animal lo cual los hace más susceptibles a food hypothesis. Ecology 72:805-813.
otros factores de mortalidad como la depredación CLUTTON-BROCK, T.H., F.E. GUINNESS Y S.D. ALBON. 1982.
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production of large african herbivores in relation to rainfall
durante todo el año, pero particularmente en la época and primary production. Oecologia 22:341-354.
seca cuando es más fácil ver a los animales. Este tipo COOK, R.S., M. WHITE, D.O. TRAINER Y W.C. GLAZENER. 1971.
de cacería no respeta sexo y edad de los animales, lo Mortality of young white-tailed deer fawns in south Texas.
cual debe estar influyendo, junto con los otros fac- J. Wildl. Manage. 35:47-56.
tores de mortalidad, directamente sobre el creci- DUSEK, G.L., R.J. MACKIE, J.D. HERRIGES Y B.B. COMPTON.
miento de la población manteniendo a la misma por 1989. Population ecology of white-tailed deer along the
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mente severa, podría tener como consecuencia un FESTA-BIANCHET, J.T. J ORGENSON, M. LUCHERINI Y W.D.
decremento acelerado en el tamaño de la población. WISHART. 1995. Life history consequences of variation in
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Agradecemos a la Estación de Biología “Chamela” population in north-central Minnesota. Wildl. Monogr. 110.
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el apoyo para realizar este estudio. También a L. E.
G AILLARD, J-M., M. FESTA -BIANCHET Y N. GILLES. 1998.
Martínez-Romero, Rosa Elena Sánchez-Mantilla y Population dynamics of large herbivores: variable
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El estudio recibió apoyo de la Estación de Biología G ALLINA , S. 1994. Dinámica poblacional y manejo de la
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