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UNIVERSIDAD YACAMBÚ

VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE HUMANIDADES

Estilo de afrontamientos en pacientes de larga estancia internos en el


Centro de Resocialización Psiquiátrico El Pampero Barquisimeto
Estado Lara

Autor:
Lcda. Olga Peña
CI:

Cabudare, Julio de 2010


INDICE

Pág.
Aprobación del Tutor ii
Dedicatoria iii
Agradecimiento iv
Índice v
Índice de Gráficos vii
Resumen viii
Introducción 1
CAPÍTULO I El Problema 3
Planteamiento del Problema 3
Objetivos de la investigación 6
Objetivo General 6
Objetivos Específicos 6
Justificación 7
CAPÍTULO II Marco Teórico 9
Antecedentes de la investigación 9
Bases Teóricas 12
Salud Mental 12
Enfermedad o trastorno mental 13
Modelo Psicoeducativo en pacientes con trastorno 18
mental
El apoyo familiar como proceso Psicosocial 20
Bases legales 22
Definición de términos 25
CAPÍTULO III Marco Metodológico 26

ii
Tipo de Investigación 26
Metodología de la fase de diagnostico 27
Población 27
Muestra 28
Técnicas e Instrumentos de Recolección de datos 29
Validez 29
Confiabilidad 29
Análisis de Datos 30
Metodología de Elaboración de la Propuesta 30
Metodología de la evaluación de factibilidad de la 31
propuesta
CAPÍTULO IV Análisis e interpretación de los resultados 35
CAPÍTULO V Formulación de la Propuesta 47
Conclusiones y Recomendaciones 53
Referencias Bibliográficas 54
Anexos 56

iii
ÍNDICE DE CUADROS

Cuadro Pág.

1 Que son enfermedades mentales 38

2 Causas que originan las enfermedades mentales 39

3 Manifestaciones más comunes de la enfermedad mental 39

4 Factores que influyen en la aparición de la enfermedad 40


metal

5 Tipos de e enfermedades mentales que se puedan 40


presentar

6 Síntomas de la enfermedad mental 41

7 Comportamiento y conducta del enfermo mental 42

8 Conductas negativas que puede presentar el enfermo 42


mental

9 Cómo administrarle el tratamiento al enfermo 43

10 Alimentación, descanso y sueño del enfermo mental 43

11 Higiene personal del enfermo mental 44

12 Importancia de la comunicación con el enfermo mental 44

13 Importancia de la terapia familiar 45

14 Importancia del apoyo familiar para el tratamiento del 45


enfermo mental

15 Disposición familiar de participar en actividades para 46


recibir orientación acerca de la enfermedad y de cómo
ayudar al enfermo

iv
UNIVERSIDAD YACAMBÚ
VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE HUMANIDADES

Autor:
Lcda. Olga Peña
Tutor:
Dra. Lidia Camacaro
Año: 2010

RESUMEN

El presente trabajo de investigación tiene como propósito, describir los estilos


o estrategias de afrontamiento en pacientes de larga estancia internos en el
centro de Resocialización Psiquiátrica El Pampero en Barquisimeto, Estado
Lara, para lograr dicho objetivo se realizará una investigación de tipo
descriptiva de campo, con un diseño descriptivo- transaccional. Será utilizado
como instrumento de medición el cuestionario de Afrontamiento (CAE) de 42
ítems, es una escala tipo Likert graduada entre O (Nunca) y 4 (Casi siempre),
que dan la oportunidad de conocer como enfrenta situaciones o problemas
estresantes, con la finalidad de medir sus estilos básicos de afrontamiento,
tomando en cuenta el tiempo de estancia del paciente en el centro
mencionado.

Descriptores: Estilos o estrategias de afrontamiento, enfermedad mental,


pacientes de larga estancia, apoyo familiar.

v
INTRODUCCIÓN

La primera institución a la que se recurre en situaciones de crisis,


es la familia pues, esta conforma un espacio de acción donde se
definen las dimensiones básicas de la seguridad humana, las cuales
corresponden a los procesos de integración social de las personas.
Es, junto con el Estado, una de las instituciones encargadas de
proveer protección social a los individuos. En contradicción con esto,
la familia constituye, al mismo tiempo, una fuente importante de
incertidumbre, tanto por las tensiones externas como por las
relaciones en su interior, lo cual la hace muy vulnerable ante las crisis.
Así, las familias, ante una crisis, pueden llegar a fragmentarse, o bien,
familias previamente dispersas pueden volver a fortalecerse a partir de
un evento crítico.
Por otra parte, la preocupación por las enfermedades mentales
siempre ha estado presente en el ámbito familiar, en mayor o menor
grado, de acuerdo al nivel de afectación que ésta ha tenido, pero es
desde mediados del siglo XVIII cuando empieza el desarrollo de
medidas paliativas como la creación de instituciones de reclusión y los
tratamientos médicos. Fueron eminentes reformistas, como el médico
francés Philippe Pinel y el estadounidense Benjamin Rusht, quienes
introdujeron este tipo de medidas como alternativas a los tratos
inhumanos que hasta entonces habían prevalecido. Surgen así, los
psiquiátricos como instituciones organizadas para la reclusión y, el
tratamiento de las personas con desórdenes mentales, con el objetivo
de ejercer medidas de curación, educación o reinserción de los
individuos que se encontraban fuera de la normalidad.
La atención psiquiátrica, puede ser analizada desde varios
puntos de vista: Clínico, porque brinda atención médica con acciones
curativas y rehabilitadoras para los sujetos enfermos; Epidemiológico,

1
porque aplica como estrategia de trabajo lograr el diagnóstico de salud
con el que se detectan grupos de riesgo, evaluando no solo al
individuo sino a grupos poblacionales en cuanto a su salud mental; y
Social, está dado porque se desempeña en función de las
necesidades de salud mental de la población.

Hecha las consideraciones anteriores y con base a lo anteriormente


planteado, el presente estudio está dirigido a la descripción de los estilos de
afrontamiento en paciente de larga instancia internos en el Centro de
Resocialización Psiquiátrica El Pampero en Barquisimeto, Estado Lara, y, se
estructura en tres capítulos, los cuales se detallan a continuación:

En el Capítulo I, El Problema, se describe la problemática objeto de


estudio, se exponen los objetivos, general y específicos de la investigación,
la justificación y los alcances del mismo.
El Capítulo II, Marco Teórico, relaciona los antecedentes con el tema
investigado; asimismo, se hace un análisis de las teorías que sustentan el
estudio que ayudan abordar el problema, el cual está referido a los
elementos necesarios en la investigación al uso de la bibliografía disponible,
relacionados con el problema en estudio y el sistema de variables.
El Capítulo III, Marco Metodológico, se describe la metodología a utilizar,
naturaleza de la investigación, población y la muestra seleccionada, técnicas
de recolección de datos, validación, confiabilidad del instrumento.
Finalmente, se presentan las referencias bibliográficas utilizadas en la
investigación.

2
3
CAPÍTULO I

EL PROBLEMA
Planteamiento del Problema

El Ser Humano en busca del bienestar integral y satisfacer la


incomplitud percibida, persigue mantener un estado saludable, en este
sentido, el afrontamiento del estrés hace referencia a los esfuerzos
conductuales y cognitivos que lleva a cabo el individuo para hacerle frente
tanto a demandas externas o internas generadoras del estrés, como al
malestar psicológico que suele acompañarlo Sandín, (1995) en Oblitas
(2005).
Sin embargo, toda institución humana posee características antagónicas
de intereses personales que deben ser ajustados para alcanzar una armonía
práctica, y de este modo evitar el desajuste que atente contra ese bienestar
tan pretendido. Desde este punto de vista, la familia, es la manifestación más
distintiva de esa participación antagonista que tan frecuentemente describe
las relaciones entre los seres humanos. Buendia, J. (1999). En tal efecto,
establece el autor, es el deber ser, encontrar en la familia amor, estabilidad y
comprensión, sin embargo, se encuentran también controversias y
decepciones, y a pesar de ello, sigue siendo el pilar fundamental donde el
individuo busca el apoyo requerido para enfrentar situaciones estresantes.

Atendiendo a las consideraciones anteriores, se deben mencionar los


estudios de Albarran y Macías (2002) al definir a la familia, cualquiera sea su
caracterización y tipología como un verdadero sistema que posee estructura
funcional singular y grupo social de máxima importancia para la vida del ser
humano. Aun cuando, la vida moderna haya variado con respecto a su
forma más tradicional en cuanto a funciones, composición, ciclo de vida y

4
roles, la única función que ha sobrevivido a todos estos cambios es la de ser
una fuente de afecto y apoyo emocional para todos sus miembros.
En otro contexto, atendiendo a la complejidad del concepto de
antagonismo antes mencionado, se presenta la enfermedad mental
que no sólo afecta al individuo que la padece, alterando de manera
definitiva su comportamiento, forma de sentir, querer y de pensar; sino
que también afecta a la familia totalmente. Respecto a la situación
antes planteada para Bravo (2000) es Indiscutible, cuando un
miembro de la familia presenta algún trastorno mental, la relación de
la familia se deteriora rápidamente y podría transformarse en temor y
rechazo de convivir con el miembro enfermo.
Para efectos de esta investigación se hace necesario hacer mención al
término trastorno o enfermedad mental, este es considerado en el Manual de
diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (2002), como un
anacronismo reduccionista del dualismo mente/cuerpo. Según Oblitas L
(2006) los conocimientos actuales indican que hay mucho de “físico” en los
trastornos mentales y hay mucho de “mental” en los trastornos físicos; por
tanto, aunque el término “trastorno metal”, como muchos términos en la
medicina carecen de definición operacional está referido a gran variedad de
conceptos como malestar, descontrol, limitación, incapacidad, irracionalidad,
en fin es considerado como una desviación entre la normalidad y la
patología.
En efecto, La etiología de esta patología es multifactorial, pudiendo ser
biológica, cultural, social, ambiental o hereditaria, o la confluencia de ellos;
razones por las que no tiene distingo de raza, sexo, credo, condición socio
económica, ni nivel académico Bazan (1997). Por lo tanto, establece el autor,
se puede decir que en la población generalmente, frecuentemente se corre
el riesgo de padecer alguna de estas patologías, que en la mayoría de los
casos, son producto de conflictos existenciales y exigencias de una
sociedad demandante, que al no funcionar equilibradamente, puede

5
empujar a tal punto de llegar a formar parte de abrumadoras cifras de la
población con que padece enfermedades mentales. Tal es el caso de la
información de la OMS (2002), donde esta población representa un para la
fecha un 4%, tendiente al incremento.
De la situación antes planteada, la población Venezolana no
está exenta, en un Análisis preliminar de la situación de la salud en
Venezuela (2002) a pesar de establecer que la información en  salud
mental es muy precaria y los datos disponibles provienen de 
registros de las patologías atendidas en los centros especializados de
atención, no se han realizado una medición de la morbilidad atendida
en la demanda de atención en  los establecimientos del primer nivel,
los datos arrojados reflejan un enfoque centrado en la enfermedad
cuyo eje sigue siendo el hospital psiquiátrico y los establecimientos
de larga estancia, llamadas colonias psiquiátricas. 

Es por ello que la situación del enfermo mental es muy compleja,


puesto que en unos casos pudiera sentirse rechazado o excluido por
su familia, y en algunos casos, al ser internado en establecimientos
de larga estancia la agrava aún más. Por una parte, existen casos en
que la familia busca ayuda especializada, pero no cuenta con
herramientas necesarias para manejar este tipo de patologías, por lo
que se puede correr el riesgo de hacer uso inadecuado del
tratamiento y por otra, es posible que cuando intenten recluirlo en la
institución, al no apreciar una pronta recuperación terminen
desligándose del paciente y con ello sus temores e incomodidades
derivadas. Peña (2010)
En consecuencia el paciente, una vez internado, enfrenta una
situación de abandono por parte de sus familiares y aunado esta
situación, en algunos casos podría encontrarse con un centro
asistencial deteriorado, con carencia de equipos para atender sus

6
necesidades, déficit de psicofármacos y hasta hacinamiento. Bajo
estos parámetros se puede inferir que los desórdenes psiquiátricos
constituyen un problema que genera discapacidad en quienes los
padecen y un impacto negativo en su calidad de vida, que afecta tanto
a ellos como a quienes les rodean. Peña (2010)
Esta situación es relevante, por cuanto Hernández (2004) establece que todo
trastorno mental severo implica alteraciones funcionales en distintos ámbitos
(vincular, interaccional, de la ejecución de roles sociales y de la capacidad de
satisfacer las propias necesidades personales, desde el momento en que se
presentan los primeros síntomas el paciente y su familia transitan por una
serie de dificultades que limitan su reinserción social y, en la mayoría de los
casos cuando su salud mental es restituida y es dado de alta, la familia no
está preparada para recibirlo, nuevamente es rechazado y no sólo por su
familia sino, también por la comunidad en general.
En el caso específico del Centro de Resocialización Psiquiátrica
El Pampero (CRP El Pampero), los usuarios padecen una situación
análoga a la investigaciones realizadas por Medina (2001) las cuales
establecen que el 90% de los familiares son de un nivel
socioeconómico bajo, sin profesión definida, por lo que el cuidado de
este paciente es considerado por los familiares como una sobrecarga
debido al incremento de gastos que genera. De igual forma, el
mencionado autor manifestó que un 71.5% de las personas recluidas
asegura no sentirse querido por sus familiares y un porcentaje mayor
manifestó no ser buscados por su familia, en caso de ser dados de
alta.
Tal situación constituye un estado de constante abatimiento
sostenido por los pacientes internos en el mencionado centro, dadas
las observaciones realizadas durante 30 años de servicio prestado
como enfermera en la institución antes mencionada por la
investigadora, surge la inquietud de indagar sobre las personas

7
internas que dejaron de ser pacientes psiquiátricos desde un lapso
considerado de tiempo y hasta la actualidad ningún familiar se ha
presentado en la institución, para reincorporarlo a su hogar.
Fomentando de esta forma largos periodos de estancia de estos
pacientes injustificadamente.
En estas circunstancias y aunado al deterioro que implica haber padecido
una enfermedad mental, los pacientes deben poner en marcha una serie de
mecanismos que les permita paliar y asumir los daños producidos por los
sucesos, los cuales han sido llamados por Rollman y Mc Cain (1994) en
Cañero C. (2004). “Estrategias o estilos o estilos de afrontamientos” definidos
por los autores, como aquellos intentos cognoscitivos y conductuales en
constante cambio que le hacen posible al individuo manejar exigencias
internas o externas que consideran restrictivas o que rebasan sus recursos.
De modo general, el afrontamiento se refiere a la serie de pensamientos
y acciones que capacitan a las personas para manejar situaciones difíciles,
consiste, por lo tanto, en un proceso de esfuerzos dirigidos a operar del
mejor modo posible situaciones antagonistas, bien sea, reduciendo,
minimizando, tolerando o controlando las demandas internas y ambientales.
Y que son evaluadas como excedentes o desbordantes de los recursos del
individuo. Lazarus y Folkman, (1986)
Esto demuestra lo complejo que resulta para el enfermo mental
en condiciones de alta, adaptarse a las nuevas exigencias que deben
ser afrontadas, puesto que ya no es solo su enfermedad psíquica
quien amenaza su estabilidad o bienestar psicológico, también se
adiciona el hecho de vivir en una institución, con personas
desconocidas, lejos de sus familiares, en fin con un estilo de vida al
quizá no estén acostumbrados. Por cuanto, el afrontamiento que se
haga de esta condición estresante es vital para poder anticipar el
impacto que pueda ocasionar en la persona recaer o empeorar la
enfermedad, ya que en la mayoría de los casos, las estrategias

8
empleadas pueden, mediar, aminorar o amortiguar los efectos del
estrés producido por su circunstancia.
Llegado a este punto, es conveniente responder la siguiente
interrogante:
¿Cuál es el estilo de afrontamiento que tiene el paciente de larga estancia
interno en el centro resocializador psiquiátrico El Pampero?

Objetivos de la investigación

Objetivo General

 Determinar los estilos de afrontamiento utilizados en Pacientes


de larga estancia internos en el Centro de Resocialización
Psiquiátrica “El Pampero” en Barquisimeto, Estado Lara.

Objetivos específicos

 Identificar los estilos o estrategias de afrontamiento en Pacientes de


larga estancia internos en el Centro de Resocialización Psiquiátrico
por género.

 Identificar los estilos o estrategias de afrontamiento en pacientes en


Pacientes de larga estancia internos en el Centro de Resocialización
Psiquiátrico por edad.

 Describir los estilos o estrategias de afrontamiento en pacientes de


larga estancia internos en el Centro de Resocialización Psiquiátrico
de acuerdo al diagnostico por el que fueron recluidos.

9
 Describir los estilos o estrategias de afrontamiento en pacientes de
larga estancia internos en el Centro de Resocialización Psiquiátrico
según el tiempo de estancia.

Justificación de la investigación

La preocupación por la salud y la enfermedad ha sido una


constante para el hombre, pues son cualidades inherentes a la
naturaleza del ser humano y a su supervivencia, es por lo que esta
investigación tiene como propósito describir los estilos de
afrontamiento de los pacientes de larga estancia desvinculados
familiarmente internos en Centro de Resocialización Psiquiátrica “El
Pampero” en Barquisimeto, Estado Lara. En consecuencia, la
investigación se justifica en función de los aportes que ofrece:
En cuanto a lo práctico, busca abrir nuevas perspectivas que han
de incentivar a la participación adecuada de la familia de pacientes
recluidos en el CRP “El Pampero”, a través de orientaciones básicas
acerca de la enfermedad, el tratamiento y el manejo del enfermo
mental, por cuanto un limitado conocimiento de la enfermedad, de los
efectos de la medicación y de otras técnicas terapéuticas, genera un
amplio campo para la interpretación y la explicación irracional, que
puede perjudicar mediante la activación de ansiedades y miedos,
dificultando el cumplimiento terapéutico.
Por otra parte conocer las estrategias de afrontamiento en estos
pacientes es un factor que contribuye al curso de los trastornos de y
otros síndromes clínicos para la implementación del tratamiento
psicosocial y entrenamiento en estrategias de afrontamiento

10
adecuadas que lo conduzcan a mejorar su calidad de vida y por ende
bienestar subjetivo.
El presente estudio tiene una utilidad metodología, ya que el
paciente psiquiátrico es un campo en el que resulta necesario realizar
investigaciones que permitan definir y operacionalizar el concepto de
calidad de vida, así como desarrollar métodos de evaluación
apropiados.
Sus implicaciones prácticas se centran en el hecho, de que los
resultados de la presente investigación pueden ser utilizados para
realizar programas de intervención psicológica que permitan mejorar
la percepción subjetiva en aras de obtener estilos de afrontamientos
funcionales.

Para la Psicología de la Salud representa un aporte, ya que se realizará


un estudio relacionando con una variable médica y una psicológica, donde
los resultados permitirán obtener datos para ser considerados en el curso de
las enfermedades mentales. Específicamente es útil identificar los estilos de
afrontamiento ante una enfermedad en particular, debido a que muestra la
capacidad por parte del sujeto para realizar de forma inmediata innovaciones
psicológicas para sus fines o de resolver problemas mediante la creatividad
y cambio de paradigma.

En el aspecto social, para la sensibilización de las familias, como


un llamado a integrarse de forma activa con el paciente de larga
estancia, al igual de aquel que está en condición de alta, para ser
reinsertado en el grupo familiar y sociedad, en la búsqueda de un
mayor nivel de autonomía y mayor bienestar psicológico.

CAPÍTULO II

11
MARCO TEÓRICO

Antecedentes de la Investigación

Oms (2008) en un Programa de Acción para superar las brechas


en Salud Mental, denominado Mejora y ampliación de la atención de
los trastornos mentales, neurológicos y por abuso de sustancias que
persigue reforzar el compromiso de los gobiernos, las organizaciones
internacionales y los interesados directos para aumentar la asignación
de recursos financieros y humanos dedicados a la atención de los
trastornos MNS. En este sentido, la OMS procura proporcionar a los
planificadores sanitarios, a los que diseñan políticas y a los
interesados un conjunto de actividades y programas claros y
coherentes para aumentar y mejorar la atención de los pacientes con
trastornos mentales, neurológicos y por abuso de sustancias mediante
este Programa.
Este programa se basa en la mejor evidencia científica y
epidemiológica disponible sobre las afecciones prioritarias. Intenta
aportar un conjunto o paquete integrado de intervenciones, teniendo
en cuenta tanto las barreras existentes como las posibles que puedan
afectar la ampliación y mejora de la atención. Para ello se considera
que un grupo de enfermedades puede ser prioritario si representa una
carga grande en cuanto a mortalidad, morbilidad o discapacidad, tiene
elevados costos económicos o se asocia a violaciones de los
derechos humanos. Las condiciones prioritarias que se han
identificado siguiendo los criterios ya indicados por el mhGAP son la
depresión, la esquizofrenia y otros trastornos psicóticos, el suicidio, la
epilepsia, la demencia, los trastornos debidos al consumo de alcohol,
los trastornos por consumo de drogas ilícitas y los trastornos mentales
infantiles.

12
La OMS afirma que estos trastornos son comunes en todos los
países donde se ha examinado su prevalencia, y afectan
sustancialmente la capacidad de los adultos de desenvolverse en el
ámbito familiar, laboral y social. Dado que son sumamente
prevalentes, persistentes y causan discapacidad, contribuyen de
forma importante a la carga total de morbilidad. La discapacidad es la
responsable de la mayoría de la carga atribuible a estos trastornos.
Tal como lo establece la OMS en el proyecto antes citado, la
discapacidad es la mayor carga que se atribuye al problema de los
trastornos mentales, de ahí la importancia de involucrar a la familia en
el proceso de recuperación y reinserción del paciente psiquiátrico al
ámbito familiar.
Márquez (2010), realizo un estudio en Sevilla, España titulado El
rechazo Social al enfermo mental, el cual tuvo como objetivo
determinar el conocimiento que tiene la población de las
enfermedades mentales y de sus síntomas, así como del rechazo
social que estas producen. La investigación estuvo enmarcada en la
modalidad descriptiva con un diseño de campo, para obtener los
resultados, la investigadora aplico un instrumento tipo cuestionario a
una muestra de 25 sevillanos, la cual permitió concluir que la mayoría
de las personas un 82% conoce la esquizofrenia y el trastorno bipolar
pero la mitad de los encuestados no saben los síntomas que provocan
estas enfermedades; también el estudio reseña que "la dificultad en
el diagnóstico es debida al desconocimiento y al rechazo social". El
40% opina que los pacientes y sus familiares desconocen estas
enfermedades y un 59% dice que no son fáciles de identificar. Otra
conclusión a la que llego el estudio es que "la tendencia del
enfermo y la familia es a ocultar estas enfermedades por temor al
rechazo de la sociedad, lo cual limita el diagnóstico y el
tratamiento". Por lo que la investigadora recomienda que para la

13
recuperación de estos enfermos, "además del seguimiento
adecuado del tratamiento, es necesario el apoyo familiar y social".
Esta investigación guarda estrecha relación la el estudio
planteado, que busca proponer un programa que permita a los
familiares de los pacientes psiquiátricos involucrarse con ellos para
contribuir de esta manera con su recuperación, por cuanto el apoyo
familiar y social, de acuerdo con la investigación antes citada, es un
elemento indispensable para alcanzar esta meta.
Albarrán y Macías (2007), en investigación titulada Modelo
Psicoeducativo en el Servicio de Psiquiatría del Hospital Fray Antonio
Alcalde, en Guadalajara, México, tuvo como propósito desarrollar un
ejercicio de psicoeducación, a los familiares de sujetos diagnosticados
con trastorno mental, acerca de su percepción y entendimiento de las
causas de la enfermedad, para lo cual realizó una investigación de
análisis cualitativo de tipo descriptivo, de corte transecional con una
muestra no probabilística. Dando como resultado que tanto en la
enfermedad como en la causa, en un porcentaje elevado, se localiza
una mezcla de términos médico – psiquíatricos y síndromes culturales;
la mayoría está de acuerdo con que la ayuda debe ser el suministro
de medicamentos y otro tanto considera que la mejor ayuda es
mantenerlo recluido.
La investigación antes mencionada se toma como antecedente
por la vinculación que tiene con la variable en estudio, en la misma se
demuestra la necesidad que existe de formular un programa que
capacite y oriente a la familia del enfermo mental en relación con el
manejo básico de la enfermedad y los tipos de ayuda que le puede
dar.
Este antecedente demuestra que cuando la participación se hace
desde una perspectiva social - humanista se logra dar respuesta a las
necesidades de la colectividad. Aspecto este que guarda relación

14
directa con la investigación propuesta donde los familiares de los
enfermos mentales están llamados a ser agentes de cambio.
Álvarez, Cordero, Duran y otros (2007), en trabajo de grado
denominado Programa de orientación dirigido a las familias del
enfermo mental. El objetivo del mismo fue Proponer un programa de
orientación familiar para la atención al enfermo mental del Hospital
Centro Salud de Resocialización Psiquiátrica “El Pampero”. Para
lograrlo, llevó a cabo una investigación de tipo cuantitativa, en la
modalidad de proyecto factible o investigación proyectiva, la población
la conformaron diez y ocho (18) sujetos estratificados de la siguiente
manera: 06 enfermos mentales; 06 familiares y 06 personas que
laboran en La Institución a quienes se les aplicó un cuestionario tipo
encuesta en base a preguntas de selección dicotómicas, estructurado
en tres partes, la primera parte dirigida al enfermo mental, la segunda
parte dirigida a los familiares de los pacientes y la tercera parte
dirigida al personal que labora en el Centro salud de Resocialización
Psiquiátrica “El Pampero”, Barquisimeto Estado Lara. Los resultados
permitieron detectar las diferentes razones del distanciamiento del
grupo familiar de los enfermos mentales y en función de ellas se
elaboró el programa de orientación familiar.
Este antecedente se relaciona de manera directa con la
investigación planteada por cuanto su objetivo fue proponer un
programa de orientación en respuesta a las razones de
distanciamiento que la familia expuso, aspectos estos considerados
relevantes en la formulación de los objetivos.
Medina (2001), realizó una investigación titulada Perfil
socioeconómico como factor influyente en el abandono familiar del
usuario esquizofrénico hospitalizado; el objetivo del estudio fue
conocer la relación que existe entre el perfil socioeconómico y el
abandono familiar del usuario esquizofrénico hospitalizado en el

15
Centro de Resocialización Psiquiátrica “El Pampero”. Dicho estudio se
fundamento en una investigación descriptiva prospectiva, en la
modalidad de proyecto factible. La población estuvo conformada por
70 usuarios hospitalizados y a familiares a quienes se les aplicó un
instrumento, una vez analizados los resultados se llegó a las
siguientes conclusiones: la mayoría de los familiares presentan un
perfil socioeconómico bajo, que incide directa o indirectamente en el
abandono familiar de los usuarios esquizofrénicos, los usuarios tienen
una frecuencia de visita “muy baja” y aún cuando muchos se
encuentran en situación de egreso, permanecen en la institución; por
ello recomiendan diseñar programas dirigidos a la familia y a la
comunidad para promover la educación sobre la atención,
rehabilitación y reincorporación del enfermo esquizofrénico a su medio
familiar y comunitario, para lograr mejorar la calidad de vida de éstos
enfermos; así como también, se recomienda revisar la base legal ya
que la responsabilidad de la atención psiquiátrica descansa sólo en el
estado.
Dos aspectos se consideran relevantes para tomar como
antecedente esta investigación; en primer lugar, la necesidad de
diseñar programas de capacitación a la familia y comunidad para
promover la atención, rehabilitación y reincorporación del enfermo a
su medio familiar; y en segundo lugar la necesidad de que familia y
comunidad asuman su responsabilidad en cuanto a la atención
psiquiátrica y no se deje ésta sólo en manos del Estado.

Bases Teóricas.

El ser humano debe concebirse como una unidad, que


integralmente visto, posee elementos biológicos, psicológicos y
sociales. Por tanto, hay que tener en cuenta estos tres aspectos: la

16
presencia de su esencia como ser biológico con estructuras y
funciones definidas, las relaciones como ser social inherentes a su
condición de convivencia grupal (familia y comunidad), y la resultante
de esta interrelación biosocial es la que origina el fenómeno
psicológico. En este sentido Ávila citado por Hernández (2004), señala
que el hombre es un ser biopsicosocial que tiene integradas en su
persona tres grandes dimensiones la biológica, la psicológica y la
social, dimensiones que están estrechamente ligadas y son las partes
entre las que el individuo debe distribuir su atención para desarrollarse
armónicamente.

Estilos de afrontamiento

El concepto de estrategia de afrontamiento ha sido trabajado en el


campo de la salud mental y la psicopatología, principalmente relacionándolo
con el estrés, las emociones y la solución de problemas. Con relación al
estrés, las estrategias de afrontamiento o estrategias coping, son
consideradas como conjunto de recursos y esfuerzos tanto cognitivos como
comportamentales orientados a resolver el problema, a reducir o eliminar la
respuesta emocional o a modificar la evaluación inicial de la situación
Lazarus y Folkman, (1984).
La utilización de determinada estrategia de afrontamiento va a depender
de la situación en sí, la evaluación cognitiva y el control percibido, las
emociones y/o la activación. La tendencia a sobregeneralizar su uso se
convierte en estilos de afrontamiento o formas características y relativamente

17
estables que las personas utilizan para enfrentarse a las situaciones
estresantes Fernández-Abascal y Palmero, (1999).
Los estilos de afrontamiento pueden focalizarse en el problema, en la
emoción o en la valoración de la situación; al dirigirse al problema, se
consolida un estilo de afrontamiento orientado a manipular o alterar las
condiciones responsables de la amenaza. Al dirigirse a la respuesta
emocional, el estilo de afrontamiento se orienta a reducir o eliminar la
respuesta emocional generada por la situación. Si se dirige a modificar la
evaluación inicial de la situación, el estilo de afrontamiento tiende a reevaluar
el problema. Los esfuerzos cognitivos o comportamentales pueden darse de
manera activa, pasiva o evitativa; activa al movilizar esfuerzos para los
distintos tipos de solución de la situación, pasiva al basarse en no hacer
nada directamente sobre la situación y esperar que cambien las condiciones,
y de manera evitativa, intentando evitar o huir de la situación y/o de sus
consecuencias. Fernández- Abascal y Palmero, (1999).

Según Lazarus y Folkman (1980) el afrontamiento implica todos los


esfuerzos cognitivos y conductuales para manejar las demandas externas o
internas que son evaluadas como algo que grava o excede los recursos de la
persona, es decir, para el manejo de una situación estresantes y el estado
emocional que genera.

Para Endler y Parker (1990) existen principalmente tres tipos de


afrontamiento:
(1) Afrontamiento orientado hacia la tarea: este tipo de afrontamiento se
centra en resolver el problema de manera lógica, centrándose en las
soluciones y en la elaboración de planes de acción.
(2) Afrontamiento orientado hacia la emoción: este tipo de afrontamiento se
centra en respuestas emocionales, autopreocupaciones y reacciones
fantásticas.

18
(3) Afrontamiento orientado hacia la evitación: este tipo de afrontamiento se
centra en buscar otras situaciones que nos hagan evadirnos del problema,
evitarlo. Por ejemplo, visitar a un amigo (evitación- diversión) o irse a ver
escaparates (evitación-distracción).
Hay que decir que las diferentes estrategias de afrontamiento que el
sujeto utiliza en un momento determinado influyen en que la persona viva la
situación como estresante o, por el contrario, que pueda suprimir el estado
emocional de estrés y ayudar de esta forma a la adaptación del sujeto a su
medio.
Siguiendo a Lazarus y Folkman (1980), la consideración del afrontamiento
como proceso implica asumir que dicho término se emplea
independientemente de que los resultados sean eficaces o ineficaces. No
existen procesos de afrontamiento universalmente buenos o malos; ello
depende de múltiples factores como la persona, el tipo específico de
encuentro (relación entre la persona y el estresor), etc. No obstante, el
análisis lógico de la situación estresante y la elaboración de planes de acción
se relaciona frecuentemente con resultados positivos.

Salud Mental

Para establecer lo que es enfermedad mental de manera precisa,


se considero pertinente definir a lo que se refiere salud mental desde
la visión del ser humano como un ser biopsicosocial, por lo que se
presenta una definición de salud referida al equilibrio que debe existir
entre los elementos antes señalados, a objeto de tener un marco de
referencia, para la investigación aquí propuesta. Según la
Organización Mundial de la Salud (OMS) (1946), la salud, es “el
estado de bienestar físico, mental y social completos, y no solamente
la ausencia de enfermedad y minusvalía”.

19
La Organización Mundial de la Salud, por su parte, explica que
no existe una definición "oficial" sobre lo que es salud mental y que
cualquier definición al respecto estará siempre influenciada por
diferencias culturales, asunciones subjetivas, y disputas teóricas; sin
embargo, esta organización reconoce que el concepto de salud mental
incluyen bienestar subjetivo, autosuficiencia, autonomía,
competitividad, dependencia inter-generacional y auto-actualización
del propio intelecto y potencial emocional, entre otros.
La salud mental ha sido definida de múltiples formas por
estudiosos de diferentes culturas, una de ellas establece que Salud
mental o "estado mental" es la manera como se conoce, en términos
generales, el estado de equilibrio entre una persona y su entorno
socio-cultural lo que garantiza su participación laboral, intelectual y de
relaciones para alcanzar un bienestar y calidad de vida. Se dice "salud
mental" como analogía de lo que se conoce como "salud o estado
físico", pero en lo referente a la salud mental indudablemente existen
dimensiones más complejas que el funcionamiento orgánico y físico
del individuo.

Enfermedad o trastorno Mental

Diferentes interpretaciones se han dado a la enfermedad mental:


que si es producto de causas desconocidas, de fuerzas mágicas, de
castigo divino y hasta de posesión diabólica; sin embargo, hoy se
sabe que los trastornos mentales están, en gran parte, orgánicamente
determinados y que existen algunos patrones neurológicos y
fisiológicos que se encuentran dañados y que pueden alterar las
funciones racionales, de tal manera que el paciente pueda llegar a no
ser capaz de entender la naturaleza y las consecuencias de su propia
conducta. Sin embargo, a partir del año 1790 la psiquiatría empezó a

20
ser una ciencia respetable cuando el médico parisino Philippe Pinel
introdujo una perspectiva psicológica y comenzó a hacer estudios
clínicos objetivos. A partir de entonces, se empezaron a definir los
principales tipos de enfermedades mentales y sus formas de
tratamiento.
En este orden de ideas, Gispert (2000:10) expresa que las
enfermedades mentales “son afecciones o síndromes psíquicos y
conductuales, opuestos a los propios de los individuos que gozan de
buena salud mental”. Estos síntomas, en general, son causa de
angustia y deterioro en importantes áreas del funcionamiento psíquico,
afectando el equilibrio emocional, al rendimiento intelectual y a la
adaptación familiar y social.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (2000), se
refiere, al enfermo mental como “la persona con trastornos mentales,
expresados por el comportamiento no adecuado, amenazador y
desorganizado de las relaciones, que difieren de manera importante
del comportamiento prevalente en la sociedad a la que dicha persona
pertenece”.
La enfermedad mental, según Gispert (2000) es un grupo de
trastornos caracterizado por la anormalidad psíquica y conductual
asociada a deterioros transitorios o permanentes en el funcionamiento
del cerebro. Los desórdenes presentan diferentes síntomas según el
área afectada o la causa, duración y progreso de la lesión. El daño
cerebral procede de una enfermedad orgánica, del consumo de
alguna droga lesiva para el cerebro o de alguna enfermedad que lo
altere indirectamente por sus efectos sobre otras partes del
organismo.
Los síntomas asociados a los trastornos orgánicos mentales
podrán ser el resultado de un daño orgánico o la reacción del paciente
a la pérdida de capacidades mentales. Ciertos trastornos presentan

21
como característica principal el delirio o un estado de obnubilación de
la conciencia que impide mantener la atención, acompañado de
errores perceptivos y de un pensamiento desordenado e inadaptado a
la realidad.
Otro síntoma frecuente de los trastornos orgánicos como la
enfermedad de Alzheimer, es la demencia, caracterizada por fallos en
la memoria, el pensamiento, la percepción, el juicio y la atención, que
interfieren con el funcionamiento ocupacional y social. La demencia
senil se da en la tercera edad y produce alteraciones en la expresión
emocional (apatía creciente, euforia injustificada o irritabilidad).
Entre los diferentes tipos de enfermedades mentales
encontramos:
Esquizofrenia: La esquizofrenia abarca un grupo de trastornos
graves, que normalmente se inician en la adolescencia. Los síntomas
son agudas perturbaciones del pensamiento, la percepción y la
emoción que afectan las relaciones con los demás; unidos a un
sentimiento perturbado sobre uno mismo y a una pérdida del sentido
de la realidad que deteriora la adaptación social. El concepto de
‘mente dividida’, implícito en la palabra esquizofrenia, hace referencia
a la disociación entre las emociones y la cognición, y no, como
vulgarmente se supone, a una división de la personalidad que, más
bien, hace referencia a otro tipo de trastornos como la personalidad
múltiple o psicopatía, denominada así por el psiquiatra alemán Emil
Kraepelin.
Trastornos de la Afectividad: Son aquellos trastornos en los que
el síntoma predominante es una alteración del estado de ánimo. El
más típico, la depresión, se caracteriza por la tristeza, el sentimiento
de culpa, la desesperanza y la sensación de inutilidad personal. Su
opuesta, la manía, se caracteriza por un ánimo exaltado, expansivo,

22
megalomaníaco y también cambiante e irritable, que se alterna casi
siempre con el estado depresivo.
Trastornos Paranoides: se presenta en forma de ideas delirantes
(creencia falsa, firmemente asentada, y resistente por ello a la crítica)
y las más típicas son las de persecución (se considera víctima de una
conspiración), las de grandeza (el sujeto se cree de ascendencia
noble, principesca, santa, genial e incluso divina) o las celotípicas
(celos desmedidos). En cualquier caso, la personalidad paranoide es
defensiva, rígida, desconfiada y egocéntrica, por lo que tiende a
aislarse y puede llegar a ser violentamente antisocial. Este trastorno
normalmente suele iniciarse en la mitad o al final de la vida,
destruyendo las relaciones sociales, sobre todo las de pareja.
Trastornos de Ansiedad: el síntoma predominante es la ansiedad
y se presenta en dos casos: los desórdenes que suponen pánico ante
situaciones concretas y los trastornos ansiosos generalizados.
En las fobias y las neurosis obsesivo-compulsivas, el pánico
aparece cuando el individuo intenta dominar otros síntomas: el miedo
irracional, desmedido, a una situación, objeto o animal concretos que
altera su vida cotidiana. Entre las más perturbadoras está la
agorafobia, miedo a los espacios abiertos o muy cerrados
(claustrofobia), tras el cual se oculta en realidad un miedo desmedido
a la muerte o al propio pánico, y que impide a los que la sufren salir a
la calle. Por otro lado, las obsesiones, neurosis cada vez más
frecuentes (frente a la histeria, que ha ido disminuyendo su
frecuencia), consisten en pensamientos, imágenes, impulsos o ideas
repetitivas y sin sentido para la persona, que se ve sin embargo
sometida a ellos. Por último, la compulsión es la tendencia irrefrenable
a repetir mecánicamente comportamientos inútiles, rituales de
comprobación o de previsión (por ejemplo, lavarse las manos más de
treinta veces al día o revisar una y otra vez la llave de paso del gas).

23
Además de la depresión neurótica y otros trastornos ansiosos,
hay diversas situaciones que tradicionalmente se han considerado
neuróticas, como la histeria, las reacciones de conversión (de un
conflicto psíquico a una enfermedad orgánica irreal), la hipocondría y
los trastornos disociativos. Los llamados trastornos psicosomáticos se
caracterizan por la aparición de síntomas físicos sin que concurran
causas físicas aparentes. En la histeria, las quejas se presentan de
forma teatral y se inician, por lo general, en la adolescencia, para
continuar durante la vida adulta. Es un trastorno que se ha
diagnosticado con mayor frecuencia en mujeres que en hombres, y en
su extremo —la histeria de conversión— aparecen parálisis que imitan
trastornos neurológicos, de modo similar al dolor psicogénico que no
presenta una causa física aparente. Por último, en la hipocondría el
síntoma dominante es el miedo irracional a la enfermedad.
Entre las formas disociativas de trastorno mental están la
amnesia psicológica y la personalidad múltiple (antaño conocida como
histeria de la personalidad alternante), una extraña enfermedad en la
que el paciente comparte dos o más personalidades distintas,
alternando el predominio de una o de otra.
Trastornos de la Personalidad: a diferencia de lo episódico de los
trastornos neuróticos e incluso de algunos psicóticos, los trastornos de
la personalidad duran toda la vida; determinados rasgos de la
personalidad del enfermo son tan rígidos e inadaptados que pueden
llegar a causar problemas laborales y sociales, daños a uno mismo y
probablemente a los demás. La personalidad paranoide se caracteriza
por la suspicacia y la desconfianza. La esquizoide ha perdido la
capacidad e incluso el deseo de amar o de establecer relaciones
personales, mientras que la esquizotípica se caracteriza por el
pensamiento, el habla, la percepción y el comportamiento extraños.
Las personalidades histriónicas se caracterizan por la teatralidad de

24
su comportamiento y de su expresión, relacionadas en parte con el
siguiente tipo, la personalidad narcisista, que demanda la admiración y
la atención constante de los demás.
Las personalidades antisociales (antes conocidas como
psicopatías) se caracterizan por violar los derechos de los demás y no
respetar las normas sociales. Este tipo de personalidad es inestable
en su autoimagen, estado de ánimo y comportamiento con los demás,
y los ‘evitadores’ son hipersensibles al posible rechazo, la humillación
o la vergüenza. La personalidad dependiente es pasiva hasta el punto
de ser incapaz de tomar una decisión propia, forzando a los demás a
tomar las decisiones en su lugar. Los ‘compulsivos’ son
perfeccionistas hasta el extremo e incapaces de manifestar sus
afectos. Por último, los ‘pasivos-agresivos’ se caracterizan por
resistirse a las exigencias de los demás a través de maniobras
indirectas, como la dilación o la holgazanería.
De acuerdo con Rotondo citado en Bazán, (1997), cualquier
enfermedad en el ser humano, incluyendo los trastornos psiquiátricos,
es el resultado de un proceso dinámico que se inicia debido a la
interacción entre los agentes de enfermedad o noxas, el organismo
humano o huésped y el medio ambiente que facilita o dificulta la
acción del primero sobre el segundo. La enfermedad, así considerada
es un proceso dinámico organizado en una serie ordenada de
acontecimientos generados por los siguientes elementos: Agente, en
psiquiatría, igual que en medicina general, hay entidades con agente
conocido y agente desconocido; Huésped, todo ser humano es
susceptible de tener un trastorno psiquiátrico; y Ambiente, es un
agregado que dificulta o facilita la acción del agente o noxa.
Además señala que una vez iniciado ese proceso el paciente
psiquiátrico debe ser cuidado, generalmente por su propia familia o se
procede a un confinamiento o reclusión involuntaria en instituciones

25
del estado donde es atendido por profesionales que deben cumplir
con el principal deber de todo médico que es la promoción de la salud,
la reducción del sufrimiento y la protección de la vida.

Modelo psicoeducativo en pacientes con trastornos


mentales

En el marco de los modelos multicausales, se encuentra la


psicoeducación como un modelo de intervención en el tratamiento
integral de las enfermedades mentales, el cual se inserta en un
modelo de tratamiento global y se apoya en una serie de
investigaciones que resaltan la influencia del ambiente que rodea al
paciente sobre el curso de la enfermedad, así como del resultado
producido por la aplicación de modelos de tratamiento en los que se
involucra activamente a los familiares.
Este modelo surge del trabajo de Brown en (1972), con familias
de sujetos diagnosticados con esquizofrenia, y posteriormente
ampliado a otros trastornos mentales. Según la opinión del autor “en
tanto más intolerantes, sobre involucrados, hostiles y críticos son los
familiares, más frecuentes son las recaídas de los enfermos”. Esta
aseveración permite conjeturar que el autor logro establecer patrones
de comportamiento específico entre familiares y enfermo que están
involucrados en la recaída y agravamiento de los signos y síntomas de
la enfermedad. Uno de los principales propósitos de este modelo es
disminuir la carga que el enfermo representa para su familia. Una vez
localizados dichos comportamientos y articulados como patrones se
propone su intervención para modificarlos y cambiar sus efectos.
Varias han sido las intervenciones familiares que bajo el nombre
de modelo psicoeducativo se han ido desarrollando, a lo largo de las
últimas décadas, como son: la terapia familiar conductual de Falloon,

26
el paquete de intervenciones de Leff, el modelo psicoeducacional de
Anderson, las intervenciones dirigidas al afrontamiento del estrés de
Tarrier, los grupos multifamiliares de McFarlane, entre otros. A pesar
de la heterogeneidad de sus formatos, todas estas intervenciones
comparten el objetivo de reducir el estrés familiar y la tasa de
recaídas, con una metodología que incluye la educación acerca de la
enfermedad mental y el entrenamiento en habilidades
comunicacionales y de resolución de problemas. Mediante un
ambiente de colaboración con los familiares que cuidan al paciente, se
pretende la reducción del estrés y la carga emocional, el desarrollo y
fortalecimiento de las habilidades para anticipar y resolver problemas,
la reducción de la expresión de enfado y sentimientos de culpa; el
mantenimiento de expectativas razonables acerca del paciente y el
logro de cambios deseables en la conducta y el sistema de creencias
de los familiares.
La psicoeducación, de acuerdo con Díaz, González y Varela,
(2001), se define como: “La aproximación terapéutica en la cual se
proporciona a los familiares de un paciente, información específica
acerca de la enfermedad y entrenamiento en técnicas para afrontar el
problema”.
En resumen, este modelo le permite entender al familiar que el
trastorno es una enfermedad cerebral, lo imprescindible del
tratamiento farmacológico, la importancia de la familia como principal
agente rehabilitador; procurando que la familia tenga una forma de
comportamiento basada en la información proporcionada, con miras a
bajar el nivel de exigencia del enfermo al permitirle la libre expresión,
facilitando así su reinserción al medio social.
Los principios metodológicos que conforman este modelo son:
1. Alianza terapéutica
2. Suministro de información

27
3. Propiciación del ambiente que vincule al paciente con la comunidad
4. Integración gradual del paciente a su rol familiar
5. Continuidad en el cuidado del paciente y vinculación institucional.
Esta modalidad comprende tres aspectos:
I. Ayuda a los familiares del paciente
II. Reconocimiento de que el ambiente no está implicado en la etiología
III. Reforzamiento de habilidades y competencias de los familiares.
El modelo psicoeducativo se propone en cuatro etapas:
1. Involucramiento familiar
2. Información y orientación
3. Entrenamiento en la solución de problemas
4. Facilitación de la rehabilitación social y vocacional del paciente
Este modelo de intervención familiar ha demostrado ser efectivo
para reducir las recaídas, el deterioro social y la carga familiar. Es por
ello, que siguiendo los lineamientos del mismo, este estudio se
propone diseñar un programa de participación familiar (intervención
familiar) que involucre tanto a los pacientes como a las personas que
componen la unidad familiar, en cuanto al manejo básico de la
enfermedad, el tratamiento y las necesidades socio afectivas del
enfermo.

El apoyo familiar como proceso psicosocial

Los procesos psicosociales se refieren a aquellas acciones de


individuos o grupos, referidas o influidas por otros individuos o grupos.
Una acción es considerada como psicosocial en la medida en que no
puede explicarse a partir del sujeto mismo, sino que, explícita o
implícitamente, en su forma o contenido, en su raíz o en su intención,
está referida a otro y a otros. Desde esta perspectiva, las acciones
son entendidas como dinámicas, y se busca, entonces, comprender

28
sus procesos de construcción y, desde allí, sus posibilidades de
transformación. La acción humana, por tanto, es entendida, en la
forma como lo social se convierte en personal y lo personal, en social
desde sus significaciones y valoraciones, las cuales ligan a una
persona con una sociedad concreta y con intereses determinados
El apoyo familiar definido como proceso psicosocial implica
considerar que las formas en las que éste se dé y los significados y
valores que se le atribuyan, sólo podrán ser comprendidos a la luz de
un contexto socio histórico específico. Esto significa que el apoyo
familiar, además de ser una estrategia individual y relacional
particular, anclada a su vez en condiciones biológicas, se configura y
se transforma de manera específica, de acuerdo con las condiciones
sociales e históricas presentes. Así, las transformaciones de lo
económico y lo institucional inciden en las estrategias adoptadas por
las familias para afrontar las crisis, además de determinar muchas de
dichas crisis.
Dentro de las redes de apoyo de las cuales hace parte y con las
cuales cuenta un individuo, la familia, en las diferentes formas en que
se configura dependiendo del contexto cultural e histórico, constituye
la más importante, o al menos la más visible para la gran mayoría de
las personas, bien sea por su presencia o su carencia. La familia, por
tanto proporciona recursos y servicios de diversa índole a las
personas, como la compañía social, el apoyo emocional, la guía
cognitiva y los consejos, la regulación social, la ayuda material y de
servicios, por ello, la familia es considerada como una de las piezas
nucleares de las instituciones capaces de brindar apoyo en medio de
los cambios, aunque ella misma se vea sometida a modificaciones,
conservándose, no obstante, a través de éstos.
Otro factor importante a considerar es la modificación que ha
tenido la familia como consecuencia del desplazamiento por parte del

29
estado, pues a medida en que los estados se hicieron cargo de
funciones que eran antes ejercidas por la familia como el cuidado de
la salud, educación de sus integrantes, entre otras, estas han asumido
nuevas funciones, pero se siguen manteniendo como la instancia
principal e incluso única de satisfacción de deseos y necesidades
emocionales y existenciales. Es por eso que se observa, la paradoja
de que a medida que la protección dada desde el Estado se fue
incrementado, la protección ofrecida por la familia se fue debilitando
en cuanto a lo social, comunitario, y, en algunos casos, también en lo
familiar, un ejemplo de ello lo constituye el estado de abandono
familiar en que se encuentra un elevado porcentaje de enfermos
mentales en el país, dejando la responsabilidad de esta situación
únicamente en manos del estado.
Sin embargo, para cambiar esta situación, en la actualidad se
están dando una serie de cambios bajo un paradigma humanista, que
considera al ser humano como ser social, capaz de responder y
participar activamente con un sentido de cooperación, solidaridad y
convivencia para lograr la transformación de la sociedad en la que
vive.

Recursos asistenciales en Salud Mental Oleta (1997)

Dispositivos integrados en el área de Salud, encaminados a la


prevención, asistencia y rehabilitación de las personas. La distribución de
estos recursos se atiene a determinaciones de tipo epidemiológico,
existiendo un reparto proporcional al censo demográfico.

La red psiquiátrica en Venezuela está conformada por:


1. Centros de Salud Mental.
2. Unidades de Hospitalización Psiquiátrica.
3. Estructuras intermedias.

Centro de salud mental

30
Según la O.M.S (2002) la estructura asistencial está sectorizada y
dividida en áreas sanitarias que de penden o de las respectivas
Comunidades Autónomas. También existen conciertos entre el Servicio
Sanitario Público y otras instituciones de carácter privado. El objetivo de la
red asistencial es la atención psiquiátrica especializada a pacientes remitidos
desde la Atención Primaria o de otros niveles sanitarios, con seguimiento
continuado.
Se constituye con un equipo multidisciplinar en el que se incluyen
psiquiatras, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales, auxiliares de
psiquiatría y celadores principalmente.

Unidad de hospitalización psiquiátrica (unidades de corta estancia)

Son unidades adecuadas a la hospitalización de pacientes con


enfermedades mentales, localizadas la mayor parte en Hospitales Generales.
Están sectorizadas, y se coordinan con el resto de los recursos de salud
mental y asistencia psiquiátrica. Se encuentran atendidas por un equipo
multidisciplinar.
Trabajan las 24 horas del día, y se dedican a la atención de los siguientes
casos:
- Cuando la patología presentada pueda ser una amenaza para el propio
paciente o para los demás.
- Fracaso de tratamientos ambulatorios en otras instituciones.
- Separación del entorno sociofamiliar, por ser negativo para el paciente o
vice versa, cuando la enfermedad del paciente no puede ser atendida en
condiciones por la familia. .
- Evaluación y proceso diagnóstico.
- Desintoxicación.
- Enfermedad física que se agrava con patología psíquica

. Estructuras intermedias

31
Hospital de día

Es una alternativa al ingreso total; se puede definir como una


hospitalización parcial. Se debe realizar una programación individual que
comprenda: tratamientos, psicoterapia, terapia ocupacional, socioterapia y
reeducación. El horario generalmente es de mañana y media tarde (9 h a 17
h), Y se permanece en el propio domicilio el resto del tiempo. El tratamiento
tiene una duración de uno a seis meses.

Centro de día

Trabajan con pacientes crónicos en situación de dependencia o con


medio socio laboral desestructurado. Su finalidad es la recuperación de
habilidades o destrezas para integrarse en la sociedad. Se debe llegar a la
autonomía e independencia. Se utilizan técnicas de psicoterapia individuales,
grupales, terapias ocupacionales, etc.

Centro de media estancia

Pertenecen al nivel terciario y su objetivo es la rehabilitación del paciente


después de haber pasado un ingreso de 6 a 12 meses. Utiliza terapias de
grupo, individuales, terapia ocupacional y formación en actividades y oficio.

Centros de larga estancia

Según Oleta (1997) Son establecimientos y pacientes de larga instancia


aquellos hospitales u otros centros asistenciales de carácter público o
privado, destinados a la atención de pacientes psiquiátricos con estadía
superior a los 45 días, en cuya asistencia predominen actividades de
prevención terciaria, además, se concibe como último recurso terapéutico
luego de haber agotado todas las posibilidades previas de restauración de la

32
salud mental. En caso de considerarse imprescindible dicha hospitalización,
se procederá con el objetivo de lograr la recuperación, resocialización y
egreso del paciente en el menor tiempo posible.

El paciente de larga estancia


La condición de discapacidad varía a lo largo de un continuo, desde
aquellas personas que tras una crisis psicótica tienen una completa remisión
psicopatológica y mantienen un nivel de funcionamiento que les permite
llevar una vida normal independiente, hasta personas cuya gravedad en su
psicopatología y su gran deterioro personal hará necesaria una atención
intensa y una supervisión constante, a estas variantes se les llama pacientes
de larga estancia.También, en algunos casos, ocurre que hay personas con
crisis periódicas que generan retrocesos o deterioros en su funcionamiento y
que requieren programas especiales de rehabilitación y apoyo social que les
permita mantenerse en la comunidad o internaciones breves. Rodríguez
(2003).

Aldaz y Vázquez (1996) establece que se debe comenzar por definir que
son los enfermos mentales graves, y distinguirlos de la mayoría de los
usuarios de los servicio de salud mental, estas prioridades permiten
establecer a los pacientes que requieren una mayor necesidad de atención,
y delimitar a su vez quien tiene mayor necesidad de programas de control a
largo plazo. La cantidad y características de estos pacientes varían según las
circunstancias locales, pero generalmente se concretan en personas
susceptibles a ser desafiantes o difíciles de colocar, y por lo tanto terminan
siendo los nuevos pacientes de larga estancia en los centros encargados.

Bases Legales

33
En un contexto amplio en que se conjugan la medicina, la
bioética, la filosofía y el derecho, la norma jurídica puede y debe
cumplir distintas funciones en la atención de salud mental. Tiene el
papel instrumental e indispensable para la eficaz ejecución de
políticas programadas y acciones que requiere la salubridad colectiva.
De igual forma le toca a la norma jurídica el aporte que compete al
derecho en el plano de los principios y valores éticos que deben
enmarcar las acciones de prevención, tratamiento y rehabilitación que
tengan lugar en el sistema reestructurado de la atención psiquiátrica.
Entre los derechos específicos de los enfermos mentales están:
- El derecho a ser tratado en todo momento con la solicitud, el respeto y
la dignidad propia de su condición.
- Derecho a recibir la mejor atención y tratamiento apropiado y menos
restrictivo, según las más elevadas normas técnicas y éticas.
- Derecho a recibir educación y capacitación adecuada a su estado, a
objeto de ser habilitado para su propio desarrollo.
- Derecho a trabajar y a recibir la remuneración correspondiente.
- Derecho a personalidad civil y a que su incapacidad para ejercer
derechos sea determinada por un tribunal a través de un procedimiento
establecido por la ley.
- Derecho a no ser discriminado ilegalmente en el goce y ejercicio de sus
derechos en atención al estado de su salud.
Los enfermos mentales deben conservar el pleno goce y
ejercicios de sus derechos políticos, civiles, sociales, laborales o
culturales, salvo q un tribunal declare su incapacidad en la forma
prescrita por la ley
La constitución de la república bolivariana de Venezuela (1999)
en su artículo 19 establece: “el estado garantizara a toda persona,
conforme al principio de progresividad y sin discriminación alguna, el

34
goce y ejercicio irrenunciable, indivisible e interdependiente de los
derechos humanos, su respeto y garantía son obligatorios para los
órganos del poder público” (p.10).
Artículo 20: “toda persona tiene derecho al libre desenvolvimiento
de su personalidad, sin más limitaciones que las que se derivan del
derecho de los demás y del orden público y social” (p.11).
Artículo 21: “todas las personas son iguales ante la ley, y en
consecuencia: no se permitirá discriminaciones fundadas en la raza,
sexo, credo, condición social o aquellas que en general tengan por
objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o
ejercicio en condiciones de igualdad, de los derechos y libertades de
todas las personas.
La ley garantizara las condiciones jurídicas y administrativas para
que la igualdad ante la ley sea real y efectiva; adoptara medidas
positivas a favor de personas o grupos que puedan ser discriminados,
marginados o vulnerables; protegerá a aquella persona que por
alguna de las condiciones antes especificadas se encuentren en
circunstancias de debilidad y sancionara los abusos y maltratos que
contra ella se cometan.
Artículo 81: “toda persona con discapacidad o necesidades
especiales tiene derecho al ejercicio pleno y autónomo de sus
capacidades y a su integración familiar y comunitaria. El estado, con la
participación solidaria de las familias y la sociedad, les garantizara el
respeto a su dignidad humana, la equiparación de oportunidades,
condiciones laborales satisfactorias y promoverá (SIC) su formación,
capacitación, y acceso al empleo, acorde con sus condiciones de
conformidad con la ley…” (p.35).

35
Definición de términos

Abandono familiar. Acción y efecto de dejar o desamparar a


una persona ascendente, descendente o colateral, de un linaje.
Afecto: es la expresión extrema del estado de ánimo, de los
sentimientos y las emociones, que se traducen en conductas, palabras
y gestos.
Agresividad: estallidos de rabia, ira, furia, desproporcionada al
estimulo acompañada de agitación, agresión y destructividad.

Condición de alta: Estado de salud satisfactorio que le permita


al usuario egresar del hospital.
Conducta: conjunto de acciones orgánicas, motoras, psíquicas
y verbales por las cuales un individuo intenta adaptarse a una
situación.
Conflicto: es una situación derivada por los dilemas
emocionales e intencionales frente a un problema. Estado del
organismo sometido a la acción de motivaciones incompatibles.
Confusión: disminución del estado de alerta, desorientación o
incoherencia.
Confusión mental: estado caracterizado por desorientación
temporal, oscurecimiento muy acentuado de la conciencia,
incoherencia de las ideas y perplejidad.
Depresión: reacción prolongada de tristeza o frustración ante
perdidas emocionales; tristeza, desaliento, pesimismo.
Desesperanza: desvanecimiento del ánimo y la esperanza que
demuestra sentimientos de aflicción.
Esquizofrenia: conjunto de trastornos de causa incierta que
influyen de manera invariable, perturbaciones del pensamiento en un
sensorio claro y con frecuencia síntomas característicos como

36
alucinaciones, delirios, conducta aberrante y deterioro en el nivel
general del funcionamiento.
Euforia: manifestación extrema de bienestar, locuacidad,
optimismo, estado placentero contagioso pero frágil, seudofelicidad
inmotivada y superficial.
Exaltación: júbilo intenso con sentimientos de grandeza.
.
Establecimientos de larga estancia: Según Oleta (1997) Son
establecimientos y pacientes de larga instancia aquellos hospitales u otros
centros asistenciales de carácter público o privado, destinados a la atención
de pacientes psiquiátricos con estadía superior a los 45 días

Estrategias de afrontamiento: el afrontamiento implica todos los esfuerzos


cognitivos y conductuales para manejar las demandas externas o internas
que son evaluadas como algo que grava o excede los recursos de la
persona, es decir, para el manejo de una situación estresantes y el estado
emocional que genera. Lazarus y Folkman (1980).

Pacientes de larga estancia: pacientes con nulas o escasas posibilidades


de recuperación y que precisan cuidados continuos de enfermería. Oleta
(1997)

Operacionalización de Variables

Variable Definición Conceptual Definición Operacional


Estilos de Lazarus y Folkman (1980) Se refiere. En la
escala cuantitativa los
afrontamiento implica todos los esfuerzos
pacientes serán
cognitivos y conductuales evaluados a través de

37
para manejar las demandas siete estilos básicos de
afrontamiento: (1)
externas o internas que son
focalizado en la
evaluadas como algo que solución del problema,
(2) autofocalización
grava o excede los recursos
negativa, (3)
de la persona, es decir, reevaluación positiva,
(4) expresión emocional
para el manejo de una
abierta, (5) evitación,
situación estresantes y el (6) búsqueda de apoyo
social, y (7) religión.
estado emocional que
Que representan los
genera. estilos de afrontamiento
racional y focalizado en
la emoción.

38
MAPA DE VARIABLES

Variable Dimensión Indicador Ítems


Estilos de  Focalizado en la 1, 8, 15, 22,
afrontamiento solución del Análisis de las causas 29,362, 9,
problema (FSP) de los problemas

 Autofocalización
negativa (AFN) Sentirse incapaz de 16, 23, 30, 37
solucionar los
problemas

 Reevaluación
positiva (REP): Enfocarse en los 3, 10, 17, 24, 31,
Expresión emocional aspectos negativos de 38.
abierta (EEA) las circunstancias.

 Evitación (EVT): Postergar las 5, 12, 19, 26, 33,


soluciones a los 40.
problemas

 Búsqueda de apoyo
social (BAS) 6, 13, 20, 27, 34,
Pedir ayuda a terceros 41

7, 14, 21, 28, 35,


 Religión (RLG Buscar ayuda 42
espiritual o religiosa

39
CAPÍTULO III

MARCO METODOLÓGICO
Naturaleza de la investigación

La metodología en las investigaciones comprende el conjunto de


operaciones ordenadas con el que se pretende obtener un resultado. Es por
ello, que el enfoque utilizado en esta investigación es cuantitativo, de este
modo Barrantes (2003) indica que con esta metodología: Se Buscan las
causas de los fenómenos sociales, prestando escasa atención a los estados
subjetivos de los individuos, se refiere a las técnicas experimentales
objetivas. Por lo que emplea un modelo cerrado de razonamiento lógico
deductivo, además la finalidad de la investigación es la verificación y su
diseño de investigación es determinado.
Del mismo modo, se encuentra enmarcado en el paradigma positivista,
esto debido a que este mismo pone su acento en lo observable y medible, en
donde subyace lo observado en el proceso de evaluación, es de gran interés
producir información que sea de utilidad para el control de un determinado
hecho o fenómeno.
El tipo de diseño de investigación es No experimental ya que se realiza
sin manipular deliberadamente las variables, este diseño se divide es dos
tipos que son longitudinales y transaccionales en esta investigación se
tomara el subtipo transaccional o transversal ya que estas recolectan los
datos en un solo momento en un tiempo único.
De acuerdo al problema planteado en la siguiente investigación y los
objetivos propuestos en la misma, se decidió realizar una investigación de
tipo y nivel descriptivo siendo el propósito de la investigadora describir los
estilos de afrontamiento en pacientes de larga estancias internos en el

40
Centro de Centro de Resocialización Psiquiátrica “El Pampero” del Estado
Lara.
Según Danhke, (1989) Citado en Hernández Fernández y Batista, (2003)
señala que “los estudios descriptivos buscan especificar las propiedades
importantes de personas, grupos, comunidades o cualquier otro fenómeno
que se someta a un análisis. Miden o evalúan diversos aspectos,
dimensiones o componentes del fenómeno o fenómenos a investigar.

En esta investigación la modalidad será de campo, debido a que se


observan fenómenos tal y como se presentan en su contexto natural, para
ser analizados, obteniendo los resultados directamente de la experiencia
empírica, ya que de acuerdo a los autores anteriormente mencionado,
Hernández Fernández y Baptista (2003) un estudio de campo: Son
investigaciones donde la recopilación de información se realiza dentro del
ambiente en el que se presenta el fenómeno o hecho a estudiar, donde se
utilizan métodos específicos de recopilación de datos y análisis de
informaciones utilizan métodos y técnicas matemáticas.

Población

De acuerdo a Hernández Fernández y Baptista (2003), la población es


el conjunto de todos los casos que concuerdan con una serie de
especificaciones. La población de la presente investigación son los
pacientes desvinculados familiarmente que permanecen internos en el
Centro de Resocialización Psiquiátrica “El Pampero” del Estado Lara. Es
importante aclarar que de los 250 enfermos recluidos en el Centro, sólo un
40% mantiene algún tipo de vinculación familiar, mientras que el restante
60% no tiene ningún tipo de contacto con su familia por tanto, la población
sólo está referida al 40% de los enfermos.

41
Muestra

La muestra es definida por Hernández, Fernández y Baptista (2003),


como aquella que es en esencia un subgrupo de la población. La presente
investigación considero como muestra el 40% de la población. La selección
de la muestra es de tipo no probabilística, ya que debe cumplir con los
criterios de haber sido paciente de larga estancia, dado de alta desde hace
más de un año y permanecer como interno en la institución hasta la fecha de
la presente investigación. En consideración a lo anterior Hernández
Fernández y Baptista (2003), señala que las muestras probabilísticas no
depende de la probabilidad sino de causas relacionadas con las
características del investigador o del que hace la muestra.
En la presente investigación los pacientes deberán cumplir con las
siguientes características:
Pacientes diagnosticados con enfermedad mental, de larga estancia en la
institución, de ambos sexos, con intervalos de edad entre 25 y 50 años que
hayan sido dados de alta, desde hace 1 año y que hasta la actualidad ningún
familiar lo haya reclamado, visitado, contactado o venido a buscar para
reinsertarlo en su sistema familiar.

Técnicas de Recolección de Datos

Para Hernández, Fernández y Baptista (2003), los distintos instrumentos


de recolección de datos son formas o maneras de obtener información sobre
un hecho.
En la presente investigación se utilizará el instrumento: El Cuestionario
de Afrontamiento del Estrés (CAE) una escala tipo Likert graduada entre O
(Nunca) y 4 (Casi siempre), para hacer frente a las situaciones o problemas
estresantes, de 42 ítems, es una medida de autoinforme diseñada para
evaluar siete estilos básicos de afrontamiento: (1) focalizado en la solución

42
del problema, (2) autofocalización negativa, (3) reevaluación positiva, (4)
expresión emocional abierta, (5) evitación, (6) búsqueda de apoyo social, y
(7) religión

Confiabilidad y Validez

Según Pardo y Ruiz (2002) la fiabilidad es la capacidad el instrumento


para medir de forma consistente, precisa y sin error. El instrumento CAE
posee una confiabilidad interna (consistencia interna) y se analizó a través
del Cronbach presentando coeficientes > 0,85 (niveles excelentes).

Una de las definiciones de la validez del instrumento la propone


Hernández (1991), quien indica que “se refiere al grado en que un
instrumento mide la variable que pretender medir” para el análisis factorial
del instrumento, se utilizó la validez de criterio y se evidenció una estructura
de dos factores, que representaban los estilos de afrontamiento racional y
focalizado en la emoción.

43
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