El nacimiento de la genética desató un sinnúmero de estudios y de información que aún está en
proceso de análisis y asimilación. Muchos analistas han criticado el avance lento que ha tenido la genética en su desempeño práctico. "Si comparas los resultados directos al beneficio de la salud humana a través de la genética con otros descubrimientos que ocurrieron en estas mismas fechas, pues descubres que la genética no ha salvado las mismas vidas que el descubrimiento de algunas vacunas. Sin embargo, el problema con el genoma es que estamos conociendo los bloques básicos de la vida y primero tenemos que asimilar y entender toda esta información antes de ponerla en práctica. Es lo que ha venido haciendo la genética por los últimos cincuenta años", explicó Alexander Rich, biólogo de MIT. "La cristalografía de rayos x y los métodos con materiales fluorescentes han cambiado completamente la visión fija que se tenía del genoma hace cincuenta años. Los estudios y los métodos de análisis modernos están revelando cada vez más sorpresas sobre nuestro genoma. Los investigadores han distinguido dos tipos de ADN, uno se encuentra en el núcleo celular, es el que heredamos de ambos padres, otro se encuentra en la mitocondria y sólo se hereda de la madre ya que los espermatozoides pierden la mitocondria antes de entrar al óvulo. El ADN de la mitocondria es antiguo y muestra la descendencia matrilineal de nuestros antepasados. Estudios afirman que existen, en este genoma, indicios de los genes que una vez compartimos con bacterias. Estos estudios han ayudado a los antropólogos a descubrir nuevas fases de nuestras raíces. La criminología, la paleontología, la antropología, la paternidad, la fecundación, la reproducción, la taxonomía de las enfermedades, las condiciones hereditarias, las pruebas prenatales, los estudios con células embrionarias, los "bebés diseñados", las terapias inmunológicas, los diagnósticos tempranos y preventivos, los alimentos transgénicos, la clonación, los ratones diseñados, las secuenciaciones de genomas y las terapias genéticas, han sido todos productos del descubrimiento del ADN. Arthur Lander, biólogo celular de la Universidad de California, expresó para la BBC su opinión sobre el genoma. "Este descubrimiento sacó a la biología de la edad media, cuando la vida era todavía esa cosa misteriosa que nunca llegaríamos a entender. Con el tiempo se hizo evidente que los genes estaban hechos de químicos que podemos manipular y que al manipularlos, aprendemos cómo funciona la vida y a alterar, además, las reglas básicas con que operamos todos los seres vivos".