CUENTO PSICOLOGÍA

LA MARIPOSA

Psique es una jovencita inquieta y perspicaz, con un extraño y por demás

complicado interés por los temas humanos, interés que ha venido
desarrollando desde su niñez hace ya muchos años, y hay que aclarar que
aunque Psique es apenas en apariencia una jovencita hermosa, moderna y
llena de vida, guarda una historia muy larga, llena de encuentros y
desencuentros que se remonta a la Grecia antigua y que ahora quiero
contarles.
En aquel entonces, y siendo apenas una bebé, Psique ya se interesaba por
saber quien era ella, cual era su objeto en el mundo, pero sobre todo, ya
estaba interesada en el hombre (su espíritu humano, su alma), y su
complicada existencia, lo observaba tratando de descifrarlo, entenderlo,
ayudarlo, pero, era aún muy pequeña y no lograba comprenderlo en toda su
magnitud, mientras el hombre buscaba comprender los fenómenos físicos que
se desarrollan entorno a él, Psique busaca descifrar lo que pasaba en su
interior. Con su insaciable curiosidad, buscó entonces información en los
hombres más sabios de aquella época, buscando saciar su interés por este ser
en la época en que la esencia del hombre estaba determinada por la razón, el
interés giraba entorno ha establecer la relación de este ser dotado de razón
consigo mismo y el mundo. Psique logró acercarse y ser amiga íntima de
Aristóteles, Demócrito, Leucipo, Anaxágoras, Empédocles, Platón, Diógenes,
quienes le enseñaron que su objeto de estudio estaba compuesto de dos
sustancias en donde la inmaterial animaba a la material, la material era visible y
la inmaterial invisible, esta podía entrar y animar al hombre dándole
movimiento, cuando salía le quitaba el movimiento, en donde la sustancia
inmaterial recibía varios nombres: anima, elan vital, soplo vital, ru, alma,
espíritu, psiquis. Sin embargo, Psique aún no estaba complacida, desde su
amigo Platón siguió buscando información hasta encontrar años más tarde a
San Agustín, quien ya no tenia esta concepción cosmocentrista y le contó que
la fuente explicativa de todo esta también fuera del hombre, un DIOS creador
principio de la vida y de todos los acontecimientos propios de la vida del
hombre, el alma.
Psique estaba confundida, pero no se daba por vencida, entonces conoció a
Descartes en medio de trasformaciones sociales y culturales entorno a la
ciencia, que apenas aparecía en escena, en esta época, Psique se enteró de
que existía una visión antropocéntrica. En medio de la confusión, Psique se da
cuenta de que a otros como ella les interesa también su amado ser humano, y
que han estado buscando entenderlo desde siempre al igual que ella, recuerda
a Sofía su siempre cercana amiga y vuelve charlar con ella quien desde la
antropología pretendía estudiar al hombre en su totalidad, empieza a explorarlo
como ser social y a la vez como un ser que emerge de la naturaleza, pero Sofía
también se sentía limitada a pesar de haber creído ser la poseedora de todo el
conocimiento desde siempre, se siente confrontada y retada por la
conversación con Psique, es así como aparece para el hombre la duda, la
critica sobre la realidad. Psique, entendió que debía empezar a buscar por su
propia cuenta las respuestas que quería, en medio de las dudas, pensó incluso
en llamarse así misma de otra forma, de una forma más acorde a lo que
buscaba, las respuestas sobre el mundo interior del hombre; a pesar de que
Psique estuvo presente desde el origen del hombre y siempre creyó que Sofía
su gran amiga y confidente pesaba como ella, se percató de que si quería
realmente ofrecerle su ayuda al hombre, debía alejarse de Sofía e incluso
cuestionarla, se terminaba el siglo XIX y con el venia un cambio para Psique,
“quiero conocer todo por mi propia cuenta, quiero observar y experimentar,
probarme a mi misma, medir mi conocimiento y crear mis propias teorías sobre
el hombre, su mente, sus potencialidades, su alma”, dijo mientras se alejaba
llena de ideas y posibilidades buscando la fuente que creía sería la indicada
para resolver al fin sus dudas, el mismo hombre. “Ahora y en adelante solo Me
llamaré Psicología y mi hasta ahora frágil búsqueda estará representada con la
metamorfica mariposa”, dijo Psique sonriente y tranquila, como quien llega a su
hogar y se siente segura.
Pero el camino de la mariposa no sería fácil, eso lo sabía, y sus seguidores
también, entre ellos Weber, quien se dejó seducir por la interesante búsqueda
para 1975, pasando de seguir a su Fisiología a creerle y confiar en Psicología,
como ahora se hacía conocer nuestra aún pequeña Psique. Pero fue su amigo
Wilheim Wundt quien le dio reconocimiento a su recién nombrada amiga
Psicología dándola a conocer y presentándose a él mismo como Psicólogo.
Wundt, de la mano de Psicología hizo grandes aportes al estudio de la
conciencia, la experiencia subjetiva, la conducción nerviosa, la memoria, la
inteligencia; adelantos a los que también se unió William James. Psicología
tenía cada vez más amigos, gracias a los cuales amplió su objeto de estudio y
adquirió un carácter eminentemente práctico, y quiso ayudar a otras como ella
interesadas en la humanidad como Medicina, de quien estuvo de la mano
mucho tiempo. La vida social de Psique (o Psicología como se llamaba ya
entonces, o mariposa como le gustaba también escucharse llamar), era ya muy
activa, en su constante movimiento conoció a su gran amigo Freud, quien la
transformo y enriqueció su mundo hablándole de los contenidos mentales del
hombre, sus procesos inconscientes, sus instintos, y como esto le permitía
desentrañar y facilitar el mundo interno del hombre, Freud le presento a Psique
a varios conocidos como Jung, Adler o Melaní Klein, con quienes tuvo charlas
interminables y reveladoras también.
Esta inquieta joven, como ya lo he dicho, no se quedó estática, rápidamente
para 1913 conoció a Watson, quien en seguida fue un amigo muy íntimo y
compartió con ella interesantes descubrimientos diciendo que nuestra
Mariposa debía circunscribirse al estudio de la conducta observable y
mensurable, así mismo opinaron algunos allegados de Watson como Tolman y
Skinner, le contaron entre otras cosas que el hombre puede cambiar su
comportamiento.
Cada vez estaba mas ansiosa por saber, y su búsqueda llegó a Alemania,
donde conoció a Kohier, Wertheimer y Koffka, quienes le hablaron mucho
sobre la capacidad perceptiva del hombre pero también de otros temas como la
personalidad, el pensamiento, el aprendizaje o la conducta social, y le
mostraron al hombre como parte de un todo uniéndolo con su medio. Entonces
también conversó con Frederick Perls, quien de acuerdo con sus amigos,
pensaba que el hombre debía mantener un equilibrio entre su entorno y su
mundo interno para logras satisfacer sus necesidades.
Más adelante, nuestra Mariposa supo también que el ser humano es capaz de
encargarse de su vida y estimular su propio desarrollo, que existe un potencial
en él para el desarrollo positivo y saludable a través del ejercicio de las
capacidades humanas de la escogencia, la creatividad y la autorrealización, y
lo supo gracias a nuevos amigos claro, Abraham Maslow y Car Rogers entre
otros, con quienes compartió largamente. Durante años, Psique ha conversado
y enriquecido con su conocimiento a muchos hombres y mujeres, a la vez que
aprende de ellos y crece cada ves más, en este proceso también supo que los
seres vivos, el hombre, las comunidades, los grupos sociales actúan como un
sistema, siendo la salud un proceso de creación, desarrollo y evolución,
sinergia y la patología, estancamiento, y simbiosis. Como ves, esta mariposa
no se cansa de volar, nos ha acompañado desde siempre y no cesa su ansia
de conocimiento, siempre buscando saber sobre nosotros sus amados seres
humanos y sobre todo sobre como entendernos y ayudarnos a entender; aún
siendo ahora tan joven, nos ofrece su enorme conocimiento para enriquecer
nuestra vida y aprender de su historia, seguirá su búsqueda y su crecimiento
por muchos años más y de la mano de otros muchos personajes grandiosos. Si
existe duda, dolor emocional, si desconfías de ti mismo, busca a la Mariposa y
confía en ella.