Вы находитесь на странице: 1из 13

ARTÍCULO ORIGINAL

Genética de la Violencia
The Genetics of Violence
Marcela Jara V. y Sergio Ferrer D.

This brief bibliographical review analyzes the genetic basis of violence. The definition of Antisocial
Psychopathic Personality includes criminal behavior; however, not all crimes are the result of a
dysfunctional personality. Since the transgression of a law is a legal construct, the idea of its
being a psychiatric category is rejected. We review studies of monozygotic and dizygotic twins,
and analyze the influence of adoption and the role of the family in the twins’ behavior. All these
studies indicate that heredity is a significant factor in violent behavior. Some important scientific
investigators propose a clear differentiation between offenders whose violent behavior begins
during adolescence and can be rehabilitated, and recidivists whose aggressiveness first manifests
itself in early childhood. We also discuss the defects found in several genes that have been found
to be associated with aggressive behavior in research with both humans and animals. Finally,
we emphasize that there is not a specific violence gene, but that aggressive behavior is always the
result of the interplay between heredity and the social environment.

Key words: antisocial disorder, genetic, juvenile offenses, repeat offenders.


Rev Chil Neuro-Psiquiat 2005; 43(3): 188-200

Introducción Por cierto que aparecen en primer lugar la in-


soslayable definición de lo que se entiende por

E nfrentar el tema de la Violencia exige una


clarificación conceptual de lo que entende-
mos por ella. Es una tarea difícil por su carácter
Personalidad Psicopática Antisocial. Nos hemos
adherido al concepto del DSM IV, que establece
como característica esencial de este trastorno de
ubicuo y multiforme. Ofrece muchas facetas que la personalidad, la existencia de un modelo de
han sido el motivo de análisis y proposiciones de conducta “que desprecia y viola los derechos de
muchas disciplinas con sus particulares puntos los demás y que comienza en la infancia o en la
de vista. temprana adolescencia y que continua en la
En esta revisión bibliográfica pretendemos ac- adultez”.
tualizar algunos hallazgos que apuntan preferen- “Ellos pueden realizar actos que son causales
temente a los estudios genéticos recientes ya sea de arresto, tales como, destruir la propiedad, ata-
por investigaciones epidemiológicas o de biolo- car, robar o involucrarse en ocupaciones ilega-
gía molecular. les. Las personas con este desorden desdeñan los

Recibido: Agosto 2003


Aceptado: Abril 2005

Servicio de Neurología, Hospital Militar de Santiago.

Los autores no refieren posibles conflictos de interés.

&& www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200


MARCELA JARA V., et al.

deseos, los derechos de los otros”. Como criterio 5,3% son mujeres. La edad media de registro del
A3, el DSM IV agrega “las decisiones son hechas crimen es 25 años. Otra estadística del Reino Uni-
por el imperativo del momento, sin reflexión y do, basada en acusaciones de ofensas criminales
sin consideración por las consecuencias sobre si o severas agresiones, establece un 43,6% de hom-
mismo y sobre los demás”… En otro acápite el bres y un 14,7% para mujeres, lo que da un tér-
DSM IV agrega “estos individuos tienden a ser mino medio de 29,2%. En Dinamarca estos valo-
irritables y agresivos y repetitivamente se involu- res son menores y para Estados Unidos mucho
cran en riñas o comenten actos de violencia física”. mayores(4).
La definición del DSM IV tiene mucho de co- Visher y Roth en USA(5), en una extensa revi-
mún con la personalidad Sicopática que Kurt sión de la participación en carreras criminales,
Schneider(1) calificó como desalmados: “sujetos concluyen que alrededor del 25 a 35% de los
que carecen de compasión, vergüenza, sentido del hombres urbanos, serán arrestados al menos una
honor, remordimiento y conciencia moral” …. vez, por algún delito en su vida.
“Los desalmados criminales no deberían hacer- ¿Podemos decir que son Psicópatas Anti-
nos olvidar que también existen los desalmados sociales todos los que comenten algún delito en
sociales, naturalezas duras… que caminan sobre su vida? Obviamente no, pero hay un grupo re-
cadáveres”. lativamente numeroso que comenten pequeños
Obviamente no toda conducta criminal pue- delitos a lo largo de su vida. Mednick (6) en
de adscribirse al concepto de personalidad Psico- Copenhagen, reportó que el 1% de la población,
pática Antisocial. Acontece sin embargo, que la era responsable de más de la mitad de los delitos
mayor parte de los trabajos sobre la violencia o entre 30.000 hombres. En Estados Unidos estas
agresión, se refieren a este universo restringido cifras son 10 veces mayores.
de individuos que cumplen en presidio, conde- En resumen, la noción que el crimen es una
nas por actos delictuales que han implicado vio- categoría Psicopatológica, se aplica a ese peque-
lencia y en que los victimarios han actuado con ño grupo de “recidivistas”, delincuentes mayores
discernimiento. porque ellos tienen probablemente una predis-
La investigación genética de la violencia se ex- posición intrínseca para el crimen, que contrasta
tiende a otras patologías bien caracterizadas, con algunos delincuentes, que transgredieron la
como por ejemplo, la Esquizofrenia en el afán de ley una sola vez por situaciones contingentes y
hallar uno o más genes que condicionan una al- específicas.
teración neuroquímica que explique el compor- Robert Hare(7) pone a prueba los criterios de
tamiento violento. Personalidad Antisocial del DSM III cotejándo-
los con la escala de Cleckley(8) de evaluación de la
Desviación de la norma estadística personalidad Psicopática.
¿Es la conducta criminal un comportamiento Aplica ambos métodos de evaluación a una
inusual y atípico? ¿Es comparable con la esquizo- población de 246 hombres convictos. Dos clíni-
frenia que afecta al 1% de la población? cos concordaron que el 39% de los reos mostra-
Adrián Raine(2) expresa que la conducta cri- ban los rasgos de Desorden de Personalidad An-
minal depende de dos factores: tisocial. Hubo una apreciable grado de concor-
dancia entre el diagnóstico hecho por el DSM III
1. Como se define el crimen y y la evaluación por la escala de Psicopatía de
2. Cuan severo es éste desorden Cleckley. La concordancia fue de 0,83.

Cuando el crimen se define en término de con- Aspectos neuroconductuales de la


dena por una lista standard de agresiones en In- violencia
glaterra, el 28,3% de los reos son hombres y el La Conferencia de Declaración de Consensos de

REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200 www.sonepsyn.cl &'


GENÉTICA DE LA VIOLENCIA

Appen(9) sobre los aspectos neurológicos impli- Genética de la violencia


cados en la violencia señala muchas dificultades.
Primero, la causa de la violencia es multifactorial Una perspectiva biológica del crimen, un en-
y una simple correlación entre la disfunción ce- foque que considere las conductas antisociales
rebral y un acto violento es raramente posible. como comportamiento con evidente base evolu-
La violencia suele ocurrir en un contexto so- cionista y una visión antropológica que conside-
cial y, otros factores que no son biológicos están re que la sociedad ha reaccionado contra las con-
involucrados, tales como stress emocional, po- ductas que la amenazan y subvierten, favorecien-
breza, promiscuidad, alcohol y otras drogas, abu- do las actitudes altruista y castigando las tácticas
so infantil y desintegración de la familia(10-11). La desintegradoras, necesariamente conducirá a ad-
proclividad neuroconductual puede no conducir mitir que el crimen tiene primordialmente una
indefectiblemente a conductas reprobables y mu- base genética.
chos individuos con alteraciones cerebrales no Adrián Raine(2) resume en los siguientes pun-
cometen actos delictuales. tos las consideraciones que enturbian el análisis
Un segundo problema apunta a que muchos de la influencia de la genética de la conducta An-
estudios de la literatura son retrospectivos o sim- tisocial.
plemente anecdóticos y el tamaño de las mues- 1. ¿Un gen es responsable de la conducta crimi-
tras son reducidos y con frecuencia inconsisten- nal? Los genes codifican proteínas y enzimas e
tes. influencian los procesos fisiológicos cerebra-
Un tercer escollo se refiere a la heterogenei- les que podrían predisponer biológicamente
dad de los fundamentos del diagnóstico. A veces para determinar conductas criminales. No es
clínico, o de neuroimágenes o de evaluación posible concebir un solo gen codificando la
neuropsicológicas o de análisis químico. proclividad al crimen, como tampoco es ima-
Cuarta y tal vez la última, es la objeción que ginable que un solo gen pudiera regir otras
las poblaciones estudiadas corresponden a reos conductas humanas complejas. Es probable
con severas alteraciones neurológicas o con tras- que exista múltiples genes y esta idea debe pre-
tornos psiquiátricos que han sido encarcelados y sidir aquellas disciplinas biológicas tales como
hospitalizados. la neurología, la psicobiología o la neuroquí-
Por consiguiente los resultados son sesgados mica.
por el uso de informes oficiales, que dejan sin de- 2. ¿La influencia de la herencia entraña que to-
tectar otros individuos violentos en el seno de la dos los crímenes son genéticamente determi-
sociedad. Por lo tanto, el potencial de violencia nados? La conducta criminal es el producto
en la población en general no es evaluado y por de los genes y del ambiente. No se habla de
consiguiente es impredecible. efectos sumatorios; lo propio es hablar de efec-
Parece perogrullesco afirmar que el cerebro es tos multifactoriales, de interacción entre gené-
el órgano de la conducta. La estructura cerebral tica y entorno.
y sus funciones están bajo el control de la genética Por otro lado, los genetistas de la conducta
y del ambiente y la conducta humana esta deter- no tienen una posición radical; ellos no exclu-
minada por la combinación de esas influencias. yen la importancia del ambiente, aunque ob-
Por lo tanto, la conducta es gobernada por la viamente privilegian las bases biológicas de la
interacción de factores tan diversos como las dis- violencia.
posiciones genéticas las experiencias tempranas 3. ¿La investigación genética puede explicar por
de la vida, los daños cerebrales adquiridos du- qué algunos individuos específicos comenten
rante la gestación y el alumbramiento, modelos crímenes? Una heredabilidad de los 50% para el
de comportamiento aprendidos y un sinnúmero crimen no puede extrapolarse para inferir la con-
de situaciones contingentes. ducta antisocial de un individuo en particular.

' www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200


MARCELA JARA V., et al.

4. ¿Si el crimen es genéticamente determinado res(12-13). Las proposiciones eugenéticas no son


entonces es irremediable? Obviamente no hay sustentadas por las investigaciones genéticas.
un destino ineluctable. Admitimos que se tra-
ta de una predisposición constitucional in-
fluenciable por los parámetros sociales. Evidencia de los estudios de gemelos
5. ¿Son los estudios genéticos más orientados ha-
cia la herencia que hacia el entorno? En rigor Los estudios de crímenes de adultos emplean-
los estudios en gemelos y en adopción, si bien do los Gemelos son numerosos y si bien varían
están presididos por la genética informan al en cuando al país de origen, edad, composición
mismo tiempo, que esta no explica todo. La del sexo, tamaños de las muestras, determinación
heredabilidad de la conducta criminal en los de zigosidad y definición del crimen, muestran
gemelos monozigotos es de un 50%. Habría una esencial consistencia.
que aceptar que el otro 50% corresponde a Los monozigotos muestran una concordancia
influencias sociales. en los niveles de criminalidad que no exhiben los
6. ¿Los factores genéticos que subyacen en el cri- dizigotos. El promedio de la concordancia de 13
men no pueden invocarse en un proceso legal? estudios, muestran que es de un 50% para los
No puede heredarse algo que es un constructo monozigotos y un 20,6% para los dizigotos.
social y legal y cuya definición esta abierta a Otros estudios han mostrado concordancias me-
debate; sin embargo, esto valdría para mu- nores pero siempre las proporciones son del do-
chas enfermedades mentales. Además la im- ble para los monozigotos(2).
portancia de los factores genéticos se ven re- Aunque la concordancia para las mujeres
frendada por la similitud de los resultados de monozigoticas es más baja, la proporción de mu-
las investigaciones en diferentes países. Estos jeres monozigoticas que delinquen son 3 veces
estudios revelan que los factores predispo- más que las mujeres dizigoticas.
nentes son los mismos. No tenemos espacio para enumerar las críti-
Como hemos expresado anteriormente los cri- cas a estos estudios pero cualquiera que sean las
terios de personalidad ANTISOCIAL del DSM reservas que se hagan, queda en pie esta sólida
IV(3) y otros listados de características de Per- evidencia de una disposición genética para el cri-
sonalidad Psicopática Antisocial, con preten- men(14-15).
siones psicométricas, nos ayudan en esta dife-
renciación. Gemelos monozigóticos criados aparte
7. ¿Las bases genéticas excluirán a los cientistas Un estudio de Grove y col(16) ha sido conduci-
sociales? Obviamente nunca sucederá esto. do en niños y adultos con conducta antisocial en
Hay razones incontrovertibles para sostener 32 pares de monozigotos que han crecido en am-
que los factores socioculturales son claves en bientes diferentes. El examen estadístico reveló
el desarrollo del crimen y todo señala que la una significativa herederabilidad en ambos niños
genética actuará en un vacío si no considerara y adultos del 0,41 y 0,28 respectivamente. Estos
el medio ambiente. resultados fueron obtenidos del propio testimo-
8. ¿La investigación genética es intrínsicamente nio de los encuestados, lo que coincide con los
perversa porque es usada para justificar cru- estudios basados, en los crímenes reportados por
zamientos selectivos y programas de esterili- las instituciones oficiales.
zación? Este temor es infundado a pesar que
históricamente se ha instrumentalizado para Metodología de la adopción
llevar a cabo programas Eugenéticos que han
conducido a atroces políticas de exterminio, En estos paradigmas los vástagos son separa-
por considerar que ciertas razas son inferio- dos de sus padres criminales y crecen en otros

REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200 www.sonepsyn.cl '


GENÉTICA DE LA VIOLENCIA

ambientes familiares. Si estos vástagos llegan a atendiendo uno si los padres eran criminales y
ser criminales en una proporción más alta que por lo tanto había predisposición genética y dos,
los niños adoptados cuyos padres no fueron cri- si las experiencias de educación y el ambiente de
minales, podría inferirse la influencia genética. la familia que adoptaban, influían en la predis-
Una variación de este paradigma es el “Cross- posición postnatal.
fostering” lo cual examina la progenia de padres Cuando ambos factores el hereditario y el am-
criminales y no criminales, criados por padres biente nocivo, estaban presentes, el 40% de los
adoptivos que a su vez pueden ser criminales o adoptados eran criminales comparados con
no. Un buen ejemplo de este estudio de “Cross- 12,1% cuando solamente los factores genéticos
fostering” lo llevo a cabo Mednick y col en Dina- estaban presentes, 6,7% si sólo el ambiente era
marca(6). Estos investigadores estudiaron 14.427 deletéreo y 2,9% si ambas variables estaban au-
niños adoptados entre 1927 y 1947. Los niños fue- sentes. El valor, de 40% revela la auténtica
ron adoptados inmediatamente después de nacer interacción entre herencia y ambiente. La varia-
en 25,3% de los casos, en 50,6% dentro de un ble más importante fue el nivel ocupacional tan-
año, 12,8% en el segundo año y 11,3 después de to de los padres biológicos como adoptivos.
los dos años. Los tribunales proporcionaron Cloninger y Gottesman(18) mostraron en una
65.516 expedientes de padres ya sean biológicos amplia muestra de mujeres la interacción de am-
o adoptivos y de los vástagos adoptados. Cuan- bos factores, el entorno y la genética. Como era
do ambos padres no son criminales y por consi- de esperar el número de crímenes cometidos por
guiente no habría influencia ni genética, ni am- las mujeres adoptadas era menor que en los hom-
biental, 13,5% de los adoptados tenían un regis- bres, pero la relación entre las adoptadas con am-
tro criminal. Esta proporción subió a 14,7% bos factores negativos (círculo familiar lesivo y
cuando solamente los padres adoptativos eran padres delincuentes), era más del doble de aque-
criminales. Cuando los padres biológicos eran llas mujeres en que participaba una sola variable
criminales el nivel de condena ascendía al 20% y adversa.
cuando ambos padres adoptivos y biológicos eran El mismo Cloninger estudiando convictos de
criminales, la cifra de condenas ascendía a 24,5%. graves crímenes, concluye que lo primordial es la
Mednick avanzó más en su escrutinio. Si los disposición genética y encuentra que esto repre-
padres biológicos tenían numerosas condenas au- senta un resultado linear. Por lo tanto, para este
mentaban las condenas de los hijos adoptados. autor la condición genética prevalece sobre la in-
Sin embargo, los delitos observados fueron con- fluencia del medio familiar en este universo par-
tra la propiedad y no se registraron agresiones ticular de criminales severos.
violentas.
En conclusión casi todos los estudios en geme-
los, están de acuerdo que existe una predisposi- Herencia de la conducta antisocial
ción para el crimen y esto se ha establecido en juvenil
diferentes países de Europa y en los Estados Uni-
dos. Tres de los estudios revisados por Adrian La mayor parte de los estudios revelan que
Raine, que tienen una muestra amplia, pueden existe poca influencia genética en los delincuen-
permitir separar los delitos violentos de los no tes juveniles(19). Los estudios en gemelos muestran
violentos y concluir que la heredabilidad se ex- una concordancia mucho más alta en los críme-
presa en crímenes menores y no en crímenes vio- nes de adulto. La concordancia entre los
lentos. monozigotos y los dizigotos para la delincuencia
Otro trabajo importante sobre este tópico lo juvenil no es significativa. Insistiendo, la hereda-
realizó Cloninger en 862 vástagos adoptados en bilidad de la delincuencia juvenil seria débil.
Suecia(17). Lo dividió este universo en 2 grupos, Los estudios de adopción también revelarían

' www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200


MARCELA JARA V., et al.

poca influencia de la herencia. No obstante cuan- El 6% de los niños arrestados por la policía,
do los informes de conducta antisocial no pro- continúan una carrera de delincuencia. Estadís-
vienen de fuentes oficiales sino del auto-testimonio ticas de Moffit y otros autores, muestran que ni-
de los individuos o de sus madres, se obtienen ños de 5 años confiesan 3 o más agresiones vio-
significativas cifras de heredabilidad. Por ejem- lentas por año. Otros investigadores también han
plo un estudio de Rowe, con auto-testimonio de demostrado que virtualmente no hay adultos
168 monozigotos y 97 dizigotos, entre 13 y 17 antisociales que no hayan sido niños con con-
años, mostró una heredabilidad muy alta(20). Por ducta anormal.
otro lado autores que han estudiado la conducta El trabajo de Moffit es amplísimo y abarca los
agresiva entre 4 y 7 años han reportado una fuer- factores genéticos, biológicos a si como también
te participación genética. Cuando la violencia ju- los factores ontogenéticos, fetales, la influencia
venil se define legalmente pareciera no tener in- del alcoholismo o abuso de drogas por las ma-
fluencia hereditaria pero cuando la metodología dres, nivel cognitivo de los padres, status socio-
cambia y la investigación se realiza por auto- económico, etc. En resumen la delincuencia limi-
confesión o declaración de sus madres, sí habría tada a la adolescencia no constituye patología y
un importante ingrediente genético. que el factor más predictivo de la conducta cri-
Terrie Moffit(2) elabora una taxonomía dife- minal en la adultez es el comportamiento antiso-
rente para abordar el problema de la violencia cial antes de los 10 años. Termina Moffit aconse-
de la adolescencia. Para esta autora existe una jando buscar la causa de la carrera criminal, (lo
distinción entre una conducta antisocial transi- que ella llama conducta social persistente) en la
toria y otra persistente. niñez y aun en la etapa prenatal.
Para los delincuentes cuya actividad criminal Los estudios de cortes transversales confunden
esta confinada en los años juveniles, los factores y existe una ley longitudinal que virtualmente se
causales son contingentes y específicos para esta cumple. Fácil es comprender la enorme impor-
etapa de la vida. tancia social de esta teoría para entender la cri-
En contraste, aquellos delincuentes adolescen- minalidad juvenil y su probable rehabilitación.
tes, cuya actividad criminal es solamente una in- Trabajos muy reciente confirman que estudios
flexión en el curso de una continua actividad an- practicados en forma seriada a los 6 meses, 5, 14
tisocial que abarca toda la vida, mostrarán con- y 15 años revelan que la agresión persistente está
ductas antisociales que se inician en los periodos significativamente relacionada con factores
tempranos de la niñez con una vida ininterrum- biosociales que actúan deletérea mente en forma
pidamente tormentosa. Moffit la llama una taxo- precoz(22).
nomía dual. Esto da cuenta de la curva que seña-
la agresiones tales como: homicidio, violación,
¿Es la psicopatía antisocial hereditaria?
robo con violencia, asalto, robo de casa y hurto
que tienen su máxima y aguda expresión alrede- Comúnmente se asume que la conducta cri-
dor de los 17 años y que luego cae abruptamente. minal es sinónimo de Personalidad psicopática o
Esta curva se sintetiza en una sentencia: “la con- sociopatía.
ducta antisocial del adulto requiere una conduc- Como quiera que la conducta, criminal tiene
ta antisocial de la niñez y que la mayoría de los una base genética relativa, la misma debe operar
adolescente que inician un comportamiento en la constitución de la personalidad antisocial
delictual en la juventud, no llegan a ser adultos del DSM IV.
antisociales.” La mayor parte de los estudios en los gemelos
Todas las estadísticas revelan que 5% al 6% y en adopción, dan por hecho que criminalidad
de los criminales adultos son responsables de más y Socio o Psicopatía Antisocial son conceptos
del 50% de los delitos graves. equivalentes.

REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200 www.sonepsyn.cl '!


GENÉTICA DE LA VIOLENCIA

El error de los diferentes investigadores pro- mal definido. Las cosas no se simplifican si la de-
viene precisamente que la definición del DSM IV finimos en términos operacionales. Conducta vio-
es casi sinónima de crimen. Otras escalas como la lenta sería aquel comportamiento que implica
que hemos mostrado (Psychopathy Checklist) una conducta clara intencionalmente agresiva
contienen los mismos atributos de falta de em- que produce daño físico a otra persona. La vio-
patía y de arrepentimiento, como características lencia es heterogénea en sus orígenes y manifesta-
fundamentales de la Personalidad Psicopática ciones. Sin embargo, a grandes rasgos los actos
Antisocial. violentos son premeditos o son impulsivos, son
El criterio del DSM IV se aplica por lo menos depredadores o son patológicos en el sentido de
a un tercio de los convictos de una prisión. expresar una enfermedad mental. Se llega a ser
Es lamentable que la mayor parte de los estu- antisocial por genética o por ecología(24).
dios de adopción y gemelos no empleen los crite- Los genetistas repetimos, no pretenden encon-
rios de Personalidad Psicopática de rasgos Anti- trar el gen de la agresión puesto que postulan la
sociales y que la selección de la muestra se hace acción de múltiples genes y tienen presente que
sobre la base de la conducta criminal. en su determinación se interponen múltiples fac-
Citaremos algunos trabajos que sugieren que tores epigenéticos como ontogenéticos(25-26).
la heredabilidad del Desorden Antisocial es con- No obstante algo se ha avanzado en el descu-
siderablemente menor para los crímenes no vio- brimiento de genes asociados a trastornos enzi-
lentos que contra los atentados de la propiedad. máticos que modifican el equilibrio de los neuro-
Un estudio de Baker en Dinamarca(23) estudia transmisores.
2.532 hombres adoptados y sus padres biológi- En 1983 Brunner(27) y colaboradores publica-
cos y adoptivos con el objeto de evaluar por un ron el Science, el estudio de una familia Holan-
lado los crímenes no violentos contra la propie- desa, en que varios miembros masculinos eran
dad y por otro lado, los desordenes antisociales afectados por un Síndrome de Retardo Mental
compuestos por el examen de los rasgos de la per- limite y conducta violenta. Los tipos de compor-
sonalidad y uso de drogas y alcohol. Este investi- tamiento correspondían a estallidos de agresión,
gador concluye que la heredabilidad de la Perso- incendio intencional, intento de violación y ex-
nalidad Psicopática, es menor que la predisposi- hibicionismo. Hay que subrayar que eran 8 indi-
ción a crímenes contra la propiedad. viduos que habían vividos en diferentes épocas y
Otro trabajo de Grove(16), en gemelos hom- en diferentes lugares del país. El análisis de la ori-
bres, idénticos, adoptados aplicando el criterio na demostró marcada alteración del metabolis-
del DSM III demuestra que la base genética de la mo de los monoaminas. El síndrome se asociaba
Responsabilidad Antisocial es débil. a una deficiencia selectiva de la actividad enzi-
mática de la Monoamino Oxidasa A (MAOA).
En cada uno de los 5 hombres afectados se com-
Biología molecular y violencia
probó una mutación puntiforme en el octavo
Este epígrafe parafrasea parcialmente la Edi- exon del gen estructural de la MAOA, el cual cam-
torial del American Journal Psychiatry de Abril bia el codon de la Glutamina CAG, en una de-
del 2003 que se titula “De la Molécula a la Mente: terminación TAG.
Genética, Genómica y Psiquiatría”. Los genetistas Olivier Cases y col(28-29) del Centre Universitaire
no aspiran a encontrar el gen de la agresividad. Orsay estudiaban en lauchas el efecto del gen
Esta última palabra connota muy diversos tipos Interferón Beta en el desarrollo del virus del SIDA.
de conducta. Se puede hablar de ella en términos Si inoculaba el gen en huevos fertilizados de una
positivos o condenarla, porque entraña compor- Cepa CH3H obtenida por cruzamiento. Esta cepa
tamientos dañinos para sus semejantes. Difícil cuyos miembros tienen la misma copia genética
podríamos estudiar la genética de un fenotipo tan se caracteriza por su mansedumbre.

'" www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200


MARCELA JARA V., et al.

El gen viral se había introducido en la región la eliminación de un gen es que no se producen


cromosómica conteniendo el gen MAO. Esta lau- los efectos colaterales que suelen producir las
cha transgénica mostró una conducta agresiva. drogas). Un hecho importante que comprueba
La determinación de la serotonina en el cerebro el hallazgo anterior, es la observación que una
de las lauchas transgénicas reveló que tenían 7 inhibición especifica farmacológica de la Sintetasa
veces más Serotonina que las lauchas control de del Oxido Nítrico Neuronal, también aumenta
la misma edad. Como quiera que el gen de la la agresividad en las lauchas.
MAO esta en el cromosoma X de los machos, las
hembras no evidencian conducta agresiva. Sin
embargo, los autores obtuvieron hembras con Violencia y esquizofrenia
ambas copias del defecto genético, las cuales si
bien, desplegaban una conducta diferente a sus Para el examen de las relaciones entre la vio-
congeneres controles, no se herían unas a otras. lencia y la esquizofrenia se han utilizado diferen-
Por otro lado, las lauchas transgénicas exhi- tes metodologías(33), uno de los diseños propues-
bían cambios estructurales en su cerebro. El área tos es estudiar la violencia cometida antes y du-
Somato Sensorial perdía su estructura bien deli- rante la hospitalización. Se estima que un 20%
neada de columnas corticales. El tratamiento con de los pacientes en la primera hospitalización han
drogas que inhiben las Serotonina, administrada tenido un comportamiento violento, que ha ame-
después del nacimiento, restauraban la estructu- nazado la vida de la víctima. Durante la hospita-
ra normal de la región Somato Sensorial(30). lización también han demostrado un alto nivel
Los autores terminan advirtiendo que en el de violencia física. Siguiendo el alta, desde 10 se-
hombre el desarrollo del cerebro continua largo manas a un año por termino medio, 9% fueron
tiempo después del nacimiento y que las condi- violentos. Esto se compara con la violencia de la
ciones ambientales moldean un cerebro que man- Depresión que alcanza el 19%, con 15% en los
tiene su capacidad de plasticidad durante toda Síndromes Bipolares, 29% con el abuso de dro-
su vida. Las experiencias de la vida son impor- gas, 25% en las personalidades Psicopáticas
tantes para moldear la mente, pero se necesitan Antisociales. Estas comparaciones le restan rele-
herramientas y una de ella es la MAOA(31). vancia a la violencia vinculada a la Esquizofrenia,
Nelson y col(32) del Massachussets General Hos- pero no desmienten el hecho incontrovertible que
pital junto con investigadores del Johns Hopkins los esquizofrénicos tienen un mayor riesgo de
University en una publicación de Nature de No- conducta violenta que los controles.
viembre de 1995, expresan que el Oxido Nítrico Otra metodología es examinar retrospectiva-
además de sus funciones en el endotelio de los mente las cohortes de esquizofrénicos por 15 años
vasos sanguíneos y en los macrófagos, se encuen- utilizando los expedientes policiales. Un estudio
tra como un neurotransmisor de alta densidad en Suecia(34) de 644 pacientes demostró que los
en las áreas que controlan la emoción. Estos au- esquizofrénicos cometían crímenes violentes, cua-
tores para estudiar el oxido nítrico crearon tro veces más que la población general.
mutantes con una destrucción de la Sintetasa del Otra investigación demostró que las conde-
Oxido Nítrico Neuronal. nas criminales en esquizofrénicos hombres era el
Las lauchas mutantes, carentes de Sintetasa de doble de otras poblaciones, con otros cuadros
Oxido Nítrico, demostraron un alto nivel de mentales y que las mujeres eran culpables de crí-
agresividad. La agresividad no se observó nunca menes violentos en mayor número que los con-
en las hembras. La conducta sexual se volvió mu- troles(35).
cho más activa que las lauchas controles (la ven- En Australia(36) se estudió dos grupos de esqui-
taja de usar animales “Knockout” que así se lla- zofrénicos: uno, que se hospitalizaba y otro que
man aquellos en que se ha inducido la deleción o se atendía en la comunidad. Ambos grupos eran

REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200 www.sonepsyn.cl '#


GENÉTICA DE LA VIOLENCIA

significativamente más condenados por conduc- sultados opuestos. Habría una significativa aso-
tas violentas o agresiones sexuales. ciación entre el genotipo COMT e historia de con-
Una tercera metodología examina cohortes ducta violenta. El 64% de pacientes homocigotos,
no seleccionadas desde el nacimiento. Hodgins(37) con baja actividad del alelo COMT, fueron vio-
en Suecia siguió 30 años una cohorte y demostró lentos. El 80% de los homocigotos con alta acti-
que aquellos individuos que llegaban a ser enfer- vidad alélica no fueron violentos. Los autores lle-
mos mentales tenían 4 veces más comportamien- gan a la conclusión que la inactivación de las
tos agresivos y que esta cifra era mucho mayor catecolaminas esta asociada con el comporta-
en las mujeres esquizofrénicas (27 veces mayor). miento violento de la esquizofrenia y de los des-
Otro estudio de Tillhonen y col(38) en Finlan- ordenes esquizo-afectivos.
dia, es el de una cohorte seguida desde el naci- Sin embargo, en un trabajo(41) de la Universi-
miento de 12.058 individuos, la cual reveló que dad de Gales del 2001 se llega a conclusiones dife-
el riesgo de acciones violentas entre los esquizo- rentes. La alta actividad de la COMT se ligaba a
frénicos hombres, era 7 veces mayor que en los marcados niveles de agresividad. La Odd Ratio
controles. para la agresión de homocigotos fue de 2,07 como
Entre los factores predictivos de conducta vio- quiera que para los heterocigotos fue de 0,54.
lenta en los esquizofrénicos, obviamente esta el Los disímiles resultados de estos trabajos, tal
antecedente de agresiones previas y el abuso de vez se deben a que los fenotipos son diferentes.
drogas. Esta última comorbilidad aumenta sus- Algunos grupos son seleccionados por violencia
tancialmente el nivel de violencia. Hay autores extrema que implicarían acciones penales y otros
que diferencian la violencia como categoría in- estudios no emplearon historias forenses. En re-
trínseca de este mal, de la violencia inducida por sumen el espectro de la conducta agresiva, fue
los fenómenos psicóticos. Esta posición deriva de diferente. Cualquiera que sea la diversidad de las
la constatación de que el 46% de los actos crimi- muestras, parece que la heterozigosidad reduce
nales se comenten por ideas delirantes o alucina- el nivel de agresividad.
ciones. Son pacientes que se tornan violentos por La inconsistencia de los resultados anteriores
que se sienten amenazados por fuerzas ajenas a es una advertencia para rechazar interpretacio-
su control. nes simplistas implicadas en la agresión donde
Estos datos estadísticos anteceden a la hipóte- intervienen una pluralidad de Genes, así como
sis, que la agresividad observada en un grupo de también factores ambientales. Es notoria la estig-
esquizofrénicos, se debía a un Polimorfismo del matización que la sociedad hace de los esqui-
Gen de la Catecol-O-Metil Transferasa (COMT), zofrénicos, cuya conducta excéntrica e irracional
en el codón 158. Debe recordarse que la COMT puede promover reacciones excluyentes y conde-
inactiva la Noradrenalina y Dopamina y que este natorias del entorno, que a su vez en un circulo
Gen tiene un Polimorfismo que da cuenta de las viscoso, generan o potencian su intrínseca agre-
diferencias de 3 a 4 veces en la actividad de la sividad.
enzima.
En un trabajo de 1996, Daniels(39) estudio el
Biología versus sociología
Polimorfismo de 78 pacientes esquizofrénicos
comparándolo con 78 controles. El ADN fue ais- ¿La conducta criminal obedecería a causas
lado de los linfocitos y en cada individuo se biológicas? Una respuesta afirmativa tendría poca
tipificó la actividad COMT de alta y baja activi- aceptación de la comunidad. La mayor parte de
dad. No se encontró una diferencia significati- la sociedad rechazaría que la conducta trans-
va. gresora de las normas, la amenaza para la paz,
Otro trabajo de 1998 de Lachman y col en el para la vida y el derecho de propiedad, serían
Albert Einstein College of Medicine(40), llegó a re- causadas por personas afectas de un Desorden

'$ www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200


MARCELA JARA V., et al.

Psicopatológico, vale decir producto de una En- nuales más canónicos. La considera un ingrediente
fermedad Mental. Aceptar el determinismo bio- de la Personalidad Psicopática Antisocial o
lógico debilitaría el concepto de responsabilidad, Sociopatía. Se aproxima lejanamente al concep-
de libre albedrío y la sociedad perdería el dere- to de Personalidad Criminal como la concibió el
cho al castigo de los actos delictuales. Habría in- Frenólogo Cesare Lombroso, en su venerable
definición de la culpabilidad e impunidad de los obra L’Homne Criminal(44).
quebrantadores de las leyes de la comunidad. Esta revisión pretendió poner énfasis en los tra-
Esta posición biológica se enfrenta con la con- bajos más modernos sobre Genética de la Vio-
cepción más generalizada, que atribuye el crimen lencia, basada en estudios Epidemiológicos reali-
a factores predominantemente sociales. No es una zados en gemelos y en notables investigaciones
fácil postura ecléctica afirmar que ambas pers- de seguimiento de conductas delictuales. Estas úl-
pectivas se entrelazan causalmente. timas parecieran demostrar que existe una Taxo-
Existe una interacción entre el entorno y el nomía Dual. Los delincuentes “recidivistas” adul-
cerebro. Aun las disposiciones genéticas más agre- tos, mostraban una conducta antisocial precoz,
sivas, como se ha observado en el comportamien- antes de la adolescencia. En cambio los delincuen-
to animal, que resultan de cruzamientos selecti- tes más tardíos, eran jóvenes que delinquían por
vos y que originan linajes predispuestos genéti- motivos contingentes y eran susceptibles de re-
camente al ataque, no resultan inmunes a la in- habilitación. Esta conclusión parece de una im-
fluencia morigeradoro de comunidades menos portancia capital.
belicosas. Así, por ejemplo Robert Cairns(42-43) El otro aspecto que se pretendía destacar, era
aprovechando la rápida multiplicación de las ra- como la Biología Molecular ha irrumpido en la
tas logra una microevolución que confirma la di- interpretación de la violencia. A primera vista
námica de la relación entre el organismo y su en- parecen confundirse las categorías Psiquiátricas
torno. cuando se hace referencia a la Esquizofrenia. Ob-
Por otro lado, se ha impuesto el concepto de viamente hay una posición reduccionista para ex-
Plasticidad Cerebral, como un puente entre las traer de esta entidad patológica el componente
influencias ambientales y las respuestas biológi- de violencia y correlacionarlo con determinados
cas. Las experiencias traumáticas de la infancia genes y codificaciones neuroquímicas.
se inscriben en el entramado neural y sináptico Se han citado las opiniones de autores que pre-
del cerebro, especialmente en los 2 primeros tender hacer de la conducta criminal perseveran-
años de la vida, donde este cerebro inmaduro te o repetitiva una categoría psiquiátrica similar
debe enfrentar problemas afectivos disfun- a otros Desordenes definitivamente configurados
cionales, que atraen el interés y la investigación como la Esquizofrenia o los Desordenes bipolares.
de los profesionales que estudian el desarrollo Estos cuadros empero tienen perfiles clínicos,
de los niños y las influencias adversas que sur- genéticos y bioquímicos bien definidos. Esta re-
gen de familias desintegradas o con conductas visión conduce a no compartir este criterio. Los
nocivas. delitos mayores, los crímenes son constructos le-
gales en los que intervienen factores biológicos y
contextos sociales y a veces históricos. El énfasis
Conclusión
en uno y otro condicionante depende de la espe-
Esta revisión Bibliográfica no pretende ser más cial óptica con que se les analice.
que un esbozo de un gran y complejo problema, También de esta revisión se desprende que no
sobre el cual las investigaciones y las opiniones puede haber un solo “Gen de la Violencia”. Ne-
son heterogéneas dependiendo de la disciplina cesariamente la predisposición hereditaria debe
que se cultiva. resultar de la interacción de una pluralidad de
La psiquiatría no define la violencia en sus ma- genes, algunos activando y otros inhibiendo.

REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200 www.sonepsyn.cl '%


GENÉTICA DE LA VIOLENCIA

La presente revisión también alude a la in- caso, las nuevas conectividades sinápticas que
fluencia del desarrollo y de las experiencias vita- surgen de situaciones estresantes constituyen el
les sobre la Plasticidad Cerebral. Este tópico re- engarce entre el ambiente y la genética, entre las
queriría una elaboración más extensa que los lí- ciencias de la cultura y las ciencias de la natura-
mites del actual trabajo no lo permiten. En todo leza.

Resumen

Esta breve revisión bibliográfica pretende analizar las bases genéticas de la violencia. Se recuerda
el concepto de Personalidad Psicopática Antisocial, que implica en su definición actos delictuales,
sin pretender que todos los crímenes obedecen a una Personalidad Disfuncional. Siendo el
delito un constructo legal se rechaza la idea de que exista una categoría psiquiátrica aplicable a
los transgresores de las normas sociales aunque sean recidivantes. Se revisan los estudios entre
gemelosmonozigosotos y dizigotos criados juntos o aparte. Se analizaron las investigaciones en
gemelos que habían sido adoptados, haciendo énfasis en la influencia del ambiente familiar.
Todos estos estudios indican una importante influencia de la herencia en las conductas violentas.
Una contribución relevante la hacen los investigadores que postulan una tesis dual,
diferenciando, la delincuencia juvenil, que ocurre en la adolescencia y susceptible de
rehabilitación, de la delincuencia reincidente cuya conducta agresiva comienza en los primeros
años de la vida. Se describen los genes que se han descubierto en familias con conductas violentas
y las alteraciones neuroquímicas, que explicarían la agresión observada en un grupo de enfermos
esquizofrénicos. Se insiste en que no puede haber un gen de la violencia, que probablemente son
múltiples y que la violencia siempre es el resultado de la interacción de las disposiciones
hereditarias y de la influencia del ambiente.

Palabras claves: Personalidad psicótica antisocial, violencia, genética, delincuencia juvenil,


transgresor social.

Referencias 6. Mednick S, Gabrielli W. Genetic Influences in Cri-


minal Convictions: Evidence from An Adoption
1. Schneider K. Personalidades Psicopáticas. Madrid, Cohort. Science 1984; 224: 891-894
España: Ediciones Morata, 1965 7. Hare R, Stephen D, Timothy J. Psychopathy and
2. Raine A. The Psychopathology of Crime. New York, DSM - IV Criteria for Antisocial Personality
USA: Academy Press, 1993 Disorder. J Abriorm Psychol 1991; 100: 391-398
3. DSM IV. Manual Diagnóstico y Estadístico de los 8. Cleckley H. The mask of sanity (5th ed.). St. Louis,
Trastornos Mentales. Barcelona, España: Masson USA: Moshy, 1976
S.A., 1995 9. Filley C, Price B, Morgan A. Toward an
4. Murray R. Violence: From Biology to Society. Va- Understanding of Violence: Neurobehavioral
lencia, España: Elsevier Science, 1997 Aspects of Unwarranted Physical Aggession: Aspen
5. Visher C, Roth J. Participation in Criminal Careers. Neurobehavioral Conference Consensus Statement.
In: Criminal Careers and Career Criminals. Was- Neuropsychiatry Neuropsychol Behav Neurol
hington DC., USA: National Academy Press, 1986 2001; 14: 1-14

'& www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200


MARCELA JARA V., et al.

10. Volaska J. The Neurobiology of Violence: An 25. Gottleib G. Normally Ocurring Enviromental and
Update. J Neuropsychiatry Clin Neurosci 1999; 11: Behavioral Influences on Gene Activity: From Cen-
307-314 tral Dogma to Probabilistic Epigenesis. Psychol Rev
11. Nichoff D. Biología de la Violencia. Barcelona, Es- 1998; 105: 792-802
paña: Ariel, 1999 26. Changeaux J P. L'Homme Neuronal. Paris, France:
12. Kevles D. Violence and the genetics of human Librairie A. Fayard. 1983
behavior: historical reflections. In: Violence from 27. Brunner H, Neten X, Breakefield O, Ropers H.
Biology to Society. Valencia, España: Elsevier Abnormal Behavior Associated with a Point
Science, 1997 Mutation in the structural Gene for Monoamine
13. Fletcher J. Ethical perspectives on violence. In: Oxidase A. Science 1993; 262: 578-580
Violence from Biology to Society. Valencia, Espa- 28. Clases O, Grimsby J, Gaspar P, Chen K, Pournin S.
ña: Elsevier Science, 1997 Aggressive Behavior and Altered Amounts of Brain
14. Hudziak J, Rudiger L. A Twin Study of Innattentive, Serotonin and Norepinephrine in Mice Lacking
Agressive, and Anxious/Depressed Behaviors. J Am MAOA. Science 1995; 268: 1763-1766
Acad Child Adolesc Psychiatry 2000; 39: 469-476 29. De Maeyer E. Aggrresive Behavior and Altered
15. Plomin R. The Role of Inheritance in Behavior. Amounts of Brain Serotonin in Mice Lacking
Science 1990; 248: 183-188 Monoamine Oxidase A. In: Violence from
16. Groye W, Eckert E. Heretability of Substance abu- Biology to Society. Valencia, España: Elsevier
se and Antisocial Behavior: A Study of Monozygotic Science, 1997
Twins. Reared Apart. Biol Psychiatry 1990; 27: 30. Salichon N, Gaspar P, Upton A, Picaud S, Hanoun N.
1293-1304 Excesive activation of Serotonin (5HT) IB Receptors
17. Cloninger C. Predisposition to Petty Criminality Disrupts the Formation of Sensory Maps in
in Swedish Adopters: II. Cross-Fostering Analysis Monoamine Oxidase A and 5-HT Transporter
of Gene - Enviromental Interactions. Arch Gen Knock-Out Mice. J Neurosci 2001; 21: 884-896
Psychiatry 1982; 39: 1242-1247 31. Moffitt T, Caspi A, McClay J, Mill J. Role of
18. Cloninger C, Gottesman H. Genetic and Enviro- Genotype in the Cycle of Violence in Maltreated
ment Factors in antisocial Behavior Disorders. New Children. Science, 2002; 297: 851-854
York, USA: CambridgeUniversity Press, 1987 32. Nelson P, Demas G, Huang P, Fishman M, Dawson V.
19. Scott C. Juvenile Violence. Psychiatr Clin North Behavioural Abnormalities in Male Mice Lacking
Am 1999; 22: 71-93 Neuronal Nitric Oxide Synthase. Nature 1995; 378:
20. Rowe D. Sibiling Interaction and Self - Reported 383-386
Delinquent Behavior: a study of 265 Twin Pairs. 33. Walsh E, Buchanan A, Fahy T. Violence and
Criminol 1995; 23: 223-240 Schizophrenia: Examining the Evidence. Br J
21. Moffitt T. Adolescence Limited and Life course Psychiatry 2002; 180: 490-495
Persistent antisocial Behavior. A Developmental 34. Lindqvist P, Allebeck P. Schizophrenia and Crime.
Taxonomy. Psychol Rev 1993; 100: 674-701 A Longitudinal Follow-Up of 644 Schizophrenics
22. Van Der Oord E, Verhulst F, Boomsma Dorret. A in Stockholm. Br J Psychiatry 1990; 157: 345-350
genetic Study of Ratened and Paternal Ratings of 35. Mednick S, Brennan P. Mental Disorder and Crime:
Problems Behavior in 3 year old Twins. J Abnorm Evidence from Danish Birth Cohort. Arch Gen
Psychol 1996; 105: 349-357 Psychiatry 1996; 53: 489-496
23. Baker L. Etiology of Sex differences in Criminal 36. Mullen P. A Reassessment of the Link Betwen Men-
Convictions in Danish Adoption Cohort. Behav tal Disorders and Violent Behavior and its Impli-
Genet 1989; 19: 355-370 cations and New Zeland. J Psychiafty 1997; 31: 3-11
24. Burr E, Hartwing A. Classification of Violent 37. Hodgins S. Mental Disorder. Intellectual Deficiency,
Syndromes. In: Violence from Biology to Society. and Crime: Evidence from a Birth Cohort. Arch
Valencia, España: Elsevier Science, 1997 Gen Psychiatry 1992; 49: 476-483

REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200 www.sonepsyn.cl ''


GENÉTICA DE LA VIOLENCIA

38. Tilhonen J, Isohanni M, Rasanen P, Koiranen M. Schizoaffective Disorder. Am J Psychiatry 1998; 155:
Specific Major Mental Disorders and Criminality: 835-837
A 26-Year Prospective Study of the 1966 Northern 41. Jones G, Zammit S, Norton N, Hamshere M, Jones S.
Finland Birth Cohort. Am J Psychiatry 1997; 154: Aggressive Behaviour in Patients with Schizophrenia
840-845 is Associated with Catechol-O-Methyltransferase
39. Daniels J, Williams N, Williams J, Cardno A, Genotype. Br J Psychiatry 2001; 179: 351-355
Murphy K. No Evidence for Allelic Association 42. Caims R, Gariepy J, Hood K. Development,
Between Schizophrenia and a Polymorphism Deter- Microevolution, and Social Behavior. Psychol Rev
mining High or Low Catechol O-Methyltransferase 1990; 97: 49-65
Activity. Am J Psychiatry 1996: 153: 268-270 43. Caims R. Genetics of Criminal and Antisocial
40. Lachman H, Nolan K, Mohr P, Saito T, Volavka J. Behaviour. West Sussex, Reino Unido: Wiley, 1996
Association Between Catechol O-Methyltransferase 44. L'Homme criminel. Etude antropologique et psy-
Genotype and Violence in Schizophrenia and quiatrique, Paris, Felix Alcan, 1895

Correspondencia:
Marcela Jara V.
Servicio Neurología
Hospital Militar de Santiago
Holanda 050, Providencia
Santiago de Chile
Fax: 3653147
E-mail: dramarcela@hotmail.com

 www.sonepsyn.cl REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2005; 43(3): 188-200

Вам также может понравиться