Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Campus Chillán
Facultad de Ciencias Veterinarias
Integrantes:
Siria Osses Espinoza
Sofía Reyes Chandía
José Varela Palma
Katherine Vergara Rojas
Profesor:
Dr. Luis Gutiérrez
Chillán, abril de 2011
Introducción
Estas fístulas pueden localizarse en variadas zonas, una de las cuales corresponde a la zona
perianal, que es una patología bien conocida en perros. Las enfermedades que afectan la
zona anal en el perro fueron descritas por primera vez en el año 1945, pero es en 1961
cuando se empiezan a observar las relaciones existentes entre los trayectos fistulosos anales
y los machos de edad media de las razas Pastor Alemán y Setter Irlandés.
Fístula Perianal
Las fístulas perianales son lesiones inflamatorias crónicas del tejido perianal, anal y
perirectal caracterizados por trayectos fistulosos ulcerados y supuración de las zonas,
frecuentes en perros y muy raro en gatos.
Inicialmente aparecen puntos rosáceos en la zona perianal, los cuáles se comienzan a
ulcerar y que drenan en la piel, estos se agrandan y se unen formando grandes tractos
fistulosos ulcerados y profundos además de áreas de granulación. Es poco frecuente que el
trayecto ulceroso alcance la mucosa rectal.
Causas
La fístula perianal se considera de causa idiopática, pero según algunos autores,
puede tener causa de tipo tiroidea (por disminución de la hormona tiroidea), mientras que
otros sugieren que se debe a alteraciones en la inmunidad celular que dan lugar a una
deficiencia de la Inmunoglobulina A (IgA).
A finales de los años ‘90 se empezó a relacionar la enfermedad con cierta patología
inmunemediada, del tipo de las colitis crónicas, intolerancia alimentaria, y últimamente la
enfermedad de Crohn en humanos. Otros estudios confirman que enfermedades
subyacentes como la babesiosis podrían afectar el sistema inmune y favorecer las fístulas
perianales, además líneas de reproductores pesados y la endogamia también la podrían
producir.
Esta enfermedad se presenta con mayor frecuencia en perros de raza Pastor Alemán dónde
constituye el 84% de los casos, también se encuentra en otras razas como Labrador, Setter
Irlandés, Border Collie, Bulldog, Spaniel, Samoyedo o Mestizo. Se dice que no existe
predisposición sexual aunque algunos autores sugieren que se presenta mayormente en
machos que en hembras, que afecta principalmente a individuos adultos mayores a 2 años
(entre 5 y 7 años comúnmente), pero se ha descrito desde los 1 a los 14 años. Hay
características anatómicas que son predisponentes como lo son la base de la cola gruesa y
cola de conformación baja, sumado a zonas húmedas y mala limpieza.
2
Signos y síntomas clínicos
La sintomatología clínica corresponde a estreñimiento como de diarrea, tenesmo,
disqueccia, hematoqueccia, descarga mucopurulenta de mal olor, lamido o rascado de la
zona perianal, persecución de la cola, postura de lordosis, “scooting”1 y apatía. Otros signos
que pueden ocurrir como progreso de la enfermedad son leve incontinencia fecal, diarrea
intermitente y pérdida de peso. Hay que considerar que cuando se solicita asesoría
veterinaria generalmente la patología está en estado avanzado.
Es necesario ser cuidadosos durante la exploración, ya que cuando las lesiones son severas
el simple hecho de levantar la cola del paciente puede causar dolor.
Diagnostico
El diagnostico esta basado en el examen físico especialmente de la zona rectal,
sumado a la anamnesis del animal. La sedación puede ser necesaria para realizar la
examinación porque dependiendo del grado puede haber dolor.
Diagnostico Diferencial
• Adenocarcinoma de glándulas perineales: Se presenta especialmente en machos de
edad avanzada, soliendo estar ulcerados por lo que se les puede confundir con
fístulas perianales.
• Saco anal crónico o saculitis
• Absceso perianal
• Impacción de los sáculos anales
Probablemente estas tres patologías son diferentes etapas en la patogenia de una misma
enfermedad. Inicialmente, se puede producir impactación. La obstrucción del saco
puede provocar inflamación (saculitis), que puede cursar con infección, dar lugar a un
absceso e incluso a la rotura de los sacos anales y su fistulización.
Tratamiento
El tratamiento médico de las fístulas hasta hace poco tiempo se basaba en la
limpieza de la zona con antisépticos y un tratamiento sistémico con antibióticos de amplio
espectro, antiinflamatorios y analgésicos. Los primeros ensayos clínicos se hicieron con
glucocorticoides, especialmente con prednisona, con resultados favorables en un limitado
número de casos. Hasta el momento el tratamiento médico al que mejor responde las
fístulas es la ciclosporina, la dosis inicialmente recomendada es de 7,5mg/kg/12hrs para
una semana de tratamiento, se debe ajustar la dosis intentando que los niveles de
ciclosporina en sangre sean de 400 a 600 ng/ml, la duración del tratamiento está entre los 3
y 6 meses, aunque en teoría es un buen tratamiento, el gran problema es su elevado costo
económico. Con el fin de aminorar los gastos se ha propuesto el empleo conjunto con
ketoconazol con el fin de enlentecer la eliminación de la ciclosporina y de este modo
reducir la cantidad que se necesita para alcanzar la dosis terapéutica.
En cualquier caso, este tratamiento no es eficaz en todos los animales, encontrándose una
recurrencia del proceso en un porcentaje variable (incluso en el 50% de los casos). Este
1
Término inglés que se refiere a esa acción que ejecutan muchos animales de arrastrar su trasero por el suelo
dónde estén.
3
tratamiento inmunosupresor también se puede combinar con tratamiento quirúrgico, cuando
las lesiones son muy amplias, o con antibióticos, si la supuración es importante.
Por lo tanto, las estrategias para el tratamiento médico incluyen:
• Cambio de dieta a una nueva dieta proteínica.
• Antibióticos tales como metronidazol
• Drogas antiinflamatorias/inmunosupresoras orales, tales como prednisona,
ciclosporina, azotioprina y tacrolimus.
Tratamiento Quirúrgico
El tratamiento quirúrgico se realiza generalmente en las situaciones siguientes:
• Cuando las lesiones son pequeñas.
• Para quitar sacos anales afectados.
• Si las fístulas no curan totalmente después del tratamiento médico.
• Para hacer que los perros se sientan más cómodos en casos severos o recurrentes.
2
Método de destrucción del tejido por la generación de calor a través de un aparato electroquirúrgico. Existen
tres efectos del equipo: Disecar (evaporación de proteínas y líquidos del cuerpo), Coagulación y Necrosis. De
esta forma se evita, que a medida que se hacen los cortes, el sangrado sea excesivo.
4
Conclusión
Las fístulas perianales son patologías recurrentes de la zona perianal, anal y rectal
de los animales, comúnmente aparecen como consecuencia de una mala ventilación del
área anal, combinada con una excesiva humedad o también debido a infecciones crónicas
de los tejidos anales. Como consecuencia eventualmente aparece la formación de fístulas
las cuáles suelen ser de carácter crónico pasando por procesos inflamatorios donde se
puede ver presencia de ulceraciones. La sintomatología por lo general hay estreñimiento,
diarrea, mal olor, prurito entre otras
Los tratamientos para esta enfermedad son muy variados, la literatura indica alternativas
médicas y quirúrgicas de tratamiento. Entre las alternativas médicas se encuentra el uso de
corticoides a dosis inmunosupresoras, ciclosporina y antibióticos sistémicos para el control
de la infección bacteriana secundaria. La importancia de la limpieza quirúrgica erradica en
la posible recidiva de la patología.
Referencias
3. ANIMALES que realizan “Scooting”: Animal Mascota. [en línea] Disponible en:
http://animalmascota.com/animales-que-realizan-scooting/ [Fecha de consulta: 9 de
abril de 2011]
4. ATOPICA treatment for dogs with perianal fistula [en línea] Disponible en:
http://www.ehow.com/about_6366483_atopica-treatment-dogs-perianal-fistula.html
[Fecha de consulta: 9 de abril de 2011]
5
hIJutaL08c9ZQkhoI33Tdz9fE&hl=es&ei=1fKjTcf1KeuI0QGW3-
3kCA&sa=X&oi=book_result&ct=result&resnum=1&ved=0CBIQ6AEwAA#v=on
epage&q&f=false [Fecha de consulta: 11 de abril de 2011
7. ]
8. GONZALO, J. M.: Cirugía veterinaria. Editorial Interamericana, año 1994. Página
71
9. GUAIMÁS Moya, L. E.; Aguilar, N.; Koscinczuk, P.: Resolución quirurgica de una
atresia anal asociada a fístula rectovaginal en un cachorro. Rev. Vet. 19:1, 46-49,
2008. [en línea] Disponible en: http://vet.unne.edu.ar/revista/19-1/Guaims-
Resolucion%5B1%5D....pdf [Fecha de consulta: 8 de abril de 2011]
14. NELSON, R.; Couto, G.: Manual de medicina interna de pequeños animales.
Editorial inter-médica S.A.I.C.I. año 2000 Página 294.
16. PERINEAL fistulas in dogs. ACVS, Veterinary surgeon. [en línea] Disponible en:
http://www.acvs.org/AnimalOwners/HealthConditions/SmallAnimalTopics/Perianal
FistulasinDogs/ [Fecha de consulta: 9 de abril de 2011]
6
18. SOTO, E. F.: La manada: Fístulas perianales caninas. [en línea] Disponible en:
http://hermosashistoriasdevida.blogspot.com/2008/04/fistulas-perianales-
caninas.html [Fecha de consulta: 9 de abril de 2011]
19. VETERINARY Services Department, Drs. Foster & Smith, Inc: Perianal fistulas in
dogs. [en línea] Disponible en: http://www.peteducation.com/article.cfm?
c=2+2111&aid=2921 [Fecha de consulta: 9 de abril de 2011]