MUSEO DEL CARIBE

ALBERTO ROSALES II SEMESTRE CONTADURIA PBLICA PRESENTADO A: LADYS MOLINA

BARRANQUILLA/ATLANTICO

MUSEO CARIBE.
Cuando se programo la visita al museo del Caribe pens en una de esas actividades montonas, tontas y sin gracia; para ser ms precisos algo sper tedioso y aburridor; la mayora de los jvenes poseemos ese paradigma, cuando nos hablan o se nos refieren a un museo siempre lo asociamos a algo desagradable, de poco inters; muchos de nosotros no poseemos un sentido de pertenencia en lo que concierne a nuestra cultura; a esas races, costumbres, hbitos y conducta que nos hace diferente a cualquier otra; a ese conjunto de actitudes y aptitudes que transcienden los limites terrestres, areos y martimos y que nos deberan acompaar por siempre sin importar el tiempo o el espacio donde estemos, se ha venido afectando o est afectada por causa de esa falta de compromiso con lo nuestro, lo autctono.. Hemos preferido adoptar o copiar otras actitudes y aptitudes apartando y alejando las nuestras. Pero si algo es muy importante es siempre estar abiertos y dispuestos a experimentar nuevas cosas, para tener criterios y bases firmes para argumentar nuestro punto de vista, y un ejemplo inminente de esto fue nuestra visita al museo del Caribe, aun me sorprendo de lo maravillo e increble que fue esa sensacin y experiencia; indudablemente la percepcin que tenia estaba totalmente errnea, en el museo aprend cosas de las que no tena la mas mnima idea de su existencia fue un rato agradable, acompaado del personal de apoyo del museo recorrimos todos y cada uno de los rincones de este la sala naturaleza, la sala de la palabra, la sala de la accin, la sala de la expresin, la sala Gabriel Garca Mrquez, la sala de la gente; no podra mencionar cual fue la sala que mas me llamo la atencin, cada una era mucho ms asombrosa que la anterior. A manera de conclusin solo me queda por decir que debemos rescatar nuestras tradiciones, no debemos mantenerlas ocultas, si no por el contrario siempre lucirlas con orgullo y el hecho que estemos en un proceso de globalizacin es aceptable que queramos estar a la vanguardia del mundo, pero este hecho no descalifica nuestra cultura si no por el contrario debera dignificarla para crear una mezcla y poder obtener lo mejor de dos mundos.