18 Pogo ‘echar el propio potenlal con vistas a impulse Ja madarer Detsonal yuna crolucion saludable.Aprender de ls grandes ambios sites eesencal para cualquier ser human; par los poledlogas ex impreseindble Capitulo 1 TRANSICIONES Y CRISIS EN LA VIDA ADULTA 1, LAS TRANSICIONES Y CRISIS EN LA CONFIGURACION DEL CURSO DE LA VIDA Nuestro desarollo describe un historia de ls que somos a la vez protagonisas y autores, una historia de historias encade- nadas que recama unidad y sentido. Esa es a razdn por la ge Sucle haber una relaién entre las elecsiones que hacetnos yuna suerte de argumentooesbozo de gun del que no siempre somos conscientes. Puesio que las historia son los hechos yl forsna en ‘ques cuentan, es dir, los hechos ye sigaiieado ques adjudi- a, nuestra narrativa personal reeonstrye el pasado, condicions nuestra pereepcin del presente y nos leva a proyectar el Fur «on una cierta coherencia. Sobre Ia base de la dotacion genética {que impone sus limites y bajo I inflvencia de ae eteunstancias mis o menos azarosas que estan fuera de nestro control, vam Construyendo yreconstruyendo wn entramado de nusstio yo con I mundo absolutamente idiosinrdsico, una estructura de vida que es siempre nica en un momento dado, como dnica es lt teayectorla vital de eada cual, 1a pecularidad de las trayectorias va acentudndose con el tiempo debido aque cada experiencia consttuye una pltaforma, de partida para los cambios posteriore. Aunque efactas como et de cohorte(ifluencias histricasy culturales que afetan a los ‘miembros de una generacién en un contexto determinado)y el de pevido de edad (nflvencins normativas de edad que est re lacionadas con la programacion genética y de socalizacion) ha cen semejantes en algunos aspects el desarrollo yen eve sentido To condiciona, queramoslo © ho, no delamos de hacer elecciones {que van encauzando nuestra vida en una particular direcelin 1a forma que adoptan los cambios ests medistzada por la ‘dentdad de cada cual en tanto que tende a elegits Ia alterna. tiva ms acorde con lo que uno ha legado a ser con el paso del20 ose Pres Blasco ‘dempo. Aunque no somos stempre libres pars elegir lo que nos pasa, sf quel somos para responder lo que nos pasa; optamos por lo que nos parece buena © conveniente para nosotros y en tse sentido vamos inventando nuestra forma de vida. como poslemos invent elegr podemas equivocarnes”(Savater, 1991, P32), Considerando que sr libre para elepir implica hacer eleccio- nes mis o menos acertadas (que dan lugar 8 situaciones oexpe- "encias de crecimiento y maduracién odeterior), las trayecto- ‘iasde via pueden ser concebidas coma una ebm de ventas © desventajas que siguen Io que se ha denominado principio de fcontuacién (Elder, 1998). Este principio viene a decir que las Aisposiciones y atributos que se han ido gestando en momentos pasadios modelan a forma de reaclonar ante nucvasstuaciones| Y tlenden a persistr. Este principio explica en parte que la hete- Togeneided entre la trayectorias personales vaya increment dose con la edad y que se tienda a acopar certo ipa de ventas fo desventajas en funcidn dels experiencias vidas. No obstante, es evidente que el principio de acentuacion no «es una ley inquebrantable, En esa complejainteraccién biol {lco-psicol6gicosocial continuamente eambiaate alo largo dl tempo que da cuenta del desarrollo, pueden producirse —y de Ihecho se prodicen-— experiencia que conducen a tomar deci siones que desafan las ereencias, ompromisos y costumbreses- tablecidasy que rompen en algtin sentido los ciclos de vntajes| Y desventajas iniclados. Estas experiencas suelen Wve como Transicionesy crisis, ‘Tanto las transiciones como ls ess, entendidas de modo ‘muy general como procesos gue impllean wt cambio de estado psicosocial que exigen tomar decsiones importantes respecto a su ‘jrontamiento (Clausen, 1972), son momentos dl desarrollo en Tos que mas fuerza tiene o cuando mis se debiita la acantuacign, Precisamente es la magnitud del desafio a as ceenelas basleas| lo que puede conducirnos bien a aferarmos ala seguridad de lo ‘conocido y decidir deforma continulsta bien, por el contrat, buscar, evaluar y comprometemos con formas niewas de pensar actuar que den lugar aun cambio en la trayectorla vital Aprende dels anes cambios iter a Figura 11H ae por a vida adults (Tomado de Bee, 1996) a] [newer vce Bosna ad Amadurez ee iin ee ete sete La metéfora del desarrollo adulto como el deseenso de una ‘montana sureada por senderos batrancos (Hse, 1996) permite representa ls idea anteriormente expuesta de que las yee: ‘orias vitals adoptan formas muy diversas y que, aunque con dicionadas por el contexto y por el pasado, dependen en tlt ma instancia de las eleceiones dela persona (Fig. 1). El viaje della vida adultacomienza en cada eaeo paticlar en un punto Aeterminado de la mentafia, que en fncién de cémo se vis cn la infancia y la adolescencia tendré un relieve mas o menos abrupto. No importa desde dénde se inicia el viaje, cualquier Aescensoincluye ramos de desigual dificult: suaves penien tes que atravesamos sn especial efverzoytrechos escarpadas resbaladizos en los que hemos que cambiar el ritmo y la forma de marchar anteriores ya veces, decidir si molficamos o no de rumbo ante un erice de caminos. El visi, dependienda en grat ‘media de las deisiones tomadas en las encrucindas, va tas2 sia Ra Blasco ‘euriendo como una sucesién de etapas que bien levan a zonas cau ver ms angostas y acidentadas, ben pod vvirse como tna sucesin de experienins de enrquecimlento,aprendizajey ‘atisfacion. En esta metfora las transiciones ls crisis evo {vas sparecen no simplemente como nexos entre los periodos de txtabilidad sino como los momentos en los que de forms desi ‘ase construyen la estructuras vitals y se van configurando las trayectorias de vida. 2. DEFINICION DE TRANSICION, CRISIS ¥ OTROS CONCEPTOS RELACIONADOS ‘Los conceptos de trnsiciones, sucess y criss poseen clertas ‘caracterstiens comunes que conducen en muchas ocasiones St utllizacinindiscriminada como se sprecia, por elemplo, et tl siguiente texto: “EL curso de la vide esté constitu por grandes y pequetas transiclones.. De forma apropiad, las grees transciones son denominadasfrecuentemente ers. La palabra crisis procede del ‘rego Kvinein,“separary signifioe momento decisive, punto de {iro'0 momento encial Bx Medicina sewtilen para referee al ‘punto en el ranscurso de wna enfermedad cuyo desnlace puede ser le recuperactén o la muerte. Esta impicecion patoligica) a me uo ftalista perece estar asociada comnmente com el érmino. are evitar esta connotacion napative,algnas extores emplean fl término suceso, que, en wn sentida general simplemente Sgn! fica algo que ocure, 9 que puede emplearse sin ningtin géner de ‘tudas a esis postves como la graduecin. el matrimonio, una ‘romoctén labora, tanto como aerisisnegtivas como un despido Taboralo wn dtorco, (Resse y Smyet, 1993, pp. 1-2). Estos conceptos est relacionadas con el cambio psicoli- co, con ln inestabildad y la ruptura o slerseién de una situa ‘dn personal preva, conf adsptacion yafrontamient, ee. Sin embargo, tambien poseen otras caractristieas diferencias que convene tener en cuenta cuando inciamos su estudio, Arve dos grandes cambir ves 2 Suceso ltérminosuceso lo emplearemos para designarexperiencias coneretas que aunque asualmente da gar a tronsiciones 0 cr 1s, no slampre actian como demarcadores de esos proceos de ambi, lin mochas ocasiones se produce una crisis 0 una tran ‘Scion preclsamente porque no ocurte un suceso que Se espera, fen ora muchas, por una acumulacion de estrés oinsatisfnecién fn altuaciones cotidianas, por cambios paulatinos en el conte- nido de los roles que re desempenian por las relaciones que se ‘Sstablece, Un sucesoes simplemente algo que ocurre. AS visto, su graves dad e impacto es de una ampli ifinita. Por ejemplo, una ex perlencia coma la menopausia puede ser viva como un cambio in relevanca alguna, como un cambio signiiativo biologico {Que no allea las asiciones nia conducta habitual dela tue Jer como una redeBnicion de su propia identidad y sa manera ‘ie comportarse, como una nueva stusci6n que le exige clertas fdaptacones yun cero esré o como una crisis personal grave flebido que Seocie, por ejemplo, el in de su capacidad repro- ‘ductiva con la pérdida desu valor eomo mujer y como dectepi- tu Por otra parte, no todos los grandes cambios vitals esta provecades por sucesos concreos y felimente identicables; por ejemplo, una persona pode sufi una crisis debido aun re Planteamiento de sus creencasreligosaso por la acumulacién {le colictos no reeuelts en una relacion de pareja o de amistad ‘por la insatisfaccion ereciente ent delerminade rol laboral. Transicion ‘La definicion de translelén conta siendo una cuestién abjerta, Mientras que algunos autores la definen por el suceso tiem que Ins marca —paternidad’maternidad, convertrse en Abuclos,Jubilacién, menopausia—, otros consideran que s6lo podemos hablar de tansiion euand existen importantes cam~ bios cualtativs iternos en la persona que les vive, que aectan 2 sus roles y relacionesinterpersonales (Citas en Perez Blasco, 1998)