Septiembre 2009

CEIP LOPE DE VEGA (Almería)

Curso 3º de primaria

ALTERNATIVAS AL USO DE PAPEL DE ALUMINIO EN EL COLEGIO.

ANTECEDENTES:

El proyecto arranca del curso anterior cuando se hizo un estudio de los hábitos alimenticio el
alumnado de Primaria en el centro. Además de fijarnos en los alimentos nos fijamos en las
envolturas y observamos que el papel de aluminio era usado muy frecuentemente.

OBJETIVOS:

Nos propusimos lo siguiente:

– Calcular aproximadamente el consumo de papel de aluminio en el colegio por el
alumnado de Primaria.
– Buscar y sugerir alternativas a su uso.
– Comunicar a las familias los resultados de la investigación.

COMPETENCIAS BÁSICAS:

Competencia en Comunicación Lingüística.

Competencia Matemática.
Competencia en el Conocimiento e Interacción con el Mundo Físico.
Competencia Social y Ciudadana.
Competencia para aprender a aprender.
Autonomía e iniciativa Personal.

Trabajo integrado de las Áreas de Lengua Castellana y Literatura, Matemáticas y Conocimiento del
Medio.

DURACIÓN APROXIMADA:

1h y 25 minutos.

DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD:

Durante el curso anterior (2008/2009) el alumnado de 2º A de Primaria estuvo almacenando el

papel de aluminio que traía a clase y que era usado para envolver el desayuno del recreo. Con dicho
papel se iba haciendo unas esferas, porque así veíamos que ocupaba menos espacio y
posteriormente se podían transformar en “planetas” para decorar la clase (en un proyecto pensado
para 3º de primaria relacionado con el Universo).

A comienzos de este curso retomamos el proyecto y nos pusimos manos a la obra. A mí (maestro)

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me sirvió como prueba de evaluación inicial de las áreas implicadas mediante la observación directa
y registro en sus correspondientes fichas para así completar la prueba de evaluación inicial que se
realiza mediante cuestionarios escritos y que, a mi parecer, no llegan a reflejar exactamente la
realidad o por lo menos no por igual en todo el alumnado.

Se planteó la cuestión:
– ¿Cómo calculamos el aluminio que consumimos durante el curso pasado?
Se decidió por unanimidad, con algunas dudas que había que pesar el aluminio, el problema surgió
en la forma de pesarlo ya que habían muchas esferas de este material:
– Pesamos las bolas (de aluminio)
– ¡Si no caben en el peso!
– Pues una a una o de dos en dos...
– ..y luego se suman
– Se pesan con la caja.
– Pero el peso de la caja ¿qué?
– Pesamos primero la caja y luego con las bolas
– o primero todo y luego la caja y...
– Se restan los pesos.
–

Lo hicimos así ya que fue lo que le pareció mejor al grupo. Pilar iba anotando en la pizarra los

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resultados. En el visor de la balanza aparecía un número muy largo (hasta ahora se supone que
habían estudiado hasta las centenas), lo escribimos en la pizarra e intentamos averiguar como se lee
(en el libro de texto se plantea el estudio de los números hasta el 9999 pero es evidente la
incongruencia del planteamiento porque había niños y niñas que ya sabían leerlos por el uso
cotidiano e los mismos y el resto inmediatamente averiguó cómo se leían):
– tres millones …
– Que noosfera, que son tres mil ciento cincuenta y ocho... (ya no se acordaban de la unidad
que estudiamos el curso pasado y yo les recordé algunas unidades)
– ¿Metros...
– que no profe cómo van a ser metros...
– litros, gramos, kilos?
– Gramos, gramos
– kilos, kilos, los dos.
– Alejandro ¿Por qué dices que los dos?
– Pues porque el kilo es más que los gramos.
– ¿Alguien se acuerda cuanto mayor? (alguien dijo 1000 gramos y aventuraron tres kilos y
algo más)

A continuación se pesó la caja vacía y todos y todas dijeron 264 gramos. Se anotó en la pizarra y
ahora calculamos lo que pesaba el aluminio sólo. Cada uno hizo la operación en un papel (yo recogí
todo el trabajo individual para registrarlo como evaluación inicial) con más o menos dificultad.
Pusimos en común el resultado que fue casi unánime: 2894 gramos – ¡casi tres kilos !-

Peso del aluminio y la caja. 3158 grs

Peso de la caja vacía. 264 grs
Peso del aluminio solo 2894 grs

Aquí surgió otro debate paralelo que nos hizo descansar un poco del estudio y que nos serviría
posteriormente para hacer un informe a las familias sobre lo que estamos haciendo y contextualizar

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el proyecto y justificarlo mejor; la eliminación de las bolsas de plástico de los Supermercados y la
alternativa de uso ofrecida: cambiarlas por otras de patata o de varios usos biodegradables.
– ¿De patatas?
– Bio quéee.

Otro debate surgió que demostró que íbamos por buen camino. Lo mismo que los supermercados
ofrecen una alternativa al uso de las bolsas nosotros proponemos otro para el aluminio, pero eso de
que las bolsas estén hechas de patata, sonaba raro por eso han quedado en averiguarlo, y
comprobarlo en el super. Lo de biodegradable tuvimos que intuir un significado descomponiendoo
la palabra en bio (esto les sonaba por los yogures que toman algunas madres y padres), la palabra
degradable costó un poco más pero se comprendió cuando Paola recordó el anuncio de los pelícanos
en una roca que desaparecían y las bolsas perduraban, durante ¡400 años!. Más debates,
relacionados con la duración del tiempo, comparando esa cantidad con la vida de una persona,
hablando de las publicidad, de la conservación el medio ambiente, de la basura que dejan algunas
personas en la playa, de las tortugas bobas que se mueren atragantadas por las bolsas, y que luego
hay más medusas y no te dejan bañarte, que a la prima de fulanito le picó una …., parece que no
pero los temas de actualidad les interesa a los niños y niñas, los conocen y hay que tratarlo con ellos
y ellas sin infantilismos aunque a veces con la correspondiente transposición didáctica.

Cuando descansamos un poco con este animado debate retomamos el estudio con una nueva
pregunta:
– ¿Podemos calcular la cantidad de aluminio que se consumió el curso pasado en las trece
aulas de primaria?

Primeramente casi todos y todas dijeron que no, porque tendríamos que haber hecho lo mismo pero
cuando les dije: suponiendo que hubiesen gastado lo mismo que nosotros. Empezaron a dudar y
comenzaron las sugerencias, lo cual fue aprovechado para trabajar la estimación y el cálculo
aproximado, la interpretación de los resultados de un problema, etc.

– Se multiplica -dijo Alberto.

– ¿Se puede hacer de otra forma? - dije yo-
– Se puede sumar tres veces...
– Será trece veces..
– ¿Por qué trece veces?
– Porque hay trece clases (aulas)
– Vamos a hacerlo cada uno en su papel (evaluación inicial)- algunos y algunas se acordaban
de la multiplicación por dos cifras que aunque no se da en segundo de primaria, según los
libros de texto, nosotros trabajamos algo a raíz de una necesidad creada por una situación

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 real.
– Profe ¿se puede hacer con calculadora?
– Sí pero no digas el resultado hasta que no sepamos el de cada uno.- En estos casos la
calculadora es útil ya que aún sin dominar el algoritmo de la multiplicación por dos cifras y
con dificultad para recordar las tablas ya sabe reconocer la operación a realizar-.

Pusimos en común los resultados, tras recordar la tabla del tres (la del uno se la sabían todos y
todas) y la mitad habían realizado la operación correctamente, otros tres habían colocado la fila
resultante de multiplicar por uno sin desplazar la primera cifra al lugar de las decenas (luego lo
volvimos a recordar por qué eso era así) el resto no se acordaba mucho aunque inmediatamente se
pusieron al día.
El resultado de la multiplicación fue:

Peso total del aluminio en todo el centro 2894 x 13 = 37622 grs.

Y vueltas a leer números de hasta cinco cifras con resultados dispares pero como se realiza en un
contexto entre iguales y sin apremios se hacen más asequibles para un estudio futuro más formal.

– Casi treinta y ocho kilos dijo Álex.

– ¿Quién pesa 38 kilos aproximadamente? (comparamos)
– Treinta y siete mil seiscientos veintidós gramos....

Parecía mucho, pero les pareció más cuando les comenté que si una bicicleta de aluminio pesa unos
9 kilos:
– ¿Cuántas bicicletas se pueden construir con ese aluminio?- dijeron varias cantidades pero al
explicar cómo lo había averiguado se daban cuenta que se habían equivocado hasta que
alguien dijo:
– Cuatro, porque 9 por 4 son treinta y seis y casi hay para otra...

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Aprovechamos nuevamente para resaltar lo importante de la valoración del resultado obtenido como
aproximado no como un valor real. Hay veces que es necesario hacerlo así y pusimos ejemplos:
edad de mi padre: casi 50, altura del colegio 10 metros (si el aula mide 4 de alto y es de dos plantas,
contando el tejado y a partir de la altura del profe)...

Ahora si estaban seguros y seguras que era mucho aluminio. Cuestión resuelta.

Había que decirles a las familias que en lugar de aluminio utilizaran otros sistemas y el debate
volvió a surgir. En grupos de cuatro fueron pensando alternativas, las decían y las desechaban a la
vez:
– En una bolsa...
– No que contamina, si lo hemos dicho.
– En papel que se recicla o que sea reciclado.
– En un “taper” que se puede usar muchas veces.

Esta última idea parece el más interesante, por eso a continuación escribimos una nota a las familias
diciendo lo que hemos hecho y las sugerencias para el futuro y estos fueron los resultados:

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Por último se acordó enviar un carta a las familias y al resto de alumnos y alumnas del centro, con
el informe realizado entre todos y todas en la pizarra, explicando el estudio realizado y las
sugerencias, además recordamos lo de las bolsas de los supermercados. También lo colocamos en el
blog del centro y en el boletín informativo “La Carpeta”.