TRABAJO: ANALISIS DEL CUARTO CAPITULO

ENSEÑAR LA IDENTIDAD TERRENAL

(EDGAR MORAN)

ALUMNA: MARIBEL CARRANZA GUTIERREZ

MAESTRA: GUILLERMINA LOPEZ CORRAL

FECHA: 24 DE OCTUBRE DE 2009.

 Enseñar la identidad terrenal

En este capítulo encontramos una situación bastante compleja, pues el mundo

de la ciencia y la tecnología está abarcando un gran espacio, tanto en la mente del
hombre como en la cultura; el mundo se ha convertido en un desorden total y en este
momento se clama y vuelca su directriz a la educación para que guie al hombre a
buscar una balanza para que sobreviva en esa enorme globalización y a la vez no
pierda su identidad, y así como se ha transformado este mundo así también surja una
reforma en el pensamiento para que se generen nuevas ideas que aporten
conocimientos a fin de comprender la situación actual y que este avance no limite las
acciones del hombre y que no se quede al margen pues corremos el riesgo que en el
futuro la tecnología sea quien domine al hombre y no el hombre domine a las maquinas
y sólo puede lograrlo asumiendo una responsabilidad y solidaridad, saliendo del
individualismo en el que se ha caído.
 Imagino en este momento que el mundo es un enorme barco el cual debemos
abordar para que a medida que avanza también estemos en ese camino conociendo e
involucrarnos, empapándonos de la riqueza que encontraremos en su interior.

La era planetaria

Los grandes avances científicos son favorables pero a la vez nos limitan a
desarrollar nuestra creatividad, se habla de pasos gigantes en el desarrollo tecnológico
tales como: la televisión, el teléfono, el fax, internet, celular que están conectando a
todo el mundo, esto nos indica que el mundo ya no es tan grande como se manejaba
imaginariamente al principio, pues ahora con todo esto nos permite saber que está
pasando en tal o cual continente, no sólo país.

Esto es un tesoro de la riqueza que tiene el ser humano, el poder creativo y el

actuar lo imaginario para crearlo, es así como ahora decimos que el mundo se vuelca
en un todo pero a la vez ese todo como ya lo hemos mencionado anteriormente se
fracciona aunque se hable de una realidad unificadora.

Precisamente esta “diversidad de pensamiento permite que surjan conflictos,

pues tiende a suprimir las diversidades humanas y culturales” (PAG. 65)
 EL LEGADO DEL SIGLO XX

El mismo avance científico nos ha llevado a construir armas nucleares que

acaban no solo con la vida de una persona sino con la destrucción total y masiva de los
humanos y no solo de lo humano sino también afecta y destruye al medio ambiente y lo
más grave es que al ir avanzando en este orden nos orilla a perder sentido moral y
destruimos el alma y perdemos sentido de la existencia de uno mismo y de los demás.

La modernidad también está en peligro de destrucción y muerte pues ya está

siendo rebasada por los avances antes mencionados y esto nos ocasiona una seria
preocupación pues podría ser rebasada esta modernidad y ello significa la muerte claro
sino se actualiza o se generan más avances en la ciencia y tecnología y ¿Cómo
podemos salir de esta situación?

Considero que necesitamos explorar más la creatividad y la comprensión del

hombre para que surjan propuestas de esos cerebros tan ricos, pues aun no se agota
esa imaginación todavía existente mucho por aportar.
LA IDENTIDAD Y LA CONCIENCIA TERRENAL

En primer lugar para que tengamos conciencia de quiénes somos y a donde

pertenecemos es indispensable identificarnos como seres humanos pensantes y con
sentimientos y así podemos ahora hablar que pertenecemos a un mundo llamado tierra,
la cual nos acoge con toda su riqueza y cariño como una madre recibe a sus hijos y es
deber de cada uno aprender a vivir y a convivir, es decir debemos inculturarnos para
poder convivir con los demás.
 Respetando la ideología y respetando también su cultura espiritual; saber esforzarnos
por mantener un equilibrio manteniendo lo necesario para el presente, proyectar
nuestro futuro tratando de mejorar respecto al presente sin olvidar nuestro pasado que
nos ha colocado en el lugar que nos encontramos en este momento.

“Todo ser humano debe dirigir su vida en una circulación interminable” (pag.71)

Lo que vivimos durante toda la historia hasta ahora nos ha enseñado que la evolución
humana, supone una evolución en nuestro poder para acabar con la vida, que con las
armas nucleares, tenemos un potencial de destrucción quizá nunca imaginado y la
tecnificación acelerada esta también destruyendo la naturaleza.
TRABAJO: ANALISIS DEL QUINTO CAPITULO

ENSEÑAR LA IDENTIDAD TERRENAL

(EDGAR MORAN)
 ALUMNA: MARIBEL CARRANZA GUTIERREZ

MAESTRA: GUILLERMINA LOPEZ CORRAL

FECHA: 24 DE OCTUBRE DE 2009.

ENFRENTAR LAS INCERTIDUMBRES

El capitulo anterior nos hablo de los grandes avances que se han generado a lo largo
de la historia y ahora nos presenta el autor que la historia de los siglos venideros nos
está vislumbrando un futuro incierto, cambiante, abstracto no definido en una palabra
impredecible, claro que no descartamos grandes avances y progresos en todos los
ámbitos pero volvemos a caer en la incertidumbre de cuál será el destino de nuestra
realidad.
 La historia se transforma, no avanza en línea recta tiene desvíos y se habla que
cada uno de ellos se debe a la forma de pensar de cada hombre o grupo y hasta
cultura; y si estas ideas toman fuerza terminaran por imponer y en cierta forma nos
vemos inmersos en dichos ideales, pues si no aceptamos nos vemos perjudicados, es
importante puntualizar que en muchas ocasiones estas ideas buscan un bien común
son favorables, pero también encontramos el lado opuesto existen ideas negativas que
buscan la destrucción encontramos pues dos ideas opuestas “vida y muerte” (pág.78)

Hace falta detener nuestro ajetreado caminar para pensar en lo maravilloso que
es nuestra tierra; de ¿Cómo fue su origen? se organizo, formo un orden y también un
desorden, todo pasando por un enorme sufrimiento, pues todo al ser creado lleva un
proceso de transformación, este es nuestro planeta llamado tierra.

En este capítulo el autor nos invita a saber enfrentar las incertidumbres que se
presentan, pues como lo hemos visto vivimos en una era cambiante donde los valores
ya no se respetan por lo que se pide que la educación formule métodos estratégicos de
enseñanza para salvar este mundo que no solo está en crisis sino que está agonizando,
pues el ser humano ya no vive esa comunión de la que anteriormente se hablaba,
ahora el mismo hombre se destruye

Por otra parte “las ideas y teorías que creemos que nos reflejan la realidad no la reflejan
sino que la traducen” (pág. 80)

Siempre hay algo de lo que existe que es invisible para nosotros en cualquier situación
real, que es ajeno a nuestro conocimiento, por tanto el conocimiento se dará cuando se
enseñen principios de estrategia que permitan afrontar los riesgos, lo inesperado, lo
incierto y modificar su desarrollo en virtud de las informaciones adquiridas en el camino;
es necesario “aprender a navegar en un océano de incertidumbre a través de
archipiélagos de certeza” (pág.81) aunque muchas de las ocasiones solo sean
espejismos.
Caemos ahora en la incertidumbre de la ecología de la acción.

Debemos estar consientes que una vez que emprendemos una acción esta se vuelve
compleja.

Esto es la ecología de la acción , tener en cuenta su propia complejidad, el riesgo, el

azar, las posibles desviaciones y transformaciones; la incertidumbre de la acción deriva
del bucle, riesgo _ precaución, fines_ medios, acción_ contexto y lo impredecible que
puede ser a largo plazo, los bucles son parejas interrelacionadas, la doble necesidad
del riesgo y precaución, la incertidumbre de la finalidad y de los medios, ya que la
pureza de uno no implica la bondad del otro y viceversa, además nadie nos asegura
que se logre la finalidad deseada y no una contraria, mediante la contaminación de los
medios y las interacciones entre la acción y el contexto, en las que el autor deja de
llevar el mando y la acción puede escapar a su voluntad al entrar en el juego de las
acciones.

A estos bucles problemáticos se les une la impredecibilidad de las acciones a largo

plazo, pues no hay garantía de que a largo plazo los efectos de una acción no sean
contrarios a su intención.

A la hora de luchar contra la incertidumbre de la acción contamos con la apuesta y la

estrategia, apuesta que reconoce los riesgos al tomar cualquier decisión y la estrategia
elabora un plan teniendo en cuenta los riesgos y la posibilidad de modificar,
dependiendo el camino incierto que tome la acción e incluso contempla la posibilidad de
anular la acción que se ha emprendido.

Debemos confiar en lo que creemos por más imposible que nos parezca, ya que la
historia nos ha demostrado que muchas veces lo más inesperado sucede, pero
tenemos que estar también preparados para el fracaso de lo que consideramos seguro,
la desaparición de lo que se considera inmortal, en fin para cuando suceda lo
inesperado y no suceda lo esperado.