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No matars
Ex. 20,13
A qu nos llama?
Toda vida humana desde su concepcin hasta su muerte, es sagrada, pues la persona humana ha sido amada por s misma a imagen y semejanza de Dios vivo y santo.
La legitima defensa:
No se suprime el derecho de impedir que un injusto agresor cause dao. La legitima defensa es un deber para quien es responsable de la vida o del bien comn.
El homicidio voluntario:
El que mata y los que colaboran con l cometen un pecado que clama venganza al cielo.
El aborto:
Desde su concepcin el nio tiene derecho a la vida. El aborto directo, es decir , buscado tiene como un fin o como un medio, es una prctica infame. La Iglesia sanciona con pena cannica de excomunin este delito contra la vida humana.
Porque ha de ser tratado como una persona desde su concepcin, el embrin debe ser defendido en su integridad, atendido y cuidado mdicamente como cualquier otro ser humano.
La eutanasia voluntaria cualquiera que sean sus formas y sus motivos, constituye un homicidio. Es gravemente contraria a la dignidad de la persona humana y al respeto del Dios vivo, su creador.
El suicidio (atentar contra su propia vida) es gravemente contrario a la justicia, a la esperanza y a la caridad
El Respeto a la salud:
Cuidar de la salud. No al culto del cuerpo Evitar excesos: Comida, alcohol, tabaco, medicinas. Uso de la droga
3. LA DEFENSA DE LA PAZ
La paz
Justicia y equidad. Denuncia de la clera y el odio. El respeto al desarrollo No a la violencia.
La carrera de armamentos es una plaga gravsima de la humanidad y perjudica a los pobres de modo intolerable.
2006-2007