Вы находитесь на странице: 1из 7

DICIEMBRE 4, 2006

¿Como debe pensar un escéptico?


“Si quieres ser alguien que busca la verdad, es necesario que al menos una vez en tu
vida, y hasta donde te sea posible, dudes de todas las cosas”
R. Descartes

El titulo del texto no quiere decir que yo no sepa como debe pensar un buen escéptico, al
contrario tengo muchas ideas al respecto.

Se refiere en cambio al significado de la frase de Kida: “Como escéptico te debes sentir


cómodo al decir: NO LO SE”.

Dice que la forma de adquirir nuestras creencias debe ser un proceso continuo; hasta a
aquí resulta obvio, pero el punto medio deber ser precisamente la postura “no lo se”.

Pero, ¿y cuales son las otras etapas?

Veamos el siguiente esquema:

* IA - IM - LI - NO LO SE - LC - CM - CA
*(Incredulidad Absoluta)
(Incredulidad Moderada)
(Leve Incredulidad)
(NO LO SE)
(Leve Credulidad)
(Credulidad Moderada)
(Credulidad Absoluta)

Lo que dice Kida tiene sentido y a la vez contradice la creencia de que los escépticos
dudamos de todo.

La postura inicial no es dudar sistemáticamente, pero si en cambio no dar por sentado


todo al instante.

Claro, esta actitud tiene sus matices, no vamos a dudar de cosas obvias, sabemos que si
no comemos nos morimos, si cruzamos la avenida en horas pico, nos arrollaran, si
conducimos con los ojos cerrados, nos estrellaremos en un poste o con otro auto.

Para cualquier otro caso hay que aplicar el mantra del escéptico:
“Afirmaciones extraordinarias requieren de pruebas extraordinarias”.

Tradicionalmente nos sentimos mas cómodos creyendo cosas porque nuestra naturaleza
aunque curiosa (aunque quizás por lo mismo) requiere de certidumbres, y no se siente a
gusto con ambigüedades o suspensión de juicios.

Especialmente el vulgo latino, pregúntele su opinión sobre algo que le resulte apenas
conocido y opinara como si fuera especialista (guerra en Irak, elecciones, diabetes, sida,
educación sexual, calentamiento global, etcétera).

Difícilmente escuchara a alguien decir: “En realidad no tengo una opinión definida al
respecto, ya que no conozco del tema”.

En cambio pregúntele a alguien las razones de sus creencias y difícilmente podrá


nombrar alguna, claro fuera de las del tipo: “Pues es obvio no”, “Esta demostrado
científicamente" (pero no se donde ni por quien, ni cuando lo hizo), “Pues todo el mundo
lo sabe y piensa lo mismo”. “Lo vi en un documental en la televisión”, “Es de gente
cerrada no creerlo”.

Esta última es una frase constante hacia quien mantiene una posición de duda, como si el
creer al instante en cualquier cosa fuera prueba suficiente de una mente abierta a nuevas
ideas.

Veamos; ¿Qué es más fácil, creer en ovnis o dudar de ellos?

¿Si decido creer, cuales son mis evidencias?


¿Si decido dudar, cuales son mis objeciones?

¿Es la evidencia lo suficientemente extraordinaria para el calibre de la afirmación?

¿Qué es más popular, creer o no creer?

Por ejemplo ante la afirmación de que los ovnis existen.

¿Cuáles son las opciones del creyente?

¿Cual seria su posición en el esquema de Kida?


* IA - IM - LI - NO LO SE - LC - CM - CA
¿Y cuales serian las opciones del escéptico?

* IA – IM – LI – NO LO SE – LC – CM - CA
¿En este caso quien tendría más opciones o más facilidad para moverse en el esquema?

¿Quién esta en posición de aceptar nuevas hipótesis si aparecen nuevas evidencias?

¿Quién es menos probable que acepte otra idea diferente a la postura previamente
asumida?

Y finalmente ¿Quién es de mente más cerrada?

Kida nos hace una advertencia muy importante:

“Una aseveración no es necesariamente falsa porque no haya evidencia a su favor, ni


es razón para que nos lleve a una absoluta incredulidad, esta solo significa que no hay
razones para movernos del centro”.
Es decir, no hay evidencias para decir que los ovnis no existen, pero dada la calidad de la
evidencia presentada hasta ahora, tampoco hay razones confiables para decir que si
existen.

Para ayudarnos en el proceso de establecer nuestras creencias, Kida nos presenta una
técnica de cuatro pasos desarrollada por Theodore Sohick y Lewis Vaughn en su libro:
“How to think about weird things”.

Establezca claramente cual es la aseveración, no podemos poner a prueba algo que es


ambiguo, la afirmación debe ser tan clara como sea posible.

Examine cuidadosamente la evidencia para tal aseveración, recordemos que no toda la


evidencia es igual, hay testimonios anecdóticos, percepciones sesgadas, memorias y
recuerdos distorsionados, es decir no solo cuenta la cantidad sino también y
principalmente la calidad de la evidencia.

Considere hipótesis alternativas, recordemos que como defensa evolutiva, los seres
humanos tenemos la tendencia a buscar razones que confirmen nuestras creencias
presupuestas, y es muy importante que seamos objetivos y veamos más allá (mente
abierta) para ver cuantas explicaciones sean posibles.

Evalué lo razonable de cada alternativa, aquí es donde se encuentra el elemento mas


valioso y la justificación del escepticismo; y donde generalmente fracasan las creencias
mas populares o del tipo dogmáticas y a su vez se llega a el haciéndose tres preguntas
esenciales:

- ¿La evidencia es repetible o replicable? (Principio de falsabilidad)


- ¿Es la explicación más simple? (Navaja de Occam)
- ¿Entra en conflicto con otros conocimientos bien establecidos?

La imposibilidad de probar si algo es real, no quiere decir que este sea falso, simplemente
quiere decir que no tiene validez desde un punto de vista científico. Pero si no podemos
probar o medir algo, es imposible determinar que este sea real o verdadero.
La idea de buscar la explicación mas simple le pertenece a Guillermo de Occam, un
monje de la edad media cuyas ideas le dieron forma a una de las herramientas mas
valiosas de la ciencia moderna, desafortunadamente para la mayoría de las personas es
mas atractivo dejarse llevar por explicaciones fantásticas, aunque estas sean mas difíciles
o incluso imposibles de poner a prueba.

La ultima pregunta se refiere a pensar cuales son las implicaciones de sostener una
creencia cuyas consecuencias contradicen o no son consecuentes con el conocimiento
establecido; un ejemplo es el medicamento homeopático.

La mayoría de las personas que lo utiliza no se detiene a pensar que si este fuera
realmente efectivo, tendría que aceptar la idea de que el agua tiene memoria y que esta
solo “recuerda” las propiedades benéficas de las sustancias que estuvieron en contacto
con ella y no así los miles de venenos o sustancias toxicas con los que tuvo contacto en su
interminable viaje por la naturaleza.

Veamos esta misma teoría bajo la luz de los pasos de Sohick y Vaughn:

Aseveración:

El medicamento homeopático funciona disolviendo en agua cantidades mínimas


(potenciación) de una sustancia que en dosis más grandes causarían los mismos efectos
que se pretende curar.
La teoría dice que una molécula del elemento nocivo disuelta en un millón de moléculas
de agua basta para tener los efectos benéficos mencionados, algo así como una gota de
arsénico -por ejemplo-, disuelta en una alberca olímpica.

Evidencia:

Múltiples casos de testimonios de gente que dice haber mejorado después de tomar
remedios homeopáticos, gente que sin embargo no ha sido sometida a experimentos
controlados ni se le ha dado seguimiento a la evolución de su enfermedad.
Hipótesis alternativas:

a) Diagnósticos equivocados (quizás el paciente nunca estuvo enfermo, por lo cual es


fácil concluir que este ha sido curado de algo que nunca tuvo).
b) Remisión espontánea del padecimiento (el 85 % de los padecimientos se curan solos
sin necesidad de ningún tratamiento, incluso algunos padecimientos crónicos como
artritis reumatoide, esclerosis múltiple y algunos casos de cáncer).
c) El uso alterno de otros tratamientos o medicamentos aparte del homeopático.
d) Efecto placebo (que sin embargo solo tiene efectos temporales, en caso de ser una
enfermedad seria, esta seguramente regresara con el tiempo)

Evaluación de las alternativas:

a) ¿La evidencia es repetible o replicable? Siempre que los efectos homeopáticos se ha


tratado de replicar en experimentos controlados estos han fracasado (James Randi v.s.
Jacques Benveniste 1988).
b) ¿Es la explicación más simple? Como ya vimos existen muchas otras teorías más
razonables para explicar los efectos supuestos de los tratamientos homeopáticos.
c) ¿Entra en conflicto con conocimientos bien establecidos? Tomando en cuenta que para
aceptar que la homeopatía funciona debemos aceptar a la vez que el agua tiene memoria
y que esta es selectiva, ya que el compuesto final esta tan diluido en agua que no queda
una sola molécula del elemento original, aceptar esto es tanto como decir que hay que
tirar a la basura todo lo que sabemos de química.

Así que al fin de todo, ¿Quien es de mente más cerrada?

El que afirma siempre y a todo: ¡Si, lo creo!

O el que se detiene a pensar y de forma tentativa exclama” ¡No lo se!

Juan Carlos Bujanda Benítez


Diciembre 2, 2006
PD.
Post dedicado a Martín Pereyra (pereque) de La Corte de Los Milagros y a Héctor
Coronado (control_zape) de libre pensar por favores previamente recibidos (o sea por
arreglar mi desmadre cibernético).

POSTED BY JUAN CARLOS BUJANDA BENITEZ AT 12/04/2006 07:12:00 PM

Вам также может понравиться