Por qué la paciencia y la misericordia tienen límites.

En cierta ocasión Moisés tuvo una visión de la gloria de Jehová en el monte Sinaí y
note lo que Exodo 34:6,7 describe.
Diríamos que Jehová es Paciente; que es tardo para la colera y que es misericordioso.
Por otra parte aprendemos que no dará exención de castigo por el error, por lo que
podemos concluir que su paciencia y misericordia tienen límites. Pero podemos estar
seguros de que cumple un propósito bueno el hecho de que la paciencia y misericordia
de Dios tenga un límite.

Notemos como lo expresa el apóstol Pedro en 2Pedro 3:09. El objetivo de su paciencia

es dar la oportunidad a cada individuo para que llegue a conocer a Dios y se vuelva de
sus malas acciones. Además en Ezequiel 33:11 Jehová nos expresa “Tan ciertamente
como que estoy vivo, (…) no me deleito en la muerte del inicuo, sino en que alguien
inicuo se vuelva de su camino y realmente siga viviendo”.

Entonces, la paciencia de Dios solo puede darse mientras esté en armonía con la
rectitud, la justicia y la sabiduría. Esta se presenta cuando ocurren situaciones difíciles
y desagradables con el propósito de dar a los implicados la oportunidad de cambiar y
enderezar su camino. Hasta que los asuntos llegan a un punto donde no hay esperanza
de que se produzca cambio, entonces Dios interviene a fin de eliminar la mala situación;
su paciencia se acaba, por otra parte su paciencia va de la mano a la misericordia.

Podemos aprender mucho de la misericordia de Dios al ver la relación de Jehová con su

pueblo lo que se compara con lo que siente una mujer con su hijo recien nacido (Isa.
49:15), la nación de Israel necesitó ayuda misericordiosa muchas veces debido a que se
apartaba con frecuencia de la justicia y se metía en graves aprietos. Pero si mostraban
una actitud correcta de corazón y se volvían a Jehová, él les otorgaba su compasión
favor y benevolencia. (Deut. 13:17; 30:3; Isa. 54:7-10)

Debido a nuestra situación lastimosa dada por el pecado y la muerte heredada de Adan,
Jehová mismo nos ha dado el rescate mediante su hijo para, en apego a su justicia
derramar el perdón por nuestros pecados y la curación o alivio del sufrimiento (Luc
1:50-58; 72-78) Sin embargo tanto la paciencia como la misericordia de Jehová
cumplen con el propósito de guiarnos e instruirnos en los caminos de la justicia de Dios.

La misericordia es una cualidad característica de la personalidad de Dios; su manera

normal de reaccionar para con los necesitados, una faceta de su amor (2Cor 1:3; 1Jn.
4:8) Sal 145:8,9; Sal 25:8; 104:14; 15; 20-28; Mt. 5:45 – 48 Hch: 14:15-17;

Jesús reflejó las cualidades de su padre mediante su propia personalidad, habla y

acciones (mar 6:34; Mt: 9:36; Mt: 14:14; 15:32)

La humanidad está en extrema necesidad en una condición lastimosa. Jehová Dios ha

actuado misericordiosamente para con la humanidad en conjunto al proveer los medios
para que estén libres de esta gran incapacidad y sus consecuencias: enfermedad y
muerte. (1Tim. 2:3-6; Tito 3:4-7; 1Jn. 2:2) (2Ped 3:9) (ISA 30:18,19), Eze 33:11
lament. 3:31-33
Es la dureza de corazon de las personas, su obstinación, y negativa a responder a la
benevolencia y misericordia de Dios lo que lo obliga a cerrar sus misericordias para con
los rebeldes. Sl. 77:9; Jer 13:10,14; Isa 13:9; Rom. 2: 4-11)

Aunque Jehová tiene gran misericordia para los que se acercan a el con sinceridad, no se
puede abusar de la misericordia de Dios; no se puede pecar con completa impunidad o
librarse de los resultados o las consecuencias de un mal proceder (Gal. 6:7,8; Num. 12:
1-3) 2 Samuel 12: 9-14)

Jehová misericordiosamente puede ser sufrido y mostrar gran paciencia, dando la

oportunidad a las personas de corregir su mal proceder; aunque manifieste
desaprobación puede ser que no los abandone por completo sino que de manera
misericordiosa les continúe suministrando una medida de ayuda y dirección; pero si no
responden, su paciencia tiene sus límites y El retira su misericordia y actúa contra ellos
por causa de su propio nombre. (Isa.):17; 63: 7-10; Jer. 16: 5-13,21; lucas 13:6-7) El
puede ser cambiado en enemigo y guerrear contra nosotros si mostramos rebeldía y
desobedecemos sus normas.