Вы находитесь на странице: 1из 4

“Cualquier semejanza con hechos o personajes de

la realidad es mera coincidencia...”

ORGANIZACIÓN Y GESTIÓN INSTITUCIONAL


PROFESORA: NIDIA
2 º HISTORIA
CLARA
CASO

En un instituto de formación docente se acercan las fechas de los exámenes


finales, como cada año, éstas son propuestas por los directivos y el secretariado se
encarga de acordarlas y confirmarlas con los profesores y, luego, comunicársela a los
alumnos por medio de los transparentes.
A dos semanas del primer llamado, aún sin haber comunicado las fechas a los
alumnos, el secretariado les advierte que cuentan con sólo una semana para
presentar las planillas de inscripción, las cuales les dan derecho a rendir.
Teniendo en cuenta de que los tiempos se acortan, los estudiantes deciden
averiguar el por qué de la demora en los transparentes, a lo que el secretariado
expresa que los directivos todavía no han terminado de organizar las fechas y que
ellos no pueden responder a su demanda. Ante esta situación, el estudiantado, opta
por hablar con un directivo, quien les recuerda que, como ellos bien saben, cualquier
tipo de pedido o queja dirigida hacia las autoridades de la institución debe ser
elevada, por escrito, al Consejo Académico; y que ésta será evaluada y resuelta en
las sesiones del mismo.
Luego de haber cumplido con dicho proceso, los estudiantes, se dan por
enterados de que su reclamo ha sido puesto en uno de los últimos lugares del
temario a tratar. Lo que significa que, en caso de ser pospuesto para la próxima
reunión, no habrá una solución inmediata; ya que, es la última reunión del año y la
próxima esta convocada para Abril del año entrante.
Al alumnado sólo le consuela saber que algunos profesores están en su misma
situación, considerando que también están siendo exigidos para entregar las planillas
de regularización a tiempo.
ANÁLISIS DE CASO

• INSTITUTO DE FORMACIÓN DOCENTE.


En primer lugar debemos decir que cuando hablamos de institución, nos
referimos a un establecimiento que cuenta con una organización de funcionamiento
especializado y un espacio propio con tareas fijas y sistematizadas.

Se identifican las siguientes características:

“...se acercan las fechas de los exámenes finales, como cada año, éstas son
propuestas por los directivos y el secretariado se encarga de acordarlas y
confirmarlas con los profesores y, luego, comunicársela a los alumnos por medio de
los transparentes”.

Se denota en esta parte un carácter marcado de jerarquización del poder,


verticalizada y descendiente. Por lo que se deja ver claramente que es una
institución de tipo cerrada, es decir, que tiene un funcionamiento burocratizado que
requiere de canales formales de comunicación. Esto también se puede ver en la
exigencia de un reclamo elevado por escrito; y de la entrega de las planillas de
inscripción y regularización dentro de las fechas impuestas. Además se ve una fuerte
ritualización de la cultura burocrática de la institución, donde las acciones se repiten
mecánicamente de acuerdo a las normas ya establecidas: “...(las fechas) como cada
año, éstas son propuestas por los directivos...”; “...quien les recuerda que, como ellos
bien saben, cualquier tipo de pedido o queja dirigida hacia las autoridades de la
institución debe ser elevada, por escrito, al Consejo Académico...”.

“...aún sin haber comunicado las fechas a los alumnos, el secretariado les
advierte que cuentan con sólo una semana para presentar las planillas de inscripción,
las cuales les dan derecho a rendir”.
Por ser una institución de tipo cerrada, como dije antes y agregando que, como
se deja ver en el caso, es poco sensible a las demandas o expectativas del medio, su
accionar da cuenta de que la dimensión administrativa es sobrevaluada y supera
la de los contenidos. Por lo que, el alumnado se encuentra con la obligación de
entregar los papeles correspondientes en un determinado tiempo, ignorando con
cuanto de él cuenta para sus estudios.
“...los estudiantes deciden averiguar el por qué de la demora en los
transparentes, a lo que el secretariado expresa que los directivos todavía no han
terminado de organizar las fechas y que ellos no pueden responder a su demanda.
Ante esta situación, el estudiantado, opta por hablar con un directivo, quien les
recuerda que, como ellos bien saben, cualquier tipo de pedido o queja dirigida hacia
las autoridades de la institución debe ser elevada, por escrito, al Consejo Académico;
y que ésta será evaluada y resuelta en las sesiones del mismo”.

Lo subrayado deja ver la resistencia a la delegación de poderes por parte de


las autoridades, quienes se consideran autosuficientes. Por esta razón, a la hora de
cumplir con todas las exigencias institucionales, se ven desbordados y terminan por
no hacerlo.
Desde ya podemos identificar a los directivos y a el Consejo académico como
las fuerzas instituyentes y a los alumnos como las fuerzas instituidas.

Clara
06 de noviembre de 2007

Вам также может понравиться