Вы находитесь на странице: 1из 26

COMUNICACIÓN

CON DIOS
Finalidad
▪ Cultivar el hábito de la alabanza y la
oración.

▪ Establecer un vínculo con Dios por medio


de la oración.

▪ Dedicar tiempo a la alabanza.


a. La oración,
nuestro
vínculo con el
Señor
Una buena relación:
1._ Cultivar una buena relación con otro ser
humano requiere tiempo y esfuerzo.
2._ Debemos hablar con Jesús como si nos
dirigiéramos a la persona que mas queremos.
3._ Una buena relación asi mismo, requiere
mucho aprecio y gratitud, y no dar por sentado
los sentimientos del otro.
Debemos agradecer al Señor todo lo que nos
concede y hace por nosotros.
MARIA Y MARTA
Lucas 10:38-42. (38)
Aconteció que yendo de
camino, entró en una aldea;
y una mujer llamada Marta
le recibió en su casa. (39)
Ésta tenía una hermana que
se llamaba María, la cual,
sentándose a los pies de
Jesús, oía Su palabra…
(40) Pero Marta se preocupaba
con muchos quehaceres, y
acercándose, dijo: «Señor, ¿no te
da cuidado que mi hermana me
deje servir sola? Dile, pues, que
me ayude». (41) Respondiendo
Jesús, le dijo: «Marta, Marta,
afanada y turbada estás con
muchas cosas. (42) Pero sólo una
cosa es necesaria; y María ha
escogido la buena parte, la cual
no le será quitada».
¿Con quién te identificas mas?

¿Con Marta o con María ?


De haber sido Marta,
¿Cómo habrías reaccionado ante
las palabras de Jesús?
¿Qué hacer si te parece
que has fallado?
1 Juan 3:20. Si nuestro corazón
nos reprende, mayor que nuestro
corazón es Dios, y Él sabe todas
las cosas.

Romanos 8:1. Ninguna


condenación hay para los que
están en Cristo Jesús, los que no
andan conforme a la carne, sino
* NO IMPORTA COMO NOS SINTAMOS EL
SEÑOR SIEMPRE ESTA PRESENTE

2 Cor 5: 7 Por fe andamos, no por vista.

El Señor nos ama machísimo a cada uno y


promete estar con nosotros. Ya sea que nos
sintamos cerca de El o no, su Palabra nos
asegura que Dios esta cerca de nosotros.
Su amor por nosotros es firme e inmutable.
Una relación más íntima con
Dios
¿Cómo estrechamos nuestra relación
con Jesús? Obedeciendo Su Palabra,
sometiéndonos a Su voluntad y
pasando tiempo con Él. En palabras de
Jesús:

Juan 14:23. El que me ama, Mi palabra


guardará; y Mi Padre le amará, y
vendremos a él, y haremos morada
con él.
B. El buen
hábito de la
oración
▪ La oración es el vínculo entre las
necesidades humanas y los recursos
divinos.
▪ El físico Isaac Newton, del siglo
XVII, considerado por muchos el
padre de la ciencia moderna y
descubridor de la ley de la
gravitación, afirmó cierta vez:
«Todos mis descubrimientos se
plasmaron en respuesta a la
oración».
Para hacer de la oración un
hábito
La clave para ser constantes en la
oración es crearnos el hábito. En
realidad no es que tenga nada de
místico ni de misterioso. Solo hay
que seguir haciéndolo y perseverar
en ello, reconociendo al Señor en
todos nuestros caminos.

Proverbios 3:6. Reconócelo en


todos tus caminos, y Él enderezará
tus veredas.
Para el Señor todo es
importante
Si nos acostumbramos a orar por las
situaciones secundarias que se nos
presentan a diario, casi sin darnos
cuenta nos habituamos a orar por
todo, ya sea grande o pequeño. Y si
al orar por los detallitos, vemos cómo
el Señor nos responde con los
milagros que generalmente hace por
nosotros, cuando surjan necesidades
mayores, nuestra fe se verá
incrementada para hacerles frente.
Hay que esperar a que el Señor
obre
«Los retrasos de Dios no son rechazos».

Las respuestas de Jesús a la oración son


perfectas; de eso no hay duda. En muchas
casos nos demuestran que cuando le pedimos
al Señor una piedra que parece pan, Él nos da
un pan que, a causa de nuestra miopía parece
una piedra
(Mateo 7:7-11)-(Santiago 1:3-4)
La importancia de rogar por los
demás
Orar por los demás es parte primordial de
nuestra práctica de oración. A veces
resulta útil tener a mano una lista de
personas que tengan particular necesidad
de que recen por ellas. Cuando sabemos de
alguien que lidia con trastornos de salud,
conflictos laborales, económicos o
personales —en resumidas cuentas, con
cualquier dificultad—, sin lugar a dudas lo
mejor que podemos hacer por ellas es
rezar.

Orar juntos
Diversas formas de orar
Las plegarias no se pueden juzgar
según su duración. Habrá casos en
los que estamos orando por una
situación de mucho apremio, de la
cual querremos encomendar al
Señor todos los detalles. En otras
ocasiones puede que nuestras
oraciones sean muy breves.
Lo más importante es que nos
concentremos en el Señor, así
nuestra plegaria sea larga o corta.
Plegarias escritas
Aunque en la mayoría de los casos
conviene orar según lo que nos
señale el Señor y hacerlo «de la
abundancia de nuestro corazón»,
hay otros momentos en que puede
resultar significativo rezar una
plegaria premeditada y expresada
con elocuencia, aunque la haya
elaborado otra persona.

A mi Rey
C. LA
ALABANZA
Hay dos momentos para alabar al
Señor:
► Cuando tenemos ganas de hacerlo

► ¡ Y cuando no!

Dale a Dios toda la gloria. No


dejes de recordarte a ti mismo
que no eres nada sin Él. En todo
momento, atribúyele el mérito a
Dios por cada pequeña cosa.
La única excusa para no alabar a
Dios es estar sin aliento:

«Todo lo que respira alabe al Señor»


(Salmo 150:6).

La alabanza es la voz de la fe.


Si nos detenemos a pensar, tenemos
motivo para agradecer.

Véase: 2 Crónicas 20:


Tarea -La batalla que

se ganó a fuerza de alabanza.


No olvides dar las gracias a
Jesús
Con frecuencia sucede que
pedimos incesantemente que
el Señor llene nuestras
necesidades, pero luego
andamos tan ocupados
recogiendo Sus bendiciones
que no nos tomamos la
molestia de agradecérselas.
Algunas ideas para los ratos de
alabanza:
► Canten un tema de alabanza al
Señor.
► Cierren los ojos y agradézcanle
bendiciones concretas que les
haya concedido.
► Lean un poema de gratitud.
► Lean una alabanza escrita.
Memorizar:
* Proverbios 3 : 5,6
* Jeremías 29 : 13

Leer: 2 Crónicas 20: -La batalla que


se ganó a fuerza de alabanza.

Вам также может понравиться