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La osteoporosis es una enfermedad por la que los huesos se vuelven más porosos, más
delgados, más frágiles.
Si bien es una enfermedad asociada a la vejez, en realidad las bases del mal se
asientan desde la infancia y es consecuencia de una alimentación deficiente en cuanto
al suministro de calcio.
Las mujeres son más propensas a la adquisición de este mal que los hombres, sin
embargo ello no implica que los hombres estén libres de sufrirla. Alrededor de 40% de
las mujeres posmenopáusicas sufrirán alguna fractura de hueso debido a la
osteoporosis, y entre un 6% y un 8% de los hombres sufrirá una fractura debida a la
osteoporosis durante sus vidas.
Las razones que explican esta diferencia son simples: las mujeres tienen menores
niveles de masa ósea llegada a la adultez. Con la menopausia y al no producir
estrógenos, disminuye la captación de calcio. Además, las mujeres tienen mayor
promedio de vida que los hombres, y al vivir más tienen más probabilidades de adquirir
la enfermedad.
También se debe evitar el excesivo consumo de té, mate, infusiones, proteínas de origen
animal y sodio, ya que aumentan la eliminación de calcio por la orina, y consumir con
moderación alimentos ricos en fibra, ya que interfieren en la absorción intestinal de
calcio.
SERVICIOS DE NUTRICION
Osteodatos:
La masa ósea alcanza su máximo nivel entre los 30 y 35 años. Luego se desgasta a
un ritmo de 1% por año.
Falsas verdades:
Factores de riesgo:
Edad: con la edad, los huesos se tornan menos densos, más débiles y pueden
fracturarse.
Sexo: las mujeres tienen menor cantidad de tejido óseo y pierden hueso más
rápidamente que los hombres.
Con el verano encima, y con la premura de estar en forma para una nueva
temporada de sol, playa y traje de baño, vuelven a ponerse de moda las tan
famosas dietas de verano y con ellas, lamentablemente, empiezan los
desequilibrios y desarreglos en nuestra alimentación. Aquí le ofrecemos una
ayuda para evaluar esa dieta que le han aconsejado es la más adecuada y,
sobre todo, si pone o no en riesgo su salud.
¿Por qué?
Una dieta balanceada debe incluir alimentos de los cinco grupos: energéticos
(cereales/tubérculos), proteicos (carnes / menestras / huevo), lácteos,
vegetales y frutas. Prescindir por completo de un grupo específico no es
bueno, ya que esto elimina el aporte de nutrientes esenciales que deben
consumirse a diario.
Además, por lo general, aporta tan pocas calorías que ni siquiera cubre el
requerimiento mínimo de mantenimiento corporal, es decir, la energía mínima
para las funciones vitales, por lo que debilita tremendamente al organismo.
Por otro lado, el consumo de cereales con cáscara (pan integral, quinua, trigo,
kiwicha, avena), menestras y vegetales que tienen un bajo índice glucémico,
es decir que liberan lentamente la glucosa y evitan así alzas bruscas en el
nivel sanguíneo de glucemia.
Beba entre 1 y 2 copas de vino tinto al día, de preferencia con las comidas.
El primer paso para controlar los excesos es ser realista. Es mejor que las
personas que siguen una dieta de adelgazamiento la olviden durante las
fiestas. Intentar mantenerla a toda costa en un mes de tentaciones
gastronómicas sólo conduce a la frustración.
Una vez con los pies sobre la tierra y con los cubiertos en la mano, comamos
despacio, masticando bien los alimentos y dando tiempo (unos 15 o 20
minutos) para que los nutrientes pasen a la sangre y nuestro cerebro nos
transmita la sensación de saciedad.
Con todo ello, las fiestas de fin de año serán más tranquilas, sanas y
equilibradas.
FRACCION 1 taza de infusión sin 1 taza de infusión sin 1 taza de infusión sin
azúcar azúcar azúcar
2 galletas de soda 2 galletas de soda 2 galletas de soda