Capítulo 1: La Nacencia

El momento del parto

Comportamiento después del parto

En una dehesa extremeña se anuncia el crepúsculo cuando una vaca brava

Encinosa de nombre- se separa sigilosamente de la manada en busca de un lugar
resguardado de las alimañas y del hombre, donde el sol pueda calentar a la mañana
siguiente a su becerrillo recién nacido.
Ya durante el día el mayoral la ha notado inquieta, ha observado que ha comido
poco y las ubres se le han manifestado más descolgadas de lo habitual, todos ellos
síntomas de que hace aproximadamente nueve meses –diez lunas exactamente— fue
cubierta por un semental bravo, elegido a conciencia por el ganadero que, después de
muchas horas de mirar y remirar en los libros de la ganadería, después de muchas
cavilaciones junto a su mayoral, decidió echarle ―ése semental a ésa vaca‖, porque ―la
nacencia‖empieza con la cubrición…

Primero dividimos las vacas en lotes, nos decía un ganadero, entre treinta y
cincuenta vacas por toro, para asegurarnos la descendencia del semental, porque la
madre se sabe, pero el padre se sabe también gracias a los lotes que se hacen.
Esta es una parte fundamental, de gran trascendencia para el futuro de la
ganadería, así que los lotes no se pueden hacer a “ojímetro”, ni por las que están
paridas, ni por las que están muy flacas, ni por las que sean “horras”, como se podría
hacer con un caniche…, hay que hacerlos teniendo en cuenta sus características, pero
no solo sus características anatómicas, sino incluso el carácter de las vacas, por
ejemplo, a la vaca que fuera más áspera echarle un toro más suave; y a la vaca más
suave ponerle un toro más áspero: eso es buscar un equilibrio de sangres, que conjugue
la bravura con la nobleza.
--¡Qué difícil!
--¡Qué difícil, claro!...Al cabo de cuatro años o, como muy pronto al cabo de
dos, empiezas a ver tus aciertos o tus desaciertos; por eso esto de criar toros bravos es
cosa de muchísimos años y de no desesperarse, porque acertar en los caracteres del
toro es dificilísimo, así que cuando una vaca en un tentadero sale como tú crees que
debe salir es una satisfacción muy grande, porque aunque se ha avanzado mucho en
esto de la selección, sigue teniendo sus limitaciones; Dios lo quiere así y está bien,
porque si los toros salieran todos iguales entonces le quitarías el misterio y la
incertidumbre, que al fin y al cabo es lo que gusta. Así que ése es el principio…

------------------------------------------------------------------

Estamos en una dehesa cercana a Olivenza, acompañados por los mugidos de los
toros bravos rompiendo el silencio de la mañana…; a menos de cien metros de la roca
en la que nos hemos sentado, una manada de toros pasta tranquilamente entre las
encinas; por nuestra derecha, camina hacia nosotros un toro colorado, cuyos mugidos
suenan cada vez más cerca…En medio de este entorno maravilloso, comenzamos
nuestra charla con el mayoral de la ganadería de los Hermanos Peralta, en compañía de
mis hermanos Enrique y Andrés, que se disponen a disfrutar lo suyo…

--Pero ustedes que están todos los días con las vacas, ¿notan cuando va a llegar
el momento del parto?

--Si señor, si; lo sabemos porque los toros se ponen, por ejem., en el mes de
noviembre, y a partir de los nueve meses, pues ya sabemos que las vacas primeras que
se han cubierto, pues son las primeras que paren; nos podemos equivocar en cuatro,
cinco, o diez días arriba o abajo, más no. Aparte, las vacas, cuando están pariendo, a
los cuatro o cinco días antes ya se les conoce, porque ya está descolgada, ya la ubre se
ve bastante bien; y también llevamos nosotros una “apuntación” del día que se cubrió
la vaca por el toro tal o cual, por eso no nos equivocamos más de cuatro o cinco días,
que se adelante la vaca, o que se retrase.

--Y cuando nace el becerrillo, ¿qué es lo primero que hace la vaca?

--Pues la vaca lo primero que hace es “guardarse” y lamerlo, lamerle un manto

que llevan muy fino, que es como si fuera una sábana, solo que es en carne, incluso se
lo comen. Y luego, cuando ya lo seca con la lengua, pues el becerrillo trata de ponerse
en pie, y enseguida busca las tetas, para mamarlas, y a partir de ahí, si queda
satisfecho, a lo mejor se echa, aunque siempre procuran ellas esconderlo, para
protegerlo; es una precaución que siempre tiene la madre con su cría, y solo después
va ella a beber y a comer, pero sin retirarse mucho del escondrijo, no sea que al
becerro se le acerque un perro, o una alimaña; y como berree, ya está la madre
encima, alerta a ver que le pasa, y ataca todo lo que se acerque al ternero, ya sea una
persona o sea un animal que al becerro le de miedo.

-------------------------------------------------------------------------

Otro ganadero nos contaba: …bueno, en las ganaderías de Andalucía siempre se

echan los sementales pensando en que el nacimiento no se produzca en la época del
calor; igual que en Salamanca se huye del frío, en Andalucía huimos del calor, con lo
cual el nacimiento de los becerritos empieza a finales de septiembre, y se prolonga
hasta el mes de abril; se echan los sementales desde diciembre hasta junio. Entonces,
bueno, la vaca se separa de la manada, se separa del resto de la piara, y suele tener sus
síntomas, que se empiezan a notar el día antes de parir, lo que hace de la manera mas
normal del mundo; el becerrito en cuanto nace, en casa se le señala; cuando lo
descubre el mayoral, o yo, ganadero, o el ayuda, se le cortan las orejitas, haciéndole la
señal de la ganadería.
Bueno, se hace al nacer por varias razones: primero para saber que se ha
reseñado, que se ha apuntado el becerro, si es macho o hembra, de que vaca, etc.;
segundo porque como la señal de las orejas siempre se ha hecho en las ganaderías al
nacimiento, la madre lo lame, y al día siguiente ya ha cicatrizado el corte, con lo cual
queda una señal estupenda; entonces al becerrito, en ése día, ya se le comprueba la
sangre que lleva dentro, porque generalmente te embiste, o sea, casi sin tenerse en pie,
vienen a por ti y te embisten.

--Y el comportamiento de la madre, después del parto, ¿cómo es?

--Bueno, casi todo lo que yo puedo hablar sobre la madre y el becerrito es en el

momento de señalar, es una faena tradicional, que no la hacen muchas ganaderías; yo
todo lo que hable de la mía, son las mismas faenas que hace ochenta años hacía mi
padre. Entonces la madre, cuando pare, pues como todo animal, se muestra agresiva,
las hay más tranquilas, más nobles, otras menos. En el momento de señalar es muy
bonita la faena porque, claro, entre las dos personas o tres que van a caballo,
generalmente dos, el mayoral y yo, pues uno tiene que echar pie a tierra para
señalarlo, y el otro debe de distraer a la madre; pero muchas veces la metes en la
piara, e inmediatamente que ve que tocas al becerrito, te embiste, por lo que hay que
estar al quite para evitarlo.

----------------------------------------------------------------------

En otra dehesa extremeña ya cae la noche cuando una vaca brava – ―Guitarra‖ de
nombre-- ha encontrado unas retamas junto a un roquedo que le pueden servir de
escondrijo a su cría, que presiente próxima a nacer…

---------------------------------------------------------------------

…La vaca cuando va a parir si que se le nota, porque está inquieta, incluso
berrea, no come con tranquilidad…, y todo son síntomas de que se acerca el momento
del parto; entonces lo que hace es esconderse y esconder la cría, hasta el punto de que
a veces resulta difícil encontrarla. Y luego es un animal que parece mentira los
cuidados que le prodiga al becerro, son extraordinarios: en cuanto el becerro cae al
suelo, la vaca inmediatamente se pone de pie, rompiendo el cordón umbilical, y a
continuación se pone a lamerlo, y lo lame, lo lame, lo lame, para darle calor,
frotándole con su lengua para masajearlo, y enseguida lo ayuda para que se ponga de
pie; luego, poco a poco, ella se va colocando, sobre todo si es una vaca vieja, para que
el becerro caiga en la ubre y empiece a mamar. Pero todo eso lo hace a escondidas, sin
que nadie los vea…

--¡Qué bonito!

Lo que es el instinto y la naturaleza. Hace lo mismo que haría una persona…,

pero lo que empieza es la vida de un futuro toro bravo.

-------------------------------------------------------------------------
 …Bueno, la vaca brava cuando se acercan las fechas próximas al parto, sobre
todo el día que va a parir, se aparta un poco de sus compañeras buscando algo de
refugio, porque queramos o no, es el animal bovino que quizás se críe más salvaje;
entonces claro, todas las características que han tenido siempre de libertad se
desarrollan mucho más que en las vacas de carne o las de leche.
Nada más nacer el becerro es una vaca que lo protege muchísimo y es muy
buena nodriza, porque a los pocos minutos ya le ofrece su leche.

----------------------------------------------------------------

…Pues mira, te voy a explicar: la vaca en el campo es un animal que, como tú

sabes, de momento pare en plena libertad y, sin olvidar que estamos hablando de vacas
bravas, son las más cariñosas que hay en el mundo con sus crías. De hecho
normalmente se aparta de la manada, intenta ocultarse y el parto lo hace, si hay monte
bajo, lo más oculto posible. Te advierto que ha habido vacas que han tardado meses en
vérsele la cría, cuando en invierno hay mucha comida la vaca está gorda y tiene mucha
leche, lo busca, le da de mamar y el ternero, hartísimo de leche, se vuelve a acostar y
no sale detrás de la madre, no la sigue, con lo que se mantiene oculto donde ella lo
deja.
También te voy a decir una cosa: la vaca en sí tiene un sentido de la maternidad
tan potente, que cuando nace la cría lo primero que hace es lavarla, igual que nuestras
madres nos lavaban a nosotros con sus manos, la vaca lava a su becerro con la lengua;
lo lame y lo lame empezando por la cabeza y mientras lo está lamiendo comienza a
mugirle bajito, le hace mugiditos pequeños, como para transmitirle a su hijo la voz que
tiene su madre, para que la reconozca entre cientos y cientos de vacas. Ese becerro
nunca se olvidará de cual es el mugido de su madre.

------------------------------------------------------------------------

…Hombre, el nacimiento…, las vacas son animales muy querenciosos para los
becerros; entonces tiene mucho instinto y para el nacimiento la dejamos lo más
tranquila posible.
Aquí en la vida, en los cincuenta y tantos años que llevamos, no se ha atendido a
una vaca para el parto nunca. Entonces tenemos los lotes de vacas; las pariciones
empiezan normalmente sobre finales de septiembre y terminan sobre el mes de abril. El
parto normalmente lo hacen de noche, algunas de día, pero son animales que buscan
mucho la tranquilidad; la vaca incluso, si no está tranquila, es capaz de retener el
parto, aguantarlo unas cuantas horas, hasta encontrar un sitio tranquilo y
normalmente, como digo, la noche.
Nosotros no estamos nunca pendientes de los partos porque sabemos que
quieren la tranquilidad; entonces normalmente se nota porque ya la vaca empieza a
salirse un poco de las otras, a buscar un sitio tranquilo; también tenemos anotada la
fecha de cubrición y sabemos que la fecha de parto es a los nueve meses y siete, ocho,
nueve días, ¡diez lunas!. Entonces, más o menos a las diez lunas se pone la vaca de
parto, suelen mamar los calostros, y las vacas suelen comerse las pares; y se las comen
primero para coger más energía y después para quitar rastros a las alimañas y
depredadores. Limpian al becerro, lo lamen, y al lamerlo lo que hacen es marcar un
sello madre-hijo, hijo-madre, y ya ese sello queda para los restos; ya se conocen por el
olor uno al otro, se conocen…, vamos, se juntan con los demás y saben cada uno
perfectamente cual es su madre y cual es su hijo.

------------------------------------------------------------------------

―Encinosa‖ está inquieta a pesar de haber encontrado un refugio tranquilo al

amparo de la oscuridad de la noche.
Su instinto le dice que ha llegado el momento del parto y apuntalada sobre sus
cuatro patas, ligeramente agachadas las de atrás, levantada la penca del rabo, comienza
a dilatar su vagina, sin grandes esfuerzos, con naturalidad, hasta que, poco a poco,
empieza a asomar primero el morrito, la cabeza después, las patas delanteras quedan
colgando, casi alcanzan el suelo, cuando en unos segundos eternos todo el cuerpo de la
cría es recibido por la tierra que se pega a su húmedo cuerpecillo… El milagro de la
venida al mundo de un toro bravo acaba de producirse…

-------------------------------------------------------------------

…Pues es muy misterioso, porque las vacas bravas son animales que viven muy
libres, muy salvajes, y cuando les llega el momento del parto se apartan del resto del
rebaño y procuran parir en sitios escondidos, protegidos, si hay maleza pues entre la
maleza, de tal manera que ellas paren solas en el campo, así que es muy misterioso por
eso, porque ellas se apartan e intentan parir en un lugar donde nadie las vea, ni a ellas
ni a las crías.

--Por tanto pocas veces se tiene la ocasión de observarlo…

--Muy pocas veces. Normalmente se las ve cuando ya han parido y sacan a la

cría o cuando tú ya observas que han parido porque se les nota; entonces tú buscas a la
cría que la tienen escondida siempre.

--Y se les nota porqué, ¿cuál es su comportamiento después del parto?, ¿cambian
en algo?

--Si, se vuelven más agresivas, están en continuo estado de protección a la cría,

hasta el punto de que te llegan a equivocar: tú quieres que te enseñen la cría y ellas se
van para otro lado para despistarte. Son más agresivas, o sea, que si tú te acercas a su
cría se arrancan como locas a por ti.
También se tornan más solitarias, van un poco aparte hasta que la cría tiene
varios días, entonces regresan con ella a la manada.
¿Su comportamiento cual es?, pues el de apartarse, mantenerse más o menos
solitaria. ¿Y en qué se les nota que han parido?, pues porque la barriga les desciende,
la ubre se les tersa, los pelos de la ubre se nota que están mamados porque se pegan y,
finalmente, porque recién paridas, como dice la gente del campo, están “embarradas”,
es decir, que después del parto, con el líquido amniótico y todos los anejos fetales, la
parte posterior de la vaca se mancha un poco, y se nota el rabo y el tercio posterior
manchados.
De todas formas donde más se nota es en la ubre, porque cuando el becerro
mama los pelos de la ubre se pegan, se tornan pegajosos de la propia lactación, de
forma que se aprecia muy bien si la vaca está mamada o no.

----------------------------------------------------------

…Pues el nacimiento es una cosa de la naturaleza, muy normal; nosotros no

inseminamos ni nada, sino que todo se produce de forma natural.
Y nacen, ahora están naciendo, en estas fechas (por diciembre). Nosotros
echamos los toros a las vacas a primeros de marzo y los tenemos tres meses solamente;
aunque hay ganaderías que los mantienen seis o incluso todo el año. En nuestro caso,
la máxima diferencia que existe entre los toros de una camada es de tres meses, así que
nacen entre diciembre, enero y febrero; ahora creo que ya llevamos ochenta y tantos
nacidos de esta camada.

--¿Se les nota a las vacas cuando van a parir?

--Si, se les nota varios días antes; ya se les nota que la “natura” empieza a
ponérsele más grande…

--¿Qué es la natura, las tetas…?

--No, no, el culo. Se llama natura porque, por ejemplo, cuando nosotros
hacemos la reseña de las vacas decimos: “tiene un lunar en la natura”, y es que tiene
un lunar blanco en el culo; esa es la palabra que nosotros utilizamos en la reseña.
Normalmente las vacas paren por lunas; ahora mismo está la luna llena, o casi
llena, pues a partir de ahora empiezan las pariciones de otro grupo de vacas, quince,
veinte, las que sean.

--¿Y ustedes las ven?

--No, no, es muy difícil ver a una vaca brava parir, particularmente a las
nuestras; normalmente paren de noche y buscan sitios, por ejemplo, ahora que hace
frío, buscan el resguardo de una barranca, de un arroyo, de un arbusto, algo para que
la cría nazca y se pueda esconder, porque cuando nacen pasan varios días
escondiéndola, o sea, que para ver el becerro tienes que ir buscando donde estaba la
vaca el día antes de que iba a parir, más o menos, y por ahí te vas orientando para
encontrar un matojo o algo que pueda esconder al becerro, porque ella lo deja allí
hasta que el becerro tiene fuerzas para correr.

--------------------------------------------------------------
 …Ahora es ―Guitarra‖ la que se encuentra en el trance del parto… Su cría es un
rebujo de carne viva que apenas se remueve en el suelo cuando su madre se come las
pares, para borrar todo rastro a las alimañas, y comienza a lamer y lamer la cabecita, el
torso, la panza, todo el cuerpo de su cría es limpiado con esmero por la lengua cálida de
su madre, que lo masajea sin parar para aportarle el calor que necesita el recién nacido,
al tiempo que le muge entrecortadamente, como con cariño, como diciéndole ―ésta es la
voz de tu madre, no la olvides nunca‖; y así será, porque la reconocerá siempre entre
todas las madres y todos los becerros que compondrán su camada.
Sin dejar de lamerlo lo va empujando, empujando, hasta conseguir que, a duras
penas, tambaleándose, se ponga de pie y entonces, con habilidad materna, le ofrece sus
ubres que la cría agarra guiada por su instinto y comienza a mamar los calostros que le
proporcionaran el alimento necesario para sobrevivir.
Cuando la cría se harta su madre la ―encama‖, la esconde en el suelo hecha un
rebujo entre la maleza, al resguardo de cualquier posible peligro y de allí no se mueve,
el mejor camuflaje, hasta que la madre vuelva a darle de mamar…

--------------------------------------------------------------------