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Unos peligrosos desacatados que no obedecen los consejos del FMI y del
Banco Mundial y enfrentan a los Buitres de la especulacin financiera.
Chvez fue un insolente desacatado al que el Rey de Espaa mando callar la
boca. El mismo Chvez que junto a Nstor Kirchner y Lula da Silva en aquella
histrica cumbre de Mar del Plata en noviembre de 2005 se plantaron cara a cara ante
el mandams del imperio y mandaron el ALCA, al carajo.
Cmo enfrentar a esa gente que gana elecciones y desafa los intereses del
imperio promoviendo la inclusin , la justicia social, la soberana poltica, la
independencia econmica y la unidad de los pueblos de la Amrica Latina?
Ciertamente un peligro para el proyecto imperial. Es evidente que no hay una
amenaza militar. Los pueblos latinoamericanos no planean invadir o bombardear
Norteamrica como ellos han hecho en reiteradas oportunidades en todas las regiones
del mundo. Pero Obama tiene razn porque se resquebraja su dominio sobre esta
parte del continente y eso es peligroso para ellos. No solo Venezuela es una amenaza.
La unidad de Amrica Latina, que no se resigna a ser patio trasero de nadie, es la
verdadera amenaza para los intereses del imperio!
Es que en 1998 haba llegado Hugo Chvez al gobierno en Venezuela, el
primero de enero de 2003 lleg Lula en Brasil y en mayo de ese ao Nstor Kirchner
en Argentina. La mancha de aceite se iba extendiendo. Despus, la mancha sigui
extendindose con Evo Morales que lleg al gobierno de Bolivia en enero de 2006 y
Rafael Correa que hizo lo propio en Ecuador un ao despus. En 2008 fue el turno de
Fernando Lugo en el Paraguay. El caso de Michelle Bachelet en Chile y del Frente
Amplio en Uruguay con sus contradicciones, pero se pueden sumar a este verdadero
cambio de poca. No son todos; todava quedan algunos sumisos neoliberales que dan
la espalda a sus pueblos, pero la mancha se extiende
Por primera vez en la historia, seis, siete, ocho presidentes coincidieron en una
idea de integracin regional y en mirar ms a sus propios pueblos que a las metrpolis
imperialistas. De este modo, nuestros pueblos podan apoyarse entre s para intentar
cambios profundos en la Patria Grande.
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