Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
gens. Por ello los dioses penates son los protectores de la familia o gens.
El propio Daremberg en su conocido diccionario- nos recuerda que "patria
es sinnimo de penates". Los penates de Vesta -"residentes en la parte
ms interna de la casa"- son llamados patrii y son inseparables del hogar,
emigran con l. A su vez aseguran la perpetuidad de la raza. Recordemos
que el culto a los penates perdura hasta la "ruina del paganismo". Por otro
lado el culto privado de la gens (gran familia) se relaciona con la tierra
(ager), en la que la patria abstracta se encarna. Baste recordar la
ceremonia de la fundacin de Roma como terra patris. Numa Fustel de
Coulanges escriba en su recordada obra: "...tambin sta es la tierra de
mis padres, terra patrum, la patria: aqu est mi patria, puesto que aqu
estn los manes de mi familia...". Sin lugar a dudas "en la organizacin
religiosa de Roma la familia es la imagen reducida del estado" y sobre su
base se estructura la comunidad poltica (la polis, esa "dilatada familia"
segn la define Kitto13). As, calcado sobre el privado, naci el culto
pblico en la polis o en la res publica, cuyo exacto sentido de patria
rescata Cicern al sealar que "gran cosa es, pues, tener los mismos
monumentos de los ancestros, usar los mismos santuarios y tener
sepulcros comunes" Como describe el mismo Cicern en la Repblica sus
implicancias
eran
enormes,
pues
"...este
sistema
comprende
el
matrimonio legal, los hijos legtimos, el culto de los dioses penates y lares
en las residencias de las familias, de manera que todos puedan hacer uso
de los bienes comunes y de los suyos propios (patrimonio); no es posible
vivir bien nada ms que en una buena Repblica, ni nada hay ms feliz
que una Ciudad bien constituida"15 . Pero la patria tambin implicaba el
desarrollo ordenado de aret helnica (luego la virt de los renacentistas)
o el respeto de las mos maiorem romana, que no eran otra cosa que la
tradicin de los patres o antepasados que Reginald Barrow sintetiza de
manera magistral: "El respeto por los valores eternos, por la voluntad de
los dioses (pietas) y su expresin como justicia objetiva en las cosas
practicas de la vida humana; el respeto por la personalidad humana y la
relaciones humanas (humanitas), tanto en la familia como en el estado o