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Viajes hacia el patrimonio
Salta, una ciudad con tradición
La ciudad de Salta, ubicada en el norte argentino, nos ofrece un legado cultural Por *Arq. Carlos Sánchez Saravia
muy amplio. Contiene dentro de sí tradicionales fiestas pertenecientes a los pueblos
originarios, como también una importante muestra de fe, que se manifiestan en sus
iglesias y festividades. Además incluye una amplia propuesta turística que atrae con
comidas regionales y artesanías características de la zona.
Vista lateral del balcón del Cabildo. (izq). El frente de la Catedral de Salta iluminado, recibe a los peregrinos que se acercan a venerar las imágenes del Señor y la Virgen del Milagro, todo el
año, pero se intensifican durante el mes de Septiembre durante las fiestas de la Virgen y que junto a las tradicionales fiestas de la Pachamama (la madre tierra) se complementan marcando
la reunión entre las creencias indígenas y el culto católico (der).
En la plaza 9 de julio, plaza central de la ciudad, se encuentra el cabildo salteño, residencia de las autoridades coloniales. Hoy es Museo Histórico del Norte y del Museo Colonial
y de Bellas Artes. Es el edificio colonial más antiguo de la ciudad y el más completo que se conserva en la Argentina.
Cuando decidí viajar a la ciudad de Salta, en agosto del año
pasado, no pensaba que éste, mi primer viaje al norte de nuestro
país, me haría dar un importante paso para poder ser testigo de
parte del legado cultural que dio origen a la Argentina.
Salta es la capital de la provincia de Salta y una de las más
importantes ciudades del noroeste del país. Se encuentra
ubicada al este de la cordillera de los Andes, entre los cerros
20 de Febrero y San Bernardo, donde está el Valle de Lerma
y la ciudad de Salta, capital de la provincia y segunda ciu-
dad en importancia del noroeste argentino. Todo a casi 1.200
metros sobre el nivel del mar.
Provincia de Salta,
Argentina)
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La palabra “salta” tiene dos traducciones más comunes. Una
sostiene que significa“lugar lindo, agradable para asentarse”,
en quechua; otra sostiene que correspondería al nombre de
la tribu “sahta” -de la nación chaqueña “Lule”- que habría
habitado este valle cuando llegaron los españoles.
Las primeras exploraciones del territorio salteño pro-
vinieron del Perú hacia 1535, 43 años después que Cris-
tóbal Colón llegara a América. En 1550 comenzó la colo-
nización definitiva de una vasta zona que se denominó
“el Tucumán”.
El 16 de abril de 1582, Hernando de Lerma fundó, sobre
las márgenes del río Arenales, la “Ciudad de Lerma en el
Salta” con el propósito de ofrecer defensa y apoyo al co-
mercio y a las comunicaciones de Santiago del Estero con
el Perú. Afirmado en este valle, Lerma aprovechó las vías
de comunicación naturales ya usadas por los aborígenes
y fortaleció así los dispersos, débiles y escasos núcleos de
la población española. Se procuraba formar una red de cir-
culación de hombres, animales, mercancías y noticias que, con
eje en Potosí, permitiera la comunicación entre los puertos El
Callao (Perú) y el de la recién fundada Buenos Aires.
Recorrer la ciudad de Salta es una experiencia inolvidable,
con Estela nos alojamos en el nuevo hotel Suites Design,
cuya inauguración era el motivo inicial de nuestro viaje,
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Uno de los aglutinantes de la sociedad salteña, son sus creencias religiosas, iglesias como la del Convento de las Carmelitas de San Bernardo (izq.) se encuentra sobre la Calle
Balcarce camino al cerro San Bernardo la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria de la Viña (der.) ubicada en J.B. Alberdi y San Juan, son algunas de las numerosas iglesias
que destacan sus torres y cúpulas sobre el perfil de la ciudad de Salta.
ubicado sobre la plaza Belgrano a dos cuadras de la plaza 9
de Julio, plaza central de la ciudad.
En la plaza uno siente el pulso de la ciudad, fue el eje
sobre el que giró la vida cotidiana de Salta desde su fun-
dación, los edificios que la rodean: el Cabildo, la Catedral
junto al Palacio Arzobispal de estilo neocolonial, la Casa
de las Américas (sede del antiguo club 20 de febrero), el
edificio neogótico sede del Museo arqueológico de Alta
Montaña y demás construcciones, muchas de ellas del si-
glo XIX, que le dan marco a la actividad de la gente. Allí se
instalan cantidad de artesanos que ofrecen sus cerámicas,
trabajos en cuero, madera, asta, plata y principalmente sus
tejidos y telares que con sus colores dan vida a las arte-
sanías de Salta. Además uno también se puede sentar en
alguno de los innumerables locales que arman sus mesas
en la calle.
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namente por el arquitecto Mario Buschiazzo, el mismo que
restauró la “Casa de Tucumán” y el Cabildo de Buenos Aires”.
Luego del terremoto de 1844 que dejó en muy malas condi-
ciones el antiguo edificio, el Gobernador Martín Güemes (hijo
del prócer) promulgó la ley 34 de 1858 en la que se gravaba
con un impuesto la sal que se extrajera de las salinas salteñas.
Este impuesto sería destinado a los gastos producidos por
la construcción de la nueva Catedral de Salta. Las obras se
iniciaron en 1858, según planos del ingeniero y arqui-
tecto Felipe Bertrés. El templo fue bendecido veinte años
después, cuando aún no tenía el frontis y las torres cam-
panario, realizadas en 1879 por la firma Francisco Righetti
y Cía. de origen italiana.
El edificio, terminado en 1882, configura un conjunto singu-
lar junto al Palacio Arzobispal, de concepción neocolonial.
La iglesia, concebida dentro de la corriente italianizante,
tiene planta rectangular de tres naves, profundo presbite-
rio y un ábside semicircular que contiene al magnífico altar
mayor, diseñado por el R.P. Luis Giorgi. El crucero desborda
en altura con la presencia de la cúpula central, de alto tam-
bor y linterna terminal. Las naves laterales más bajas, per-
miten el ingreso de luz natural a través de vitreaux.
Su cúpula de alto tambor facetado y sus dos torres del cam-
panario, a los dos lados de su frente se recortan sobre el
perfil de la ciudad.
Recorriendo las calles de la ciudad uno puede recorrer la historia de su arquitectura a través de sus puertas. El frente de “la Casa Hernández” sede actual del Museo de la Ciudad (izq.) en
donde vemos una típica ventana “en esquina” y un balcón colonial en su parte superior, y una gran puerta tablero (der.), una de las entradas papales a la Catedral.
El Cabildo y la Catedral
El cabildo salteño data del siglo XVIII y actualmente es sede
del Museo Histórico del Norte, en la planta baja, y del Museo
Colonial y de Bellas Artes, en la planta alta.
Es el edificio colonial más antiguo de la ciudad de Salta y el
más completo que se conserva en la Argentina, una verdadera
joya arquitectónica de aquella época.
Se empezó a construir en 1780 por orden de Antonio de
Figueroa que era coronel de milicias. Por algún motivo en
1797, le colocaron“una torre con reloj público”que pertenecía
a la “Iglesia de la Compañía de Jesús”. Esa torre, que está en
una estructura independiente a los muros, no ésta perfecta-
mente centrada con el resto del edificio.
El cabildo salteño, si bien tuvo algunas demoliciones y modi-
ficaciones durante el siglo XIX, en 1945 fue intervenido ple-
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En el altar central de la Catedral las imágenes de La Virgen del Milagro y el Santo Cristo Crucificado presiden el altar central de la Catedral de la ciudad en los festejos del 13 de
septiembre. (foto izq) En la Sala principal del Museo de la Ciudad un óleo sobre tela de Güemes, del arquitecto Lorenzo Gigli (padre y abuelo, respectivamente, de los arquitectos
Lorenzo y Matias Gigli del estudio Aslan y Ezcurra). (foto der.)
Entre la Pachamama y la Virgen del Milagro
Uno de los aglutinantes de la sociedad salteña, son sus
creencias religiosas, iglesias como la del Convento de las
Carmelitas de San Bernardo, que se encuentra sobre la
Calle Balcarce camino al cerro San Bernardo, la Iglesia de
Nuestra Señora de la Candelaria de la Viña, ubicada en J.B.
Alberdi y San Juan, y la de San Francisco, en Caseros y Cór-
doba, son algunas de las numerosas iglesias que destacan
sus torres y cúpulas sobre el perfil de la ciudad de Salta.
Así como las iglesias nos muestran parte de sus creencias,
éstas conviven con el culto de la Pachamama (La Madre
Tierra), perteneciente a los pueblos andinos. Para todos
los habitantes del Noroeste Argentino es la Madre Tierra,
la deidad máxima. La Pachamama es un dios femenino,
que produce, que bendice, que engendra. Su morada está
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en las entrañas mismas de la tierra.
El 1º de agosto se celebra en todo el norte el Día de la
Pachamama. La ceremonia incluye la limpieza total de las
casas y de la ciudad. A primera hora, los habitantes de este
fantástico pueblo, juntan la basura en todas las esquinas,
la colocan en una pala con brazas y le agregan chacha y
pupusa (plantas de la zona), y con esto sahúman todas las
casas, las cosas y también a los integrantes de las familias.
La ciudad de Salta en esta época, amanece con olor a sahume-
rio en todas sus calles como inicio de los festejos que se repro-
ducen por todo el norte de nuestro país.
La Virgen del Milagro y el Santo Cristo Crucificado son
las imágenes tutelares de la ciudad de Salta. El terremoto
que dio pie al famoso milagro de la Virgen sucedió el 13 de
septiembre de 1692, exactamente cien años más tarde de
la llegada de la escultura a la ciudad. Luego de haber sido
transportada a América por un barco que naufragó en el
puerto del Callao, fue transportada hasta Salta a lomo de
mula por el Camino del Inca. Junto con ella había llegado
otra Virgen del Rosario, destinada al Convento de Santo
Domingo, en Córdoba.
Cada 15 de septiembre, tras nueve días de oraciones, cien-
tos de miles de devotos, autoridades y curiosos hacen su
mea culpa en una procesión que corona la gran fiesta sacra
de los salteños. La peregrinación de la Virgen del Milagro,
como se la conoce, es la segunda caminata eclesiástica más
importante de Argentina, después de la venerada Virgen
de Luján.
Durante diez días, las calles de Salta se perfuman con
claveles rojos y flores blancas para recordar el milagro de
1692, cuando un terremoto despertó la fe de los salteños.
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El Museo de la Ciudad ocupa la esquina de las calles La
Florida esq. Alvarado, en la llamada Casa Hernández (se
llama así por una casa ubicada en diagonal a ella, que
pertenecía a D. Juan Hernández y Enríquez).
Construida aproximadamente en el año 1780, está ubica-
da en una de las nueve manzanas centrales de la Traza
de Fundación e integra una cuadra de valiosos testimo-
nios de la arquitectura doméstica del siglo XVII. Era una
vivienda de dos plantas, localizada a la más pura usanza de las
construcciones de la ciudad de esa época.
Actualmente es una de las pocas que quedan en su tipo y
plantea el comercio en parte de su planta baja y la vivienda
en los altos, con su entrada principal enmarcada en cornisa
engrelada sobre calle Florida. En sus salones interiores dis-
tintos muebles y obras de arte muestran la forma de vida de
la ciudad desde sus comienzos.
Preside la Sala el óleo sobre tela “Güemes” que representa
al General Martín de Güemes dirigiendo una carga de ca-
ballería de “los infernales”, escuadrón de milicianos gau-
chos, cuyo autor fue el arquitecto Lorenzo Gigli (padre
y abuelo, respectivamente, de los arquitectos Lorenzo y
Matías Gigli del estudio Aslan y Ezcurra) que se encon-
traba hasta hace unos años en la Casa de Gobierno de la
Ciudad y que desde su mudanza ocupa el lugar de honor
del Museo.
Artesanías y comidas regionales
Un capítulo aparte son las artesanías y las comidas regio-
nales. Las primeras son uno de los puntos de interés de
Salta y de todas las provincias del norte argentino. Los
colores de sus paisajes se expresan en los colores de sus
cerámicas, sus tejidos de lana y sus telares, y sus diseños
recrean la cultura de los pobladores primitivos.
En cada calle, esquina y recova se refugian y ofrecen sus
trabajos cantidad de artesanos de la ciudad y de sus alre-
dedores. Una visita obligada es el Mercado Artesanal de
Salta que se ubica en un edificio del siglo XVIII ubicado
en las inmediaciones de la calle San Martín. Además, en
la calle Balcarce entre la avenida Entre Ríos y Alsina, se
organiza la feria de los viernes que queda abierta hasta
las 22:30 hs en donde se pueden encontrar todo tipo de
artesanías y comer ricas empanada salteñas, regadas con el
excelente vino Cafayateño, además de humitas, tamales, lo-
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En la tarde el contraste entre los blancos muros encalados y la sombra de la galeria, el algarrobo y las glicinas nos remontan a la calma de las siestas pueblerinas.

cro y una cantidad de guisos bien condimentados.

Por la noche la ciudad ofrece sus peñas y entre comidas y
vinos regionales uno disfruta de folkloristas que nos hacen
escuchar la música y letras de su amplia tradición musical.
“A orillitas del canal - Cuando llega la mañana - Sale cantando
la noche - Desde lo de Valderrama”, comienza la zamba del Cu-
chi Leguizamón que gran cantidad de folkloristas, entre ellos
Mercedes Sosa, cantaron en homenaje a uno de los lugares
tradicionales (más de 50 años) de reunión de la cultura mu-
sical y gastronómica de la ciudad de Salta.
Una visita al cerro San Bernardo nos da la posibilidad de un paseo
que permite tener excelentes visuales, por su posición estratégica,
vigila el casco urbano de Salta y parte del valle de Lerma.
Se puede subir por ruta o caminando, pero una experiencia inte-
resante es hacerlo en una cabina del teleférico construido entre el
año 1987-88 que tiene su base en el parque San Martín
*Carlos Sánchez Saravia. Arquitecto por la Facultad de
Arquitectura y Urbanismo de la UBA, Curso estudios en la
Escuela Superior de Publicidad y en la Universidad de Bel-
grano (Administración de empresas). Ha realizado numero-
sos cursos de actualización profesional, de antigüedades
y técnicas de restauración, de preservación de patrimonio
histórico. Se ha desempeñado como periodista acreditado en
diversas exposiciones y ferias en el país y en el exterior. Ha
realizado producción de contenidos sobre temas de arquitec-
tura, diseño, arte, patrimonio, turismo, para diversos medios
como los diarios nacionales La Nación, Clarín y El Cronista,
revistas del sector y programas de TV. Actualmente es titular
de la productora Saravia Contenidos, escribe para revistas del
sector y edita el blog:www.saraviacontenidos.blogspot.com
saraviapro@gmail.com

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