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PROYECTO
INTEGRADO
¿CÓMO FUNCIONAN LAS MAQUINAS DE
VAPOR?
24/05/2010
COLEGIO LASALLE ACAPULCO
SECCIÓN SECUNDARIA
EQUIPO # 5
TONALLI D. VANEGAS BARONA……….NL 38
MAXIMILIANO CANO……………………….NL 8
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Portada 1
PRESENTACION 2
ÍNDICE 3
CIENCIAS 4
HISTORIA 12
Valores 57
3
LA MÁQUINA DE VAPOR
Una máquina de vapor es un motor de combustión externa que
transforma la energía térmica de una cantidad de vapor de agua en
energía mecánica
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PARTES QUE FORMAN LA MÁQUINA
DE VAPOR
Lumbreras de entrada y salida (LE, LS): conductos de entrada y salida del vapor.
Pistón o émbolo (P): el pistón es un disco que ocupa la sección transversal interna
del cilindro, y que está atravesado por una barra en el centro, que lo conecta al
sistema de transformación del movimiento de vaivén en movimiento circular.
Biela (B): componente del Sistema de Transformación del Movimiento (STM) que
une el pistón con la manivela.
Manivela (M): componente del STM que conecta la biela con el volante y se
encarga junto con la biela y el volante de transformar el movimiento de vaivén en
un movimiento circular.
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Volante (V): último componente del STM que, por su fabricación de metal,
mantiene el movimiento circular por la propia inercia de su peso.
FUNCIONAMIENTO DE LA MÁQUINA
DE VAPOR
En primer lugar se calienta agua en la caldera hasta que se obtiene vapor de la
misma y es conducido hasta el contenedor (C) por la lumbrera de entrada (LE).
Para ello se abre la válvula de entrada (VE). Si se desea cortar el suministro de
vapor, por tanto, parar el funcionamiento de la máquina, se debe de volver a cerrar
VE. En el momento que el vapor llega al contenedor, pasa al cilindro (CIL) por la
lumbrera izquierda (LI). El vapor desplaza el pistón (P) hacia la derecha, moviendo
el resorte (R), la biela (B), la manivela (M) y el volante (V). La biela junto con la
manivela y el volante, se encargan de traducir el movimiento de vaivén del pistón
en un movimiento circular.
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Como ocurría antes, el resorte (R) se va desplazando hacia la izquierda hasta que
acciona la manivela de cambio izquierda (MI), volviendo a cambiar de posición la
válvula corredera (VC), por lo que el vapor vuelve a entrar por la lumbrera
izquierda (LI) al cilindro (CIL) moviendo al pistón (P), moviéndose este hacia la
derecha. El vapor sobrante en la parte derecha del cilindro (CIL) sale por la
lumbrera derecha (LD) hacia la lumbrera de escape (LES), y de ahí a la lumbrera
de salida (LS).
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A partir de este momento el funcionamiento de la máquina de vapor se repite, es
decir, el pistón (P) se desplaza hacia una dirección desplazando consigo el resorte
que acciona la manivela de cambio correspondiente con la dirección a la que se
está desplazando dicho resorte. La pulsación de una de estas manivelas, hace
que el movimiento del pistón (P) se invierta, y se desplace en la nueva dirección
hasta que el resorte vuelve a pulsar una de las manivelas de cambio, y así
sucesivamente.
INCONVENIENTES EN EL EMPLEO DE
LA MÁQUINA DE VAPOR
La máquina de vapor no dispone de la potencia ni la velocidad necesarias para
que pueda ser usada en la actualidad.
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ANÁLISIS TECNOLÓGICO DE LA
MÁQUINA DE VAPOR
ELECCIÓN DE MATERIALES
Para la caldera:
Material: fundición gris, por su bajo coste, así como por su capacidad de
amortiguar las energías de tipo vibracional, así como tener una elevada resistencia
al desgaste y a los esfuerzos de compresión. Además es fácil de moldear.
Material: acero cromado, por sus resistencia a elevadas temperaturas, así como
por sus facultades antioxidantes. Además su coste no es excesivamente caro.
Método de fabricación: para el disco del pistón emplearía la forja, y para la barra la
extrusión. En el caso de la válvula corredera emplearía la forja o algún tipo de
moldeo.
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Para la barra de la válvula corredera:
Material: acero cromado, por su resistencia a la corrosión así como a las elevadas
temperaturas.
Método de fabricación: por extrusión, ya que el método idóneo para construir una
barra de metal.
Material: acero cromado, por su dureza, resistencia a la corrosión así como a las
temperaturas elevadas.
Para que el pistón y la válvula corredera deslicen correctamente, así como la barra
de los mismos, deben de estar perfectamente pulidos por la zona en la que se va
a producir el rozamiento.
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La unión entre las piezas se hará por soldadura, para evitar la corrosión. En el
caso de la biela, la manivela y el volante, así como la barra del pistón, la barra de
la válvula corredera y las manivelas de cambio, estarán unidos entre sí mediante
ejes de unión lubricados y sometidos al tratamiento de nitruración.
Alternativas
Está claro, que como principal alternativa, se podría emplear para la fabricación de
la gran mayoría de los componentes, como las barras o el STM, de acero aleado,
sobretodo de acero cromado, por la cualidades que ya están descritas.
Para las lumbreras se podría emplear el cobre, por su conductividad térmica, bajo
coste, resistencia relativamente buena puesto que sólo se oxida en su superficie,
así como se maleabilidad, por lo que se pueden fabricar fácilmente tubos con él.
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P R I M E RA S H U E L L A S D E L
C O NO C I MI E N T O D E L A F U E RZ A
M O T R IZ D E L V A P O R
Siglo III aC: Ctesibio
Filón de Bizancio, presenta la descripción del cañón de viento
inventado por Ctesibio y es de gran interés en el arte de calibrar los
cilindros de una máquina de vapor, que alcanza una remota
antigüedad con Ctesibio: Este instrumento se inventó por Ctesibio, y
se halla dispuesto de una manera muy ingeniosa y natural. Ctesibio
había comprendido según los principios de la neumática, que el aire
está dotado de una fuerza maravillosa de movilidad y elasticidad, que
se le puede condensar en un vaso suficientemente resistente y que
entonces es susceptible de enrarecerse prontamente volviendo a su
volumen primitivo; Ctesibio que era un diestro mecánico, pensó con
razón que este movimiento podía prestar a las catapultas una gran
fuerza y un choque muy rápido. Con este objeto preparó vasos de
forma semejante a la de las cajas de los médicos que no tienen
opérculo; las hizo de bronce estirado para que tuviesen más fuerza y
solidez. El interior de estos vasos era torneado y su exterior tirado a
regla; se introducía en ellos un pistón que podía moverse rozando la
superficie interior, de suerte que ningún licor pudiese filtrar por medio,
cualquiera que fuese la fuerza de choque. No debe causar asombro ni
dudarse de que puede obtenerse este resultado; porque en el tubo d
emano que se llama hidraulo el fuelle que transmite el aire al horno es
de bronce y trabajado de la misma manera que los vasos de que
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acabamos de hablar. Ctesibio nos demostraba entonces de que fuerza
y rapidez de movimiento estaba dotado el aire. Colocada una
cobertera soldada sobre la abertura de estos vasos, empujaba el
pistón a fuertes martillazos y con una cuña. El pistón cedía un poco
hasta el momento en que el aire encerrado en lo interior estaba muy
comprimido, para que los mayores golpes no pudiesen hacer entrar
más la cuña. Cuando se iba a extraer la cuña, saltaba el pistón fuera
del vaso con una gran fuerza Y sucedía con frecuencia que se veía
brotar fuego producido por la rapidez del choque del aire contra el
vaso....
S I G L O 1 D C . : H E RÓ N D E
A L E J A N DR Í A
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el tubo levantará la bolita que pareciera bailar (Veteres Mathematici,
París, Imprenta Real francesa, 1693. Descripción de Herón de un
surtidor de vapor vertical sobre un cuerpo leve que se sumerge en él).
Examen de su obra
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Otros autores, también creen, que se reunieron bajo el nombre de
Herón, experimentos y procedimientos imaginados en diferentes
épocas (el representado en la figura 1ª, puede que alcance la más
remota antigüedad)
Cita
Desde Herón, acérrimo creyente y sostenedor de la doctrina
aristotélica del «horror al vacío», y el primero de quien sabemos que
hubiese hecho, sino útiles, ingeniosas aplicaciones de aquel motor
admirable, hasta Stevens y Fulton, y luego otros perfeccionadores, ¿
cuántas aplicaciones y modificaciones no se han visto de inmensa
utilidad de aquella fuerza que tuvieron a su disposición sin conocerla
las antiguas generaciones, en favor de las artes fabriles o industriales,
sobre todo de la locomoción? ¡Cuanto no se hubiera admirado el sabio
de Alejandría, si quince siglos después hubiese podido admirar la
máquina de Blasco de Garay, surcando el líquido espacio, no con el
auxilio de la vela ni de los remos, sino de aquella misma causa, de
aquel impulso suave que daba animación a sus graciosos autómatas;
cuánto no se hubiera sorprendido viendo una de esas moles
gigantescas, esas naves de nuestros días, en que el vapor, no como
ya una corriente activa, sino convertido en una fuerza espantable, y,
no obstante, comprimida y sujeta a la voluntad del hombre, , las
conduce a través del grande Océano, burlando los vientos contrarios,
las calmas tenaces y las corrientes, acortando con su velocidad las
distancias, y estrechando los lazos sociales de la gran familia
humana!...Pero al pagar el justo y debido tributo de admiración y
gratitud a los grandes ingenios que han llevado a la perfección esa
máquina portentosa, al admirar ese medio de acción que así aumenta
y multiplica las facultades del hombre, hecho que la antigüedad
hubiera recompensado con estatuas o deificado a sus autores; ¿por
qué no ha de hacerse justicia al que tuvo al primer `pensamiento?.
La eolípila: diversas definiciones
Etimológicamente, eolípila viene de Eolo, dios de los vientos y
puerta y se trata de un vaso metálico, cóncavo y con un solo
orificio, que se halla comúnmente en la extremidad de una especie
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de cuello o de parte prolongada y cuando se le introduce agua y se
coloca sobre carbones ardiendo, el agua no tarda en vaporizarse y
el orifico deja un estrecho paso a un surtidor de vapor hasta que de
este modo se halla desalojado toda el agua por el calor
Instrumento de física que sirve para despedir un chorro por la
fuerza elástica del fluido que se escapa de un líquido en ebullición,
o para dirigir el soplo de un vapor sobre un punto determinado
Aparato destinado a producir una corriente de aire procedente de
una bola metal, y esta bola contiene agua y se halla provista de una
pequeña abertura, y en estas condiciones se somete a la acción de
un foco calorífico
Consiste en un pequeña esfera metálica hueca, en la cual se
atornilla un cuello de poca longitud, habitualmente arqueado y
terminado por un orificio capilar, y después de llenarla hasta las dos
terceras partes de agua y alcohol se coloca en una pequeña
lámpara, en la cual se mantiene por unas pinzas formadas de dos
segmentos esféricos, sostenidos por dos montantes iguales,
paralelos y verticales, fijados por sus extremos inferiores en la
paredes de la lámpara; el líquido de la eolipila entra en ebullición de
lo cual resulta un chorro impetuoso, y si se invierte la eolipila, el
líquido ocupa su cuello, y huyendo ante el vapor que le oprime,
forma un chorro cuyo alcance es tanto mayor cuanto más intensa
es la elasticidad del vapor
Obra: De aeolipyla / J. Gnilius, Argentotari, 1743
¿Qué tipo de aparato es?
Por la descripción citada anteriormente, se concibe que la eolípila es
un aparato de reacción, lo cual quiere decir que se desarrolla en ella
una fuerza de retroceso, lo cual podía en el siglo XIX reconocerse
montando el instrumento sobre ruedas, y también otros tipos, como los
siguientes:
De rotación
De surtidor de líquidos
De surtidor de vapor
De surtidor de llamas
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Algunas aplicaciones desde la Edad Moderna
S I G L O I A . C . : V IT RU B I O
Vitrubio conocía bien el juego de la eolípila, pero se engañaba
extrañamente sobre la causa de sus efectos: Las eolípilas son unas
bolas de bronce, cóncavas y que no tienen más que un agujero muy
pequeño por el cual se las llena de agua. Estas bolas no expelen aire
alguno antes de calentarse, pero aproximadas al fuego tan luego como
sienten el calor envían un viento impetuoso hacia el fuego, y así
enseñan, con este experimento, verdades importantes sobre la
naturaleza del aire y de los vientos. (Historia de las matemáticas, T.I.)
Valoración del texto
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El mismo Claudio Perrault, incurría en este extraño error cerca
de mil setecientos años más tarde.
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al menos se ve en lo que precede una distinción claramente
establecida entre:
Vapor de agua
Aire dilatado
É P O C A I NT E R M E D IA
Las fuerzas naturales o artificiales antes de ser verdaderamente útiles
al hombre, casi siempre se han aprovechado en beneficio de la
superstición y el vapor de agua no será una excepción a la regla
general, como el dios Busterich encontrado en unas excavaciones
según el citado F. Arago autor de Recueil d'observations
géodésiques,..., París, Courcier, 1821:
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izquierda, que en otro tiempo tenía sobre la pierna: esta figura
desnuda apoya una rodilla en tierra..
S I G L O V I : A N T E MIO D E T RA L L E S
Antemio sale citado en la obra de Agathías, historiador bizantino, que
nos va a dar una indicación muy vaga pero incontestable de la
aplicación de la fuerza motriz del vapor: Este Antemio era de Tralles y
su arte consistía en las invenciones de los mecánicos, que aplicando
sobre la materia las teorías geométricas, producen imitaciones y en
cierta manera imágenes, de los fenómenos de la naturaleza. Tenía la
mayor habilidad en este arte y había progresado tanto como era
posible en el conocimiento de las ciencias matemáticas como su
hermano Metrodoro en las gramaticales. Había en Bizancio un hombre
llamado Zenon, inscrito en la lista de los abogados..Era vecino de
Antemio, tanto que sus dos casas parecían no formar más que una y
tener los mismos límites. Al cabo de algún tiempo estalló entre ambos
una cuestión, sea por una ventana abierta por el uso, sea por una
pared cuya altura excesiva interceptaba la luz, sea, en fin por una de
aquellas numerosas causas que nunca dejan de acarrear disensiones
entre los vecinos. Condenado Antemio ante los tribunales, como debía
esperarlo teniendo como adversario a un abogado y no siendo capaz
de luchar en elocuencia con él, imaginó para vengarse el siguiente
ardid, que le suministró el arte que cultivaba. Zenon poseía una
habitación muy elevada, espaciosa, muy preciosa y adornada, donde
acostumbraba a recibir a sus amigos y tratar a los que más quería. El
cuarto bajo de esta pieza pertenecía a Antemio, , de suerte que el
suelo intermedio servía de techo a uno y de suelo a otro. Antemio hizo
colocar en su cuarto unas grandes calderas llenas de agua que rodeó
exteriormente de cañones de cuero bastante anchos en su base para
abrazar enteramente el borde de las calderas, pero disminuyendo
después de diámetro como una trompeta, y terminando en
proporciones convenientes Fijó los extremos de estos cañones a las
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vigas y tablas del techo y los sujetó con cuidado; de suerte que el aire
que se había introducido en ellos, tenía el paso libre para elevarse al
interior vacio de los cañones e ir a herir al techo sin obstáculo al lugar
a que le era permitido llegar y que estaba circuido por el cuero, pero
sin poder correr ni escaparse fuera. Habiendo hecho secretamente
estos preparativos, Antemio encendió una gran llama, y calentándose
el agua muy luego y entrando en ebullición, se elevó mucho vapor
denso y opaco, que no pudiendo escaparse, subió a los cañones y se
lanzó con tanta más violencia cuanto que estaba encerrado en un
lugar más estrecho e hiriendo continuamente el techo, lo trastornó
enteramente hasta el punto de hacer temblar ligeramente y crujir las
maderas. Zenon, pues, y sus amigos se turbaron, atemorizaron, y se
lanzaron a la calle gritando y exhalando exclamaciones y Zenon, muy
bien quisto con el emperador, presentándolos en el palacio preguntaba
a sus conocidos lo que sabían sobre el terremoto y si les había
causado algún perjuicio.........
En contra de lo dicho por Agathías, uno de los escritores más eruditos
que han tratado la historia de la máquina de vapor, Mongery, que no
admite que el mecanismo descrito por Agathías sea exactamente el
mismo que empleó Antemio: la extremidad dilatada de los cañones
debió colocarse debajo de las vigas y no más allá; debía abrirse
repentinamente por medio de una válvula o una llave. Solamente
entonces hubiera producido un vivo sacudimiento.
SIGLO XV Y XVI
Leonardo da Vinci
De Leonardo da Vinci unos manuscritos en París:
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Guillermo Libri, Sobre las obras físico-matemáticas de Leonardo da
Vinci, que habla de Leonardo con mucha extensión en Historia de
las ciencias matemáticas, 1840 (Histoire des sciences
mathématiques en Italie:..., New York, 1970, 4 volúmenes; edición
más reciente Sala Bolognese: Forni, 1991).
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colocan después de cenizas calientes o sobre un brasero y las bolas
son de vidrio, de tierra o de metal, desarrollan una fuerza muy
considerable contra un obstáculo opuesto a la abertura, por ejemplo
contra la madera, hasta el punto de hacer saltar este obstáculo con
gran sacudimiento. Mientras que el fuego hace hervir el agua, veréis
que una eolipila con una cobertera terminada por un caño de bronce
encorvado, del diámetro de una pluma, soplará el fuego mientras que
no se halle completamente vacío de agua.. De estas palabras dichas
se deduce lo siguiente:
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hizo en una nao de 200 toneles, venida de Colibre a descargar trigo a
Barcelona, llamada la Trinidad, su capitán Pedro de Scarza. Por
comisión de Carlos V y del príncipe Felipe II de España, su hijo,
intervinieron en este negocio don Enrique de Toledo, el gobernador
don Enrique de Cardona, el tesorero Rávago, el vicecanciller, el
maestre racional de Cataluña, don Francisco Gralla, y otros muchos
sujetos de categoría, castellanos y catalanes, entre ellos varios
capitanes de mar que presenciaron la operación, unos dentro de la
nao y otros desde la marina. En los partes que dieron al rey y al
príncipe, todos generalmente aplaudieron el ingenio, en especial la
prontitud con que se daba vuelta a la nao. El tesorero Rávago,
enemigo del proyecto, dice que andaría dos leguas cada tres horas:
que era muy complicado y costoso, , y que había mucha exposición
que estallara con frecuencia la caldera. Los demás comisionados
aseguran que hizo ciaboga dos tantos más presto que una galera
servida por el método regular y que andaba a legua por hora por lo
menos. Concluido el ensayo, recogió todo el ingenio que había
armado en la nao, y habiéndose depositado las maderas en las
atarazanas de Barcelona, guardó para sí lo demás.
Sobre lo escrito las siguientes opiniones:
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barcos con cierto mecanismo y nada más y la máquina se dice
encerraba una caldera, luego era una máquina de vapor
Pero el racicocinio anterior no es concluyente, porque existen
diversas obras de proyectos de máquinas con los que se ve el
fuego debajo de una caldera llena de agua, sin que el vapor
juegue en ellas ningún papel, como la máquina de Amontous
Finalmente, aun cuando se admitiese que el vapor engendraba
el movimiento la máquina de Garay, no se seguirá de esto
necesariamente que esta máquina fuese nueva y que tuviese
analogía con la de hoy (siglo XIX), porque el citado Herón de
Alejandría describe mil setecientos años antes el medio de
producir un movimiento de rotación por la acción del vapor y si la
experiencia de Garay tuvo lugar y si su máquina era de vapor,
todo debe inducir a creer que utilizaba la eolipila de Herón,
aparato de ejecución no muy difícil; además, no habiendo
querido enseñar Garay su máquina a nadie ni a los
comisionados que el emperador había nombrado, no producirían
resultado alguno cierto todas las tentativas que pudieran hacerse
al cabo de tres siglos para restablecer en qué consistía
En resumen, para Arago no se debe tener en cuenta el
documento desenterrado por Navarrete, por lo siguiente:
Porque no se imprimió en 1543, ni posteriormente
Porque no prueba que el motor de la nave de Barcelona era
una verdadera máquina de vapor
Si existió alguna vez una máquina de vapor de Garay, era,
según toda apariencia, la eolípila de reacción, ya descrita en
la obra de Herón de Alejandría
Otros autores han criticado a su vez la opinión de Arago por lo
siguiente: si es cierto que la historia de la ciencia debe fundarse
en general en documentos impresos, no lo es menos que ciertos
manuscritos pueden tener tal carácter de autenticidad que su
autoridad histórica sea igual a la de un libro impreso, ya que sin
esto ¿ que sería la historia de las ciencias en cuanto a los siglos
anteriores al descubrimiento de la imprenta?; y admitiendo que
se demostrasen la exactitud de la cita de Navarrete, sería muy
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probable que Blasco de Garay tuvo también realmente la idea de
aplicar la fuerza motriz del vapor a la navegación y cualquiera
que fuese el género de aparato que hubiese empleado, aunque
fuese la eolípila de reacción, aquel mecánico, Blasco de Garay,
debería ocupar un puesto destacado entre los nombres que
figuran en una historia de las máquinas de vapor y poco importa
que mil setecientos años antes Herón de Alejandría hubiese
descrito el medio de producir un movimiento de rotación por la
acción de vapor, la persona que hubiese propuesto
primeramente adaptar este movimiento de rotación a remos
giratorios, y que hubiese ejecutado el mecanismo así
proyectado, sería autor de un progreso incontestable y de una
alta importancia
Léon Lalanne, en su obra Essai sur les origines de la machine a
vapeur.., París: Firmin-Didot, 1852, dejó escrito lo siguiente:
admitiéndole como fundado , Blasco de Garay debería ocupar un
lugar elevado entre los inventores cuyos nombres figuran en una
historia de las máquinas de vapor...pero no podemos disimular
que el juicio de Mr. Arago nos parece un poco severo (cuando
refuta la opinión de Navarrete)
También en oposición Mr. Rabault: Como en las ciencias no se
pueden admitir los hechos sino cuando están fundados en
documentos auténticos, nos será permitido no asentir con entera fe
a lo que refiere Fernández de Navarrete
Otro comprobante que nos podemos desatender que tomamos de
un periódico de Francia de concepto que se publicaba en París en
el año 1842 Le Commerce, número 297: Ya era cosa sabida que
hace 300 años se había hecho en Barcelona un ensayo de
navegación por medio del vapor, y este mismo hecho es el que ha
dado asunto para Los recursos de Quinola. Una carta de Madrid
habla del hallazgo de documentos auténticos que existen en los
archivos reales de Salamanca (el archivo a que se refiere es el de
Simancas). He aquí, dice la carta, lo que acerca de este asunto
contiene un registro llevado por el ministerio de guerra y añade que
a la experiencia asistieron con el emperador, su hijo Felipe II y el
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gran tesorero Rávago, a quien se atribuye haber disuadido a aquel
de la adopción del invento y su aplicación a la marina del Estado,
pretextando que la máquina era muy complicada y costosa, y que
además de estos inconvenientes se corría el riesgo de la explosión
de la caldera y que la comisión especial encargada de extender el
informe sobre la experiencia, se limitó a hacer constar que el buque
movido por el vapor, había hecho desde luego tres leguas en dos
horas y que se le podía dar una velocidad doble de la de una galera
ordinaria y el emperador reintegró de todos los gastos a Blasco de
Garay y le dio una gratificación de 200.000 maravedis, con oferta
de adelantarlo sucesivamente hasta los mayores grados de la
Armada Española
Mr. de Renouard: ha consignado en sus obras una balada o
romance en honor de Garay, que se cantaba en 1543 por las calles
de Barcelona
Gerónimo Cardán
Gerónimo Cardan (1557).- En una noticia inserta en el Boletín de la
Sociedad de Emulación, noviembre de 1847, Rouget de Lisle indicó un
texto de Gerónimo Cardan, en el que se ve una eolípila con dos
aberturas, una para la emisión del vapor, otra para la introducción del
agua: Los vasos ventosos que enseña a construir Vitrubio, dice
Cardan, tiene casi la forma de una cabeza humana cerrada por todas
partes menos en un tubo, por donde arrojan viento cuando se exponen
al fuego después de haberlos llenado de agua..Adaptando otro tubo en
una dirección opuesta tomará el agua por la parte sumergida, no
solamente a causa del descenso natural del agua, sino también por
razón del calor, porque este atrae, como se dijo en otra parte.., un
eslabón más en esta serie de invenciones en la historia de la
máquina de vapor.
Johann Mathesius
Johann Mathesius (1562).- En la obra Historia descriptiva de la
máquina de vapor, de Stuart, encierra el texto siguiente: No se
encuentra indicio alguno del vapor empleado como motor en las obras
de los autores antiguos, hasta el año 1563. En esta época, un tal
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Matesio, en un tomo de sermones llamado Sarepta habla de la
posibilidad de construir una aparato cuya acción y propiedades
parecen semejantes a las de la máquina de vapor modernos, cita muy
lacónica para la historia que estamos tratando, pero con posibilidad de
ampliarla gracias a un ingeniero de minas que poseía el texto de
Matesio (1504-1565), teólogo luterano: Matesio era maestro de
escuela en Joachimstal, ciudad de la Bohemia, célebre en otro tiempo
por sus minas de plata, de cobre y de estaño. Su obra impresa por
primera vez en Nüremberg en 1562, no es una obra técnica; es
simplemente una obra de piedad, hoy muy rara, aun en Alemania. El
nombre de Sarepta es el de aquella ciudad edificada al pie del monte
Carmelo, cuyo nombre es célebre en la Biblia por los milagros de
Elías. El segundo título de la obra Bergpostilla, es mucho más
explícito: es el Sermonario de las minas y continua el ingeniero de
minas con lo siguiente: Ya veis que es rara casualidad la ocurrencia de
hojear ese viejo libro perdido y sin embargo encierra un documento
histórico del mayor valor; nos enseña la primera aplicación del vapor al
servicio de la industria, y aunque seguramente sea muy incompleto
este testimonio, que se presenta en el libro de una manera incidental,
no puede dejar duda alguna de la realidad del hecho. La experiencia
que habéis hecho de su rareza, os demuestra por otra parte que la cita
es de valor, página 182, edición de 1558: Por medio del agua, del
viento y del fuego y mediante ingeniosos mecanismos, el agua y el
mineral se elevan y ponen en movimiento desde las más inmensas
profundidades, para que se disminuya el gasto y esos tesoros ocultos
puedan ser sondeados y extraídos con presteza...Vosotros, mineros,
glorificad en los cánticos de las minas al hombre excelente que hace
subir hoy el mineral y el agua sobre el Platten`por medio del viento y
como ahora se eleva el agua hasta la superficie de la tierra con el
fuego. . Sin negar la realidad atribuida a Blasco de Garay para la
maniobra de las galeras, me inclinaría voluntariamente a pensar que
aunque anteriores a la impresión de los Sermones de Matesio, no lo
eran, sin embargo, a las maniobras puesta en juego en las calderas de
agotamiento de Joachinsthal. Apenas es necesario recordar que en
aquella época la Bohemia y España estaban muy lejos de carecer de
relaciones no siendo más que provincias de un mismo imperio.
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Concluyo, en fin, que nada impide que la palabra wind empleada por
Matesio se tome en la acepción de vapor; no habiendo aun en la física
de aquellos tiempos distinguir los gases de los vapores, el autor no
tenía a su disposición ninguna expresión más fuerte que este término
general equivalente a nuestro soplo o al spiritus de los latinos.
Filiberto Delorme
Filiberto Delorme (1567).- Filiberto propuso en el capítulo VIII del libro
IX de su Arquitectura, entre diversos medios de impedir que las
chimeneas den humo, otro remedio e invención contra los humos: Por
otra invención sería muy útil tomar uno o dos globos de cobre de 5 o 6
pulgadas de diámetro si se quiere, y haciendo un pequeño agujero por
encima llenarlas de agua y colocarlas en la chimenea a la altura de
cerca de 4 o 5 pies para que puedan calentares cuando llegue a ellos
el calor, y por la evaporación causará tal viento que por grande que
sea el humo será arrojado por arriba y este remedio ayudará también
para que la madera puesta en el fuego forme llama y se encienda,
como lo demuestra Vitrubio en el capítulo VI de su primer libro.
Algunos podrán decir que las eolípilas no podrán producir aire por
mucho tiempo, a lo cual respondo, que cuanto mayores sean durará
más el viento, como también dándolas un calor templado por debajo. Y
cuanto mayor fuego haya para calentarlas soplarán con mayor
vehemencia y fuerza, pero el agua también se evaporizará más
pronto, por lo que será útil tener dos o tres más si se quiere, para que
cuando no sople una, se ponga en su lugar otra . (se trata en esta cita
de una aplicación muy indirecta de la fuerza motriz del vapor, pero
esta aplicación se renovó y a mediados del siglo XIX se empleó
produciendo resultados de gran importancia para activar los hornillos
que rodean las calderas).
Jacques Besson
Jacques Besson (1569).- Según F. Arago en una de las obras de
Jacques Besson impresa en el año 1569 se halla un ensayo de
determinación de los volumenes relativos del agua y del vapor y se
trata más de una experiencia física que de una aplicación mecánica,
pero acontecimiento notable en la historia de la ciencia, uno de los
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autores, Jacques, más notable del siglo XVI, con su obra: Teatro de
instrumentos y figuras matemáticas y mecánicas, León de Francia,
Horacio Cardon, 1602 la primera publicación que se hizo de este
género y se imitó o reprodujo muchas veces posteriormente y las
láminas se grabaron en cobre antes de que hubiese aparecido este
metal y el privilegio, es de unos años antes de 1569 (otras obras
interesantes de Bresson: Arte de encontrar las aguas subterráneas;
Arte de extraer aceites y aguas de los medicamentos simples;
Cosmólogo; Compas euclidiano)
Eolípila aplicada al asador
Stuart, en su obra citada Historia descriptiva
Thomas Young, autor de A course of lectures on natural philosophy
and the mecanical arts, London, 1807, 2 volumenes (bibliografía-
ciencias-aplicación de las máquinas).
Los citados:
Cardán describe en su obra De Rerum varietate, 1557, un
asador movido por el humo, como una máquina usada en Milán
en su tiempo
Leonardo da Vinci.- En los manuscritos de Leonardo contienen el
croquis e indicación de la máquina citada anteriormente (Essai
sur les ouvrages physico-mathematiques de Leonardo de Vinci../
G.B. Venturi, París, Duprat, 1797; reeditada en el año 1924)
S I G L O XV I I
Juan Bautista Porta (1601) y Juan Escribano (1608)
Gian baptista Della Porta, físico distinguido, publicó en la ciudad de
Italia Nápoles, con el título Pneumaticorum libri tres:.. (edición más
moderna: Napoli, 2008), una obra del género de la Herón de
Alejandría, citada anteriormente y un español, Juan Escribano, publicó
7 años después una traducción italiana de dicha obra (Y tre libri
Spirituali, Nápoles en 4ª) y en una dedicatoria dirigida al autor,
30
Escribano anuncia que añadió a su traducción algunos textos que oyó
al mismo Porta.
Valoración de la obra de Porta: edición italiana de
Escribano
31
obtener achicamientos, en su obra de 1615: Les raisons des forces
mouuantes,.., Francfort; Ian Norton, 1615, 3 volumenes.
32
Récréations mathematiques.Composées des plusieurs problemes..,
Roven: Ch. Osmont, 1628)
Jean Leurechon
Jean Leurechon.- Jesuita y profesor de matemáticas en Pont-à-
Mousson, Francia, que publicó un libro bajo el título Récréation
mathématique,..., París: Rolet Boutonné, 1626 el cual merece bajo
muchos aspectos a pesar de la crítica acerba que de él se hizo, como
las del hábil geómetra Claude Mydorge o el severo juicio de Jean
Etienne Montucla, autor de Histoire des mathématiques, París, 1799, 4
volumenes (reeditada en 1960) y sin embargo contiene ciertos
pasages que no deben desdeñarse para la historia de la ciencia y
entre otras cosas curiosas, las siguientes:
33
que se acostumbra a pintar a los vientos: unos en figura de pera,
como si se las pusiera a cocer al fuego cuando se las aplica a
soplar, y entonces el mango de ella se ahueca en forma de tubo,
haciendo al extremo un agujero tan pequeño como la cabeza de
un alfiler.
Como se puede cargar un cañón sin pólvora.- La solución que da
el autor consiste en llenar el alma del cañón con agua y aire
comprimidos, y emplear en vez de taco, un tarugo que ajusta
perfectamente, delante del cual se coloca la bala. Teniendo bien
cerrado el oído se hace fuego, y para mantener la carga se
introduce en él una pértica hasta el momento que se quiere
disparar: Entonces buscando el aire y el agua mayor espacio, y
teniendo medio de ocuparlo en efecto , empujan con gran fuerza
el taco y la bala, produciendo casi el mismo efecto que si la
carga fuera de pólvora. Sobre este cañón recibió el Padre
Leurechon las siguientes críticas:
Según el citado Mydorge: Nos propone aquí un buen medio
para ahorrarnos la pólvora y un buen auxilio para sustituirla.
Se dice que el agua y el aire encerrados en el cañón, y
calentados, producen el mismo efecto que la pólvora puesta
en contacto con el fuego. Pero el que desee comparar la
violencia de uno y otro medio, y conocer su diferencia, puede
tomar dos eolípilas semejantes a las que dejamos descritas,
llenar una de agua y otra de pólvora, calentarlas hasta que
produzcan su efecto, y llegará a conocer su resultado
El cañón que describe, había sido presentado 16 años antes
por el citado Rivault, y el procedimiento que indica para poner
en funcionamiento el cañón, es muy inferior al mecanismo
diseñado por Leonardo da Vinci antes de 1519
Valoración de la obra
34
primitivo, pero es el primer ensayo en que se encuentra la señal
para expresar la relación que Porta se propuso determinar, y que
merece ser anotada
En el párrafo V se dice que otros utilizan un tubo sencillo de plomo
en donde colocan una pequeña bolita que van saliendo a medida
que los vapores encuentran salida y es el verdadero origen de los
cañones a vapor
En el párrafo VI, habla de los molinetes o cosas semejantes que
dan vueltas por el impulso de los vapores, primera indicación
conocida del uso del vapor para dar impulso directo a un
mecanismo de rotación continua
Cuando no se preocupa de reivindicar la parte que le pertenece de
su invento y describe una invención sin presentarla como suya,
existe una certidumbre casi completa de que no ha inventado lo que
anuncia y guarda silencio sobre el autor de la invención y discurre
sobre ella como una cosa conocida y puesta en práctica en su
época; por tanto no aparece a los ojos de algunos como un inventor
Athanasius Kircher (1641)
El jesuita y profesor de física y matemáticas en el Colegio
Romano, Roma, publicó una obra en 1641, Athanasii
Kircheri...Magne sives. De arte magnetica opus tripartitum.., en
la que se halla consignada la idea, que muchos atribuyen a
Savery, de haber separado la caldera del recipiente en que
ejerce su presión el vapor.
Valoración de su obra
35
Gaspar Schott, discípulo de Kircher, en una curiosa obra titulada P.
Gasparis Schotii...Mechanica hydraulico-pneumatica,.., Francofurti and
M., H. Pigtin, 1657 hace lo siguiente:
36
fuertes los vasos. Tomó un cañón entero
lo llenó de agua hasta las tres cuartas
partes, cierro a torno la boca y el oído y lo
esponjo a un fuego constante: al cabo de
veinticuatro horas estalla la pieza con gran
ruido. Habiendo encontrado el medio de
hacer mis vasos de tal suerte que se
consoliden por la fuerza que existe en su
interior y hallándose de manera que
puedan llenarse una después de otro, he
visto saltar el agua, como una fuente continua, a la altura de cuarenta
pies.
También escribió Worcester un pequeño volumen en 4ª de 22 páginas
titulado An exact and true definition.., o verdadera y exacta definición
de la máquina hidráulica mas sorprendente inventada por el muy
honorable Edward Somerset, lord marqués de Woscester, conteniendo
una enumeración de los servicios maravillosos que puede hacer el
aparato, escrita de una manera tan difícil como A Century of inventions
y también refiere el volumen una acta de Parlamento inglés que
concede al marqués el monopolio de esta máquina, reservando al rey
la décima parte de sus beneficios (más cuatro miserables versos de su
cosecha, elogiando la invención,; después el Exegi monumentum de
Horacio; el Barbara pyramidum sileat de Marcial; y por último algunos
versos latinos e ingleses escritos por James Rollock, viejo admirador
de su señoría, en alabanza del noble inventor)
Valoración de la obra de Woscester
37
descripciones o relatos de sus inventos más bien parecen hechos
para sorprender que para ilustrar al público, rayando en
extravagantes los elogios que hace de su utilidad e importancia.
Cuando se trató de formar el aparato indicado por el Century of
inventions, no pudieron ponerse de acuerdo ni dos siquiera de los
sabios ingleses que se manifestaban más ardientes partidarios de
Woscester: por la razón muy sencilla de que la descripción de la 68ª
invención del lord inglés carece absolutamente de claridad.
Cuando se trata de reproducir la máquina del Marqués de
Woscester, débase ceñirse a lo que dice el autor y nada más y R.
Stuart en su obra Historical and descriptive anecdotes of steam-
engines ..., London, 1829, 2 volumenes, presenta dos soluciones a
dicha cuestión:
Una de ellas tomada de John Millington en su obra An epitome of
the elementary principles of mechanical philosophy..., London,
1830, con ligeras modificaciones.
Para explicar satisfactoriamente la enrrevesada descripción de
su obra , reunió dos aparatos de Salomón de Caus, los cuales
producen por su juego alternativo una corriente continua; y sin
embargo según Stuart: los derechos de Woscester como
inventor solo descansan en la relación que él mismo ha hecho
de la utilidad y maravillosas propiedades de sus invenciones,
debiendo nosotros graduar la confianza que merece su propio
aserto por la reputación del hombre leal y sincero de que goza el
marqués Pero esta reputación, si el retrato que ha hecho de él,
no debemos creer una sola de las palabras,,...
38
D I O N I S IO P A P I N ( 16 8 1 )
Del físico francés y profesor de
matemáticas en la universidad de
Marburgo, Alemania Dionisio Papin:
caldera y válvula de seguridad.
Dinosio Papin publicó en Londres una
obra titulada A new digester or engine..,
H. Bonwicke, 1681 (edición
contemporánea: Saint-Louis: Mallickrodt
Chemical Works, 1966), traducida al
francés en el año 1682 con el título La
maniere d'amolir les os,..., París: E.
Michallet, 1682 y en uno y otro libro se
encuentra el mecanismo conocido
actualmente con el nombre de válvula de seguridad y que tan
importante papel desempeña en las máquinas de vapor
Valoración de la válvula de seguridad de Papin
39
S A M U E L , E L C A BA L L E R O
M O R L A ND ( 1 6 8 3 )
Sir Samuel Morland, matemático e inventor de Gran Bretaña, publicó
en París en el año 1685 Élevation des eaux par toute sorte de
machines.. e (Elevación de las aguas por toda clase de máquinas....)
inmediatamente de una carta dedicatoria dirigida a Luis XIV de
Francia, aparece un prefacio al lector, en el que se indica de modo
muy sucinto el uso del fuego como fuerza motriz: ..he tenido al fin la
dicha de haber encontrado una especie de émbolo y de cuerpo de
bomba enteramente nuevos y muy sencillos, con un movimiento
particular y eyeloeclípctico, por cuyo medio se puede someter muy
fácilmente la elevación de las aguas a medida, peso y equilibrio, y
obligarlas de una vez y sin descanso de ninguna especie subir hasta la
cima de la montaña mas elevada, a razón de tantos moyos por hora y
pulgada, según la fuerza motriz dada en un tubo sencillo de plomo,
colocado sobre la superficie de la tierra...
En el Museo Británico existe un manuscrito muy notable de Morland, el
cual contiene las siguientes palabras: Evaporada el agua por la fuerza
del fuego, necesitan desde luego sus vapores un espacio mayor del
que anteriormente ocupaba el líquido, y más bien que permanecer
siempre aprisionados, harían saltar en pedazos un cañón de artillería.
Pero bien dirigidos esos vapores según las leyes de la estática, y
reducidos por ciencia a medida, peso y equilibrio, conducen la carga
con la misma facilidad que pudieran hacerlo unos buenos caballos.
Esta innovación es de gran importancia para el género humano,
particularmente en lo relativo a la elevación de las aguas: para eso se
ha formado la tabla adjunta, que manifiesta el número de libras que
pueden ser elevadas mil ochocientas veces por hora, a una altura de 6
pulgadas, con cilindros llenos de agua hasta la mitad.. y el párrafo
concerniente al vapor ocupa cuatro páginas en el manuscrito, el cual
lleva por título particular Les principes de la nouvelle force du feu,...
40
La Biblioteca Imperial de Francia poseía en el siglo XIX, una copia del
tratado de LÉlevation des Eaux (Élevation des eaux pour tote sorte de
machines réduite a la mesure..., París: C. Martin, 1685, en la BnF),
que parece que Morland presentó a Luis XIV, a juzgar con el cuidado
que ha sido escrita y adornada con las armas reales, pero solo
contiene según Georges-Bernard Depping (Biografías universales, art.
Morland) los dos primeros capítulos de la copia impresa, faltando el
suplemento relativo al uso del vapor.
Valoración de la obra de Morland
41
O T RA V EZ D I O NI SI O P A P I N ( 1 6 90 -
1 6 95 )
Primera máquina de vapor de pistón y cilindro, citada en:
42
Los notabilísimos trabajos de Blaise Pascal y Evangelista Torricelli,
verdaderos fundadores de la física moderna , son los que derramaron
vivísima luz sobre las nociones de sus predecesores, con el admirable
descubrimiento del barómetro, preparando el terreno que muy pronto
habría de fecundar el citado Papin, a quien se puede considerar como
el precursor de las maquinas de fuego:
43
recibir otras aplicaciones y llegar a ser un motor universal, es decir,
propuso el uso del vapor para la navegación
Este magnífico conjunto de ideas fundadas sobre experimentos
positivos se encuentra consignado como ya se ha dicho en las
Actas Eruditorum, 1690, de la página 410 a la 414
Cinco años fue cuando aparecieron, con alguna mayor extensión en
un pequeño volumen publicado en Cassel, Francia, bajo el título:
Recueil de diverses pièces... y merecen especial atención de las
diversas materias tratadas, las siguientes:
El medio de obtener una combustión más activa y perfecta de los
hornillos ordinarios
El modo de transformas el movimiento de va-y-ven del émbolo
en movimiento circular continuo con auxilio de remos giratorios
(este medio era sumamente imperfecto, pero en fin, el problema
de la aplicación del vapor a la navegación había sido propuesto y
resuelto teóricamente)
Esa primera idea del uso de la fuerza motriz desarrollada con el
movimiento alternativo del émbolo en el cilindro, es grandemente
fecunda e ingeniosa por lo siguiente:
Un medio de transportar muy lejos la fuerza de los ríos
Ha comprendido la importancia y generalidad del motor
universal que introducía, al idear la primera máquina de vapor
con émbolo y cilindro, observando antes que nadie que la
acción de la fuerza elástica del vapor puede combinarse en
una máquina de esta clase, con la propiedad del que goza
ese vapor, consignada por él, y ha indicado explícitamente la
navegación a vapor
La presentó en 1687 a la Sociedad Real de Londres y la
propuso posteriormente al conde Guillermo Mauricio de Solms
que le había consultado el mejor medio de extraer el agua de
una mina, a poca distancia de la cual corría un río cuya fuerza
motriz podía utilizarse
Leupold, Cotes y Boyle
Muy al contrario del charlatanismo de ciertos inventores que prometen
más de lo que pueden obtener, en un principio Papin no se había
44
cuidado de consignar sus invenciones por escrito; y a no ser por el
científico de Alemania Jacob Leupold, Roger Cotes, matemático y
profesor de astronomía y filosofía experimental en Cambridge y Robert
Boyle, físico y químico de Irlanda no hubiéramos sabido todo lo que a
él debemos (también la obra de Thomas Birch Historia de la Sociedad
Real de Londres, 4 volumenes, 1757, contiene muchos hechos
auténticos relativos a Papin).
T O MÁ S SA V E R Y
Del capitán Tomás Savery, la primera máquina de vapor ejecutada a
gran escala, tras obtener una patente en el año 1698 para explotar
cierta máquina, perfeccionada y colocada en estado de
funcionamiento de una manera útil:
El vapor se producía en la
caldera
Colocada sobre un hornillo
Válvula de seguridad
(caldera)
Dos llaves que permitían el
paso del vapor a los vasos
Dos vasos que recibían el
agua de un depósito inferior
Válvulas que se abren de
abajo a arriba
Tubo de propulsión
Tubo aspirador
Valoración de la máquina de Savery
45
El de haber operado la condensación del vapor por el enfriamiento
de las aspersiones de agua fría ocasionaban en las paredes
exteriores del vaso metálico que la contenía
Hasta 1702, no publicó Savery, la descripción de la máquina
perfeccionada (nada había imaginado Savery en un principio, para
renovar el agua en la caldera, ni tampoco para acelerar el
enfriamiento del vapor en los recipientes), en una obra titulada el
«Amigo del minero»: Los mineros se mostraron poco agradecidos,
uno solo pidióle máquinas. Estas se emplearon únicamente en
distribuir el agua en los palacios, casas de recreo, parques y
jardines: no podían salvar otras diferencias de nivel que las de 12 o
15 metros.
T H O MA S N E W C O ME N Y J U A N
CAWLEY
Entre los hombres cuya atención se fijó en la máquina de Savery,
figuran el herrero Thomas Newcomen y el vidriero Juan Cawley,
ambos naturales de
Darmouth, en el
Devonshire.
Thomas
Newcomen
Thomas Newcomen
realizó prácticamente
la idea de Papin,
construyendo la
primera máquina de
46
vapor atmosférica y uno de los perfeccionamientos más notables fue la
supresión del cilindro envolvente destinado a contener el agua para la
condensación, haciéndose está inyectando una lluvia menuda de agua
fría en el cilindro del vapor, por medio de un tubo terminado en forma
de regadera, con lo cual se hacía más rápida la condensación y el
pistón llego a dar 10 golpes por minuto y empezó su máquina a
aplicarse a gran escala, generalizándose su empleo en casi todas las
explotaciones mineras de Inglaterra
Juan Cawley
Juan Cawley como ya se ha dicho, vidriero, natural de Darmouth, en el
Devonshire, el cual celebró un arreglo con Newcomen y Savery y los
tres disfrutaron el privilegio de la patente que obtuvieron en 1705
(máquina atmosférica o de Newcomen, ya que Savery había obtenido
anteriormente el privilegio de invención para la máquina en que el
vacio se producía por la condensación del vapor).
C O NT I NU A C I Ó N DE L O S T RA B A J O S
D E P A P I N ( 1 6 98 - 17 0 7 )
Todavía trabajaba Papin el año 1698, a expensas del elector de
Hesse, haciendo experimentos sobre el vapor de agua en una nueva
máquina, y cuando abandonó sus investigaciones comunicó los
resultados obtenidos a muchos sabios con quienes estaba en
correspondencia, entre otros, Leibnitz, que contestó a Papin que él
también había tenido la idea de emplear la fuerza expansiva del vapor:
Lo que manifiesto aquí, dice Papin, no es para que se crea Mr. Savery,
que ha publicado después esta invención en Londres, no sea
efectivamente su inventor; no dude que haya tenido este pensamiento,
como a otros ha sucedido, sin haberlo tomado de nadie; pero lo que
digo es tan solo para hacer ver que el landgrave fue el primero que ha
formado un designio tan útil.
Cassel
47
S I G L O X VI I I
Dalesme
Dalesme (1705): Mr. Dalesme ha propuesto algunos pensamientos
cuya realización se ha creído útil, y que merecían se hicieran algunos
experimentos en grande. Ha imaginado que podría emplearse como
fuerza motora la elasticidad del vapor que se desprende del agua
caliente y ha presentado una máquina que esa elasticidad hace saltar
el agua a gran altura, según su potencia (Histoire de l'Académie, 1705,
página 137).
El ingeniero y matemático de Francia Gaspard Clair François Marie
Riche, Barón de Prony, asegurando el pesar que tenía por no haber
conocido los detalles del método de Dalesme, dejó escrito en su obra
Noùvelle architecture hydraulique,..., París: Firmin-Didot, 1790-96, 2
volumenes, que tal vez su modelo se encuentre en la colección de
máquinas de la Academia de Ciencias de París.
J O H N T HE O P H I LU S D E S A G U L I E R S
John Theophilus Desaguliers, físico de Francia hugonote, dice en su
obra Cours de physique experimentale..., París, J. Rollin, 1751 que el
anterior citado S'Gravesande había ido a Inglaterra en el año 1715, y
que estudiando con él, examinaron juntos la máquina de Savery, tal
cual esta descrita en el Lexicon technicum de John Harris, y se
propusieron introducir en ella modificaciones , que mejorado su juego,
diesen una economía notable en el gasto del establecimiento y de
combustible.
Desaguliers, parece ser, fue enemigo personal o al menos detractor de
Savery, y que constantemente lo presenta como plagiario del Marqués
de Worcester e insinúa que Savery había usado dos recipientes a
causa de los dos vasos citados en una obra de Worcester, Century of
48
inventions publicada en Londres en el año 1663 por J. Grismond
(edición más reciente: The Marquis of Worcester's century of
inventions, Newcastle: S. Hodgson, 1813) y añade que mandó
establecer un modelo propio para funcionar con uno o con dos
recipientes: Este modelo nos hizo comprender al punto que un solo
recipiente puede vaciarse tres veces en el tiempo mismo en que dos
solo pueden vaciarse una vez cada uno. De suerte que una máquina
por este medio sería muy sencilla, obraría más fácilmente, costaría
casi la mitad menos y elevaría un tercio más de agua. En su
consecuencia, hize construir una máquina como se vé en la lámina XL.
y cuya descripción comparada con el Lexicon de Harris hará ver las
adiciones que he introducido en ella.
Valoración de la máquina de Desaguliers
49
S A N T I A GO L E U P O L D ( 1 7 2 4)
En la obra de Thomas Tredgold titulada Tratado de máquinas de vapor
se puede leer lo siguiente sobre Santiago Leupold: Por aquel tiempo
muchos escritores se ocuparon a dar a conocer en sus escritos las
diferentes máquinas que habian sido construidas; pero no
mencionaremos lo que nada añadieron de nuevo a lo ya conocido. No
entra en este número el ingenioso alemán Leupold, autor de una
colección de invenciones mecánicas y a quien debemos los primeros
bosquejos de una máquina de alta presión y de pistón, notable por su
espita de cuatro aberturas, para la entrada y salida del vapor. Aunque
esta máquina presenta algunos inconvenientes como hemos dicho
más arriba podría, sin embargo, en ciertos casos prestar buenos
servicios, cuando solo se trate de elevar la cantidad de agua necesaria
para la rotación de una rueda.
Valoración de la máquina de Leupold
50
J O N A T HA N H U L L S ( 1 7 3 6 )
Jonathan Hulls propuso en 1736 emplear el vapor como fuerza motriz
sobre el agua (pero el citado Dionisio Papin le había precedido en este
camino desde 1690) y concibió un mecanismo ingenioso para
transformar el movimiento rectilíneo alternativo del pistón en
movimiento circular continuo y propuso una rueda de palas o remos
movibles.
Valoración de la máquina de Hulls
51
Jacques Philippe Mérigon de Montgéry que fuera capitán de
fragata francés y autor de obras de marina militar, cita un
manuscrito de fecha incierta según el cual las almadias que
transportaron los romanos a Sicilia, bajo el mando de Apio
Claudio Caudex debían moverse por ruedas de palas movidas
asi por bueyes (Anales de la industria nacional y extranjera,
Tomo VIII, página 291).
Finalmente en el libro de un autor desconocido en arte militar,
libro escrito por el emperador Teodosio y sus hijos Arcadio y
Honorio, y publicado en Basilea en 1552, a continuación de la
Noticia sobre los dos imperios de Oriente y Occidente, se halla la
figura y descripción de una liburna, especie de barco mayor de
guerra, que emplearon los romanos , con tres pares de ruedas
de palas y tres malacates movidos por tantos pares de bueyes y
echaban a pique a todos aquellos con que chocaban.
D E 1 7 4 4 A 1 7 6 2 , M O D I F IC A C I O N E S
Y P E R F E C C I O NE S A P L I C A D A S P O R
D I V E R S O S A U T O RE S A L A S
M Á Q U I NA S D E S A VE R Y Y A LA D E
N E W C O ME N
Hasta la época de Watt, no tendremos que hacer mención de ninguna
de estas modificaciones radicales que cambian el estado de una
industria, el valor de un mecanismo y citaremos en compendio a las
siguientes personas:
52
Fitz-Gerald.- Mecánico inglés que ideó la adición del volante y la
transformación del movimiento vertical de vaivén en movimiento de
rotación: Empleaba para esto un sistema de grandes ruedas con
diente y unas pequeñas con roquetas que engranaban con los
dientes practicados sobre el arco o sector del balancín
(Transacciones filosóficas).
Los esfuerzos de Payne en 1741, poco después de Smeaton y de
Brindley en 1769 para disminuir el enorme consumo de combustible
que tenía lugar en las máquinas mejor confeccionadas, no fueron
coronadas con éxito.
Luis Guillermo de Cambray, Señor de Digny, en 1766, publicó la
descripción de una máquina de fuego que hizo construir para las
salinas de Castiglione y expone que por el tratado de Bernard
Forest de Belidor, Architecture hydraulique.., París, C.A. Jombert,
1737-52, 4 volumenes tuvo noticia de la idea emitida por Dionisio
Papin en 1707, como de la máquina atmosférica de balancín y que
le pareció preferible en ciertos casos la idea de Papin al sistema
generalmente adoptado, y que procuró sacar de ella el mejor
partido posible perfeccionándola.
Otros
D O C T O R JO H N R O BI N S O N
Según palabras de Watt: El fue mucho tiempo después, el primero que
llamó mi atención sobre las máquinas de vapor. Emitió la idea de
hacer de ellas diversas aplicaciones, y entre otras, hacer mover las
ruedas de los carruages, pero no continuó este proyecto, y un viaje
que emprendió al extranjero le obligó muy luego a abandonarlo
completamente.
53
JAMES WATT
Comienzos
Había en Glasgow hacía 1756 un joven artista un local a quien la
universidad había concedido un local en sus propios edificios y
permitiéndole establecer un taller y este artista era James Watt que
llegó después a adquirir gran celebridad.
Watt, nos dice que hacia 1761
hizo, con auxilio de la olla de
Papin diversos ensayos sobre la
fuerza de vapor, y construir una
especie de máquina adaptando a
la cobertera del digestor una
manga con un pistón sólido, de
dos llaves para dar, cuando se
quiere, paso al vapor, por encima
o por debajo del pistón.
En el invierno de 1763, tras un
parón en sus investigaciones,
habiéndose encargado de la
reparación de un modelo de la
máquina de Newcomen, que
figuraba en la colección de la universidad, sin haber podido jamás
funcionar convenientemente, reprodujo naturalmente sus ideas sobre
este objeto y posteriormente confirmó enteramente la idea que tuvo a
principios de 1765: «que si abría una comunicación entre el cilindro
que contenía el vapor y otro vaso vacio de aire y de cualquier otro
fluido, el vapor, en razón de expansibilidad, se precipitaría en este
último vaso hasta que se estableciese el equilibrio, y que por si
inyección o de otro modo se conservaba este vaso constantemente
frío, el vapor, condensándose a medida que entrase, continuaría
esparciéndose hasta perfecta condensación de todo el que estaba en
el cilindro». (Histoire descriptive de la machine a vapeur / R. Stuart,
París: E. Lacroix, 1828, Impr. Guiraudet)
54
Aportaciones de Watt
55
Entonces la parte superior del cilindro es la que comunica con el
condensador, mientras que el vapor saliendo del tubo Se oprime
la cara inferior del pistón
Este ingenioso mecanismo, que se suele adaptar a las máquinas
cuya fuerza no es excesiva, y que están destinadas a girar un
eje, es debido a M. Murray de Leeds (Leeds), que lo ideó en
1801 y es un perfeccionamiento de la varilla de válvulas, y no es
más que una especie particular de la llave de varios juegos, solo
que en lugar de girar alrededor de un eje, tiene un movimiento
de vaivén
Descubrimiento de la expansión del vapor que significó lo siguiente:
Gran economía de vapor
Gran economía de combustible
Se regularizaba el movimiento del pistón, haciéndolo casi
uniforme
56
La revolución industrial generada por la máquina de Watt generó en un
principio un gran progreso, sin embargo, los dueños de las máquinas
comenzaron a cometer abusos contra los obreros generando una
pérdida de los valores universales tales como la libertad y la justicia ya
que los obreros trabajaban hasta 18 horas continúan para recibir un
sueldo miserable que apenas alcanzaba para alimentar a dos
personas, lo que generó el descontento de la población general y el
rechazo hacia la industrialización y hacia las máquinas y tubo su auge
en un movimiento conocido como ludismo
57
dejó a muchos sin trabajo. Por ello, en las primeras décadas del siglo
se produjeron muchos levantamientos de obreros y campesinos que
protestaban contra la introducción de las máquinas y la generalización
del sistema fabril.
El ludismo surgió como una primera respuesta violenta a las
crecientes tasas de desempleo que supusieron la implantación de
máquinas capaces de hacer el trabajo de varios hombres, con la
consiguiente pérdida del empleo por parte de los mismos, implicando
que los obreros empezaran a ver a las máquinas como causantes de
sus problemas. Ya empezaba a manifestarse un sentimiento de unidad
entre las clases proletarias, mejor conocido como conciencia de clase,
que les lleva a una mejor organización como grupo, llevando a cabo
protestas pacíficas para la mejora de sus condiciones de vida y
trabajo.
La disolución violenta,
por parte del ejército,
de una manifestación
de trabajadores en
Nottingham que
pedían trabajo y un
salario más justo, tuvo
como respuesta el
incendio nocturno de
sesenta máquinas de tejer medias. Estas acciones destructivas, que
se extendieron por las zonas de intensa industrialización de
Lancashire y Yorkshire en 1812, tomaron el nombre de un imaginario
Capitán Ludd (probablemente en recuerdo de Ned Ludd), que firmaba
las cartas intimidatorias dirigidas a los propietarios de las máquinas.
En ellas se exigía la pronta retirada de las máquinas para una fecha
en concreto, o en caso contrario, enviaría hombres a destruirlas,
quienes en caso de encontrar resistencia, tendrían incluso su
autorización para asesinar a los dueños y destruir las propiedades.
58
La respuesta gubernamental a dicho movimiento llegó a suponer la
ejecución de dieciocho ludistas en 1813.
A partir de 1817 el movimiento empezó a decaer, pero se continuó en
el campo inglés en los años 1830 y se extendió a otras regiones del
continente europeo, donde la Revolución industrial estaba adquiriendo
relevancia. En Cataluña se llegó a quemar la máquina más avanzada
del momento. A pesar de todo, sin una base ideológica definida, su
alcance era claramente limitado debido a que se dirigía a las máquinas
en lugar de atacar las verdaderas causas de su situación, por lo cual
empezó a desaparecer a medida que la protesta se fue desplazando
de ir contra las máquinas para dirigirse contra sus propietarios,
forjándose de esta manera los primeros sindicatos obreros.
A finales del siglo XX, en plena revolución digital, surgió un
movimiento conocido como neoludismo, que se opone a la inteligencia
artificial y todo avance científico que se apoye en la informática.
Reconoce que no sólo los empresarios son los explotadores sino que
es la forma en que funciona la tecnología la que aliena tanto al
explotador y al explotado convirtiéndose, a criterio de ellos, ambos en
partes funcionales de la maquinaria tecnológica.
.
59