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Fracturas de cadera en adulto mayor

Las fracturas de la regin de la cadera se corresponden con las que se producen


en el extremo superior del fmur, y, junto con las de la mueca, son las ms
frecuentes en los adultos mayores.
Aunque clsicamente se las divide en dos grupos: las de cuello del fmur y las de
la regin trocantrea, ambas van a plantear en conjunto problemas muy similares,
ya que se observan por lo general en personas mayores.
Suelen producirse por cadas banales, estn en gran medida condicionadas a la
osteoporosis tan habitual a estas edades, tienen lugar en una regin que soporta
cargas equivalentes a tres veces el peso del cuerpo, y, adems, salvo raras
excepciones, todas ellas tienen que operarse si se quieren lograr los resultados
ms efectivos.
Es precisamente en esta regin en donde los efectos de la osteoporosis se van a
ver muy marcados en los adultos mayores, por la desaparicin de trabculas
seas a veces en proporciones importantes en las zonas correspondientes al
cuello del fmur y a la regin trocantrea.
Estas fracturas son ms frecuentes en las mujeres (ms del doble que en los
hombres), y ello en gran parte es debido a que la intensidad de la prdida de
cantidad de hueso (osteoporosis) es mayor en ellas que en el varn.
Tratamiento de las fracturas de la cadera
La ciruga es la indicacin bsica del tratamiento de estas lesiones, ya que slo
con ella es posible que el paciente pueda volver cuanto antes a caminar e
integrarse a sus actividades anteriores. Cuando se trata de una fractura del cuello
del fmur, la extirpacin de la cabeza femoral, seguido de la colocacin de una
prtesis, es la tcnica ms cmn, y es tanto ms utilizada cuanto mayor edad
tenga el paciente
El paciente deber realizar ejercicios durante todo el tiempo que permanezca en la
cama, figurando como importantes los de flexin y extensin de los tobillos y la
contraccin del cudriceps, apretando con fu erza la parte posterior de la rodilla
(corva) contra el plano de la cama. Independientemente de la profilaxis antibitica
que se realice, tambin se llevar a cabo, casi siempre, una profilaxis de la
enfermedad tromboemblica mediante la correspondiente medicacin
anticoagulante, hecho en la actualidad bastante rutinario y que puede seguir
siendo realizada y controlada en su domicilio.

Bibliografa
Sociedad Espaola de Ciruga Ortopdica y Traumatologa

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