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Osmar Gonzales
H
ugo Neira, periodista Hugo Neira: Hacia la
e historiador perua- tercera mitad. Per
no de dilatada e im- XVI-XX. Ensayos de
portante trayectoria, es un agu- relectura hertica,
do observador de la realidad Sidea, Lima, 1996,
contempornea de su pas y del 754 pginas.
mundo. Es autor de importan-
tes textos como Hiplito Una-
nue y el nacimiento de la patria; Huillca, habla un campesino pe-
ruano, y Cusco, tierra o muerte, entre otros. Adems, ha sido hon-
rado con numerosos premios periodsticos, algunos de ellos in-
ternacionales, como el de Casa de las Amricas.
OSMAR GONZALES: socilogo peruano; autor de los libros Sanchos fracasados. Los
arielistas y el pensamiento poltico peruano (1996), Riva Agero en sus cartas (1996),
y Seales sin respuesta. Los zorros y el pensamiento socialista en el Per, 1968-
1989 (1999); responsable del proyecto Intelectuales y globalizacin, Centro La-
tinoamericano de la Globalidad, Mxico.
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Los juicios puntuales que propone Neira en su extenso libro pueden ser
controvertibles, y ello depender de los ojos de cada lector, cargado de
su propia visin del mundo, ideologa y compromisos tericos. Pero
lo importante, ms all de las diferencias, es que cada uno de los temas
que aborda ser o debera serlo al menos motivo de dilogo entre
especialistas, a condicin, claro, de que stos abandonen el tedio (que
algo tiene de oligrquico); se muestren con voluntad para el intercam-
bio de ideas, y con ganas de animar, sanamente, el cotarro acadmico
(que mucho debe tener de democrtico). Lamentablemente, hasta el
momento Hacia la tercera mitad no ha recibido la atencin que merece
por parte de la crtica especializada.
Este silencio es en gran parte debido a que Neira tiene pasajes sumamen-
te crticos acerca de algunos intelectuales vigentes, y eso causa escozor
en un frgil campo intelectual como el peruano, en donde la discusin
y la exposicin abierta de visiones tericas e ideolgicas brillan por su
ausencia. Por ello, se prefiere optar por la mirada oblicua y recelosa.
Subsanar ese falso olvido o ninguneo (que el propio Neira ha retrata-
do en alguno de sus ensayos) es el propsito de este comentario.