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Encuentro Unitario y Universalista 25 julio de 2004

La figura de Cristo, cruce de tradiciones


Arturo González-Mata
La diferencia entre el Unitarismo y el Cristianismo dominante está en la consideración de la figura de Jesucristo. Mientras
el cristianismo dominante es trinitario y sostiene que Jesús es el mismo Dios, el Unitarismo al igual que buena parte de
las formas primitivas del Cristianismo comparte con el Judaísmo y el Islam la idea de que solo es un hombre, más o
menos excepcional, pero solo un hombre. Siempre me intrigó como pudo introducirse en el Cristianismo la idea de la
divinidad de Jesús. Descubrí que es una idea pagana. Bueno, es normal, al fin y al cabo el cristianismo moderno está
muy influido por los conversos griegos que venían directamente del paganismo. Prácticamente el cristianismo trinitario lo
inventaron ellos. Pero cuanto más he leído mayor ha devenido mi confusión. Empecé a encontrar que ciertas ideas
paganas eran fuertes en la vida diaria de los judíos de la época. Así que me puse a elucubrar ya que es a lo más que
puede llegar un modesto aficionado.
Me resulta difícil organizar el tema. Voy a plantear algunas ideas sobre la vida de Jesús que creo bastante
fundamentadas.

1.- La Adoración de los Reyes Magos


Empezaremos por la “Adoración de los pastores y de los Reyes Magos”. Aquí me vaso en las ideas expuestas por
Demetrio Santos, profundo conocedor de la Astrología antigua.
Los “Magos” son los Magoi, sacerdotes mazdeistas persas. Versados en todas las
ciencias de la antigüedad, y con gran prestigio como augures y médicos en el
Imperio Romano. Durante siglos estos sacerdotes, dotados de enorme poder
político, hicieron expediciones de investigación astronómica a las regiones en las
que no disponían de observatorios (los zigurats). También realizaban estas
expediciones para buscar acontecimientos o personas que consideraban
especialmente importantes a partir de sus criterios astrológicos.
En el año 7 antes de nuestra era se produjo un fenómeno astronómico importante,
una gran conjunción de planetas con el Sol y la Luna en Piscis (creo que esta
lunación fue también eclipse, pero no dispongo de la documentación). El punto en
el que esta reunión celeste ascendía era en las proximidades de Belén. Y allá
fueron para descubrir a quien hubiera nacido en tan extraordinario momento. A
alguien encontrarían y es de suponer que no se limitaron a tomar nota después del
esfuerzo y los riesgos. Luego le seguirían la pista y se interesarían por su vida e
incluso intervendrían en la misma. En los Evangelios canónicos, y no digamos en
los apócrifos que son más antiguos, Jesús realiza actividades extrañas, traza
signos en el suelo, los estudia, parece que calcula. Todo es más propio de un
cabalista, un mago o un sacerdote de Mitra que del Hijo de Dios que seguro
necesita pocas matemáticas. Otro punto interesante es que cuando comienza a
predicar no lo conocen ni en su pueblo. ¿Dónde había estado? Evidentemente no
en la carpintería paterna. Alguien le contaría que vinieron a visitarle al poco de
nacer desde la cumbre de la ciencia de la época, Babilonia. Es como si le dices a
un niño que cuando nació vinieron a verle unos tipos de la NASA. Algún interés por Primitiva representación de
la astronáutica mostrará. Además insisto en que el esfuerzo de los Reyes Magos Cristo curando con varita
no quedaría abandonado. Los diversos conocimientos de que hace gala son mágica
propios de un sacerdote de Mitra. Estos se formaban desde niños primero en un
país natal y luego en Babilona, Egipto y Grecia. Esto explicaría sus años de ausencia.

2.- ¿Un Cristo oriental?


Puede sorprender que en aquella época hubiera tanto intercambio cultural, pero así era. Desde Irlanda a la India se
producía un permanente flujo de estudiosos. Así no es extraño que en las religiones mistéricas griegas y en los pocos
manuscritos del cristianismo gnóstico encontremos influencia del pensamiento indio, y del budismo transmitido por los
misioneros del Emperador Ashoka (269 al 232 a. de N. E.).
¿No habéis notado algo distinto entre los Evangelios, el Antiguo Testamento y lo que ha venido luego, como El Islam y el
Protestantismo? Jesús apenas da unas breves normas de conducta (Bienaventuranzas) y transmite sencillos rituales, la
Cena y el Padrenuestro, y el Bautismo que toma “prestado” de los mandeos seguidores de Juan el Bautista (que por
cierto aún no le han perdonado el “robo de propiedad intelectual”). Al contrario que Moisés, Mahoma, los Papas o
Calvino no da normas políticas. “Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”. Se parece más a la
prédica de Buda o a la de Lao Tse que a la de sus antecesores y seguidores. ¿Podría deberse a una fuerte influencia
orientalizante? Desde mi osadía de aficionado no lo descarto. Jesús no fue un legislador, y en esto se distingue
claramente de la mayor parte del pensamiento que creemos judeocristiano.
Buda nunca fue budista, sospecho que Cristo tampoco fue cristiano.

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3.- Jesús Rey y Mesías


En la época de la dominación romana y especialmente en la de Jesús y años siguientes había en Palestina fuertes,
fanáticos y violentos grupos independentistas. Confiando en las profecías de un Mesías (rey invencible enviado por Dios
que daría al Pueble elegido el dominio del mundo) hubo diversos brutales y sanguinarios levantamientos que acabaron
con la decisión romana de destruir Jerusalén y dispersar al pueblo judío. Dicho Mesías sería de la Casa de David. Si
algún descendiente de David cumplía con algunas profecías y era ungido rey de acuerdo con los ritos antiguos tenía
muchas posibilidades de ser reconocido como Mesías por celotes y otros feroces patriotas.
¿En qué consistían estos ritos y profecías? Por ejemplo un rey de Israel (salvo que venga de la guerra) entra en
Jerusalén en asno o mula como lo hizo Salomón para su proclamación. También debe ser ungido con aceite perfumado
por un profeta o sacerdote… o como requería la tradición de los pueblos de la zona por una hieródula, una sacerdotisa
de la fertilidad representante de la Diosa y de la Tierra. Es decir el más alto y respetado estatus que podía alcanzar una
mujer en Oriente Medio. A estas sacerdotisas se las conoció en Occidente como “Prostitutas Sagradas”. ¿No entra
Jesús en Jerusalén a lomos de un asno? ¿No es recibido por la chusma, digo población con palmas, el antiguo símbolo
del pueblo hebreo? ¿No es ungido en Betania por una prostituta? No hace muchas cosas según los Evangelios “para
que se cumpla la profecía”. ¿En definitiva sus actos no son una reivindicación sistemática del trono de Israel? ¿No es
crucificado por los romanos? La crucifixión era un castigo para los rebeldes políticos. Si hubiera sido ejecutado por los
judíos por blasfemia como se nos pretendió hacer creer, los romanos se habrían limitado a tomar nota y autorizar su
lapidación por el pueblo.
Solo falta para que su reivindicación fuera completa que estuviera casado con
una descendiente de la Casa de Benjamín. Si esta descendiente era una
sacerdotisa mejor. Jesús fue un dirigente religioso y como tal sanador. No pudo
ser admitido como tal por tanta gente si incumplía el primer mandamiento de
Dios “Creced, multiplicaos y henchid la tierra”. Debemos por tanto suponer que
estaba casado si quería ser seguido.
Se puede objetar que en el monoteísta Israel no había sacerdotisas. Craso
error. En primer lugar los romanos estaban al mando y su sistema era de
libertad religiosa total en todo su territorio. No había más prohibición que el
sacrificio humano. E incluso en este caso muchas veces preferían mirar a otra
parte para evitar disturbios. En Israel se practicaban toda clase de cultos. En
caso de duda entre tanta oferta sagrada siempre se podía acudir al “templo del
dios desconocido” mantenido por la ciudad de Roma. Los rabinos más
recalcitrantes consideran que los arqueólogos están haciendo la obra del diablo
al encontrar ídolos en las casas particulares judías de casi todas las épocas.
¿Cómo conciliaban el mandamiento de “no pondrás otros dioses ante Mí” con
esta práctica politeísta? Fácilmente, es casi imposible encontrar los símbolos
del Dios de Israel y los altares con amuletos e idolillos en la misma habitación.
El pueblo en general y las mujeres en particular tienen un concepto muy
pragmático de la teología. Otro ejemplo, en el Templo estaba prohibido aceptar Bautismo pagano
las donaciones de dinero obtenido con “el salario de perro”. “Perros” se
denominaba a los sacerdotes paganos homosexuales que financiaban sus actividades religiosas mediante el alquiler de
sus santos y acogedores culos. ¿Tendría sentido prohibir algo si solo se practica en el extranjero?
Repasemos: sacerdotisa, hieródula, unción con aceite, matrimonio sagrado… ¿No nos lleva esto a María Magdalena?

4.- Jesús el suicida pagano


Pese a la creo que evidente reivindicación de su linaje real, parece que no entraba en los planes de Jesús el
levantamiento armado. Al contrario predica que “para que la semilla de fruto debe morir”. Es el extremo opuesto de los
otros Mesías de la época, que dirigieron revueltas. Estas revueltas tanto en el propio Israel como en la Diáspora fueron
brutales y aterradoras. De hecho me recuerdan al moderno terrorismo islámico. El pueblo judío se ganó con toda la
razón el miedo y el odio de los demás pueblos del Imperio. Respecto a esto puede ser de interés la página
http://www.historialago.com/xto_05800_fin_israel_01.htm) que reproduzco al final. Este Mesías guerrero e invencible
esperado por la mayor parte del pueblo judío nada tenía que ver con la prédica de Jesús.
Creo que Jesús no fue el primero de los “Mesías” en ser apoyado por el pueblo y luego en ser denostado por el mismo.
El Mesías debe ser invencible. Si los romanos o quien sea le derrotan, le detienen y le torturan es obviamente un
impostor que merece la muerte. Creo que no fue el primero, sabemos que no fue el último. Pero esto no explica como es
posible que más que dejarse matar buscara la muerte. Porque creo que la buscaba activamente.
En Oriente Medio quedaban muchos residuos de las crueles prácticas matriarcales. Muchos “reyes sagrados” eran
asesinados ritualmente para mayor gozo del pueblo. Si bien los patriarcados habían reducido notablemente esta práctica
matriarcal del sacrifico de hijos, tuvieron que dejar algunos restos para mejor controlar a los pueblos conquistados. Los

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romanos y muy pocos más se atrevieron a prohibir totalmente estos sacrificios, habituales en Europa, Mediterráneo,
Oriente Medio y aún hoy en parte del Pacífico, África negra y las Américas. Se buscaron sustitutos: unos usaban
prisioneros, los jóvenes griegos ofrecían su sangre, otros sacrificaban a algún hijo políticamente molesto o escasamente
útil del Rey, en la forma más extrema de esta práctica todas las familias cartaginesas quemaban vivo en el templo de
Baal a su primogénito varón. Y curiosamente nunca faltaron voluntarios entre los adultos para sufrir muertes
verdaderamente atroces, véase el caso de los aztecas.
¿Cómo es posible que un hombre apoyado y protegido por celotes como Judas Iscariote y otros grupos armados se deje
matar sin resistencia? ¿Incluso que llegue a desearlo? Cuestión de adoctrinamiento. No es distinto de los actuales
suicidas musulmanes o de los kamikazes japoneses. En los cultos matriarcales se llegaba a concebir a los “reyes
sagrados” con la única finalidad de ser asesinados tan pronto se reprodujeran. Los mitos modernos en torno a un
supuesto “amor materno” (concepto que como el “matrimonio por amor” solo cobra pujanza a partir del s. XVIII), y la
autocensura políticamente correcta que impide llamar sanguinarios y opresores a los matriarcados, en nuestros tiempos
de feminismo tan masculinamente agresivo nos impiden aceptar la realidad. Efectivamente una madre puede desear con
toda su fuerza tener un hijo solo para matarlo. Vi en un reportaje sobre una guardería en Palestina. Una de las
encargadas de dicha guardería explicaba orgullosa como su marido había sido un mártir, sus hijos serían mártires y sus
hijas serían madres de mártires. ¡Estaba absolutamente encantada de la vida mientras les repetir a los niños eslóganes
que les prometían el Paraíso al matarse! Los pilares del poder son la violencia y el engaño. Los patriarcados se basan en
la fuerza, los matriarcados en el lavado de cerebro, y ambos en el miedo y sobre todo en la estupidez del pueblo.
Pero volviendo al tema. ¿Es posible que el judío Jesús no solo conociera o participara de estos ritos matriarcales y que
incluso procediera de ellos o fuera uno de estos Reyes Sagrados? Es decir que fuera lo que en el paganismo se llamaba
un “Hijo del Hombre” o un “Hijo del Dios”. Aunque pueda parecer imposible que una persona sea simultáneamente
rabino, Mesías y sacerdote pagano, los Evangelios parecen empeñados en
convencernos de que tuvo tiempo para todo ello en su breve vida.

4.1 - La Sagrada Familia un antiguo invento


Veamos como nace Jesús. De una virgen, de un padre que no es su padre
(Pater Putativus de ahí que a los Josés los llamemos Pepes –P.P.-) y del
Espíritu Santo anunciado por el Arcángel Gabriel.
Analicemos algunos puntos:
Virgen:
Antiguamente era la mujer libre, no casada. Solo posteriormente se confunde Comparemos esta “diosa lactante
la virginidad jurídica con la ausencia de relaciones sexuales. con niño” con esta Virgen cristiana
Arcángel Gabriel:
Es el único Arcángel que con regularidad se representa como femenino. Antiguamente correspondía a la Luna. Aparece
con un lirio, símbolo tradicional de la concepción.
Espíritu Santo:
Tradicionalmente es la manifestación femenina o terrena de Dios. Hasta el s. V se le representó como mujer, pero las
representaciones de la Santísima Trinidad con un Padre, un Hijo y una Señora que pasaba por allí nadie sabe porqué y
que el cura se empeñaba en llamar “Espíritu Santo”, creaban en los paganos recién convertidos cierta confusión ya que
no entendían como Cristo podía tener dos madres: María y el Espíritu ese, por que María no era el Espíritu Santo, o por
que si había un Dios Padre y un Dios Hijo la otra no era la Diosa Madre. Así que se ordenó sustituir a la mujer por una
paloma, símbolo tradicional de la Diosa Isis (también de otras diosas). La confusión fue aun mayor, se empezó a
representar la concepción de Cristo como un palomo violando a María. Aun quedan algunas de estas imágenes en
relieves poco visibles de iglesias primitivas.
“Spiritu” es masculino en latín, pero el original hebreo del que es traducido “Ruach” femenino. Existen otros muchos
problemas producidos por la traducción de las Escrituras desde el hebreo, arameo y griego al latín y luego a otras
lenguas. Mahoma prohibió que fuera traducido el Corán a otras lenguas, no es ninguna tontería.
La Concepción del Hijo de Dios:
En ciertas festividades (como la actual Beltane de la Wicca) ciertas mujeres sostenían relaciones sexuales con vistas a
tener hijos especiales. Esto podía tener diversas utilidades. Por ejemplo tener hijos descendientes de hombres
especialmente fuertes o poseedores de ciertas habilidades. Era consentido por ejemplo por los maridos muy mayores
que necesitaban tener quien les mantuviera en la vejez. Conseguir tener uno de estos “Hijos del Dios” era un acto
sagradísimo y una gran bendición y orgullo. Permitía darle mayor posibilidad de reproducción a los más aptos,
solucionaba los problemas de consanguinidad de las comunidades pequeñas y garantizaba la vejez de los padres mejor
que cualquier fondo de pensiones.
Visto así es fácil comprender el proceso de la Anunciación a María y de la Encarnación de Cristo. Recibe la Anunciación
de Gabriel, es decir del sustituto de la Diosa de la Luna. Es fertilizada por el Espíritu Santo, es decir por una

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representación de la Fertilidad Femenina. José es simplemente el Pater Putativus, el que hace orgullosamente de padre.
La madre es la Virgen, la Sacerdotisa que encarna a la Diosa en el Hieros Gamós, el Matrimonio Sagrado. Como la
Tierra y como Saturno (que en algunas mitologías es una Diosa) devorará a su propio hijo.
Pero una parte de estos privilegiados debían ser muertos para que la comunidad prosperase. Serían ungidos Reyes
Sagrados y al convertirse en padres serían asesinados de alguna manera más bien desagradable con diversas variantes
locales. Generalmente descuartizados vivos a manos del pueblo que los devoraría, o emasculados (a veces a
mordiscos) y dejados desangrar, estrangulados lentamente para obtener una última y milagrosa eyaculación… Los más
afortunados eran arrojados a un precipicio o ahorcados por caída brusca. El Rey no podía envejecer y decaer para que
el reino ni envejeciera ni decayera, debía morir para dar fruto como la semilla. Como su poder político era prácticamente
nulo, los patriarcados pudieron asumir parte de estas prácticas sin eliminarlas totalmente facilitando la transición a un
nuevo sistema, sin más resistencia popular (el pueblo siempre quiere sangre) de la soportable. Para esto podemos
consultar cualquier información sobre los cultos de Dumuzi sumerio o el Dionisos griego. En Ezequiel 8, 14 vemos como
el profeta se escandaliza de ver como un grupo de mujeres judías se lamentan por la muerte anual del Tammuz
babilónico (equivalente al Dumuzi sumerio). La diosa Asherá (Astarté) y Baal (Dumuzi) reaparecen insistentemente en
las prácticas “traidoras” del pueblo de Israel.
Pasemos ahora a lo que muchos autores consideran el Matrimonio Sagrado de Jesús. Margaret Starbird y otros piensan
que la “prostituta” que unge a Jesús en Betania es María Magdalena (María la Grande). Jesús participa en las Bodas de
Canaán. En Canaán seguía vigente entre los judíos el politeísmo matriarcal primitivo. Dice el Salmo 106:
“Sacrificaron sus hijos y sus hijas a los demonios,
Y derramaron la sangre inocente, la sangre de sus hijos y de sus
hijas,
Que ofrecieron en sacrificio a los ídolos de Canaán”

Quizá fueran sus propias bodas. Pero centrémonos en la unción de Jesús.


La “Prostituta” no lo unge con el aceite que se emplea para los reyes. Lo viste
de blanco y durante todo el proceso llora. ¿Lágrimas de arrepentimiento?
Quizá, pero no por lo que ha hecho, sino por lo que va a hacer. Usa un
“frasco de alabastro, lleno de perfume de nardo auténtico, muy caro; rompió
el frasco y derramo el perfume sobre su cabeza” (Marcos 14, 3-4). Existía la
costumbre en la región, de que las mujeres casadas y con dinero portasen un
frasco de alabastro con perfume de nardo. Este frasco se rompía para ungir
el cadáver del marido al enviudar. El cadáver era vestido con un sudario Dionisos (s. III a.C.) crucificado)
blanco, y con frecuencia las mujeres empleaban su propio pelo como toalla,
mientras lloraban. Quizá los celotes interpretasen aquello como una unción del rey de Israel. Yo lo interpreto como un
matrimonio sagrado a la antigua usanza. La Sacerdotisa escogía al que durante un año sería su esposo, antes de
matarlo o entregarlo al pueblo para su sacrificio. El rito de este matrimonio era también un rito funerario.
“Ha hecho lo que ha podido. Se ha anticipado a embalsamar mi cuerpo para la sepultura. Yo os aseguro:
dondequiera que se proclame la Buena Nueva, en el mundo entero, se hablará también de lo que ésta ha hecho
para memoria suya.” (Marcos 14, 8-9)
“Y al derramar ella este ungüento sobre mi cuerpo, en vista de mi sepultura lo ha hecho. ” (Mateo 26, 12)
4.3 – Mi versión de la Resurrección

Al tercer día tras la muerte del rey sagrado (en algunos cultos el intervalo era mayor) este como el Sol resucitaba. Es
decir era sustituido por otro desgraciado prescindible. María Magdalena va a la tumba de Jesús y la encuentra vacía
como marca el antiguo ritual. Al amanecer del tercer día, cuando vuelve a nacer el Sol, Jesús se aparece a María pero
esta no le reconoce. Siguiendo el capítulo 20 del Evangelio de Juan:

“13 Dícenle ellos: «Mujer, ¿por qué lloras?» Ella les respondió: «Porque se han llevado a mi Señor, y no sé
dónde le han puesto.»
14 Dicho esto, se volvió y vio a Jesús, de pie, pero no sabía que era Jesús.
15 Le dice Jesús: «Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?» Ella, pensando que era el encargado del huerto,
le dice: «Señor, si tú lo has llevado, dime dónde lo has puesto, y yo me lo llevaré.»
16 Jesús le dice: «María.» Ella se vuelve y le dice en hebreo: «Rabboní» - que quiere decir: «Maestro» -.
17 Dícele Jesús: «No me toques, que todavía no he subido al Padre. Pero vete donde mis hermanos y diles:
Subo a mi Padre y vuestro Padre, a mi Dios y vuestro Dios.»
18 Fue María Magdalena y dijo a los discípulos que había visto al Señor y que había dicho estas palabras.”

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Más adelante vemos que sus discípulos tampoco lo reconocen. ¿Despiste? ¿Estaba muy cambiado tras tanto ajetreo?
¿Mala iluminación? No, solo siguen como Magdalena el ritual. Es el Rey Sagrado, pero solo en sentido simbólico.
Físicamente solo es el siguiente afortunado en la lista de asesinatos rituales, el que será asesinado por el pueblo o por
su esposa al año siguiente. “El Rey ha muerto, viva el Rey (pero solo un año)”.

5.- Los fantasmas del pasado del cristianismo


El cristianismo se ha caracterizado por perseguir con saña a los judíos y a las brujas. Incluso en países como España
donde la Inquisición no estaba especialmente interesada en la caza de brujas, se quemaban estas al final de los autos
de fe, ya que era la parte favorita del pueblo. Es difícil de asumir por la mayor parte de los cristianos que su religión,
especialmente en sus formas mediterráneas y orientales bebe directamente de la antigua brujería, es decir de la religión
matriarcal, tanto como del judaísmo. Pero es así hasta tal punto que los druidas la tomaron en masa como religión
propia, ya que consideraban sus mitos centrales idénticos. Curiosamente los druidas y el cristianismo fueron las dos
únicas religiones perseguidas por los romanos. Los druidas lo fueron por su afición a quemar viva a la gente. Los
cristianos por querer prohibir todas las demás religiones.
He observado que es incluso más difícil asumir por quienes se pretenden herederos de la Antigua Religión sea en su
forma de Wicca o de Neodruidismo, que las hogueras en las que ardieron sus antecesores eran un castigo merecido
según sus antiguas creencias. La Rede Wicca afirma que “todo vuelve tres veces”. Algo así como el karma hindú pero
con intereses. Siglos de sangre inocente y de terror en la población tenían que manifestarse en furia a la primera
oportunidad como sangre y terror al triplicado. Cuando la Iglesia estableció sólidamente su poder y comenzó la caza de
las sacerdotisas de la Antigua Religión y de sus seguidores tuvo un gran apoyo popular. El apoyo del pueblo que durante
milenios había dependido con temor de ellas- Es curioso que donde se produjo la transición de religiones con más calma
como en España y Portugal la caza de brujas no fue la máxima prioridad de la Inquisición. Es en la Europa recién
convertida donde se manifiesta con mayor ferocidad, y más entre los protestantes altamente judaizados, que entre los
católicos que dejaban un pequeño resquicio vía Virgen María al culto femenino.

6.- Reflexiones finales


La extensión del dominio militar de la cultura cristiana europea ha sido el factor que más ha incidido en la
disminución de los sacrificios humanos, sean de hombres, mujeres o niños, en el mundo. Disminución, pero no
aún su final, ya que la práctica sigue. Y esta continuación de la labor humanizadota del Imperio Romano se ha
tenido que realizar por la fuerza de las armas.
La sustitución de la sangre y de la carne del Rey Sagrado por vino y trigo no es un invento de Jesús. Ya era
práctica corriente allá donde los imperios patriarcales realizaban su verdadero papel. Pero si parece que tenía
especial interés en que su sacrificio fuera el último. Según las escrituras cristianas Dios envió a su Hijo muy
amado para morir por nuestros pecados, por tanto no hacen falta más muertes. En este sentido creo que el
sacrificio de Jesús es el último acto mágico de una religión que parte de sus seguidores consideraban atroz, para
alcanzar formas más humanas y conscientes de relacionarnos con la divinidad.
En estos momentos en que se discute tanto sobre lo masculino y lo femenino, en que las mujeres acceden a
mayores cotas de poder, como sucede siempre que una sociedad patriarcal agoniza, sería interesante
reflexionar sobre lo que es el poder y la dominación y a donde nos puede llevar.
Los matriarcados se caracterizan por su estabilidad, por su ausencia de guerras (en el Mediterráneo hay un
periodo de 2.700 años en el que los arqueólogos no han encontrado rastro de guerras) pero también por su
estancamiento. No se hunden salvo por invasión o catástrofe natural. Pero no evolucionan, y no son menos
violentos que los patriarcados. Simplemente dirigen la violencia de la comunidad contra sí misma.
Los patriarcados externalizan su violencia hacia el otro. Hay guerras, pero al menos hay evolución, y tarde o
temprano degeneran y se hunden dando una oportunidad a otros pueblos.
Cabe pensar ante tanta insistencia postmoderna en la vuelta al culto femenino a la Madre (típica de la caída de
los Imperios), o ante la violencia de los cultos masculinos al Padre (especialmente el Islam), si no es hora ya de
mandar a Papá y a Mamá al asilo y tomar las riendas de nuestra propia vida buscando nuestra propia divinidad.

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