Caminaba tranquilo su mente estaba vaca y se encontraba en un estado
zen y as era feliz, de pronto al doblar la esquina su vida cambiara. Lo que
vieron sus ojos escapaban de su comprensin natural, del orden las cosas, de toda regla posible, lo que estaba presenciando era ilgico hasta absurdo; mir para todos lados esperando un testigo o mejor un cmplice de lo que estaba presenciando, pero no encontr a nadie. Quera salir de ese lugar lo ms pronto posible, pero su curiosidad, temor y ganas de comprender lo mantenan ah de pie. Pasaron horas y el segua ah contemplando, fijndose en cada detalle, observaba con atencin, frunca las cejas; se tapaba la cara, se abanicaba el rosto con las manos. Todo estaba ah cada parte, el color le llamaba mucho la atencin, pero la forma era mucho ms espectacular. De nuevo la presin de entender, aunque sea un poco como algo tan lgico puede resultar tan perturbador a la vez, las piernas resentidas por el cansancio le reclamaban; poco a poco se puso de cuclillas y tomo una posicin de descanso. Observaba una y otra vez aquello tan extrao que le llamaba la atencin. A veces le pareca grotesco, otra le pareca horroroso, la noche se acercaba; se levant lentamente maravillado y perturbado y cuando parta de aquel lugar slo dijo: Quin pudo haber cagado un lego tan grande!