4 we x Va | sy ) 4 1x —— , a es una labor que implica una reciones que sustentan la historia del hombre. En pr ‘lato primigenio se restabl P modos, as {cl ito, de acuerdo con la necesidac b Las preguntas recurrentes sobre ¢ que sc bu tniverso y su devenir hacen que las ungencias fisicas y es- pirituales del hombre investiguen una respuesta que la r Asi, frente al vacio de la respuesta racional, el mito resulta un puente que permite al ser humano pasar del otro lado y salvarse mentaneamente, de la incertidumbre. $i cl restablecimiento del cosmos se manific gracias a la lectura mitologica del contexto, pues de otra manera Ia humanidad se hallaria ad aeternum ante la an- gustia clemental el mito hace que el hombre se apro: pie del cosn ad de tiene un lay ienta parte del mismo, Ex iden a cultur (on activa en ella icos. Al con- > indefectible en los tejidos mitol6g aciones, la ontologia y la historia de quienes intervienen en él, Esto tilimo es de suma importancia tanto para la comprensi6n como para el estu- dio de los mitos: éstos son estatutos de verdad para quien €ree en ellos. El sujeto que vive el mito lo hace en razén de que hay una amalgama entre él y su universo. Desde esta perspectiva, resulta claro que todo corpus mitolégico ne otra cosa que los principios de verdad con los cuales Gl hombre guia su camino y da cimiento a su filosofia Y quien estudia el mito debe tener en cuenta este postula- do. No queremos decir que lo viva, necesariamente, sino ue. por principio metodolégi pio metodolégico y, tambi jén, por razones 8 tico-religioso no concuerdan con este “otro perder de vista que la religién, en muchos sentidos, nitologia sustentada por la ética En tercer lugar, el mito sitia al individuo en su munc, En cuanto al aspecto temporal, se ha dicho con teza que el mito carece de tiempo, en otras palabra tiempo es la atemporalidad. Decir a-tempus no signil sino mas bien que al ser recurrente la historia a travé Jos relatos mitolégicos, el ser humano se encuentra sic pre en el centro de un mitologema que lo vincula firm mente con su circunstancia.? Gadamer ha afirmade raz6n que los pueblos que carecen de mitos estén « denados a desaparecer, y sostiene que “una cultur nun horizonte rodeado de mito. La podria florecer fermedad del presente, la ehfermedad historica, co ria justamente en destruir ¢se horizonte cerrado por exceso de his pensamiento a tablas de valor siempre cambiant Antonio Canpillo, Adi Mio razén,p. 16.i suval . en una sociedad « Ame s, que ¢l mito es el discurso que abre ica, cuyos sentimientos n 1 ividuo de comprender de un mejor arraigados y tan idec < nen : n st contexto y en su bierno ¢ 2. ¢ 7 cra sat Bente Jiato. Si un pueblo sin mitos esta vac los albor ae 3 ademiés, desde esta perspectiva, w sentido religioso, sin perder de vista q aque nnexo efecti unifica el sentido historico-cultural de Jeol las : ideologia que pervierte las cr veh uicta reflexin y examen argumenta uu A amiento de tod 1 1 sélo existewa ambicién del poder politico y econgpico.a ene so la etapa ‘supk strializa: Desde una postura ilustrada, amamantada por la vit 2 modernidad. s mitold- idea platénica del mito como entidad vacia ¢ inv e 7 de comprensién que la fundamentar to del engafio,’ el mito se manifi mo antipod Le Ys de aceptar que la postmoderni- explicacion racio mundo, Para I ‘ . erin . a en el intento por sepul eristicas que la perfilan por lo menos, ¢En es realidad. | posibilic, entra al escenar de la cx anc talal siempre inquietas aguas a : ‘ iemps a una artimaia pro. pia de | reir Hit unidad de adquicr téenico como fundad lacionad ante que se ha dick demas animale poder desarrollar posible sin el f buida a Esquild a que el Titan hal brillante fuego” (PEmetale rollar tod nicas y fh \ ncia de He q go en el Titan a un sedicioso que ibi ntra del orden establecido por Zeus, el autor de F encadenado rece bord el i IL bo y maestro de todas Ia artes (5tdGaKuhos tegvng / néons Bporois répnve).”” Esto se expli parte, porque entre la época de Hesiodo y Ja de Esquilo sucedieron cambios radicales en el ambito ‘tico y social, pues los pueblos ina cultura apegada a los valores 1s versiones oligdrquica y tiraniea siglos vut-v! a. C.), a la democracia tal y como fue cor antiguos (V-IV a. C.). Y he cebida y vivida por los grieg¢ Zeus, segiin la version de Hesiodo, debia tener un claro reflejo en el entramado social y la forma de de los hombres, de tal modo que Prometeo habia traicio- nado a los dioses del Olimp. de | al haberse puesto del lado mortales. En cambio, en la dem wcracia, el ‘Titan mo un bien comin, algo que nis propio de los hombres en tanto que anto q se puede inferir del Pr cesitan del fi son ellos quienes, tal c¢ meteo de Luciano de Samosata, ne > mientras que los di Jos alimentos de éstos no requieren de la c : t oe : 21 Patdgas de Pat, sino de evita ef destino fing), Perc lia hacer creer a los hombres en la inmortalidad, el desen- que habrian de morir, El fuego —la teen do en parte el rumbo ariginal, pues la finalidad pre era que el hombre pudiese vivir mejog no qui truyera. El enemigo a vencer, ent sino lawoluntad misma del sujet, » Gon el fuego el hombre pretende ser un dios. La cien cia positivista y pragmatica cree que puede Hegar a igua lar la creacion divina, Cuando Mary Shelley public¢ novela Frankenstein o el Moderno Pro ran parte de la critica vio en ella un trabajo propio de la ficcién, una no- vela fabulada. Sin embargo, en nuestros dias, al enterar nos de manera casi cotidiana de los avances que se hacen en el terreno de la genética, donde es posible hablar ya no sélo de clonacién de seres, sino también de poder vivir mis all de lo ienta afios, gracias a la PE, «282: roghixg bv anos Caibag xorepxoa. 19Sibi que la Hustracion dio un impulso 1 pesar de haberse benefieiado det regalo del fuego que I enorme a la historia dle las ideas y a la forma de eonee hizo desinteresudamente el Titin, se olvidé de él y lo dejé bir la realidad, también Lo es ef hecho de que el separar ef Cauicaso atado como to habia o Lf eonocimicnto inieid ef camino det pensamiento huma: y judeocristiana, asi delineada por Gide y Camus, ne de la concatenacion necesaria entre ciencia y espiritu y otra vex, Para Gide, esta area es propia de una cor En efecto, la difusion de la Hustracion hizo que el hom rncia que tortura al hombre hasta que éste se decide bore ya no aceptara tan ficilmente la fataliclad @ et desti Iejarla de alimentar o bien se resigna a morie no Qu anifestaba a través de la voluntad de diok, y FI hombre, a causa de la ilusion del progreso, se ha « an ello inicié un y de necesicades que hallaban Vielado de que posee y debe cultivar su naturaleza prome Consticlo en la agin, en tos resultados de la clencia, Lat teiea; dle lo contratio, la conelencia maniquea, que es he "PRaiisetiaees - Bd pues. re sate eerato ol ama ee ys, no fe st ambit «le la civilizaci idlental la idea de progres éste ya estaba mauerto ¢ aun de Hefesto para enttegarseto a los hombres, En otra ea Bi palabras, hay progreso y moxternidad en el acto primige ruitoliico y teligiose by info de saber utilizar las bondades del fuego, pues con el portenigea lumada tecnologia, cuyo amo se tee en ol B Je Platdn, ef hombre ce} 1 progreso y la modernidad, En la ruta mucho menos hacer cultura, pues para cllo neeesité ote manera parddica la falta de memoriaPSQUILO Y EL NACIMIENTO. DEL DIOS SOFISTA Dentro de las obras que han pasado bajo la autoria Esquilo destaca por la vacilacién de su paternidad, la tra- gedia titulada Prometeo encadenado.' Entre los argume que se han manejado para negar la invencidn esquilea di esta tragedia se halla la notoria influencia sofistica qui prevalece a lo largo de esta pieza.? Tanto en el nivel de Ja estructura de Prometeo encadenado, es decir, en el plan de sus partes, como en lo que corresponde al vocabula co, se aprecia que Prometeo encadenado, a nuestro juicio, no sélo fue una simple recepcién de tal filo: jue se plante6 un interés por proyectar el cambio sociopolitico, representado por la democracia ateniense y por las es rategias retorico-discursivas propias de aquellos sofistas que dieron un claro impulso a la Iustracién de los siglos vywa.C a PE, elt, DJ, Cons 174; Friedrich Solmsen, Sobre el problema de la autoria en her en A Prometheus Bound, pp. 14 Hesiod and Aeschylus, p. X, y Suzanne Said, Sop po al respecto es el de S. Said, opPrometeo ha Ilev sito teatral con aquell an descritas a lo largo del prol bunales, donde una s por las que Zeus dispuso qu desacreditar al adversa fuera cast: nl 2 escita, lejos acciones, a pesar de que éstas fueran calificad: los hor ‘umillado en su condicion de dios. Ast, p* nen modo qi sntratio podia h hhaber regalado el fuego a los hombres, violentando con como perjudiciales. lok: del Cronida, el Titén es definido como u Pues bien, si una parte, quizé mayoritaria, d p filantropo, en sentido literal, esto es, el que ama al género dores tenia en mente que el 5 ra alguien que ver humano, a lo q su yoluntad redentora como Jia ensefianzas a), que creia educ os hon dios que nunca deja de ser para ser virtuosos, que enseiiaba mentiras, qu Ta filantropia es una de las caracteristicas que definen ba con base en la eristica, entre otras cualidades negat que pensadores como Platon za esta primera comprensién del sofist pues el robo del fuego y el apartarse del plan de Zeus, Heito pensar que Cratos, en tanto fiscal de Zeus, preten¢ que consistia en hacer desap iirak homananeee crear en los receptores una imagen negativa de Prome tco a partir, paradéjicamente, de las acciones eee ja humanidad. Se vislumbra, atré consicleradas como premis: L no premisas que sustentan la inclinacion humana de Prometeo. Siendo esto asi, se afirma entonces por éste a favor de “ amiento hesi¢ ana otra deidad del co, pues, para el poeta beocic pantedn griego hizo lo que Prometco por los hombres, b aquejan al homb 5 la ira de Zeus con cl en- culpable de las desgracias qu alvé de la destruccién divina, sino qu 80s para su sobrevivencia en un mut: le dio el fuego a éste y se atr ne ala muerte como tinico destino f so en el reparto de las carnes del sacrifcio. Este ‘tim “eee mbién la acusacion de na. Lépico es el motivo que sustenta {2 me « Chi: G. B. Kerferd, The Sophistic Movement, pp 4-14 nf dd; woBéoteposla fil des que la fikantropia trata li descrip la caracteristi ea que ue su naturaleza ela iar a los hombres, icion a la esencia de Zew bra sentido, opuestamente, en las personificaciones de Cratos y Bia. La inelinacion de Pr meteo hacia los seres humanos no es algo circunsta © providencial, pues el continente semantico de trépas (el un modo de ser, Ya Hesiodo defi eariecter dado por la toreida inteligencia, para el Titan y deseribia los efectos nocivos que esta forma de ser pro- vocaba entre los dioses y directamente en perjuicio de egiin la vision del autor de Promete Jos hombres. encad del fuego pasaria a ser todo lo contrario de lo dicho por Hesiodo; en todo caso, a par= tir de esta tragedia el Titan es visto como el unico dios filantrdpico del pantec F orAavOpsiow 8 naveoBe tpinon ta, tal Ahora bien, el sent ia de Prometeo se puede plante lineas: una que apunta hacia la generacion ¢ bor la don: reias a las tWenicas nacida 1 habilidad retori y otra que se manific k Jel Tita Desde el mismo moment como un programa educati teérica, La epistem patente iexzoin ta PE, v. 1089: oo vep tue se debe, sob Plan. on a politi 1a retériea, junto con lp i Ci: PL a le os soliA miele ee ! | —- ive te la filosoti aie i ' aot silt let sofista.” E " nation del 0 ' nnienta que, si | nel que cae el Titdin iresteres del cial, La inmediatez. del sujeto es to icy cistive dalla iniroape \ : J sectinda el senticlo del progres rension de orden cultural, pues Prometco, sin decir La técnica (téxyn) es pricticamente una virtud que el plicitamente, lo equipara con los animales. Desprovisto Titdn regalo a los hombre el fuego robado de la todo, el Titan desperté en el ser humano “su entendimier fragua de Hefesto es origen de las distintas habilidades 10 y la potestad sobre sus sentimientos” (v.44: Ewou téenicas y cientificas que pose y ha desarrollade la. hu: @nKce xo ppeviov émBOAOL decit, el fuego, en tan manidad. En los vw. 436 Prometeo describe cada to metafora del progreso, fue el elemento prometeicc tuna de las ciencias que lego al género humano: desde las permitié en cl ser humano cl desarrollo del pensamier téenicas propias de las actividades econémicas primarias, en consecuencia, que fuera sefior de sus pasion hasta las nociones bisicas del conocimiento, Tales versos Lo contrario de estas dos cualidades ¢s la animalida constituyen la parte mas significativa en torno a la recla Asi pues, los recursos obtenidos gracias al Titan procur oracién del mito prometeico al dilucidarlo como reden ron a los hombres mayor bienestar, porque vivian como tory héroe cultural, es decir, lo mas trascendental es que hormigas, bajo la tierra, en cuevas, ya que descono esta parte de la tragedia presenta un mito etiolégico acer ca del origen del progreso."” Y si el autor de PE fue un sofa i Prometco, que Platon refiere en o : a no se ha sugerido,"' entonces cabe pensar que bios de Protigo afiema parto d a configuracion del Titan fue realizada como una pro capacidades para las razas mortales (los animales) que F yeccidn del conocimiento (epist fe v6 a cabo, el ‘Titan atin6 a robar la sabidur a ce E ine) y de la politica, fueyo, | m reas en los que I Atenea representada por el fuego. A ‘ofistas eran consumados expertor BF ciscurso del Titan c p Jmiento y desarrollo de la una difer = | ue versa sobre el nacitiento del lida y la humanidad. dividido en dos partes, la primera com: La pasién o la razén prevalecen en el pu CHK rigico, El héroe trigico argumenta uno d i lato, pp. 606 cid a fin de dar un eauce creible a Ia decision p i ‘nen torn a ta evoluelon tenn del hoanbre fu imo en PIE la raz6n Neva al Tithn a la tragedia lt pueden verse 0 Medea, w. 10 los se " ae jermplos 90 c 4 fo, nlega efPor esta mist = la natural ma, al menos en teorfa, estaba plasmado el principio dk Fee sacs ae Prometeo, la aparicién del signe ue se halla Prome fe nueva see let de la composiciér dicina, pues el Titan no encuentra dios para en la médula de la comprensién y del dominio de la na Jel dios filantropo que, prendi a. enya 1 i Eaats cuales ti n que con la salud, I Antic a rito la historia del hombre: Esta idea sug gistre por el primer médico entre el género huma staba desprotegido ante la natural que la escritura es un notable avance, pues la tecnologia brindada por las letras fundamenta el quehacer de las 7 en tee aah benévolos remedios” (v. 482: xpdoetg finiav dKeoudcov poesia, sino de Musas, no sélo en el dmbito estrieto de la edificacién de la cultura en su conjunto. En efecto, las técnica médica para curar Musas, segiin la version hesiddica,"" son hijas de Mune mosyne y dle Zeus y, a la vez, ellas en su conjunto forma la memoria (uviyn-Mynuoctvn) Esta deidad “tiene un eardcter alegérico, pues, por medio de la ayuda divin, la Be ee ctnale ues cone eon de Ho meporia da nacimiento a las artes (las Musas), y en par ovaowfitopa para aludir a Mnemosyne, madre de las Mi de Homero y de Hesiodo, la tradicién poética es exclusi- eapanen ee eee fue i * ak de los nobles, de Agamenén € Hiprogres. : idas las artes para lo Para Thon ie % fi 1 este sett Ja la mnantion a tr mbolos, la ornit ficios animales por medio de Y Rae h profeea. ( r del r al Y Un titime atriis de la enumeraci est vinculada de mane vex, da pie para el d Bl discurso cierra con un br que sintetiza la significacic a, pues silo a él se le podtia atribuir el titulo de padre de 1 To mismo que Bony 88 pio ndvea ovAAsBSny whiBe / a x TlponnQa seal eseubi f Prom i i f \ neia por satislacer des humanas la parte materi Phomson denomina istic spirit ' be neontran ‘ nacimiento y el sentid a incule, en cierto modo, de los di la animalidad. Y, por lo mismo, esta lectura ha sid motivo para que algunos eriticos descalifiquen la pater dad esquilea de PE, porque han visto en ef mito q cciea es la justifieacion del nueva 1 intervencidin pro hombre nacido en la cultura de los sofistas, ¢ an Ibservado a un sujeto 4 iene pricticamente ti Al afirmarse que Prometeo dond todas las artes, hay «que al form in which Aesehylus has lothed this tradition does not ise its essential significance =n the contrary, the 1 I ha been reinterpreted $0 as to throw into relief the underlaying eocti that progtess i the outcome of conic es (Una lectura contara ala le Thomson la ofiece Pied tuna donacion de los materiales del en, of ely pp. 41-143, quien nde ln :1 idhacl pareceria catecer de . nunca habla lon ilabra, por cierto, Pu para 5 in por medio del poder cj¢ on Iencia. # " azones, Zeus castiga fi Bic onfiontacidn entee la politica — la democra ci nso —Ta tirania «EL Titén METAMORFOSIS DEL MITO argumenita sus razones para persuadir a los oyentes, dl EL ASUNTO DE.i0 se Con Ja representacién del pabli sigue hasta el fin al dios redentor: Al final este personaj es dertotado, pero lo tikimo que se le escucha decir, ante Come be, para claborar el F dios supremo ante la poemas hesiddicos. La Téngonta y 1 tuna considerable expresién de los mitos, también lo es ella tradici6n judia iegat (aclemais Natviso) y de punto de partida inspind también Ana Gonedilez-R moclo «he ee eed aey : BIBLIOTECA CENTRAL UNAM.; apy te mia ent nt velclian gir mune «Vor Fekete a tara dada por la caracteristica que denota las limitaciones ¢ Jo humano. La do suyo, hecho de despojos, reado con las herramient de la ciencia y al di mejanza, Shelley quiz intent6 parodiar este tpico en su novela, pues Frankenstein hizo su creatura pensando en el modelo humano, con la certeza de que se trata de ui perimento cientifico, Sin embargo, el resultado fue con producente, porque fisicamente la creatura era espant pero sus sentimientos eran hur El autor de Pr wea encadenado sehial6 en cl prélogo & @sta pieza que el Titan se caracteriza por ser un filantto po, lo que es motivo de condena por Cratos, el alguac Zeus, pues, a causa de tal ethos, Prometeo estuvo en ¢ tra de los desi del Cronida respecto a la raza hu: Na: su aniquilamiento. La antinomia que plantea Shell €5 semejante: Victor Frankenstein, el creador, es come Zeus que pretende destruir sentimientos de la su obra, De igual maner (ura se identifiean con fa filantt pia, cuanc al qu €l Prometco de la tragedia esquilea, amé a los hombres divina al darles quien siendo un fante que él suftiria también la ira del Cronida ante la creacion ant 2 ue Frankenstein reel : pablando, lo abomina a nes ie conduce a Victor Fran 2 i amplitud y complejidad y esto lo dot6 de pensamien Sensibilidad. Hasta cierto punto, Shelley utiliza cierta dc jueismo para pr He la vida. La creatura viene al mundo como un ser ma luro y bueno, Sin embargo, la maldad inicia su procs de lesarrollo desde el momento en el que V ye dea Propio invento. Es la humanidad la que ¢ oe dad y no ta creatura. En este punto ¢s magistral elm Fomo lo externo, Los golpes de la vida si os hi "es descritos en la novela para superar los dol Mefar las pasiones, La familia de Vietor Frankenet \ mode virtue — ite ema fe Le er 4 = i Pssv qiene niet ans Maa ccsmpaaerls ¥ te oe ee ar tech, ¥ © acl Vyenthin 1) relia . ae at Pretences #eF ichoms # " Z us ah at ee jad de mi cle ventura? [ood 3 A pesar de que Victor Frankenstein Hama demoni pe a para mitigar st Je una compaiiers Sultenteenataton, | enteritis e acti acion divina? J doseria una descenden desde esta perspective genera una ¢ srendid de los mismos hombres, Si bien es verdad qu ie: atc eLhombre aale cn continues ocasiones, éles en el fondo cl verdi- | Una aberracion que | AL negate wna €0 pee paso Y10 1 i Frankenstein obedece mpafera, Franken onsable de las muertes cometidas por su “hije | condena a ély a la | tein exputsa a la creat Antes de encontrarse en el duelo final contra su padre ; a negativa de creatura se convierte en la Némesis de Frankenstein. Lt | simismo al infierno. 1 Sa del Hiondtric odin creacién de Shelley en torno al mito prometeico se pre- | __alhecho de pensar qs Ja compatiers } Mary Shelley, Frankensteins 3, TE, PP 172-178: **Shall each man ce or] ATE YOR 12 Be A Sent o 4 Le } Man, you shall repent of i \ the injuries you inf Gifi, Hes, Zeng, vv. 47 y sx; David Garcia Peng rchedness? [ ty of my WFC lie jert, “Golem! ‘The Making 4 "Cli, Lewis C pp. 5ser malvada, que legaria a aborrecerse su compar debido a su fealdad, La expo monstruo es descalifcada de antemano, a per ello se deba a una precaucién para evitar 1 sid y muerte, Recordemos que en el mito g la primera mujer, Si misma y mas destruccion riego, Pander, nacié de la controntacién entre Ze, Prometeo como castigo para los hombres, quienes a can. bio del fuego (la sabiduria, el conocimiento) la recbiews como un bello mal." Asi, Frankenstein no hizo a li bya que pudiera haber llevado la historia hacia otros dernv 10s, pues la esencia femenina parece condenada a ser ni tor de la desgracia humana, desde esta perspectiva de la creacion a partir del modelo masculino: “una de las pi meras consecuencias de esos afectos que tanto ansiaba el demonio serian los hijos, y por la tierra se propagaria una taza de demonios que podria reducir la misma existenca de la especie humana a una condicién precaria y llena de horror” (p, 244),'6 La creatura impele a su creador a perseguirlo hasta leg alos remotos espacios del norte terrestre, A cada paso (ie dan, se alejan mas de la vision paradisiaca, de lo civilizado y de lo humano: Europa (Suiza) como ombligo de! mundo Se observa en la persecusi6n un eco del viaje de fo descr? cen Prometeo encadenado: ask como el Titan es encacenado & Ja montaiia escita, situada en una region inhéspita y fuer* de lo civilizado, del mismo modo la creatura busca un gar similar en donde habria de confrontarse, finalmen® andar erran= i ja a an fo es obligada® ne { como 10 'eorma Frankensitt a aa? jaje que simbo- ; i un viaj 0 ij a Perse aso de Ta teeHOlE i ca sin vege con 1a maldiciO i jnfinita so- rcacion es Ia infin $° pce ball oO rad de quien sera € haber destruido & 4 is Tes segs mitos aludidos €O" ‘teripciones en tom al fi 1 des allt Tanfierno, cfs en Glendon ee pea ae eee de la tecnologia de lo sumido is oe a pees de Ja tecnologia ¥ escapa atu 2 vedon, éste trata de alcanzasio para ee eoutupueanas pares 2 Len oe ss de farlo, Cuando Prometeo cre peer Jinio de los dioses al enco! a sine eS eo ae detenerse. El ser humano cree cast eas ia a ciega, que los recursos que ineeni ee wit ee ran me a la humanidad deberia comp! i ino, Entre negacidn de su destino. Ets trigico sembro clegas esperanzas cn. eee ilusién de que podian veneer @ la ane ella 0 queriendo dominay inventan, verosimiles, pero la d nd tanetaebeté RASstone 1 todo caso, €n oie con ellos, Su particularidad reside J enfoque con que se trasmiten ba} J tratamiento 0 en ¢ fos momentos histOrie’ cualquier forma del art Gomo Claudio Guillén ha dicho en distin’ ni certeza, “la imagi co fe, literaria) es una fueraa productive que invent 3 Mabotos y formas para dotar al munelo de Tas ideas && vy ce ‘a umaniaad presencia conere unidad stag’ es tal dindmicn «le lo que py slain fitan por la historia de : VIL, p. 214: “AN my spe 1 angel cai ema cas Bee atuinpes morndas. Jinsaye por las cadenas que lo ata en el infant pai