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    (Cuadernos Psiquiatia Cominitaria, Vol. 8. N° 2, pp. 207 - 223, 2008. Escaleras y Torreones Terapéuticos: Directrices y Técnicas Basicas para el Trabajo con Nifos en Terapia Fam Valentin Escudero; Alberto Abascal Departamento de Psicologia, Universidad de A Corufia Nuria Varela Departamento de Ciencias de la Salud, Universidad deA Corufiat RESUMEN Este articua plantea las dificuitades que co- minmente surgen en los terapeutas femifares tanto expertos como en formacién, ante la partici- pacién de niftos en la terapia. Se ofrecen algunas directrices bésicas que guian o! trabajo con nifios orientedas a la consecucion de una buena alan- 22 ferapSutica con el niio y toda la famia, subra- yando la importancia de potenciar los recursos y habilidades del nito, y evtar las etiquetas negati- ves y culpabiizadoras. En el contexto de ese ‘maroo teérico, se descriven una seleccién de téc- ricas epropiadas para el trabajo can nifos, técni- cas que integran la fantasia y el juego del mundo infantil en ol proceso de creacién de soluciones y cambio terapéutico. res de su vide. Palabras Clave: Nifias en terapia, afanza te- rapeutica, técnicas, segurided, conexin emo- ‘ional. INTRODUCCION Es curioso que entre los terapeutas fami- liares es bastante comin la idea de que resul- ta dificil integrar a los nifios en Ia terapia. ‘También es frecuente que los terapeutas j6- ‘venes 0 en formacién sefialen “el trabajo con SUMMARY This article deal with the common: diffcutios that many family therapist, qualified as well as novice, when working with chiliren in therapy. Basic guidelines for a therapeutic work oriented to the creation of therapeutic aliance with the chil. dren and the families are offered, emphasizing the importance of using the resources and strengths of chikiren and families, and of dissolving negati- ve and blaming definitions of the problem. in he context of that theoretical approach, a selection of ‘specific intervention techniques are described, techniques thet integrate the children's fantasy in the process of creating therapeutic change. Key Words: Children in therapy, therapeu- tic alliance, techniques, safety, emotional connection. nifios” como una de los aspectos que les re- sultan més dificiles o en los que se encuen- ‘tran menos c6modos. Sin duda hay motivos razonables para excluir a los nifios dela te- rapia, o al menos de determinadas sesiones de terapia. Pero en ocasiones, debajo de los argumentos esgrimidos por profesionales re- 1..Los tres autores trabajan como equipo ena Unidad de Investigacion en Intervencién y Cuidado Farniiar (UICF) que atiende familias y nifos en el marco de la investigacin sobre el proceso de intervencién familiar sistémica m8 Valentin Escudero - Alberto Abascal - Nuria Varela acios a incluir a los nifios en la terapia sub- yace una carencia de herramientas téenicas adecuadas para trabajar con los nifos. Es ‘obvio que los nifios pueden sentirse fuera de lugar en una terapia enfocada técnicamente a adultos, y es posible que les perjudique par- ticipar en la misma si sus limitaciones para comprender el sentido de lo que ocurre (en el discurso verbal o emocional) propicia ideas negativas en el menor. Ante esa dificultad, una alternativa es hacer la terapia técnica- ‘mente apropiada a las caracterfsticas cogniti- vas y emocionales de los nifios. No sélo algunos profesionales mantienen esta reticencia o dificultad para integrar a los nifios en la terapia familiar, también para al- ‘gunos padres 1a participacién de los nifios en la terapia result problemética. Los padres pueden sentirse inseguros, 0 incluso evitar la presencia de los nifios en la terapia, por dife- rentes motivos: a veces sienten verglenza del comportamiento que creen va a mostrar su hijo; también surge el temor de que salgan ala luz temas dolorosos para hablar delante del nifio; tampoco es infrecuente que el temor de los padres sea a que el nifio pueda desvelar algiin secreto familiar vergonzante, 0 acusaciones de maltrato. Sin embargo en el Ambito de la terapia fa- miliar hay muchos argumentos teGricos y clf- nicos para incluir a los nifios en el tratamien- to, En muchos casos el nifio tiene un papel central en la pauta sistémica que mantiene el problema por el que se ha solicitado la tera- pia; en otros casos, la presencia del nifio en determinadas sesiones puede aportar una perspectiva enriquecedora sobre el problema. y sus potenciales soluciones; finalmente, los nifios aportan un componente emocional y motivacional de gran valor para el funciona- miento del sistema familiar, La condicién imprescindible, para poder aprovechar todas estas Ventajas de la inclusiGn de los nifios en el tratamiento, es saber manejar técnicamen- te la interacci6n e intervenciones terapéuti- cas que afectan a los nifios. Por ejemplo, a través del juego, los dibujos, y otras técnicas descritas mas abajo, podemos tener una pers- pectiva de los conflictos familiares més sen- cilla y clara que a la derivada de la comuni- cacién verbal adulta; los juegos 0 dibujos resultan ser metSforas muy itiles para toda la familia de cémo los nifios se ven a st mismos y sus relaciones con el resto de la familia, amigos, profesors, etc. Bien utilizada, la perspectiva de los nifios puede ser una ‘manera diferente y muy ttil de modificar creencias ¢ interacciones disfuncionales o in- adecuadas entre padres ¢ hijos. El objetivo de este articulo es describir al- gunas técnicas de la Terapia Familiar Breve entrada en Soluciones adaptadas al trabajo con nifios. Algunas técnicas tradicionales de ese enfoque pueden aplicarse con facilidad a los nifios adaptando su formato de aplica- cién, Otras técnicas son més especificas del contexto particular de la terapia con nifios. Paradgjicamente, la literanura sobre el traba- jo terapéutico con nifios no es muy abundan- te en el dmbito de la terapia familiar breve. Los trabajos de Wilson (1), Selekman (2), y Berg y Steiner (3) son excepciones y referen- cias imprescindibles que han facilitado nues- tro trabajo clfnico. Las téenicas que hemos seleecionado proceden de esas y otras fuen- tes bibliogréficas, asi como de laexperiencia en el trabajo con nifios en la Unidad de Intervenci6n y Cuidado Familiar (UICF) de la Universidad de A Conufia. LA ALIANZA TERAPEUTICA: EL NINO HA DE SENTIRSE SEGURO Y EMOCIONALMENTE ENTENDIDO EL trabajo con nifios desde a terapia sisté- mica sigue, en términos generales, las ocalens y Tarmaones: Tespéutons = smismas premisas que con adultos, centrén- dose en las fortalezas, recursos y capacida- des dé los clientes, y utilizando la proyec- cién al futuro y el trabajo con soluciones como dos pilares esenciales del tratamiento (4); pero presenta algunas particularidades necesarias para crear un contexto adecuado ppara los niffos , como una mayor flexibilidad, ‘dando mas protagonismo a la imaginackin y aal juego. La alianza temapéutica, siendo un elemento clave de cualquier modalidad de terapia familiar G), cobra una importancia particular en la terapia con nifios. Propiciar una participacién activa del nifio en la terapia requiete un esfuerzo y un trabajo ‘inicial intense para crear las condiciones en as qué Uh fifio pueda ser capaz de participar ¢ intervenir en las discusiones, juegos, 0 ‘tareas que se realizan durante y entre sesiones. ‘Pueden considerarse cuatm dimensiones dife- rrenciadas para crear alianza terapSutica en la lerapia fantiliar (5; 6): (1) buena conexién emacional entre el terapeuta y él cliente, lo ‘que en el caso de un niffo implica que este ha de sentir que al temapeuta le imparta lo que le pasa y que le interesa su persona mds alld del problema que se esté tratando; (2) un sentido de seguridad en el sistema terapéutico, kaque supome que un nifio tiene que sentirse sufi- cientemente seguro en laterapia para explorar tetas dolorosos y conflictos, seni que su participacion no le va.a acamear reperé usianes negativas ni dentro ni fuera de la sesién; si un nnifio no se siente protegido por el terapeuta se mostrard nervioso y ansioso, y dificilmente va a poder recibir y asimilar nueva informacién; G)un sentido de compartir el propésite de la teriipia en le familia, que se reNejaré en que el nifio esté convencida de que la terapia es “para todas” y que todas tienen un nivel e pro- tagonismo y beneficia, tanto en la definicién de metas de la terapia como en el proceso de trabajo; el terapeuta ha de propiciar esta idea de forma que los nifios puedan ver que todos Jos mienibros de La fatniliar valoran su partici PACIGH a pesar dé qué no sea uth adulto; la ex— presion més comin de falta de alianza entre Jos miembros de la familia se da cuande los hijos son obligados (ose sienten presionados) a venir por los padres y ne creen que tengan ningtin problema, o bien cuando los padres traen a su hijo a terapia para que el terapeuta “haga algo con Vella” bajo el supuesto de que ellos (los padres) no tienen nada que hacer © qué “ya han hecho de todo"; (4) la cuarta dimensién, esta de tipo més instrumen— tal, de la alianza terapéutica segsin el modelo. de Escudero y Friedlander (6),es el enganche enel procesode terapia, que serefleja en una coluboraciéa activa en los objetives y tareas que vah constituyende él proceso dé trata- mietita: para qué ui tifio evidencie este eh ganche es vital un adecuado trabajo téenico. del terapeuta, aplicando técnicas apropiadas a su nivel de desarrollo cognitive y emocional. El trabajo con los tifios en las sesiones de lerapia se Centra prioritariamente en aspects cotidianas pero relevantes de su vida fuera de Ja terapia, cdma su funcionamiento con. amigos, profesores y familiares, en las acti- vidades diarias. Berg y Steiner (3) aficman que cuando se tratan conductas problemiti- cas en un niffio, el verdadero cambio se pro- duce al modificar la manera que el nifio interactia con los dems, y es el fifio quien. poses todos los recursos necesarias para llevar a caboeste cambio. La funcién del te- rapeuta es hacer mis evidente para el nifio sus fortalezas, recursos y habilidades ¢ im- plicar y hacer participes de esas fortalezas y recursos a los adultos (padres, cuidadores, Profesores, servicios sociales, etc). DIRECTRICES GENERALES ¢Quidnes vienen a las sesiones? Aunque en este articulo nos centramos principalmente en el trabajo técnico con los 20 Valentin Escuon -Alberto-Abiscal - Nuria Vasa nifios, no hay que olvidar que desde Ia pers- pectiva de la terapia familiar sistémica es muy importante el trabajo que a lo largo de todo el tratamiento se realiza con sus padres, cuidadares, y servicios educativos 0 sociales que Io derivan. De forma que las interven- ciones especificas que describimos més abajo con los nifios deben entenderse dentro de un contexto en el que se realizan sesiones conjuntas con el nifio y sus padres o cuida- dores, y también sesiones individuales con el nitio y sesiones con sus padres 0 cuidado- res sin Ia presencia del nifio. Los objetivos y €] proceso particulares de cada caso -marca- rin el formato més adecuado para cada sesidn. Dada la dependencia de los nifios del sistema educative o de proteccién, ademds del trabajo con todo el sistema familiar re- sulta recomendable (imprescindible en muchos casos)1a coluboracién activa (en se siones, reuniones, 0 contactos telefénicos 0 de correo) de otros profesionales (profeso- res, educadores, orientadores escolares, ser- vicios sociales, etc.) para explorar qué espe- ran ellos que el nifio consiga vinienda a terapia, asf como su percepcién de los cam- bios conseguidos a Io lage del proceso. de tratamiento. (Qué papel juega la creatividad? Acedades tempranas los nitios suelen vivir en mundos de fantasia donde las historias fantésticas y sus hétoes son muy impostan- tes. También hay nifios que se caracterizan por una insaciable curiosidad que se expresa encierta inguietud por cualquier cosa y en el impulso de tocar y probar tado tipo de cosas y actividades. A algunos nifios les encanta dibujar, modelar, construir, etc. Todas estas caracteristicas del mundo infantil pueden hacer pensar que un terapeuta necesita una gran dosis de creatividad para trabajar con niftas. Pero si bien la curiosidad y la creati- vidad son recursos de gran valor en la psico- terapia, a diferencia de loque pueda parecer no hay que set una pesona especialmente creativa para conse guir trabajar efieazmente con nifios. Sélo es necesaria una actitud fle- ible y abierta a aprender, y ellos nos ense- fiardn su manera de camunicarse, facilitin- donos la posibilidad “hablar su mismo Tenguaje” y trabajar dé forma conjunta en las sesiones Para conectar emocional y cognitivamen- te con el nifio es necesario “entrar en su mundo”, pero es muy importante entender que algunos nifios pueden sentirse incémo- dos con.el contacto ocillar disecto y Ta proxi- midad fisica hasta quetengan confianza en el terapeuta, Podremos usar metiiforas relacio- nadas con cosas que los nifios canocen, his- torias de superhémes, dibujos, juegas, etc., pero es importante que sea el nifio ef que ‘marque el ritmo y el curso de Ia interaoci6n inicial Los nifios usan un Ienguaje mds sen- cillo, de forma que el terapeuta debe evitar el Ienguaje abstracto para que puedan entender el sentido de lo que se hace en 1a terapia. En definitiva, 1a creatividad en el trabajo oor ttifios debe entendetse como una actitud de curiosidad y atencign sobre el tudo par- ticular y el lenguaje del nifio, para crear una interaccidn sencilla en el context de ese Ienguaje. {Céme empezar? Nuestra experiencia nos indica que esti] evitar preguntas iniciales directas a los nies sobre sus sentimientos o sus necesidades, y especialmente sobre sus problemas. Esta ob- servacidn es todavia mds importante cuando se trabaja con adolescentes. De forma que una directriz eficaz es comenzar de manera indirecta y muy positiva, es decir, sefialando indirectamente recursos, habilidades, y for- talezas del nifio, aunque pudieran parecer in- trascendentes y no tengan una conexién di- recta con el problema que se consulta. Escalems y Torteones Tesapéufcos a Al comienzo de la primera sesién los nifios son por Io general reacios a hablar. Una buena manera de empezar en estos casos puede ser a través de los padres, pre- gunténdoles por las hnbilidades de su hijo, en qué es bueno, qué hace bien, etc., y sobre todo normalizando Ia pastura del nifio de no hablar. La dificultad de esta estrategia es que elterapeuta se encuentre:con un alto nivel de negatividad en Ios padres, lo que hace muy dificil que contesten con descripciones posi- tivas. En esos casos es imponante que el te- rapeuta se muy concreto y muestre que le in- teresa conocer primero cémo es el nifto en sus habilidades y fortalezas antes de hablar del problema. A veces sdlo uno de los padres, o un hermano, es capaz de describir as fortalezas y habilidades del nifio. ‘También es posible comenzar directamente con el nifio, pero hay que tener en cuenta que el terapeuta tiene que darle la oportunidad y el tiernpo que neoesite pam coniestar, y las pre- guntas deben versar sobre sus aficiones, gusios, amigos, profesores, padres, su anirnal favorito, novedades © cambios recientes (por ejemplo, si ha cambiado de colegio, a tenido un nuevo hermanito, etc.). Este tipo de co- mienzo facilita una visién mis social del nifio y de sus mcursos y fortalezas, al tiempo que crea un clima positive para Ia terapia. Es im- Portante: que el terapeuta evite preguntas ce- rradas a las que ¢l nifio puedacontestar con un. simple“si" 0 “no”,y que encadenadas produ- cen una sensacién dé “intertogatoria” incluso: cuando el tema €s positive, Observar todo aquello que resulte Mamati- Vo, caracteristicn, o “especial” en el tifa es hu importante: si Viste dé wha manera par ticular, Teva un corte dé pelo que le earacte- fiza, trae a la sesi6n alguna mufieca u otro tipo de juguete..., cualquiera de e508 ele therntos puede ser un buen motive dé conver sacidit inicial. Sentarse en el suelo con los nifias mis pequefios o en sillas que nos hagan estar a Ja altura de Ios ojos de los nifios suele faci- Titar eT trahajo, ya que se produce un efecto en el nifio que le hace ver la habitacién. de terapia como un lugar menos “serio”, mis cercano a su mundo, en definitiva un lugar més seguro y agradable. Este uso del espa- cio, “poniéndenos a Ta altura del nifio”, no genera ninguna dificultad en sesiones indi- viduales, pero puede hacer sentirse incéma- dos a los padres en sesiones conjuntas. Cuando el trabajo se realiza con los nifios y sus padres o tutores, hay que equilibrar los ajustes para generar confianza en los nifios de manera que los adultos no se sientan de- masiado ineémados. Lo esencial en cuanto a la manera de co- menzar la terapia con los nifios es que se ‘marque claramente un interés genuino en el nitio y Jo que le rodea, en las personas y cosas que son importantes para él, y todo esto de forma pasitiva diferenciando el apre~ cio por las personas del problema que les trae-a Ia terapia. (¢Qué hacer si €l nifio se muestra como un “rehén”™ de la terapia? En ocasiones, algunos clientes se encuen- tran en la terapia en contra de su decisién 0 sintiéndose muy presionados por sus padres, pareja, 0 condicionantes sociales 0 educati- vos. En esa situaciéa, que ¢s bastante fine- cuente en ties y adalescentes, puede genie farse wha respuesta antagGnica y a veces hostil hacia el terapeuta y la terapia, mos- tréndose céntio un “tebe” del coritexto tera péutico (5). Es muy importante que la tes pussta del terapeuta ante dicha actitud inicial ef Unt nifio: sea mostiarse respetioso con cada una de sus necesidades, tomando en serio sus puntos de vista y aceptando sus cre efcias incluso aunque estas sean que Ia tera pid €s inti], intecesaria o dolorosa para m Valentin ecules -Alberto Abscal - Nuria Vases ellos. Mantener una posiciin comprensiva, sno impacientarse, y alejarse de cualquier crf- tica 6 tentacién de “convencer” al nite insis- tiendoen que piense de manera diferente. El terapeuta ha de tener presente que cuando el ‘nifio © adolescente muestra una actitud de ‘ese tipo es porque vienen a terapia de manera ‘involuntaria, trafdos por sus padres o cuida- dores, o enviados por servicios sociales u ‘otras instituciones educativas o de protec- ccidn. Es muy comin que un nifio venga ala terapia con una “etiqueta” impuesta por los padres o cuidadores, que define el problema yal nifio como un objeto tinico, de forma que problema y nifio son una misma cosa, por ejemplo: “el nifio es depresivo”, “es malo” o “ha sido un nifio dificil desde que naci6”. El terapeuta debe evitar tratar el nifio como un ‘objeto-y empezar a tratarlo como un sujeto, ‘como una persona desde el comienzo de la terapia (1). Diferenciar la persona del nitio del problema que se va a tratar en terapia es una forma de desbloquear la actitud antag nica del “rehén” (5). Reconocer Ia situacign del nite y mostrar respeto por ella es una forma de darle prota- gonismo y hacer ver que se vaa tomar en ‘cuenta su punto de vista. Incluso hay ocasio~ snes en que el terapeuta puede usar al nifio comoconsultor expertoo “ayudante” duran- te el proceso de terapia, fortaleciendo de esta manera la alianza terapéutica con el nif, haciéndole ver que el problema es algo de todas y separable desu persona, y déndo- Je “vox” para sugerir soluciones al proble- ma, Este tipo de trabajo conlleva paralela- ‘mente un trabajo encaminado a ayudar a los padres a cambiar sus creencias negativas sobre el nifio, ‘Claves del protocolo inicial con los niftos ‘De forma resumida estas son las claves del Protocolo inicial a tener en cuanta cuando: se ‘trabaja Con nifios en terapia familiar: Explicar al nifio (al igual que a los adul- tos pera de forma directa y en su lenguaje) la forma de trabajar. Explicarle bien como se trabaja con equipo y métodes de grabacién si es el caso: presentarle al equipo suele ser bueno para el nifio porquele pone caraa “los que estiin ahf detrés”. Un ejemplo de expli- cacién de las grabaciones podria ser: “me sirven para ver después lo que hablamos du- rante la sesién porque lo puedo volver a ver tantas veces coma necesite” 0 “es como haver los deberes entre clase y clase, yo veo él video y me aprendo 1as cosas”, “es como ver el video de Ja jugada cuando juegas con “la play" (solo si sabemos que el nifio canoce este juego). Darles la oportunidad de hacer cualquier pregunta al respecto'y pedir- les su consentimiento. Dejarle recomer la sala de terapia y verse en el video i se utili- za,no incomodarse por su curiosidad inicial sobre aspectas del mobitiario. + Ademés de explicar paso por paso en qué consiste nuestro trabajo, hay que usar la primera sesisn para conocer su teoria de por qué esti en Ia terapia, liberséndolo de culpas yetiquetas, y co-definiendo un marco de tra- bajo no culpabilizador can todos los miem- bios de la farnilia que tome en cuenta las opi- niones y nevesidades del nifio, + Hacetle saber que respetaremos su deci- siGn de no hablar sobre el problema o cual- quier tema que no desee. Es mestra labor conseguir la colaboracién del nifia sin que se sienta obligado © presionado a hablar del problema y sin que los padres piensen que no tomamosen seria su problema por no hablar inmediatamente de él. Podemos enfatizar que para nosotros es importante ofr la opi- nin de cada persona y que aunque no quiera hablar al inicio puede hacerlo en el momen- to que dese. Los padres suelen entender bien esto cuando el terapeuta comenta que “es muy frecuente que el nilio se tome su Esoaleas y Tomeones Tespéuiioos 213 tiempo para comenzar” a hablar de los pro- blemas. * Prestar atencién al lenguaje del nif y a Tas palabras usadas para referirse a las perso- nas o cosas. Mostrar curiosidad genuina por su mundo infantil de fantasias © anhelos, y por las caracteristicas peculiares de su forma de vestir, peinarse, @ hablar. Todo esto sirve al terapeuta para conectar emacionalmente con el nid y hacerle mis erefble una tare u objetivo descrito en un lenguaje que to es ajeno a su mundo personal. «Por ciltime, cuando empezamos un trata- mienio con nifios, tenemos en-mente los si- guientes supuestos sobre el nitio (3), a modo de ideario (puede pegarse e6mo tal en un papel del despacho), que mos ayudan a hacer el trabajo mds ficil y ver al nifio de manera mds positiva, Asumimos que todos las nifios, por diffeil que haya sido su situacién perso- hal, quiesen ~ que sus padres 0 cuidadres estén orgu- Hosos de 4 ~ agradar a sus padres y a otros adultos Ser aceptado y formar parte del grupo social en el que viven ~ aprender nuevas cosas Ser activos y participar en actividades con otros ~ ser sorprendides y sorprender a otros manifestar sus opiniones y elecciones hacer elecciones cuando se les da la TECNICAS ORIENTADAS A LAS SOLUCIONES PARA EL TRABAJO CON NINOS Las térnicas son herramientas importan- tes, pero sélo resultan eficaces en un. contex- to de alianza terapéutica y cuando se ajustan bien al ritmo y la oportunidad marcados por Jos clientes. Las siguientes deseripciones de técnicas particulares son una selecci6n de las que hemos encontrade mas titles y aplica- bles en nuestra experiencia en la UICF. Excepelones Las excepciones son aquellos momentos en que el problema deberia estar presente, pero por alguna razén no Io esti; todos los problemas par graves que sean. tienen ex- cepciones, aeasiones en las que los sujetas se encuentran libres de sus sintomas (por ¢j., Jos nifios que mojan la cama también tienen noches secas; 0 esas ocasiones en que un nifio con problemas de conducta se compor- ta cortectamente’). Examinando las diferen- ccias entre os momentos en que se produce el problema y los momentos en que no estd Presente, podemos encontrar saluciones que nos Heven, amplificdndolas y haciéndolas mds frecuentes, a que el problema deje de existir. Los nifios estén més dispuestos a hablar de cosas que hacen bien, de aquellas acasio- nes en que tienen éxito en hacer algo (na mojar la cama, jugar bien (sin violencia) con otros nilios...) que de las ocasiones en que hace algo mal. Por eso siempre tenemos que formular las preguntas de forma positiva y thuly conereta en la exploracign de excepcio- nes: “Qué fie diferente el lunes.. rid el problema - (la cama estd seca; obede- ces a tu mamd; haces los deberes, etc )?”: También podemos buscar excepciones a través de preguntas pre-suposicionales (7), las cuales inducen al cliente a buscar solu- clones én el presente o él pasado, centréndo- se en las ocasiones en que notienen o no han tenidoe] problema pese a esperar que sf ocu- rriese. Este tipo de preguntas pueden acom- pafar a las preguntas sobre excepciones, por ejemplo: “zedmo conseguiste que sucedie- ra?” (presuponiendo que e nifio lo cansi- guid); “De qué menera el que...(ocurra la 2 ‘Valentin Escusem: Ameria Abaseal - Nufia Vania, excepeién) hace que las cosas vayan mejor? (presuponiendo que van mejor)". Escalas y esealeras En la terapia breve centrada en soluciones Jas preguntas de eseala se suelen usar para que el cliente identifique algin abjetive. La idea central es que para facilitar el cambio, las ob- etivos deben de, concretos, realistas, escala- bles (ir consiguigndalos paso a paso) observa bles, ¢ implicar si es posible alguna conducta positiva meva © que ya este ocurriendo. ‘La venitaja de usar esta técnica con nites €3 que para ellos es mis ficil comunicarse con mimeros visualizar una medida en una regla 0 dibujo que con palabras. Las pregun- tas de eseala consisten en preguntar sobre un problema, meta u otra cuestidn, en un inter- valo de 1 2 10,donde 1 puede representar “lo peor, Io mis bajo, lo menos", y 10 “lo miximo, totalmente conseguide el objetivo, resuelio el problema, sobresaliente total” etc. También estas preguntas se pueden usar para evaluar el nivel dé confianza que tienes los padres y el io en solucionar un problema, En la UICF utilizames esealerasen lugar de escalas ,¢sto es, creamos un simple dibujo de una escalera con 10 peldafios y escribi- mos por lo general el objetive de la terapia al final de la escalera, en el peldaiio mis alto. Dejamos que el niio dibuje a la familia o a Eliella misma en el peldafio en el que consi- deran que estén respecte a alcanzar el final de la escalera que leva al objetive. Las pel- dafios son amplios para que el nifiopueda di- bujar, incluso escribir algo que Ios persona- Jes dicen o piensan (como en un eGmic). El nifio puede dibujar a cada persona, incluyen- do tutores o educadores si es el caso, en pel- daiios diferentes o tados en el mismo. ‘Coleccionar estos dibujos y mostrétselos al nifo y ala familia (pueden pegase en un eorcho al inicio de la sesién), con un clara in- dicacién de la fecha de ejecucién en el dibujo, genera una imagen de “aceidn y pro- -greso” en forma de vifieta (por ejemplo la fa- snilia dibujada en el iniciode la escalem en la primera semana, mas arriba en Ia segunda semana, bajan un peldafio en la tercera, avan- zan mucho en la cuara, eic.). Es muy proba- ble que el nifio dibuje caras y expresiones de alegria en su representacién de la familia ‘cuando estin en un escakin alto de Ia escale- ra, Por ello e8 titil peguntarle sobre las expre- siones que ha dibujado para fella misma, su padre, su hermano, ete. Por ejemplo, ;Porqué has dibujado a mamé déndole la mano a papa en este peldato?, ;Porqué has dituja- do atu hermano con esa cara tan cansada y enum peldaio mds bajo que el tuyo?. ‘Los adultos no tienen ninguna dificultad en utilizar el juego del dibujo. de la escalera, resulta titil preguntar a una madre por ejem- plo:

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