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La fortaleza en la Sagrada Escritura: aparece como una perfeccin o atributo divino, del
cual participa el pueblo de Israel y cada uno de sus miembros en la lucha por alcanzar la
tierra prometida y cumplir la Ley, reside plenamente en Cristo, y por medio de l se
manifiesta, de modo especial en el firme cumplimiento de la voluntad del Padre, el cual llega
a su culmen con la resurreccin y ascensin de Jesucristo y l envo el Espritu Santo a sus
discpulos, y, con l, la fuerza divina que los fortalece interiormente (Ef 3, 16) les
proporciona la valenta necesaria para proclamar el Evangelio, incluso a costa de la vida.
Actos propios de la fortaleza: resistir y no atacar, la realizacin del bien, la paciencia.
Actos contrarios a la fortaleza: Son aquellos actos que constituyen por exceso o por defecto
un desorden del temor y de la audacia, a saber: la cobarda, la insensibilidad, el temor
excesivo ante los peligros y la muerte, como la ausencia de aquel en circunstancias en que la
razn lo aconseja, las pasiones desordenadas, la desesperacin, la inconsciencia del peligro,
la terquedad, etc.
Los grados de perfeccin de la fortaleza: no son propiedad inmediata u absoluta del ser
humano, son fruto del despliegue de los dones del Espritu Santo, que son otorgados al
hombre de los cuales la fortaleza es uno de los siete dones del Espritu Santo - para que
unido a la gracia de Dios cada da se esfuerce consiente, libre y voluntariamente por alcanzar
la santidad de vida.
Para qu sirve la fortaleza?: Sirve para: ser honrados en los negocios, vivir la castidad de
acuerdo con el estado propio, para controlar la ira y los enfados, para ser coherentes, entre lo
que se piensa y lo que se vive, para hacer lo que se debe en el trabajo, en las relaciones con
los dems, en el esfuerzo por acercarse ms Dios, sin doblegarse ante las dificultades, para
tener dominio sobre los pensamientos, las emociones y los sentimientos, para tomar con
serenidad las decisiones ms oportunas y prudentes y para no cansarnos de hacer el bien.