Perros de Guardia para el Ganado

Traducido y adaptado de Livestock guarding dogs - Protecting sheep for predators - USDA.
Jeffrey S. Green. Wildlife Services, APHIS, USDA.
Roger A. Woodruff. Wildlife Services, APHIS, USDA.
Traducido por el Ing Agr. Ignacio de Barbieri INIA Tacuarembó

Introducción

A fines de la década del ´70, se inicia un resurgimiento en la utilización de una antigua forma de proteger a los
ovinos, el perro de guardia. Varios factores contribuyeron a este fenómeno, incluyendo restricciones Federales
en el uso de sustancias para matar predadores, la ineficacia relativa de las técnicas existentes para proveer
adecuado control de la predación en ciertas situaciones, y el deseo de algunos de utilizar métodos no letales
para reducir las pérdidas de ganado por predadores.

El uso de perros de guardia para proteger al ganado puede rastrearse desde varios cientos de años antes de
Cristo en Europa y Asia, pero poca información ha sido registrado de cómo los perros realmente han trabajado.
Sólo recientemente, los investigadores comenzaron a encontrar respuestas a preguntas pertinentes sobre los
perros de guardia para ganado.

No hay dudas, que algunos perros pueden proteger a los ovinos, pero:
¿Bajo qué condiciones el perro de guardia es una buena opción o una imprudente para desterrar la
predación?
¿Sí el perro de guardia es una buena opción, cómo el dueño debe conseguirlo, criarlo, entrenarlo y
usarlo efectivamente en la majada?
¿Qué razas son las más indicadas para la tarea y cuáles son los costos y riesgos de la opción?

Un productor ovino que tiene importantes pérdidas por predadores, puede estar dispuesto a manejar con el
problema potencial de criar y utilizar un perro de guardia. Sí las pérdidas son bajas, el productor puede entender
que no vale la pena el esfuerzo de criar y entrenar un perro.

Algunas personas piensan que la compra de un perro de guardia resolverá inmediatamente los problemas de
predadores. Lamentablemente, ese sería raramente el caso. Puede haber una carencia aparente de ventajas
inmediatas de utilizar un perro, o un cachorro puede no parecer lo agresivo o protector como el productor
espera que sea. El propietario y personal deberían estar comprometidos con el concepto de perro de guardia,
cuando se intente incorporar un perro a la majada. Los perros de guardia no se pueden encender y apagar a
voluntad, y los posibles beneficios de un perro de guardia generalmente no ocurren sin una inversión inicial de
tiempo y paciencia.

Hemos criado varios perros bajo condiciones similares, la mayoría se convirtieron en buenos perros de guardia,
pero algunos no. La habilidad instintiva debe estar presente en el perro para tener éxito, y con entrenamiento
apropiado y temprana exposición a la oveja pueden garantizar que el perro se convierta en un buen guardián.

Ha habido algunos perros criados como mascotas, que luego fueron entrenados por personas dedicadas para
convertirse en buenos guardianes. Otros perros excepcionales de repente han mostrado deseos de estar con las
ovejas, aunque no estuvieran siendo criados bajo las condiciones ideales. Instancias como las mencionadas no
son comunes, y la mayoría de los perros requerirán un grado de socialización adecuada y experiencia con las
ovejas para convertirse en guardianes confiables.

En general, la adquisición de un perro de guardia no implica un alivio inmediato de la predación, porque los
guardianes efectivos y maduros no están disponibles para la mayoría de los productores. Considerable tiempo,
esfuerzo, y buena suerte son requeridos para llevar a un cachorro hasta la madurez. En algunas situaciones, el
perro puede ser inefectivo. En otras, el perro puede ser todo lo necesario para detener la predación. Entre estos
dos extremos, los perros deben ser usados como complementarios con alambrados eléctricos, trampas, caza, u
otras formas de control.
Existen unas pocas duras y rápidas reglas con respecto a perros y ovejas. Muchas variables interactúan para
producir exitosamente un perro de guardia. El contenido de este documento presenta información de los
autores, varios investigadores, y un creciente número de productores que exitosamente tienen perros de
guardia como parte de su programa de manejo de la predación.

Concepto: El Perro de Guardia

Un perro de guardia para el ovino, es aquel que generalmente esta con las ovejas sin dañarlas y repeliendo
agresivamente a los predadores. El perro elige mantenerse con las ovejas porque ha sido criado con ellas desde
temprana edad. Sus comportamientos de protección son en gran medida instintivos, y requiere relativamente
poco entrenamiento formal, con la excepción de la corrección oportuna de comportamiento indeseable (ej:
masticar orejas, exceso en juegos, excesivo vagabundeo). El perro de guardia no es un perro de pastoreo pero
sí es un miembro de tiempo completo de la majada. El éxito del perro es el resultado de la calidad genética de
sus antecesores con énfasis en una apropiada crianza.

El éxito se puede incrementar viendo al perro de guardia como una herramienta a ser incorporada en el manejo
general del negocio ovino. Los perros no actúan automáticamente como una pieza de maquinaria, y su
comportamiento es variables. Los productores que utilizan exitosamente un perro, deben alterar levemente su
rutina de manejo y tomar ventaja de las cualidades del perro. Esto puede incluir ovejas en pastoreo en
diferentes pasturas, separadas o en grupos, suplementación, cambios en los alambrados y monitoreo de la
majada.

Eligiendo el Perro adecuado

Características de un Perro de Guardia Efectivo

Un perro de guardia ideal es inteligente, alerta y confiable. Debe actuar independientemente y reaccionar
instintivamente mientras protege la majada. Investigará y confrontará agresivamente los intrusos, pero sobre
todas las cosas, debe estar atento a los ovinos y no dañarlos. Un perro que investigue y sea agresivo, es un
pequeño beneficio sino esta cerca de la majada. El perro debería ser sano físicamente y de buena conformación.
Debe ser libre de enfermedades genéticas serias.

Es importante entender la diferencia entre perros de guardia y de pastoreo. Los perros de pastoreo (Border
Collies, Kelpie Australiano, etc.) mueven las ovejas de un área a otra siguiendo, ladrando o empujando los
animales. Los perros de pastoreo trabajan de acuerdo con señales (verbales y visuales) de una persona, y
usualmente no quedan solos con los ovinos. Los perros de guardia usualmente no pastorean a las ovejas, son
desalentados de morder, ladrar o perseguir las ovejas y actúan de forma independiente de la gente.

Consideraciones

El comportamiento exhibido por un perro de guardia madura es el resultado de la herencia (factores genéticos)
y como el perro fue criado. Lo más importante son las experiencias del perro durante los primeros meses de
vida.

Generalmente hablando, los perros de guardia maduran lentamente. El Pastor de Anatolia y el Komondoro
parecen alcanzar un grado de comportamiento maduro entre los 18 y 30 meses de edad, mientras que el perro
de Montaña de los Pirineos parece madurar antes. Durante la maduración, las experiencias del perro cambian
fisiológicamente y comportamentalmente rápido. El perro joven puede mostrar deseos de actividades
juguetonas y parecer tener un comportamiento irracional. No se debe esperar que el comportamiento de un
cachorro o adolescente, sean similares a los de un experiente y maduro perro de guardia. Durante los primeros
meses con las ovejas, un perro adulto incurrirá en algunos errores.

Otra característica común en animales de guardia es la predisposición a comportamiento independientemente.

Algunas razas de perros han sido seleccionadas por su sensibilidad con el humano, pero las razas de guardia
han sido históricamente seleccionadas por su habilidad de actuar independientemente en su rol de guardia. Esta
característica los convierte en tercos y de baja respuesta frente a comandos verbales. Entrenamiento de
cachorro y familiarización con el que lo manejara puede ayudar a eliminar este problema en el perro adulto.

Un perro de guardia joven, responderá en varias formas frente a nueva estimulación y algunas respuestas
pueden ser problemáticas. Algunos pueden cazar vida animales salvajes (conejos, ciervos, etc.). Este
comportamiento debe ser desalentado, sí la cacería continúa más allá de un corto tiempo. Es difícil de
generalizar como cada perro responderá a cada nueva experiencia. Cada situación deberá ser evaluada por el
propietario y manejada apropiadamente.

Eligiendo la raza apropiada

Los estudios realizados en EEUU involucraron una serie de razas entre ellas: Maremmano, Pastor de Anatolia,
Pero de Montaña de los Pirineos, Komondoro, Perro Akbash y cruzamientos entre ellas. Existen otras razas con
historia de protección de animales como la Cubas de Hungría y Briard de Francia, pero sólo un número limitado
de estos animales están disponibles. También otras razas han sido utilizadas en el pasado, pero no es claro sí su
función primordial era la protección de los animales.

En 1986, la Universidad de Idazo, realizó una encuesta a aproximadamente 400 personas que utilizan perros de
guardia para el ganado, con información sobre 763 perros, donde el 95 % de ellos fueron reconocidos como de
razas de guardia. Los más comunes fueron los Perros de Montaña de los Pirineos (57%) y Komondoros (18%),
seguidos por Akbash (8%), Pastor de Anatolia (7%), Maremmanos (3%) y otros (7%). El grado de éxito de
entre las razas no fue diferente, pero diferencias en comportamiento fueron detectadas. Más Komondoros
mordieron personas versus Pastores de Anatolia, Akbash o perros de los Pirineos; y algunos de estos últimos
lastimaron ovejas versus los otros.

En un estudio reciente con perros de guardia jóvenes, los perros de Montaña de los Pirineos fueron rankeados
levemente mejor que los Anatolianos (83% de 59 de os Pirineos versus 38% de 26 Anatolianos), dado que estos
últimos tuvieron una tendencia superior a lastimar o matar los ovinos.

La mayoría de los perros en la encuesta de 1986 fueron agresivos con predadores y otros perros, sin embargo
los de Montaña de los Pirineos parecerían ser menos agresivos con otros perros que las otras razas. En estudios
anteriores, se observó una diferencia en la madurez en el comportamiento en los de los Pirineos en comparación
con los Komondoros; los primeros exhibieron a edades más tempranas comportamiento maduro y realizaron
menos frecuentemente comportamientos de cachorro. En un estudio posterior, trabajando con varias razas, los
Anatolianos presentaron una retraso en el comportamiento maduro similar a los Komodoros.

Algunas líneas de sangre de perros pueden probar ser mejores que otras, y habilidad de guardia varia entre
perros de una misma raza. No hay garantías que un perro será exitosos simplemente por ser de una raza o
líneas de sangre en particular. Aunque es concebible que ciertas razas o líneas son más adecuadas para
determinadas situaciones de guardia (pasturas, cielo abierto, etc.).

El perro a adquirir, debería ser de una raza reconocida como de guardia, de un origen conocido y reconocido. En
algunos casos, los perros se comercializan con garantía, la cual puede ser variable, llegando a ser con reemplazo
del animal sino es adecuado para el trabajo. Estas garantías son un beneficio, pero no absuelven la
responsabilidad del propietario de criar y cuidar adecuadamente al perro.

Evaluación de comportamiento

Sería un beneficio poder seleccionar al cachorro de la camada basado en aspectos claves de comportamiento y
tener cierta seguridad, que con una apropiada crianza el perro realizará un buen trabajo de guardia cuando
adulto. Una investigación determinó que el temperamento básico de un cachorro joven permanece con él a lo
largo de su vida y en general el temperamento puede ser determinado entre las 6 - 8 semanas de vida. Sin
embargo, también ha sido observado que el temperamento puede vacilar y ser inestable entre los 4-18 meses
de vida del animal.
Los cachorros de uno de los estudios, fueron observados periódicamente desde las 8 semanas hasta la edad de
madurez (20 a 30 meses de vida). Algunos puntos del comportamiento del cachorro merecen atención. Se
recomienda elegir un cachorro que no sea tímido, con confianza y alerta. Un cachorro debe ladrar como una
expresión de agresividad o sospecha pero no de miedo. Un perro que sea tímido con la gente puede mostrar
apropiada agresividad con los predadores y tener un vínculo fuerte con las ovejas, pero las opciones de éxito
son probablemente mayores con un cachorro que tenga confianza.

El comportamiento del cachorro se puede observar con y aparte de gente y sus hermanos. Un caso de una
hembra Akbash que era sumisa con la gente pero agresiva con otros perros y tenía afinidad con las ovejas; un
cachorro tímido puede no serlo al estar con otros perros.

Todos los perros exitosos en las investigaciones mostraron características positivas entre los primeros 3 a 8
meses de vida. Sin embargo, algunas características deben desarrollarse con la madurez, la mayoría de los
buenos perros de guardia prometen cuando jóvenes.

Macho o Hembra

En el estudio de 1986 de los 763 perros de guardia, no se registraron diferencias en la performance entre
machos y hembras. Realizar una elección en base al sexo del cachorro es un tema de preferencia personal. Sin
embargo, para evitar problemas de futuro, hay que considerar el sexo de los otros perros en el sistema de
producción. Sí los animales son castrados (neutered?), el género no es importante.

En el estudio no hubo diferencias entre en la performance de animales enteros versus castrados. Se recomienda
fuertemente castrar las hembras alrededor de los 6 meses de edad antes del primer estro y a los machos
entorno a los 9 meses. No hay evidencia que la castración sea detrimental en el trabajo de guardia. De hecho,
castrarlos sería más bien benéfico. Los períodos de estro de las perras pueden causar problemas. Perros
atraídos por la perra en celo, se podrían sumar al problema de predadores. Sí la hembra es encerrada durante
los celos, preñez, etc, no esta protegiendo a la majada. La castración puede ser beneficial para descender
comportamientos indeseables como el vagabundeo en machos y capaz que en hembras.

¿Cuántos perros?

Las características de cada sistema de producción dictaminará el número de perros requerido para la protección
efectiva contra los predadores. La performance de cada perro en forma individual diferirá. Hay experiencias de
perros pueden efectivamente patrullar cientos de hectáreas con cientos de ovejas, mientras que perros jóvenes
no cubren tanto territorio.

El tipo y número de predadores y la intensidad de la predación ayudan a dictaminar cuantos perros se

necesitan. Sí los predadores son escasos, un perro sería suficiente para la mayoría de los sistemas de
producción en pastura. Varios productores optan por dos perros, pero sí el predador es un oso Grizzly, incluso
varios perros no serán capaces de disuadirlo.

La topografía y el tipo de campo también deben ser considerados. Lugares relativamente planos, con áreas
limpias, pueden ser cubiertos adecuadamente con un perro. Cuando el campo posee arbustos, monte,
topografía quebrada, varios perros son necesarios, particularmente sí los animales se encuentran dispersos. Sin
embargo, algunos inconvenientes pueden existir al tener más de un perro en la majada.

El comportamiento del ovino también es importante en determinar la cantidad de perros necesaria. Ovinos que
se agrupan y forman una unidad cohesiva, especialmente en la noche (momento típico de predación), pueden
ser protegidos efectivamente con un perro versus majadas que continuamente están dispersas o tienen más de
un dormidero. Por ejemplo, en los estudios, un Komodoro joven protegió efectivamente 600 ovejas en 50 ha de
pastura. En otra situación un Komodoro joven fue incapaz de eliminar la predación en 600 borregos enteros en
64 ha. Los carneros jóvenes pastoreaban de forma dispersa, y el área tenía arbustos y rocas que proveen
cobertura para los coyotes. Un perro con experiencia y adulto podría haber protegido los carneros más
efectivamente, pero en esta situación, dos perros hubieran sido una opción más deseable.
En otra instancia, un perro de Montaña de los Pirineos de 7 meses eliminó efectivamente la predación en 250
ha, con 120 ovejas, en 4 parcelas con 30 cada una. El perro fue observado con cada grupo en diferentes
ocasiones. Más tarde, se utilizó en 448 ha, divididas en 7 parcelas con varios cientos de ovejas.

En un amplio rango de majadas (usualmente con 1000 ovejas y sus corderos), se ha reducido la predación con
un solo perro, en algunos casos se han usado 4 o más perros por majada. Sin embardo, se recomienda empezar
con un solo pero y adicionarle el segundo después de que el primero esta establecido. Una vez que el perro con
experiencia ha desarrollado un patrón de trabajo efectivo, se puede convertir en un modelo a seguir por un
perro no entrenado (previamente socializado con ovejas). El joven imitará al experiente y aprenderá la rutina de
protección.

En los estudios, parejas de perros exhibieron comportamientos complementarios. Uno de ellos era agresivo y
patrullaba rutinariamente un amplia área alrededor de las ovejas, mientras el segundo usualmente se mantenía
cerca de las ovejas y respondía agresivamente cuando la majada estaba directamente amenazada por un
predador. Es común que dos perros exhiban comportamientos complementarios de esta manera.

Agregar perros adicionales puede también generar problemas. Sí uno de los perros demuestra comportamientos
inapropiados, el segundo puede adoptarlos. Estos comportamientos pueden incluir agresividad con las ovejas,
baja atención a la majada, o itinerancia (¿roaming?), estos son los más comunes. Roaming puede ser más
común con muchos perros, y claramente puede ser un problema importante en muchas situaciones.
Entrenamiento y castración a edad temprana puede ayudar a reducir el roaming. Se recomienda que la primera
vez que se use un perro de guardia comenzar con un cachorro. La lectura y el estudio no pueden tomar el lugar
de la experiencia. Sí se necesitaran más perros, estos pueden ser agregados después.

Del cachorro al perro de guardia.

Crianza y socialización del perro.

La meta con un cachorro nuevo es canalizar sus instintos naturales para producir un perro de guardia maduro
con las características deseables. La mejora manera de alcanzar esto es con una asociación temprana y continua
con ovejas para producir el vínculo entre el perro y la oveja. La edad óptima para traer el cachorro al
establecimiento es entre las 7-8 semanas de vida.

El lugar ideal para criar un cachorro es en un corral o brete chico, desde el cual no pueda escapar. El cachorro
debe haber sido sacado recientemente de la camada y el contacto frecuente con humanos puede hacer que no
se quiera quedar con los corderos. Sí el cachorro es capaz de irse del área designada, la inclinación del animal a
escapar y volver a la perrera, casa o con la gente, puede hacerse progresivamente fuerte. Sí el cachorro no es
capaz de escapar, el vínculo con las ovejas puede desarrollarse más fácilmente.

El brete del cachorro no necesita ser mayor a 14m2. Sin embargo, un área mayo es deseable al crecer el
cahorro. El brete debería tener entre 3 a 6 ovinos, preferentemente corderos (guachos son ideales). Sí no hay
disponibilidad de corderos, escoger ovejas que no vayan a ser agresivas con el cachorro, por ejemplo, borregas.
Los ovinos pueden ser rotados en el corral, exponiendo al perro a un mayor número de animales, el cual vivirá
con ellos.

El cachorro deberá tener un espacio pequeño en el brete, en el cual pueda aislarse de las ovejas. Esta área
deberá tener la comida del perro y protección al clima (sí el brete es al aire libre) y puede ser separado del resto
del brete con paneles de madera, cuestión de que el perro pueda pasar pero no los ovinos. Es deseable tener el
agua en un área común para ambos (perro y ovinos), de forma que estén forzados a mezclarse.

El perro debe ser chequeado varias veces en el día, por los primeros días y luego al menos diariamente, de
forma de asegurarse que el perro encuentra la comida y el agua fácilmente y la interacción entre ambas
especias es apropiada. Sí un ovino es particularmente agresivo con el cachorro, deberá removerse y ser
reemplazada con otro ovino. Durante estos chequeos diarios es permitido acariciar al perro, pero debe evitarse
tocarlo demasiado. En estos días del proceso de socialización, el énfasis es en la asociación perro-ovino, la
asociación humano-perro debe ser minimizada.
La socialización en los perros es una fase del desarrollo durante la cual se forman rápidamente y fácilmente
vínculos emocionales permanentes. Información de un estudio sugiere que este proceso comienza a las 3
semanas, con su pico a las 6-8 semanas y desciende a las 12 semanas. Luego de las 12 semanas, la
socialización puede no ser conseguida nunca satisfactoriamente. Perros dejados en perreras luego de este
período pueden ser tímidos para siempre o pueden tener dificultades para ajustarse más adelante a cambios en
su ambiente.

Algunos criadores permiten que los cachorros con 4 semanas estén en compañía de ovinos jóvenes con buenos
resultados. El contacto físico entre el perro y el ovino incrementa la formación de un fuerte vínculo. La
separación de la camada luego de 7 semanas es deseable. El cachorro solitario busca la compañía del ovino y
también con ello se remueve la jerarquía de la camada. Para perros que han sido continuamente dominados por
sus hermanos, esta experiencia en solitario, los coloca al tope de la escala social y puede animar al desarrollo de
la confianza.

Algunos cachorros muestran un comportamiento de grupo, al estar en lotes de 3 o más. Un grupo usualmente
incluye a los ovinos en sus juegos, y puede resultar en orejas rasgadas, tirar de la lana o daños más severos. El
juego brusco es malo para los ovinos, y promueve un fuerte comportamiento indeseable. Este es un serio
problema potencial y debe ser monitoreado de cerca. Sin embargo, un poco de juego amigable puede ser
tolerado e incluso fortalecer el vínculo del perro con el ovino.

Sí el cachorro juega demasiado o comienza a ser agresivo con el ovino, deben tomarse severas medidas
correctivas. Los cachorros aprenden rápidamente a temprana edad, y un breve sacudón por el cuello y el
comando “NO” puede ser una reprimenda efectiva. Un jugueteo excesivo, a veces puede ser controlado
utilizando corderos más grandes, los cuales no toleran demasiado el comportamiento juguetón del cachorro. Sí
no se confía de dejar al perro con los ovinos, otra opción es separar al cachorro de los corderos y colocarlo en
un brete cercano. Esto debe ser tomado como una medida momentánea durando de algunos días a algunas
semanas. Durante este período, el cachorro puede estar con los ovinos bajo supervisión.

Luego del período inicial de socialización (el cachorro debería tener al menos 16 semanas de vida), el cachorro y
los ovinos con los que se crió, pueden colocarse en un área mayor o con el resto de la majada en un potrero.
Nuevamente, hay que monitorear este cambio para asegurarse de que las otras ovejas (no socializadas) no
lastimen al perro. El perro responderá a esta nueva libertad con entusiasmo y chequeará el nuevo territorio.
Probablemente, los alambrados del potrero no controlen al perro, y el mismo cruce los alambrados mientras
explora. Luego de un tiempo razonable, le perro siempre debe retornar a la majada. Sí no lo hace, el perro debe
ser traído de vuelta y animado a permanecer. Hay que repetir este proceso tan seguido como sea necesario. Sí
la socialización se realizó adecuadamente, el perro debería preferir estar en el área donde están las ovejas. Es
importante que el perro no tenga permitido merodear la casa, los niños, o ningún área donde no haya ovejas. Sí
el perro persiste en estar lejos de donde se supone que este, retornarlo a una pequeña área a prueba de escape
con ovinos por la noche y probar de nuevo al día siguiente.

Una vez que el perro tiene un fuerte vínculo con los ovinos y permanece con ellos rutinariamente, puede incluir
áreas periféricas en su exploración. Bajo determinadas circunstancias, un perro que pase las cercas y proteja un
área de contención será un guardián más efectivo que aquel que esta totalmente contenido en el potrero. En
algunos casos, el perro debe estar dentro del área cercada (áreas urbanizadas).

Mientras el perro madura, pueden haber cambios en su comportamiento con respecto a estar con las ovejas,
Algunos cachorros que no están en un potrero, pueden fácilmente permanecer en otro. Otros perros tienen
dificultades para adecuarse a los cambios constantes de pasturas. En los estudios realizados, algunos perros
ganaron interés en las ovejas y su cuidado repentinamente en el curso de su maduración, algunos cachorros
muestran un mejor sentido de la responsabilidad cuando fueron removidos de una pequeña área hacia potreros
más grandes con ovejas.

Entrenamiento y obediencia

Es importante, enseñarle cierta obediencia al perro. El perro debería entender que significa “NO” y debería dejar
de hacer lo que este haciendo cuando se da el comando. Usar este comando (o similar) cuando el animal este
realizando algo definitivamente equivocado o malo (ej: masticar un ovino, perseguir vehículos u ovinos, saltarle
a una persona). Usted quiere que el comando sea obedecido rápidamente, o sea no lo use negligentemente.

El perro también debería ser enseñado a venir cuando es llamado o al menos permanecer quieto donde esta
mientras usted va hacia él. Hay pocas cosas más molestas para usted y más peligrosas para el perro que no
poderlo agarrarlo cuando lo necesita. El mantenimiento de una apropiada salud y un apropiado manejo de la
majada dependen de la capacidad de poner sus manos sobre el perro cuando sea necesario. Sí usted espera
que el perro consistentemente responda al “Venga”, asegúrese que el animal recibe algo placentero cuando
obedece. No utilice el comando para que el perro venga hacia usted para poder retarlo por algo mal hecho. Sí
necesita retarlo, vaya hacia él y repréndalo.

Se recomienda que el perro sea enseñado a caminar con correa. Hay momentos que se necesita atar al perro,
usualmente temporalmente, mientras los ovinos son tropeados o cargados, o para mover al perro a otro
potrero. El perro siempre debería viajar en la parte trasera de la camioneta-vehículo.

Algunos propietarios enseñan a sus perros comandos adicionales. Sin embargo, es importante recordar que por
naturaleza los perros de guardia son independientes y estarán sin supervisión humana la mayoría de su vida de
trabajo. Aunque, puedan ser obedientes al entrenamiento, es cuestionable el valor de enseñar comandos que
tienen baja utilidad para el perro durante su trabajo. Excesiva o innecesaria obediencia puede tender a
fortalecer el vínculo perro-humano y cortar el vínculo perro-ovino.

Algunos propietarios enseñan a sus perros a no obedecer. Parecería ser un error, al menos usted debería ser
capaz de agarrar a su perro.

Varios métodos para enseñar obediencia pueden proveer resultados satisfactorios. Varios puntos son
significativos. Los dueños deberían ser consistentes y decisivos cuando dan una orden y deberían esperar una
respuesta consistente del perro. Los perros son elogiados por comportamientos correctos, y más allá de una
reprimenda física o verbal al cachorro por algo incorrecto, el elogio es lo que retienen. Este enfoque positivo a
menudo consigue deseables resultados y se evitará la posibilidad de causar que el cachorro se convierta en un
animal tímido o miedoso a la gente. Algunos perros no se toman bien castigos duros. Correcciones apropiadas
no causarán que el cachorro más subordinado llegue a ser tímido mientras que el cachorro sea alabado más que
retado.

En algunas instancias una reprimenda verbal no es suficiente para conseguir la atención del perro. Un golpe
suave con periódico arrollado puede ser adecuado. La idea es tener la atención del perro, no lastimarlo. Una vez
que la corrección es dada, el perro deberá mostrar el comportamiento correcto y deseado, luego elógielo cuando
responda apropiadamente. El dueño debería asegurarse una experiencia agradable (cuando un elogio es dado)
siga a una reprimenda.

Un concepto importante para corregir comportamientos no deseados ha sido revelado en varios estudios. Sí el
castigo va a ser efectivo, debe ser dado con segundos luego del comportamiento erróneo. Reprimendas dadas
horas o minutos después del mal comportamiento son sin sentido para el perro. También, el castigo debe ser
dado con un nivel de enojo elevado para detener inmediatamente el comportamiento ofensivo. El entrenamiento
debería continuar hasta que el perro madure, pero la necesidad de entrenamiento formal persiste solamente
mientras sea necesario.

El comportamiento de guardia es en gran parte instintivo. Sería difícil entrenar a un perro sin el instinto de
guardia para realizar algunas tareas necesarias como patrullaje, etc. Sin embargo, los perros necesitarán
dirección en su desarrollo y necesitarán ser enseñados a que, cuando y donde ellos serán guardias.

El perro de guardia es un animal de trabajo y debe ser tratado como tal. No es una mascota, y realizar esta
distinción al principio es importante. Un dueño de un perro dijo: “todo lo que tienes que hacer es querer al perro
y el cuidará todo lo que sea tuyo”. Es cierto que un perro de guardia, prodigado con la atención humana, se
convertirá en muy protector con su dueño y las propiedades de su dueño. Y sí las ovejas estuvieran en el patio
de la casa, las protegerá tanto como a los niños, el auto y la casa. Pero sí las ovejas se mantienen a distancia de
la casa del dueño, será difícil mantener al perro con las ovejas porque el sabe que puede conseguir atención
humana donde esta su dueño, y esto frecuentemente es en la casa.

¿Cuánto afecto humano se le debe dar a un perro de guardia? Si el perro reconoce como alabanza una
palmadita en la cabeza y la frase “Buen perro”, trabajará para conseguir esa alabanza. No darle más atención no
debe considerarse cruel o antipático. Los perros se confunden cuando han tenido permitido estar en la casa
como una mascota y luego de repente son colocados en un potrero con ovinos y se espera que se queden ahí.

Interacciones Perro-Ovino

La mayoría de los cachorros son sumisos hacia los corderos, particularmente durante sus primeros encuentros.
Más adelante, como los cachorros y los corderos se acostumbran uno al otro, algunos cachorros solicitan juegos
desde los corderos. Algunos corderos responden separándose o retozando con los cachorros.

Algunos perros muestran mucho interés en los corderos nuevos y pasan muchos minutos lamiéndolos,
especialmente en la cara, orejas y región urogenital. Este comportamiento maternal del perro puede fortalecer
el vínculo entre el perro y el ovino.

La edad del perro y la eficacia en la guardia

En la mayoría de los casos no hay disponibles perros de guardia efectivos, maduros y con experiencia. Aunque
hay excepciones, la mayoría de los que tienen interés en uno, compran un perro de guardia como un cachorro
sin experiencia y están obligados a asistirlos en la dirección de su desarrollo.

Cuando el perro alcanza cierto nivel de madurez, comienza a mostrar comportamientos territoriales y
proteccionistas contra los predadores que amenazan la majada. Este nivel de madurez puede variar, no hay una
edad predeterminada para esperar que un perro adolescente se convierta en un efectivo guardián.

Hay varios criterios que pueden indicar la preparación del perro para asumir su rol de guardián. Los siguientes
comportamientos tienden a incrementarse en frecuencia cuando la madurez para la guardia es alcanzada:
1. los perros machos (y algunas veces las hembras) orinan levantando la pata en lugar de en cuclillas,
2. marcar la zona (orina y heces) se convierte en más deliberado y las marcas son concentradas cerca del
perímetro del potrero,
3. ladrar frente a nuevos estímulos se convierte en algo predecible y orientado,
4. están activos más frecuentemente y por períodos más largos,
5. empiezan a estar más interesados en las ovejas que en el dueño,
6. actividades de patrullaje deliberadas se incrementan en frecuencia y duración.

Los perros exhiben bastante de estos comportamientos tan jóvenes como a los 4.5 meses de edad. Sin
embargo, antes de colocar a un cachorro donde las pérdidas ovinas son altas por predadores, el debería haber
alcanzado un cierto nivel de madurez física. Este nivel es difícil de definir específicamente, pero el perro al
menos debería ser tan grande como para defenderse por sí mismo si se enfrenta con un predador.

Mientras el perro toma más experiencia, puede mostrar ciertos comportamientos (ladrar, marcar, y patrullar)
más o menos seguido, dependiendo de varios factores. Sí los predadores están cerca frecuentemente, el perro
marcará y patrullará más que sí ellos no estuvieran. Mientras el perro se va familiarizando con el área y las
actividades normales en ella, los ladridos al azar pueden ocurrir menos frecuentemente. Algunos perros dejan
(seldom) de ladrar.

Los perros de guardia exitosos, tienen una apropiada mezcla de madurez física y comportamental, combinada
con experiencia con ovinos. El perro puede responder de manera incierta o incluso con miedo durante su primer
encuentro con un predador. En uno de los estudios, un coyote persiguió a un perro de guardia maduro
físicamente que tenía tres veces su tamaño. Durante la primera experiencia con el coyote, el perro exhibió
comportamiento inmaduro y huyó. Al otro día el perro persiguió al coyote y continuo haciéndolo durante los
siguientes encuentros. Otros perros pueden haber reaccionado diferente en esta situación, pero la experiencia
es necesaria para todos los perros exitosos.
En la mayoría de las situaciones, se recomienda poner al cachorro con las ovejas que ha sido criado con el resto
de la majada, tan pronto el perro sea capaz de físicamente continuar y defenderse de los predadores. El error
en este punto, es usualmente por no poner al perro lo suficientemente temprano con las ovejas.

Rutina diaria y comportamiento

¿El dueño de un perro, cómo debería esperar que el perro se comporte durante un período de 24 horas?
Algunas personas, se sorprenden que un perro que aparentemente duerme la mayoría del tiempo, pueda ser
aún efectivo como guardián. Algunos perros guardianes, especialmente los inmaduros, parece que pasan un
gran parte del tiempo durmiendo.

Sí los ovinos están activos, el perro puede también estar activo. Sin embargo, los perros no necesariamente
están con los ovinos constantemente. El perro puede dormir durante el día mientras el ovino come, o el perro
puede estar lejos del ovino investigando áreas adyacentes. Con experiencia, el perro aprenderá cuando los
disturbios por predadores pueden ocurrir (tarde en el día o a tempranas horas de la mañana) y estará
patrullando activamente o alerta en lugares especiales. El perro seguido dormirá con los ovinos pero usualmente
se despertará rápido ante cualquier disturbio. Algunos ovinos parecen aprender a retornar con el perro cuando
están amenazados por un predador.

Respuesta del perro frente a malas experiencias

Algunas condiciones pueden causar que incluso un perro efectivo deje a los ovinos o de otra manera
temporalmente interrumpa sus comportamientos de guardia. Tormentas con lluvia intensa o lluvias continuas
por uno o más días han resultado en perros que dejan a los ovinos y retornan a la casa. Este problema puede
ser menos probable que ocurra en pasturas donde el perro puede refugiarse durante las lluvias. En sistemas
donde no hay refugios, el perro puede dejar los ovinos en busca de un lugar seco.

Se ha observado un bajo porcentaje de perros que abandonan los ovinos por truenos u otros sonidos fuertes
como armas de fuego. Algunos perros tímidos al sonido se familiarizan con los mismos con el tiempo, pero otros
pueden continuar dejando los ovinos a pesar de sus experiencias con sonidos aterradores.

Nivel de contacto con humanos

Hay un nivel apropiado de contacto del humano con el perro de guardia, pero varía con el temperamento del
perro. El perro debería ser visitado diariamente en la pastura. Sí la comida no se provee en un comedero de
auto consumo, se le puede dar cada día al perro (se recomienda comederos de auto consumo). La visita diaria
puede proveer la oportunidad de observar la salud del perro y brevemente alabarlo por haberse quedado con los
ovinos.

Cuando el perro madura, menos contacto con humanos es requerido. Buenas prácticas de manejo, sin embargo,
dictan que la majada y el perro deben ser regularmente visitados.

Muy poco contacto con humanos puede causar que el perro sea tímido o miedoso a la gente. Estos perros son
difíciles de examinar físicamente y de controlar. No pueden ser movidos a otras pasturas o potreros y no pueden
ser encerrados. Algunos perros con este tipo de temperamento son guardianes efectivos y pueden encajar en
algunos sistemas de producción. Sin embargo, es esencial ser capaces de manejar y trabajar con un perro de
guardia.

Perros de guardia durante la parición

¿Qué se debería realizar con un perro de guardia nuevo durante la parición? No hay reglas definitivas para
seguir, pero algunas sugerencias pueden ser de ayuda.

La oveja es más defensiva y susceptible a stress durante la parición que en cualquier otro momento del año. Los
juegos y actitudes de un cachorro o perro inmaduro podrían ser negativos antes, durante e inmediatamente
después de la parición. Por lo tanto, perros jóvenes, no deberían generalmente estar en contacto con las ovejas
pero podrían estar en áreas adyacentes.

Una vez que la parición ha finalizado y se ha puesto a las ovejas y los corderos mezclados en un corral y se han
juntado las piezas de cría, introduzca al perro joven bajo supervisión humana. LOs corderos se acostumbrarán
rápidamente al perro, y las ovejas aprenderán que la presencia del perro no es una amenaza. Sí el perro actúa
calmo, puede ser dejado con las ovejas por períodos largos con las ovejas hasta que quede con ellas
permanentemente. Se debe tener cuidado y asegurarse que el perro joven no cometerá errores. En esto, como
en otras situaciones, prevenir el problema es mejor que encontrar la cura.

Una vez que el perro experimenta una temporada de parición y prueba que se comportara adecuadamente, se
le podría permitir libre acceso a toda la operación de parición. Ha sido reportado, que algunos perros tienen un
gran interés en la parición, protegen los corderos de inclemencias climáticas, e incluso asisten a las ovejas a
limpiar los recién nacidos. El dueño debe decidir cuanta libertad se le dará al perro en este momento. Incluso
perros probados pueden cometer errores.

¿El perro debería tener permitido comer luego del parto y corte de colas o comer ovinos muertos? La mayoría de
los perros comerán los remanentes del parto y las colas. Esto no hace que el animal se incline a matar ovejas,
pero podría bajar su efectividad porque algunos perros son muy posesivos con los animales muertos. Donde sea
práctico, se recomienda remover las carcasas y no permitirle al perro de guardia que se alimente de ellas. Hay
peligros potenciales para la salud, por parásitos y bacterias, asociados con perros que comen carcasas,
particularmente aquellas que han muerto por enfermedad. Incluso, la presencia de carcasas ovinas podría atraer
a los predadores.

Interacciones entre el perro de guardia y el perro pastor

Los perros pastores son una parte integral de la mayoría de los trabajos con ovinos. ¿Pueden los perros de
trabajo y guardia coexistir, y sí pueden, cuál es su relación?

Generalmente, ambos tipos de perro son capaces de trabajar en el mismo sistema. Ambos animales deberían
estar familiarizados cada uno con el otro, pero se debe desalentar a que jueguen juntos. El perro de pastor
permanece con el Pastor y trabaja en su dirección. Vínculos sociales entre ambos perros podrían causar el perro
de guardia deje a los ovinos y siga al humano.

El perro de guardia debe haber aprendido que su rol es distinto que el del perro pastor. Un perro de guardia
inmaduro podría intentar imitar a un perro pastor moviendo las ovejas. Esto no debe ser permitido. Un perro de
guardia juvenil puede interferir con uno de trabajo y algunas veces debe ser frenado (atado). Mientras el perro
de guardia madura, el debe aprender que hay momentos que el perro de trabajo esta a cargo (cuando las
ovejas son movidas), pero que el asume la posición dominante en otros momentos. Breves peleas pueden
resultar de juntarlos mientras aprenden sus respectivos roles. En raras ocasiones, los perros pueden ser
incompatibles y el cambiarlos será la opción.

Muchas personas se preguntan sí las ovejas continuarán respondiendo a un perro de trabajo, una vez que están
acostumbradas a la presencia de un perro de guardia. Las ovejas reconocen a cada perro y responden de
acuerdo con el comportamiento de cada perro. Por esa razón, ellas aprenden a ignorar al perro de guardia que
se aproxima a la majada silenciosamente, pero se agruparán y correrán de un perro que las caza.

En varios establecimientos se pueden encontrar perros que no trabajan y no son controlados. Estos perros
pueden presentar problemas con un cachorro de guardia que esta siendo entrenado para proteger una majada.
Son una fuente de distracción y peor aún pueden involucrar al cachorro en aprender comportamientos
inapropiados. En algunas instancias, se debe hacer una elección entre criar un buen perro de guardia y tener
cachorros sin control.

Manejo de perros en sistemas extensivos y con empotreramiento

Las prácticas de manejo en sistemas con o sin potreros difieren y afectan el concepto general de usar perros de
guardia. En sistemas con empotreramiento hay límites cercados que proveen un territorio claro y definido para
defender por el perro. Son pocas las posibilidades que los ovinos se pierdan en los potreros, por lo que un
pastor de tiempo completo no es necesario.

En sistemas más extensivos, es raro encontrar alambrados, y un pastor atiende la majada, quién controla el
pastoreo y provee cierto grado de protección frente a los predadores. El perro en estos sistemas, debe aprender
a identificar al ovino y que toda nueva área que ellos ocupan es un territorio a defender. El perro se debe
adaptar las nuevas áreas que el pastor implemente en sus planes de pastoreo, y que estará sin supervisión la
mayoría del tiempo, este comportamiento no debería causar que la majada scatter (¿).

Consideraciones en sistemas con alambrados

Más del 80 % de las personas que crían ovinos en Estados Unidos mantienen a sus majadas en pasturas
cercadas durante todo el año o parte de él. Esto representa más de la mitad del stock. Está predicho que el
mayor crecimiento en la industria ovina vendrá de los sistemas ovinos no extensivos. Aunque, en estos sistemas
las pérdidas por predadores son menores que en sistemas extensivos, el resultado de las pérdidas puede ser
severo. El uso de perros para proteger el ganado en sistemas cercados es una técnica realizable y actualmente
está siendo utilizada exitosamente por cientos de productores.

La mayor preocupación de muchos usuarios de perros de guardia en un momento u otro es como conseguir que
el perro permanezca con las ovejas en las pasturas. Como se estableció en la sección Crianza y socialización del
perro, un manejo correcto del cachorro puede eliminar muchos problemas potenciales. Es vital colocar
inmediatamente al cachorro nuevo con o cerca de las ovejas lejos de la casa y la gente. Sí el perro desarrolla un
vínculo fuerte con las ovejas desde el principio, se podrían necesitar con poca frecuencia medidas correctivas
mientras el perro madura.

Sí el cachorro o el perro recientemente adquirido requiere estímulo adicional después de la socialización para
mantenerse en el área, las siguientes técnicas pueden ser efectivas. Cuando se introduce al perro en un potrero
desconocido, colocar la casilla y el comedero del perro en el lugar. También incluir algún objeto familiar al perro.
Una persona debe entonces caminar con el perro (con correa sí es necesario) alrededor del perímetro. Esta
actividad debe ser repetida diariamente hasta que el perro aprenda el área. La mayoría de los perros son
entusiastas cuando exploran nuevos terrenos y marcarán el área durante la actividad de patrullaje. El perro
inicialmente debe ser dejado sólo con las ovejas en la pastura por cortos períodos de tiempo (una a varias
horas), pero el tiempo debe ser progresivamente extendido a períodos más largos. El perro debe ser chequeado
frecuentemente y ser recompensado cuando se mantiene en la pastura. El perro debe ser retornado
prontamente cada vez que se vaya y no debe ser rezongado hasta que él sepa claramente que se espera que
haga.

Una orden apropiada (“Queda” o algo parecido) puede ser dada al perro cuando se lo es dejado en la pastura.
Un productor gritaba “Ovejas” y perseguía su perro de vuelta hacia la majada cada vez que se distanciaba muy
lejos de ellas. Se requiere paciencia, así como en la mayoría de las fases de trabajo con perros de guardia
jóvenes. Un dueño de Komondor exitosos, dijo, puede tomar más de un año para ver que ciertos aspectos del
entrenamiento son efectivos. Sin embargo, algunos aspectos positivos deben ser evidentes más temprano.

Sí los repetidos esfuerzos de mantener al perro en la pastura fallan, algunos otros métodos pueden ser
intentados. El perro puede ser encadenado en el área cercana a su casa, comida, agua (y preferiblemente a las
ovejas) por determinados períodos de tiempo. Estos períodos pueden ser tan cortos o largos como sea necesario
y variaran en cada situación. Algunos dueños han atado la correa en una cadena (o alambre) al collar del perro.
Esto permite al perro moverse en la pastura pero previene que él se vaya de la pastura.

Otra técnica ha sido utilizada para estimular al perro a permanecer en el área designada. Sí el perro se va de la
pastura y retorna a la casa principal, es inmediatamente enjaulado con relativa aislación desde uno a varios
días. Luego se lo retorna a la pastura. La repetición de este proceso ha sido exitosa en desestimular a varios
perros en retornar a la casa principal.
Algunos perros se irán de la pastura designada por cortos períodos de tiempo para explorar y luego retornar. Sí
no hay conflictos con los campos vecinos o casas, el perro puede ser más efectivo como guardián, sí puede
patrullar el área entorno a la parcela creando una zona buffer para repeler predadores. Incluso, puede ser
deseable que el perro sea capaz de traspasar los límites de la parcela.

La mayoría de los cachorros pasan a través o por debajo de las cercas, mientras que los perros adultos
usualmente saltan cercas tan altas como 1.80 m. Depende de cada perro y las necesidades particulares, los
perros pueden ser entrenados para saltar cercas o pasarlas a través. En algunas situaciones, lo mejor para el
perro puede ser permanecer en la parcela, especialmente sí rutas transitadas están cercanas o vecinos que
maltraten a los perros que traspasen. Estas situaciones pueden ser comunes en zonas urbanizadas.

Perro en situaciones extensivas

Los ovinos en situaciones extensivas usualmente sufren mayor exposición a los predadores versus sistemas
intensivos. Números crecientes de personas están utilizando perros de guardia para proteger ovinos en
extensividad porque algunos métodos para reducir la predación en sistemas intensivos son inefectivos o
imprácticos en sistemas extensivos.

Planificación es la llave para el éxito en el uso de perros de guardia en sistemas extensivos. Varios meses se
requieren para socializar y preparar a un cachorro para uso extensivo. Un tiempo apropiado para colocar a un
Gran Pirineo en un sistema extensivo es entre 4 a 6 meses de edad. Por lo tanto, un productor debe conseguir
un cachorro de 7 a 8 semanas, 2 a 4 meses antes de colocarlo en la majada. Otras razas que maduran más
lentamente pueden no estar listas para estar con la majada tan temprano como los Grandes Pirineos. El factor
clave es cuando el perro actúa calmadamente con las ovejas. Grandes extensiones no son un lugar para un
perro que quiere jugar continuamente.

Un momento ideal para colocar al perro con ovejas de sistemas extensivos es cuando las ovejas se encuentran
confinadas en pasturas o áreas cercadas. Los productores pueden incorporar al perro en la majada enseguida
después de la parición cuando la majada principal esta formada. Sin embargo, cualquier período de
confinamiento de una semana o más puede ser usado. Durante este período la persona puede conseguir
conocer al perro y enfatizar los comandos “No” y “Venga”, discutidos previamente. Este período también
permitirá a la persona observar cómo el perro y las ovejas interactúan antes de ir a grandes espacios.

Algunos problemas experimentados por productores que usan perros de guardia con ovejas en sistemas
extensivos resultan de que las ovejas son asustadas por el perro. En un área pequeña, las ovejas no pueden
escapar del perro y comienzan a acostumbrarse a su presencia mientras ellas aprenden que él no las dañara. En
sistemas extensivos, ovinos no acostumbrados al perro responden corriendo de él cada vez que él intenta
aproximarse. Repetidos intentos por el perro de aproximarse a las ovejas dispersan la majada. El perro puede
comenzar a desalentarse y eventualmente ignorar las ovejas.

Es importante que los ovinos estén acostumbrados a la presencia y actividad del perro de guardia antes de dejar
la parcela (esto puede tomar desde una semana a seis). Este es uno de los pasos más importantes al integrar a
un perro exitosamente en una operación extensiva.

Algunas operaciones ovinas sólo mantienen a los animales extensivamente, y eso puede hacer que la
incorporación de un perro de guardia en la majada sea difícil. El ovino debe aprender a aceptar la presencia del
perro sin el beneficio de una pequeña área. En esta situación, es esencial que el perro sea controlable y
permanezca clamo con los ovinos. La actitud y habilidad de la persona juega un rol importante en el éxito o
fracaso del proceso. El temperamento del perro y de los ovinos y el tipo de terreno a ser pastoreado son otros
factores que deben ser considerados.

Una característica exhibida por un perro ideal de guardia es el deseo de permanecer con o cerca de la majada
la mayoría del tiempo. Sin embargo, este comportamiento usualmente necesita ser reforzado por el pastor. No
se le debe permitir al perro de guardia vagabundear o dormir en torno a los campos. El perro debe ser
enseñado y estimulado a estar con los ovinos todo el tiempo. Alimentar al perro cerca de las ovejas en lugar del
campamento ayudará con este esfuerzo. La descripción de un perro de guardia maduro incluye la regla que el
perro continuamente acompaña a los ovinos.

Cada situación es única en algunos aspectos, y puede haber algunas instancias que la predación puede
disminuir incluso sí el perro rutinariamente deja a los ovinos. Un pastor regularmente ata al perro de guardia
joven en el campamento durante el día y se liberará cada atardecer. El perro fue atado porque sigue al pastor
en las rondas del día, al atardecer el perro esta tan cansado para patrullar que pasa la noche durmiento. Atarlo
fuerza al perro a descansar durante las horas de menos depredación. El perro tendrá pocos deseos de estar en
el campamento cuando es liberado y patrullará activamente durante la noche. El perro normalmente podrá ser
encontrado cerca de las ovejas a la mañana siguiente.

Encierre de perros durante el invierno (nieve)

Al principio de los estudios de la investigación en EEUU, existía preocupación de los posibles efectos adversos de
encerrar en jaulas a los perros por períodos prolongados durante el invierno cuando las ovejas están en el feed
lot. En los estudios, se utilizaban más de 10 perros a la vez, era impráctico darles libre acceso a los corrales de
los ovinos. Otros productores ovinos que tienen uno o dos perros, probablemente liberarían los perros la
mayoría del tiempo. Sin embargo, si el encierre se considera apropiado, lo siguiente puede ser de interés.

Se especular que largos períodos relativos del perro lejos de las ovejas, probablemente resulte en un detrimento
o pérdida del vínculo del perro y el ovino. Diez años de experiencia con esta situación ha revelado que, para la
mayoría de los perros, el vínculo con los ovinos permanece o puede incluso ser intensificado con períodos de
separación. El período de aislamiento en el encierro aparece estimulando el deseo y entusiasmo del perro por la
libertad de estar con los ovinos. Siempre sin excepción, cuando se libera el perro después de haber estado
apartado de los ovinos por cualquier período de tiempo, rápidamente busca el olor y se arrastra en dirección a
los ovinos. El vínculo entre el perro y la oveja es establecido como cachorro es criado con corderos y aparece
aguantado incluso cuando el perro es separado de las ovejas por más de 6 meses.

Transferibilidad

Sí el perro es correctamente socializado con las ovejas, hay una alta probabilidad que sea exitoso en cuidar
ovinos en una variedad de condiciones. Como que el perro puede ser mudado de un área a otra, incluso con
personas extrañas y sus alrededores, y su vínculo con los ovinos ayudarán a hacer una transferencia exitosa. En
condiciones pequeñas de producción dónde los ovinos no son removidos lejos del casco principal y la gente, el
vínculo del perro con la oveja puede no necesitar ser tan fuerte para que el éxito sea realizado.

Aunque se ha observado que transferir perros de una situación a otra es práctico, el éxito del perro es
estimulado mientras se familiariza con el particular set de condiciones. Sí el perro es mudado a una situación
que contiene animales no familiares (gansos, por ej.), puede inicialmente reaccionar agresivamente a ellos.

Responsabilidades del propietario

Bienestar de las personas y el perro

Ser dueño de un perro de guardia implica ciertas responsabilidades. Las razas de guardia tradicionales son
grandes, poderosas y protectoras con el territorio percibido. Este territorio debería primariamente incluir la
majada a ser cuidada., pero puede incluir también la casa del dueño, parque y miembros de la familia,
particularmente sí el perro tiene permitido el acceso a estas áreas durante el proceso de crianza.

¿Qué tan probable es que un perro de guardia muerda a alguien? Depende mucho de dónde el perro pasa su
tiempo, y también en diferencias raciales. En la encuesta de 763 perros de guardia de ganado, 7 % de los
perros habían mordido personas (17% de los Komondoros, 9 % de los pastores de Anatolia, 6% de los perros
Akbash y 4 % de los Perros de los Pirineos). Algunos perros muestran característica más agresivas o protectoras
que otros, y es responsabilidad de los dueños de proteger personas que pueden estar en riesgo. Vecinos y
visitantes deben ser alertados, y si fuera necesario señales u otras advertencias apropiadas deben ser colocadas.
El perro de guardia probablemente incluirá áreas aledañas en su patrullaje. Esta actividad debe ser
desestimulada. Vecinos deben estar alertas del hecho que el perro puede ingresar a sus territorios y que algunos
dispositivos de control de predadores presentan peligro para el perro (trampas, rifles, etc.). Muchos países
hacen cumplir leyes rigurosas con respecto a la responsabilidad del dueño del daño hecho por perros
vagabundeando. Es interés del dueño, de la comunidad y del perro, entrenar al perro para que esté en su área
designada.

Perros usados con pastor o sin él en sistemas extensivos, pueden vagabundear a veces. Bajo estas
circunstancias, el vagabundo puede ser una baja amenaza para la seguridad y la propiedad. Sin embargo, un
perro vagabundo provee poco o ninguna protección sobre el ganado que se supone que debe cuidar.

Salud y cuidado del Perro

Adquirir un perro de guardia representa un inversión significante. El valor del perro aumenta al madurar y ser
entrenado. Un perro maduro exitoso no es fácilmente o rápidamente reemplazable. Una preocupación apropiada
de la salud y bienestar es una consideración importante.

Consulte a un veterinario para mantener las vacunaciones al día y por recomendaciones sobre parásitos. Los
criadores deben haberle administrado vacunas de cachorro y a veces medicación para parásitos. Los nuevos
dueños deben periódicamente chequear los dientes por debilidad y mordida apropiada, y los canales auditivos
deben permanecer libres de porras (pelo amontonado). Examine al perro rutinariamente por cortes, abscesos,
conformación de huesos y desarrollo muscular. Cualquier cambio en el comportamiento, hábitos de
alimentación, etc, debe ser investigado inmediatamente. Problemas serios de salud pueden desarrollarse en
perros que pertenecen incluso al más consciente y experimentado.

El pelaje del perro de guardia puede requerir atención. El pelaje del Komodoro por ejemplo, debe ser esquilado
o arreglado cuando el perro madura. Muchos dueños de Komodoros prefieren esquilarlos cada primavera dado
que el arreglo del pelaje es trabajoso. Otras razas de pelo largo como los Grandes Pirineos también necesitan
cuidado en el pelaje. Las matas y mugre deben ser removidas periódicamente, especialmente alrededor de las
colas y orejas. En climas húmedos y templados, un pelaje descuidado puede generar infecciones en la piel.
Nuevamente, la esquila es una opción para resolver problemas crónicos de en la piel o pelaje.

Los perros de guardia pueden pesar 100 libras o más, y particularmente como cachorros necesitan apropiada
nutrición. Generalmente, comida seca de alta calidad cumplirá con los requerimientos. Sin embargo,
suplementos como los recomendados por los veterinarios, son usados algunas veces. Aunque los cachorros en
crecimiento requieren grandes cantidades de comida, sólo comen entre 2 a 4 libras de comida diaria una vez
que completan su crecimiento.

Los perros de guardia gastan una gran monto de energía patrullando e investigando. La comida debe estar
disponible o no se puede esperar que cumpla la función apropiadamente. Comederos de auto consumo son
usados seguido para perros trabajando en pasturas. Una barrera es construida alrededor del comedero para
prevenir que las ovejas coman la comida del perro. Sí no se toma esta precaución, los ovinos rápidamente
vaciarán el comedero, y consecuentemente, el perro puede tener hambre por varios días. Sí esto ocurre
repetidamente, el perro puede comenzar a ser posesivo con la comida y gastará tiempo cuidando el área de
comida. Con un pastor, el mismo tiene la responsabilidad de darle comida al perro al menos una vez al día.

Los perros de guardia son animales fuertes, y usualmente no usan casilla o techo incluso ante inclemencias
climáticas. Ellos generalmente prefieren dormir a cielo abierto donde pueden fácilmente observar el entorno.
Sin embargo, alguna forma de protección debe ser provista para los perros en las pasturas. Algunos perros
respetan su casa y el área perimetral como su territorio. La casa del perro puede servir como punto de contacto
con el perro y estimular la tendencia de permanecer en esa área. El uso de protección para el perro en
operaciones de trashumancia donde las ovejas se mueven continuamente usualmente no son prácticas.

Seguridad del perro

Aunque un perro de guardia puede proveer más de 10 años de servicio productivo, hay una chance razonable
de que muera prematuramente. Durante los 5 años de estudio en EEUU, 32% de los perros murieron antes de
alcanzar la madurez. Las casusa mayores de muerte fueron las siguientes: golpeados por vehículos (23%),
disparos (23%), problemas de salud (18%), accidentes en el campo (9%), otras (27%). La mortalidad desde el
nacimiento a los 4 años de vida fue 41%. En otro estudio, 50% de los perros murieron para los 18 meses de
edad, mientras que el 50% en sistemas más intensivos fueron muertos para los 38 meses de edad (incluye
refugos).

Estas estadísticas muestran que los perros de guardia de ganado son susceptibles a numerosos peligros,
algunos de ellos están bajo el control del propietario. Un poco de planificación y algo de preparación puede
ayudar a evitar accidentes y fuera de tiempo muerte del perro. El dueño debe: alertar a los vecinos que el perro
puede estar en su propiedad y agendar su ayuda para prevenir vagabundeo, señalizar la presencia del perro,
evitar el perro en rutas, este alerta de la presencia de trampas, veneno y tomar precauciones, no poner al perro
con cercas que pueden generar peligro para él, transportarlo con cuidado.

La muerte prematura de un buen perro de guardia puede ser una pérdida significante para un productor que
confía fuertemente en él. Adicionalmente a la pérdida primaria de un recurso de protección, el productor debe
gastar dinero y tiempo para conseguir, criar y entrenar a un nuevo perro. Algunos productores que dependen
del perro para el control de depredación deberían considerar un segundo perro como resguardo ante la
posibilidad de la muerte del primero. Esta opción debe ser examinada desde un punto de vista práctico y
económico para cada situación.

Crianza de perros por el productor

Algunos de los perros más solicitados para ser usados en la protección del ganado, son aquellos criados por
productores de ovinos. Varias personas además de los productores les gustaría saber más de qué tipo de perro
es preferible y cuales características debe tener un buen perro de guardia. Sin embargo, relativamente pocos
productores tienen el tiempo, la inclinación y las facilidades para criar perros, especialmente perros que
requieren especial cuidado y consideración.

La crianza apropiada de una camada de cachorros y la venta de ellos a los compradores apropiados para el
momento que ellos tienen 8 semanas no es una tarea sencilla. Usualmente, varios cachorros no son vendidos
por varios meses y sí no son puestos con ovejas durante ese tiempo, los cachorros están más allá del punto que
es sencillo ser socializados con las ovejas. La crianza de perros debe realizarse sólo después cuidadosas
consideraciones, investigación y un compromiso definido con el bienestar de los animales.

Consideraciones económicas

La rentabilidad de usar perros de guardia es dependiente de un número de factores, incluyendo la tasa anual de
depredación, la habilidad y longevidad del perro, el costo de comprarlo y mantenerlo. Los precios de compra
varían de acuerdo con la edad del perro, la raza, la línea de sangre, el criador y otros factores. Para el estudio
se compraron 100 perros entre 7 y 8 semanas de edad de varias razas entre 1987 y 1988. Los cachorros venían
de varios criadores a lo largo de los EEUU, y el precio promedio incluyendo traslado fue 443 U$S por perro. Los
perros de los Pirineos fueron los más fácilmente adquiribles, y usualmente son más baratos que otras razas. Sin
embargo, al final, el precio de compra es probablemente una de los factores menos importantes en la
rentabilidad de usar un perro de guardia.

En 1983, 70 productores que usaban perros de guardia fueron encuestados. El costo promedio del primer año,
incluyendo, alimento, sanidad, traslados, mantención, y daños causados por el perro fue 834 U$S. Los gastos
promedio anuales subsecuentes fueron 286 U$S. Los productores reportaron un promedio de 9 horas/mes de
cuidado del perro, y un 89% de los productores consideraron a los perros como un activo económico. 27 de 37
productores estimaron un ahorro anual desde 180 a 14487 U$S y 10 de 37 estimaron pérdidas entre 95 a 3405
U$S.
En la encuesta de 1986 sobre 400 productores con perros de guardia, 82 % reportó que el uso de los perros
representó un activo económico. 9% dijo que los perros fueron una inversión de equilibrio, y un 9% consideró
una pérdida económica.

Claramente, los perros que son efectivos y tienen una larga vida representan un valor económico significativo.
Algunos productores han identificado la paz mental como un beneficio. Aunque, la paz mental no es capaz un
beneficio tangible, es uno con un poco de valor intrínseco.

Beneficios y Problemas

Durante la investigación, se identificaron los siguientes potenciales beneficios por usar perros de guardia:
• Reducción de la depredación
• Menos trabajo (sin encierros nocturnos, etc.)
• Uso más eficiente de las pasturas y mejoras de los animales
• Mayor área pastoreable por ovinos
• Posibilidad de incrementar el tamaño de la majada
• Mejora en la rentabilidad potencial
• Perros alertan de depredadores
• Incremento de la confianza en manejar problemas de predadores
• Protección a la familia y la propiedad
• Paz mental

Aunque la mayoría de los perros que son criados para proteger ovinos son al final exitosos, hay problemas
potenciales durante el período adolescente, así como también problemas que pueden desarrollarse en un perro
con experiencia. Algunos problemas son considerados menores por los productores, otros son serios.

Se identificaron los siguientes problemas potenciales:

• Ovinos heridos por perros, por juego usualmente, resultando en daño o muerte
• Perros que no protegen
• Agresividad del perro para con la gente
• Perros que dañan otros animales
• Tiempo gastado en entrenamiento y supervisión
• Objetos destruidos (mascado, etc)
• Problemas con vecinos
• Gasto económico sin garantía de éxito
• Interferencia del perro para trabajar con ovinos o con perros de trabajo
• Perro interfiere con otras actividades de control de depredación

La depredación puede ocurrir incluso con perros de guardia en el trabajo. Cuando esto suceda, el productor
prudente primero confirma sí el perro está involucrado en la matanza. Sospechar del perro hasta que sea claro
que él no esté en falta. En el estudio, 14% lastimaron o mataron ovinos.

Es poco probable que una persona experimente todos los problemas potenciales o beneficios de usar un perro
de guardia. Para la mayoría, el beneficio de reducir la depredación es suficiente y para algunos otros un solo
problema puede ser demasiado.

Efectividad contra varios depredadores

La mayoría de los estudios y experiencias con perros de guardia han focalizado en la habilidad del perro para
reducir la depredación por coyotes y perros domésticos, los dos principales depredadores de EEUU. Coyotes,
aproximadamente con un tamaño de 1/3 del tamaño adulto de un perro, usualmente evita el encuentro directo
con un perro de guardia, y como el estudio indica, el 95 % de los perros de guardia fueron agresivos con los
depredadores, primariamente coyotes. Algunos de los perros de guardia fueron agresivos con perros domésticos
(74%), pero los encuentros entre los perros de guardia y perros intrusos usualmente difieren de aquellos entre
los perros de guardia y los coyotes. La mayoría de los coyotes evitan la confrontación, perros intrusos pueden
gastar tiempo olfateando y estando alrededor del perro de guardia. Peleas pueden ocurrir, pero es más probable
que el perro intruso se vaya después de un período de investigación breve. Al final el resultado es usualmente
igual, no depredación. Sin embargo, algunos perros de guardia, particularmente inmaduros, pueden estar
quietos mientras un perro intruso lastima los ovinos. Ocasionalmente, perros de guardia se han unido a los
perros intrusos y lastimaron o mataron ovinos.

Los zorros responden a los perros de guardia como la mayoría de los coyotes, evitando confrontarse y
manteniéndose a distancia de la majada. Varios encuentros entre lobos y perros han sido documentadas, pero
los resultados no son muy predecibles. Algunos lobos evitan o pasan de largo el área ocupada por el perro,
otros investigan y “posture” como descripto, y otros luchan con los perros. Los lobos están probablemente
frustrados por la presencia del perro más que intimidados por él.

Se ha recolectado información sobre encuentros entre perros y osos. En un encuentro típico con un oso negro,
el perro ladrará repetidamente y se aproximará a confrontar al oso. El oso responderá usualmente alejándose
del perro. Usualmente no habrá contacto físico entre el perro y el oso, y el perro continuar persiguiendo al oso
varios metros o hasta que el oso este alejado de los ovinos. El perro retornará con los ovinos después del
encuentro. Aunque la muestra de encuentros con osos grises es chica, sugiere que los osos grises serán menos
repelidos que los con osos negros.

Hay poca información que describe la relación entre los perros de guardia y los depredadores felinos como
pumas y felinos. Intuitivamente, es predecible que el pequeño lince evite el área ocupada con un perro de
guardia. Los pumas son conocidos como depredadores de perros y no evitarán el contacto con el perro. En
algunas áreas donde las ovejas son criadas, la depredación por felinos es mínima o específica. La presencia de
depredadores felinos deben ser consideradas en la selección y el lugar del perro en el campo.

Manejo integral para el ganado y los depredadores

Un manejo apropiado del rodeo juega un rol en minimizar el riesgo de la depredación. Muchos productores
aplican uno o más de los siguientes manejos: encierre nocturno de ovinos, luces en corrales, mantener los
ovinos cerca de los lugares habitados, parideras, inspección rutinaria del ganado, remover animales muertos,
limpieza de las coberturas naturales adyacentes a las pasturas, y evitan el pastoreo de animales jóvenes en
pasturas con historia de depredación. Algunas de estas actividades pueden no ser prácticas algunos
productores. Tienen poca aplicación en sistemas de trashumancia. Confinamiento no garantiza la completa
protección.

Para manejar la depredación, una variedad de métodos de control deben estar disponibles dado que no hay un
método de control de depredación efectivo para todos los productores. Aquellos que son exitosos, usan un
enfoque integral, combinando buenas prácticas de manejo con cercas eléctricas, perros de guardia, perros
pastores, trampas, caza, o dispositivos mecánicos y son lo suficientemente flexibles para usar la combinación de
métodos que solucione el problema.

El uso de los perros de guardia no elimina el uso de otros métodos de control. Es importante, sin embargo, que
las técnicas de control utilizadas en combinación con el perro de guardia sean compatibles con el
comportamiento del perro. Tóxicos usados en el control de especies plagas pueden ser extremadamente dañinas
para el perro y más aún no compatibles de usarse en áreas donde el perro está trabajando.

Los perros que han estado atados pueden verse condicionados a no pelear sí accidentalmente son atrapados en
una trampa para coyotes o zorros. De todas formas, perros atrapados por trampas de acero para predadores
son raramente heridos. Sin embargo, ambos dispositivos pueden ser fatales sí no son encontrados y liberados
en un período razonable de tiempo. Sí las trampas son usadas donde los perros están trabajando, el productor
debe conocer dónde están las trampas para chequear sí el perro esta desaparecido. Esto requiere cooperación y
comunicación entre el productor y el cazador. Los productores deben saber que asegurarse la seguridad del
perro es su responsabilidad. La caza área, el llamado y caza de coyotes no debería presentar ninguna amenaza
para los perros.
Los perros deben ser vistos como la primera línea de defensa contra los predadores en muchos sistemas. Su
efectividad puede ser estimulada con buen manejo del ganado y con persistencia en la eliminación de los
depredadores usando técnicas adecuadas.