1 MUJER OH!
DIANA SURIEL NÚÑEZ
diana.suriel@listindiario.com
Mala con “La Mala”
Mi amiga Rose se levanta y se acuesta
escuchando a La Mala… Exageré un
poco, pero es que realmente la rapera
española Mala Rodríguez ocupa un lugar
de suma importancia en su iTunes. Escucha
las canciones, vuelve y las repite, las baila, las
repite una vez más y ya hasta “rapea”. De verdad
he quedado sorprendida con su nuevo talento
adquirido gracias a esta artista que también a mi
ha comenzado a hipnotizarme. María Rodríguez
(su nombre real) es única. Siempre hemos
alabado el hecho de que el género femenino
ocupe posiciones antes consideradas sólo para
ellos, superándolos en muchas ocasiones. Nos
hemos visto triunfar como profesionales exitosas
capaces de liderar desde un país hasta el hogar
más humilde, superando todas las expectativas.
Que una mujer triunfe en un mundo liderado
por hombres como el del hip hop me hace
aplaudir, mucho más en el caso de quien para
mí es la protagonista de la columna de hoy. Ver
a una mujer “rapear” no es cosa común, y mucho
menos es verla haciéndolo con confianza y
determinada a derrumbar todos los parámetros.
Ella sube al escenario,
El cabello negro y largo,
tacones, un vestido y letras
potentes la acompañan.
Orquidea Santos
Mujeres como ella le dan poder al género.
Cádiz la vio nacer un 13 de febrero de 1979,
Sevilla la vio crecer y también influenció su
mundo de ideas, llenándola de creatividad de
forma tal, que terminó por expresar todo eso
al mundo de una manera considerada poco
convencional para una chiquilla.
LAS LETRAS DE LA MALA SON FUERTES,
decididas, claras, sin redondeos van al grano.
Expresan realidades tangibles, problemas
sociales y su alma de poeta se deja sentir cuando
fluye el poderoso parafraseo que marca la
diferencia. Su apodo surge por la crudeza con
la que comenzó a expresarse con sus letras. La
dureza poco a poco fue tomando formas sinuosas
a medida que La Mala comenzó a convertirse en
mujer, evolucionando mental y espiritualmente.
Entonces, su lírica comenzó a percibirse más
femenina, a veces traviesa… Pero ella sigue
siendo Mala, y así prefiere que la conozcan.
LA MALA RODRÍGUEZ ES UNA MUJER
físicamente bella, reconoce con la moda la
importancia de expresar la personalidad por
medio de su look, es audaz, determinada,
auténtica, fuerte, expresiva, creativa, exitosa y
diferente. Un decálogo de cualidades admirables,
lo de diferente es lo que más admiro y celebro.
Una mujer capaz y sin miedo de expresar su
Fotomontaje:
individualidad es poderosa. Por eso, gracias a
la frase que ya populariza mi amiga Rose, yo
me declaro “mala con La Mala”. Admiro a las
mujeres, a la gente en sentido general, que se
atreve a ser quien es y punto. Me encanta y
aplaudo a quien tiene el valor de salir ante el
mundo sin nada que ocultar, sin un “personaje”
ensayado. Admiro a la gente sincera, que decide
“no seguirle el coro” a la hipocresía. Admiro a
la gente que no siente complejos al ser y pensar
diferente, que no tiene necesidad de fingir
realidades inexistentes, a la gente que tiene las
agallas de expresarse, de decir lo que piensa y
que es capaz de poner los puntos sobre las íes
sin faltar el respeto.
POR ESTA RAZÓN LA MALA SE HA
convertido en una de mis grandes favoritas.
No niego que el hecho de tener una amiga que
no se cansa de repetir sus canciones mientras
conversas con ella en la sala de su casa ha
influido, pero el encanto llega de verdad cuando
meditas esas letras impactantes, cuando
escuchas con atención lo que esa voz femenina
y sin complejos tiene que expresar. Si no la
han escuchado ingresen a su página:www.
malarodriguez.com. Escuchen, mediten, déjense
llevar y aplaudan el talento de una mujer que
habla muy claro y lo hace de una manera única.
QUIZÁS LOS INSPIRE Y DESATE POCO A
poco esos brazos que de buenas a primeras se
han quedado cruzados aceptando “lo que hay”.
Quizás dentro de poco también se declaren
ustedes “malos con la mala”, lo importante
aquí es que esta mujer nos puede servir de
motivación para hablar ante el mundo con una
voz propia, que no se deja arropar por el miedo.
Eso es La Mala Rodríguez, agradezco a Rose
que me la presentase, ella ahora expresa su
contagio rapeando y buscando su propia voz, yo
solo escucho. Gracias a ella he quedado “mala
con la mala”.