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Universidad nacional de

Cajamarca
Facultad de derecho y ciencias políticas
Escuela Académico Profesional De
Derecho

Interpretación de los artículos (130-136) de la Constitución Política del


Perú.

ASIGNATURA: Derecho Constitucional Peruano II

DOCENTE: Pedro Cerdán Urbina

ALUMNOS: Castrejón Aguilar, Sergio


Llamoctanta Huamán, Henrry
Machuca Abanto, José Luis
Malimba Miranda, Milton
Zabaleta Vásquez, Jerry Danilo
Z CICLO: V

Cajamarca, Octubre del 2017


CAPÍTULO VI.

DE LAS RELACIONES CON EL PODER LEGISLATIVO.

Artículo 130. - Exposición de la política general del gobierno y cuestión de confianza


Dentro de los treinta días de haber asumido sus funciones, el presidente del Consejo
concurre al Congreso, en compañía de los demás ministros, para exponer y debatir
la política general del gobierno y las principales medidas que requiere su gestión.
Plantea al efecto cuestión de confianza.

Si el Congreso no está reunido, el presidente de la República convoca a legislatura


extraordinaria.

El propósito de este art culo consiste en que el Gabinete ministerial nombrado por
el Presidente de la Republica debata con el Congreso y obtenga su confianza para poder
gobernar. La investidura es facultad y es acto Como facultad es el re conocimiento de la
capacidad y competencia constitucional que tiene el Parlamento para participar en el
proceso de formar y controlar al gobierno Como acto esa a vez el procedimiento la
decisión y el documento a través de los cuales y en los cuales queda constancia del trámite
y del sentido en el que ejercita a facultad de investir. La investidura es la facultad de la
Asamblea para comprometer su apoyo a un Gabinete a base de la confianza que ella le
otorga para que ejecute un programa político durante su mandato Su fin es fundar el
gobierno con la confianza del Parlamento.

Qué tipo de acto es la investidura Es una declaración unilateral de conocimiento


de voluntad y de deseo del Parlamento. Es un acto de dirección (indirizzo) en cuanto con
la investidura o la no investidura del Gabinete además de formar el gobierno
(Regierungsbildung) se define la orientación política del país y sus principales políticas
públicas. Es también un acto de control que el Parlamento ejercita frente al gobierno
(Regierungskontrolle) El Parlamento debe escuchar debe conocer que orientación
propone para el país el Gabinete escogido por el Presidente de la República Pero el
Parlamento nos lo escucha pasivamente Su participación es activa. (Correa, 1999)

En el Reglamento del Congreso observamos que el acto de investidura del


Presidente del Consejo de Ministros consta de cuatro etapas:

1. El Primer Ministro entrega una copia de su exposición a cada uno de los


parlamentarios.
2. Al terminar de leer su programa, el Primer Ministro debe plantear una cuestión
de confianza.

3. Una vez planteada la cuestión de confianza, d reglamento establece que será


debatida y votada en la misma sesión o en la siguiente. El resultado de la votación,
firmado por el Presidente del Parlamento y uno de los vicepresidentes, será
comunicado por escrito al Jefe de Estado.

4. Si el Pleno extiende la confianza el Primer Ministro quedará investido, pero si


la negara el Presidente de la República deberá aceptar la renuncia del Gabinete.
El voto de no confianza en un presidencialismo tiene un efecto indirecto a
diferencia de los modelos parlamentaristas, ya que está dirigido a desaprobar la
política del Presidente de la República.

El segundo párrafo establece que el Presidente de la Republica convoca a


legislatura extraordinaria si cuando el Consejo de Ministros debe presentarse no está en
sesiones el Pleno del Congreso. El Consejo de Ministros no puede ir exclusivamente a la
comisión permanente por la trascendencia de la reunión y por el hecho de requerir
cuestión de confianza tendrá que haber legislatura extraordinaria como hemos visto antes
estas legislaturas son convocadas por el Presidente de la República. (Gutierrez, 2005)

INTERPELACIÓN DE MINISTROS.

Artículo 131. - Es obligatoria la concurrencia del Consejo de Ministros, o de


cualquiera de los ministros, cuando el Congreso los llama para interpelarlos.

La interpelación se formula por escrito. Debe ser presentada por no menos de quince
por ciento del número legal de congresistas. Para su admisión, se requiere el voto
del tercio del número de representantes hábiles; la votación se efectúa
indefectiblemente en la siguiente sesión.

El Congreso señala día y hora para que los ministros contesten la interpelación. Esta
no puede realizarse ni votarse antes del tercer día de su admisión ni después del
décimo.

La primera parte del artículo trata del voto de censura o de la no aprobación de la


cuestión de confianza que el Congreso decide contra el Consejo de Ministros en pleno o
contra uno o más ministros individualmente.
El voto de censura hace efectiva la responsabilidad política y es una sanción de
naturaleza también política que el Congreso impone al Ministro o al Consejo de Ministros
porque está en desacuerdo con su línea o con alguna decisión tomada por el o por algún
evento ocurrido dentro de su sector y sobre el cual se le atribuye responsabilidad. (Correa,
1999)

Las interpelaciones son un instrumento de control de los parlamentarismos, por lo


tanto, nos encontramos ante otra institución importada. Con las interpelaciones no se
piden datos o información sobre algún asunto, se cuestiona más bien un aspecto general
de la política del Gobierno o algún ministerio en concreto. A diferencia de lo que ocurre
con las preguntas, las interpelaciones concitan mejor el interés de la opinión pública y de
los medios de comunicación. Sin embargo, las interpelaciones también adolecen de
ciertos elementos que la hacen poco provechosa. El procedimiento de tramitación de las
interpelaciones se desarrolla de acuerdo con las siguientes reglas:

1. La petición de interpelación se formula por escrito mediante una moción


firmada por no menos del 15% del número legal de parlamentarios dieciocho
miembros y acompañada de la lista de preguntas dirigidas al gabinete o ministro,
más conocida como pliego interpelatorio. El pedido de interpelación tiene
preferencia en el Congreso, por lo tanto, es vista antes que cualquier otra moción
que se encuentre pendiente.

2. Para la admisión de la moción de interpelación se requiere el voto de por lo


menos el tercio de parlamentarios, es decir, cuarenta miembros.

3. La votación se efectúa en la sesión siguiente al debate de admisión. En todo


caso, la interpelación no puede realizarse ni votarse antes del tercer día posterior
a su admisión ni después del décimo. Un término establecido para que el gabinete,
o el ministro, prepare sus respuestas y disminuir la tensión política a la
interpelación.

Cuando concurra el Gabinete para ser interpelado, el Primer Ministro puede hacer
uso de la palabra hasta un tiempo máximo de sesenta minutos y cada uno de los ministros
por espacio no mayor a quince minutos. Los parlamentarios intervendrán por sus
respectivos grupos, o en forma individual, según las reglas especiales que acuerde el
Consejo Directivo. Para dar respuesta al pliego interpelatorio el Primer Ministro podrá
contestar sin límite dentro de lo razonable. En cambio, los ministros podrán contestar las
preguntas del pliego según el tiempo máximo que les concederá la Mesa Directiva. Los
ministros pueden conceder interrupciones por no más de dos minutos, previa autorización
de la Mesa Directiva. Terminada su intervención, los miembros del Gabinete podrán
retirarse en cualquier momento del hemiciclo.

La presencia de las interpelaciones también es ajena a un modelo presidencialista


porque se contradice con el principio de separación tajante de poderes que inspira a esa
forma de gobierno. Si bien es una institución que se aplica, en principio, consideramos
que no deberían figurar en un modelo presidencialista porque los ministros no responden
de sus actos al legislativo; además que la combinación de instituciones de una forma de
gobierno a otra trae como consecuencia que los instrumentos de control se conviertan en
un paso anterior para exigir la responsabilidad política. Consideramos que las
interpelaciones no nacieron para vincularlas a la moción de censura, pues de otro modo
se transforma la finalidad de una institución de control e información, que no tiene como
principal objetivo la posterior destitución del ministro o gabinete. (Gutierrez, 2005)

VOTO DE CENSURA Y RECHAZO DE LA CUESTIÓN DE CONFIANZA.

Artículo 132. - El Congreso hace efectiva la responsabilidad política del Consejo de


Ministros, o de los ministros por separado, mediante el voto de censura o el rechazo
de la cuestión de confianza. Esta última solo se plantea por iniciativa ministerial.
Toda moción de censura contra el Consejo de Ministros, o contra cualquiera de los
ministros, debe ser presentada por no menos del veinticinco por ciento del número
legal de congresistas. Se debate y vota entre el cuarto y el décimo día natural después
de su presentación. Su aprobación requiere del voto de más de la mitad del número
legal de miembros del Congreso. El Consejo de Ministros, o el ministro censurado,
debe renunciar.

El Presidente de la República acepta la dimisión dentro de las setenta y dos horas


siguientes.

La desaprobación de una iniciativa ministerial no obliga al ministro a dimitir, salvo


que haya hecho cuestión de confianza de la aprobación.

La cuestión de con fianza es un instrumento que tiene el Poder Ejecutivo paz


presionar políticamente al Congreso cuando existe un enfrentamiento entre ellos y
dejándole sólo dos alternativas: o el Congreso acepta las proposiciones del Ejecutivo y
abdica de las suyas o no acepta la cuestión de confianza y genera la crisis ministerial.

Este art culo autoriza al Presidente del Consejo de Ministros a plantear cuestión
de confianza al Congreso en nombre del Consejo es decir que pone al Congreso en la
situación de aceptar lo pedido por el Ejecutivo o dejar al país sin gabinete ministerial.

Son los instrumentos que el Derecho Constitucional moderno acepta como válidos
y civilizados para solucionar los conflictos de fondo La democracia no es ausencia de
conflicto sino canalización del mismo por cauces civilizados de lucha y de solución. La
cuestión de confianza es un asunto de lucha, pero una lucha bastante pacífica y que llevará
una solución incruenta, dentro del sistema democrático mismo aunque, definitivamente
al termino de ella habrá un vencedor y un derrotado. (Correa, 1999)

Artículo 133:

“El Presidente del Consejo de Ministros puede plantear ante el Congreso una
cuestión de confianza a nombre del Consejo. Si la confianza le es rehusada, o si es
censurado, o si renuncia o es removido por el Presidente de la República, se produce
la crisis total del gabinete”.

El Presidente del Consejo de Ministros tiene la facultad de plantear el voto de


confianza a nombre del consejo, la finalidad de esta acción es crear una relación fiduciaria
entre el Ejecutivo y el Legislativo (reafirmar la política del gobierno ante la opinión
pública) , la confianza se deberá hacer por escrito ante el Consejo Directivo o el Pleno
del Congreso; el reglamento del Congreso no establece una formalidad que debe contener
el escrito que contiene el pedido de confianza, solo establece que el Concejo Directivo
tiene la obligación de convocar al parlamento en pleno para debatir y votar la cuestión de
confianza.

El voto de confianza que plantea el Primer Ministro a nombre del Gabinete será
debatido y votado en la misma sesión o en la próxima según lo acuerde el Consejo
Directivo o en el acto el Pleno del Congreso. El resultado de la votación será comunicado
de inmediato al Presidente de la República mediante oficio firmado por el Presidente del
Congreso y uno de los vicepresidentes.

Una vez renovada la confianza se dispone a continuar la política del Gobierno ya


sometida a la aprobación del Parlamento, si la cuestión de confianza es denegada se abrirá
un proceso orientado a buscar una salida a la crisis y cuyas etapas subsiguientes son: la
dimisión del Gabinete y la designación de un nuevo Primer Ministro y una tercera
consecuencia sería que el presidente de la República disuelva el congreso, si es que el
parlamento a censurado o denegado la confianza a los dos gabinetes.

ARTÍCULO. 136.

Si las elecciones no se efectúan dentro del plazo señalado, el congreso disuelto se


reúne de pleno derecho, recobra sus facultades, y destituye al consejo de Ministros.
Ninguno de los miembros de éste puede ser nombrado nuevamente ministro durante
el resto del período presidencial.

El congreso extraordinariamente así elegido sustituye al anterior, incluida la


Comisión Permanente, y completa el período constitucional del congreso disuelto.

Los antecedentes de la norma que contemplamos se hallan en el artículo 228 de la


constitución de 1979:

“Artículo 228. El decreto de disolución expresa la causa que la motiva. Incluye


la convocatoria a elecciones en el plazo perentorio de treinta días, de acuerdo
con la ley electoral en vigor al tiempo de la disolución. Si el presidente no cumple
con llamar a elecciones dentro del plazo señalado o las elecciones no se efectúan,
la cámara disuelta se reúne de pleno derecho, recobra sus facultades
constitucionales y cesa el consejo de Ministros, sin que ninguno de sus miembros
pueda ser nominado nuevamente para ministerio alguno durante el período
presidencial. La cámara elegida extraordinariamente completa el período
constitucional de la disuelta”.

El artículo 136 de la constitución política de 1993 reproduce las normas


contenidas en los párrafos segundo y tercero del artículo 228 de la Constitución de 1979,
realizando solo los cambios que hacía indispensables el unicameralismo.

Análisis

Tenemos dos normas que corresponden a dos hipótesis de hecho distintas:

El primer párrafo regula el caso en que las elecciones para elegir al Congreso que
sustituya al disuelto no se realizan en el pleno plazo que establece el artículo 134,
o en el menor que señale el Decreto de disolución que contiene la convocatoria.
Entonces, el Congreso disuelto se reúne y vuelve a existir plenamente. El consejo
de ministros es destituido con las prohibiciones de nombramiento que se indican.
(Correa, 1999)

Las normas que comentamos tienen por finalidad evitar que, bajo la forma de una
disolución de Congreso y la postergación de la fecha de elección del nuevo, se instaure
en realidad una tiranía, bajo la excusa de una ausencia de plazos terminantes. Hay que
recordar que la finalidad de la disolución es que se produzca una nueva elección de
inmediato, en la que el pueblo respalde a una de las disposiciones contendientes: o al
Ejecutivo que disolvió al Congreso dándole mayoría en el nuevo a elegir, o la mayoría
del congreso disuelto, con lo que caerá el Consejo de Ministros según el artículo 135. Lo
que no puede ocurrir es que se disuelva el congreso y no se realicen las elecciones para
el nuevo, porque eso sería trastocar totalmente el sentido de la institución y darle un uso
abiertamente inconstitucional y antidemocrático.

El segundo párrafo se pone en la hipótesis de que, disuelto el congreso, se hayan


producido las elecciones y exista ya un nuevo congreso en funciones. Las reglas
son que sustituye al anterior, incluida la Comisión Permanente que había
subsistido durante el periodo que transcurre entre la disolución y la instalación del
nuevo congreso según el tercer párrafo del artículo 134, y los nuevos congresistas
no asumen un mandato de cinco años, sino que contemplan el que corresponde a
los del congreso disuelto. De esta manera, se mantendrá el principio de que las
elecciones ordinarias para el presidente de la República y para Congreso, se
realizan simultáneamente cada cinco años. Esta decisión es correcta, porque
siempre es deseable por razón de equilibrio político, que la renovación electoral
de Ejecutivo y Legislativo se haga en el mismo momento (más allá de que,
eventualmente, se acepte una elección para renovación parcial del congreso en
algún momento intermedio del mandato. Esto, que se anunció como proyecto
antes de aprobar esta Constitución, fue finalmente descartado por la mayoría del
congreso Constituyente, aunque, en sí mismo, es un buen mecanismo de
participación electoral del pueblo).

Consideramos que, por técnica legislativa, hubiera sido bueno separar estas dos
normas en sendos artículos, de manera que no haya la impresión de que se trata la misma
hipótesis cuando se hace una revisión somera del texto.
El artículo bajo comentario contempla la sanción para el caso de que no se
efectúen las elecciones para el nuevo Congreso que automáticamente se convoca en la
hipótesis de disolución.

En su segunda parte, dispone que el nuevo congreso sustituye al anterior, incluida


la Comisión Permanente y completa el período constitucional.

Bibliografía

Correa, M. R. (1999). Estudio de la constitución política de 1993. Lima: Fondo Editorial.

Gutierrez, W. (2005). La Constitución Comentada. Lima: Gaceta Jurídica.

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