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𝟏 𝟏
𝟏 × 𝟏𝟎−𝟕 𝑻𝟏.𝟕𝟓 √𝑴 + 𝑴 𝒎𝟐
𝑨 𝑩
𝓓𝑨𝑩 = 𝟐
[ ]
𝟑 𝟑
𝑷 ∙ (√∑ 𝒗 + √∑ 𝒗 ) 𝒔
𝑨 𝑩
Donde:
−7 1 1
𝑇11.75 1 × 10 √𝑀𝐴 + 𝑀𝐵
𝒟𝐴𝐵 1 = ∙ 2
𝑃1 3 3
(√∑ 𝑣𝐴 + √∑ 𝑣𝐵 )
−7 1 1
𝑇21.75 1 × 10 √𝑀𝐴 + 𝑀𝐵
𝒟𝐴𝐵 2 = ∙ 2
𝑃2 3 3
(√∑ 𝑣𝐴 + √∑ 𝑣𝐵 )
𝑇11.75
𝒟𝐴𝐵 1 𝑃1
= 1.75
𝒟𝐴𝐵 2 𝑇2
𝑃2
𝒟𝐴𝐵 1 𝑃2 𝑇11.75
=
𝒟𝐴𝐵 2 𝑃1 𝑇21.75
𝓓𝑨𝑩 𝟏 𝑷𝟐 𝑻𝟏 𝟏.𝟕𝟓
= ( )
𝓓𝑨𝑩 𝟐 𝑷𝟏 𝑻𝟐
Además de que hallar el valor del coeficiente de difusión en fase gaseosa con la fórmula antes
señalada, se dispone de tablas (Tabla J.1. Binary Mass Diffusivities in Gases) en las que, dado el
medio gaseoso en el que la sustancia se difunde, se ubica el valor de 𝓓𝑨𝑩 𝑷 para una
temperatura determinada.
Una vez que se obtiene el valor de 𝓓𝑨𝑩 𝑷 de la tabla, se divide el dato para la presión a la que
se desea calcular el coeficiente de difusión. Ahora, como dicho valor de 𝓓𝑨𝑩 𝑷 está dado para
una temperatura determinada, dada en la misma tabla, se debe corregirlo con la ecuación:
𝓓𝑨𝑩 𝟏 𝑻𝟏 𝟏.𝟕𝟓
=( )
𝓓𝑨𝑩 𝟐 𝑻𝟐
Entonces, se observa que la ventaja de las tablas es que permiten obtener el coeficiente de
difusión directamente, sin la necesidad de una fórmula complicada en la que hay que tener
mucho cuidado con las unidades y los exponentes. Sin embargo, si existen sistemas que no se
presenten en la tabla, entonces sí se debe aplicar la ecuación.