Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
COMERCIAL
II
Conocimiento
de Embarque
I
DEDICATORIA
pág. 1
INDICE
pág. 2
INTRODUCCION
pág. 3
ANTECEDENTES DE LA INDIGNIDA
Pese a todo, serán los compiladores justinianeos quienes reúnan y agrupen los
diversos supuestos de indignidad surgidos hasta entonces, dando a ésta figura
pág. 4
una entidad y autonomía muy distinta a la que había tenido hasta entonces. Se
puede ver como en el Corpus Iuris Civiles lo referente a la indignidad aparece
recogido en el Digesto y en el Códex.
pág. 5
propios y a los de la mujer que vivieran bajo el mismo techo en el momento
de la muerte del causante, a fin de descubrir el culpable. El
senadoconsulto prohibía al heredero la apertura del testamento y la
aceptación de la herencia o la petición de la bonorum possessio, para
evitar así que los esclavos manumitidos en el testamento pudieran ser
torturados. El heredero que incumplía esta disposición devenía indigno.
pág. 6
que en la presunta voluntad del causante, si bien éste puede evitar los efectos
que establece la ley para la indignidad mediante la rehabilitación. No es, pues,
una cuestión de capacidad, como erróneamente lo califica el artículo 756: son
incapaces de suceder por causa de indignidad.
Es una pena privada, una sanción que surge como reacción del ordenamiento
jurídico ante la conducta, moralmente reprobable del indigno, tratándose por
tanto de un tipo de sanción sui generis en nuestro derecho
FUNDAMENTOS:
pág. 7
DOCTRINA DE LA INDIGNIDAD
Define a la indignidad como «... una sanción pena civil, dictada por autoridad
judicial competente, a pedido de los interesados, que tiene por objeto excluir al
indigno de la sucesión, y que se traduce prácticamente por la caducidad del
derecho hereditario» (GATTI, 1950:16).
«La indignidad crea prohibiciones para suceder. El indigno podría ser heredero
o legatario, pero debido a que ha cometido ciertos hechos es excluido de la
herencia por la ley, siempre que ésta sea invocada por los otros herederos o por
quienes van a ser herederos en sustitución del indigno» 1975, Tomo I: 46). El
indicado jurista concluye que «la indignidad, en sustancia, constituye una
imposibilidad jurídica de suceder», 1975, Tomo I: 50).
LANATTA
Lanatta agrega que «para que la indignidad funcione como causal de exclusión
se requiere: uno Que el sucesor haya incurrido en cualquiera de las causales
pág. 8
que la ley señala taxativamente; dos Que la acción no esté prescrita; tres Que
alguno de los otros sucesores promueva la correspondiente acción judicial y
pruebe los hechos que constituyen la indignidad, y cuatro Que ésta sea
declarada por sentencia firme» (Lanatta, 1981, Tomo I: 263).
RAMÍREZ FUERTES
Los bienes de la herencia que deja de adquirir el indigno son recogidos por los
demás herederos, cuando no se da la representación sucesoria.
pág. 9
CAUSALES DE LA INDIGNIDAD
El art. 667 del C.C, en 5 incisos regula las causales de indignidad, cuando con
mejor técnica legislativa, depurada redacción, tales causales se puedan reducir
a lo mas a 2 inciso uno que comprenda eventos penales y otro ilícitos civiles.
No existe explicación alguna del porque se ha regulado en los inciso 1, 3, 4 y 5
los eventos penales típicos cuando los mismos pudieron haberse regulado
dentro del tipo general que consigna el inciso 2 del art. 667 del C.C.
pág. 10
Lo expuesto llevar sostener que a redactar la causales de indignidad en la forma
como se las ha hecho, se ha incurrido en error de técnica legislativa que debe
ser superada.
El C.C del 84 consigna como causales por las que proceda la declaración de
indignidad las siguientes:
pág. 11
a.3. la última parte del inciso en comentario regula que la causal de indignidad
no desaparece por él, indulto ni por la prescripción de la pena.
De conformidad a lo dispuesto por el inciso del artículo 233 de la de
constitución política del estado nadie puede ser condenado en ausencia, de
donde resulta que habrá autores, cómplices y hasta instigadores que pretendan
enervar la acción de la justicia, con su eventual desaparición impidiendo el
normal ejercicio de la acción penal.
El atentado contra la vida del causante es grave, si como causal de indignidad
no puede desaparecer por la prescripción de la pena, es menester considerar,
que tampoco es posible su extinción por la prescripción de la acción, no es crear
un criterio de inestabilidad jurídica, sino la sanción por un algo grave y que no
puede justificar por el transcurso del tiempo menos por la conducta de quien con
sus hechos, hace ilusoria la acción de la justicia.
En esta causal no se requiere que se haya perpetrado el delito con la intención
de recoger la herencia del causante, es indiferente el móvil que lo haya
impulsado a cometer el delito.
La indignidad por la causal de homicidio o su tentativa no pueden ser impuestas
sin que medie una condena penal dictada en el proceso respectivo. [39]
b.- Los que hubieran sido condenados por el delito cometido en agravio del
causante o de alguna de las personas a las que se refiere el inciso anterior.
pág. 12
pena de multa para el delito de calumnia, si estos eventos son inferidos por una
vez no hay razón que justifique la indignidad.
La razón expuesta impone exigir que el inciso que se comenta sea integrado con
la mención de la penalidad aplicable.
La denuncia constituye una imputación, la que puede ser cierta o falsa. Cuando
es falsa da a entender el abuso en el ejercicio del derecho y cuando el imputado
es un familiar la conducta se agrava porque se denuncia a quien no ha cometido
delito alguno.
La denuncia falsa constituye la comisión del delito de contra la administración de
justicia, sancionado por el artículo 402 del C.P.
El inciso considera incompleto lo siguiente:
c.1 Bastara la mera denuncia del causahabiente? Se considera que no, también
se puede imputar la comisión de un delito ante la autoridad policial y luego
abandonarla.
La conducta que merezca ser sancionada con la indignidad debe obedecer un
requisito además de su falsedad, a su ratificación ante el órgano jurisdiccional
correspondiente luego que el Ministerio Público haya formalizado la denuncia
respectiva, así una denuncia habrá tenido trascendencia en el mundo del
derecho.
c.2 el inciso debe completarse a que la denuncia deber sido formulada por la
comisión de un delitos título de dolo, el silencio de la ley al respecto puede crear
problemas de interpretación.
d.- Los que hubieran empleado dolo o violencia para impedir al causante
que otorgue testamento o para obligarle a hacerlo, o para que revoque total
o parcialmente el otorgado.
pág. 13
En el campo del ilícito civil cuando se coacta la voluntad, para que otorgue un
testamento o que lo haga o para que revoque lo que ya fue hecho.
La ley sanciona el atentado contra la libertad de testar , la majestad de la
autodeterminación de la persona para la realización de lo que pretende o
el respeto de lo ya realizado.
Ele ejercicio de la violencia de conformidad a lo establecido por el art. 214 del
C.C constituye causa de anulabilidad de acto jurídico.
En el campo del derecho penal impedir o exigir que uno realice lo que no quiere,
constituye la comisión del delito de violación de la libertad personal penado y
sancionado por el art. 151 del C.P.
En el autor de la infracción se exige intención deliberada para la realización de
un acto no querido por el agente.
En el código civil se encuentran otras causales por las que sé que se puede
aplicar la indignidad como forma de exclusión de la herencia, ellas son
pág. 14
El matrimonio se sustenta sobre los principios de la fidelidad, consideración,
respeto y socorro, si acaso la separación de los cónyuges o el divorcio se
producen como causa imputable a alguno de ellos , el culpable además de otras
sanciones pierde el derecho hereditario respectivo, pudiendo invocarse la
indignidad para esa privación.
Este inciso sanciona el reconocimiento por interés que en forma proterva podrían
algunos hacer de un hijo, que cuando más lo quería y merecía el padre se
comportó irresponsablemente y lo expuso a un inminente peligro moral y
abandono material.
Esa conducta debe ser objeto de sanción y no hay peor que la de ser declarado
indigno.
INDIGNIDAD
pág. 15
Afecta a herederos y legatarios
Afecta la legítima y cuota de libre disposición
Lo impone la ley
Existe derecho de acreencia.
Tiene características como:
Es personal.
Tiene función común.
No opera en pleno Derecho.
Es susceptible de extinción.
Es intransmisible
Funciona solo en base a disposiciones legales
La acción de indignidad:
La exclusión por indignidad del heredero o legatario debe ser declarada por
sentencia en juicio. La acción se realiza en proceso de conocimiento.
DESHEREDACION
Corresponde al testador
No es necesario la justificación por ser facultativa
Se confiere por testamento.
Afecta a herederos forzosos
Afecta la legítima
Lo impone la voluntad del causante y la ley.
Existe derecho de acreencia.
Características de la desheredación:
pág. 16
Debe sustentarse en actos cometidos por el excluido considerados como
causales en la ley, es de carácter público e impide al testador alegar causa
ilegitima por la que se pretenda privar al heredero del derecho a la
herencia.
Acción de desheredación:
DIFERENCIAS:
pág. 17
5. La indignidad solo puede ser accionada por el coheredero o el representante
hereditario, la desheredación solo es potestad del causante.
Plazos de la indignidad
El artículo 668 del código civil: “La exclusión por indignidad del heredero o
legatario debe ser declarada por sentencia, en juicio que pueden promover
contra el indigno los llamados a suceder a falta o en concurrencia con él. La
acción prescribe al año de haber entrado el indigno en posesión de la herencia
o del legado”.
pág. 18
causante (o de las personas que indica el dispositivo precedente) o que, aun
estando condenado por alguna de las hipótesis enumeradas en los incisos 1 a 3
del artículo 667, sostiene que dicha condena no conlleva la indignidad sucesoria.
En este orden de ideas, cuando haya duda sobre el monto del caudal relicto que
el supuesto indigno perdería, de conformidad con lo dispuesto en el inciso 3 del
artículo 475 e inciso 8 del artículo 486 del Código Procesal Civil, la demanda de
indignidad puede ser tramitada como proceso de conocimiento o como proceso
abreviado, según el Juez decida.
Para casos como este, la opción que el corpus procesal concede a los jueces es
especialmente acertada, pues no tendrá sentido tramitar la demanda de
indignidad como proceso de conocimiento y será suficiente el abreviado, si ya
existe condena penal. En cambio, si el caso es de discusión sobre captación de
la voluntad del testador (inciso 5 artículo 667 C.C.), o sobre falsificación del
testamento (inciso 6 artículo 667 C.C.) y la masa hereditaria es de un monto
significativo, será sin duda preferible la vía procedimental del proceso de
conocimiento.
pág. 19
Es punto difícil a decidir si como consecuencia de la sentencia se declara que el
indigno no sucede o si, sucediendo, se le priva de los efectos prácticos de la
sucesión. En favor de lo primero aboga el hecho de que los artículos 667,668 Y
671 hablan de exclusión. Pero en favor de lo segundo está la previsión de
prescripción contemplada en el 668, de lo que se desprende que, prescrita la
acción, el indigno conserva lo que tiene, o sea mantiene el status sucesorio. No
obstante el atractivo jurídico de la cuestión -que, por cierto, justificaría un estudio
especial, desde el punto de vista práctico los efectos son esencialmente iguales
en uno y otro caso, porque como consecuencia de la retroacción el indigno queda
apartado de la sucesión. Bajo nuestro sistema, me inclino a considerar que la
indignidad no es un caso de incapacidad sino de genuina exclusión o
apartamiento, y que incluso puede tener lugar luego de que el indigno haya
aceptado la herencia.
Legitimados activamente están -dice la norma del 668- los llamados a suceder a
falta o en concurrencia con el indigno. Lo que ha querido expresar el dispositivo
es que puede demandar todo aquel que, de no haber indignidad, hubiera
concurrido con el indigno, o quien se crea con derecho sucesorio por efecto de
la exclusión del indigno. Es decir, está legitimado el sucesor que sigue en el
puesto siguiente de la línea sucesoria. Por lo tanto, no es solamente el llamado
en el momento de la muerte del causante, sino también quien siga a este si
muere o renuncia a la herencia, o situación semejante. No están, pues,
legitimados quienes como consecuencia de la declaración de indignidad no
pueden obtener un beneficio o mejorar el que les corresponda.
pág. 20
Con la salvedad que en el siguiente párrafo se dirá, el legatario de bien cierto no
está legitimado para sostener la indignidad de un heredero o de otro legatario a
quien no pueda sustituir, porque en caso de pérdida del legado o de la herencia
por el indigno, nada habrá de tocarle al legatario de cosa cierta; sus expectativas
sucesorias se limitan a la adquisición de lo que el testador le dejó, sin que la
exclusión de algún heredero o legatario pueda afectarle o beneficiarle.
pág. 21
En lo que respecta al cómputo, hay que detenerse a reflexionar pese a la
aparente sencillez de la regla. Como cuestión previa piénsese en la ratio legis.
¿Qué es lo que el legislador ha querido que ocurra después de terminado el
plazo? ¿Consolidar la posesión, o consolidar el título sucesorio? Si es lo primero,
resulta que la detentación posesoria sucesoral goza de un tratamiento
privilegiado. Si es lo segundo, no es razonable que el derecho a suceder a pesar
de la indignidad quede legitimado por puro ejercicio de la posesión. Y, por otro
lado, resulta absurdo, en todo caso, relacionar el plazo de ejercicio de la acción
con un status posesorio, porque debe estar fuera de toda discusión que la
pretensión de indignidad procede perfectamente aunque el indigno no tenga
posesión alguna.
Causales. Y análisis:
pág. 22
de quien cooperó, instigó o encubrió. El Art citado habla en general de
homicidio o tentativa de homicidio contra la persona de cuya sucesión se
trate, su cónyuge o sus descendientes; el código olvida los ascendientes
y Borda crítica proponiendo una reforma legislativa. Las circunstancias
atenuantes como por ejemplo la emoción violenta, no son causales
obstativas de la declaración de indignidad.
pág. 23
Adulterio con la mujer del difunto: Art 3294 “Es igualmente indigno el
condenado en juicio por adulterio con la mujer del difunto”. Parece que
éste Art necesita ser derogado de manera urgente del Código Civil ,
debido a que el Art 74 del Código Penal que trataba el adulterio ha sido
derogado en el año 1995. Por lo tanto el Art 3294 no tiene utilidad alguna.
Abandono del difunto cuando se hallare demente: Art 3295 “Es indigno
el pariente del difunto que hallándose éste demente y abandonado, no
cuidó de recogerlo o hacerlo recoger en establecimiento público o
privado”. La doctrina entiende que pese a que el cónyuge no
es pariente éste tiene deberes de asistencia, por lo que lo incorpora en el
término pariente.
Tienen legitimación activa según el Art 3304 (“las exclusiones por causa de
incapacidad o indignidad no pueden ser demandadas sino por los parientes a
quienes corresponde suceder a falta del excluido de la herencia o en
concurrencia con él”). Si hacemos un análisis literal sobre éste precepto jurídico,
vemos claramente que no quedan comprendidos en el término parientes los
cónyuges. Pero ésta interpretación contraría la voluntad del código, que
colocado a los esposos en un grado preferencial en los órdenes sucesorios, por
pág. 24
lo tanto están legitimados también para ejercer la acción de indignidad. Los
legatarios carecen de legitimación en el caso de que solo tengan un interés
patrimonial para instar la acción. Al igual no está legitimado el fisco debido a que
la indignidad se funda en razones morales. Y quienes tampoco gozan de
legitimación son los acreedores de la sucesión.
La acción está dada contra todos los sucesores sea que provenga de la ley o de
una disposición testamentaria.
Borda explica que al venir los hijos del indigno a la sucesión por derecho de
representación ocuparán el lugar de aquél y tomarán lo que a él le hubiera
correspondido.
pág. 25
cuales pasa la herencia por causa de su indignidad, todos los objetos
hereditarios de que hubiere tomado posesión con los accesorios y
aumentos que hayan recibido, y los productos o rentas que hubiere
obtenido de los bienes de la herencia desde la apertura de la sucesión”.
Alguna doctrina, en la que se enrola Maffía, entiende que la situación del
indigno es similar a la del poseedor de mala fe, es decir que además de
restituir los frutos y productos estará obligado a restituir los que por su
culpa dejó de percibir y los que hubieran percibido los llamados a
sustituirlo.
Este punto ya ha sido analizado. Art 3301 reformado por ley 17.711.
El Art 3309 dispone: “Las ventas que el excluido de la sucesión hubiere hecho,
las hipotecas y servidumbres que hubiere constituido en el tiempo intermedio,
como también las donaciones, son válidas y solo hay acción contra
Él por daños y perjuicios”. Este precepto reconoce validez a los actos que
hubiere celebrado el indigno en el tiempo intermedio, es decir, los celebrados
pág. 26
hasta el momento en que la sentencia declara la indignidad, y no hasta que fue
promovida la acción.
Perdón del ofendido: Nadie puede ser mejor juez que el propio ofendido. Si él
perdona ninguno tiene derecho a exigir el castigo, pues no estamos aquí en
presencia de una sanción penal en la cual están en juego intereses públicos,
sino que estamos en presencia de una sanción civil la cual tiene en miras
intereses privados.
Posesión por más de tres años: El Art 3298 declara purgada la indignidad con
tres años de posesión de la herencia o legado. La ley se refiere a la posesión
material de los bienes y no a la posesión hereditaria, desde que ésta no se
concibe respecto de los legados.
pág. 27
enuncia ciertos casos para los cuales la ley impondrá cierto castigo a aquellos
herederos que atenten contra el patrimonio, la vida y la familia del causante.
Si bien entonces la indignidad es un castigo que impone la ley, cabe resaltar que
esta no se puede confundir con la capacidad para heredar, pues para la ley será
capaz de suceder toda persona a quien no haya declarado incapaz. es entonces
como el código civil consagra unas excepciones en los artículos 1020 al 1024
las cuales de una forma resumida se basan en las incapacidades fundadas en el
cargo que ejerce la persona pues esta podrá influenciar al testador al momento
de otorgar testamento, personas como el eclesiástico que hubiere confesado al
testador en la enfermedad, o habitualmente en los dos últimos años anteriores
al testamento; ni la orden, convento o cofradía de que sea miembro el
eclesiástico, ni sus deudos por consanguinidad o afinidad dentro del tercer grado.
Además deja claro dentro de estos artículos que son incapaces además las
instituciones que no sean personas jurídicas. Por último y para cerrar esta
apreciación es menester aclarar que la incapacidad solo aplica cuando se tramita
la sucesión como testada puesto que cuando se tramita de forma intestada será
mediante los órdenes hereditarios que se otorgaran los bienes de la sucesión a
los herederos.
pág. 28
El consanguíneo dentro del sexto grado inclusive que en el estado de
demencia o destitución de la persona de cuya sucesión se trata, no la
socorrió pudiendo.
El que por fuerza o dolo obtuvo alguna disposición testamentaria del
difunto o le impidió testar.
El que dolosamente ha detenido u ocultado un testamento del
difunto, presumiéndose dolo por el mero hecho de la detención u
ocultación.
Expuestas las causales taxativas que consagra la ley se puede concluir que
estas disposiciones van dirigidas a toda persona que haya atentado contra la
vida, el honor, bienes, familia del testador e incluso por no haberlo socorrido
cuando más lo necesito, y por ultimo por haberse valido de dolo o haber
escondido el testamento.
pág. 29
El articulo 1028 postula la indignidad por rechazo del cargo de guardador o
albacea que nombrados por el testador se excusaren sin causa legítima.
Cabe aclarar que el hecho de ser indigno no priva al heredero o legatario de los
alimentos que la ley señale a menos de que haya infringido una de las causales
de indignidad que contiene el artículo 1025.
pág. 30
para recibir asignación hereditaria proviene de las causales taxativamente
señaladas en el artículo 1025 del Código Civil, puede tener lugar tanto en la
sucesión testada como en la intestada y comprende tanto las herencias como
los legados. La indignidad en ningún caso se produce de plano, necesita siempre
una sentencia proferida por un juez penal o por un juez civil, dictada a instancia
de cualquiera de los interesados, según lo establece el artículo 1031 del Código
Civil. Si en razón del transcurso del tiempo no puede iniciarse la investigación
penal por haber prescrito el delito, debe entenderse prescrita la acción de
indignidad. Las causales de indignidad que no constituyen ilícito penal, requieren
sentencia de los jueces civiles. Una vez pronunciada la sentencia se extingue en
el asignatario la aptitud legal para recibir toda herencia o legado. De manera tal
que la indignidad acarrea una pena o una sanción de carácter civil, pues por
causa de ella un asignatario puede ser totalmente excluido de la sucesión de una
persona a quien estaría legal o testamentariamente llamado a suceder.
2- El que fuere condenado en juicio por haber atentado contra la vida del
testador, de su cónyuge, descendientes o ascendientes. Llegando a perder su
derecho a la legítima en el caso de que el ofensor fuera heredero forzoso.
pág. 31
5-El que, con amenaza, fraude o violencia, obligara al testador a hacer
testamento o modificarlo.
6- El que por iguales medios impidiere a otro hacer testamento, o revocar el que
tuviese hecho, o suplantara, ocultara o alterara otro posterior.
Debemos apuntar además que el artículo 757 del Código Civil contempla la
posibilidad de que el ofendido pueda perdonar las causas que recoge el artículo
anterior. Éste dispone que las causas de indignidad dejan de surtir efecto si el
testador las conocía al tiempo de hacer testamento, o si habiéndolas sabido
después, las remitiere en documento público, lo que supone que se acepta el
perdón tácito o testamentario y se admite el perdón expreso siempre que la
remisión se instrumentalice en documento público.
pág. 32
Conclusión
el origen de la indignidad es un poco dificultoso en su determinación ya que los
textos históricos de la indignidad son muy variados, ya que el fundamento de
esta figura históricamente era la voluntad del causante para excluir al indigno,
en nuestra época la indignidad se puede definir como una sanción civil o penal
dictada por el poder judicial competente a razón de excluir al indigno de la
sucesión por haber faltado los deberes y el respeto a la memoria del causante,
la acción para declarar la indignidad prescribe en un año desde que el indigno
posea la herencia o legado, donde la indignidad solo puede ser invocada por los
herederos o por quienes van hacer herederos en sustitución del indigno, su
naturaleza jurídica se considera como una causa de exclusión de herencia, es
decir no es causa de incapacidad sino una causa de anulación de herencia
afirmada por una sentencia judicial firme, donde los fundamentos de indignidad
pueden ser objetivo y subjetivo ,en nuestra legislación peruana determinada las
causales de indignidad en el art 667 de c.c. con el objeto de sancionar ciertos
actos calificados para que se imposibilite al indigno a que suceda al causante,
pero nuestra ley nos indica que a los menores de edad y los mayores privados
de discernimiento no pueden ser excluidos de herencia por indignidad es decir
estas personas no pueden ser desheredadas, la declaración de indignidad
contrae efectos que son que al indigno no se le otorga sucesión, Pierde todos
los derechos en la legítima y en la cuota libre de disposición, Al ser declarado
indigno funciona la representación sucesoria, Si el indigno a enajenado los
bienes da lugar a) si es de buena fe, se obliga a devolver el bien y los frutos; b)
si es de mala fe además de devolver el bien y los frutos deberá indemnizar, sin
perjuicio de que cabe interpone la reivindicación, como nos indica la ley la
indignidad tiene que ver más como una sanción según el caso a razón de impedir
que el indigno pueda suceder al causante,.
pág. 33
Bibliografia
MARTHA MADRINAN
VASQUES,REPRESENTACION SUCERIA EN EL
DERECHO COMUN
pág. 34