INTRODUCCION

La Persona de Cristo es un tema que cuando se plantea en cualquier círculo de discusión o estudio, genera
muchas inquietudes sin importar la fuente o persona que desarrolle el planteamiento que se pretende analizar.
En ese sentido, es de inagotable conocimiento y sabiduría, estudiar desde cualquier punto de vista La Persona
de Cristo. Es evidente que la verdadera fuente con autoridad para estudiar cualquier tema relacionado con La
Persona de Cristo es la Biblia. Este libro plantea desde Génesis hasta Apocalipsis todo lo relacionado a este
tema. Además, todo lo que se muestra como símbolo y símil que guardan relación con La Persona de Cristo, se
muestra entre otras cosas para que observemos, estudiemos y aceptemos que esta Persona es el centro mismo
de la creación y se presenta como uno de los más grandes misterios de la historia de la humanidad. El apóstol
Pablo cuando escribió al joven Timoteo en primera carta (3:14-16) “Esto te escribo, aunque tengo la esperanza
de ir pronto a verte, para que, si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios
viviente, columna y baluarte de la verdad. E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue
manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el
mundo, Recibido arriba en gloria”. Desde los primeros siglos de la historia de la humanidad, el hombre caído o
no regenerado ha tratado de distorsionar este conocimiento, esta verdad, esta esperanza para el mundo. La
Persona de Cristo durante mucho tiempo ha sido tema de discusión para confusión, por aquellos que pretenden
restarle el valor espiritual y humano que este tema significa para el hombre. Desde los primeros seres humanos
llamados por Dios para el servicio en su obra en lo que conocemos como el tiempo de la iglesia, observamos
como en el desarrollo de la misma, las enseñanzas sobre esta verdad sufren ataques que pretenden igualar a
Cristo con hombres como Ernesto Guevara (el Che), Mohandas Karamchand Gandhi (Mahatma Gandhi ), entre
otros. Dentro de los ataques más recientes está la filmación en 1988 de la película la última tentación de Cristo
dirigida por el director norteamericano de origen italiano Martín Scorsese y la novela del escritor Dan Brown el
Código Davinci. A nuestro entender y basándonos en el conocimiento bíblico, estos planteamientos son solo un
ataque más pero nunca podrán vencer frente a la autoridad de la palabra de Dios.

RALACION CON DIOS Y LA CREACIÓN (1:15-17) En todo su contexto, la palabra relación nos expresa el nivel de
acercamiento, comunicación, parentesco, amistad, conexión, correspondencia, etc., entre dos personas,
animales o cosas. Así también, como individuos cuando observamos estas características en cualquier ambiente
de la naturaleza o de la vida en sentido general, notamos cuan importante es para el desarrollo de la buena
convivencia que exista esta condición y cuando se produce de manera positiva beneficia a las partes
involucradas. Partiendo de este conocimiento, nos formulamos nuestro propio juicio de lo que es o debe de ser
una relación. Desde la misma aparición de la creación, se evidenciaba una relación entre el hombre y la
naturaleza, creada por Dios para el beneficio existencial del hombre, Génesis 1:27-30 “Y los bendijo Dios, y les
dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla,y señoread en los peces del mar, en las aves de los
cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que
da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. Y a
toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay
vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así”. Las palabras de este pasaje nos dicen que Dios estableció
responsabilidades precisas al hombre y una relación entre él y la naturaleza. En ese mismo sentido cristo
estableció una relación con los discípulos llamándolos en una ocasión amigos en Juan 15:12-17 “Este es mi
mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno
ponga su vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos,
porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi
Padre, os las he dado a conocer. No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto
para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi
nombre, él os lo dé. Esto os mando: Que os améis unos a otros”. Es evidente que la Biblia presenta en el
contexto humano las diferentes formas que Cristo establecía para relacionarse con las personas dentro de su
ministerio. Si estudiamos detenidamente los evangelios, encontramos que Jesús se relacionó con pecadores,
publícanos y prostitutas, esta relación o acercamiento servia como vinculo para acercarse a ellos y presentarles
el mensaje de salvación. Este ejercicio del señor nos demuestra la misericordia de Dios a favor nuestro por
medio de la persona de su hijo que fue enviado para dar a conocer las enseñanzas que verdaderamente
benefician a la vida en sentido general del hombre. Cuando vemos como se relacionaba cristo con las personas,
pensamos en la expresión que desde hace años la hemos escuchado: “antes que nosotros buscásemos a Dios, el
nos buscó primero”. Se parece al pasaje en 1Juan 4:19: “Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero”.
En definitiva, la relación de Cristo en todos los ámbitos del universo siempre es de beneficio para el hombre. 25
VERSIONES DE LA BIBLIA Y

RALACIÓN CON LA IGLESIA (1:18-19) Para el pueblo de Dios, Cristo es y debe ser el único líder de la iglesia.
Entender este concepto es importante porque nos hace valorar la persona de nuestro salvador, ya que el esta
puesto como líder y guía de la iglesia. En la vida práctica los creyentes con el ejercicio de su vida dentro y fuera
la iglesia, transmiten a las demás personas cristianas o no con su conducta, si verdaderamente guardan relación
con el líder. Cristo comenzó establecer una relación entre el y los que le seguían. Además, estableció las bases
para la buena interrelación de los creyentes cuando expreso en libro de Mateo 18:15-22, como debían
resolverse la situación en caso de presentarse el problema de la ofensa y el perdón entre los Santos de Dios. La
escritura dice: “Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has
ganado a tu hermano. Más si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para que en boca de dos o tres testigos
conste toda palabra. Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por gentil y publicano.
De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será
desatado en el cielo. Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de
cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres
congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor,
¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta
siete, sino aun hasta setenta veces siete”. Una de las características que demuestran la fortaleza en la relación
de un líder con sus seguidores es la manifestación del cuidado físico, espiritual y emocional de la gente. Cristo en
oración intercesora del evangelio de San Juan 17:20-24 expresó lo siguiente: “Más no ruego solamente por
éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh
Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. La
gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí,
para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos
como también a mí me has amado. Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos
estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación
del mundo. Se nota claramente en este pasaje que dentro de las peticiones de Cristo al padre estaba
precisamente interceder por aquellos que habrían de creer en las palabras de los apóstoles aprendidas
directamente de Cristo y todas aquellas personas que recibirían el mensaje de generación en generación hasta
su venida, a estas personas posteriormente se les llamaría la iglesia. En su relación con la iglesia, desde su
concepto mismo, Cristo no solo prepara las bases para su formación, sino que también, se preocupa por ella,
intercede por ella
CONCLUSIÓN El tema central de todo el mensaje a la iglesia de Colosas es la persona de Cristo. Este, seguirá
siendo el eje a través del cual el pueblo de Dios se desarrolle y crezca. Además, en él la iglesia debe y deberá
siempre tener sus fundamentos. En el aspecto de la relación de Cristo con Dios y con la iglesia, pablo transmite
la enseñanza a cerca de los vínculos de Cristo en estos dos sentidos. En su relación con Dios, Pablo escribe en un
lenguaje entendible la manifestación del Dios mismo. En ese sentido expresa lo que verdaderamente significa:
una imagen, una manifestación o una representación del Dios mismo. Aunque muchas veces este concepto se
hace difícil de entender en nuestra mente limitada, la verdad es que con la ayuda del espíritu santo podemos
entenderla. Este tema sobre la persona de Cristo en cuanto a que el es mismo Dios pero al mismo tiempo
guarda una relación con el padre parecería una contradicción, pero sabemos que Pablo lo explica a Timoteo en
su primera carta. La revelación del apóstol Pablo sobre la posición de Cristo en la creación (primogénito),
demuestra su principalidad para el mundo y todas las formas de vida creadas. También, se evidencia su nivel de
superioridad frente a todas las cosas creadas. Estas cosas, Pablo las señala como: visibles, invisibles, tronos,
dominios, potestades. No podemos dejar de mencionar la afirmación del verso 17 “Y él es antes de todas las
cosas”. Cristo es el líder y guía de la iglesia. Como líder, este la guarda y sustenta. El es su cabeza y tiene todos
los fundamentos necesarios para sostenerla. Siendo Cristo el Dios mismo, ya que en el se encuentra toda la
plenitud.