Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
El abasto fijo mundial de agua en todas sus formas (vapor, líquido y sólido) es enorme. Si se esparciese
uniformemente esta agua en forma líquida sobre la superficie terrestre, podría formar una capa de casi 3 000 m
de profundidad.
Sin embargo, sólo una pequeña fracción de la misma está disponible para nosotros como agua dulce, y ésta se
halla distribuida de manera muy poco uniforme. Un 97% del volumen de agua en la Tierra se encuentra en los
mares y océanos, y tal líquido es demasiado salado para ser bebido, para los cultivos y para la mayor parte de
los usos industriales, excepto para procesos de enfriamiento.
El 3% restante es agua dulce. Casi 2,97% de ésta se tiene en el hielo de los polos y en glaciares, o es agua
subterránea situada a demasiada profundidad y resulta demasiado costoso extraerla. Esto significa que sólo un
0.003% del volumen de agua total en la Tierra es de fácil acceso para nosotros, en lagos, humedad del suelo,
en agua subterránea aprovechable, vapor de agua atmosférica y en corrientes fluviales. Si el abasto mundial de
agua fuese sólo de 100 litros, nuestra reserva utilizable sería de sólo 0.003 de litro.
Afortunadamente; esta existencia de agua dulce se colecta, purifica y distribuye de manera continua en el ciclo
hidrológico.
Página 1 de 31
profundidades entre estratos de rocas impermeables. Asimismo, la zona de recarga, el lugar por donde el agua
penetra hacia el acuífero, suele estar a muchos kilómetros del punto en el que el agua sale.
Cuando el agua atraviesa el suelo, los detritos y las bacterias se filtran. El agua llega a disolver y lixiviar ciertos
minerales. Por ejemplo, las cavernas subterráneas (grutas) son el resultado de la lixiviación gradual de la
piedra caliza. En casi todas las situaciones naturales los minerales que escurren a los mantos freáticos no son
perjudiciales. Así el agua freática es generalmente dulce, de la mejor calidad y segura de beber. Unas pocas
excepciones ocurren cuando se han lixiviado minerales que contienen arsénico u otros minerales venenosos
que hacen que el agua no sea adecuada para tomarla.
Arrastrada por la gravedad, el agua freática avanza por los acuíferos hasta que encuentra una salida a la
superficie, que observamos como manantiales y fuentes. En los manantiales, el agua fluye en una zona ex-
tensa; en las fuentes (ojos de agua), sale como un flujo notable de una abertura reducida. Puesto que unos y
otros alimentan corrientes, lagos y ríos, el agua freática se une y forma parte de la superficial. Pero las fuentes
fluyen sólo si la capa freática se encuentra a una altura mayor. Cuando cae por debajo del nivel de la fuente,
ésta se seca.
LLUEVE
entra sale
Zona de recarga Acuíferos Manantiales Alimenta
Página 2 de 31
Desde luego, las inundaciones no son desconocidas en la naturaleza. Sin embargo en muchas partes del
mundo su frecuencia y gravedad siguen creciendo, no porque haya más precipitaciones, sino porque el agua
escurre de las vertientes deforestadas o devastadas. Por ejemplo, hoy son comunes inundaciones grandes en
Bangladesh porque las colinas al pie del Himalaya, en la India y Nepal, han sido deforestadas (se trata de
apenas un caso en el que las acciones de un país acarrean consecuencias al ambiente de otro). Las secuelas
de que el suelo erosionado pase a las corrientes fluviales tienen un alcance aún mayor, pues la pesca se
arruina y se reduce la utilidad del agua para otros propósitos.
También profundo y trascendental es el hecho de que el aumento en los escurrimientos significa menos
infiltración y menos recarga de las capas freáticas. Así, estas serían insuficientes para alimentar los
manantiales en tiempos de secas. Los lechos secos desnudos y sin vida son característicos de las regiones
deforestadas, una tragedia tanto para el ecosistema como para los seres humanos que dependen del flujo. Las
lagunas cumplen una función de almacenamiento y liberación similar a los mantos freáticos; por lo tanto,
destruirlas tiene el mismo efecto que la deforestación: exacerba las inundaciones y se contaminan las
corrientes fluviales en las temporadas de lluvias, a la vez que se agotan en las de secas.
Los asentamientos urbanos y suburbanos ofrecen un ejemplo extremo de modificación de la superficie
terrestre, pues el sucio poroso es reemplazado con asfalto. Más adelante veremos este problema y las
medidas para corregirlo.
Agua superficial
El agua dulce que utilizamos proviene de dos fuentes: agua superficial y agua subterránea. La precipitación
que no se infiltra en el suelo o que regresa a la atmósfera, por evaporación o transpiración, se conoce como
agua superficial. Esta es el agua dulce que se encuentra sobre la superficie de la Tierra en ríos, lagos, panta-
nos y rebalses o depósitos artificiales. Las cuencas hidrológicas o colectoras, también denominadas cuencas
de captación, son aquéllas áreas de tierra que captan y llevan el agua de escurrimiento hasta las masas de
agua superficial.
Al agua que fluye por la superficie de tierra hasta los cuerpos o masas de agua en la superficie se le conoce
como escurrimiento superficial, y al agua que fluye por los ríos hasta el mar u océano se le denomina
escurrimiento fluvial. Un 69% del agua que llega a los ríos en todo el planeta proviene de la lluvia y de nieve
derretida en sus cuencas, y el agua restante proviene de descargas de agua subterránea. En América del Sur
se localiza el mayor escurrimiento fluvial (26% del total mundial) de cualquier continente, el doble de los
escurrimientos de todos los demás continentes tomados en conjunto. Las cuencas fluviales, alimentadas en
gran parte por la lluvia, ocupan el 60% del área de tierra firme y sustentan al 90% de la población mundial.
La deforestación puede causar cambios significativos en los patrones estacionales de los escurrimientos
fluviales. Esto puede dar por resultado mayores tasas de escurrimiento superficial e inundaciones en
temporada de lluvias, así como una gran probabilidad de ríos sin agua en temporada de secas.
Página 3 de 31
Un corte transversal de un río de llanura puede representarse así:
El albardón es un cordón sobreelevado a lo largo de la costa, formado por acumulación de sedimentos traídos
por el río durante las crecientes. Suele bloquear el reingreso al río del agua de los desbordes, que queda
retenida formando bañados por tiempo variable. El cauce es la vía de desagüe por donde corre el río.
Cuando el agua se acumula o se detiene en áreas bajas formando lagos, lagunas, pantanos, bañados, se
habla de cuerpos de agua lénticos.
Un lago se diferencia de una laguna no por el tamaño sino por la profundidad: para ser un lago debe tener más
de diez metros de profundidad. ¿Se trata de un límite convencional o tiene una razón de ser? Es un límite
térmico llamado termoclina que aparece a diez metros en promedio, vinculado a los procesos de enfriamiento y
calentamiento de la masa de agua en contacto con el clima regional, que determina que la capa superficial se
comporte en forma distinta que la profunda.
Un pantano o estero se caracteriza por su escasa profundidad, que permite el arraigo de una profusa
vegetación más o menos anfibia: juncales, espartillares con partes sumergidas y partes aéreas, tolerantes a
oscilaciones del nivel del agua.
Seguramente conocerá una cantidad de nombres vernáculos aplicados a diversos cuerpos de agua:
madrejones, bañados, cañadas, pantanos, remansos, que corresponden a variantes y combinaciones de las
formas descriptas según sean temporarios o permanentes, circulares o alargados, conectados o no con
corrientes de agua. No nos detendremos en este punto porque presenta numerosas variantes locales.
Queremos que usted reflexione sobre la importancia que esas variantes pueden tener para los seres vivos;
frecuentemente sirven de calmos sitios de desove para los peces, anfibios, insectos y otros animales de la
cuenca, de allí que sea importante la profundidad, la permanencia y las conexiones con la red fluvial principal,
porque de estas últimas dependerá la disponibilidad de agua, los gases disueltos, las oscilaciones de
temperatura, el alimento para los juveniles, y eventualmente, las posibilidades de continuar su ciclo en los ríos
principales.
Ríos de Llanura, Ríos de Montaña
Veamos ahora cómo fluye un río por su cuenca. El cauce o madre del río, o sea el camino que sigue
habitualmente el agua, depende fundamentalmente de la pendiente del terreno, es decir del desnivel que el
terreno presente entre dos puntos del mismo.
Cuanto mayor es la pendiente y más irregular es el terreno, más definido será el cauce, el agua se desplazará
por el camino más recto. En cambio cuando el terreno es plano, de poca pendiente y la topografía es llana, el
río tendrá un cauce divagante, formando meandros (curvas) o redes (numerosos brazos) y, en muchos casos,
se puede producir el aislamiento de ciertos brazos en forma de lagunas laterales. En esta dinámica suelen
tener gran influencia los sedimentos que acarrea con gran energía durante las crecientes, pero que se
depositan rápidamente cuando el río pierde fuerza y velocidad, bloqueando y torciendo el antiguo cauce.
Página 4 de 31
La Cuenca del Plata presenta diferencias respecto de la situación de, por ejemplo, ríos y lagos patagónicos de
deshielo cordillerano.
Estas aguas de deshielo son muy transparentes ya que acarrean escasos sedimentos, y su principal
característica es su pobreza en sales minerales ya que la nieve y el hielo, aunque tienen un muy elevado poder
de disolución, tienen escasa oportunidad de entrar en contacto con minerales. Recordemos que siendo una
zona templado-fría, influyen las bajas temperaturas, tanto en las reacciones químicas como en el metabolismo
de los organismos. ¿Influyen en qué forma? Los lagos están generalmente rodeados de frondosos bosques.
¿Cómo intervienen éstos en relación con los nutrientes en los lagos?
Intervienen del siguiente modo: todo lo que retrasa la actividad metabólica disminuye la Biomasa total; por el
contrario, los bosques “subsidian” a los lagos con sus restos orgánicos, los que constituyen aportes energéticos
externos y fertilización.
En Cuyo tenemos una sucesión de ríos de régimen mixto pluvio-nival, que desaguan las lluvias de primavera y
aguas de deshielo en verano, como el Mendoza y el Atuel. Son de pequeño caudal y pertenecían a la Cuenca
del Desaguadero. El verbo en tiempo pasado es pertinente, porque ya no desaguan en el Desaguadero, que
era un afluente del Colorado: por una parte se está produciendo una tendencia secular natural a que las
corrientes se insuman en sus propios sedimentos arenosos del tramo medio, pasando a alimentar mantos
subterráneos; y por otra parte la sucesión de presas para riego que construyeron en Mendoza interrumpieron
su régimen normal y disminuyeron los caudales en sus áreas dístales.
Otra de las grandes cuencas es la cuenca endorreica del Noroeste, desaguada por el Río Salado que
desemboca en la laguna cordobesa de Mar Chiquita. Estos pequeños ríos se realimentan de lluvias
estacionales, el agua de deshielo tiene poca importancia.
A pesar de su pequeño caudal todos los ríos de las zonas áridas y semiáridas son muy importantes porque
permiten economías de oasis de riego a lo largo de sus valles aluviales: condicionan pues, el patrón de
asentamientos, que depende de la disponibilidad de agua y no de la de suelo, a diferencia de la Pampa
Húmeda que puede hacer agricultura y ganadería de secano (sin necesidad de riego).
Es habitual designar el tamaño de un río según su caudal medio, lo que suele inducirnos a error: salvo el
Paraná y el Uruguay. Todos los demás pueden oscilar entre un bulto o nada de agua durante semanas, hasta
caudales centenares de veces mayores, y los extremos pueden darse en lapsos de pocos años. En realidad
hay períodos de varias décadas con lluvias por debajo de la media que alternan con períodos por encima de la
media.
En caudales, la irregularidad es la norma
El Paraná y el Uruguay, todos los demás pueden oscilar entre un hilito o nada de agua durante semanas, hasta
caudales centenares de veces mayores, y los extremos pueden darse en lapsos de pocos años. En realidad
hay períodos de varias décadas con lluvias por debajo de la media que alternan con períodos por encima de la
media.
No siempre se dispone de aforos (datos sobre caudales) suficientemente antiguos como para prever cuán
bajos o elevados pueden llegar a ser.
Cuenca Hidrográfica
El conjunto de áreas drenadas por los cursos superficiales y subterráneos se denomina cuenca hidrográfica
En una cuenca hidrográfica se distinguen:
los cuerpos de agua que constituyen la red hidrográfica.
la superficie ubicada entre los cauces, denominada interfluvios.
las subcuencas o divisiones internas de la cuenca considerando los colectores menores.
las cabeceras donde se inician los pequeños afluentes
la divisoria de aguas o línea superior que separa una cuenca de las cuencas vecinas.
Veamos un esquema:
Página 5 de 31
La Cuenca del Plata, la segunda en importancia en América del Sur:
Notará que incluye no sólo el Rió de la Plata, sino también los ríos Paraná, Uruguay, Paraguay, Pilcomayo,
Bermejo y varios otros afluentes de estos ríos mayores. En particular, los dos primeros se cuentan entre los
ríos más caudalosos del mundo.
Si bien la mayoría de las cuencas desaguan en el mar (cuencas exorreicas) hay algunas que desaguan en el
interior de los continentes (cuencas endorreicas), ya fuere en un lago como el Río Dulce que desemboca en la
Laguna de Mar Chiquita, ya fuere insumiéndose en áreas arenosas y sumándose al acuífero subterráneo.
El concepto de cuenca como unidad geográfica tiene una serie de complejas implicancias: desde el punto de
vista ecológico, todo lo que ocurra con el río en el tramo superior, repercutirá de alguna manera en el tramo
inferior, ya sea aumentando o disminuyendo el caudal, agregando sedimentos o contaminantes, afectando las
poblaciones de peces y anfibios aguas abajo. Desde el punto de vista jurídico, los límites de una cuenca no
suelen coincidir con los límites políticos de países, estados o provincias, los que no necesariamente se
manejan con criterios que respeten la unidad e interdependencia ecológica de la cuenca y los intereses que
van a explotar el recurso.
La forma más racional de resolver los problemas del uso de aguas superficiales y subterráneas, es a través de
la puesta en funcionamiento de Comités de Cuenca, donde están representados todos los organismos con
jurisdicción sobre el cuerpo de agua.
Suelen suscitarse numerosos conflictos jurídicos internacionales a causa de competencias en los usos de las
llamadas cuencas compartidas. Los conflictos sobre el uso de cuencas compartidas complican nuestras
relaciones con Uruguay, Brasil, Paraguay, y Bolivia, ya que Argentina está ubicada en el tramo inferior de los
ríos que desaguan esos países.
Es habitual el conflicto cuando son varios y diversos los intereses que pretenden hacer uso del mismo recurso.
La mejor solución, como es habitual, es la negociación entre partes.
Sustancias disueltas
El agua de los ríos, por más pura que parezca, no es como la que se obtendría en un laboratorio. Como es un
poderoso solvente, disuelve e incorpora a su paso muchas sustancias: sales como sulfatos, carbonatos,
cloruros; gases como oxígeno y anhídrido carbónico atmosféricos, etc.
Varias de estas sustancias actuarán como nutrientes minerales, ingresando en las tramas tróficas a través de
las plantas acuáticas, o intervendrán en los procesos de intercambio gaseoso de todos los organismos. Pero
excesos de salinidad o de anhídrido carbónico en ecosistemas donde esas sustancias no eran habituales,
resultan perjudiciales.
Sólidos en suspensión
Una corriente de agua tiene capacidad y energía como para transportar partículas suspendidas. La capacidad
de arrastre depende de la energía que tenga el río; una forma de visualizar esa energía es observar la
velocidad de la corriente. En el tramo superior del río, donde la velocidad es mayor a causa de la pendiente, la
cantidad y tamaño de las partículas, a veces rocas considerables, puede ser mayor. A medida que llega al valle
y disminuye la velocidad, se van depositando las partículas, primero las más grandes y luego las más
pequeñas. Por ello se pueden formar bancos de arena y limo en los tramos inferiores de los ríos.
Los sólidos en suspensión, que pueden ser gravas, arenas, limos o arcillas según su granulometría, modifican
la calidad del agua en varios sentidos: Disminuyen la transparencia del agua, afectando la fotosíntesis, y a
través de ella el ingreso de oxígeno.
Tienen un efecto abrasivo (de desgaste mecánico).
Pueden adsorber sales por acción electrostática, o sea que sobre la superficie de cada partícula de
arcilla pueden fijarse iones en forma selectiva, de manera tal que la concentración de la sustancia en cuestión
aumenta. Esto tiene importancia en relación con contaminantes, tanto limitando su arrastre fuera del
ecosistema si la partícula decanta, como bloqueándolos en la fracción sólida.
Página 6 de 31
Constituyen una fuente de nutrientes para los vegetales por disolución de sus sales constitutivas.
Oxígeno disuelto.
El oxígeno es un gas fundamental para el desarrollo de procesos aeróbicos de biodegradación, ya que todos
los organismos respiran. La presencia de oxígeno permite que se descomponga totalmente la materia orgánica
transformándola en dióxido de carbono y agua. El dióxido de carbono, a su vez, puede ser eliminado o
reutilizado por los vegetales.
La concentración de oxígeno en el agua es fundamental para la supervivencia de numerosos organismos: las
truchas, por ejemplo, son fuertes demandantes y requieren concentraciones de 6 a 10 miligramos de oxígeno
disuelto por litro de agua. En cambio las carpas son tolerantes y pueden soportar indefinidamente
concentraciones de 2 mg/litro de agua.
El agua es medio de vida. De la naturaleza e intensidad de dicha vida depende la calidad del agua para el
consumo del hombre. Las condiciones de circulación y el ciclo biológico del medio acuático aseguran una
purificación o autodepuración del agua, esto es, una eliminación de los productos contaminantes y de los
microorganismos patógenos que puede contener.
Preservar las formas de vida acuática es preservar la calidad del agua que, tarde o temprano, hemos de
consumir.
Si dispone de una pecera, o de un simple frasco de vidrio con plantas acuáticas, observará las burbujas de
oxígeno recién formadas sobre las hojas.
Regulación del Ecosistema Fluvial
Como en todo ecosistema, en el río existen mecanismos de regulación que lo mantienen dentro de ciertas
características de equilibrio medio. Existen mecanismos naturales de autodepuración que permiten que los
organismos muertos que se encuentran en el río sean descompuestos hasta llegar a sus elementos
constituyentes (sustancias inorgánicas simples). De no ser así, habría una acumulación continua de materia
orgánica y el río se convertiría en un basural.
La transformación de materia orgánica en inorgánica reutilizable, la realizan las bacterias y hongos acuáticos,
organismos invisibles muy numerosos que, a pesar de ser microscópicos, realizan una valiosísima labor. En el
caso de los peces de la Cuenca del Plata y de muchos ríos de llanura del interior, muchos peces detritívoros
cumplen una función similar alimentándose de sedimentos ricos en restos orgánicos.
Importancia de los Organismos Vivos en el Mantenimiento de la Calidad del Agua
El mantenimiento de las formas de vida acuática en buen estado no constituye un fin conservacionista por sí
mismo, sino porque la presencia de seres vivos es fundamental para el mantenimiento de la calidad de las
aguas.
Con la liberación del oxígeno como subproducto de la fotosíntesis las algas microscópicas y las plantas
acuáticas contribuyen, junto con la turbulencia que también incorpora oxígeno atmosférico, a la acción de las
bacterias aerobias que descomponen excedentes de materia orgánica u organismos muertos.
Estos ciclos de depuración dependen también de la temperatura del agua, de su contenido de sustancias
minerales, de los agentes descomponedores presentes, de los organismos fotosintetizadores y del
funcionamiento de las complejas tramas alimentarias del medio acuático.
Para determinar la calidad de una muestra de agua es preciso disponer de un laboratorio y comparar los datos
de las determinaciones fisicoquímicas y biológicas con tablas de umbrales de calidad, establecidos por
organismos nacionales como la Oficina Sanitaria Panamericana y nacionales como el Ministerio de Salud
Pública.
Estas consideraciones son de fundamental importancia, para comprender el tema de la eutrofización que
veremos más adelante.
Agua profunda
Parte de la precipitación se infiltra en el suelo y llena los poros (hendiduras o grietas) que hay en suelo y rocas
de la corteza terrestre. El área bajo tierra en donde todo el suelo y roca disponibles están llenos de agua, se
denomina zona de saturación, y al agua en estos poros se le conoce como agua subterránea o freática. El nivel
de agua freática es la superficie superior de la zona de saturación. Es la línea divisoria entre suelo y roca
saturados, en donde toda oquedad disponible se ha llenado, y roca y suelo no saturados, en donde los poros
aún pueden absorber más agua.
Hay 40 veces más agua subterránea bajo la superficie terrestre que en las corrientes de agua y lagos de todo
el mundo. Sin embargo, tal agua “enterrada” está distribuida de manera desigual, y sólo una pequeña cantidad
de ella es económicamente explotable. La extracción de agua subterránea profunda, con mayor rapidez de
aquella con la que se recarga en el ciclo hidrológico, consume las existencias líquidas potencialmente
renovables de la Tierra.
La capacidad del suelo o roca para retener agua depende de su porosidad y permeabilidad. Las capas porosas
y saturadas con agua, de arena, grava o lecho de roca, y que pueden rendir una cantidad de agua
económicamente significativa. se conocen como mantos freáticos o acuíferos. Algunos mantos freáticos son
enormes.
La mayor parte de los acuíferos se vuelven a llenar de manera natural por la precipitación que se infiltra por
suelo y roca, en lo que se conoce como recarga natural. Cualquier área de tierra que deja pasar el agua hasta
Página 7 de 31
que ésta llega a un manto freático se denomina área de recarga. El agua subterránea va desde el área de
recarga, atraviesa un manto freático, y llega a un área de descarga, como parte del ciclo hidrológico. Las áreas
de descarga pueden ser pozos, manantiales y ojos de agua, lagos, géiseres, corrientes fluviales, y mares u
océanos.
La dirección del flujo de agua subterránea, de las áreas de recarga a las de descarga, depende de la gravedad,
presión y fricción. Normalmente, el agua subterránea se desplaza desde puntos de mayor elevación y presión,
a puntos de menor elevación y presión. Este movimiento es muy lento, típicamente sólo como de un metro al
año, y rara vez más de 0.3 m al día. Por esto, la mayor parte de los mantos freáticos son como lagos
subterráneos enormes, de lento movimiento.
Si la tasa de extracción de un acuífero supera su tasa de recarga natural, baja el nivel de agua freática
alrededor del pozo en explotación creando un volumen carente de agua al que se conoce como cono de
depresión del nivel del agua freática. Cualquier contaminante que se descargue en el área de tierra por encima
del cono de depresión, será atraído directamente hacia el pozo, y puede tener un efecto devastador sobre la
calidad del agua que se extrae de ese pozo.
Algunos mantos freáticos, denominados acuíferos fósiles, que se encuentran con frecuencia a gran pro-
fundidad, tienen una recarga muy pequeña y son recursos no renovables a la escala de tiempo humana. La
extracción de estos depósitos equivale a un “socavamiento de agua”, que eventualmente agota tales depósitos
que son un caudal líquido de la Tierra.
Efectos ecológicos
Cuando un río es embalsado y su caudal se desvía a las ciudades o los campos de cultivo, lo que resta del flujo
queda muy disminuido. El efecto en los peces y otros organismos acuáticos es obvio, pero las ramificaciones
ecológicas van mucho más allá del río. La fauna silvestre que depende del agua o de cadenas alimentarias que
comprenden organismos acuáticos(y esto incluye casi a todos los seres vivos), también resulta afectada. Los
marjales de muchas riberas, que ya no tienen el aporte de los desbordamientos ocasionales, se secan y dan
lugar a la extinción de aves acuáticas y dc otros animales y plantas que dependen del hábitat. Ciertos peces,
como el salmón, que nada del océano para desovar río arriba, son muy afectados por la reducción del nivel del
agua y tienen problemas para superar el embalse, aun si cuenta con corredores para peces. Y si logra penetrar
en el río, las crías tienen dificultades para llegar al mar.
Los problemas se extienden a los estuarios, que son bahías en los que el agua dulce de los ríos se mezcla con
la del mar. Los estuarios se cuentan entre los ecosistemas más productivos de la Tierra; son espacios ricos
para la reproducción de muchas especies de peces, crustáceos y aves acuáticas. Si el caudal del río se desvía
a otros sitios, entra menos agua dulce y, en consecuencia, la concentración de sales aumenta y trastorna la
ecología
Página 8 de 31
El final obvio de sobregirar las aguas freáticas es su agotamiento; pero la disminución de los niveles freáticos
tiene otras consecuencias antes de que el líquido se agote por completo. Examinemos, pues, algunas:
Riego
Cuando se riega con los sistemas tradicionales de derrama o por aspersión, alrededor de 60 por ciento del
agua se pierde por evaporación, filtración o escurrimiento del agua de lluvia. Esta pérdida se eliminaría si se
instalaran equipos de riego por goteo, que son redes de tuberías de plástico con orificios que dejan caer a
Página 9 de 31
gotas el agua en cada planta, y que desperdician menos de cinco por ciento del líquido. Además, tienen la ven-
taja adicional de que retardan la salificación.
Sistemas municipales
El consumo de 680 litros de agua diarios por persona en los hogares modernos se dedica sobre todo a lavar y
desalojar los desechos: uso de escusados (11 a 19 litros cada vez que se accionan), baños con ducha (7.5 a
11 litros por minuto), uso de lavarropas (75 a 110 litros por carga), etc. Regar el césped y llenar las piscinas se
agregan a este consumo junto con otros usos indirectos.
Desde hace mucho se promueve públicamente el ahorro del agua como una conducta del buen ciudadano ,
agreguemos que sin mucho éxito. Ahora, muchas ciudades encaran la dura realidad de que será en extremo
caro (y en muchos casos imposible), acrecentar el suministro con sólo construir más represas y cavar más
pozos. La única alternativa práctica, según están descubriendo, es emprender medidas concretas para reducir
el consumo y desperdicio del agua.
Agua Pura
El agua químicamente pura no existe en la naturaleza. Dada su movilidad y su alto poder disolvente, el agua
lleva en solución o suspensión muchas sustancias. Los elementos que pueden encontrarse en las aguas
naturales están resumidos en la siguiente clasificación:
Gases disueltos
Dióxido de carbono, oxígeno y ácido sulfhídrico
Sustancias disueltas:
Sustancias incrustantes: sílice, óxidos de hierro y aluminio, iones calcio y magnesio en distintas
combinaciones.
Sustancias no incrustantes:
Compuestos de sodio y otros elementos alcalinos. sustancias orgánicas.
Sustancias corrosivas: ácidos, sulfatos de hierro y aluminio. sulfato de magnesio. nitrato de calcio,
cloruros, oxígeno disuelto a pH menores de l0.
Sustancias tóxicas: bario, selenio
Sustancias en suspensión:
Partículas gruesas que sedimentan fácilmente: arena
Partículas finas: limos y arcillas
Microorganismos:
Bacterias, algas, hongos, protozoos Dentro de esta clasificación algunos componentes estarán siempre
presentes y otros sólo ocasionalmente o en concentraciones muy bajas: por ejemplo, las sustancias tóxicas.
Es muy difícil definir químicamente el agua “normal”, ya que las características físico-químicas de la misma
varían en función del sustrato y de las condiciones ambientales generales donde se encuentre.
La Contaminación
Generalidades
Si comparamos un sistema natural con un proceso industrial (como la fabricación de papel), podemos ver que
en la naturaleza los distintos elementos y procesos actúan de una manera más o menos cíclica. Es decir, que
los materiales, una vez incorporados en los procesos correspondientes, son degradados y luego reutilizados en
el ciclo siguiente. En cambio, en el caso del sistema artificial, no ocurre lo mismo: el hombre sólo se interesa
por la primera fase (en este caso la fabricación de papel), sin importarle, en general, el reciclaje de los
residuos. Los desechos, entonces, se vuelcan al medio natural, que en muchos casos no puede reabsorberlos,
porque el volumen y calidad de aquellos supera su capacidad de autodepuración.
Contaminación:
“Es la adición por el hombre de materiales o energía calorífica en cantidades que causan alteraciones
indeseables del agua, aire o suelo. Cualquiera de estos materiales es llamado contaminante”
a) Materia sólida
I) FÍSICOS b) Temperatura
c) pH
IV) TÓXICOS
1) Plaguicidas
a) Insecticidas
b) Herbicidas
c) Rodenticidas
d) Fungicidas, etc.
2) Metales pesados
a) Cadmio
b) Plomo
c) Mercurio
d) Cobre
f) Zinc
g) Cromo
3) Radiactividad
a) Radio
b) Estroncio
c) Uranio
Nuestro sistema humano moderno ha sido muy poco capaz de imitar el ciclo natural de los nutrimentos. En
cambio, los retiramos del suelo, los hacemos pasar por las cadenas alimentarias humanas y los desechamos
en las corrientes de agua, de las que casi no regresan. Además, grandes cantidades de nutrientes aplicados a
los campos de cultivo, los prados y los huertos en forma de fertilizantes no entran a la cadena alimentaria, sino
que se deslavan o lixivian hacia los cursos de agua.
Los contaminantes físicos comprenden diferentes formas de materia sólida que provocan turbiedad en el agua.
La materia sólida puede ser soluble e insoluble; esta última puede ser sedimentable o suspendida. Los
principales efectos producidos por este tipo de contaminantes son antiestéticos; la turbiedad causada por esta
materia evita que los procesos fotosintéticos se desarrollen adecuadamente, disminuyendo la reoxigenación de
las capas inferiores del agua.
Al aumentar la temperatura del agua, disminuye la solubilidad del oxígeno y por consiguiente se dispone de
una menor cantidad de ese elemento disuelto en el agua. Al mismo tiempo, todo incremento en temperatura
implica aumento de la tasa metabólica de los organismos, de tal manera que requieren mayores cantidades de
oxígeno en un tiempo más corto. Esto perjudica en especial a los organismos superiores como los peces, que
requieren altos niveles de oxígeno disuelto y no se encuentra en cantidades suficientes por haber sido utilizado
más rápidamente por los microorganismos acuáticos.
El rango de pH aceptable en los cuerpos receptores, varia de 6.5 a 8.5. Cuando el pH aumenta, disminuye la
productividad; las aguas con valores relativamente altos o bajos de pH son tóxicas para los peces y otros
organismos.
Los contaminantes químicos se dividen en dos grupos: orgánicos e inorgánicos.
Las substancias orgánicas, al entrar en descomposición biológica, requieren el oxígeno disuelto del agua. La
cantidad de oxígeno requerida por los microorganismos para estabilizar la materia orgánica en medio aerobio,
se denomina demanda bioquímica de oxigeno. Con frecuencia se requiere cierta cantidad de oxigeno para
oxidar totalmente la materia orgánica, y para ello se utiliza un oxidante químico; a esto se denomina demanda
química de oxigeno.
Las substancias inorgánicas se determinan como sólidos disueltos, midiendo la conductividad eléctrica del
agua. Estas substancias no representan mayores problemas a menos que haya concentraciones muy elevadas
provocando salinidad excesiva del agua. Otras substancias inorgánicas, como sales de fósforo, nitrógeno y
potasio, tienen importancia relevante por ser los principales nutrientes requeridos para el desarrollo de todas
las formas de plancton.
Sin embargo, en grandes cantidades provocan el fenómeno de eutroficación, o sea el envejecimiento acelerado
de los lagos o cuerpos receptores de aguas estancadas o semiestancadas, cuya principal manifestación es el
crecimiento desmesurado de algas que a su vez rompen el equilibrio ecológico existente. Al morir, estas
grandes masas de algas entran en descomposición y agotan los recursos de oxígeno del agua, ocasionando el
desprendimiento de los nutrientes de las algas muertas, la formación de azolves, y produciendo malos olores y
sabores.
Página 12 de 31
Los contaminantes bacteriológicos, a través de las bacterias patógenas, causan enfermedades hídricas de las
poblaciones. Para la identificación de la calidad bacteriológica del agua se emplean diversos índices de
contaminación. En general, se prefieren las bacterias que acompañan a las de la flora entérica patógena, más
abundantes y fáciles de poner en evidencia mediante pruebas rutinarias, como son el número más probable
(NMP) de coliformes. Otros microorganismos que sirven como índice de contaminación son: E. Coli,
Streptococus fecalis, Glastridium perfrigens, Candida, etc.
Las substancias tóxicas presentan dos tipos de toxicidad: inmediata y a largo plazo.
Los efectos tóxicos inmediatos pueden llegar a manifestarse en proporciones muy grandes, como por ejemplo
la muerte de varios millones de peces provocada por el derrame de una gran cantidad de DDT. Sin embargo,
pequeñas cantidades de DDT que se derraman no son suficientes para causar una toxicidad inmediata; éstas
se incorporan a los organismos a través de la cadena alimenticia y por esa vía llegan al hombre. (ver
bioacumulación)
Ciertas substancias como algunos plaguicidas y compuestos orgánicos de metales pesados tienen afinidad a
los lípidos, y se acumulan fácilmente en los tejidos grasos de los animales y humanos hasta llegar a
concentraciones tóxicas.
Las substancias radiactivas, contaminantes potenciales, son dañinas a la salud y producen alteraciones
genéticas. Estas substancias no son destructibles por ningún método químico ó físico conocido. Deben ser
depositadas en disolución con agua o por medio de isótopos estables.
La contaminación resulta de muy variados actos, desde derrames inadvertidos y accidentales hasta descargas
tóxicas con intenciones delictivas. Cualquiera que sea la causa, la contaminación es un subproducto de las
actividades económicas y sociales: cultivos, construcción de hogares cómodos, suministro de energía y
transporte, manufactura de artículos, aprovechamiento de la energía atómica y nuestras funciones biológicas
básicas (excreciones). Los problemas de la contaminación se han vuelto más opresivos con los años porque
tanto el crecimiento demográfico como la expansión per cápita del consumo de materiales y energía aumentan
las cantidades de desechos que van al ambiente. Asimismo, muchos materiales muy utilizados, como las latas
de aluminio, los envases de plástico e innumerables productos químicos orgánicos sintéticos, no son
biodegradables, es decir, resisten el embate y la corrupción de los saprofitos y los descomponedores de
detritos, y se acumulan en el medio.
Es importante observar la extensión y la diversidad de la contaminación. Cualquier parte del ambiente es
susceptible a ser afectada y casi todo es contaminante. El único criterio es que la adición del contaminante
causa alteraciones indeseables. El efecto de estas alteraciones podría ser en buena medida estético (por
ejemplo, el aire enrarecido que oculta un paisaje lejano o la basura afea los acotamientos de las carreteras), o
daña todo un ecosistema (la extinción de un pez o la tala de un bosque), o incide en la salud humana
(desechos tóxicos que contaminan el suministro de agua, o el aire sucio que causa enfermedades). Asimismo,
los efectos van de los muy localizados (digamos, la contaminación de un solo pozo) a los mundiales. Estamos
acostumbrados a pensar en la contaminación como la introducción en el ambiente de materiales artificiales,
pero también causa alteraciones indeseables la adición de demasiados compuestos naturales, como los
fertilizantes que van a dar a los arroyos y los ríos, así como el dióxido de carbono que pasa a la atmósfera.
Por lo tanto, la consigna “no contaminen” es una burda simplificación. La misma naturaleza de nuestra
existencia entraña la producción de residuos. Nuestro trabajo para remediar los problemas de contaminación
presentes y futuros es paralelo al concepto de desarrollo sostenible. Consiste en adaptar los medios de
satisfacer nuestras necesidades actuales de modo que manejemos los desechos en formas que no causen
alteraciones ni pongan en riesgo a las generaciones venideras. En cada caso, la estrategia general debe ser:
1. Identificar el material o los materiales que causan la contaminación (la alteración indeseable).
2. Identificar el origen de tales contaminantes y los causantes de las emisiones.
3. Establecer y poner en práctica de medidas para evitar que esos contaminantes ingresen al
ambiente.
4. Establecer y poner en práctica medios alternativos de satisfacer las necesidades, medios que
no produzcan residuos contaminantes (prevención de la contaminación).
En esencia, se considera que la estrategia para enfrentar la contaminación consiste en reconocer el primer
principio fundamental de la sustentabilidad: los ecosistemas se libran de los desechos y reponen los nutrientes
reciclando todos los elementos de modo que evitan tanto la contaminación como el agotamiento de los
recursos. En contraste con este principio, hemos dicho que los seres humanos han creado un sistema basado
en el flujo unidireccional de los recursos, de utilizarlos a desecharlos. Este flujo es más evidente cuando
observamos que los recursos se emplean para fabricar productos que terminan en el basurero, pero el
concepto se aplica de manera similar en términos de los minerales nutrientes básicos que sustentan la vida,
como nitrógeno, fósforo y potasio.
Página 13 de 31
Los Sistemas Sociales y la
contaminación
Ignorancia Aire
por El hombre adiciona al
Accidente Agua
contaminantes
Intencionalidad Suelo
Influyendo en la
Ecosistemas dañados salud humana
Página 15 de 31
El problema de los desechos cloacales radica, sobretodo, en el volumen de lo eliminado en relación con el
caudal del receptor. La actividad de las bacterias que degradan requiere oxígeno para llevar la materia
orgánica a dióxido de carbono y agua. Si el volumen vertido es muy grande se puede consumir todo el oxígeno
disuelto y llegar a la anaerobiosis, afectando las funciones respiratorias de los organismos que viven en el
medio y provocando, por ejemplo, muertes masivas de peces u otros organismos, lo que agrava el problema.
La descomposición anaeróbica de la materia orgánica tiene como producto final al ácido sulfhídrico, con
característico olor a huevo podrido, a derivados de metano y, a fosforados.(Eutroficación) Otro importante
grupo de vertidos domésticos son los detergentes. Los primeros detergentes no eran biodegradables y, por lo
tanto, se acumulaban en ríos y aguas subterráneas. Con la aparición de los llamados detergentes
biodegradables, el problema disminuyó un poco pero no se solucionó. Estos tienen en su fórmula un núcleo
bencénico que en el medio acuático puede convertirse en fenol, altamente tóxico. Al mismo tiempo, para
aumentar la eficacia de los detergentes en las aguas duras, se le agregan fosfatos, principales causantes de
eutroficación. El gran uso de jabones y detergentes puede provocar la aparición de espumas sobre la superficie
de los ríos que dificultan el intercambio gaseoso con la atmósfera llevando a disminuciones más marcadas del
oxígeno disuelto. También modifican la tensión superficial y esto afecta a la fauna de superficie: neuston, aves
pescadoras, etc.
Los detergentes constituyen un caso típico de nueva tecnología que reemplaza a otra de menor impacto
ambiental.
En los líquidos cloacales están presentes, también, cloruros, sulfatos, sustancias nitrogenadas y fosforadas. El
nitrógeno aparece bajo la forma de compuestos amoniacales que por oxidación pueden transformarse en
nitritos y nitratos, que fertilizan el agua de los arroyos donde son volcados.
En los hogares también se desecha por vía acuática una considerable cantidad de sustancias no
biodegradables, corrosivas o que alteran la acidez de los desagües (pesticidas domésticos, lavandina, ácidos,
solventes), cuyos efectos variarán en cada caso. No debemos olvidar aquí la contaminación asociada a la
transmisión de enfermedades.
Bideogradabilidad
Un compuesto es biodegradable cuando puede ser asimilado y metabolizado por seres vivos. Por este proceso
una sustancia es degradada a sustancias más sencillas, con la consiguiente ganancia de energía para el
organismo.
Para que un compuesto sea biodegradable deben cumplirse dos condiciones básicas:
a) que la sustancia tenga un elevado grado de energía potencial (como es el caso de las moléculas formadas
por largas cadenas de hidratos de carbono)
b) que los organismos degradadores posean las enzimas capaces de catalizar la reacción de rotura de la
molécula.
Los compuestos sintéticos suelen ser molecularmente muy diferentes de los compuestos naturales y, por lo
tanto, de difícil reconocimiento por parte de las enzimas existentes en la naturaleza. Esto los hace no
biodegradables o biorresistentes. Al no degradarse, se acumulan como tales, pudiendo llegar a
concentraciones nocivas.
Además de la degradación biológica, en la naturaleza existen mecanismos de degradación física (por acción de
la luz) y química por acción de sustancias oxidantes.
Página 16 de 31
Tres conceptos a diferenciar: Contaminación, Polución y Eutroficación
En la bibliografía general es muy común que se encuentren los términos contaminación y polución como
sinónimos. Polución, del latín polluere que significa ensuciar, manchar, empezó a usarse cuando se advirtieron
los efectos estáticos del problema. Contaminación es el término más usado en castellano, especialmente en
América Latina. Como es vocablo muy difundido en el área de la medicina, algunos autores (Branco, 1984)
prefieren reservarlo para indicar el contagio de enfermedades a través del agua, dejando el término polución
para los aspectos ecológicos, más dinámicos del ecosistema.
Siguiendo esta línea de pensamiento, para el caso de la epidemia de cólera, los ríos del Norte de nuestro país
están contaminados, pero no necesariamente poluídos. Puede haber casos de polución con efectos visibles
sobre la comunidad natural sin afectación de la potabilidad del agua, como sería el caso de una disminución del
tenor de oxígeno disuelto. Ahora bien, frecuentemente contaminación y polución están asociadas y se usan los
dos términos en forma indistinta.
Otro vocablo asociado es el de eutrofización. Es el proceso por el cual una masa de agua pasa de un bajo a un
alto nivel de productividad. La eutroficación es un caso particular de polución en el que, dado un aumento
significativo del aporte de fósforo y nitrógeno que fertilizan el agua, se produce un aumento desmesurado de
las poblaciones vegetales. En estos casos se observan floraciones algales seguidas de la muerte masiva de las
mismas cuando se acaban los fertilizantes. Esto provoca alteraciones en el color, sabor y olor de las aguas, y
obstrucción de tomas y filtros. La eutroficación puede ser natural o artificial (por el lavado de fertilizantes de los
suelos o por detergentes). En nuestro país se observa ocasionalmente en los embalses de Salto Grande, del
Río Tercero y en las lagunas bonaerenses. Algunas asociaciones ambientalistas han denunciado los primeros
síntomas de eutroficación muy localizada en lagos de zonas frías, a la salida de las tuberías de desagües
cloacales en el Nahuel Huapi y el Lacar.
Los organismos que viven en un entorno acuático compiten de manera continua por el oxígeno disponible. Las
bacterias que consumen oxígeno (bacterias aerobias) se alimentan de los desechos sólidos de animales más
grandes, y de sus restos cuando éstos mueren.
Las bacterias aerobias también se alimentan de ciertas sustancias que produce la industria y que se hallan en
el agua. Esas sustancias biodegradables son descompuestas en sustancias más simples por la acción de estas
bacterias aerobias.
Página 17 de 31
Si el agua contiene grandes cantidades de materiales biodegradables, las resultante hace aumentar la
demanda del oxigeno disuelto disponible. Los organismos acuáticos que requieren cantidades mayores de
oxígeno disuelto se hallan en una situación más riesgosa si la población bacteriana se hace demasiado grande.
En tal caso su supervivencia es dudosa.
La concentración mínima de oxígeno disuelto (se abrevia OD) necesaria para la vida acuática depende del tipo
de animal que se considere. Los peces no pueden vivir en agua que tenga un nivel de oxígeno disuelto inferior
a 0.004 gramos por 1000 g de disolución. Esta concentración equivale a 0.004 partes por mil, pero es más
cómodo expresarla como cuatro partes por millón, 4 ppm
(0.004/1000 = 4/1 000000).
Una concentración tan pequeña es difícil de visualizar. Imaginemos que una muestra de agua está
representada por un millón de monedas pequeñas, una encima de otra. Esta columna se alzaría a una altura
de ¡1.6 Km.! Tan sólo cuatro monedas de esta columna representarían el nivel mínimo de oxígeno disuelto que
los peces requieren para sobrevivir. Es una cantidad muy pequeña, pero absolutamente esencial.
Si se reduce la concentración de oxígeno disuelto, las especies de peces que requieren más oxígeno
emigrarán a otras regiones del agua, o bien morirán. Desafortunadamente, entre ésas están especies aptas
para la pesca deportiva, como el lucio y la trucha.
Organismos indicadores
El Canal Oeste próximo a la ciudad de La Plata presenta valores de alrededor de 210 mg por litro de DBO.
Un organismo indicador clásico es la bacteria Escherichia coli. La presencia de esta especie en un cuerpo de
agua indica contaminación con materia fecal humana, ya que sólo se reproduce en el tracto digestivo del
hombre.
Cuando se busca medir la contaminación por desechos cloacales se hacen censos de bacterias coliformes al
microscopio. Según standars internacionales, en el agua potable no debe haber más de 20.000 bacterias
coliformes por 100 mililitros.
A pesar de ser una bacteria muy abundante no causa tantos problemas sanitarios (algunas diarreas) como sus
asociadas, las enterobacterias de los géneros Salmonella y Shiguella, causantes de las más importantes
enfermedades gastrointestinales: fiebre tifoidea, paratifoidea y gastroenteritis aguda. Dado que la cantidad de
E. coli es muy superior a la de las otras, la ausencia de la misma en una muestra de agua permite suponer que
tampoco se encuentran las otras especies más peligrosas; por el contrario, la presencia de E. coli, si bien no
asegura la de las otras, permite sospecharla. Por lo tanto, una muestra de agua con análisis bacteriológicos
positivos no es potable a menos que sea tratada específicamente.
Muestreo y Análisis
En la planeación y desarrollo de un programa tanto específico como general para el control efectivo de la
contaminación, intervienen cuatro factores fundamentales que bien ponderados pueden conducir a la solución
más conveniente del problema en cuestión, a saber:
a) Factor económico
b) Factor tecnológico
e) Factor educacional
d) Factor legislativo
Los primeros pasos para el desarrollo de un programa de control de contaminación están representados por el
muestreo y análisis, de cuyos resultados dependerá la acción mediata o inmediata a tomar, previa ponderación
de los cuatro factores mencionados anteriormente.
Muestreo
El muestreo es la fase más importante en la determinación analítica de un cuerpo de agua. Los puntos de
colección de las muestras deberán ser seleccionados tomando en cuenta las fuentes de contaminación,
dilución por corrientes ramificadas, cambio en la topografía y declive del río.
Página 18 de 31
4. Muestra promedio según su masa contaminante Al igual que la anterior, se aplica para el análisis de
aguas negras y de desecho industrial; consiste en hacer una mezcla de varias muestras tomadas en proporción
de agua. Este método también está basado en la masa de los desperdicios industriales que se tiran cada día.
El intervalo de tiempo entre la recolección de la muestra y su análisis debe ser el menor posible, ya que la
composición de la muestra puede variar antes de llegar al laboratorio.
Análisis
En la planeación de un programa analítico debemos tomar en cuenta cuatro consideraciones fundamentales:
a) Determinar qué punto del sistema necesita control y por lo tanto análisis.
b) Determinar cuáles contaminantes requieren control.
c) Determinar qué método se debe aplicar en la cuantificación de cada contaminante en particular.
d) Determinar con qué frecuencia el contaminante debe ser cuantificado.
Los métodos de alta precisión se usan únicamente cuando ésta es requerida y cuando dichas interferencias
pueden hallarse presentes; sin embargo, estos métodos son usualmente complicados y laboriosos, además de
que requieren mucho tiempo y en ocasiones su uso no justifica tales costos y tiempo empleados.
En la actualidad se han desarrollado diversos métodos analíticos que se basan en técnicas
espectrofotométricas, espectroscópicas, radioquímicas, fotométricas, refractométricas, polarimétricas,
potenciométricas, cromatográficas, interferométricas, etc. Sin embargo, por su manuabilidad y rapidez en la
realización de análisis, se usan las técnicas espectrofotométricas, potenciométricas, cromatográficas y otras.
Interpretación de resultados
Los resultados analíticos deben interpretarse previo conocimiento estadístico del problema global, para lo cual
es necesario contar con un número de resultados tales que permitan expresar los valores con un factor de
confianza que defina si el contaminante o contaminantes en cuestión están dentro ó fuera de los límites de
control. El factor de confianza recomendable, de acuerdo a experiencias, es de 75%.
Finalmente, para definir sí existe o no problema de contaminación en un cuerpo receptor específico, deberá
atenderse única y exclusivamente al uso ó destino final del agua en cuestión.
El proceso de Eutroficación.
Lo que ocurrió durante los años setenta y ochenta en la bahía de Chesapeake, el mayor estuario de
Norteamérica, ejemplifica el proceso de la eutroficación. El fenómeno de la eutroficación, como es de suponer,
no es exclusivo de dicha bahía, pero tal vez constituye el ejemplo más representativo a nivel mundial. Lagos,
lagunas, represas y estanques de todo el mundo vienen padeciendo tal problema por causa de desechos
sólidos, arrastre de tierras y lodos de los deslaves, las descargas de aguas negras, etc. Sin embargo, la lección
es que sí es posible recuperar y regenerar esas masas de agua, grandes y pequeñas, para restaurar en sus
entornos los nichos ecológicos originales, al menos en gran parte.
Antes de los años setenta, la Bahia de Chesapeake era productiva en extremo; rendía millones de kilogramos
de pesca y mariscos y albergaba grandes bandadas de aves acuáticas. Casi todas las cadenas alimentarias
que mantenían esta zona generosa se originaban en la vegetación marina, 200,000 hectáreas de pasto
submarino que crecía a uno o dos metros debajo de la superficie. Los macizos de vegetación proveían
alimento, hábitat para el desove, abrigo para las crías y oxígeno disuelto para respirar.
A comienzos de los setenta, comenzó a morir la vegetación acuática de todos los ríos y subestuarios que
desembocaban en la bahía. Para 1975, las pérdidas eran graves y para 1980 no quedaba vegetación excepto
en el desagüe principal en la parte inferior de la bahía. Las poblaciones de peces, moluscos y aves acuáticas
que dependían de la vegetación también comenzaron a declinar. Todavía más devastador fue que en las aguas
del fondo de las zonas profundas se agotó el oxigeno disuelto y muchos peces y moluscos murieron sofocados.
¿Qué causó la extinción de la vegetación marina y el agotamiento del oxígeno disuelto?
Página 19 de 31
Un equipo de científicos de la Universidad de Maryland y del Instituto de Ciencias Marinas de Virginia, pa-
trocinado por fondos de la Oficina de Protección al Ambiente, investigó el problema. Los desechos químicos
tóxicos de las industrias fueron descartados, porque si bien causaban daños en algunos lugares, no podían ser
causantes de la extinción en toda la bahía. Se sospechaba de los herbicidas empleados en los campos
agrícolas, pero las pruebas mostraron que no alcanzaban concentraciones perjudiciales excepto en canales y
arroyos pequeños que recibían el desagüe de los campos. Así, los investigadores dirigieron su atención a la
función de la claridad del agua, y ésa resultó la clave. Las aguas de la bahía de Chesapeake se habían vuelto
turbias, y así permanecían durante lapsos prolongados. El aumento en la turbiedad bloqueaba la luz requerida
para la fotosíntesis, y por ello la vegetación moría. ¿Qué causaba esta turbiedad? El fitoplancton (phyto,
vegetal; plancton, errante), compuesto de varias formas de plantas microscópicas que crecen y se multiplican
al tiempo que flotan en el agua. El enriquecimiento del agua con nutrientes estimuló el crecimiento del
fitoplancton. Agravaban el problema los sedimentos (sobre todo partículas de arcilla) en suspensión. Con la
pérdida de la vegetación marina, ya no se realizaba la fotosíntesis y no había oxígeno disuelto. Todavía más
perjudiciales fueron las bacterias descomponedoras que se alimentaban de la materia muerta, pues consumían
el oxígeno que necesitaban peces y moluscos.
La bahía de Chesapeake había caído víctima de la eutroficación, pero el fenómeno no es exclusivo de esa
zona. En los últimos 40 años, muchos miles de charcas, lagos pequeños y ciertos ríos han sufrido esta suerte,
y el problema se sigue difundiendo. Lo bueno es que hay medios para vigilar el problema, y en algunos casos
se han logrado recuperaciones notables.
Posibilidades de recuperación
Es evidente que la condición eutrófica persistirá siempre que el aporte de nutrientes sea tal que se mantenga
una tasa elevada de crecimiento del fitoplancton. Aun si ese aporte disminuyera, la liberación de nutrientes de
los detritos en descomposición bastaría para que la eutroficación perdurara. No obstante, los nutrientes tam-
bién fluyen del sistema o se estabilizan en los sedimentos del fondo. Cuando la entrada de nutrientes se acorta
y los que están presentes se retiran del ciclo, disminuye el crecimiento del fitoplancton, los detritos son
consumidos, las bacterias mueren y las concentraciones de oxígeno disuelto se recuperan, y también se
recupera el ecosistema original si las poblaciones no llegan a ser exterminadas por completo. Para este
momento, quizá haya conjeturado que la clave para controlar la eutroficación es reducir el aporte de nutrientes.
Ahora, quiero examinar otros factores que contribuyen a la eutroficación.
Pérdida de pantanales.
Los pantanales son esas hondonadas con vegetación emergente que se encuentran junto a las corrientes de
agua o dentro de la línea del litoral. En términos más técnicos, los pantanales son áreas terrestres cubiertas por
aguas someras en ciertos momentos y más o menos drenadas en otros. Dependiendo de la profundidad y
permanencia del agua se clasifican en pantanos, marismas y ciénagas, ya sea de agua dulce o salada.
Asimismo, se dividen en pantanos litorales e interiores. Los pantanos litorales son las extensiones a menudo
grandes de hierbas y juncos a lo largo de costas y estuarios que se cubren con la marca alta y drenan con la
baja. Los pantanos interiores son los que, por estar lejos de las costas, no son afectados por las mareas. La
comunidad vegetal suele estar compuesta de agrupamientos densos de especies de hierbas, juncos y otras
plantas emergentes y árboles adaptados a las inundaciones periódicas.
Sin importar su composición, los pantanos son los más eficaces dispositivos naturales de control de inunda-
ciones y de filtración de agua. Reciben los escurrimientos excesivos y los desaguan poco a poco. Además,
mantienen el agua casi inmóvil, de modo que los sedimentos se asientan. Conforme el agua entra y sale, el
humus captura por adsorción los nutrientes y al cabo los reabsorben las plantas. El agua que procede de los
pantanos es casi pura. Los pantanos litorales, hacen las veces de filtro con cada flujo y reflujo de las mareas.
En su función doble de retener agua y nutrientes, son los ecosistemas más productivos de la Tierra en términos
biológicos, con cadenas alimentarias que sustentan a muchas especies de mamíferos, bandadas de aves
acuáticas y una plétora de organismos que viven en el agua. Muchos organismos dependen del hábitat que les
brindan los pantanos para reproducirse.
Estas bondades de los pantanos apenas han sido reconocidas en las últimas décadas. Solían ser vistos como
tierras improductivas, verdaderas molestias que criaban nubes de mosquitos y otros insectos, demasiado
aguadas para labrar pero muy secas para navegar. Se consideraban buenas sólo para darles un “mejor’.
Ahora, nos damos cuenta de que la intensificación del enriquecimiento de nutrientes en las corrientes de agua
y la eutroficación es otra consecuencia de esas pérdidas.
Los pantanos litorales también han sido dragados, rellenados y protegidos con muros de contención. (Se
excava a una profundidad de alrededor de un metro, se emplea el material extraído para levantar la otra parte y
se estabiliza el bordo con un muro de contención). Es evidente la ventaja de establecer propiedades en un
corredor costero, ¿pero a cambio de qué? No sólo se pierde la productividad y la capacidad limpiadora de las
lagunas y charcas, sino que entonces las olas golpean los muros y crean turbulencias que agitan los sedimen-
tos y los mantienen en suspensión durante días y a veces semanas, con lo que obstaculizan la luz e impiden la
fotosíntesis y el crecimiento de la vegetación acuática sumergida.
Tratamientos químicos
Los herbicidas se emplean en la agricultura para impedir el crecimiento de hierbas malas. Como las hierbas
acuáticas (algas y vegetación béntica) también se eliminan con tratamientos químicos, miles de toneladas de
estos agentes fueron arrojados a los lagos y charcas de Estados Unidos en los años sesenta y setenta. Los
resultados fueron desconsoladores. El fitoplancton, en especial las cianobacterias, que son las más molestas,
se cuenta entre los organismos más resistentes. Por lo tanto, la cantidad de productos químicos necesarios
para eliminarlo también tuvo efectos graves en casi todos los demás organismos acuáticos. Cuando las
Página 21 de 31
concentraciones de herbicidas se diluyen, las cianobacterias y otras especies de fitoplancton se cuentan entre
las primeras en reaparecer.
A la fecha, no se ha encontrado un agente químico específico del fitoplancton que no dañe al resto de la
vegetación y la fauna acuática. Sin embargo, se emplea sulfato de cobre para controlar su crecimiento en algu-
nas represas de suministro de agua, a la que de otro modo le impartirían un sabor desagradable, además de
que taparían los filtros. No obstante, se sabe que cantidades escasas pero detectables de cobre son muy
tóxicas para todos los organismos. Así, hay que mantenernos escépticos en cuanto a los efectos a largo plazo
de esta medida. ¿Es sostenible?
Aeración
El agotamiento del oxígeno disuelto causado por los descomponedores de detritos y la consecuente sofocación
de la vida acuática es la etapa final y más destructiva de la eutroficación. De ahí se sigue que la aeración
artificial del agua sirva para alejar esta etapa. Más aún, en un ambiente con concentraciones elevadas de
oxígeno disuelto, el fosfato, un nutriente clave, forma con más facilidad los compuestos que se estabilizan en
los sedimentos; así, este sedimento importante es retirado de la solución acuosa.
Un sistema de aireación que gana popularidad Consiste en tender una red de tubos de plástico con poros
microscópicos en el fondo de la corriente de agua que se quiere tratar. El aire bombeado a presión hace que
por los poros salgan burbujas pequeñísimas que se disuelven en el agua (si las burbujas fueran mayores, flo-
tarían a la superficie y se desperdiciaría la mayor parte del aire bombeado). El sistema ha resultado efectivo
para acelerar la descomposición de los detritos acumulados, mejorar la calidad del agua y fomentar el regreso
de la vida acuática más deseable. Sin embargo, es notable el alto costo de instalar y hacer funcionar el
sistema. Con todo, el sistema es aplicable en puertos, atracaderos deportivos y algunas represas en los que la
demanda de agua de mejor calidad justifica la inversión.
Página 22 de 31
elevados en las zonas en las que los detergentes los contienen. Estos compuestos añadidos con fines de lim-
pieza pasan por el sistema y salen con las descargas.
En las regiones donde la eutroficación es problema, un paso clave para prevenirlo ha sido prohibir la venta de
detergentes con fosfatos, o al menos regular su contenido. Las prohibiciones fueron impuestas sólo gracias al
fuerte apoyo de los ambientalistas que superaron el cabildeo opositor de la industria de los detergentes. Pero
ya se llegó al punto crítico y los principales fabricantes se están inclinando por una producción general de
fórmulas sin fosfatos, en lugar de elaborar fórmulas distintas para cada región. Puesto que esta transición se
encuentra aún en progreso, conviene aconsejar a los consumidores que lean en el paquete los ingredientes
activos. Asimismo, la prohibición no abarca a los detergentes para trastos, y algunas marcas tienen muchos
fosfatos. Revíselas para descubrir cuál tiene pocos o nada.
Además, se cuenta con un programa en curso destinado a modernizar las plantas de tratamiento de aguas
residuales para separar los nutrientes de las emisiones o manejar éstas de las formas que impidan que los nu-
trientes pasen a las corrientes fluviales.
La prohibición de los detergentes con fosfatos y la modernización de las plantas de tratamiento han producido
mejoras a las corrientes de agua que habían sido muy dañadas por las emisiones de las plantas. Sin embargo,
en cierto sentido se trata de medidas fáciles, puesto que el blanco de la corrección, las emisiones de las
plantas de tratamiento de aguas residuales, es una fuente puntual concreta y los métodos de corrección están
bien definidos.
El remedio se vuelve más difícil, pero no menos importante, cuando la fuente es difusa, como en el caso de los
escurrimientos rurales y urbanos. Subsanar estas fuentes no puntuales requiere que miles y quizá millones de
propietarios adquieran nuevas costumbres en cuanto al manejo y uso de fertilizantes y otros agentes químicos
en sus tierras. Ése es el reto.
Métodos de Prevención
Página 24 de 31
Usar el tratamiento avanzado de los desechos para remover el 90% de los fosfatos provenientes de los
efluentes de las plantas industriales y de tratamiento de aguas negras, antes de que lleguen a un lago.
Prohibir o establecer límites bajos de fosfatos para los detergentes caseros y otros agentes limpiadores para
reducir la cantidad de fosfatos que llegan a las plantas de tratamiento de aguas negras.
Controlar el uso de la tierra, usar prácticas de conservación del suelo y limpiar las calles regularmente para re-
ducir el ingreso de fertilizantes, abono y suelo desde fuentes no puntuales. A los agricultores se les puede pedir
que planten en áreas de separación árboles u otra vegetación entre sus campos y cerca de lagos u otras aguas
superficiales.
Proteger los aguazales costeros e internos que filtran y retienen nutrientes que fluyen desde la tierra.
Métodos de Limpieza
Dragar los sedimentos del fondo para remover el exceso de acumulación de nutrientes. No es práctico esto en
lagos grandes y profundos, y no es muy eficaz en lagos someros; con frecuencia reduce la calidad del agua por
la resuspensión de contaminantes tóxicos y puede aumentar la salinidad del agua; el material dragado debe ir a
algún lado, y con frecuencia es arrojado al mar; cambia hábitats de la vida silvestre.
Retirar o eliminar el exceso de malezas. Altera esto algunas formas de vida acuática y es difícil y caro en lagos
extensos.
Controlar el crecimiento de plantas nocivas con herbicidas y plaguicidas. Puede contaminar el agua y matar
animales y otras plantas.
Bombear aire a través de lagos y rebalses para evitar el agotamiento del oxígeno. Es un método caro.
Como con otras formas de contaminación, los métodos de prevención son los más efectivos y generalmente los
más baratos a largo plazo, pero tales métodos tienen que ser diseñados para cada situación tomando como
base el principio del factor limitante. Por ejemplo, debido a que el fósforo es el factor limitante en la mayoría de
los lagos de agua dulce, se debe enfatizar su control. También es más fácil de controlar que el nitrógeno.
Sin embargo, hay desacuerdo acerca de si los ingresos de fósforo deberían ser disminuidos por la prohibición o
limitación de los fosfatos en los detergentes para lavar ropa y otros agentes limpiadores, por la remoción de los
fosfatos de las aguas de desecho en las plantas de tratamiento de aguas negras, o ambas cosas. Los estudios
de más de 400 cuerpos de agua indican que una reducción de 200% de la carga fosfática total debe lograrse
para producir un efecto detectable sobre la calidad del agua.
En algunos lagos y en las aguas costeras y estuarios, debe hacerse énfasis en la reducción de los ingresos de
nitrógeno, porque es el factor limitante. Afortunadamente, si se detienen las entradas excesivas de nutrientes
vegetales limitantes, en general el lago regresará a su estado previo. Sin embargo, es mucho más difícil
controlar el nitrógeno que el fósforo, porque los nitratos son más solubles en agua, y escurren desde grandes
extensiones de tierra.
Página 25 de 31
humana depende del mantenimiento de un océano limpio y vivo, extendido alrededor de todo el mundo. El
océano es el cinturón de vida de nuestro planeta”.
Sustancias Químicas Tóxicas y Plásticos
Hay poca vida en las aguas oceánicas en las que se arrojan grandes cantidades de sedimento de aguas
negras. Las langostas y cangrejos capturados en algunas áreas presentan misteriosos agujeros de quemadas,
y los peces capturados en algunas áreas, tienen tumores y lesiones, principalmente por la exposición a
productos químicos tóxicos.
Los estudios indican que cada año, hasta 2 millones de aves marinas y más de 100 000 mamíferos marinos,
incluyendo ballenas, focas, delfines, leones marinos y tortugas de mar, mueren cuando ingieren o se quedan
atrapados por tazas, bolsas, soportes de paquetes, redes de arrastre, sogas y otras formas de basura “plástica”
arrojada al mar u océano desde botes, o vertida al mar por los ríos y desde las áreas terrestres costeras.
Contaminación del medio marino con residuos sólidos. La basura que mata
Los residuos sólidos en el medio marino constituyen un problema grave tanto en alta mar como junto a las
costas, que empeora constantemente. Los residuos sólidos pueden ser transportados a grandes distancias por
las corrientes marinas y los vientos. Hay residuos en prácticamente todas partes del medio marino y costero
(en alta mar, en el fondo del mar, en las marismas litorales, en desembocaduras de ríos, en las playas); y no
solamente en zonas densamente pobladas, sino también en lugares muy remotos de la tierra, lejos de fuentes
contaminantes evidentes.
La mayor parte de estos residuos son de larga vida y permanecen durante decenios. Una parte son letales para
la fauna, matando y dañando una y otra vez de forma indiscriminada. Los residuos de larga vida constan
principalmente de plástico, metal y vidrio, materiales que no se degradan fácilmente ni con rapidez en el medio
ambiente. La hojalata tarda en biodegradarse más de 10 años; el aluminio más de 2 siglos; los plásticos más
de 4 siglos; y una botella de vidrio un tiempo indefinido.
Los residuos sólidos matan y dañan, causan dolor y sufrimiento. Causan una muerte cruel a los mamíferos
marinos, aves marinas y otras muchas formas de vida en el medio marino; desde las más pequeñas a las más
grandes. Son una amenaza manifiesta para la fauna, pero también con frecuencia una amenaza que no se ve.
Página 26 de 31
Efectos de la basura marina en la fauna salvaje
Principales tipos de daño directo hacia la fauna causado por desechos marinos:
Enredos
Los animales rodeados o atrapados por desechos, nadan o se arrastran hacia el interior de un objeto (lata,
botella) pero no pueden salir de allí. Esto puede ocurrir accidentalmente o porque el animal es atraído por el
objeto como parte de su comportamiento normal o por curiosidad.
Los desechos de gran tamaño atrapan a los animales y los de menor incrementan otros factores. Los objetos
pequeños se enganchan en el manto marino y atrapan a los animales. A veces el desecho se entrelaza,
quitándole la posibilidad del crecimiento. También los tejidos de un animal pueden seguir creciendo alrededor
de un objeto clavado en su carne.
Los animales pueden usar un trozo de basura marina como refugio, como material para anidar o como un
objeto de juego. Usualmente, peces y crustáceos entran a trampas perdidas, buscando refugio o comida,
nunca pudiendo salir.
También las aves levantan objetos de plástico para construir sus nidos, asi sus pichones pueden enredarse y
morirse sin ni siquiera salir de casa.
Un animal puede pensar que la basura es una fuente de comida, esto ocurre si una planta u otro animal están
atrapados en el desecho. Las Aves Marinas pueden ser atraídas hacia peces enredados en redes o líneas de
pesca.
Las redes de pesca descartadas van a continuar atrapando peces aún cuando no se supone que lo deben
hacer. Las redes e hilos de pesca desechados o perdidos que siguen "pescando" son sólo un ejemplo de
amenaza invisible y son un grave problema en los mares de todo el mundo.
Cuando un animal enredado trata de liberarse el mismo puede sufrir grandes heridas por una red, soga,
embalaje de latas o cualquier cosa que lo haya atrapado. Si sobrevive, la herida puede derivar a infecciones o
pérdida de miembros. También al enredarse el animal puede perder su habilidad de nado, causándole
posteriormente dificultades para moverse, para encontrar comida y escapar de predadores. Sin embargo en la
mayoría de los casos el animal muere por estrangulación o sofocación.
Ingestión
Esta ocurre cuando un animal traga desechos. A veces pasa accidentalmente, pero generalmente los animales
se alimentan de estos objetos porque son físicamente similares a su comida original.
Esto puede derivar a inanición o desnutrición, si el material ingerido bloquea el conducto intestinal y no permite
la digestión.
El desecho ingerido también puede acumularse en el tracto digestivo y hacer sentir al animal lleno. Esto
provocará que no busque más comida.
La ingestión de objetos filosos puede causar daños en el tracto digestivo o en el revestimiento del estomago
causando una infección y/o dolor.
Los desechos pueden parecerse al tipo de comida que es normal en la dieta de un animal. Ejemplos típicos,
cuando las tortugas comen bolsas de plástico confundiéndolas con medusas y cuando las Aves se alimentan
de bolitas de plástico confundiéndolas con huevos de peces, pequeños cangrejos o plancton.
Los animales, particularmente las Aves Marinas, también alimentan a sus pichones con desechos en vez de
con comida apropiada.
Tortugas marinas
También se enredan en líneas, cuerda y redes de pesca, pero la ingestión es el problema más grave. Comen
las bolsas plásticas confundiéndolas con medusas, su alimento predilecto. Las bolsas hacen que el tracto
digestivo se bloquee, conduciendo a la inanición. Además, las tortugas comen pedazos de línea de pesca de
monofilamento, globos, bolas del alquitrán y basura que se ha cubierto con algas.
Aves marinas
Son víctimas frecuentes de las redes de pesca abandonadas. Tanto como para que 100 pájaros se hayan
encontrado en una sola red. Muchos pájaros se enredan en los anillos de los embalajes de las latas y en otros
pedazos de basura marina. De las 312 especies de aves marinas del mundo, en 111 es conocido que ingieran
plásticos. El problema de ingestión, aumenta con la latitud: más pájaros son afectados en el norte y en latitudes
medias (como Alaska) que en las latitudes más al sur. En un estudio en Alaska, las pelotillas de la resina
plástica constituyeron 70% de los artículos plásticos injeridos.
Corales
Estos mueren cuando las líneas y redes de pesca desechados, se arrastran a lo largo del suelo marino o a
través de los arrecifes. Cuando los arrecifes son destruidos también son afectados otros animales que
dependes de ese ecosistema para vivir.
Tal vez, lo mejor sería terminar de una vez con todo esto. Destruir la naturaleza y todo lo que esta alrededor de
ella, así los seres vivos no tenemos que sufrir durante un largo período tiempo, y el sufrimiento acabaría lo
antes posible al desaparecer todo ser viviente sobre la tierra, incluido el ser más racional: el ser humano.
Tiremos la basura a los mares y océanos: TODO, así terminamos de una vez con todo el planeta... así
destruimos lo más hermoso: LA VIDA.
Pero esa es una forma muy pesimista de pensar, y para buena suerte de muchos, todavía existe gente
dispuesta a luchar y defender la vida de los seres vivos presentes y las generaciones futuras.
Vaciamiento en el Océano
El vaciamiento de desechos industriales en las costas de EUA ha sido detenido, aunque todavía se hace en las
aguas costeras de algunos PD y PSD. La contaminación con desechos industriales y otros es un “problema
grave en el mar del Norte, el mar Negro, el Golfo Pérsico, el mar Mediterráneo, el mar Adriático y el mar de
Arabia.
Cada año, barcazas y barcos arrojan legalmente, en EUA, más de 172 millones de toneladas (métricas) de
desechos sólidos en 109 lugares de las costas del Atlántico, del Pacífico y del Golfo: Cerca del 80% de esos
desechos son despojos de dragados materiales extraídos de los fondos de puertos y ríos para mantener
abiertos los canales de navegación. La mayoría del 20 % restante de los desechos sacados en barcaza y
Página 28 de 31
arrojados al mar es cieno de aguas negras, una mezcla viscosa de sustancias químicas tóxicas, agentes
infecciosos y sólidos sedimentados removidos del agua de desecho en las plantas de tratamiento de aguas
negras. Sólo Estados Unidos y Gran Bretaña arrojan actualmente cantidades grandes de despojos de dragado
al mar. Algunos políticos y ambientalistas creen que debería haber una prohibición para usar el mar o el
océano como un tiradero de lodos y cieno infecto, pero otros creen que la descarga de esos materiales en el
océano es más segura que otras alternativas.
Los barcos también tiran cantidades grandes de basura en el mar. Los países podrían prohibir dicho tiradero en
las aguas de su jurisdicción, y un tratado internacional podría prohibir que se arroje la basura en aguas
internacionales, pero tales prohibiciones son difíciles de hacer cumplir. La basura que puede ser arrojada al
mar sin cargo alguno, puede costar de 25 a 50 centavos de dólar la libra si se dispone de ella en un puerto, un
embarque típico cuesta de 500 a 100 dólares cada vez, la mayoría de los propietarios de barcos continuarían
tirando desechos al mar y corriendo el ‘riesgo” de ser sorprendidos, y pagar multas pequeñas por evitar
aquellos costos.
Desde 1985, tirar al océano desechos radiactivos más allá de los límites de jurisdicción nacional ha sido
prohibido por un acuerdo internacional. Aunque Estados Unidos no ha arrojado material radiactivo desde 1970,
no firmó este acuerdo porque los funcionarios de los departamentos de Energía y de la Defensa querían
retener la opción de tirar tales desechos en el mar. Por más de 40 años, el gobierno británico ha permitido que
la industria nuclear descargue agua radiactiva en aguas costeras bajo la jurisdicción gubernamental, con poco
moni toreo de los niveles de radiactividad en estos mares.
Contaminación con Petróleo
El petróleo crudo (o sea, el que está como es extraído del pozo) y el petróleo refinado (gasolina y otros
productos obtenidos por destilación y procesamiento químico del petróleo crudo) son accidental o
deliberadamente liberados al ambiente desde varias fuentes. Los accidentes de los buque-tanques y los
escapes en el mar (petróleo que escapa bajo alta presión desde un agujero perforado en el fondo marino) de
los equipos de perforación fuera de la costa, reciben el máximo de publicidad. Sin embargo, casi la mitad
(algunos expertos estiman un 90%) del petróleo que llega a los mares y océanos proviene de tierra firme,
cuando el petróleo de desecho arrojado en superficie por personas, ciudades e industrias termina en corrientes
fluviales que terminan en el mar.
En 1979, el mayor escape marino del aceite ocurrió en el pozo petrolero Ixtoc 1, en la región sur del Golfo de
México (en el sureste del país mexicano). Durante los ocho meses que tomó tapar la perforación, más de 694
millones de litros de petróleo escaparon a las aguas del golfo. Sin embargo, la liberación del aceite mineral
desde los pozos petroleros durante las operaciones normales y durante el transporte en los buques-tanques,
añade un volumen mayor de petróleo a los mares que los derrames ocasionales. La gran masa de este
petróleo resulta del lavado de los buques-tanques con agua de mar, y el vertimiento del agua aceitosa de lastre
en el océano. Los brotes naturales de petróleo, también liberan cantidades grandes del aceite en el océano, en
algunos sitios.
Los accidentes de los buques-tanques son responsables del 10% al 15% del ingreso anual de petróleo a los
mares y océanos del mundo, pero los derrames concentrados pueden tener impactos ecológicos y económicos
severos sobre las áreas costeras. El accidente de mayor magnitud tuvo lugar en 1983 cuando el buque-tanque
Castillo de Beliver se incendió y vertió 296 millones de litros de petróleo al océano, frente a las costas de
Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. El petróleo también puede ser liberado al mar como un acto de terrorismo
ambiental o como resultado de la guerra.
Efectos de la Contaminación con Petróleo
Los efectos del petróleo sobre los ecosistemas marinos dependen de varios factores: tipo de petróleo (crudo o
refinado), cantidad liberada, distancia del sitio de liberación desde la playa, época del año, condiciones
tempéricas o del tiempo atmosférico, temperatura media del agua, y corrientes oceánicas. El petróleo que llega
al mar se evapora o degradado lentamente por bacterias.
Los hidrocarburos orgánicos volátiles del petróleo matan inmediatamente varios organismos acuáticos,
especialmente en sus formas larvales más vulnerables. En las aguas calientes, la mayor parte esas sustancias
tóxicas se evapora a la atmósfera en uno o dos días, pero en aguas frías, esto puede tomar hasta una semana.
Algunas otras sustancias químicas permanecen en la superficie y forman burbujas o “musgos” flotantes como
de alquitrán. Este petróleo a flote cubre las plumas de las aves, especialmente de las que se zambullen, y la
piel de mamíferos marinos, como focas y nutrias de mar.
Esta cubierta aceitosa destruye el aislamiento térmico natural y la flotabilidad de esos animales, y muchos se
hunden o mueren por la exposición al medio natural, debido a la pérdida de calor del cuerpo. Estas burbujas o
espuma de aceite son degradadas por bacterias durante varias semanas o meses, aunque persisten mucho
más en las aguas gélidas polares. Los componentes pesados del petróleo que se hunden al fondo del mar o en
los estuarios, pueden matar organismos que habitan en las profundidades, como cangrejos, ostras, mejillones y
almejas, o los hacen inadecuados para el consumo humano, debido a su sabor y olor aceitosos.
La mayoría de las formas de vida marina se recuperan de la exposición a cantidades grandes de petróleo
crudo, en unos tres años. Sin embargo, la recuperación de la vida marina a la exposición de petróleo refinado,
en especial en los estuarios, puede tomar diez años o más. El derrame de petróleo más minuciosamente
estudiado del mundo ocurrió cuando la embarcación Barge Florida encalló en Cabo Cod en 1969. Los datos
Página 29 de 31
muestran que incluso 20 años después, todavía están presentes trazas de petróleo en los sedimentos de
marismas y en los tejidos de cierta vida marina. Los efectos de los derrames en aguas frías (en la Sonda del
Príncipe Guillermo, en Alaska y en aguas antárticas) generalmente duran más.
Las manchas aceitosas de petróleo que se depositan en las playas tienen graves efectos económicos sobre los
residentes en las costas, que pierden los ingresos por sus actividades pesqueras y turísticas. Las playas
contaminadas con petróleo y en las que hay olas o corrientes fuertes, quedan limpias casi un año después,
pero las playas en regiones resguardadas permanecen contaminadas por varios años. Los estuarios y las
marismas sufren el mayor daño y no pueden ser limpiadas con eficacia.
Control de la Contaminación Marina con Petróleo
El desastre de Valdez y otros derrames de petróleo señalan dramáticamente la necesidad de evitar la
contaminación, porque ningún derrame grande de petróleo puede ser contenido o limpiado efectivamente.
Métodos de Prevención
Usar y desperdiciar menos petróleo
Colectar aceites y grasas usadas en las estaciones de servicio para automóviles y en otros sitios, y
reprocesarlos para el reuso.
Prohibir la perforación petrolera en áreas ecológicamente sensibles en la costa y cerca de ella.
Reglamentar estrictamente la construcción y operación de buque-tanques, equipos petroleros fuera de
la costa, y refinerías de petróleo. Aumentar en alto grado la responsabilidad financiera de las
compañías petroleras para limpiar los derrames de petróleo, para alentar la prevención de la
contaminación. La ley de Contaminación con Petróleo (Oil Pollution Act), de 1990, eleva
sustancialmente la responsabilidad y límites de compensación por derrames de petróleo desde buque-
tanques en las aguas de EUA. También establece un cargo de 5 centavos de dólar sobre cada barril de
petróleo, a fin de crear un fondo de mil millones de dólares para pagar la limpieza y los daños más allá
del límite de responsabilidad de 10 millones de dólares para un derramador.
Hacer que la ruta de los buque-tanques petroleros esté tan lejos como sea posible de las áreas
costeras sensibles y hacer que las embarcaciones de la Guardia Costera guíen a los buque-tanques
hacia afuera de todos los puertos, y de sondas y bahías encerradas.
Requerir que todos los buques-tanques nuevos tengan cascos dobles para disminuir las posibilidades
de escapes severos. Esto se requiere para los buques-tanques nuevos de EUA por la Ley de
Contaminación con Petróleo, de 1990, pero las compañías petroleras pueden esquivar esa previsión,
operando los barcos petroleros bajo la bandera de otros países.
Exigir que todos los buques-tanques existentes tengan casco doble para 1988. La Ley de Con-
taminación con Petróleo, de 1990, estipula esto, pero permite hasta 25 años para que se cumpla.
Requerir que las compañías petroleras pongan a prueba rutinariamente a sus empleados, para
detectar consumo de drogas y alcohol, y que prohíban a marinos conductores de auto, que sean
bebedores y ya hayan sido sancionados, que estén al mando de buques-tanques, y tengan puestos
administrativos en los equipos de perforación fuera de costa.
Demandar que la Guardia Costera tenga un moderno equipo de radar enlazado a los buques-tanques
que utilizan puertos y sondas, y que hagan sonar automáticamente una alarma si un tanque sale de su
ruta.
Requerir planes de limpieza de derrames de petróleo actualizados y estrictos, con sanciones severas y
estrictas para el no cumplimiento.
Prohibir el lavado y retiro de sedimento de los barcos petroleros vacíos y el vaciamiento de ese
desecho en el mar.
Requerir que los barcos petroleros carguen y descarguen el petróleo en plataformas muy alejadas de la
costa, a fin de mantenerlos fuera de las áreas costeras sensibles. El petróleo debe ser conducido por
tubos desde y hacia las plataformas.
Reglamentar estrictamente los procedimientos de seguridad, operación y disposición, de las refinerías
de petróleo y las plantas industriales.
Métodos de Limpieza
Tratar el petróleo derramado con sustancias químicas dispersantes, rociadas desde aviones un día
después de un derrame, de modo que el petróleo se disperse, disuelva o hunda; no es efectivo después de uno
o dos días; algunos biólogos sostienen que los dispersantes matan más vida marina que el petróleo.
Usar helicópteros equipados con láser para producir la ignición y quemar gran parte del petróleo,
especialmente los componentes tóxicos más volátiles; más baratos y más efectivos que los dispersantes por
derrames pequeños, y el único método electivo para mares congestionados con hielo; debe hacerse muy
pronto después del derrame; crea contaminación del aire y las cenizas pueden ser tóxicas para los peces.
Usar barreras mecánicas (botalones inflables) para evitar que el petróleo llegue a la playa; esto es
ineficaz en alta mar y malas condiciones tempéricas (o del tiempo), en aguas congestionadas con hielo o para
derrames grandes. Bombear la mezcla petróleo-agua a botes pequeños llamados “espumaderas”, donde
máquinas especiales separan el petróleo del agua y bombean el primero a tanques de almacenamiento,
también se pueden usar cojines que contengan plumas de pollo para absorber petróleo de derrames pequeños;
esto no es eficaz en alta mar y para derrames grandes.
Página 30 de 31
Usar técnicas de ingeniería genética para desarrollar cepas bacterianas que puedan degradar los
compuestos del petróleo más rápido y más eficientemente que las cepas bacterianas naturales, los posibles
efectos ecológicos colaterales de tales “superbichos” deben ser investigados con cuidado antes de usarlos
ampliamente; no es eficaz para derrames grandes.
Limpiar las playas contaminadas con jergas, detergentes y mangueras de agua a alta presión,
esparciendo fertilizantes con nitrógeno y fósforo para acelerar el crecimiento de las bacterias naturales que
degradan el petróleo y por otros métodos; consume mucho tiempo; demasiado caro para limpiar áreas grandes,
los detergentes y las mangueras de alta presión son nocivas para la vida silvestre.
Aumentar enormemente la investigación del gobierno y las compañías petroleras sobre los métodos
para contener y limpiar los derrames de petróleo. El derrame de Valdez reveló que poca investigación han
hecho las compañías petroleras en esta área desde mediados de la década de 1970, principalmente debido a
que no era exigido o requerido por la ley.
Página 31 de 31