Ensayo sobre la

ÉTICA
ÉTICA MINISTERIAL

Ester Areli Meraz Chacón

¿QUÉ NOS ENSEÑA LA ÉTICA?

La ética es la disciplina que nos enseña cuál debe ser el comportamiento correcto del ser
humano.

La ética nos enseña un conjunto de reglas, normas, mandatos, permisos y prohibiciones que
regulan y pretenden guiar la conducta y el comportamiento humano, dentro de un conjunto
social y en determinado tiempo.

La ética es tan antigua como la existencia del ser humano en la tierra.

No puede haber ninguna sociedad sin moral vivida o practicada.

La ética nos enseña también a manera de reflexión o justificación la forma correcta de

comportarnos antes, durante o después de un hecho o postura humana.

Aunque su aplicación práctica viene desde el origen del hombre mismo, su estudio es
relativamente reciente.

La ética nos señala un rumbo o una orientación a la humanidad para ser aceptados o
rechazados socialmente, cambiando nuestro comportamiento con su aplicación de una
manera drástica, cambiando también nuestro sentido, rumbo o dirección.

La ética nos enseña cómo vivir bien. La ética estudia el comportamiento del hombre en la
sociedad y analiza sus actos como buenos o malos desde el punto de vista de la moral.
Antonio Caso, filósofo mexicano, sostiene que la ética busca la respuesta a un problema
fundamental que el hombre debe resolver: ¿Cómo se puede vivir bien en el mundo? Afirma
que no se puede vivir bien sin una moral que oriente nuestras vidas y permita la
convivencia armónica con los demás.

La ética no consiste en justificar nuestros actos, sino en conocer y comprender claramente

las relaciones que se establecen entre el actuar humano, los valores y las normas que rigen
en la vida social.
¿QUÉ IMPORTANCIA TIENE LA ÉTICA?

El hombre a través de su vida va realizando actos, la repetición de los actos genera actos y
hábitos que determinan las actitudes. El hombre de este modo, viviendo se va formando a sí
mismo. El carácter como personalidad es obra del hombre, es su tarea moral, es el resultado
de su carácter moral para toda su vida, esto es a lo que definimos ética de acuerdo a la
percepción secular.

Tomando en cuenta el aspecto como cristianos, estos mismos principios se aplican de igual
manera, solo que le agregamos los elementos espirituales que como creyentes hemos
aprendido de la Palabra de Dios, la cual es prácticamente un manual de ética que
tendríamos que aplicar en nuestras vidas.

Todos debemos tener un comportamiento correcto en cada momento de la vida ya que se

nos presentan situaciones en las que hay que tomar decisiones analizando lo bueno y lo
malo de ellas, para así no perjudicar a los que nos rodean.

No sólo en situaciones morales sino en todas ya que lo moral va aplicado en cada cosa que
hacemos. De aquí sale la importancia de asegurarse de que lo que uno haga sea lo correcto,
de igual manera para lo secular que para lo que el cristianismo enseña.

Tener una buena formación ética hará que se logre ser una mejor persona y ser mejor,
significará que podamos llegar a ser modelo para otras personas. Sí hacemos malas
acciones o tomamos malas decisiones podemos llevar a que las personas que nos rodean
hagan malas cosas, de manera que ser éticos no solo nos beneficiará a nosotros mismos sino
a los demás.

Otro ejemplo es la juventud de hoy la cual tiene que preocuparse por recibir una buena
formación ya que somos el futuro y de donde todos nos beneficiaremos o perjudicaremos.

Tomando aquello y volviendo a la ética, el hombre está llamado a realizar actos buenos.
Dichos actos son guiados por medio de la conciencia. La cual nos clarifica, qué actos son
correctos e incorrectos. Por lo mismo, es que debemos tender, a las virtudes. Las cuales son
hábitos, que nos hacen más perfectos. Ya que toda rama de la filosofía, al igual que la ética,
tienden a la perfección del hombre.

La importancia de la ética deriva de su objeto de estudio: la moral. Desde que le hombre se

agrupo en sociedades tuvo la necesidad de desarrollar una serie de reglas que le permitieran
regular su conducta frente a los otros miembros de la comunidad. De manera que la moral
es una constante de la vida humana. Los hombres no pueden vivir sin normas ni valores. Es
por eso que, secularmente, se ha caracterizado al hombre como un "animal ético".

Los problemas que la ética estudia son aquellos que se suscitan todos los días, en la vida
cotidiana, en la labor escolar, en la actividad profesional, etc. problemas como: ¿Qué es un
comportamiento bueno o uno malo?, ¿Se es libre para realizar tal o cual acción?, ¿Quién
nos obliga a realizar esta acción?, entre estas 2 acciones, ¿Cuál se debe elegir?, etc.

Todos estos problemas que la ética estudia plantean una urgente solución, que no puede
postergarse por que constituyen el meollo de la vida misma, pues, en última instancia, el
hombre es un ser moral.

Dándole un enfoque dentro del cristianismo, la ética y la moral tienen que ver con las
decisiones humanas.

Esto es, aplicar lo que la Palabra de Dios manda o ignorarlo.

En otras palabras, hacer uso del propio Libre Albedrío, el cual, de acuerdo a las creencias
del cristianismo, es la decisión propia de escoger entre hacer el bien o practicar lo malo,
asumiendo con ello, de forma voluntaria, las consecuencias de nuestros actos, sea para bien
o para mal.
¿QUÉ ME DEJA LA ÉTICA?

En lo personal, la ética me deja una serie de reglas, normas, enseñanzas, directrices,

caminos, de entres los cuales yo debo escoger para comportarme ante las diferentes
situaciones o decisiones que tengo en mi vida diaria.

Desde pequeño estoy recibiendo en forma constante toda clase de estímulos que buscan
desarrollar mi conducta social, desde la utilización de Juegos Didácticos hasta la
realización de Actividades Recreativas que me dejan siempre una enseñanza, recibiendo
premios y aprobaciones en caso de realizar bien una tarea, mientras que por otro lado soy
Castigado o Reprendido si no hago las cosas bien.

En ese momento empezamos a distinguir El Bien y El Mal, teniendo por un lado aquello
que apunta hacia los cuidados y el bienestar propio y ajeno, mientras que por el contrario,
realizando un daño o perjuicio hacia otros como a nuestra propia vida, estorbaremos en
gran manera a nuestra propia felicidad y a la felicidad de quienes nos rodean.

Vivir de acuerdo a valores fundamentales que se encuentran grabados dentro de mi corazón

contribuye a mi propia felicidad y la felicidad de las demás personas.

Es falso creer que el que vive aislado y de acuerdo a su propia interpretación de los valores
éticos labra su propia felicidad puesto que no haría lo que el quiere sino lo que le es
impuesto por las normas.

Esto es tener un falso concepto de la ética y de la libertad, ya que con el ejercicio de mi

propia libertad estaría pasando por encima de la libertad de otros seres humanos.

No se puede comparar la vida de quien vive lealmente de acuerdo a sus propios valores y
compromisos en forma forzada con aquel que lo hace voluntariamente creyendo en que su
buen comportamiento obrará para su propio beneficio y para beneficio de aquellos que lo
rodean.