Partición de la deformación interna a travès de ….

Partición de la deformación interna a travès de fallamiento transcurrente y pliegues de

corrimiento asociados. Ejemplo, Andes de Mèrida.
José Tomás Castrillo Delgado*; Yves Hervouet**
*Escuela de Ingeniería Geologica, Universidad de los Andes, Mérida. Venezuela .
E-mail: cjoset @ ing.ula.ve
**Geologie structurale et teledetection,UMR5831 Imagerie Geophisique,CURS-IPRA,Univ. De Pau,
BP1155, I4013 Pau Cedex, France
Palabras claves:Transcurrencia, Pliegues de corrimiento, deformación interna, partición, Andes
venezolanos.
Resúmen:

Los Andes venezolanos (VA), localizados en la parte noreste de Suramerica constituye una cadena montañosa de 400
km y 100 km de ancho orientada SW-NE y alcanzando alturas hasta de 5000 m en su parte central. Esta cordillera
comenzo su levantamiento durante el Mioceno definiendo la configuración tectonica andina como resultado de la
convergencia oblicua relativa entre dos bloques continentales: el Bloque de Maracaibo(MB) hacia el WNW y el
Escudo de Guayana hacia el ESE. Hacia el norte la placa oceànica Caribe esta siendo subducida bajo ambos bloques
continentales. Esta convergencia oblicua provocò una transcurrencia lateral derecha a traves de la falla de Bocono
(BF) que corta la cadena en su parte axial con un rumbo promedio de N60E. 3 diferentes areas con regimenes
tectonicos diferentes pueden ser descritos. En el area sureste, la estructura consiste en corrimientos paralelos a la
cadena. En la zona central, la falla de Bocono provoca relevos estructurales. En la parte noreste un conjunto de fallas
transcurrentes sinestrales orientadas N-S a NNE-SSO (Falla de Valera ...)que cortan la cadena. La falla de Valera y la
Falla de Bocono definen un area triangular: el Bloque de Trujillo. En esta àrea, la falla de Valera muestra su principal
discrepancia en su regimen tectonco entre la parte norte y sur de la falla de Bocono. Al sur de ella, el regimen
tectonico es compresivo. Proximo a la falla de Bocono este es extensivo y con componente transcurrente. Mas al
norte, relevos curvos relacionados a sistemas de Riedel sinestrales con rumbo NNE-SSO crean cuencas pull-apart
cuaternarias. La organización espacial y la geometría de las grandes fallas transcurrentes (fallas de Bocono,Valera...)
controlan la estructuracion de los Andes venezolanos acomodando ambas la particiòn de la deformacion interna
debido a la convergencia oblicua entre los dos bloques continentales y el escape del Bloque de Trujillo hacia la Placa
Caribe al norte ofreciendo una zona de debilidad o menor resistencia

Abstract

The Venezuelan Andes (VA), located in the northern part of South America, form a 400 km long and 100 km wide
mountain belt trening SW-NE and reaching heights of 5000 m in its central part. This belt began to rise during the
Miocene epoch, therefore defining the Andean tectonics stage as a result of the relative oblique convergence between
two continental blocks: the Maracaibo block (MB) to the WNW and the Guyana shield to the ESE. In the north the
oceanic Caribbean plate is being subducted under both continental block. Oblique convergence initiated a right lateral
strike-slip fault, the Bocono fault(BF), cross cutting the belt in its axial part with an average azimuth of N060E. 3
differents areas with differents tectonic regime can be described. In the southern area, the structures consist of thrusts
parallel to the belt. In the central area, the BF’s bend produce a releasing bend. In the nothern area, a set of N-S to
NNE-SSW left lateral strike-slip faults, (Valera fault...) dissects the belt. The Valera fault and the Bocono fault(BF)
define a triangular area: the Trujillo block (TB). In this area, the VA exibits a major discrepancy in its tectonic regime
between the north and the south of the BF. South of it, the tectonic regime is compressive. Close to the BF it is
extensive and strike-slip movements. More in the north, releasing bends related to NNE-SSW senestral riedels create
quaternary pull-apart basin. Narrow anticlines characterise positive flower structure related to restraining bends in
strike slip faults. The spatial organisation and geometry of large transcurrent faults (BF, Valera fault...) control the
structuration of the VA, accomodating both the strain partitioning due to the oblique convergence between the
continental blocks and the escape of the TB towards the Caribbean plate, offering a zone of less rock strenght.

Introducción una zona conformada esencialmente por formaciones

Los Andes venezolanos se extienden desde la
frontera colombiana en el estado Táchira al sur hasta
la transversal de Barquisimeto en su parte
septentrional. Esta cordillera de orientación N50ºE,
constituye un bloque de más de 400 km de largo y
100 kms de ancho. Lateralmente, la cordillera esta
limitada por la cuenca de Maracaibo al Nor-Oeste y
la cuenca de Barinas al Sur- Este (Fig.1). constituye
meso-cenozóicas dispuesta discordantemente sobre el
conjunto de los Andes quien posee una armadura
central constituida por el basamento igneo-
metamórfico. La reactivación en transcurrencia de
fallas como Boconó y Valera debido a la compresión
asociada a una dirección de esfuerzos regionales
orientados NO-SE a E-O durante el Neógeno trajo
como resultado una estructuración compleja de los
Andes venezolanos. El Flanco Nor- occidental
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presenta durante el Neógeno una sucesión de eventos
tectónicos. A partir del Mioceno afecta a la zona, un
cabalgamiento imbricado de vergencia NO,
.
Figura 1: Carta estructural de la parte nor-occidental de América del Sur .
Geología Regional
La margen sur del Mar Caribe ha sido interpretada
como una frontera de transformación entre las placas
Caribe y Sur-Americana debido a la existencia de
grandes zonas transcurrentes en la parte norte de
Venezuela (Fallas de El Pilar, de Oca y de Boconó),
Stephan 1977. Schubert, 1985; Bellizia, 1985;
Pindell y Erickson, 1995). Estas grandes unidades
estructurales, representan los limites regionales de un
bloque crustal, de forma triangular situado al Nor-
Oeste de América del Sur denominado Bloque de
Maracaibo. Este bloque está limitado también por las
fallas transcurrentes sinestrales de Santa Marta -
Bucaramanga quienes lo separan del bloque Nor -
Andino (Cordillera Oriental de Colombia).
Geodinámica:
Situada al contacto de las placas Nor-Americana,
Nazca, Cocos y Caribe, la placa Sur Americana ha
sufrido los efectos de la convergencia y los
desplazamientos relativos de esas placas. (Minster y
Jordán, 1978; Kellogg y Bonini, 1982, Mann et al,
1990, Pindell y Erickson, 1995).
Durante el Triásico y Jurásico, la margen norte de
América del Sur se individualiza separándose del
resto de la Pangea (Pindell et Dewey, 1982; Pindell y
Erickson, 1995) Esta separación se efectúa por
rifting, el cual provoca un evento distensivo sobre la
parte oeste de Venezuela. Esta queda estructurada en
implicando el basamento y la cobertura pre-orogénica
en la deformaciòn.
Horst y Grabens orientados, NE-SO (González de
Juana, 1980). En el Cretáceo Superior-Paleoceno, el
arco Caribe (Caribbean arc), se desplaza hacia el
este, lo cual provoca colisión y obducción desde el
Ecuador hasta Trinidad. La acreción de la Cordillera
Occidental de Colombia, trae como consecuencia una
tectónica compresiva en el basamento orientada NO-
SE (Pindell, et al, 1995; De Toni y Kellogg, 1993).
Durante el Paleocéno - Eocéno se produce la
acreción del alóctono caribe (Caribbean allochton).
Este evento (Diacronus Collision-Arc) rompe la
margen pasiva mesozoica y las napas centrales
Caribes Cabalgan entonces la placa Sur Americana
(Stephan, 1977; Bellizzia, 1985; Pindell et al, 1995).
El Neogeno constituye el período de levantamiento
Principal de la parte Nor-Oeste de la América del
Sur, durante esta etapa, ocurre la colisión del Arco de
Panamá (Panamá Block) con la margen Nor-Oeste de
la Placa Sur-Americana. Es contemporáneo de una
aceleración de la velocidad de desplazamiento de la
placa Caribe. En consecuencia hay cambio de
dirección de convergencia entre la placa Caribe y
América del Sur, desde una orientación NE-SO hacia
una orientación E-O (Pindell, et al 1995). Durante
el Mioceno Superior la Cordillera Oriental de
Colombia, la Sierra de Perijá y los Andes de Mérida
se levantan. Durante el Plioceno, la actividad
tectónica continúa y se intensifica, la cadena andina
adquiere entonces su morfología actual. La
deformación es controlada por una tectónica de
basamento. El sistema es caracterizado por un
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cabalgamiento del basamento con vergencia Nor- (Audermard, 1991;) Coletta et al, 1996; Castrillo y
Oeste asociado a retro-cabalgamientos Hervouet, 1996; Castrillo, 1997).

Cuadro estratigráfico Comienza en el Cretáceo Superior tardío, con la

El cuadro estratigráfico del área (fig. 2) esta
constituido por un núcleo central conformado por un
complejo igneo-metamórfico. El límite inferior
corresponde al basamento Precámbrico: Formación
(Asociación) Sierra Nevada y Paleozoico Superior
Fms. (Asociaciones) Tostos, Sabaneta, Mucuchachi y
Palmarito (Los Torres, Río Momboy en Trujillo ).
Las Rocas sedimentarias más antiguas que afloran en
el área de estudio corresponden al Cretáceo inferior
(Fm Peñas Altas). El Cretáceo Superior corresponde
a la Formación La Luna que representa una facie
anóxica depositada durante el máximo de
profundidad de la transgresión. La Regresión
deposición de las lutitas marinas de la Formación
Colon.
Durante el Terciario los depósitos continentales y
marinos se acumulan en concordancia encima del
Cretácico. En la región andina la serie Terciaria ha
sido dividida en varias formaciones.
Los depósitos sedimentarios se continúan durante el
Neogéno. Estos sedimentos de edad Mioceno hasta
el Plioceno, están representados por las formaciones
Palmar, Isnotú y Betijoque; derivados principalmente
de la erosión de la cordillera en vías de
levantamiento. Estos depósitos alcanzan un espesor
de hasta 6 Kms.

Figura 2: Carta estratigráfica general de los Andes venezolanos

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Discusión:
Partición de la deformación interna. Relaciones
entre la falla transcurrente crustal de Bocono y
los pliegues de corrimiento asociados.
Los Andes venezolanos son recorridos del SW
hacia el NE por la falla dextral N060°E de Bocono
(fig. 1 y 3). El estudio de las deformaciones recientes
en los Andes venezolanos no puede ser abordado sin
un análisis estructural preciso de este accidente. Bien
que sea una falla transcurrente intracontinental
dextral a lo largo de más de 400 km representa una
de las estructuras tectónicas y géomorfológicas
mayores de los Andes venezolanos, los trabajos de
geología estructural concernientes a esta estructura
son relativamente poco numerosos, sin duda en razón
Figura 3: Escape del Bloque de Trujillo bajo relación de esfuerzos regionales ENE-WSW.
El esfuerzo compresivo principal regional está
orientado WNW-ESE y ella tiende a (sector B, por ejemplo, fig. 3).
perpendicularizarse a la cadena para luego pasar a
una dirección NW-SE. Los Andes venezolanos
pueden ser separados en un cierto número de sectores
donde cada uno posee una evolución estructural
diferente.
Al centro (sector A, fig. 3), una inflexión de la falla
dextral de Bocono conlleva la formación de un relevo
transtensivo en el cual se forma una cuenca « pull-
apart ». Alrededor de esta cuenca, numerosas fallas
normales son puestas en evidencia. Su origen pueden
ser la consecuencia directa de la transtensión (fig. 4)
De un lado y de otro de estas zonas centrales, los
flancos NW y SE de los Andes, sometidos a una
compresión perpendicular a la cadena, cabalgando las
de la pobreza de los afloramientos. La utilización de
la teledetección radar sirvió de revelador para la
comprensión de la tectónica a lo largo de la falla de
Bocono, porque estos datos permiten visualizar
netamente las estructuras en un sector donde la
cobertura nubosa y vegetal son importantes.
cuencas de antepaís de Maracaibo y de Barinas
Al norte de Mérida (sector C , fig. 3, 4) la
situaciòn es mucho más compleja. Sobre la falla
N060°E dextral de Bocono, vienen a unirse las fallas
o el sistema de fallas sinestrales submeridianas (fallas
de los Rios Motatan y Momboy, falla de Valera, de
una parte, y de otra parte, el sistèma de fallas de
Burbusay-El Empedrado). El sistèma sinestral de
Valera y la falla dextral de Bocono determinan una
région triangular (Bloque de Trujillo), quien bajo el
esfuerzo andino NW-SE tiene una tendencia à
désplazarse hacia el NNE. La parte nor-oriental del
bloque de Trujillo (sector C, fig.3 ,4) esta ella-misma
individualizada del conjunto por la intermediación del
sistema de fallas de Burbusay-El Empedrado. En las
zonas de unión entre los sistèmas subméridianos y la
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falla de Bocono, hemos puesto en evidencia la

presencia de fallas normales afectando el ensamble de
la corteza superior (fig. 4). Esas fallas normales serían
la consecuencia del desplazamiento (escape) del
bloque de Trujillo hacia el NNE.

Figura 4: Fallas normales en la unión entre la falla de Bocono y el sistema subméridiano de Valera. Imagen radar y
su interpretación morfoestructural. (Dhont et al., 2005) AF = Aracay Fault; BF = Bocono Fault; f = (sub)parallel
synthetic shear associated to the Bocono Fault motion; JF = Jajo Fault; MF = Motatan Fault
PF = Piñango Fault; PLF = Pueblo Llano Fault; RMF = Rio Momboy Fault; s = normal fault scarp; SLF = San Lazaro
Fault; TF = Tuñame Fault; VF = Valera Fault.
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Figura 5: Compresión andina y compresión NNE-SSW en los Andes nor-orientales Hervouet, et al.,
(2005).
Este trabajo muestra que la fase de compresión
andina NW-SE fué retomada por movimientos
transcurrentes permitiendo el escape de bloques
crustales triangulares, seguido por un estado
extensivo en la propia cadena. Proponemos dos ideas
principales de la tectónica de escape para explicar los
movimientos laterales. La primera privilegia la
extrusión de bloques litosféricos rígidos a lo largo de
las grandes fallas transcurrentes. Se trata de una
extrusión en el seno de la corteza donde el
movimiento es debido a las fuerzas aplicadas en los
bordes laterales de los bloques expulsados. El
segundo enfoque privilegia la deformación interna de
los bloques limitados por estas fallas. El movimiento
lateral es entonces causado por las fuerzas de
volumen creando un desplome extensivo y no por
fuerzas horizontales aplicadas a las fronteras del
bloque.
La región comprendida entre la falla de El
Empedrado y la falla de Bocono es en esta parte
septentrional confrontada a las napas caribes. Ellas
parecen oponerse al escape del bloque de Trujillo.
Esta oposición inicia la rotación del esfuerzo
principal NW-SE andino quien toma entre El
Empedrado y Bocono una dirección NNE-SSW (fig.
3,4). A lo largo de estas fallas NE-SW, aquí
sinestrales, aparecen relevos distensivos
responsables de pull-aparts cuaternarios y de los
relevos compresivos de los cuales nacen las
estructuras en flor de igual dirección (fig. 4). Este
estado de esfuerzos, verificado por numerosos lugares
de medición sobre el terreno (fig.5) es corroborado
por el análisis de los mecanismos focales de los
sismos. Los movimientos en el seno de la corteza
continental superior confirman aqui tambien el
escape de esta parte de los Andes hacia el NNE (fig.
3)
Al final del Oligoceno, la colisión del bloque de
Panamá contra le esquina nor-occidental sur-
americana provoca un evento compresivo importante
en Venezuela occidental. Esto conlleva un cambio de
la dirección de compresión: Ella se establece
alrededor de E-W, dirección aún válida actualmente
sobre el cratón sur-americano (A1, fig. 6; flechas
magenta, fig. 6. A partir del Mioceno superior, los
Andes venezolanos comienzan su levantamiento.
Retoman los grabens jurásicos y ella toma una
dirección NE-SW. Los accidentes heredados
modifican la compresión E -W quien toma entonces
una dirección NW-SE (A2, fig 6; flechas rojas, fig.
6). Esta compresión está siempre presente en la parte
meridional y central (Mérida) de la cadena. En
nuestra región de estudio la compresión actual está
orientada NNE-SSW. Está orientación es continua al
escape del bloque de Trujillo (flechas azules, Fig. 6)
quien viene a chocar al norte contra el bloque caribe
(A3, fig 6; flechas verdes, Fig. 6).
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Figura 6: cuadro de las diferentes fases tectónicas y de sus desviaciones afectando los Andes nord-orientales
Gonzalez, L. (2004).
Conclusiones:
La nueva información estructural sobre la regiòn
septentrional de los Andes (Bloque de Trujillo) a
partir de observaciones de campo y secciones
balanceadas basadas en estas observaciones,
muestran una cantidad relativa de acortamiento
horizontal de la parte superior de la corteza durante el
Cenozòico (aproximadamente 50 km) ortogonal al
cinturón de plegamiento, lo cual produce 5000 mts de
relieve estructural. Nuestra hipótesis plantea que la
disposición actual de las estructuras han sido el
resultado de una sucesiòn de eventos complejos
vinculados a la reactivaciòn de fallas trasncurrentes
como Boconò y Valera, desde comienzos del
Mioceno. Esta reactivaciòn pudo ser provocada por
un regimen compresional en respuesta a una relaciòn
de esfuerzos principales orientados Este-Oeste. La
orientación NE-SW de los Andes de Mèrida esta
oblicuamente orientada dentro del campo de
esfuerzos del cenozoico tardìo. Resultando en una
deformaciòn interna que es dividida en fallamiento
transcurrente paralelo a la cadena y pliegues de
corrimiento asociados ortogonales a la misma, debido
a la transpresiòn vinculada con la convergencia
oblicua entre dos bloques independientes
pertenecientes a la Placa Suramericana: El bloque de
Maracaibo al norte y el Escudo de Guayana al sur.
Agradecimiento
Este estudio ha sido posible gracias al soporte de
ULA, UUPA, y el proyecto Ecos Nord código n°
2000000953 (V00U02, código francés).
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