MIRADOR LATINOAMERICANO

¿Estudios culturales
latinoamericanos?
*bqbɐŒb´8œ8±¼±
de algunas antologías
Latin American cultural studies?
*bqbO¼Œ´F8´bYŒ´bÇb±8†8Œ¼|†tb´
*btŒ8
±b´œCÊ8Œb†8(8±±8CC

RESUMEN: El presente artículo pretende reflexionar sobre la incidencia e importancia de los

Estudios Culturales en América Latina y si es pertinente hablar de Estudios Culturales Lati-
noamericanos. A partir del análisis de algunas de las antologías que, alrededor del tema,
se publicaron entre 1998 y 2003, se busca entender la dinámica de organización de los
grupos, la circulación de los autores, la importancia de su vinculación a universidades e
institutos latinoamericanos o estadounidenses y se especula sobre qué ocurre hoy en el
ámbito de la discusión.
PALABRAS CLAVE: Estudios Culturales, América Latina, Latinoamericanismo, Antologías.
ABSTRACT: The article sets out to think about the influence and importance of Cultural Stu-
dies in Latin America and if it is appropriate to talk about Latin American Cultural Studies.
Based on the analysis of some of the anthologies on this issue published from 1998 to
2003, the authors intend to understand under what kind of criteria the groups are organi-
zed, which are the dynamics of the circulation of the researchers, what is the importance
of their affiliation to universities and institutes located either in Latin American countries or in
the United States, and, finally, the current state of this discussion.
KEY WORDS: Cultural Studies, Latin America, Latin Americanism, Anthologies.

Recibido: 9 de mayo, 2016.

Aprobado: 5 de julio, 2016.
10.22201/cialc.24486914e.2017.64.55243

›
Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe-UNAM (rcrespo@unam.mx).
››
Escuela Nacional de Estudios Superiores-UNAM, Campus Morelia (dan.parra@yahoo.com).

64 (México 2017/1): 13-37 13

© 2017 Universidad Nacional Autónoma de México, Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe. Este es
un artículo Open Access bajo la licencia CC BY-NC-ND (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

¿
Qué decir sobre los “Estudios Culturales Latinoamericanos (ECL)”? ¿Es
pertinente pensar que los ECL constituyen una corriente académica
de análisis e interpretación y conforman una escuela? ¿Qué especi-
oOY8Yb´ ¼bŒY±€8Œ§ ¨)Ác YbF†Y8Yb´§ ¨)Ác |8Ob ¦Áb ÁŒ b´¼ÁY´
del pensamiento, la cultura, la literatura, la producción simbólica latinoa-
mericana ubique su producción en el campo de los ECL? ¿Qué relaciones
œY±€8‰´bŒOŒ¼±8±bŒ¼±b†´ ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´Œ8OY´bŒY´Yb†´
centros intelectuales hegemónicos (Inglaterra y Estados Unidos) y aque-
††´YboŒY´tbt±9oO8Êœ†€¼O8‰bŒ¼b8†´Á±Ybωc±O8§
8±bObœO‘ŒYb†´ ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´bŒ†´œ8€´b´Yb†8±bt‘Œ|8
sido sobresaliente, aunque siempre ha estado acompañada de una serie
YbOÁb´¼Œ8‰bŒ¼´V±b†8OŒ8Y´OŒ†8´b´œbOoOY8Yb´OŒ¼ŒbŒ¼8†b´
Ê †8´ O8±8O¼b±€´¼O8´ Yb ´Á´ ±b´œbO¼Ç8´ ±b8†Y8Yb´ Œ8OŒ8†b´¡ Ï´‰´‰V
entre los latinoamericanos —y latinoamericanistas— nunca se ha perdido
YbÇ´¼8¦ÁbV‰ÁO|8Œ¼b´Yb†88YœO‘ŒYbÁŒ8¼b±‰Œ†t€8¦ÁbYbo-
Œb±8ÁŒO8‰œYbb´¼ÁY´b´œbO€oO8‰bŒ¼bO‰« ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´
8¼Œ8‰b±O8Œ´¬VÊ8bÉ´¼€8bŒ†8±bt‘ŒÁŒ8ŒÁ¼±Y8¼±8YO‘ŒbŒ´8ʀ´-
tica marcada por la discusión de temas asociados a la identidad nacional
y étnica, al papel de los intelectuales en la sociedad, a la relación entre
œ†€¼O8ÊOÁ†¼Á±8V8Yb‰9´YbOÁb´¼Œb´8´O8Y8´8†8´œ´OŒb´Œ8O-
nal Çb±´Á´ continental, rural Çb±´Á´ urbano, tradición Çb±´Á´ modernidad,
bŒ¼±b¼±8´¡+bœY±€8YbO±¦ÁbbŒωc±O88¼Œ8Ê8´b|8O€8Œ ´¼ÁY´
Culturales antes de que surgiera el campo como tal y antes de que la aca-
demia metropolitana hegemónica tratara de encasillar tal producción en
sus nuevos cánones y parámetros.1

1
Es conocida la serie de entrevistas que, entre 1996 y 1997, la revista británica Á±Œ8†
n8¼Œωb±O8Œ
Á†¼Á±8†+¼ÁYb´ realizó a intelectuales latinoamericanos dedica-
dos, en términos generales, a los Estudios Culturales. Llama la atención el énfasis de
8Á¼±b´O‰c´¼±8±O€8
8ŒO†ŒbŒ´bœ8±8±´bYb†¦Ábœ±œÁtŒ8F8†88O8Yb‰8
estadounidense (“me involucré en los estudios culturales antes de saber cómo se
llamaban”). ϜÁY Mónica Szurmuk & Robert Mckee Irwin, “Presentación”, en OO-
Œ8±Yb ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´8¼Œ8‰b±O8Œ´, México, Siglo XXI/Instituto Mora,
2009, pp. 17 y 18.

14 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

Asimismo, la pregunta obligada es: ¿hasta qué punto una “adjetiva-

ción”, como menciona Restrepo,2 b´ ±b8†‰bŒ¼b œb±¼ŒbŒ¼b œ8±8 YboŒ±
los Estudios Culturales que se hacen desde y ´F±b América Latina, como
“Estudios Culturales Latinoamericanos”? La discusión ha sido larga y evi-
dentemente dista de cualquier tipo de consenso.
No es nuestro propósito en este breve espacio hacer una retrospecti-
va conceptual de los Estudios Culturales de origen británico o de los rea-
lizados en la academia estadounidense, enmarcados en la tradición previa
de sus llamados estudios de área, para buscar identidades y divergencias
bŒ¼±bb††´Ê†¦Áb8†tÁŒ´YboŒbŒO‰ ECL. Nuestro objetivo es mu-
cho más modesto. Entre 1998 y 2003 se editaron algunos libros colectivos
en los que se observa la preocupación por discutir, analizar, establecer
±Á‰F´Êœ†8Œ¼b8±8tbŒY8´Yb±bqbÉ‘ŒÊ8OO‘ŒbŒ¼±b†´ŒÇb´¼t8Y±b´
preocupados por pensar la cultura desde la perspectiva del poder, con un
œÁŒ¼YbÇ´¼8OŒ´¼±ÁY8œ8±¼±YbÁŒœbŒ´8‰bŒ¼O±€¼O†8¼Œ8‰b±-
cano. Nos centraremos en el contexto que les dio origen, los autores que
œ8±¼Oœ8±ŒbŒ¼8†b´8Œ¼†t€8´V†8´¼b‰9¼O8´¦Áb8F±Y8±ŒÊ8†tÁŒ´Yb
los debates teóricos que generaron. Este bosquejo dará pautas sobre su
mirada en torno a los ECL como campo de producción de conocimiento,
´Áœ´¼Á±8±b´œbO¼8†8±b†8O‘ŒbŒ¼±bOÁ†¼Á±8Êœ†€¼O8bŒb†OŒ¼bɼ
Yb †8 t†F8†Í8O‘Œ Œb†Fb±8† Ê ´Á ±bqbÉ‘Œ ´F±b b† œ8œb† Yb †8´ Ê †´
intelectuales y académicos latinoamericanos frente a la producción acadé-
mica hegemónica, principalmente estadounidense. A partir de este breve
mapeo se pueden vislumbrar ciertas tendencias y caminos de la época, re-
conocer o no la existencia de un diálogo entre dichas vertientes y autores,
bYbŒ¼oO8±†8´OŒYOŒb´Ybœ±YÁOO‘ŒÊO±OÁ†8O‘Œ8O8Yc‰O8¦Áb†
permitieron o, bien, limitaron.

2
Eduardo Restrepo, “Estudios culturales en América Latina”, en *bÇ´¼8 Yb ´¼ÁY´

Á†¼Á±8´Vnúm. 1, São Paulo, USP, 2014, p. 7. En http://www.each.usp.br/revistaec/
´¼b´¹Ybn8Á†¼¹o†b´¹8±¼t´~b‰~œYn¹Î½ÆbY—ÆESTUDIOS%20 CULTURALES%20EN%20AME%C-
C%81RICA%20LATINA.pdf (fecha de consulta: 19 de abril, 2016).

64 (México 2017/1): 13-37 15

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

LA ANTOLOGÍA QUE ABRE EL CAMINO

88Œ¼†t€8¦ÁbVœ±YbO±†Yb8†tÁŒ8‰8Œb±8V«Œ8ÁtÁ±‘¬†8œb±´œbO¼Ç8
de una discusión más sistemática sobre el lugar del pensamiento latinoa-
mericano ante el fenómeno de la globalización fue ,b±€8´´ŒY´Oœ†Œ8¡
8¼Œ8‰b±O8Œ´‰Vœ´O†Œ8†Y8YÊt†F8†Í8O‘ŒbŒYbF8¼b, coor-
dinada por Santiago Castro-Gómez y Eduardo Mendieta en 1998.3 Este tra-
bajo transdisciplinario tuvo su origen en un largo debate sobre la relación
entre globalización, poscolonialidad y latinoamericanidad, surgido en los
años 1990 en medio del auge neoliberal. El libro se enmarca también en
un cuestionamiento sobre el modo desigual y asimétrico de producción
ÊO±OÁ†8O‘ŒYb†8´Yb8´bŒb†ŒÇb†t†F8†VÊbŒÁŒ8O±€¼O88†´b´œ8O´
institucionales que contaban con los recursos materiales para legitimarse
como centros de producción académica e intelectual autorizados para ha-
blar sobre América Latina.
Y es que, en Estados Unidos, el campo denominado
Á†¼Á±8†+¼ÁYb´
œ±YÁO€8ÁŒ8t±8ŒO8Œ¼Y8YYbŒÇb´¼t8OŒb´´F±b†8±bt‘Œ‰bY8Œ¼b
O8¼bt±€8´Yb8Œ9†´´œ±œ8´Yb†††8‰8Yœ±‰b±‰ÁŒY¡ Œ´ÁÇb±´‘Œ
latinoamericana, los Estudios Culturales llegaron a consolidarse en los
años 1990 como un campo novedoso en el estudio de la cultura, pero a su
ÇbÍOÁb´¼Œ8Yœ±†88YœO‘Œ8O±€¼O8Yb´OŒ¼bɼÁ8†Í8Y8YbYO|8´
O8¼bt±€8´Yb8Œ9†´´¡ Œb´bOŒ¼bɼVŒYb„8Yb††8‰8±†88¼bŒO‘Œb†
|bO|Yb¦ÁbVYb†´ŒObbŒ´8ʐ´¦ÁbO‰œŒbŒb´¼88Œ¼†t€8VO|
provienen de autores latinoamericanos adscritos a universidades estadou-
nidenses.4+bœY±€8œbŒ´8±¦Áb¼8†b´8Á¼±b´bŒ¼±8Œ8†8Y´OÁ´‘ŒYb´Yb

3
Santiago Castro-Gómez y Eduardo Mendieta, ,b±€8´´ŒY´Oœ†Œ8¡ 8¼Œ8‰b±O8-
Œ´‰Vœ´O†Œ8†Y8YÊt†F8†Í8O‘ŒbŒYbF8¼b, México, Porrúa/University of San
Francisco, 1998.
4
 OÁœ8ÁŒb´œ8OŒ¼b±b´8Œ¼bbŒb´¼bOŒ„ÁŒ¼Yb8±¼€OÁ†´b†«8Œob´¼Œ8ÁtÁ±8†¬
del Grupo Latinoamericano de Estudios Subalternos, publicado originariamente en
inglés, primero en la revista ÁŒY8±ÊVy después en un volumen colectivo editado
por Duke University Press. Resaltan en el libro las participaciones de Walter Mignolo
y Alberto Moreiras, de la Universidad de Duke. También destacan las apariciones de
Mabel Moraña, de la Universidad de Pittsburgh, quien, como veremos más adelante,
Y±t‘ÁŒ8Yb†8´Çb±¼bŒ¼b´Yb±bqbÉ‘Œ´F±b†´ ECL, y la franco-chilena Nelly Ri-

16 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

un “lugar de enunciación” en cierto sentido privilegiado, al formar parte

del mainstream teórico y al mismo tiempo provenir y ocuparse de una
región “periférica”. Además, no se puede perder de vista la existencia de
ǀŒOÁ†´œb±´Œ8†b´bYbŒ¼Y8Yb´¼b‘±O8´bŒ¼±b†´8Á¼±b´±bÁŒY´bŒ
el volumen. Cuando se analizan los libros colectivos, también es necesario
considerar las llamadas relaciones de sociabilidad, tan caras a la construc-
ción de las redes intelectuales.
De acuerdo con lo que los coordinadores comentan en la introduc-
ción al volumen,5†8´±b´œÁb´¼8´8†8´Œ¦Áb¼ÁYb´¦Áb‰Ç€8Œb†YbF8¼b´b
|8F€8Œn±‰Á†8YŒO8†Êœ8Á†8¼Œ8‰bŒ¼bYb´YbY´n±bŒ¼b´YbY´OÁ´‘ŒU
8¦Áb†¦Áb±b†b€88ωc±O88¼Œ8Á¼†Í8ŒY†8´¼b±€8´ÊOŒObœ¼´Yb†8´
Œ´¼¼ÁOŒb´ObŒ¼±8†b´VÊ8¦Ác†¦Áb†8´±bO|8Í8F8bŒœ´Yb¼b±€8´ÊOŒ-
Obœ¼´œ±œ´V8O±Yb´OŒ†´œ±Ob´´|´¼‘±O~œ†€¼O´Yb†8±bt‘Œ¡
-Œ8´btÁŒY8ÇÁb†¼88†YbF8¼bVOÁÊ8´œ±ŒOœ8†b´OŒO†Á´Œb´¦ÁbY8±€8Œ
plasmadas en el volumen, surgió en 1997, durante el Congreso de la Latin
American Studies Association (LASA) ocurrido en Guadalajara, donde los
´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´8¼Œ8‰b±O8Œ´´b8o±‰8±Œ«O‰ŒÁbǐœ8±8Yt-
‰8Yb¼b±Í8O‘ŒYb††8¼Œ8‰b±O8Œ8oŒ8†b´Yb†´t†XX”.6
No obstante, aun con el consenso de un campo de estudios legitima-
YÊOŒœ±bOÁ±´±b´O†8±8‰bŒ¼bYbŒ¼oO8F†b´ic´¼±8±O€8
8ŒO†ŒÊ
b´Â´8±¼€Œ~ 8±Fb±Vœ±ŒOœ8†‰bŒ¼biéstos no protagonizan la discusión
bŒ†88Œ¼†t€8¡btÁ8†n±‰8V´FbŒb†¼bɼŒ¼±YÁO¼±bŒn8¼Í8bŒ
las implicaciones del proceso de la globalización con elementos de análisis
propios de los ECL, como el papel de las industrias culturales, los cruces
entre cultura popular y cultura de masas, los procesos de homogeneización

chard, que hará lo propio en 2010, desde Chile. Los demás autores entonces adscritos
8ÁŒÇb±´Y8Yb´b´¼8YÁŒYbŒ´b´´Œ¼±b´U†b8Œ8*Y±€tÁbÍVb±Œ8ŒY
±Œ†Êb†
‰´‰ O±t8ŒÍ8Y± YÁ8±Y bŒYb¼8¡ Ïo†8Y´ 8 ÁŒÇb±´Y8Yb´ |´œ8Œ8‰b±-
canas, tenemos solamente a Hugo Achúgar, Santiago Castro-Gómez y Erna von der
Walde, de la Universidad de los Andes, quien se encontraba entonces como profesora
visitante en la Universidad de Duke.
5
Santiago Castro-Gómez y Eduardo Mendieta, “Introducción: la translocación discur-
siva de ‘Latinoamérica’ en tiempos de globalización”. Castro-Gómez y Mendieta, œ¡
O¼¡, pp. 5-30.
6
 FY., p. 22.

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 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

y desterritorialización cultural, tales conceptos y discusiones son poco sig-

ŒoO8¼ǐ´bŒb†O±œÁ´Yb†88Œ¼†t€8¡
Como ya dijimos, la mayor parte de los textos tuvo su origen en insti-
tuciones estadounidenses con autores hispanoamericanos pertenecientes
8†8o†´n€8V†8†¼b±8¼Á±8ʆ´b´¼ÁY´´ÁF8†¼b±Œ´¡+ÁcŒn8´´b´¼9œ±ŒO-
palmente en el problema de la poscolonialidad y sus consecuencias sobre
† †8¼Œ8‰b±O8Œ¡ +b œb±OFb ÁŒ8 ŒqÁbŒO8 Œ¼±8 Yb †8 œb±´œbO¼Ç8
decolonial en el uso de conceptos como transmodernidad, posocciden-
¼8†´‰Ê´ÁF8†¼b±ŒY8YVO‰O8¼bt±€8´8†¼b±Œ8¼Ç8´8†bÁ±ObŒ¼±´‰Ê
colonialismo existentes en las ciencias sociales. La búsqueda de nuevas ve-
¼8´Yb±bqbÉ‘Œb´bÇYbŒ¼bV´Œb‰F8±tV8††8±tYb†ǐ†Á‰bŒVÊO‰
los mismos coordinadores reconocen, las posturas de los colaboradores
YbO8Œ¼8Œ´Áœ¼‰´‰Ê´bÇÁb†ÇbŒ‰9´O±€¼O8´±b´œbO¼8†œ¼bŒO8†Yb†
poscolonialismo como teorización descolonizadora.

LAS ANTOLOGÍAS DE CLACSO: LA REFLEXIÓN DESDE

LAS CIENCIAS SOCIALES Y EL GRUPO DE TRABAJO
SOBRE CULTURA Y PODER

En continuidad con el debate iniciado por los coordinadores de la an-

¼†t€88Œ¼b±±V8ÁŒ¦Áb‰8Œ¼bŒbŒYÁŒ8œb±´œbO¼Ç8‰9´ObŽY88†8´
ciencias sociales tradicionales, Edgardo Lander coordinó en el año 2000
†8n8‰´88Œ¼†t€88O†Œ8†Y8YYb†´8Fb±UbÁ±ObŒ¼±´‰ÊObŒO8´
´O8†b´¡(b±´œbO¼Ç8´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´, editada por el Consejo Latinoa-
mericano de Ciencias Sociales (Clacso).7 Este libro fue el resultado de dos
años de trabajo, posteriores a la realización del Simposio “Alternativas al
eurocentrismo y colonialismo en el pensamiento social latinoamericano
contemporáneo”, que se llevó a cabo en 1998 durante el Congreso Mun-
Y8†Yb+O†t€8bŒŒ¼±b8†VOŒÇO8Yœ±‰‰8ŒÁb†38††b±´¼bŒ¡

7
Edgardo Lander [ed.], 8O†Œ8†Y8YYb†´8Fb±UbÁ±ObŒ¼±´‰ÊObŒO8´´O8†b´V
œb±´œbO¼Ç8´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´V ÁbŒ´Ï±b´V
†8O´VÀÎÎΡ

18 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

Con el patrocinio de la Unidad Regional de Ciencias Sociales y Hu-

manas para América Latina y el Caribe de la UNESCO, en el libro participan
nueve reconocidos autores en el ámbito de las ciencias sociales latinoame-
±O8Œ8´VbŒ¼±b†´OÁ8†b´´bbŒOÁbŒ¼±8Œ Œ±¦ÁbÁ´´b†Êό€F8†)Á„8Œ¡8
Œb´¼b¼±8F8„ÇÁb†ÇbŒ88œ8±bOb±38†¼b±tŒ†VOŒÁŒ8±¼€OÁ†´F±b
colonialidad y modernidad, y el propio Santiago Castro-Gómez, con una
±bqbÉ‘Œ´F±bǐ†bŒO8bœ´¼c‰O8¡
En la presentación del volumen, Edgardo Lander explica que la im-
œ†8Œ¼8O‘Œ Yb† Œb†Fb±8†´‰ O‰ œbŒ´8‰bŒ¼ ŒO YoOÁ†¼8F8 Ç´-
lumbrar y formular alternativas epistemológicas y de intervención inte-
lectual.9bb´¼8‰8Œb±8Vb††F±8œÁb´¼88±8´¼±b8±†8tbŒb8†t€8Ybb´¼b
œbŒ´8‰bŒ¼VYbŒ¼oO8ŒYb†Á´YbO8¼bt±€8´bÁ±OcŒ¼±O8´VO†Œ8†b´
y modernas dentro de las ciencias sociales latinoamericanas. Pretende
8o8ŒÍ8±ÁŒY9†tbœ´¼b‰†‘tObŒb†´Á±Yb†‰ÁŒYVÇ´F†Í8ŒYÊ
a la vez nutriéndose de las múltiples luchas sociales e identidades que
conforman América Latina.
Una revisión sucinta del contenido muestra cómo esta exploración
epistemológica prima respecto a una propuesta multidisciplinaria que
colocara dichas preocupaciones en las relaciones intersubjetivas y las es-
feras de la vida cotidiana que, desde los ECLV´b±bOŒO€8Œ¼±8´¼O8Y8´
8±8€ÍYb†´œ±Ob´´Ybt†F8†Í8O‘Œ¡8ŒqÁbŒO8Yb†8œb±´œbO¼Ç8
sistémica de Wallerstein se hace presente al opacar el uso del concepto
t†F8†Í8O‘Œ —pensado como un fenómeno inherente a la evolución del
O8œ¼8†´‰t†F8†ÊŒŒbOb´8±8‰bŒ¼bŒÇbY´iœ±O8¼bt±€8´O‰
eurocentrismo, modernidad y colonialidad del poder.
No obstante la diferencia, el trabajo coordinado por Lander es sinto-
‰9¼OYbÁŒ8œ±bOÁœ8O‘Œ¦ÁbO±ÁÍ8¼Y8´†8´8Œ¼†t€8´Yb†œb±YU†8

8
La lista de autores es la siguiente: Santiago Castro-Gómez, Fernando Coronil, Enrique
Dussel, Arturo Escobar, Edgardo Lander, Francisco López Segrera, Walter D. Mignolo,
φb„8ŒY±±bŒÊό€F8†)Á„8Œ¡Ïœb´8±Yb´b±ÁŒ8otÁ±8Ybœb´bŒ´ÁO±€¼O88†
O†Œ8†´‰Yb†8´ObŒO8´´O8†b´V±b´Á†¼8´tŒoO8¼ǐ¦Áb)Á„8ŒŒ±b8œ8±bÍO8
bŒŒŒtÁŒ8Yb†8´Yb‰9´8Œ¼†t€8´œ±YÁOY8´YÁ±8Œ¼bb´´8Ž´¡Yb„8Yb´b±
´tŒoO8¼Ç8¼8‰FcŒ†88Á´bŒO88F´†Á¼8Yb‰Á„b±b´bŒb´¼b†F±¡
9
Lander, œ¡O¼., p. 3.

64 (México 2017/1): 13-37 19

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

intención de poder contar con un trazado de largo aliento, que encontrara

†8tcŒb´´YbŒÁb´¼±8YbœbŒYbŒO8bœ´¼b‰†‘tO8Vœ8±88´€n±‰Á†8±ÁŒ
pensamiento propio latinoamericano libre de la razón occidental y sus
métodos de acercamiento a la realidad.
De forma consonante pero a la vez divergente a la iniciativa coordi-
nada por Lander, Daniel Mato encabezó un extenso y ambicioso trabajo
desde la Universidad Central de Venezuela, que puso sobre la mesa la re-
†8O‘ŒbŒ¼±bOÁ†¼Á±8Êœ†€¼O8VObŒ¼±8ŒY´ÁO±€¼O8bŒb†Á´Yb†8ŒO‘Œ
de Estudios Culturales Latinoamericanos como campo de conocimiento.
En 1999 y 2000, el Grupo de Trabajo “Cultura y transformaciones sociales
en tiempos de globalización” tuvo sus dos primeras reuniones en Cara-
cas, con la participación de más de veinte autores. Como resultado, en
b†8ŽÀÎΗnÁbœÁF†O8Y8†88Œ¼†t€8 ´¼ÁY´†8¼Œ8‰b±O8Œ´´F±b
OÁ†¼Á±8 Ê ¼±8Œ´n±‰8OŒb´ ´O8†b´ bŒ ¼b‰œ´ Yb t†F8†Í8O‘Œ, en
dos volúmenes,10¦ÁbOŒ¼8±ŒOŒ†8œ8±¼Oœ8O‘ŒYb8Á¼±b´Ybœ8€´b´
†8¼Œ8‰b±O8Œ´VŒO†ÁÊbŒY8 ±8´†V±ÁŒY´VbŒ´Át±8Œ‰8ʐ±€8VYb
instituciones o universidades de América Latina.
Daniel Mato jugó un rol notorio como organizador de un esfuerzo que
pretendió integrar a los principales actores del campo en función de refor-
mular temas, avivar discusiones e intentar asentar las principales preocupa-
ciones de los estudios culturales de la época.11F´¼8Œ¼bV´ÁO±€¼O8|8O8

10
Daniel Mato [coord.], ´¼ÁY´ †8¼Œ8‰b±O8Œ´ ´F±b OÁ†¼Á±8 Ê ¼±8Œ´n±‰8O-
Œb´ ´O8†b´ bŒ ¼b‰œ´ Yb t†F8†Í8O‘Œ, ǐ†´¡  Ê V ÁbŒ´ ϱb´V
†8O´V ÀÎΗ¡
En el primer volumen, además de Daniel Mato, colaboraron Lourdes Arizpe, Néstor
8±O€8
8ŒO†ŒV8±¼ŒœbŒ|8ʌVb´Â´«
|ÁO|¬8±O€8V †´8Fb¼|b†ŒVb´Â´8±-
¼€Œ 8±Fb±Vό88±€8 O|88Á¼b±VÁ´¼8ǐŒ´*Fb±Vb††Ê*O|8±YÊ5†8ŒY8
Salas. En el segundo, participaron Daniel Mato, Gustavo Lins Ribeiro, Lourdes Ariz-
œbV Á‰8± φŒ´V ´Y± ¡
´Œb±´V OŒY8 ´œŒ8V b´Â´ «
|ÁO|¬ 8±O€8V
Alejandro Grimson, Mireya Lozada, Fabio López la Roche, Luz Adriana Maya Restre-
po, Carlos Ossa, Ángel G. Quintero Rivera, Nelly Richard, Yolanda Salas y Ana Wort-
man. Ambos volúmenes están disponibles en PDF, en http://biblioteca.clacso.edu.
ar/clacso/gt/20100912034428/estudios.pdf y http://biblioteca.clacso.edu.ar/ clacso/
gt/20100914030954/estudios2.pdf.
11
Asimismo, es destacable el papel del argentino para conseguir la participación de di-
Çb±´´8O¼±b´V´F±b¼YÇbŒb͐†8Œ´Vœ8±8oŒ8ŒO8±†´bŒOÁbŒ¼±´ÊœÁF†O8OŒb´
del Grupo de Trabajo. Además de Clacso y la Agencia Sueca de Desarrollo Internacio-

20 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

el uso del concepto de Estudios Culturales Latinoamericanos, Mato convocó

8†´«œ8Y±b´nÁŒY8Y±b´¬8±¼€Œ 8±Fb±Ê8±O€8
8ŒO†Œœ8±8œŒb±8Y´-
cusión la pertinencia del término y de ellos mismos como sus protagonistas.
Mato también invitó a diversos autores que posteriormente se volvieron re-
nb±bŒ¼b´Ê±t8ŒÍ8Y±b´YbŒÁbǐ´¼±8F8„´Ê†€Œb8´YbŒÇb´¼t8O‘ŒO‰
φb„8ŒY±±‰´ŒV †Í8Fb¼|b†ŒÊ8±¼€ŒœbŒ|8ʌ¡
Œ´Á8Œ9†´´V8¼´bŽ8†8F8¦Áb†´œ±Ob´´Ybt†F8†Í8O‘Œ¼±8€8Œ
OŒ´t‰bO8Œ´‰´YbbÉO†Á´‘ŒVŒb¦ÁY8YÊ8´‰b¼±€8´¦Áb´b±bœ±-
YÁO€8ŒbŒb†‰ÁŒYŒ¼b†bO¼Á8†Ê8O8Yc‰ObŒÁŒŒÇb†t†F8†¡12 Por ello,
††8‰8F888¼bŒYb±†´O±ÁOb´bÉ´¼bŒ¼b´bŒ¼±b†OÁ†¼Á±8†Ê†œ†€¼Oœ8±8
pensar el impacto de la institucionalización de los
Á†¼Á±8† +¼ÁYb´ en
América Latina.
La preocupación de Mato por incluir prácticas intelectuales diversas
ʱ8´¼±b8±|´¼‘±O8‰bŒ¼b†¦ÁbOŒ´¼¼Á€88ωc±O88¼Œ8O‰†Át8±
de enunciación, lo llevó a proponer que en lugar de Estudios Culturales
Latinoamericanos, éstos fueran denominados como ´¼ÁY´8¼Œ8‰b-
±O8Œ´´F±b
Á†¼Á±8Ê(Yb±¡13
Œb´¼VœÁ´8ObŒ¼bŒY´±bqbɐ-
nes —no exactamente nuevas— que desarrolló y puso en práctica 8œ´-
¼b±±Ub†œ8œb†œ†€¼OYb†Œ¼b†bO¼Á8†8O8Yc‰O†8¼Œ8‰b±O8ŒÊ†8
necesidad de incorporar los análisis y teorizaciones provenientes de los
‰Ç‰bŒ¼´´O8†b´V8O¼Ç´¼8´VœÁbF†´ŒY€tbŒ8´Vb¼O¡14 Sin embargo, a

nal (ASDI), participaron el Centro de Estudios de Posgrado de la Facultad de Ciencias

Económicas de la Universidad Central de Venezuela, el Instituto Internacional de la
UNESCO para la Educación Superior en América Latina y el Caribe (IESALC-UNESCO), el

Œ´b„2bŒb͐†8ŒYbŒÇb´¼t8OŒb´
bŒ¼€oO8´Ê,bOŒ†‘tO8´žCONICIT), el Fondo
8OŒ8†Yb
bŒO8V,bOŒ†t€8bŒŒÇ8O‘ŒVb†Œ´¼¼Á¼Yb
Á†¼Á±8 ±8´†~2bŒbÍÁb†8
y la Corporación Andina de Fomento (CAF).
12
Daniel Mato, “Introducción: cultura y transformaciones sociales en tiempos de globa-
lización”, en ´¼ÁY´8¼Œ8‰b±O8Œ´´F±bOÁ†¼Á±8ʼ±8Œ´n±‰8OŒb´´O8†b´
bŒ¼b‰œ´Ybt†F8†Í8O‘ŒVvol. I…, pp. 12-29.
13
 FY., p. 21.
14
 +F±bb´¼bœÁŒ¼V††8‰8†88¼bŒO‘Œ†8±b¼b±8Y8œ±b´bŒO8Ybb´Â´«
|ÁO|¬8±O€8V
prácticamente el único autor que no pertenece a una institución académica tradicio-
Œ8†Ê¦Ább´OŒOYœ±´Á8O¼Ç´‰Ê±bqbɐŒb´Yb´Yb†8´O‰ÁŒY8Yb´8n±8‰b-
±O8Œ8´Vb´œbO8†‰bŒ¼bÇbŒb͐†8Œ8´¡8±O€8Œ´‘†œ8±¼Oœ‘bŒ†´Y´ǐ†Â‰bŒb´
Yb†8œ±‰b±88Œ¼†t€8bY¼8Y8œ±8¼V´Œ¦Áb¼8‰FcŒO†8F±‘bŒ†88Œ¼†t€8

64 (México 2017/1): 13-37 21

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

œb´8±Yb±bÇŒYO8±ÁŒb´œ8OYb±bqbÉ‘Œœ8±8ǐOb´Œ8O8Yc‰O8´VbŒ
ambos volúmenes es mayoritaria la contribución de académicos formados
bŒÁŒÇb±´Y8Yb´Vœ±ŒOœ8†‰bŒ¼bbŒ†8´9±b8´Yb8Œ¼±œ†t€8V´O†t€8
y literatura.
(8±8±bn±bŒY8±´ÁO±€¼O88†«Á´Yb´OŒ¼bɼÁ8†Í8YÊYb´OŒ¼bɼÁ8-
lizante”15 de la noción de los ECL, Mato impulsó el cambio de nombre del
Grupo de Trabajo a “Cultura y Poder”, después de su tercera reunión en
Caracas en noviembre de 2001, reunión de la cual se derivó una tercera
Ê8‰œ†88Œ¼†t€8Yb½ÀbŒ´8ʐ´VœÁF†O8Y8bŒÀÎÎÀʼ¼Á†8Y8 ´¼ÁY´Ê
¼±8´œ±9O¼O8´Œ¼b†bO¼Á8†b´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´bŒOÁ†¼Á±8ÊœYb±. Con
la colaboración de algunos militantes y activistas, este trabajo integra un
‰´8O±ObŒ¼b‰8´ÊVœ±†‰´‰VYn€O†Yb8´±¡+bœÁbYbŒbŒOŒ-
¼±8±8Œ9†´´´F±b‰b‰±8ʆÁO|8œ†€¼O8VYÇb±´Y8Yc¼ŒO8Vnb‰Œ´‰V
n±‰Á†8O‘ŒYbœ†€¼O8´OÁ†¼Á±8†b´VOÁ†¼Á±8´8n±8‰b±O8Œ8´VYbŒ¼Y8Yb´
reformuladas por el trastocamiento de las fronteras, entre otros.16
Para Mato, los ECLOÁ†¼8±€8Œ†8±bœ±YÁOO‘ŒYb±b†8OŒb´YbœYb±
en el nivel mundial, al establecerse como un espacio donde, según sus pa-
labras, “las voces que tienen mayor poder para establecer qué es y qué no
es este campo, el sistema de inclusiones y exclusiones (de temas, enfoques,
autores, etc.) son las que se expresan mediante publicaciones en inglés”.17
Por ello, vale la pena insistir, buscó reunir textos en castellano y portugués
con participación mayoritaria de autores de universidades latinoamericanas.

¦Áb8¼œÁF†O8±€8bŒÀÎÎÀVYŒYb|͐œ±bO´8‰bŒ¼bÁŒ8±bÇ´‘ŒO±€¼O88Ob±O8Yb
†8´Ç´Œb´8O8Yc‰O8´bŒ¼b†bO¼Á8†b´´F±b†88n±O8Œ€8¡
15
Daniel Mato, “Parte I. Estudio Introductorio”, en Daniel Mato [coord.], ´¼ÁY´Ê¼±8´
œ±9O¼O8´ Œ¼b†bO¼Á8†b´ †8¼Œ8‰b±O8Œ8´ bŒ OÁ†¼Á±8 Ê œYb±V Caracas, Clacso/
ASDI/CONICIT/UCV/IESALC-UNESCO/CAF/FONACIT¹Œ´¼¼Á¼
Á†¼Á±8† ±8´†~2bŒbÍÁb†8VÀÎÎÀV
œ¡—p¡ Œ|¼¼œ´U¹¹ÈÈÈ¡8O8Yb‰8¡bYÁ¹½s¸Àp—·¹ ´¼ÁY´ÆÊƐ¼±8´Æœ± 
½ ϗO¼O8´Æ
Œ¼b†bO¼Á8†b´Æ†8¼Œ8‰b±O8Œ8´ÆbŒÆOÁ†¼Á±8ÆÊƜYb±¡
16
Algunos de los colaboradores de los dos volúmenes anteriores, como Nelly Richard,
permanecieron, y otros nombres se incorporaron.
17
Mato, œ¡O¼¡Vœ¡À½¡8œ±b´bŒO8Vœ±b„b‰œ†VYbb±tb5ÂYObVOŒb†8±¼€OÁ†
“Contrapunteo estadounidense/latinoamericano de los estudios culturales”, es inte-
resante para entender la preocupación de Daniel Mato por avanzar en la discusión del
tema.

22 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

Lo que resalta de este volumen es el considerable número de tex-

tos que abordan las trayectorias y debates intelectuales de autores como
8±O€8
8ŒO†ŒV8±¼€Œ~ 8±Fb±Vό€F8†)Á„8ŒÊb´Â´8±O€8¡´O8œ€-
tulos incluso revisan los aportes intelectuales del propio Mato al campo
Ybb´¼ÁY¡+FbŒb†8Á¼±±bOŒOb¦Áb´Á´8Œ¼†t€8´´Œ´b´t8Y8´Ê
Œ±bœ±b´bŒ¼8¼Ç8´VbŒOÁ8Œ¼88Á¼±b´Ê¼b‰8´´b±bob±bVb´Œ¼8F†b†8
visibilidad de un grupo de investigadores consolidados como referentes,
sujetos a revisión y relecturas.
Hay que reconocer que, a pesar de los buenos propósitos del com-
pilador, la presencia de autores que escriben no sólo sobre, sino desde
‰Ç‰bŒ¼´O‰b†ŒY€tbŒ8VO|O8ŒVnb‰Œ´¼8V¼b8¼±8†ÊYbYb±bO|´
humanos —esas “otras prácticas intelectuales”— continuó siendo mode-
±8Y8¡φœ8±bOb±V†8„Á´¼oO8O‘ŒYb8¼œ8±8b´¼b|bO|b´¼8±€8bŒ†8´Yo-
cultades que la militancia siempre ha tenido para poder teorizar sobre su
práctica y en la disociación del intelectual con la sociedad, como resultado
de la modernización neoliberal e institucionalización de las universidades
en América Latina.18 Œ¼8†OŒ¼bɼV8¼Œ´´¼±€8bŒÁŒ8Œ¼b±ÇbŒO‘Œ
c¼O~œ†€¼O8Yb†Œ¼b†bO¼Á8†Ê8O8Yc‰ObŒÁŒOŒ¼bɼ¦ÁbÇb€8b†´Á±t-
miento de nuevos movimientos sociales con sus respectivas apuestas de
¼±8Œ´n±‰8O‘ŒOÁ†¼Á±8†Êœ†€¼O8¡19

LA VERTIENTE DE PITTSBURGH: ARTE Y LITERATURA

Œb†8ŽÀÎÎÎV8Fb†±8Ž8O±YŒ‘†88Œ¼†t€8ÁbÇ8´œb±´œbO¼Ç8´
Yb´Yb¹´F±bωc±O88¼Œ8Ub†Yb´8n€Yb†´b´¼ÁY´OÁ†¼Á±8†b´. El volu-
men se compone de las discusiones vertidas en el Simposio Internacional

 FY¡, p. 2.
18

 FY¡, pp. 15-49.

19

64 (México 2017/1): 13-37 23

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

de la Universidad de Pittsburgh ocurrido en 1998,20 en el que, según Mo-

raña, se reunieron
investigadores y estudiosos de la cultura latinoamericana para una re-
qbÉ‘ŒO†bO¼Ç8bŒ¼±Œ8‰ÁO|´Yb†´¼b‰8´KhL¦Áb´b±bob±bŒ8
†8´±b†8OŒb´bŒ¼±bt†F8†Y8YʱbtŒ8†Í8O‘ŒV±bYboŒO‘ŒYb†8b´nb±8
pública y del lugar del intelectual en los procesos de institucionalización
y recentralización cultural, multiculturalismo y ubicación de los “saberes
locales” con respecto a los modelos de conocimiento gestados en espacios
“centrales”, regionales o internacionales.21

A decir de la autora, en este volumen se plasmaron “los aportes más

representativos de los Estudios Culturales producidos en la actualidad
desde/sobre América Latina”.22

‰ †€Œb8 Y´¼Œ¼Ç8 bŒ ±b†8O‘Œ OŒ †8´ 8Œ¼†t€8´ 8Œ¼b±±b´V À
de los 36 ensayos incluidos provienen de autores formados en el área de
†bŒtÁ8´Ê†¼b±8¼Á±8¡ ´ŒbOb´8±F´b±Ç8±¦ÁbÀp8±¼€OÁ†´œb±¼bŒbObŒ8
autores latinoamericanos adscritos a universidades estadounidenses, cin-
O88Á¼±b´8Y´O±¼´8Œ´¼¼ÁOŒb´bÁ±œb8´Ê´‘†ŒÁbÇb´ŒYb8Á¼±€8
de intelectuales pertenecientes a universidades latinoamericanas. Entre
b´¼´†¼‰´8œ8±bObŒ†´±bnb±bŒ¼b´b´Â´8±¼€Œ 8±Fb±Vc´¼±8±O€8

8ŒO†ŒV*bŒ8¼ ±¼ÍVb††Ê*O|8±YÊ b8¼±Í+8±†¡23

20
El simposio fue patrocinado por el Departament of Hispanic Language and Literatu-
res, el Roggiando Fund, el Center for Latin American Studies, el University Center for
Œ¼b±Œ8¼Œ8†+¼ÁYb´Vb† ±8͆8Œ+¼ÁYb´(±t±8‰Êb†(±t±8‰n±
Á†¼Á±8†+¼ÁYb´V
todos de la Universidad de Pittsburgh. No obstante, la publicación resultante fue edi-
tada por el Instituto Internacional de Literatura Iberoamericana, impresa en Chile,
con textos en español y uno en portugués.
21
Mabel Moraña [ed.], “Introducción”, en ÁbÇ8´œb±´œbO¼Ç8´Yb´Yb¹´F±bωc±O8
8¼Œ8Ub†Yb´8n€Yb†´b´¼ÁY´OÁ†¼Á±8†b´, Pittsburgh, Instituto Internacional de
Literatura Iberoamericana /Universidad de Pittsburgh, 2002, p. 11.
22
 O¡O¼¡
23
En este grupo están también el uruguayo Hugo Achúgar, de la Universidad de la Re-
pública, el argentino Raúl Antelo, catedrático de la Universidad Federal de Santa Cata-
rina, en Florianópolis, Ricardo Kaliman, de la Universidad de Tucumán, y José Teixeira
Coelho, de la Universidad de São Paulo.

24 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

En su introducción, Mabel Moraña muestra la preocupación, cercana

8†8Yb8¼VYb¼±8b±8†8‰b´8b††Át8±Yb†œ†€¼OÊ†Yb†‘tObŒ†8´
discusiones de los
Á†¼Á±8†+¼ÁYb´¦ÁbVOŒ´Yb±8V´b|8F€8ŒOŒ´¼¼ÁY
como bloque de poder teórico, interpretativo y representacional.24 En ese
OŒ¼bɼVÊbŒOŒ´Œ8ŒO8OŒ†88Œ¼†t€8Y±tY8œ±
8´¼±~‘‰bÍÊ
bŒYb¼8V†bœ8±bO€8ŒbOb´8±Y´OÁ¼±b††Át8±Ybωc±O88¼Œ8ʱbn±-
mular el latinoamericanismo internacional en busca de una independen-
cia epistemológica.
Situándose en el marco de los debates sobre la modernidad, Mora-
ña reconoce los peligros que entraña la visión de los
Á†¼Á±8†+¼ÁYb´ al
tratar a América Latina como otredad excluyente, pero también señala el
uso culturalista de los discursos antihegemónicos que, mediante análisis
8ÁŒŒÇb†‰O±Vœ±b¼bŒYbŒYb¼bŒ¼8±b†Á´†bt€¼‰Yb†8bœ´¼b‰†t€8
del subalterno. Por ello, si bien hay una intención reivindicativa de las pro-
puestas teórico-epistemológicas latinoamericanas respecto a los discur-
sos centrales, también hay un reconocimiento de los Estudios Culturales
como campo y de su contribución “a liberarnos de pesados esquemas que
´ŒŒ´ÁoObŒ¼b´œ8±8bɜ†O8±|ÊY€8b†O‰œ†b„¼±8´btYbœ±F†b‰8´
y niveles del análisis cultural”.25
Este reconocimiento marca un rasgo distintivo de la reticente postu-
ra de Daniel Mato a adoptar el nombre de ECL como campo de estudio. De
‰8Œb±8OŒ´bOÁbŒ¼bV†8‰¼8YYb†8´´bOOŒb´Yb†88Œ¼†t€8b´¼9Œ8F-
O8Y8´8†8±bqbÉ‘Œ´F±b†´b´¼ÁY´OÁ†¼Á±8†b´Vb†OÁ†¼Á±8†´‰V†8O±€¼O8
y el papel de los intelectuales latinoamericanos. Se coloca en primer plano
b††Át8±Yb†œ†€¼O~Yb†‘tOYb´YbÁŒ8œb±´œbO¼Ç8œ±‰±Y8†‰bŒ¼b
†¼b±8±8¡´œO´8œ±¼b´¦Áb´b±b8†Í8ŒYb´Yb†88Œ¼±œ†t€8V†8o†´-
n€8ʆ8´O†t€8´b±9Œb†‰8±OŒ¼±YÁO¼±´F±b†8´‰œ†O8OŒb´Yb
†8t†F8†Í8O‘ŒbŒ†8‰Á†¼OÁ†¼Á±8†Y8YV8O8±tYb8±¼€Œ~ 8±Fb±V8±O€8
Canclini y Ortiz.
Los demás bloques temáticos abordan discusiones sobre la memoria
ʆ8¼b±±¼±8†Y8YVn±Œ¼b±8´VOÁY8Y8Œ€8ÊtcŒb±V8´€O‰†8n±‰Á†8-

24
Moraña, œ¡O¼¡, p. 12.
 FY¡, p. 14.
25

64 (México 2017/1): 13-37 25

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

O‘ŒYbœ†€¼O8´OÁ†¼Á±8†b´bŒ†8b´nb±8œÂF†O8¡8†¼‰8´bOO‘ŒŒO†Á-
ye debates sobre movimientos sociales, subjetividades y saberes locales.
+Œb‰F8±tV8Ynb±bŒO8Yb†8´8Œ¼†t€8´O±YŒ8Y8´œ±8¼Vb´¼8´
±bqbɐŒb´V 8 O8±t Yb 8Á¼±b´ †8¼Œ8‰b±O8Œ´ Yb ÁŒÇb±´Y8Yb´ b´¼8-
dounidenses en el campo literario, se harán exclusivamente ´F±b dichos
movimientos y no desde los mismos.
-Œ8±8Yt±8n€8´ÁOŒ¼8Yb†¼bɼŒ¼±YÁO¼±Ê†8b´¼±ÁO¼Á±8Yb††-
bro revela que, a pesar de que los autores provienen de universidades es-
tadounidenses, hay una lucha interna por el reconocimiento de temáticas
y autores excluidos del debate de los Estudios Culturales en la academia
anglosajona. La impronta ideológica neoliberal que se instala en el quehacer
académico toca también a esta porción de académicos e intelectuales y por
b††±8Ž8œ±b¼bŒYb¦ÁbVOŒb´¼88Œ¼†t€8V¼±´¼b‰8´ÊǐOb´œÁbY8Œ
abrirse camino en los circuitos internacionales de producción de conoci-
miento. Aunque reconoce que los debates no se agotan en dichos textos,
¦ÁbOŒotÁ±8Œ8œbŒ8´8œ±É‰8OŒb´V†88Á¼±8´€8´œ±88¦Ább††F±´b
vuelva un referente alterno a unos estudios culturales que, considera, han
tratado a la cultura latinoamericana de manera reducida y estereotipada.26
Como continuidad a este trabajo, Moraña editó junto con Hermann
Herlinghaus el volumen ±Œ¼b±8´Yb†8Yb±ŒY8YbŒωc±O88¼Œ8¡
La publicación del año 2003 derivó del Tercer Congreso Internacional de
Estudios Culturales Latinoamericanos acontecido en la Universidad de Pi-
ttsburgh, en marzo de 2002. El eje articulador de este trabajo fue discutir
el lugar de los ECL en la modernidad. En un contexto marcado tanto por
8´‰b¼±€8´|´¼‘±O8´O‰œ±ŒÁbǐ´nbŒ‘‰bŒ´OÁ†¼Á±8†b´V†´8Á¼±b´
Çb±Œ†8ŒbOb´Y8YYb8F±Y8±†8´n±‰8´bŒ¦Áb´bœbŒ´8F8Ê|8O€8†
moderno en América Latina.27
8Y´OÁ´‘Œ´bœb±OFbnÁb±¼b‰bŒ¼bŒqÁY8œ±†´YbF8¼b´œ´O†-
Œ8†b´¦Áb´tŒoO8F8Œœ8±88‰F´«ÁŒ8±8YO8†±bn±‰Á†8O‘ŒYb†´œ±-

26
 FY¡, p. 15.
27
Mabel Moraña y Hermann Herlinghaus [eds.], “Introducción”, en ±Œ¼b±8´ Yb †8
‰Yb±ŒY8Y bŒ ωc±O8 8¼Œ8V Pittsburgh, Instituto Internacional de Literatura
Iberoamericana/University of Pittsburgh, 2003, pp. 11-20.

26 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

blemas de nacionalidad, transnacionalidad, multiculturalismo y globaliza-

ción”.28 Sin embargo, lo poscolonial no se asume como un adecuado piso
epistemológico, sino que apunta hacia la necesidad de un pensamiento
descolonizador desde las ciencias sociales “de los márgenes”, capaz de
dar cuenta de una “hermenéutica de la heterogeneidad” propia de los
descentramientos y tensiones post-1989.29
Ï Ynb±bŒO8 Yb †8 8Œ¼†t€8 8Œ¼b±±V b´¼b †F± ´b bŒOÁbŒ¼±8 ‰9´
YÇb±´oO8Y bŒ OÁ8Œ¼ 8† ±tbŒ Y´Oœ†Œ8± Yb †´ 8Á¼±b´V 8´€ O‰
‰9´œ8±b„bŒ†¦Áb´b±bob±b8´Á´8Y´O±œOŒb´8O8Yc‰O8´¡b†´À½
ensayos, diez provienen de América Latina, mientras diez vienen de Esta-
dos Unidos. Europa sigue minoritaria, con tres contribuciones.30 De nue-
Ç8OÁbŒ¼8Vb´Â´8±¼€Œ~ 8±Fb±´Á±tbO‰±bnb±bŒ¼bœ8±8O‰œ±bŒYb±
las transformaciones en las dinámicas culturales y comunicacionales en
la modernidad. Aunque Moraña y Herlinghaus ven como central el papel
de la comunicación en el debate sobre la identidad y la cultura misma, llama
†8 8¼bŒO‘Œ ¦Áb †´ 8Œ9†´´ Yb´Yb †8 O‰ÁŒO†t€8 Œ ¼bŒbŒ ÁŒ †Át8±
œ±bY‰Œ8Œ¼b bŒ b´¼b †F±V O‰ ¼8‰œO † ¼bŒbŒ bŒ †8´ 8Œ¼†t€8´
previamente analizadas.
De esta manera, el trabajo se centra en la discusión sobre las fronte-
ras y territorios en el marco de la globalización y transnacionalización, la
OŒotÁ±8O‘ŒYbŒÁbǐ´ÊÇb„´b´œ8O´´‰F‘†O´bYbŒ¼¼8±´V†8´Œ-
teracciones y zonas de contacto existentes entre numerosos conjuntos so-
OOÁ†¼Á±8†b´V†8´±bYboŒOŒb´´F±b†‰Yb±ŒbŒb†ŒÁbǐb´ObŒ8±

28
 FY¡Vp. 13.
29
No obstante el distanciamiento, en el libro participan Santiago Castro-Gómez y Enri-
¦ÁbÁ´´b†OŒ±bqbɐŒb´o†´‘oO8´YbO†Œ8†b´8Ob±O8Yb†8´YŒ9‰O8´¼±8Œ´n±Œ-
terizas en el ámbito universitario e identitario, respectivamente.
30
 φtÁŒ´Yb†´O†8F±8Y±b´Yb†88Œ¼†t€88Œ¼b±±ÇÁb†ÇbŒ88œ8±bOb±¡Ï´‰´‰V
bŒ¼±b †´ 8Á¼±b´ Yb b´¼8 8Œ¼†t€8 8Y´O±¼´ 8 ÁŒÇb±´Y8Yb´ †8¼Œ8‰b±O8Œ8´V ´b
bŒOÁbŒ¼±8Œ Œ±¦ÁbÁ´´b†V †€Ç8± O|bÇb±±€8V ±Œb´¼8O†8ÁÊ
8±†´(b±bY8V†´
OÁ8¼±YbYO8Y´8†8o†´n€8V8††8YYb†b´œbO8†´¼8bŒ ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´´c8-
nuel Valenzuela, del historiador de las ideas Nicolás Casullo y del escritor y ensayista
Carlos Monsiváis. Entre los radicados en universidades estadounidenses, destacan el
|´¼±8Y±,Á†8†œb±Œ~Œt|ʆ8b´O±¼±8ÊO±€¼O8+ʆÇ8††Ê¡

64 (México 2017/1): 13-37 27

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

t†F8†Ê†´Yb´8n€´Yb†‰Á†¼OÁ†¼Á±8†´‰bŒωc±O88¼Œ8¡31 La anterior
±bqbÉ‘Œ´F±bb†O8±9O¼b±Yb†´ ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´V†8O±€¼O8†¼b±8±8Ê
los movimientos sociales se ve sustituida por un abordaje teórico diverso
que analiza lo nacional, el género, la interculturalidad, lo posmoderno, lo
¼±8Œ´‰Yb±ŒV†8´YbŒ¼Y8Yb´ÊVYb‰8Œb±8b´OÁb¼8V†8´œ†€¼O8´OÁ†¼Á±8-
les, la violencia y la democracia.
El resultado de esta composición heterogénea de enfoques y temáti-
cas hace que los editores vean en este libro otro aporte imprescindible del
œbŒ´8‰bŒ¼O±€¼ObŒb†O8‰œYb†´ECL. Esta vez, son más entusiastas
respecto al alcance de dichos textos, pues ven en ellos
[…] propuestas que desarticulan los imaginarios teóricos disciplinarios y
|8´¼8´Á´œ±œ8´F8´b´bœ´¼b‰†‘tO8´V±bÇŒYO8ŒY†8b´œbOoOY8YYb
la experiencia latinoamericana al tiempo que logran articularla a contextos
mayores, sin fáciles abstracciones ni universalismos casuales, sino desde
†8´F8´b´bɜb±‰bŒ¼8†b´YbÁŒœbŒ´8‰bŒ¼O±€¼O±bFb†YbbŒ¦Á´¼ǐ¡32

¿QUÉ OCURRIÓ DESPUÉS DE 2004?

A partir de 2004, la notoriedad gozada por los ECL y la discusión sobre
´Á´O8±8O¼b±€´¼O8´ÊÇ8†YbÍV´Á†Át8±bŒb†b´œ8OYbœ±YÁOO‘Œ¼b‘±-
ca en América Latina, fueron disminuyendo. Por una parte, sucedieron
importantes relevos en algunos de los nombres de quienes organizaban
la discusión y, por otra, empezaron a ocurrir transformaciones discursi-
vas y usos conceptuales diferenciados. Una breve revisión de lo que se
produjo posteriormente muestra la relevancia que adquirió el discurso
YbO†Œ8†Ê†8œ±‰8O€8Yb¼±´¼Œb±8±´Œ¼b†bO¼Á8†b´V±b†8¼ǐ´8†´
nuevos movimientos sociales, las migraciones, los estudios sobre juven-
tud, entre otros. Ello da muestra de transformaciones en los espacios y
modos de producción de conocimiento desde y ´F±b América Latina, a su
vez indicativos de un trabajo interinstitucional latinoamericano en diálogo

31
Moraña y Herlinghaus, œ¡O¼., p. 17.
32
FY., p. 20.

28 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

con la producción académica global, que parece agotar ciertos temas y

hegemonizar otros.
Después de ,b±€8´´ŒY´Oœ†Œ8¡¡¡, Santiago Castro-Gómez —quien
8œ8±bObbŒ†8´8Œ¼†t€8´‰bŒOŒ8Y8´bÉObœ¼8¦Áb††8´O±YŒ8Y8´œ±
8Œb†8¼i´bOŒo±‰8±€8O‰ÁŒ±bnb±bŒ¼bYb†±ÁœYb±ŒY8Y¹
colonialidad, colocando al Instituto de Estudios Sociales y Culturales (Pen-
´8±ŸYb†8-ŒÇb±´Y8Y8Çb±8Œ8Yb
†‰F8O‰ÁŒn±ÁO¼€nb±ObŒ¼±
de producción teórica sobre los estudios poscoloniales. Esto lo llevó a
publicar, en 2007, junto con Ramón Grosfoguel, el libro titulado †t±Yb-
O†Œ8†U±bqbɐŒb´œ8±8ÁŒ8YÇb±´Y8Ybœ´¼c‰O8‰9´8††9Yb†O8œ-
¼8†´‰t†F8†.33 Posteriormente, en 2010, colaboró en un trabajo editado
œ±†b8Œ8*Y±€tÁbÍʐ´bFb8±¼€Œbͼ¼Á†8Y ´¼ÁY´¼±8Œ´8¼†9Œ¼O´
œ´¼O†Œ8†b´UŒ8±±8¼Ç8´O‰8ŒY~´´¼b‰8‰ÁŒY.34
Para Clacso, la producción teórica posterior también sufrió cambios
interesantes que —sólo en parte— pueden ser explicados por las propias
trayectorias que los investigadores eligieron. Pese a la importancia que
¼Áǐ´Á8Œ¼†t€88O†Œ8†Y8YYb†´8Fb±¡¡¡, Edgardo Lander ya no vol-
Çb±€88nÁŒt±O‰bY¼±¡
‰8Á¼±Vœ8±¼Oœ‘bŒ†88Œ¼†t€8btb‰-
Œ€8´Êb‰8ŒOœ8OŒb´bŒb†´t† XXI, coordinado por la mexicana Ana
Esther Ceceña en 2004.35 El sociólogo venezolano pasó a concentrar su
actividad académica en el ¼|Œ…¼8Œ… Transnational Institute (TNI), y siguió
fungiendo como un intelectual de peso en los movimientos sociales ve-
nezolanos y en las articulaciones contrahegemónicas en un nivel regional
como el Foro Social Mundial.
Por su parte, el Grupo de Trabajo Cultura y Poder, que hasta el año
ÀÎÎÀ|8F€8´YO±YŒ8Yœ±8Œb†8¼V±b¼‰‘´Á´8O¼ÇY8Yb´F8„
33
Santiago Castro-Gómez y Ramón Grosfoguel [eds.]V †t±YbO†Œ8†U±bqbɐŒb´
œ8±8ÁŒ8YÇb±´Y8Ybœ´¼c‰O8‰9´8††9Yb†O8œ¼8†´‰t†F8†V t¼9V-ŒÇb±´-
dad Central/IESCO¹(Œ¼oO8-ŒÇb±´Y8Y8Çb±8Œ8VŒ´¼¼Á¼(bŒ´8±¹+t†Yb†‰-
bre Editor, 2007.
34
 †b8Œ8*Y±€tÁbÍʐ´bFb8±¼€ŒbÍKbY´¡LV ´¼ÁY´¼±8Œ´8¼†9Œ¼O´œ´¼O†Œ8†b´U
Œ8±±8¼Ç8´O‰8ŒY~´´¼b‰8‰ÁŒYVMéxico, Anthropos/UAM-Iztapalapa, 2010.
35
Ana Esther Ceceña [comp.], btb‰Œ€8´Êb‰8ŒOœ8OŒb´bŒb†´t† XXIV ÁbŒ´
Aires, Clacso, 2004. En http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/gt/20101018121053/ce-
cena2.pdf.

64 (México 2017/1): 13-37 29

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

la conducción del argentino Alejandro Grimson. De su cuarta reunión, en

2003, surgió el libro 8OÁ†¼Á±8bŒ†8´O±´´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´,36 donde
8Œ´bœb±OFbÁŒ8‰œ±Œ¼8Yb†´¼b‰8´YbY´OÁ´‘Œ¦Áb8¼8Ž€8Œ88-
Œb† 8¼V 8´€ O‰ Yb †´ 8Á¼±b´ ±bnb±bŒO8†b´ ž b´Â´ 8±¼€Œ~ 8±Fb±V
Á´¼8ǐ Œ´ *Fb±V †Í8Fb¼| b†Œ Ê c´¼± 8±O€8
8ŒO†ŒŸ¡ +Œ b‰-
F8±tV †8 œÁF†O8O‘ŒYbO8Œ¼8±€8bŒb†8F±Y8„bYb†8´¼±8Œ´n±‰8OŒb´
bŒ†´‰8tŒ8±´Œ8OŒ8†b´ÊO‰ÁŒ¼8±´V8´€O‰Yb†8´YbŒ¼Y8Yb´
c¼ŒO8´ Ê œ†€¼O8´ 8Œ¼b †8´ O±´´ Yb †´ b´¼8Y´ †8¼Œ8‰b±O8Œ´¡ Œ †8
introducción, Grimson hace una interesante retrospectiva de la dinámica
8Yœ¼8Y8bŒ†8´±bÁŒŒb´Yb¼±8F8„Êœ±b´bŒ¼8ÁŒ8‰œ±¼8Œ¼b±bqbÉ‘Œ
sobre los dos ejes en los que se organizó el volumen: la presencia de “lo
Œ8OŒ8†¬bŒb†8Œ9†´´OÁ†¼Á±8†Ê†8‰Â†¼œ†bYboŒO‘ŒYb«O±´´¬¡37 El libro
¼±8b8†tÁŒ´b´¼ÁY´YbO8´žb´œbO€oO8‰bŒ¼b´F±b2bŒbÍÁb†8V OÁ8Y±V
ϱtbŒ¼Œ8V
†‰F8V(b±ÂÊ ±8´†ŸÊ8†tÁŒ´¼±8F8„´YbO8±9O¼b±¼b‘±O¡
Respeta la diversidad regional del continente, pues considera a autores de
Ç8±´œ8€´b´ÊœÁF†O88±¼€OÁ†´bŒb´œ8Ž†Êœ±¼ÁtÁc´¡
±‰´Œǐ†Çb±€88O±YŒ8±†8¦ÁŒ¼8±bÁŒ‘ŒYb†t±ÁœbŒ(±¼
Alegre, en 2004. Sin embargo, no será él sino Mato quien, en 2005, reeditará
À—Yb†´bŒ´8ʐ´ŒO†ÁY´bŒ†8´œ8´8Y8´8Œ¼†t€8´bŒb††F±
Á†¼Á±8V
œ†€¼O8Ê´ObY8Y¡(b±´œbO¼Ç8´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´.38 La publicación pue-
de considerarse la despedida de Mato como organizador del campo, coin-
OYbŒ¼bOŒb†oŒYb´ÁOO†bŒ†8-ŒÇb±´Y8Y
bŒ¼±8†Yb2bŒbÍÁb†8žUCV).
ŒÁŒ8Ft±8n€8Œ¼b†bO¼Á8†Yb8Œb†8¼Vφb„8ŒY±8†YŒ8Y±b-
lata que, tras haber impulsado por 18 años el Programa de Estudios sobre
Globalización, Cultura y Transformaciones Sociales en el Centro de Inves-
tigaciones Posdoctorales de la Facultad de Ciencias Económicas de la UCV,
el programa no enraizó en la institución como el académico argentino

36
Alejandro Grimson [comp.], 8OÁ†¼Á±8bŒ†8´O±´´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´V ÁbŒ´Ï±b´V
Clacso, 2004, pp. 7-15. En http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/gt/20100918083912/
grimson.pdf.
37
Alejandro Grimson, “Introducción”, en FY¡Vpp. 7-15.
38
Daniel Mato [coord.],
Á†¼Á±8Vœ†€¼O8Ê´ObY8Y¡(b±´œbO¼Ç8´†8¼Œ8‰b±O8Œ8´,
ÁbŒ´ ϱb´V
†8O´V ÀÎÎp¡ Œ |¼¼œU¹¹ÈÈÈ¡OÁ†¼Á±8±bO±b8OŒÊYbœ±¼b¡tÇ¡O¹´¼b´¹
Ybn8Á†¼¹o†b´¹OÁ†¼Á±8Ɯ†¼O8ÆÊÆ´ObY8Y¡Æœb±´œbO¼Ç8´Æ†8¼Œ~8‰b±O8Œ8´¡œYn¡

30 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

|ÁFb±8¦Áb±YV8´€O‰¼8‰œOœ±†nb±‘b†±bOŒO‰bŒ¼Œ¼b†bO-
tual que él deseaba.39 De esta forma, Mato acabó por jubilarse de la UCV en
2002 y, a partir de 2005, pasó a desempeñarse como asesor académico del
IESALC-UNESCOVœ8±8ǐ†Çb±oŒ8†‰bŒ¼b8´ÁŒ8¼8†ϱtbŒ¼Œ8bŒÀΗΡÏœ8±¼±
de entonces, su producción intelectual se concentró en el estudio de los
¼|Œ…¼8Œ…´ y la comunicación intercultural.
Las consecuencias de la ausencia de Mato en Clacso fueron patentes.
Entre 2005 y 2008 el Grupo de Trabajo sobre Cultura y Poder no se reunió.
ϜbŒ8´ bŒ ÀÎηV ±‰´Œ O‰œ†8±€8 b† †F±
Á†¼Á±8 Ê Œb†Fb±8†´‰,
en el que Mato participó como autor, junto con Pablo Semán entre otros
Œ‰F±b´¦ÁbŒb´¼ÁÇb±Œœ±b´bŒ¼b´bŒ†8´8Œ¼†t€8´8Œ¼b±±b´¡40 Semán
O±YŒ8±€8b†±ÁœYb,±8F8„bŒ´Á±b8œ8±O‘ŒbŒÀÎ΍¡+Œb‰F8±tV
8ÁŒ¦Ább†t±Áœ|8F€8OŒ´b±Ç8Yb†‰´‰Œ‰F±bVbŒ†´±bt´¼±´Yb
Clacso la reunión de 2009 apareció como “primera”. Es de resaltar que ni
Ybb´¼8±bÁŒ‘ŒVŒYb†8¦Áb´b±b8†͑bŒÀΗδbœÁF†O8±Œ8Œ¼†t€8´¡
ŒÀΗÎVb††Ê*O|8±YiotÁ±8ObŒ¼±8†¦ÁbbŒOŒ¼±8‰´bŒ†8´8Œ-
¼†t€8´O±YŒ8Y8´œ±8¼i†8ŒÍ8±€8b††F± Œ¼±Œ8†´b´¼ÁY´
OÁ†¼Á±8†b´¡O8†Y8Yb´V¼±8ÊbO¼±8´ÊY´œÁ¼8´¡41 La publicación fue re-
´Á†¼8YYb†8œ±‰b±8±bÁŒ‘ŒYb†8*bYYb ´¼ÁY´Ê(†€¼O8´
Á†¼Á±8†b´V
dirigida por Alejandro Grimson y creada por iniciativa del Centro de Altos
Estudios Universitarios de la Organización de Estados Iberoamericanos
ÊYb
†8O´V¦Áb´b±b8†͑bŒ ÁbŒ´Ï±b´bŒ8F±†YbÀÎ΍¡ †ǐ†Á‰bŒ
n±bOb8†´†bO¼±b´ÁŒ8±bqbÉ‘Œ´F±bb†O8±9O¼b±Yb†´ECLVOŒ†8´otÁ-
ras que su editora considera primordiales en el debate. No sorprende, evi-
YbŒ¼b‰bŒ¼bV†8œ±b´bŒO8Ybb´Â´8±¼€Œ~ 8±Fb±Êc´¼±8±O€8
8ŒO†-
ni como fuentes del trazado genealógico del campo. También reaparecen
autores como Alejandro Grimson, Catherine Walsh y Eduardo Restrepo,
para entonces nombres reconocidos en lo que a Estudios Culturales se

39
Alejandro Maldonado, “Daniel Mato: una vida de interculturalidad”, en *bÇ´¼8‘‰8-
Y8´VŒÂ‰¡½sV t¼9V-ŒÇb±´Y8Y
bŒ¼±8†
†‰F8VÀΗ—¡
40
Alejandro Grimson [comp.],
Á†¼Á±8ÊŒb†Fb±8†´‰, ÁbŒ´Ï±b´V
†8O´VÀÎη¡
41
Nelly Richard [ed.], Œ¼±Œ8†´b´¼ÁY´OÁ†¼Á±8†b´U†O8†Y8Yb´V¼±8ÊbO¼±8´Ê
Y´œÁ¼8´, Santiago de Chile, Universidad ARCIS, 2010.

64 (México 2017/1): 13-37 31

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

±bob±b¡42 Richard anuncia en la Introducción a la obra que a los autores

†b´|8F€8œ8±bOY
KhLÇ8†´8±¼OÁ†8±ÁŒOŒ„ÁŒ¼Yb±bqbɐŒb´b†8F±8Y8´œ±ŒOœ8†‰bŒ-
te desde América Latina por quienes se dedican a la práctica académica
Yb †´ ´¼ÁY´
Á†¼Á±8†b´ bŒ Y´¼Œ¼8´ †8¼¼ÁYb´ tbt±9oO8´ Ê OŒ¼bɼ´
universitarios (Argentina, Colombia, Chile, Ecuador, México, Perú, Puerto
*OŸVœ8±8OŒ¼±FÁ±8´€8O±±bt±Ob±¼8´8´‰b¼±€8´Yb†8œ±YÁOO‘ŒbY-
torial del mercado académico internacional que suele privilegiar los nom-
bres y textos “en inglés”.43

El tema del dominio del conocimiento producido por los centros he-
gemónicos —y su paradigmática difusión en inglés— se mantuvo como un
eje aglutinador de esfuerzos para iniciativas como la de la Red de Estudios
Ê(†€¼O8´
Á†¼Á±8†b´V¦Áb´btÁ±€8±bÁŒcŒY´b|8´¼8ÀΗs¡ ŒOÁ8Œ¼8†
Grupo de Trabajo Cultura y Poder, hay que observar que volvió a desapa-
recer durante dos años, momento en que se consolidaron otros grupos
de trabajo sobre temas como género, migración, movimientos sociales,
juventud y cambio climático, entre otros. Ello da cuenta de desplazamien-
tos teórico-conceptuales que parecen disminuir sensiblemente el interés
por el tema de los Estudios Culturales.
No obstante, en 2013 el grupo vuelve a la escena, esta vez con una
±bÁŒ‘ŒbŒ t¼9¦ÁbV8ÁŒ¦ÁbŒ¼±8´ObŒYbbŒÁŒ8œÁF†O8O‘ŒVŒYO8
ÁŒO8‰F´tŒoO8¼ǐbŒb†b´œ8OYbbŒÁŒO8O‘ŒYb†8Y´OÁ´‘Œt±Á-
pal.44 En 2015, la coordinación del grupo se trasladará al Instituto Pensar
42

8¼|b±Œb38†´|V¦ÁbŒ|8F€8œ8±¼Oœ8YbŒb†±ÁœYb,±8F8„OŒ8Œb†8¼V
O±YŒ‘ †8 8Œ¼†t€8 ´¼ÁY´ OÁ†¼Á±8†b´ †8¼Œ8‰b±O8Œ´U ±b¼´ Yb´Yb Ê ´F±b
†8±bt‘Œ8ŒYŒ8V)Á¼V-ŒÇb±´Y8YόYŒ8+‰‘Œ †€Ç8±¹ÏFÊ8~58†8VÀÎν¡ Œb†
8œ8±¼8Y« ´¼ÁY´OÁ†¼Á±8†b´†8¼Œ8‰b±O8Œ´Uœb±´œbO¼Ç8´O±€¼O8´¬8œ8±bObŒ´‘†
¼±b´¼bɼ´V´tŒoO8¼Ç8‰bŒ¼bVYb8Á¼±€8Yb8¼VtŒ†Ê
8´¼±~‘‰bÍ¡ Œb†
8œ8±¼8Y«žb´ŸYbŒ¼oO8OŒb´Y´Oœ†Œ8±8´Ê†ÁO|8´Yb†OŒŒ‰bŒ¼¬8œ8±bObÁŒ
8±¼€OÁ†Yb±8Ž8V±bY8O¼8YYb´Ybb†œÁŒ¼YbÇ´¼8Yb†8n±‰8O‘ŒY´Oœ†Œ8±8Yb
la autora, titulado “Literatura, subjetividad y estudios culturales”.
43
Richard, œ¡O¼., p. 9.
44
Aunque el trabajo no se enmarca claramente en el quehacer del Grupo de Traba-
„V±‰´ŒœÁF†O8±9VYÁ±8Œ¼bb´b‰´‰8ŽV„ÁŒ¼OŒ8±Œ8 Y8´bO8Vb††F±
btb‰Œ€8OÁ†¼Á±8†Êœ†€¼O8´Yb†8Ynb±bŒO8V ÁbŒ´Ï±b´V
†8O´VÀΗ½¡ Œb†

32 (México 2017/1): 13-37 64

 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

de la Universidad Javeriana de Colombia a cargo de Eduardo Restrepo. La

presencia del antropólogo colombiano es relevante, ya que en los últimos
cinco años ha articulado diversas discusiones sobre los Estudios Cultura-
les poniendo el acento en su carácter decolonial, lo cual le da un matiz
distinto al grupo entonces constituido por Mato.
En cuanto a Mabel Moraña, se notará también un interés por el análi-
sis poscolonial en América Latina. En este tenor, publicará en 2008, junto
con Enrique Dussel y Carlos A. Jáuregui, el libro
†Œ8†¼Ê8¼8±tbU8-
¼Œωb±O8Œ8ŒY¼|b(´¼O†Œ8†bF8¼b.45 El texto, publicado en inglés,
Y´OÁ¼b†8œb±¼ŒbŒO8Yb†8¼b±€8œ´O†Œ8†bŒ†8±b8†Y8Y†8¼Œ8‰b±-
cana y la occidentalización. Para ello, cuenta con la participación de nues-
tros viejos conocidos Santiago Castro-Gómez, Fernando Coronil, Walter
tŒ†V YÁ8±YbŒYb¼8Vό€F8†)Á„8ŒÊ
8¼|b±Œb38†´|V8Yb‰9´Yb
otros autores consagrados como Mary Louise Pratt, Peter Hume y Román
de la Campa. Posteriormente, sus publicaciones muestran cierta continui-
dad de los temas previamente trabajados, como el papel de los intelec-
tuales latinoamericanos o la modernidad.46 Sin embargo, desaparece la
±bqbÉ‘Œ´F±bb†O8±9O¼b±Yb†´ECLV¼8Œœ±b´bŒ¼bbŒ†8œ±‰b±88Œ¼†t€8
que Moraña elaboró.47
Cabe mencionar que, en 2005, después de diez años de trabajar en
la Universidad de Pittsburgh, espacio de gran relevancia para la gestación

libro nuevamente aparecen como colaboradores Nelly Richard y Eduardo Restrepo,

œŒbŒY8ObŒ¼bŒb†œ8œb†Yb†´b´¼8Y´Ê†8´¼bOŒ†t€8´bŒ†8ŒO†Á´‘Œ¹bÉO†Á´‘Œ
de las diferencias.
45
Mabel Moraña, Enrique Dussel y Carlos Jáuregui [eds.],
†Œ8†¼Ê8¼†8±tbU8¼Œ
ωb±O8Œ8ŒY¼|bœ´¼O†Œ8†bF8¼b, Duke University, 2008.
46
 2c8´b8Fb†±8Ž8Ê ±b¼Á´¼8n´ŒKbY´¡LV*b¼|Œ…ŒtŒ¼b††bO¼Á8†´Œ8¼Œωb-
±O8V Frankfurt am Main/Iberoamericana/Vervuert, 2010; y Mabel Moraña [ed.], (8±8
ÁŒ8 O±€¼O8 Yb †8 ‰Yb±ŒY8Y O8œ¼8†´¼8U Y‰Œ8O‘Œ Ê ±b´´¼bŒO8 bŒ †€Ç8±
O|bÇb±±€8V)Á¼V-ŒÇb±´Y8YόYŒ8+‰‘Œ †€Ç8±VÀΗs¡
47
En una entrevista realizada en 2007, Moraña critica el hecho de que los estudios cul-
¼Á±8†b´|8F€8ŒÁ¼†Í8YYb‰8´8Y¼b‰œbŒ|8F†8±Yb´€‰´‰´VOÁ8ŒY†œ±-
‰±Y8†b±8ÁŒ8Œ9†´´¦ÁbœbŒ´8±8VYb´Yb†œ†€¼OVb††Át8±Yb†Œ8OŒ8†~œœÁ†8±
en la globalización. Mabel Moraña, “Los estudios latinoamericanos en la encrucijada.
Entrevista a Mabel Moraña”, en *bÇ´¼8¼Œb±8±´V núm. 5, 2007, pp. 9-31. En http://
¼Œb±8±´¡ÁÈ¡bYÁ¡œ†¹Èœ~OŒ¼bŒ¼¹Áœ†8Y´¹ÀΗs¹—À¹Î—ÆbŒ¼±bÇ´¼8Ɛ±8Œ8¡œYn¡

64 (México 2017/1): 13-37 33

 REGINA CRESPO Y DANIELA PARRA

Yb†8´8Œ¼†t€8´8Œ8†Í8Y8´V±8Ž8´b¼±8´†8Y‘8†8-ŒÇb±´Y8YYb38´-
hington en St. Louis, donde, hasta la fecha, pasó a fungir como profesora
y directora del Departamento de Estudios Latinoamericanos. Al analizar la
cantidad e importancia de las publicaciones que Mabel Moraña ha coor-
dinado o editado, no podemos dejar de reconocer su capacidad de con-
vocatoria, su talento para dialogar con distintas vertientes intelectuales y
el papel fundamental que ha desempeñado en el debate intelectual y la
œ±YÁOO‘ŒYbOŒO‰bŒ¼Yb´YbÊ´F±bωc±O88¼Œ8¡-Œ8±bqbÉ‘Œ
‰9´´´¼b‰9¼O8´F±bb†¼bŒ±Yb†8´8Œ¼†t€8´¦ÁbO±YŒ‘8Œb´¼9
por hacerse.

UNA ÚLTIMA PALABRA

Los ires y venires en la discusión sobre la relevancia y pertinencia teórica de

los ECL han caracterizado el debate entre distintos grupos de intelectuales
latinoamericanos, que cuestionaban su lugar en los circuitos académicos in-
¼b±Œ8OŒ8†b´Ê´Áœ±YÁOO‘Œ¼b‘±O8bŒ±b†8O‘Œ8ÁŒOŒ¼bɼ´Oœ†€¼-
OYb¼b±‰Œ8Y¦Áb†´Œ¼b±œb†8F8¡ †8Œ9†´´±b8†Í8Y´F±b†8´8Œ¼†t€8´
8¦Á€œ±œÁb´¼8´V‰Áb´¼±8¦ÁbŒb´œ´F†bŒbt8±†8‰œ±¼8ŒO8Yb†«†Át8±
de enunciación” para la proyección y mantenimiento de determinadas visio-
Œb´ ¼b‘±O~bœ´¼b‰†‘tO8´¡ ´¼ b´ œ8±¼OÁ†8±‰bŒ¼b ´tŒoO8¼ǐ OÁ8ŒY
América Latina es el lugar desde y ´F±b el que se enuncia. La diferencia
entre hablar desde y hablar ´F±b representa la adopción de una postura
Œ´‘†8O8Yc‰O8V´Œ¼8‰FcŒœ†€¼O~Yb†‘tO8¡bOY±bŒ¼±b8‰F8´
opciones ha hecho que la discusión sobre los ECL se organice en grupos con
t±8Y´YbŒqÁbŒO8Ç8±8F†b´VYboŒY´œ±OŒYOŒb´‰8¼b±8†b´ž´F±b
¼YYboŒ8ŒO8‰bŒ¼ŸÊtbt±9oO8´b´œbO€oO8´¡
8´8Œ¼†t€8´|8ŒnÁŒtYO‰ÁŒb´œ8OnÁŒY8‰bŒ¼8†œ8±8bŒ¼bŒ~
der las discusiones teóricas, los interrogantes y debates —no siempre ar-
‰‘ŒO´i ¦Áb ´Á±tbŒ œ8±8 ±b´œŒYb± 8 ÁŒ Yb´8n€ bœ´¼b‰†‘tO bŒ
ÁŒ‰‰bŒ¼|´¼‘±Ob´œbO€oO¡8n±‰8bŒ†8¦Áb†8´8Œ¼†t€8´8¦Á€
mencionadas organizaron y han orientado los debates, las elecciones sobre
quiénes fueron y se han mantenido como las voces autorizadas para abordar

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 ¿ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS? REFLEXIONES A PARTIR DE ALGUNAS ANTOLOGÍAS

ciertos temas, la manera en la que se han propuesto y se siguen propo-

niendo los ejes temáticos, entre otros aspectos, dan cuenta de los distintos
modos de construcción de conocimiento por parte de las y los intelectuales
latinoamericanos que están en constante tensión con los centros hegemó-
nicos de producción de conocimiento, pero también entre ellos mismos.
En el caso de los ECLb´¼´Y´¼Œ¼´‰Y´¼8‰FcŒ±bqb„8Œ±b†8OŒb´Yb
œYb±V„b±8±¦Á€8´Ê«‰Y8´¬¼b‘±O8´¦ÁbœÁbYbŒY8†t8±FbŒœŒb±´b
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